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Universidad Nacional de San Antonio Abad Del Cusco Facultad de Derecho Y Ciencias Sociales Escuela Profesional de Historia

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UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN ANTONIO ABAD

DEL CUSCO
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES
ESCUELA PROFESIONAL DE HISTORIA

TENENCIA DE TIERRAS Y PROSPECCIÓN


HISTORICA DEL VALLE DE YUCAY: 1550-1600

TESIS PRESENTADA POR LAS BACHILLERES:

- MENDOZA VEGA ADRIANA


ROXANA
- LOZANO MAMANI GUADALUPE

PARA OPTAR AL TITULO PROFESIONAL DE LICENCIADA EN


HISTORIA

ASESORA : MGT. MARGARETH NAJARRO ESPINOZA

CUSCO- 2019
AGRADECIMIENTO

Nuestro eterno agradecimiento,

A Dios, que nos permitió estar juntas en el momento indicado para compartir la
alegría de trabajar por nuestro objetivo.

Nuestros padres, que son el motivo, guía y fortaleza para cumplir esta anhelada
etapa de nuestras vidas. Gracias por ser modelo de perseverancia y constancia
la cual los caracterizan y nos inculcan siempre; así como nuestros hermanos que
son ejemplo de que las metas se cumplen.

Y como no nombrar a nuestros queridos maestros y nuestra asesora, por el gran


apoyo y motivación para culminar nuestros estudios profesionales; por ser guías
constantes a pesar del tiempo transcurrido.

Finalmente, gracias a nuestros ahora amigos del archivo central, las bibliotecas
que hemos visitado y los lugareños del valle.

Gracias a todos ustedes, concluimos esta etapa con éxito.

II
I. PROYECTO DE INVESTIGACIÓN

I.1.- PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Se conceptúa usualmente la tenencia de la tierra como la relación, definida en


forma jurídica o consuetudinaria, entre personas o grupos sociales con respecto
al usufructo de un espacio determinado. “Las reglas sobre la tenencia definen de
qué manera pueden asignarse dentro de las sociedades los derechos de
propiedad de la tierra. Definen cómo se otorga el acceso a los derechos de
utilizar, controlar y transferir la tierra, así como las pertinentes responsabilidades
y limitaciones. En otras palabras, los sistemas de tenencia de la tierra
determinan quién puede utilizar qué recursos, durante cuánto tiempo y bajo qué
circunstancias.”1

Desde esa percepción general nuestra intención es la de entender la forma de


acceder, controlar y transferir el usufructo de las tierras que se han dado en el
valle de Yucay durante la segunda mitad del siglo XVI, así como los efectos
teóricamente negativos que esta tuvo en la población de este espacio del Cusco.

Parte del meollo para desarrollar de manera eficaz el proceso de tenencia de


tierras está relacionado con el conocimiento geográfico del espacio de estudio y
los sitios ubicados en ella. A partir de la documentación histórica publicada e
inédita hemos podido ver para el siglo XVI una diversidad de topónimos en el
valle de Yucay, que nombran espacios muchos de los cuales relacionados con el
Sol o con soberanos del periodo tardío Inka y otros personajes del entorno de la
elite gobernante, lugares estos que con la irrupción colonial serán motivo del
interés de posesión de instituciones y personas. Es intención nuestra que, por
medio de la prospección, (técnica utilizada básicamente por la arqueología y
sobre el cual hablaremos más a detalle en la parte metodológica del proyecto),

1
Organización de las Naciones Unidas para la agricultura y la alimentación (FAO). Tenencia de la Tierra y
Desarrollo Rural. Roma; S.E. 2003. http://www.fao.org/docrep/005/y4307s/y4307s0b.htm#bm11. Fecha
de consulta: 03/10/2017.

III
podamos hacer la contrastación in situ con fines de ubicar a la actualidad estos
lugares y la pertenencia que tuvieron durante el periodo de nuestro estudio.

I.2.- FORMULACIÓN DEL PROBLEMA

I.2.1 PLANTEAMIENTO GENERAL

Se formula la problemática: ¿Cuál fue el proceso para la tenencia de tierras, el


manejo de las mismas entre los años 1550 a1600 y la pervivencia toponímica en
los distritos de Huayllabamba, Yucay y Urubamba?

I.2.2 PLANTEAMIENTO ESPECÍFICO


1. ¿Cómo se dio el proceso de cambio y transformación de la tenencia de
tierras en el valle de Yucay tras el primer momento de la conquista
española?

2. ¿Cuál fue la dinámica y las transformaciones del manejo de la tierra y


asentamiento poblacional en el valle de Yucay entre los años de 1550 a
1600?

3. ¿Cuál fue el proceso de pervivencia y cambio de las referencias


toponímicas del siglo XVI en relación al piso de valle de los distritos de
Huayllabamba, Yucay y Urubamba?

I.3.- JUSTIFICACION DE LA INVESTIGACION

El Valle de Yucay, nombre con el que en siglos pasados se conocía a parte del
actual Valle Sagrado de los Incas, es un espacio de gran importancia en el
contexto histórico de la región del Cusco. Las crónicas son unánimes en
mencionar que la fertil de sus tierras y la benignidad del clima del valle de
Yucay fueron aspectos que motivaron que este espacio geográfico fuera
apetecido por los soberanos incas que asentaron en ella sus propiedades o

IV
haciendas particulares, reemplazando, las más de las veces, a la población
originaria con yanaconas y mitimaes.

Este interés, como veremos ampliamente en el proceso de nuestro trabajo de


investigación, no mermaría cuando se da el proceso de la conquista e
instauración de la colonia en los andes, por el contrario; convertida a inicios de
la colonia como parte de las encomiendas de Francisco Pizarro y en otro
momento como territorio integrante del Marquesado de Oropesa, la información
histórica del siglo XVI muestra que el valle de Yucay es un espacio
ambicionado por españoles y naturales que buscan a partir de diversos
mecanismos usufructuar las tierras ubicadas en este valle.

Desde el inicial trabajo sobre el Marquesado de Oropesa elaborado por


Lohmann Villena (1948), la introducción documental desarrollada por Horacio
Villanueva Urteaga en 1970 o las referencias escuetas que hacen Luis Miguel
Glave y María Isabel Remy (1983) y Varón Gabai (2014), o el casi inédito y
poco conocido estudio introductorio de Amado Gonzales (2008) es poca la
producción bibliográfica existente a la fecha en cuanto a detallar
procesualmente los primeros momentos históricos coloniales del valle de
Yucay.

Partiendo de esta perspectiva creemos que el presente proyecto de


investigación se justifica desde la explicación, en base de un minucioso acopio
y análisis de información documental y testimonial referente a la segunda mitad
del siglo XVI, de los cambios y transformaciones que se produjeron en el
manejo del espacio del valle de Yucay durante este periodo de tiempo. Como
es sabido es justamente durante el periodo que va desde 1550 a 1600 cuando
de manera general en el virreinato del Perú y particularmente en el valle de
Yucay se producen momentos coyunturales como la instauración de las
reducciones de indios o la primera visita y composición de tierras, los cuales,
generaron transformación en la tenencia de tierras en Yucay.

V
Otra justificación está referida a la necesidad de desarrollar estudios históricos
de contrastación y ubicación, en el espacio actual de piso de valle de los
distritos de Huayllabamba, Yucay y Urubamba, de topónimos que refieren
espacios productivos y habitacionales históricos descritos o señalados en los
documentos del siglo XVI. Constatar la pervivencia y/o desaparición de estos
nombres antiguos es vital para una reconstrucción histórica del espacio del
valle de Yucay.

I.4.- DEFINICIÓN DEL PROBLEMA

El proyecto de investigación está definido espacialmente en el entorno


geográfico del antiguo valle de Yucay, el cual según la documentación del siglo
XVI comprendía el piso de valle de los actuales distritos de Huayllabamba,
Yucay y Urubamba.

Temporalmente se ha definido en el periodo de los años de 1550 a 1600,


definición cronológica que está determinada en su primer límite de tiempo
(1550) por la visita y vista de ojos que se hace en 1551 al valle de Yucay, el
segundo límite temporal (1600) se retrotrae en un lustro al momento de la
primera visita y composición de tierras que se dio en 1595.

I.5.- LIMITACIONES DEL PROBLEMA

Una limitante principal para nuestro trabajo está determinado por la amplitud y
cierta dificultad en la lectura de los documentos del siglo XVI, en especial los
protocolos notariales de estos años que son nuestra principal fuente para, por un
lado, desarrollar en la medida de lo posible el record sistemático de tenencia de
tierras durante nuestro marco temporal de estudio y por el otro para contrastar y
ampliar las referencias documentales existentes sobre el valle de Yucay. Se
plantea como solución a este limitante tomar como referencia de muestra los
protocolos del escribano Antonio Sánchez que tiene una producción notarial que
transcurre casi todo el marco temporal de nuestro estudio (1566-1599).

VI
Otro limitante está fijado en los pocos trabajos de investigación históricos que
hayan desarrollado desde una visión particular el proceso de tenencia de tierras
suscitados hasta antes de la primera visita y composición de tierras de 1595 en
el ámbito del antiguo valle de Yucay o en otros lugares de la región del Cusco.

A excepción del trabajo de Glave y Remy sobre Ollantaytambo que tocan


someramente este proceso para los años considerados en nuestro trabajo de
investigación o el pionero trabajo documental de Villanueva Urteaga publicado
en 1970 el cual como fuente documental es bastante interesante pero que solo
tiene carácter introductorio, no hay mayor bibliografía que nos sirva de
referencia, esta falencia más que una limitación es una oportunidad de contribuir
al conocimiento de este periodo de la historia del antiguo valle de Yucay.

II.- OBJETIVOS DE LA INVESTIGACION

II.1.- OBJETIVO GENERAL

- Determinar el proceso de cambio de la tenencia de tierras y la dinámica


de las transformaciones del manejo de la tierra en el valle de Yucay entre
los años de 1550 a 1600.

II.2.- OBJETIVOS ESPECIFICOS

- Construir a partir de la información etnohistórica y arqueológica existente,


un análisis del manejo de las tierras del valle de Yucay durante el periodo
prehispánico.

- Estudiar la dinámica y transformación de la configuración territorial del


valle de Yucay en los años de 1550 a 1600.

- Contrastar en el espacio actual de piso de valle de los distritos de


Huayllabamba, Yucay y Urubamba la pervivencia y ubicación de
topónimos históricos del siglo XVI.
VII
III.- MARCO TEORICO
III.1.- ANTECEDENTES DE LA INVESTIGACION

III.1.1. La referencia cronística.

