Unidad 3
Unidad 3
Unidad 3
Introducción
Objetivo
Analizar estrategias y buenas prácticas de las instituciones para mejorar el ambiente y clima
laboral y prevenir la discriminación y la violencia de género.
Temas de la Unidad 3:
Introducción
Hemos llegado a la última unidad del curso, la que intenta proporcionar conocimientos prácticos
para promover climas organizacionales sensibles al género y favorables a la igualdad de
oportunidades entre hombres y mujeres en los espacios laborales.
El clima laboral no es estático, por tanto, promover ambientes de trabajo libres de sexismo y
discriminación favorece no sólo a las mujeres, sino al colectivo de trabajo mediante el
establecimiento de condiciones de equidad, comunicación asertiva, dinámicas de buen trato,
políticas de conciliación y entornos de convivencia sana y colaborativa.
Los temas que esta unidad aborda se dirigen a reflexionar sobre aquellas acciones o prácticas que
promuevan el trabajo colaborativo, la comunicación respetuosa, el trato justo e igualitario hacia
todas las personas en una organización. Un clima laboral sensible al género apuesta por dinámicas
de trabajo y convivencia laboral sustentadas en los principios de dignidad y derechos humanos de
todas las personas.
Las áreas de oportunidad son entendidas como las cualidades, habilidades y acciones -individuales
y colectivas- que se deben fortalecer para mejorar las dinámicas laborales y contribuir a que el
clima de trabajo se sustente en el respeto a los derechos de las y los trabajadores y con miras a
cumplir las metas de la organización.
La perspectiva de género
La perspectiva de género es importante para aplicarla en los espacios laborales porque con este
enfoque identificamos el conjunto de ideas, representaciones, prácticas y prescripciones sociales
que una cultura desarrolla en función de la diferencia biológica entre mujeres y hombres; es decir
por nacer con un cuerpo de mujer o de varón estás ideas se traducen en lo que culturalmente se
define como propio de los hombres: masculino y lo que es propio de las mujeres: femenino.
La perspectiva de género es el análisis de la realidad hecho desde el género, teniendo en cuenta la
construcción social y cultural sobre el género y las relaciones de poder que ha establecido a lo
largo del tiempo.
Así, al aplicar la perspectiva de género se reconoce cómo se han establecido los vínculos, sistemas
sociales y relaciones de poder en base a una compresión sobre las diferencias sexuales, que nada
tienen que ver con las diferencias biológicas, sino con constructos socioculturales a lo largo de la
historia de la humanidad.
Por esos motivos, aplicar la perspectiva de género en el ámbito laboral permite identificar y
reflexionar acerca de las problemáticas del trabajo relacionadas con el género, como la brecha
salarial o el techo de cristal, que de otra forma no se lograrían conocer y transformar.
La brecha salarial es uno de los principales factores relacionados con la desigualdad laboral entre
hombres y mujeres. ONU MUJERES, la define como: porcentaje resultante de dividir dos
cantidades: la diferencia entre el salario de los hombres y las mujeres, dividida entre el salario de
los hombres.[1]
Es decir, la brecha salarial se refiere a que las mujeres ganas en promedio menos que los hombres.
Para medir esta brecha se deben comparar los sueldos entre hombres y mujeres que desempeñen
un trabajo de igual valor, en el mismo sector de actividad y con las mismas condiciones laborales.
También inciden en la brecha salarial: la menor ocupación por parte de las mujeres en puestos
directivos, y el mayor porcentaje de mujeres que trabajan en empleos de baja cualificación.
Indicadores
El salario medio según diferentes unidades de medida ya sea por hora, semana o mes.
La proporción del sueldo de las mujeres entre la suma total de los salarios.
Existen distintas causas que explican las desigualdades salariales entre mujeres y hombres. Es
importante identificarlas en la siguiente infografía:
¿Qué es el techo de cristal?
El glosario de términos del INMUJERES define el techo de cristal como un término acuñado desde
el campo de la psicología para referirse a las barreras invisibles, difíciles de traspasar, que
representan los límites a los que se enfrentan las mujeres en su carrera profesional, no por una
carencia de preparación y capacidades, sino por la misma estructura institucional.
Se refiere entonces a las restricciones y obstáculos que impiden a las mujeres acceder y/o
permanecer en puestos de responsabilidad o de dirección; o en su desarrollo profesional en
etapas como el embarazo o la crianza de hijos e hijas.
La formación para la igualdad de género. Los cursos de capacitación brindan conocimiento para
mostrar cómo las brechas y estereotipos de género impactan en las dinámicas de trabajo y en la
reproducción de situaciones de discriminación y desigualdad.
