El documento define las características de un haiku, una breve composición poética japonesa. Un haiku típicamente tiene 5-7-5 sílabas, aunque en japonés son 17 moras. También suele incluir un kigo que indica la estación del año. Muestra escenas de la naturaleza o la vida cotidiana de forma observadora. Transmite la impresión que le causó al poeta la contemplación de algo a través de un estilo sencillo y natural.
0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
58 vistas1 página
El documento define las características de un haiku, una breve composición poética japonesa. Un haiku típicamente tiene 5-7-5 sílabas, aunque en japonés son 17 moras. También suele incluir un kigo que indica la estación del año. Muestra escenas de la naturaleza o la vida cotidiana de forma observadora. Transmite la impresión que le causó al poeta la contemplación de algo a través de un estilo sencillo y natural.
El documento define las características de un haiku, una breve composición poética japonesa. Un haiku típicamente tiene 5-7-5 sílabas, aunque en japonés son 17 moras. También suele incluir un kigo que indica la estación del año. Muestra escenas de la naturaleza o la vida cotidiana de forma observadora. Transmite la impresión que le causó al poeta la contemplación de algo a través de un estilo sencillo y natural.
El documento define las características de un haiku, una breve composición poética japonesa. Un haiku típicamente tiene 5-7-5 sílabas, aunque en japonés son 17 moras. También suele incluir un kigo que indica la estación del año. Muestra escenas de la naturaleza o la vida cotidiana de forma observadora. Transmite la impresión que le causó al poeta la contemplación de algo a través de un estilo sencillo y natural.
Características que definen al HAIKU (composición poética breve):
1. Los haikus se escriben en 5-7-5 sílabas
De hecho, en japonés, los haikus se escriben en 17 moras. La mora es una unidad ligeramente más breve que la sílaba (17 moras equivaldrían a unas 14 o 15 sílabas). Que el haiku tenga en su métrica un rasgo tan distintivo ha provocado que se piense que basta con que un poema tenga 5-7-5 sílabas para que se le pueda llamar haiku. Esto es un error. El haiku, además de su brevedad, tiene otros rasgos definitorios.
2. Según la tradición, todo haiku ha de incluir un kigo
El kigo es una palabra o expresión que indica la época del año a la que se refiere un poema. Por ejemplo, la palabra "nevada" remite al invierno, ya que es en esta época cuando más nieva. La expresión "cerezos en flor", por su parte, remite a la primavera. La inclusión del kigo, en un haiku, no es obligatoria. Los haikus clásicos sí lo suelen llevar, pero perfectamente podemos escribir haikus que no incluyan ninguna referencia estacional.
3. Los haikus muestran escenas de la naturaleza o de la vida cotidiana
Por lo general, los haikus muestran escenas de la naturaleza (animales, plantas, paisajes, fenómenos meteorológicos, cambios de estación) o de la vida cotidiana, en los pueblos, en las ciudades y en los caminos. En un haiku, el "yo" queda al margen: el poeta no nos habla tanto de lo que le sucede a él como de lo que sucede enfrente de él. Se convierte así en un observador de la realidad que le rodea. En un haiku, el poeta puede referirse a sí mismo o expresar una inquietud, pero, si lo hace, lo supeditará a la escena mostrada.
4. Un haiku transmite la impresión que le ha causado al poeta la contemplación de
algo En un haiku el poeta transmite la emoción que ha sentido al contemplar algo. Es aquí donde el haiku deja de ser un texto meramente descriptivo para convertirse en poesía. La impresión la ha de transmitir, más que el poeta, la propia escena mostrada. El lector deberá ser capaz de contemplar lo mismo que ha contemplado el poeta y, con ello, sentir la misma emoción que ha sentido él. No podrá ser considerado haiku, por tanto, un texto que se limite a ser humorístico o ingenioso, por más que tenga 5-7-5 sílabas y kigo y muestre una escena, como tampoco lo podrá ser uno en el que el autor simplemente exprese un pensamiento u opinión.
5. Los haikus se escriben con un estilo natural y sencillo
Los haikus se escriben con un estilo coloquial, que evite que el lector se nos distraiga de lo realmente importante en el poema: la escena mostrada y la impresión que ha causado su contemplación. “Un haiku es un dedo que apunta a la luna, pero si el dedo está ensortijado, el lector se fijará en el dedo, y no en la luna” (Blyth). Si recargamos el poema con metáforas, personificaciones, aliteraciones, un vocabulario culto, etc., forzamos la colocación de los adjetivos a la izquierda del nombre o alteramos el orden natural de los elementos de la frase de cualquier otra manera, estaremos llevando el poema a un terreno que no es del haiku. Las palabras, en un haiku, no han de llamar la atención por sí mismas.