Por la fuente cronística sabemos que tras el periodo de conformación y


consolidación del Estado Inka en la región del Cusco, el valle de Yucay adquirió
vital importancia como sitio estratégico. Los cronistas de los siglos XVI y XVII
(de los cuales trataremos en extenso en el desarrollo del trabajo de
investigación), son acordes cuando escriben que la fertilidad de sus tierras y la
benignidad del clima fueron motivos para que este sitio fuera apetecido por los
soberanos inkas que asentaron en ella sus propiedades o haciendas
particulares, expulsando y reubicando a la población originaria
reemplazándolas con yanaconas y mitimaes Qollas, Cañaris y Chachapoyas.

De los cronistas que hablan acerca del valle de Yucay tenemos principalmente
a Fray Bartolomé de Las Casas [1550], Pedro Cieza de León [1553], Cristóbal
de Molina, el Chileno, [1553], Fray Martín de Murua [1590] y el Inca Garcilaso
de la Vega [1609].

III.1.2. La referencia arqueológica.

En 1982 el Instituto Nacional de Cultura publica “Arqueología del Cusco”, que


es una compilación de los trabajos desarrollados por arqueólogos cusqueños,
entre ellos está el desarrollado por Alfredo Valencia intitulado “Complejo
Arqueológico de Yucay” (1982), el cual es el resultado de investigaciones
desarrolladas por este arqueólogo en la zona del mismo nombre. A más de
este es poca la producción bibliográfica que se tiene a la fecha con respecto al
valle de Yucay, de ellas resaltan particularmente los desarrollados por Ian
Farrington y Susan Niles, los que han servido para comprender la función que
tuvo este espacio durante el periodo Inka.
Desde la década del ochenta del siglo XX Ian S. Farrington hace una serie de
trabajos de investigación arqueológica en el antiguo valle de Yucay, fruto de
VIII
ello son: “Prehistoric intensive agricultural schemes: River canalization in the
Sacred Valley of the Incas” y “Medidas de tierra en el Valle de Yucay, Cusco”
publicadas ambas en 1984 en las cuales a partir del mapeo con teodolitos
electrónicos de los sistemas de andenes ubicados en Yucay y Urubamba logra
determinar la complejidad del sistema constructivo-hidráulico desarrollado por
los Inkas en pro de aprovechar la fertilidad de las tierras de este valle, aptas
para el cultivo del maíz, (Zea mays), producto comestible necesario dentro de
los mecanismos religiosos y de reciprocidad del estado Inka.

El trabajo de Susan Niles: “The shape of inca history: narrative and architecture
in an andean empire” (1999) busca, desde el estudio amplio que hace del sitio
arqueológico de Quespiwanka y de otros lugares existentes en el entorno del
valle de Yucay, en donde se evidencia la arquitectura simbólica y suntuaria
inka y el análisis de las fuentes documentales del siglo XVI una nueva
comprensión de la vida de las familias o panakas reales en vísperas de la
conquista. Para ello Susan Niles se centra en la vida de Huayna Qhapaq, el
último soberano Inka cuyos últimos años de gobierno coinciden con las
primeras incursiones europeas en los territorios del Tawantinsuyu. La amplitud
de fuentes documentales que narran la vida de este personaje y el minucioso
registro que se hace de sus propiedades en Yucay hacia mediados del siglo
XVI son fuentes con las que, según Niles, es posible recrear el desarrollo del
estilo arquitectónico inca con el tiempo, en esta misma línea está otro trabajo
de Ian Farrington intitulado: “The mummy, estate, and palace of Inka Huayna
Capac at Quispeguanca” (1995).

Es de resaltar asimismo los trabajos de prospección e investigación


arqueológica desarrollados por la Dirección Desconcentrada de Cultura en los
distritos de Huayllabamba, Yucay y Urubamba, los cuales han puesto en
evidencia grandes sitios de almacenamiento o “qollqas” emplazadas
estratégicamente en parte alta de la margen izquierda de la cuenca del río
Vilcanota (Machuqolqa, Huaynaqolqa, Q’acllakancha, Mesakancha). El
resultado de estos trabajos aún permanece inédito.

IX
III.1.3. La referencia histórica.

En 1948 Guillermo Lohmann Villena publica en el Anuario de Historia del


Derecho Español; Vol. 19. Un artículo bastante extenso: “El Señorío de los
Marqueses de Santiago de Oropesa en el Perú”, el cual cómo se ve del mismo
título trata sobre el origen, la consolidación y el final de la institución del
Marquesado de Oropesa, título nobiliario y de control de la población del
ámbito de los pueblos de Yucay, Guayllabamba, Urubamba y Maras y que
constituyo un caso bastante singular en nuestra historia colonial.

Años después Daniel Gade publica “La Aranjuez del Nuevo Mundo” (1968),
trabajo monográfico que desde la historia y la geografía hace una descripción
del valle de Yucay desde el siglo XVI comparándola con Aranjuez, poblado de
España con el cual, según Gade, compartía las mismas características
climáticas y geográficas.

“Documentos sobre Yucay en el siglo XVI” y “Información ad perpetuam dada


en 13 de enero de 1567 ante la real justicia de la ciudad del Cuzco, Reino del
Perú, a pedimento de la muy ilustre señora Doña María Manrique Coya, vecina
de dicha ciudad.” publicados por Horacio Villanueva Urteaga el año de 1970 en
la revista N° 13 del Archivo Histórico del Cusco, es un conjunto de documentos
transcritos íntegramente por este historiador Villanueva y que son fuente
primordial para entender la visión que se tiene en el siglo XVI con respecto a la
tenencia de las tierras en el valle de Yucay hasta antes de 1550.

Esa misma perspectiva tiene la divulgación de fuentes documentales


desarrollada por María Rostworowski de Diez Canseco quien en 1970 publica
en la Revista Historia y Cultura N° 04 el artículo denominado “El Repartimiento
de Doña Beatriz Coya, en el valle de Yucay”.

De carácter introductorio, pero mucho más contundente por la relevancia de la


temática que toca es el artículo de esta misma autora: “Nuevos datos sobre
tenencia de tierras reales en el Incario”, publicado en la revista del Museo
X
Nacional Tomo XXXI, 1962. De ella hablaremos más cuando veamos la base
teórica del proyecto.

Existen asimismo otras publicaciones en relación al ámbito y la temática de


nuestra investigación, de los cuales, valgan verdades, tenemos solo referencia
y que en el transcurso del tiempo serán de necesaria consulta, razón por la
cual en estos antecedentes solo hacemos el listado cronológico de ellas:

- CHINESE, Josyane. “Anónimo de Yucay (1571): dominio de los yngas


en el Perú y del que su magestad tiene en dichos reynos”. En: Historia y
Cultura No. 4 (1970).

- FIORAVANTI MOLINIE, Antoinette. Influences urbaines et societe rurale


au Perou le cas de Yucay. Paris; Universite de Paris. 1972.

- LOZA, Carmen Beatriz. “De la classification des indiens a sa réfutation


en justice (Yucay, andes péruviennes, circa 1493-1574)”. En: Histoire y
mesure V°. 12 No. 3/4. 1997.

- ROMERO PACHECO, Martín Hernando. “Cuzco, historia, espacio y


poder: el Valle de Yucay, un continuum político en el manejo del
espacio”. En: Anales del Tinkuy N° 01. 2013.

III.2.- BASE TEORICA.

La problemática y los objetivos planteados para el avance de nuestra


investigación suponen dos variables: La tenencia de tierras y la prospección, en
base a estos dos aspectos se desarrolla la base teórica que sustenta el
desarrollo del trabajo de investigación.

XI
III.2.1. Bases teóricas sobre la tenencia de tierra.

La problemática de la tenencia de la tierra es un aspecto que ha sido abordado


en múltiples momentos y desde diversas perspectivas a nivel mundial, aunque
los resultados no han sido de los más alentadores, el origen o el resurgimiento
de conflictos agrarios y ambientales en el Perú o en otras partes del mundo son
el mejor indicador de esta afirmación.

Para un gran número de expertos, el volver a hablar de la temática agraria y del


problema de la tierra no es algo que pueda generar sorpresa, ya que esto se
debe o es consecuencia inevitable de la desatención sistemática, ignorancia y
muchas veces complicidad que los gobiernos de turno y la misma sociedad han
tenido en relación a un manejo eficiente y justo en cuanto a la distribución de la
tierra.

Años atrás la Agencia Alemana de Cooperación Técnica para el Desarrollo


precisaba: “Los Proyectos de Reforma Agraria en América latina no han resuelto
los problemas de extrema desigualdad en la distribución de la tierra, ocupación
ilegal y la destrucción de los recursos naturales por pequeños agricultores en
sistemas ecológicos frágiles. Estos problemas son considerados como una
bomba de tiempo en términos de eficiencia económica, equidad y objetivos
ambientales. Ocupaciones ilegales de áreas baldías (en muchas ocasiones con
la aceptación pasiva del gobierno) son una válvula de seguridad en reformas
agrarias tardías. Resultado de ello se originan, por ejemplo, un daño al bosque
tropical, un agotamiento de la biodiversidad y una amenaza a la comunidad
mundial. Las comunidades indígenas se ven particularmente más afectadas por
ocupación de tierras y conflictos agrarios. Ocupaciones ilegales en sectores
urbanos y suburbanos pueden originar nuevas disputas en sistemas de tenencia
en éstos.”2

2
Tenencia de la Tierra: Marcos de Orientación. https://www.mpl.ird.fr/crea/taller-
colombia/FAO/AGLL/pdfdocs/espanol.pdf. Fecha de consulta: 08 de octubre del 2017.

XII
Cuanto de todo lo expresado en el párrafo anterior tiene plena vigencia en este
momento en el Perú: los problemas de invasiones de terrenos, la tala
indiscriminada, la minería ilegal, la discusión en relación a los impactos negativos
de la minería en las comunidades, todo ello es un problema que se sigue
arrastrando por el desconocimiento y el poco interés que se tiene por conocer y
entender el proceso histórico en relación a la implicancia de la tenencia de la
tierra y su usufructo, entendiéndose que la tierra más que un bien económico o
un factor de producción, personifica valores ancestrales como la pertenencia, la
costumbre o la supervivencia.

El usufructo de la tierra, como bien patrimonial está ligado a dos conceptos en


ocasiones unívocos: territorialidad y dominancia. La territorialidad es uno de los
principios centrales de la teoría etológica3. La mayor parte de los naturalistas
consideran que la territorialidad es una parte innata de la conducta animal.
Todos los animales tenderían a mantener territorios fijos y espacios individuales,
estableciendo límites y excluyendo o admitiendo en los territorios así fijados a
quien ellos quisieran.