El uso de nuevas tecnologías para promover imágenes incluyentes, información sobre acciones
afirmativas, avances en las políticas contra acoso y hostigamiento laboral.
[1] https://lac.unwomen.org/es/que-hacemos/empoderamiento-economico/epic/que-es-la-
brecha-salarial
La conciliación vida laboral, familiar y personal incluye como criterios el respeto al horario de
trabajo establecido, la flexibilidad para el otorgamiento de permisos en forma equitativa para el
personal y el derecho igualitario a padres y madres en el cuidado de hijas e hijos.
Las medidas de conciliación tienen que ver con las particularidades de cada persona integrante de
la organización, así como de las características del puesto de trabajo, es decir, es importante hacer
una diferenciación en la forma en que los permisos o las pautas horarias se pueden flexibilizar. El
objetivo de la conciliación y la mediación es disminuir las brechas o contradicciones que puedan
surgir entre trabajo productivo y trabajo doméstico; y fomentar la corresponsabilidad en las tareas
domésticas, el cuidado de hijas e hijos, personas dependientes y la vida personal. Cuando
hablamos de conciliación incluimos:
El teletrabajo o home Office, incorporando las lecciones aprendidas durante el confinamiento por
la pandemia Covid-19
El artículo 132, fracción XXVII Bis, de la Ley Federal del Trabajo (LFT) establece “la obligación del
patrón de otorgar una licencia de paternidad de cinco días laborables con goce de sueldo a los
hombres que trabajan al momento de que nace su hijo. De igual manera, en el caso de un proceso
de adopción.”
La licencia de paternidad es un derecho fundamental que tienen todos los hombres trabajadores.
Su denominación varía a nivel internacional: derecho de paternidad, cuota del padre, licencia de
paternidad estatutaria, entre otros. Se trata del derecho que tienen los padres para tomar un
periodo predeterminado de tiempo fuera del trabajo, manteniendo sus derechos laborales y con
goce de sueldo, después del nacimiento o la adopción de sus hijas o hijos, para participar de la
crianza, brindar ayuda y apoyo a la madre.
Para lograr una verdadera igualdad de género es necesario resolver las cuestiones culturales que
hacen que la relación entre las personas tenga consecuencias negativas en el ámbito privado y
público.
En este sentido, las políticas de corresponsabilidad que incluyan temas de flexibilidad laboral,
permisos de paternidad, apoyos al cuidado de menores-guarderías, espacios para lactancia
materna[1]- son necesarias, pero no suficientes. Es preciso ampliar esta discusión o más esferas
para poner al centro del debate la importancia de los cuidados. Además de mejorar los derechos
laborales de las mujeres, resaltar que toda la sociedad se beneficia de las acciones destinadas a
garantizar el bienestar físico y emocional cotidiano de las personas con algún nivel de
dependencia.
Políticas de cuidados
En el contexto de la crisis por la COVID -19, se incrementó la carga de trabajo para las mujeres en
los cuidados de los adultos mayores, las personas con discapacidad, la infancia y adolescentes, lo
que llevo a varios países, entre ellos, México, a reconocer el valor del trabajo de las mujeres
cuidadoras y a generar políticas de atención.
Como sostienen especialistas del Inmujeres, establecer un Sistema Nacional de Cuidados (SNC)
pone a México a la vanguardia para sostener un Estado responsable del bienestar de su población.
Los cuidados deben ser responsabilidad de mujeres y hombres por igual, aunque la realidad es
muy diferente. En México, el 52% de las mujeres que no trabajan, no lo hacen porque tiene que
dedicar su tiempo de manera exclusiva a las labores del hogar. Integrar el derecho al cuidado a la
Constitución es una forma de reconocer tanto la importancia y el valor del trabajo de cuidado, que
se realiza cotidianamente, como el esfuerzo, tiempo y energía que se requiere para realizarlo.
[1] Ver: Guía para la instalación y funcionamiento de salas de lactancia. Fomento de una cultura de
lactancia materna en los centros de trabajo, 2020. Secretaría de Salud (SS), el Instituto Mexicano
del Seguro Social (IMSS), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Secretaría
del Trabajo y Previsión Social
(STPS).https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/613760/Guia_de_Lactancia_Materna_e
n_el_Lugar_de_Trabajo.pdf
La incorporación del tema de violencia de género en la agenda pública mexicana se dio, como
revisamos en la Unidad 2 en diversos ámbitos. Inició con la aprobación de diversas disposiciones
jurídicas como de la Ley Instituto Nacional de las Mujeres (2001) la Ley Federal para Prevenir y
Eliminar la Discriminación (2003), la Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres (2006)
y la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (2007), que constituyen, la
primera, la creación de la instancia institucional para trabajar por la promoción, protección y
difusión de los derechos de las mujeres y de las niñas contenidos en la Constitución y las tres leyes
subsecuentes, son los instrumentos fundamentales para proteger los derechos humanos de las
mujeres.
La Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación tiene como objeto “prevenir y eliminar
todas las formas de discriminación que se ejerzan contra cualquier persona y menciona la
obligación del Estado a promover las condiciones para que la libertad y la igualdad de las personas
sean reales y efectivas, así como el deber de los poderes públicos federales para eliminar aquellos
obstáculos que limiten en los hechos su ejercicio e impidan el pleno desarrollo de las personas y su
efectiva participación en la vida política, económica, cultural y social del país”.
La segunda normatividad citada tiene por objeto “regular y garantizar la igualdad entre mujeres y
hombres en los ámbitos público y privado”.
Por su parte la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, tiene el objeto
“establecer la coordinación entre la Federación, estados y municipios para prevenir, atender,
sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres que favorezca su desarrollo y bienestar
conforme a los principios de igualdad y de no discriminación.
Tanto mujeres como hombres pueden convertirse en víctimas y/o agresores de actos de violencia;
sin embargo, las mujeres son quienes constantemente la padecen; las mujeres tienen mayores
probabilidades de ser víctimas de ataques físicos, emocionales, sexuales, económicos,
patrimoniales, o incluso, convertirse en víctima de feminicidio.
“Todo acto de violencia basada en el género que tiene como resultado posible o real un daño
físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas, la coerción o la privación arbitraria de la
libertad, ya sea que ocurra en la vida pública o en la vida privada”.[1]
La violencia de género se da en todos los ámbitos y por parte de diversos agresores, desde la
pareja y familiares hasta desconocidos; constituye un fenómeno extendido con características y
matices diferentes.
Tomando como fundamento jurídico la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de
Violencia por ser el instrumento legal más explícito con relación a este problema, podemos
recordar, brevemente, algunas definiciones:
b. En el ámbito público se da en los espacios comunitarios, instituciones, escuelas, así como áreas
de trabajo.
Con el objetivo de lograr mayor claridad acerca de la violencia de género, veamos de manera
concreta, sus cinco tipos y cuatro modalidades, definidas en la Ley General de Acceso de las
Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV).[2]
Tipos de violencia
Psicológica: Es cualquier acto u omisión que dañe la estabilidad psicológica, que puede consistir
en: negligencia, abandono, descuido reiterado, celotipia, insultos, humillaciones, devaluación,
marginación, desamor, indiferencia, infidelidad, comparaciones destructivas, rechazo, restricción a
la autodeterminación y amenazas, las cuales conllevan a la víctima a la depresión, al aislamiento, a
la devaluación de su autoestima e incluso al suicidio.
Física: Es cualquier acto que inflige daño no accidental, usando la fuerza física o algún tipo de arma
u objeto que pueda provocar o no lesiones ya sean internas, externas, o ambas.
Económica: Es toda acción u omisión del agresor que afecta la supervivencia económica de la
víctima. Se manifiesta a través de limitaciones encaminadas a controlar el ingreso de sus
percepciones económicas, así como la percepción de un salario menor por igual trabajo, dentro de
un mismo centro laboral.
Sexual: Es cualquier acto que degrada o daña el cuerpo y/o la sexualidad de la Víctima y que por
tanto atenta contra su libertad, dignidad e integridad física. Es una expresión de abuso de poder
que implica la supremacía masculina sobre la mujer, al denigrarla y concebirla como objeto.
Modalidades de violencia
Familiar: Es el acto abusivo de poder u omisión intencional, dirigido a dominar, someter, controlar
o agredir de manera física, verbal, psicológica, patrimonial, económica y sexual a las mujeres,
dentro o fuera del domicilio familiar, cuyo agresor tenga o haya tenido relación de parentesco por
consanguinidad o afinidad, de matrimonio, concubinato o mantengan o hayan mantenido una
relación de hecho.
Laboral y docente: Se ejerce por las personas que tienen un vínculo laboral, docente o análogo con
la víctima, independientemente de la relación jerárquica, consistente en un acto o una omisión en
abuso de poder que daña la autoestima, salud, integridad, libertad y seguridad de la víctima, e
impide su desarrollo y atenta contra la igualdad.
En la comunidad: Son los actos individuales o colectivos que transgreden derechos fundamentales
de las mujeres y propician su denigración, discriminación, marginación o exclusión en el ámbito
público.