Se trataría entonces de una conducta puramente instintiva. El hombre, en tanto


que animal, participaría de esa conducta. Robert Ardrey expresa que el instinto
es una explicación posible de la tendencia humana manifiesta a poseer,
defender y organizar políticamente un área geográfica delimitada. Arguye que la
posesión y la identificación con un territorio constituyen prerrequisitos para la
satisfacción de necesidades básicas de la gente, tales como seguridad (que
permite superar la ansiedad), estímulo (que vence el tedio) y, sobre todo,
identidad (que anula el anonimato).4

3
“Etología, Etimológicamente viene de la palabra griega “ethos” (también raíz de la palabra “ética”) que
significa comportamiento. La Etología puede ser definida como el estudio del comportamiento de las
especies animales, todas, incluido el hombre, en su medio natural. Fue fundada por Konrad Lorenz y
Niko Tinbergen, los cuales resaltaron la predisposición innata de los animales a responder de una forma
concreta a unos estímulos concretos, una predisposición que es adaptativa, esto es, que tiene un claro
valor de supervivencia.” http://www.ugr.es/~aula_psi/Etologia.htm. Fecha de consulta: 10/10/2017.

4
ARDREY. Robert. El imperativo territorial: una investigación personal sobre los orígenes animales de la
propiedad y las naciones. EEUU; Dell; 2014; p. 168.

XIII
La dominancia planteada desde relación social del hombre parte de la idea de la
estratificación social y postula que toda sociedad se organiza en torno al principio
de ordenación jerárquica entre los grupos que la constituyen. De esta forma se
minimiza o anula el conflicto grupal gracias a las ideologías que justifican la
desigualdad social. Los grupos dominantes disfrutan de privilegios y ostentan el
poder que les permite mantener su posición frente a los subordinados. Todo
sistema ideológico hace uso de determinados mitos legitimadores, que los
autores definen como conjuntos coherentes de valores, creencias y opiniones
socialmente aceptados, que legitiman, moral e intelectualmente, la distribución
desigual de los recursos5.

Vista desde esa idea de los conceptos de territorialidad y dominancia podríamos


suponer que la tenencia de la tierra estaría basada en valores y normas que no
pueden ser separados de su contexto social y cultural e ideológico. En ese
sentido una mirada a la historiografía sobre el tema de tenencia de tierras nos
será de mucha ayuda para ver si estos trabajos han abordado esta cuestión
tomando en cuenta la idea teórica de una relación estrecha de estos dos
conceptos.

Una primera vista que cuantitativamente nos muestra la amplitud con que se ha
tratado desde diversas visiones y profesiones el problema de la tierra en cuanto
propiedad comunal ancestral es la relación bibliográfica de autores que desde
1900 a 1968 trataron el tema indígena andino, el cual fue publicado por el
Ministerio de Trabajo y Comunidades y el Instituto Indigenista Peruano. Parte de
las 650 páginas de esta, valga la redundancia, relación contiene el registro de
autores como Héctor Martínez, Cristian Bues, Wesley Craig, Jorge de Olarte,
Glen Mc Clan, entre otros que hasta 1968 habían desarrollado trabajos sobre
comunidades de la región del Cusco, muchos de estos textos han desaparecido
o no se encuentran en las bibliotecas públicas de nuestra ciudad.6

5
PRATTO, Felicia y otros. “La orientación de la dominación social y la legitimación de la desigualdad en
todas las culturas”. En: Journal of Personality and Social Psychology. N° 67. 1994. Passim.

6
MARTINEZ, Héctor; CAMEO, Miguel y RAMIREZ, Jesús. Bibliografía Indígena Andina (1900-1968). Lima;
Ministerio de Trabajo y Comunidades- Instituto Indigenista Peruano; 1968.
XIV
El SEPIA (Seminario Permanente de Investigación Agraria), a través de su
publicación: Perú: el problema agrario en debate, SEPIA promueve la reflexión y
discusión en torno a los temas agrarios y ambientales en el Perú. Desde 1986
hasta el 2016 se han divulgado XVI publicaciones periódicas entre las cuales
destacan por ejemplo el SEPIA III propagado el año de 1990 que bajo la
temática de: LA AGRICULTURA Y LA GANADERÍA EN EL PERÚ: PROCESO
HISTÓRICO Y PERSPECTIVAS agrupó los trabajos de Manuel Burga y Nelson
Manrique: “Rasgos fundamentales de la historia agraria peruana, SS. XVI-XX” y
el de María Isabel Remy: “Historia agraria Cuzqueña, Balance y perspectivas”
por citar los más resaltantes, asimismo el SEPIA XV del año 2014 desde el tema
de ESTRATEGIAS DE VIDA, CAMBIOS EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y
CAMBIOS DEMOGRÁFICOS EN EL MUNDO RURAL, divulgó artículos como:
“Cambios en la ruralidad y en las estrategias de vida en el mundo rural. Una
relectura de antiguas y nuevas definiciones” de Alejandro Diez, “Más vecinos,
más distrito: la transición de la tenencia de tierra y su relación con la formación
de una municipalidad de centro poblado en la Comunidad Campesina de
Chacán, Cusco” de Rafael Barrio de Mendoza entre otros.

De todos ellos nos parece relevante el balance desarrollado por María Isabel
Remy en 1990 que desde la variable de la comunidad campesina y la hacienda
muestra los mecanismos a partir del cual se ha dado el acceso a la tierra desde
la colonia, es interesante y de argumento actual la interrogante bajo el cual guía
su trabajo:
Cómo surge una estructura agraria producto de la invasión
española; como se procesaron nuevas relaciones; hasta qué punto
el nuevo sistema fue completamente importado, o un producto
nuevo, americano, fruto de la readecuación conflictiva de lógicas
diferentes, son todas preguntas a las que nos remite el análisis del
S. XVI, sobre el que la bibliografía agraria no es particularmente
generosa.7

7
REMY SIMATOVIC, María Isabel. Historia agraria cusqueña. Balance y perspectivas. En: Perú: el
problema agrario en debate. SEPIA III; 1990. p. 65. La negrita y el subrayado es nuestro.

XV
Para el final hemos dejado la propuesta teórica en relación a la tenencia de
tierras en el periodo prehispánico y sus cambios y adecuaciones tras la irrupción
colonial. Se sabe que la propiedad de la tierra en el periodo prehispánico es más
amplia y mucho más complicada que la clásica división garcilasista que desvirtúa
por completo el acceso a la tierra dividiéndolas en tres segmentos: del pueblo,
del sol y del Inca.

Desde los primeros trabajos de María Rostworowski, John Rowe y John Murra,
se conoce que las formas de tenencia de la tierra en el Tawantinsuyu eran
mucho más amplias y complejas: el acceso a la tierra era un derecho de todos
los segmentos de la población, el Inka y la elite usufructuaban grandes espacios
de tierra para su propio beneficio y no necesariamente con fines agrícolas, las
tierras del Inka, junto a las que se señalaban para el Sol y las Wak’as
sacralizaban estos lugares, etc8.

Todos estos aspectos y su adaptación a una nueva trama social han sido poco
investigados en el Cusco. Luis Miguel Glave y María Isabel Remy han mostrado
como a partir de manipular e introducir las normas de descendencia andina en el
derecho colonial, miembros de la nobleza inka lograron no solo mantener
privilegios de linaje real sino también acceder a ingentes cantidades de tierras en
Ollantaytambo y el valle de Yucay.9

III.2.2. La prospección como técnica del trabajo histórico.

Generalmente se define el término prospección desde el significado comercial y


arqueológico; en el primer caso la prospección comercial se refiere a la

8
Cfr. ROSTWOROWSKI DE DIEZ CANSECO, María. “Nuevos datos sobre tenencia de tierras reales en el
Incario.” En: Revista del Museo Nacional. Tomo XXI. Lima 1962. Pp. 130-159. ROWE, John. “las tierras
reales de los Inkas.” En: VARON GABAI, Rafael Y FLORES ESPINOZA, Javier (Comp.). Arqueología,
antropología e historia de los andes: homenaje a María Rostworowski; Lima; IEP. 1997 y MURRA, John V.
“Derecho a tierras en el Tawantinsuyu.” En: MURRA, John V. El Mundo Andino. Población, medio
ambiente y economía. Lima; IEP; 2002.

9
GLAVE TESTINO, Luis Miguel y REMY SIMATOVIC, María Isabel. Estructura agraria y vida rural en una
región andina. Ollantaytambo entre los siglos XVI y XIX. Cusco; CBC. 1983.

XVI
búsqueda organizada que se basa en el uso de técnicas diseñadas
especialmente para hallar potenciales clientes para un negocio determinado. Se
trata de un punto fundamental para maximizar el éxito de una empresa y atraer a
nuevos inversores.

Desde la arqueología la prospección es conceptuada como: “la aplicación de un


conjunto de técnicas para optimizar las probabilidades de descubrimiento de los
materiales culturales que caracterizan el registro arqueológico en el ámbito de un
espacio geográfico conceptualmente definido”.10

Francisco Javier Morales precisa que la prospección puede ser entendida en tres
sentidos diferentes:

x Como un trabajo previo a la excavación: es decir, se prospecta para


conocer la riqueza arqueológica de una determinada zona y a partir de
ese conocimiento plantear una excavación en el yacimiento que ofrezca
mejores posibilidades “apriori”.

x Como actividad complementaria posterior a la excavación: la prospección


también se organiza en ocasiones con la finalidad de complementar la
información obtenida con la excavación de un yacimiento, que de este
modo resulta más comprensible al ser contextualizado en su entorno.

x Como una actividad arqueológica con entidad propia: cada vez es más
frecuente plantear proyectos de prospección independientes, con
objetivos intrínsecos que no dependen de otro tipo de intervención
arqueológica previa o posterior.11

10
GALLARDO, Francisco y CORNEJO, Luis E. “El diseño de la prospección arqueológica: un caso de
estudio”. En: Revista Chungara; N° 16-17. 1986. p. 410.

11
MORALES HERVÁS, Francisco Javier. Prospección y excavación: Principios metodológicos básicos.
España; Universidad de Castilla la Mancha. 2002. p.2.

XVII
En las últimas décadas y gracias a la influencia de la ecología y el boom de la
arqueología del paisaje cada vez son más recurrentes, principalmente en
Europa, los estudios históricos interesados en analizar los impactos positivos y
negativos que se da a partir de la presencia antrópica en un ambiente natural,
aunque cabe aclarar que estos estudios siempre parten de la arqueología y no
tanto así desde la historia como disciplina social.

Por otro lado desde los estudios multidisciplinarios e interdisciplinarios


desarrollados en el Perú a partir del Proyecto Qhapaq Ñan del Ministerio de
Cultura se han planteado, especialmente en el Cusco, estudios de carácter
histórico que desde la metodología del análisis del espacio han intentado
desarrollar a partir de la contrastación del dato histórico recopilado en los
archivos generar una incipiente prospección territorial extensiva en busca de un
mejor entendimiento del ámbito geográfico por donde discurre la diversidad de
caminos del sistema vial andino.

III.3.- HIPOTESIS.

El proceso de la tenencia de tierras, pasó por diferentes etapas a partir de los


acontecimientos históricos en el periodo de la segunda mitad de siglo XVI ya
que parte de la nueva distribución (manejo de tierras) se dio con los alcances
de la repartición de tierra tanto a naturales como españoles, los cuales a su vez
han afectado a la supervivencia toponímica en el valle de Yucay.

3. 1 Tras la irrupción colonial la tenencia de la tierra en el valle de Yucay sufrió


un proceso de cambio y transformaciones singulares. El principal cambio se
denota en la perdida de la categoría de espacio sacralizado que tenía este
lugar a partir del usufructo y la presencia del Inka y su elite en ella. Después
de la conquista hispana el valle de Yucay pasó a ser simplemente una
institución económica colonial, es decir una encomienda arbitrariamente
aprovechada por el conquistador Francisco Pizarro. La coyuntura de
inestabilidad del primigenio sistema colonial es aprovechada por la población
indígena advenediza en el valle de Yucay conformada por mitimaes y
yanaconas asentados por el Inka para su servicio personal, quienes

XVIII
aprovechan el momento de crisis de los años de 1537 a 1548 para acceder
al dominio de las llamadas “tierras vacas” existentes en el valle.

3. 2 Después de la segunda mitad del siglo XVI la dinámica y las


transformaciones en cuanto al manejo de la tierra son bastante complejas.
Cuando en 1551 se extingue la encomienda detentada por Francisco Pizarro
y administrada por don Francisco Chilche; los mitimaes, yanaconas e
indígenas originarios, descendientes de los últimos soberanos inkas y
españoles; configuran utilizando mecanismos occidentales de pertenencia
una dinámica de apropiación legal de las tierras que habían en el periodo
prehispánico de propiedad personal de la antigua elite del Tawantinsuyu,
esta transformación se consolida de mejor manera a partir de la instauración
de las reducciones toledanas de 1572 y la primera visita y composición de
tierras en 1594.

3. 3 Actualmente se tiene una pervivencia bastante fuerte de la memoria


histórica de la población local de los distritos de Urubamba, Yucay y
Huayllabamba en relación a los topónimos del siglo XVI y su ubicación geo
referencial.

XIX
IV.- METODOLOGIA DE LA INVESTIGACIÓN.

IV.1.- TIPO Y NIVEL DE LA INVESTIGACIÒN.

IV.1.1. Tipo de Investigación.


Como trabajo histórico el tipo de investigación que desarrollaremos es de
carácter cualitativo, en cuanto este es un estudio que busca desde el caso
particular interpretar y explicar el proceso de la tenencia de tierras en el valle de
Yucay durante la segunda mitad del siglo XVI.

IV.1.2. Nivel de la Investigación

En cuanto al nivel de la investigación, se plantea desarrollar el proyecto desde


dos niveles correlativos:

a. Como investigación descriptiva. En base a la amplitud de información


emanada de las fuentes cronísticas de los siglos XVI y XVII su contrastación
y la documentación histórica ubicada principalmente en el Archivo Regional
del Cusco se plantea desarrollar una descripción del contexto del espacio del
valle de Yucay durante el periodo de nuestro trabajo (1550-1600).

b. Como investigación explicativa. Segundo paso del proyecto de


investigación está centrado en el análisis y la explicación del fenómeno del
proceso de la tenencia de tierras en el ámbito del trabajo de investigación. El
objetivo crucial de nuestro trabajo es entender y explicar el proceso de cambio
y transformación de la tenencia de tierras y la dinámica y las transformaciones
del manejo de la tierra en el valle de Yucay durante la segunda mitad del siglo
XVI.

XX
IV.2.- MATERIALES.

IV.2.1. Material documental de archivo.

Se utilizarán las fuentes documentales ubicadas en el Archivo Regional del


Cusco, poniendo especial énfasis en la documentación que abarca el periodo
del Siglo XVI. En ese entender se toma en cuenta los fondos de:

A. Cabildo del Cusco. Institución de gobierno local que ejercía la triple


función de cabildo, justicia y regimiento. Las secciones a revisar son:
¾ Libros de Cabildo. De los 35 libros que contiene esta sección se
revisaran los 08 primeros libros que abarcan todo el siglo XVI, a la fecha
se tienen revisados los siguientes:

- Libro N° 01. 1545-1551.


- Libro N° 03. 1559-1560.
- Libro N° 04. 1561-1564.

¾ Causas Civiles. Con 90 legajos y 2632 cuadernos que contiene


información desde los años de 1549 a 1824, la existencia del catálogo
elaborado por Decoster y Mendoza (2001) nos permite tener un
panorama completo de la información que contiene esta sección y
seleccionar aquellos cuadernos que son de interés para nuestro trabajo,
entre ellos tenemos:

- Legajo N° 07. 1656-1659. Cuaderno 07. Información presentada por don


Hernando Mantilla (…) sobre la posesión de las tierras nombradas
Acoscapampa y Chilcapata en la villa de Yucay.

- Legajo N° 08. 1660-1666. Autos seguidos por don Francisco de Medina,


hacendado en el Marquesado de Oropesa, sobre censo impuesto en las
haciendas de Guaylla, en la villa de Yucay (…).

XXI
- Legajo N° 47. 1778-1779. Cuaderno 24. Exhortos librados para que se
realicen los inventarios de la casa de la villa de Yucay y de las
haciendas Guainabamba, Cocha Sondor (…) que están en Urubamba
(…)
- Legajo N° 78. 1810-1811. Cuaderno 11. Petición presentada por doña
Melchora Aedo, solicitando que se archiven los testimonios del remate
que se hizo a su favor de la hacienda de Chicón Grande en Urubamba.

B. Corregimiento. Órgano de gobierno, regentado por una autoridad


política designada por el virrey, que abarcaba en su jurisdicción un
ámbito geográfico de 10 leguas a la redonda (más de 50 kilómetros
aproximadamente). Los cuadernos revisados son las siguientes:

¾ Causas Ordinarias. Contiene 64 legajos con 1442 cuadernos o


expedientes, esta sección fue igualmente catalogada por Decoster y
Mendoza (1997). Se ha revisado los cuadernos siguientes:

- Legajo N° 01. 1551-1585. Cuaderno 5. Autos seguidos por Gonzalo


Rodríguez, procurador, en nombre de doña Beatriz de Mendoza, hija
menor de don Diego de Mendoza, sobre el cumplimiento de una
provisión real para el cobro del capitán Gómez Arias de Ávila de 2000
pesos en tributos vacos.

- Legajo N° 01. 1551-1585. Cuaderno 6. Autos seguidos por doña Beatriz


de Mendoza, hija menor de don Diego Mendoza Ynga, difunto, contra
Gómez Arias sobre tributos de los indios de Yucay.

¾ Provincias. Causas Ordinarias. Con 12 legajos que abarcan los años de


1601 a 1677. A la fecha no se ha revisado aún esta sección.

C. Fondo Notarial. De este fondo nos interesa la sección del siglo XVI
compuesta por 38 protocolos notariales, por lo amplio que es esta
sección y la dificultad de la lectura de los mismos se ha planteado
XXII
revisar la producción protocolar del escribano Antonio Sánchez
principalmente por la secuencia cronológica que este tiene (véase el
cuadro I).

CUADRO I
PROTOCOLOS NOTARIALES DEL ESCRIBANO ANTONIO SÁNCHEZ 1566-1595
Escribano Protocolo Año Condición
Antonio Sánchez 16 1566-1567 Revisado
Antonio Sánchez 17 1568 Revisado
Antonio Sánchez 18 1569 Revisado
Antonio Sánchez 19 1570-1571 Revisado
Antonio Sánchez 20 1571-1595 Revisado
Antonio Sánchez 21 1571
Antonio Sánchez 22 1573-1574
Antonio Sánchez 23 1579-1582
Antonio Sánchez 24 1580-1585
Antonio Sánchez 25 1583-1584
Antonio Sánchez 26 1587-1600
Antonio Sánchez 27 1588-1590
Antonio Sánchez 28 1593-1594
Antonio Sánchez 29 1594-1595

D. Fondo Urubamba. Mucho más especificó en cuanto al ámbito de la


información que contiene. Al momento se ha revisado lo siguiente:

- Legajo 01. 1594-1693.

1690. Testimonio del título de propiedad de un medio topo en el sitio de


Marcacha en Urubamba. Contiene referencia a reparto hecho en 1595 por
Alonso Maldonado de Torres.

1569-1629. Testimonio de donación de 4 topos de tierras y sus buhíos en


Yucay que otorga doña Catalina Chimbo, mujer que fue de Guayna Capac
Ynga.

1594. Testimonio de la visita hecha por Alonso Maldonado en el valle de


Yucay. Contiene fragmentos del reparto de tierras hecho al Ayllu de los
Yngas del Cuzco.

1595. Testimonio del remate público que se hace de 20 fanegadas de


tierras ubicadas en el valle de Yucay y la quebrada de Guayocari.

Sin fecha. Testimonio incompleto de revisita de solares ubicados en el


pueblo de Yucay. Documento con hojas sueltas.
XXIII
E. Fondo Colección Betancur.
Compuesta por 11 libros forrados que contiene la probanza hecha por don
Felipe Betancur sobre el derecho que este tenía, como descendiente del Inka
Tupac Amaru, al Marquesado de Oropesa. De ellos es de especial interés el
Libro N° 03 que contiene la visita que se hizo en 1551 al valle de Yucay; el cual
se ha revisado y transcrito por la existencia de algunos errores en la
transcripción que hizo el doctor Horacio Villanueva Urteaga y que está
publicada en la revista N° 13. 1970 del Archivo Histórico del Cusco.

IV.2.2. Material documental bibliográfico y hemerográfico.

Contamos con el material bibliográfico y hemerográfico ubicado en el Centro de


Estudios Regionales Andinos “Bartolomé de las Casas” que cuenta con
material actualizado y con una amplia bibliografía sobre el proceso histórico de
las comunidades andinas, asimismo es de mucha utilidad toda la bibliografía
que podamos encontrar en la biblioteca especializada de ciencias sociales y en
la biblioteca central de la UNSAAC.

IV.3.- METODOS.