Institucional: Son los actos u omisiones de las y los servidores públicos de cualquier orden de
gobierno que discriminen o tengan como fin dilatar, obstaculizar o impedir el goce y ejercicio de
los derechos humanos de las mujeres así como su acceso al disfrute de políticas públicas
destinadas a prevenir, atender, investigar, sancionar y erradicar los diferentes tipos de violencia.
Política: es toda acción u omisión, incluida la tolerancia, basada en elementos de género y ejercida
dentro de la esfera pública o privada, que tenga por objeto o resultado limitar, anular o
menoscabar el ejercicio efectivo de los derechos políticos y electorales de una o varias mujeres, el
acceso al pleno ejercicio de las atribuciones inherentes a su cargo, labor o actividad, el libre
desarrollo de la función pública, la toma de decisiones, la libertad de organización, así como el
acceso y ejercicio a las prerrogativas, tratándose de precandidaturas, candidaturas, funciones o
cargos públicos del mismo tipo.
Mediática: es todo acto a través de cualquier medio de comunicación, que de manera directa o
indirecta promueva estereotipos sexistas, haga apología de la violencia contra las mujeres y las
niñas, produzca o permita la producción y difusión de discurso de odio sexista, discriminación de
género o desigualdad entre mujeres y hombres, que cause daño a las mujeres y niñas de tipo
psicológico, sexual, físico, económico, patrimonial o feminicida.
Todos estos elementos son impedimentos reales para que las mujeres que buscan tener justicia y
sanación inicien un proceso de denuncia.
La revictimización es lo que detiene a miles de mujeres a reconocer el maltrato sufrido y
denunciarlo.
Las formas de culpabilizar suelen ser muy sutiles, pero no por ello menos dañinas para la víctima.
Implica una inversión de la responsabilidad juzgando la conducta de la víctima, lo que hizo o no
hizo para evitar la agresión, olvidando que: Las víctimas son víctimas porque tienen el DERECHO a
no ser agredidas y porque no son RESPONSABLES de la agresión.
Para prevenir la violencia es importante conocerla e identificar las causas y factores de riesgo en
un determinado contexto.
En el ámbito laboral la elaboración de diagnósticos suele ser una estrategia muy oportuna ya que
permite conocer, desde la percepción y experiencias de las y los integrantes de la organización, los
tipos de situaciones, su frecuencia, los perpetradores, sus afecciones al resto del equipo de
trabajo, entre otras.
Esta información es la principal vía para diseñar y evaluar las intervenciones e incrementar en
escala las medidas que resultan efectivas. Contar con instancias independientes y autónomas para
resolver la problemática también es una medida muy importante.
Evitar por todos los medios que prevalezca la impunidad, ya que los actos se pueden repetir y
precisamente se transmite a la organización que el problema no cuenta con la más alta legitimidad
y consideración por parte de las autoridades.
Se requieren de políticas Institucionales que permeen todos los ámbitos de la vida laboral, crear
espacios seguros de convivencia laboral, horarios con mayor flexibilidad para las mujeres que crían
hijas/os, módulos inmediatos para la atención del acoso laboral, menos carga para las víctimas en
la cuestión probatoria cuando denuncian, incorporar como mecanismos de contratación y
escalafón en los cargos, no haber ejercido violencia contra las mujeres, y tampoco ser cómplice del
silencio ante casos similares.
La Iniciativa Spotlight difundió un video en México con el mensaje sobre la situación de violencia
que se puede desencadenar al interior del hogar, así como la ayuda que puedan obtener, las
instituciones para la atención y acompañamiento.
ACTIVIDAD N° 2
Te invitamos a ver la siguiente campaña y reflexionar sobre la forma en que se presenta el
problema de la violencia
https://www.spotlightinitiative.org/es/news/noestassola-contra-la-violencia-hacia-las-mujeres-en-
el-hogar
[1] Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia
http://www.hcnl.gob.mx/trabajo_legislativo/leyes/leyes/ley_de_acceso_de_las_mujeres_a_una_v
ida_libre_de_violencia/
NO es siempre NO
Con frecuencia se piensa que hostigamiento sexual y el
acoso sexual ocurren porque las víctimas, mayoritariamente
mujeres, lo provocan debido a su forma de vestir, por sus
actitudes “coquetas” o poco firmes al rechazar estas
conductas. Incluso hay quienes piensan que son permitidas,
cuando existió una relación previa, justificándolas como
“conflictos íntimos”.