Para desarrollar nuestro trabajo de investigación nos guiaremos por los


siguientes métodos:

x Método Dialectico. Con ella podremos entender las interacciones,


fenómenos y cambios que se suscitaron en el área de nuestro estudio y
la relación que tuvo con los procesos coyunturales dados en el entorno
de la región del Cusco durante el periodo de nuestro trabajo.

x Método Histórico que es la forma de método científico específico de la


historia como ciencia social. Comprende las metodologías, técnicas y las
directrices mediante las cuales el historiador usa fuentes primarias y
otras evidencias históricas que ayuden a desarrollar un discurso
histórico.
XXIV
Dentro del Método Histórico será de uso obligatorio la técnica de la
Heurística procediendo así a la recolección y acopio de la información
primaria o documental que se pueda ubicar en el Archivo Regional del
Cusco y en el Archivo Arzobispal.

Con la técnica de la Hermenéutica se procederá a seleccionar, ordenar y


analizar toda la información documental obtenida con la finalidad de
establecer también su veracidad conjuntamente de la información
secundaría.

x Método inductivo. Con ella se busca explicar y concluir a partir del caso
particular del valle de Yucay la problemática de la tenencia de tierras en
el marco temporal de 1550 a 1660 en el ámbito macro de la región del
Cusco.

x Método Analítico. Desde la descomposición de los modos de tenencia


de tierras que se dieron en el valle de Yucay antes y después de la
presencia colonial, intentaremos ver las características preexistentes y
modernas en cuanto a la propiedad de la tierra en nuestro periodo de
estudio. Asimismo, este mismo método nos será de utilidad en cuanto a
la pervivencia y cambios en el conocimiento toponímico del espacio del
valle de Yucay.

XXV
V.- CRONOGRAMA.

CRONOGRAMA PROYECTO DE TESIS: TENENCIA DE TIERRAS Y PROSPECCIÓN HISTORICA DEL VALLE


DE YUCAY:1550-1600
Tiempo 2017 2018 2019

Septiembre

Octubre

Noviembre

Diciembre

Septiembre

Octubre

Noviembre

Diciembre
mayo

Junio

Julio

Agosto

Enero

Abril
Febrero

Junio

Julio
Marzo

Mayo

Agosto

Enero
Actividad / Mes

Proyecto de investigacion * * * * * * * * * * *

Acopio de Información * * * * * * * * * * * *

Analisis y procesamiento
de Información * * * * * * * * * *

Síntesis y redacción * * * * * * * * * * *
Revisión * * * * * * * * * * * *
Presentación *

VI.- FINANCIAMIENTO Y PRESUPUESTO.

El financiamiento de los gastos que irrogaran el desarrollo del trabajo de


investigación corre a cuenta de nosotras las tesistas. Los cuales vamos a
detallar en el siguiente cuadro:

Descripción Costo
Carné Archivos Regional y Arzobispal del Cusco 120.00
Carné de acceso a Biblioteca Bartolomé de las Casas 240.00
Material de escritorio 300.00
Material de seguridad y/o protección 150.00
Pago por fotocopia y/o digitalización de 500.00
documentación histórica relevante
Fotocopia de material bibliográfico y hemerográfico 300.00
Adquisición de material bibliográfico y hemerográfico 150.00
Impresiones- correcciones y escaneos 500.00
Anillados, empastados y encuadernado 600.00
Pasajes y viáticos 1,900.00
Gastos diversos (internet, memoria USB, CD) 650.00
TOTAL 5,410.00

XXVI
VI.- ESQUEMA DE LA INVESTIGACION.

CAPITULO I
EL VALLE DE YUCAY: FINCA PARTICULAR DE LOS INKAS

1.1. Los cronistas y viajeros y su visión del valle de Yucay.

1.1.1. El Valle de Yucay y las crónicas de los siglos XVI y XVII

1.1.2. Los siglos XVIII, XIX y XX: Cosmógrafos, viajeros y


enciclopedistas.

1.2. Síntesis de la evidencia arqueológica preinka del Valle de Yucay.

1.3. El valle de Yucay durante el apogeo del Estado Inka (1400 d. C –


1532 d. C.)

1.3.1. Los Inkas históricos y la sacralización del Valle de Yucay.

1.3.2. Yucay y Qespiwanka: Finca particular de Wayna Qhapaq.

CAPITULO II
TENENCIA DE TIERRAS EN EL VALLE DE YUCAY. 1550-1600

2.1. El proceso de la encomienda en el valle de Yucay

2.2. El proceso de la reducción de indios de 1558 y 1572 en el valle de


Yucay.

2.2.1. Las reducciones de Urcos, Cachi y Yucay, primera


agrupación de naturales y advenedizos en el valle de Yucay.

2.2.2. El proceso de la reducción Toledana en el valle de Yucay.

2.3. La merced como forma de acceso a la tierra en el valle de Yucay.

2.3.1. Urcosbamba y la merced de tierras de 1551.

2.3.2. El cabildo del Cusco y merced de tierras en el valle de


Yucay.

2.4. El valle de Yucay y la primera visita y composición de tierras de 1594.

2.5. El proceso de compra venta de bienes inmuebles en el valle de


Yucay: 1550-1599.

XXVII
CAPITULO III
PROSPECCION Y CONTRASTACION HISTÓRICA DEL VALLE DE YUCAY

3. 1 Sistematización de topónimos en relación a la tenencia de tierras en el


valle de Yucay en el siglo XVI.

3. 2 Breve referencia de los espacios toponímicos más resaltantes del Valle de


Yucay vistos a partir de la documentación etnohistórica.

3. 3 Prospección y contrastación de topónimos y la memoria oral del


poblador actual del valle de Yucay.

3. 4 Cartografía temática toponímica.

3.4.1 Cartografía Histórica del Valle de Yucay.


3.4.2 Cartografía Toponímica Histórica.

XXVIII
Matriz de Consistencia
NIVEL PLANTEAMIENTO DEL HIPÓTESIS OBJETIVOS METODOLOGÍA
PROBLEMA
¿Cuál fue el proceso para la tenencia El proceso de la tenencia de tierras, pasó por diferentes etapas a partir Determinar el proceso de cambio de la tenencia de Tipo de Investigación
de tierras, el manejo de las mismas de los acontecimientos históricos en el periodo de la segunda mitad de siglo XVI tierras y la dinámica de las transformaciones del
entre los años 1550 a1600 y la ya que parte de la nueva distribución( manejo de tierras) se dio con los alcances manejo de la tierra en el valle de Yucay entre los
General pervivencia toponímica en los de la repartición de tierra tanto a naturales como españoles, los cuales a su vez años de 1550 a 1600 De carácter cualitativo
distritos de Huayllabamba, Yucay y han afectado a la supervivencia toponímica en el valle de Yucay.
Urubamba? en cuanto este es un
estudio que busca
Específico ¿Cómo se dio el proceso de cambio Tras la irrupción colonial la tenencia de la tierra en el valle de Yucay sufrió un Construir a partir de la información etnohistórica y
desde el caso particular
y transformación de la tenencia de proceso de cambio y transformación singulares. El principal cambio se denota en la arqueológica existente, un análisis del manejo de
01 tierras en el valle de Yucay tras el perdida de la categoría de espacio sacralizado que tenía este lugar a partir del las tierras del valle de Yucay durante el periodo interpretar y explicar el
primer momento de la conquista usufructo y la presencia del Inka y su elite en ella. Después de la conquista hispana prehispánico.
proceso de la tenencia
española? el valle de Yucay pasó a ser simplemente una institución económica colonial, es
decir una encomienda arbitrariamente aprovechada por el conquistador Francisco de tierras en el valle de
Pizarro. La coyuntura de inestabilidad del primigenio sistema colonial es
Yucay durante la
aprovechada por la población indígena advenediza en el valle de Yucay conformada
por mitimaes y yanaconas asentados por el Inka para su servicio personal, quienes segunda mitad del siglo
aprovechan el momento de crisis de los años de 1537 a 1548 para acceder al
XVI.
dominio de las llamadas “tierras vacas” existentes en el valle.

Especifico ¿Cuál fue la dinámica y las Después de la segunda mitad del siglo XVI la dinámica y las transformaciones en Estudiar la dinámica y transformación de la
transformaciones del manejo de la cuanto al manejo de la tierra son bastante complejas. Cuando en 1551 se extingue configuración territorial del valle de Yucay en los Nivel de Investigación.
02 tierra y asentamiento poblacional en la encomienda detentada por Francisco Pizarro y administrada por don Francisco años de 1550 a 1600.
el valle de Yucay entre los años de Chilche, mitimaes, yanaconas e indígenas originarios, descendientes de los últimos
1550 a 1600? soberanos inkas y españoles configuran, utilizando mecanismos occidentales de Descriptiva.
pertenencia una dinámica de apropiación legal de las tierras que habían en el
periodo prehispánico de propiedad personal de la antigua elite del Tawantinsuyu,
esta transformación se consolida de mejor manera a partir de la instauración de las Explicativa.
reducciones toledanas de 1572 y la primera visita y composición de tierras en
1594.

Específico ¿Cuál fue el proceso de pervivencia Actualmente se tiene una pervivencia bastante fuerte de la memoria histórica de la Contrastar en el espacio actual de piso de valle de
y cambio de las referencias población local de los distritos de Urubamba, Yucay y Huayllabamba en relación a los distritos de Huayllabamba, Yucay y Urubamba
03 toponímicas del siglo XVI en relación los topónimos del siglo XVI y su ubicación geo referencial. la pervivencia y ubicación de topónimos históricos
al piso de valle de los distritos de del siglo XVI.
Huayllabamba, Yucay y Urubamba?
INTRODUCCIÓN

La presente tesis nombrada “Tenencia de tierras y prospección histórica del


valle de Yucay: 1550-1600 se ha desarrollado con información obtenida de
fuentes primarias del Archivo Regional del Cusco; como son los protocolos
notariales, libros de cabildo, también parte de bibliografía de autores que han
tocado a grandes rasgos la prospección histórica del valle. En base a ello nos
hemos formulado la problemática por entender y explicar el correcto proceso de
cambio de la tenencia de tierras y la dinámica de las transformaciones del
manejo de la tierra en el valle de Yucay durante la segunda mitad del siglo XVI.

Al mismo tiempo desarrollar el trabajo de campo o prospección en dicho espacio


geográfico con fines de ubicar in situ – a partir del dato histórico y de la memoria
oral de la población – la gran cantidad de topónimos existentes en la
documentación histórica del siglo XVI y generar una cartografía histórica
temática sobre el tema.

Como tal hemos desarrollado 3 secciones de investigación. El Valle de Yucay:


Finca particular de los Inkas, el cual es título del Capítulo I, parte desde un
conocimiento descriptivo de la geografía del valle de Yucay en el proceso de los
siglos XVI al XX, para ellos nos hemos valido de las fuentes etnohistóricas
existentes a la fecha tales como: crónicas, descripciones geográficas y relatos de
viajeros y enciclopedistas que de manera casi unánime ponderan la belleza
paisajística y la riqueza agrícola y cultural de este espacio de la región del
Cusco.

Justamente estas condiciones bastante peculiares de la geografía del valle de


Yucay han permitido una presencia antrópica constante en ella, la cual data aún
desde inicios del periodo arcaico (9500 a. C – 2500 a. C.), y transcurre de
manera constante hasta el periodo de los llamados Inkas históricos que es
cuando este valle adquiere la connotación de un espacio sagrado, tan similar al
que tenía el valle del Cusco. Yucay es un espacio predilecto donde la divinidad
1
solar y la realeza Inka representada por los Inkas Topa Inka Yupanqui y Wayna
Qhapaq y sus panakas reales sacralizan y adecuan la geografía del valle con
obras arquitectónicas religiosas, suntuarias y de carácter agrícola y que al
presente están simbolizadas en algunos espacios arqueológicos como los
andenes de Yucay y el sitio de Quespiwanka. Es necesario señalar que para
desarrollar esta parte del capítulo I ha sido necesario recurrir a más de la
documentación histórica, a la investigación arqueológica desarrollados por
investigadores renombrados como son: Miriam Araoz, Ian Farrington, Susan
Niles, Brian Bauer y Alan Covey.

Con el capítulo II nos adentramos al fin principal de nuestro trabajo de


investigación; el proceso de tenencia de tierras en el valle de Yucay entre los
años de 1550 a 1600, las fechas son casi coincidentes con el momento en que la
encomienda de Yucay, instaurada por Francisco Pizarro desde inicios de la
conquista, pasa a manos de la corona española (1551) y también con el proceso
de la primera visita y composición de tierras (1595), en el ínterin de estos dos
acontecimientos se da asimismo en el valle de Yucay una serie de
acontecimientos particulares como es el caso de la merced de tierras de
Urcosbamba de 1551 por el cual el cabildo del Cusco reparte tierras en la actual
quebrada de Urquillos a vecinos españoles afincados en esta ciudad o la
instauración de la primera reducción de indios implementada en el valle de
Yucay en 1558, proceso de control y desarticulación territorial indígena que a
nivel de la región del Cusco se dio, hasta donde sabemos, solamente en este
valle y que sería luego reemplazada por las reducciones Toledanas de 1572,
general en el ámbito de la región cusqueña.

Todos estos acontecimientos, están sustentados en la documentación recabada


en el Archivo Regional del Cusco (ARC), los cuales junto a información recabada
en los Libros de Cabildo y con una revisión de parte de los protocolos notariales
del siglo XVI con fines de recabar escrituras de compraventa y/o donaciones de
tierras nos ha permitido tener un conjunto de información, los cuales han sido
procesados en una serie de cuadros en formato Word y en una ficha en formato
Excel denominada “Ficha de registro de record de tenencia de tierras en el valle
2
de Yucay: 1550 – 1600”. Esto no significa que se haya recabado toda la
información existente en el Archivo Regional del Cusco sobre el tema central de
nuestra investigación. Siendo conscientes de ello, queda por ubicar y
sistematizar mucha más información sobre el proceso de la tenencia de tierras
en el valle de Yucay, del cual se puede hacer un análisis histórico más profundo.
Finalmente en el capítulo III desarrollamos en primer término la sistematización
de los topónimos ubicados en la documentación recopilada para luego contrastar
y entrevistar a la población con el fin de ubicar, referenciar y generar una
cartografía temática de esta gran cantidad de topónimos (155 en total) que
señalan espacios productivos y de residencia en el valle de Yucay durante el
siglo XVI. Los resultados no han sido los esperados en un primer momento y
muestran un proceso de cambio que se ha dado desde tiempo atrás en el
manejo y conocimiento territorial y que sería interesante poder contrastar de
mejor manera en un proceso de larga duración.

3
CAPITULO I
EL VALLE DE YUCAY: FINCA PARTICULAR DE LOS INKAS

1.1 Los cronistas y viajeros y su visión del valle de Yucay.

1.1.1 El Valle de Yucay y las crónicas de los siglos XVI y XVII.

Antes de la primera mitad del siglo XVI las crónicas y sus relatos son poco
expresivos en cuanto a la descripción del entorno geográfico por donde
transitan, salvo la descripción que hacen de la ciudad del Cuzco y de
Saqsaywaman, los cronistas en un primer momento (1532-1540) están más
preocupados en informar a la corona acerca de los descubrimientos hechos y
de las penurias que han pasado en efectuarlas y consolidarlas.
A partir de 1540 es cuando se dan las primeras aproximaciones concretas en
relación a los Incas y su cultura, acercamientos que se dan especialmente
desde la misma corona, ejemplo de ello son las informaciones de los antiguos

4
quipocamayos (1544); el cual fue un interrogatorio elaborado por mandato de
Cristóbal Vaca de Castro.12

Después de 1550 el interés por la historia Inca y el entorno geográfico en el


cual se estableció este estado es mucho más evidente y es justamente a partir
de este momento en que contamos con los primeros escritos que hablan
acerca de las características ambientales y paisajísticas del valle de Yucay.

En efecto, Pedro Cieza de León (1553) es el primero de los españoles que


desarrolla un relato bastante pormenorizado de este valle, en su Crónica del
Perú expresa lo siguiente:

Cuatro leguas desta ciudad del Cuzco, poco más o menos, está
un valle llamado de Yucay, muy hermoso, metido entre el altura
de las sierras, de tal manera, que con el abrigo que le hacen es de
temple sano y alegre, porque ni hace frio demasiado ni calor,
antes se tiene por tan excelente, que se ha platicado algunas
veces por los vecinos y regidores del Cuzco de pasar la ciudad a
él, y tan de veras, que se pensó poner en efeto. (…) En este valle
de Yucay han puesto y plantado muchas cosas de las que dije en
el capítulo precedente. Y cierto en este valle y en el de Bilcas, y
en otros semejantes (según lo que paresce en lo que agora se
comienza), hay esperanza que por tiempos habrá buenos pagos
de viñas y huertas, y vergeles frescos y vistosos. Y digo en
particular más deste valle que de otros, porque los ingas lo
tuvieron en mucho, y se venían a él a tomar sus regocijos y
fiestas; especialmente Viracocha inga, que fue abuelo de
Topainga Yupangue. Por todas partes del se ven pedazos de
muchos edificios y muy grandes que había, especialmente los que
hubo en Tambo, que está el valle abajo tres leguas, entre dos
grandes cerros, junto a una quebrada por donde pasa un arroyo.
Y aunque el valle es del temple tan bueno como de suso he dicho,
lo más del año están estos cerros bien blancos de la mucha nieve
que en ellos cae. En este lugar tuvieron los ingas una gran fuerza
de las más fuertes de todo su señorío, asentada entre unas rocas,
que poca gente bastaba a defenderse de mucha (…).13

12 Para un entendimiento más amplio de los cronistas y las crónicas de los siglos XVI y XVII es
de necesaria consulta: PEASE G. Y., Franklin. Las Crónicas y los Andes. Lima; Fondo de Cultura
Económica; 1995.
13 CIEZA DE LEÓN, Pedro. /1553/ La Crónica del Perú. Madrid: Espasa Calpe; 1962. Pp. 216-
217.
5
Cristóbal de Molina, el chileno, (1553) retrotrayendo los momentos de la
rebelión de Manco Inca (1536) y el momento en que Diego de Almagro pasó
por este valle para encontrarse con el Inca rebelde expresaba que: “este valle
es muy fértil, y lleva por todo el un rio que de invierno es grande y bien
caudaloso y pasase con dificultad y de la una parte y de la otra del valle hay
grandes y bien altas sierras.”14

Desde 1553 hasta 1590, salvo algunos aspectos relacionados a la historia


prehispánica y su relación con la presencia de los últimos soberanos Incas en
Yucay o de algunos episodios desarrollados en este lugar durante la rebelión
de Manco Inca, no hay mayor referencia a este valle. [Diego de Pizarro (1571),
Pedro Pizarro (1571), Sarmiento de Gamboa (1573)].

Fray Martín de Murúa (1590) recogió la versión del mito de los nevados de
Sawasiray y Pitusiray en la cual de soslayo dice: “En esta cordillera y sierra
neuada, que esta ensima del valle de Yucay (quatro leguas del Cuzco, famoso
por sus muchas guertas y recreaciones) llamada Saua Siray, guardaua el
ganado blanco del sacrificio, que los yngas ofrecian al Sol, vn yndio, natural de
los Lares, llamado Acoitapia (…)”.15

En otro momento de su crónica Murua dice que la leña con que se abastecía a
los habitantes de la ciudad del Cuzco colonial provenía de las quebradas de
este valle el cual era: (…) regaladisimo y fertilísimo de todas las frutas de
Castilla, donde se dan los durasnos, peras y mansanas en tanta multitud, que
se pudieron cargar flotas dellas.16

Garcilaso de la Vega (1611) expresó que este valle aventajaba a todos los
existentes en el Perú. El clima templado, la abundancia de agua, pastos y caza
habían hecho de este lugar el sitio preferido de los soberanos Inkas, quienes

14 MOLINA, Cristóbal de. (El Chileno). /1553/. Relación de las muchas cosas acaecidas en el
Perú. En: Crónicas Tempranas del Siglo XVI. Tomo II. Cusco: DDC-Cusco; 2017. p. 140.
15 MURUA, Fray Martín de. /1590/ Historia general del Perú, origen y descendencia de los
Incas. Madrid: Instituto Gonzalo Fernández de Oviedo, 1964. p. 314.
16 Ídem, p. 415.
6
desde Manco Capac hasta el último de ellos lo habían convertido en su jardín
particular:

Aquel valle se aventaja en excelencia a todos los que hay en el


Perú, por lo cual todos los Reyes Incas, desde Manco Capac, que
fue el primero, hasta el último, lo tuvieron por jardín y lugar de sus
deleites y recreación donde iban a alentarse de la carga y
pesadumbre que el reinar tiene consigo, con los negocios de paz
y de guerra que perpetuamente se ofrecen. Está cuatro leguas
pequeñas al nordeste de la ciudad; el sitio es amenísimo, de aires
frescos y suaves, de lindas aguas, de perpetua templanza, de
tiempo sin frio ni calor, sin moscas ni mosquitos ni otras
sabandijas penosas. Esta entre dos sierras grandes; la que tiene
al levante es la gran cordillera de la Sierra Nevada, que con una
de sus vueltas llega hasta allí. Lo alto de aquella sierra es de
perpetua nieve, de la cual descienden al valle muchos arroyos de
agua, de que sacan acequias para regar los campos. Lo medio de
la sierra es de bravísimas montanas: la falda de ella es de ricos y
abundantes pastos llenos de venados, corzos, gamos, huanacus y
vicuñas y perdices, y otras muchas aves, aunque el desperdicio
de los españoles tiene ya destruido todo lo que es cacería. Lo
llano del valle es de fertilísimas heredades, llenas de vinas y
árboles frutales y cañaverales de azúcar que los españoles han
puesto.17