En cualquier contexto o situación, todas y todos sabemos
cuando algo nos incomoda, disgusta o afecta; por eso es
importante expresarlo y no permitirlo. Si la persona que está
contigo te comunica que no le gustan tus formas de acercarse
a ella, ESCUCHA, RESPETA y DEJA DE HACERLO,
incluyendo la voluntad o decisión de terminar un vínculo o
relación.
También es importante tener en cuenta que las inseguridades
o dificultades de quienes padecen el hostigamiento o el
acoso sexual no siempre son claras. Si hay miedo a los
despidos, a las represalias o hay confusión, no juzgues a la
víctima, apoya y pídele a quien se sobrepasa, que ¡respete
sus negativas!
[1] http://cerotolerancia.inmujeres.gob.mx/
Fuente: http://hospitalpazdelatarde.cl/ssvq/hospital-
geriatrico-paz-de-la-tarde/noticias/campana-por-el-buen-
trato-en-la-red-del-ssvq-geriatrico
DECÁLOGO DEL BUEN TRATO:
1. Fomenta un ambiente laboral de respeto y
empatía con tus compañero/as y con la población
usuaria.
2. Identifica, mejora y garantiza el ejercicio de los
derechos humanos en igualdad de oportunidades, sin
discriminación.
3. Utiliza un lenguaje incluyente en todas tus
comunicaciones a fin de favorecer expresiones
inclusivas.
4. Promueve y realiza acciones que aseguren el
cumplimiento del ejercicio de los Derechos Humanos,
No Discriminación y Género.
5. Emprende actividades que abonen a una cultura de
solidaridad en el entorno laboral.
6. Adopta decisiones inclusivas, participativas y
representativas que respondan a las necesidades de
las personas.
7. Adquiere conocimientos, desarrolla aptitudes y
capacidades para crear una cultura sólida de derechos
humanos en tu institución de Asistencia Privada (IAP).
8. Suma las experiencias y conocimientos de otras
personas a tu vida, no juzgues.
9. Reconoce que las diferencias nos enriquecen,
recuerda que somos pieza fundamental del
rompecabezas.
10. Participa en acciones orientadas al desarrollo de
una IAP responsable, sensible, empática y eficaz.
ANÁLISIS
REFLEXIÓN
Fuente: https://mobile.twitter.com/IvonneMunozMx/status/
1368962856562081796/photo/1
¡Felicidades¡¡¡, has concluido los tres Módulos del
Curso¡¡¡¡
Ahora te invitamos a ver el siguiente video de
conclusiones:
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Bibliografía
Pregunta 1
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Texto de la pregunta
¿A qué hace referencia la conciliación en el trabajo?
Seleccione una:
c. A las particularidades de cada persona y con las características del puesto de trabajo.
Pregunta 2
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Señalar con bandera la pregunta
Texto de la pregunta
¿Cuál de las siguientes es una herramienta para erradicar el acoso en las instituciones
públicas?
Seleccione una:
Pregunta 3
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Texto de la pregunta
¿Por qué es importante aplicar la perspectiva de género en el ambiente laboral?
Seleccione una:
Pregunta 4
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Señalar con bandera la pregunta
Texto de la pregunta
¿Qué busca la comunicación no violenta y asertiva con perspectiva de género?
Seleccione una:
Pregunta 5
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Texto de la pregunta
¿Qué implica la comunicación asertiva?
Seleccione una:
Pregunta 6
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Señalar con bandera la pregunta
Texto de la pregunta
¿Qué se entiende por revictimización?
Seleccione una:
b. Las barreras invisibles, difíciles de traspasar, que representan los límites a los que se
enfrentan las mujeres en su carrera profesional
Pregunta 7
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Texto de la pregunta
De acuerdo al contenido de la unidad, es un área de oportunidad para la cultura
institucional.
Seleccione una:
c. Identificar las restricciones y obstáculos que impiden a las mujeres acceder y/o
permanecer en puestos de responsabilidad o de dirección.
Pregunta 8
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Texto de la pregunta
Menciona tres principios con los que tienen que actuar las instancias encargadas de la
atención, investigación y sanción de hostigamiento y acosos sexual
Seleccione una:
Pregunta 9
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Texto de la pregunta
Selecciona el enunciado que haga referencia a la definición de violencia psicológica:
Seleccione una:
Pregunta 10
Sin responder aún
Puntaje de 1.00
Señalar con bandera la pregunta
Texto de la pregunta
Selecciona un indicador de brecha salarial:
Seleccione una:
b. La diferencia entre el salario de los hombres y las mujeres, dividida entre el salario de
los hombres.
c. Que en México, una mujer tenga que trabajar 5 días más al mes para ganar lo mismo
que un hombre.