De la misma opinión era Vasco Contreras de Valverde (1649) quien, por su


clima y su cercanía a la ciudad del Cusco, compara a Yucay con Aranjuez, fértil
valle del Tajo superior en la España Central a 40 kilómetros de Madrid:

A las vertientes de esta valle está el de Yucay, el cual es un


Aranjuez hermosísimo donde se dan flores todo el año; las
huertas, jardines y amenidades con la variedad de frutos que
produce, le hacen vistoso y precioso: danse melocotones,
duraznos, manzanas, ciruelas, fruta de damas, damascos,
albarcoques, lucmas, peras, fruta del Paraíso, de Marisanchez,
con otros diversos ingertos; hacense regalos en dulzura y
diversidad sin ventaja a los pezigos de Portugal y zirguelas de
Génova; labranse cada año gran cantidad de conservas de
rallado, carne de orejones y cubiertos, de que proveen los que
tienen huertas en aquel valle, con gran suma de arrobas a Lima,
Potosí y otras partes; riégale un rio grande, que desde el pueblo

17 GARCILASO DE LA VEGA, Inca. /1609/ Comentarios Reales de los Incas. Cusco: Universidad
Nacional de San Antonio Abad del Cusco, 1960. P.227.
7
de Guayllabamba hasta el de Tambo, por ambas riberas es todo
una floresta.18

Existe en el Archivo General de Indias una pequeña relación anónima e


incompleta que según Jiménez de Espada pueda datar de los años de 1571-
1572. Esta relación es interesante porque a más de describir las bondades del
lugar recuerda el año de 1551, cuando el cabildo del Cusco obtuvo merced de
la corona para que se entregue solares en Urquillos a los vecinos feudatarios
de la ciudad, el documento pondera que lo benigno de su clima hizo que los
moradores de la ciudad llevasen a criar a sus hijos al valle de Yucay,
alejándolos del clima frio del Cusco.

(…) el de Yucay, cuatro leguas de allí, donde hay muy ricas casas
y huertas y heredades de vecinos del Cuzco y muchas arboledas
y un rio que lleva sardinas blancas / Dase mucha fructa. En este
valle era la recamara del inga y su recreación, porque es el temple
más apacible y no tan frio como el del Cuzco. Dieronse en el,
solares a todos los vecinos del Cuzco, porque al principio
que se descubrió la tierra, no se criaban niños en el Cuzco y
llevanlos a criar allí.19

En 1689, los curas de Urubamba, Yucay y Guayllabamba, ubicados en el


ámbito del valle de Yucay, hacen sendas relaciones de aspectos demográficos
y socio económicos de las doctrinas a su cargo, de ellas resalta la relación que
hacen de las haciendas existentes en sus doctrinas, muchas de estas eran
pequeñas propiedades particulares fundadas en tierras que en algún momento
habían sido tierras de repartición de los indígenas y estaban dedicadas a la
producción de maíz y trigo y contaban con sus huertos de árboles frutales y
alfalfares. (Véase Cuadro N° 01).

18 CONTRERAS DE VALVERDE, Vasco. /1649/. Relación de la ciudad del Cuzco. Prologo y


transcripción de María del Carmen Martín Rubio. Cusco: Imprenta Amauta. 1982. p. 6.
19 JIMENEZ DE LA ESPADA, Marcos. Relaciones geográficas de Indias. Tomo 2. Biblioteca de
Autores Españoles. Madrid: Ediciones Atlas. 1965. Pp. 50-51.
8
Cuadro N° 01

Haciendas en Guayllabamba, Yucay y Urubamba en 1689


Guayllabamba Yucay Urubamba
ƒ Hacienda de don Agustín Luis ƒ Media Luna ƒ Chicón I
de Cabrera ƒ Pumamarca I ƒ Chicón II
ƒ Hacienda de don Manuel Ponce ƒ Pumamarca II ƒ Chicón III
de León ƒ San Francisco de Buena ƒ Guaynatambo
ƒ Hacienda de Luis Gómez Vista ƒ Guachac
ƒ Hacienda de Miguel Álvarez ƒ Pilcobamba ƒ Paca
ƒ Hacendados en Urquillos: ƒ Yucaybamba ƒ Charcaguaylla
1. D. Alejo de Salas y Valdez ƒ San Juan de Pilcobamba ƒ Pampacocha
2. D. Antonio Ortiz ƒ Acosca I ƒ Coto I con su molino
3. D. Jerónimo de Loayza ƒ Acosca II ƒ Coto II
4. D. Juan de Avalos y Toledo ƒ Guachac ƒ Moyoc
5. Antonio del Castillo ƒ Choquemaran ƒ Guascaraypampa
6. Pedro de Villanueva ƒ Quencoguazi ƒ Caracha Guaylla
7. Martín Sánchez ƒ Paracaypatta ƒ Chaucac
8. Pedro Silvestre ƒ Amacpongo ƒ Guaro
9. Melchor Jorge ƒ Colqueocaysumapata ƒ Yanaguara
10. Francisco Diez del Castillo ƒ Choquepuquio ƒ Patasguaylla
ƒ Canobamba ƒ Pomaguanca I
ƒ Condorpata ƒ Pomaguanca II
ƒ Paropatta
ƒ Obraje de Quispiguanca
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Cusco 1689. Documentos. Cusco; Centro
Bartolomé De Las Casas. 1982. Pp. 271-276.

1.1.2 Los Siglos XVIII XIX y XX: Cosmógrafos, viajeros y


enciclopedistas.

El siglo XVIII trajo consigo un momento de inflexión en cuanto al conocimiento


que se tenía del ámbito geográfico de las colonias españolas en América. La
corona, tras las reformas borbónicas, replanteo la necesidad que se tenía de
conocer las características geográficas de los territorios que conformaban sus
dominios. Los cosmógrafos mayores, cargo que existía en el Perú desde el
siglo XVII, son los encargados de desarrollar esta labor para lo cual solicitaban
información a corregidores y autoridades locales. De ellos resalta Cosme
Bueno (1711-1798), quien escribe una diversidad de relaciones geográficas del
virreinato del Perú en una serie intitulada “el conocimiento de los tiempos”,
compiladas luego entre 1759 hasta 1776 en su obra “Colección geográfica e
histórica de los arzobispados y obispados del Reyno del Perú, con las
descripciones de las provincias de su jurisdicción” En una de ellas trata
justamente: de “la descripción de las provincias pertenecientes al Obispado del
Cusco”, del cual tomaremos el que refiere a la provincia de Urubamba:
9
Tiene de largo 3 y media leguas y dos de ancho, dista 7 leguas
del Cuzco. Esta que se llamaba el Valle de Yucay, es el
Marquesado de Oropesa, que se le adjudicó entre otras cosas
para la subsistencia de su casa y familia a Sayritupac Inca,
quando don Andrés Hurtado de Mendoza, Marques de Cañete,
Virrey del Perú, lo convido a que saliese del incomodo retiro en
que estaba en Vilcabamba y después ha vuelto a unirse a la
Corona. Hay en su distrito varias haciendas en que se cogen trigo,
maíz y otros granos. Hay unas salinas cuya sal se lleva al Cuzco.
Es un pedazo de país alegre y ameno, abundante de frutas
exquisitas. Dividelo el río Vilcamayo que se pasa por 2 puentes de
Criznejas y cría bagres, muy regalados. Hay muchas familias de
Indios de noble origen, pero muy pobres. Tiene cerca de 59
habitantes.20

En 1784 el visitador y superintendente de la Real Hacienda en el Perú: don


Jorge Escobedo solicitaba al Intendente del Cusco don Benito de la Mata
Linares lo siguiente:

Estamos con dolor experimentando la falta que nos hacen las


noticias geográficas de todo el reino y a cada paso tropezamos en
el error o inconveniente a que sujeta aquella ignorancia y por lo
mismo es de la mejor importancia la formación de mapas
topográficos que el articulo 53 encarga con las individualidad que
expresa, pero no habiendo en el día ingeniero que los
desempeñen, no he podido solicitar del señor Virrey se destinen
para cada Intendencia y en el ínterin que S. M. los envie como voy
a suplicárselo, es muy conveniente que en las visitas del terreno
se adelanten los conocimientos e informes que con esta mira
previne en la advertencia.21

Cumpliendo dicha solicitud Mata Linares encargó al cosmógrafo Pablo Joseph


de Oricain confeccionase mapas de los partidos que conformaban la
Intendencia del Cusco con sus respectivas descripciones. En noviembre de
1786, Mata Linares enviaba el trabajo de Oricain; doce mapas de la jurisdicción

20 BUENO, Cosme. Colección geográfica e histórica de los arzobispados y obispados del Reyno
del Perú, con las descripciones de las provincias de su jurisdicción. Lima: S.F.; S.E. p.23. Edición
Digital.
21 APARICIO VEGA, Manuel Jesús. “cartografía histórica cuzqueña. Mapas del Cuzco existentes
en el Archivo General de Indias”. En: Revista del Archivo Histórico del Cuzco. N° 13. 1970. Pp.
186-187.
10
del Cusco y parte del limítrofe Qollao, entre estos mapas se encontraba el
partido de Calca y Urubamba, la parte que correspondía a Urubamba estaba
conformado por los curatos de Urubamba, Yucay, Huayllabamba y Maras, y
geográficamente descritos como:

Este país fue el que le adjudicó Dn. Andrés Hurtado de Mendoza


a Sayri Tupa Ynga con el título de Marquesado de Oropesa,
cuando la instó saliera del incomodo retiro de Vilcabamba y
finalizada esta prosapia se agregó a la Corona. Tiene de largo 3
½ leguas y 2 de ancho. Es país muy sano y fértil, produce mucho
y buen maíz y trigo, aunque no bueno, frutas de hueso,
manzanas, duraznos, nísperos, peras, ciruelas, frutillas, guindas,
capulies, limones, naranjas, todas berzas, hortalizas, legumbres y
muchas flores en unas quintas o haciendas llenas de huertas y
jardines, por lo que son las delicias de los vecinos del Cuzco, que
solo dista 6 leguas. Goza de mucha agua que derrama por sus
quebradas la Cordillera que se halla a una legua, la riega el río
Vilcanota abundante en pescados que se pescan en Pichingoto. 22

En 1789, Antonio de Alcedo publicaba en Madrid el “Diccionario Geográfico-


Histórico de las Indias Occidentales o América…”, obra de 5 tomos que
contiene una relación ordenada alfabéticamente de virreinatos, ciudades,
pueblos, villas y lugares que conformaban las colonias españolas en América.

La descripción que hace Alcedo, de la provincia de Urubamba en gran parte es


un calco del que años antes había hecho Cosme Bueno, siendo la diferencia
más saltante el equívoco que comete Alcedo cuando cambia el nombre del río
Vilcamayo por el de Pilcomayo:

Provincia y Corregimiento del Reyno del Perú, tiene solo tres


leguas y media de largo y dos de ancho, distante siete leguas del
Cuzco, llamabase valle de Yucay en tiempo de los Indios y es del
Marquesado de Oropesa, por haberse adjudicado con otras cosas
a Sairi Tupa Inca para la subsistencia de su casa y familia,
quando el Virrey de aquel Reyno Don Andrés Hurtado de

22 Ídem p. 192.

11
Mendiza, Marques de Cañete, le insto a que saliese del incomodo
retiro de Vilcabamba en que estaba, y después se volvió a unir a
la Corona; tiene en su distrito varias haciendas que producen
trigo, maíz y otros frutos y unas grandes salinas, de que se provee
el Cuzco; es país ameno, alegre, fértil y abundante de muchas
frutas exquisitas, pasa por medio de él el río Pilcomayo (sic) que
se pasa por dos puente de criznejas y cría muchos bagres de
delicado gusto, tiene diferentes familias de Indios de origen noble,
pero muy pobres, y el número de todos sus habitantes será de 50.
La capital es la Villa del mismo nombre, situada a la orilla del río
Pilcomayo al N del Cuzco 23

Trascurridos los años y con la república como forma de gobierno, se continuó


el interés por conocer a detalle el espacio territorial del naciente estado
peruano.

Quizá el más importante de los viajeros que recorrió el valle de Yucay haya
sido George Efraim Squier. El trabajo de este arqueólogo norteamericano fue
exhaustivo en cuanto a la descripción, la toma de imágenes el posterior dibujo
y levantamiento de los primeros planos a escala que se conocen de los sitios
arqueológicos que visitó. Para Squier Yucay era uno de los valles más
hermosos del Perú de la amplia descripción que hace rescatamos las partes
más resaltantes:

El valle de Yucay, probablemente el más bello del Perú, está


formado por el río Vilcanota, que vimos gotear desde el pequeño y
oscuro lago de La Raya, (…) está separado del bolsón del Cuzco
por una alta e irregular altiplanicie o puna cuya travesía demanda
un duro día de camino, aunque la distancia en línea recta supere
los 32 kilómetros (…) Aquí el viajero se detiene instintivamente,
porque el panorama ante él, por su belleza o esplendor, no es
superado por ninguno en que se haya posado sus ojos. Al frente
se eleva ese gigantesco espolón de los Andes que separa los
valles de Vilcamayo y Paucartambo, con sus ásperas escarpas de
roca desnuda, altos picos nevados y plateados glaciares, nítidos,
brillantes y diferenciados (…). Los grandes picos del Chicón,
Huacahuasi y Calca se encumbran con una majestad apenas

23 ALCEDO, Antonio de. Diccionario Geográfico-Histórico de las Indias Occidentales o América:


es a saber: de los Reynos del Perú, Nueva España, Tierra-Firme, Chile y Nuevo Reyno de
Granada. Tomo V. Madrid: Imprenta de Manuel Gonzales; 1789; p.262. Versión digital del
original ubicado en Duke University Library.
12
inferior a la del poderoso Sorta y con la aspereza de los alpinos
Jungfrau, Eiger y Matterhorn. (…) desde las brillantes crestas de
estas inmensas montañas, el ojo se desliza por toda gradación de
color y profundidad de sombra, más allá de grietas y escarpas,
hondonadas y precipicios hasta descansar en los graciosos
andenes o terrazas de los muy afamados jardines de Yucay. (…)
Aunque ahora estamos en pleno invierno y se ha levantado la
cosecha, el valle todavía resulta alegre con sus grupos de
árboles, jardines y cercados verdes, que definen los contornos de
los campos trazados por los incas mismos, (…) Aunque solo está
unos 760 metros más bajo que el bolsón del Cuzco, el valle de
Yucay, abrigado por todos los lados, goza de un clima mucho más
benigno, muy similar al de Nimes y otras partes del sur de Francia
(…) Salubre y fértil por igual, fácilmente accesible desde la capital
y con una vegetación excepcional en la Sierra, este dulce y
tranquilo valle, enmarcado por las más altas montañas del
continente, pronto se convirtió en el lugar de recreo favorito de los
Incas.24

24 SQUIER, Efraim George. Un viaje por tierras incaicas. Crónica de una expedición
arqueológica. (1863-1865) Título del original en inglés: Perú: Incidents of travel and
exploration in the land of the incas. 1877. Buenos Aires; 1974. Pp. 262-264.
13
Figura 01

MAPA DEL VALLE DE YUCAY

FUENTE: George Squier. 1877.


DESCRIPCIÒN: Plano a escala presentado tras una de sus expediciones
arqueológicas.

14
Mariano Felipe Paz Soldán y Ureta (1821-1886), historiador y político peruano,
quien fuera ministro de Relaciones Exteriores y de Justicia del Perú y
presidente de la Comisión de Demarcación Territorial del Perú, publicó el
“Diccionario Geográfico y Estadístico del Perú (1877) el cual contenía asimismo
una etimología aymara y quechua de poblaciones, lagos, ríos, cerros y otros
elementos geográficos.

En el diccionario de Paz Soldán, Yucay era un pueblo del distrito de Urubamba


que contaba con 459 habitantes. La referencia al valle de Yucay al parecer
había quedado en el olvido y se hablaba en cambio de la quebrada de
Urubamba lugar en donde: “abundan frutas exquisitas. Por todo esto los Incas
habitaban en Urubamba en donde existen las famosas ruinas de
Ollantaytambo”.25

Como parte final de las descripciones y relatos que se han hecho de las
bondades del ambiente geográfico del antiguo valle de Yucay tenemos al
geógrafo y marino peruano Germán Stiglich (1877-1928) quien publica en 1912
“Geografía comentada del Perú,” libro que junto al diccionario de Mariano
Felipe Paz Soldán son muestra de los intentos de un conjunto de viajeros y
estudiosos agrupados especialmente en la Sociedad Geográfica de Lima, que
recogieron la necesidad científica y del propio Estado por conocer y describir
de la manera más fehaciente posible el ámbito geográfico y geopolítico de un
país joven y muchas veces desconocido.

25 PAZ SOLDAN, Mariano Felipe. Diccionario Geográfico estadístico del Perú. Lima Imprenta
del estado calle de la rifa. 1877. p. 967 y 999.
15
Figura 02

GEOGRAFÍA COMENTADA DEL PERÚ

PROVINCIA DE URUBAMBA
En la envidiable situación que le da el río Urubamba para ser contada como el paraíso
del Cusco, se encuentra en el Departamento del mismo nombre, la célebre y
encantadora provincia de Urubamba, asiento antiguo de los pueblos que solían ser los
favoritos de aquellos monarcas poderosos llamados Incas, que se recreaban en las
vegas y fortalezas de sus suelos, contemplando los panoramas de los campos
cultivados y las caídas de agua a la vez que gozando del deleite de su clima
primaveral; donde se producían exquisitas frutas y las tropas jamás se enfermaban.

Al Oriente de la provincia, en la agreste cadena de cerros no nevados que separa la


hoya del Urubamba de la del afluente Yanatili, tiene la provincia muy marcados picos
como los de Chicón, Huancahuasi, Alcancoma, Huayuvilca y Panticoya. Cruzándolos
se llega a la provincia de Calca. Al Sur, tiene en cambio la provincia de Urubamba, esa
gran cadena que separa las cuencas de los ríos Apurímac y Urubamba, cruzando la
cual se puede ir de la provincia de Urubamba a las del Cusco y Paruro.

Hoy que los cultivos de fácil rendimiento absorben la atención de los habitantes de
Urubamba, ya no se contempla en la hermosa quebrada todo aquello de grande y
sublime que en épocas remotas hizo célebre a lo que se llamaba el valle de Yucai.

El Inca Manco durante el largo sitio que estableció del Cusco, ocupado por los
primeros conquistadores españoles, tuvo recursos de vida todo el tiempo para el
poderoso ejército que levantó. El valle de Yucai es todo el del Urubamba en esta
provincia. Ahí se produce muy bien el trigo y la cebada, en los altos; el maíz, las
papas, las racachas, ciertas frutas, los pastos en las quebradas secundarias y en todo
ese laberinto de abras, llanos y cumbres que se cruzan a cada paso formando el
territorio mencionado, delicioso en clima y producciones. En la parte más baja se ve
producir un maíz especial, el de grano mayor que hay en el mundo y que ha merecido
distinciones especiales en diversas exposiciones internacionales.

Posee además la provincia, lagunillas preciosas, cerca de las cuales pacen millares de
cabezas de ganado vacuno y lanar, incluyendo llamas. Casi todo este ganado se
exporta no solo al Cusco sino también a otras provincias como las de Calca y La
Convención.

Los cerros y en general el territorio de Urubamba no han sido explorados en materia


de minas; nada de extraño tiene que escondan riquezas de plata y cobre cuando en
la misma cadena, más al Sudeste, no faltan las vetas trabajadas en tiempo de los
españoles, que tomaron posesión de esos lugares con el nombre de encomenderos
primero y de gobernadores después.

La provincia está constituida por seis distritos: Ollanta, en el que están los vestigios
medianamente conservados de las fortalezas históricas cuya edad se remonta a época
preincaica; fueron lugares de gran prestigio y numerosa población, la que ocupaba la
cumbre de un cerrillo cercano al pueblo de Tambo, rico en plata y plomo; este es
capital a la vez del distrito; el cerrillo incluye edificios, con sus entradas, patios,
16
plazoletas, etc.; son dignos de visitarse, sobre todo en el ajuste perfecto de piedras
irregulares, para lo cual no se ha usado concreto ni argamasa alguna; Maras, el más
extenso de la provincia y aquel que cuenta con las quebradas más abrigadas y ricas
en salinas y arcillas, que se extienden hacia la Cordillera de Sarcantai; su capital es la
villa de Maras; Urubamba, con una capital del clima más hermoso, donde abundan los
recursos para la vida, pues todos los domingos acuden ahí a millares la gente con
productos del valle, como frutas, vinos, cereales, tubérculos de la puna, y de los
temples con los que se puede abastecer muy bien las despensas; Yucai, el antiguo y
lindo vergel de los Emperadores peruanos, que contaban allí con templos de
escogidas y lugares de placer y estadía; Huayabamba, otro rincón delicioso, con
infinidad de encantos en sus campiñas amenas; Chincheros, que guardaba también
antiguos monumentos, cuyas piedras han sido dedicadas al templo del pueblo, capital
del distrito.

La provincia, cuenta con 19,500 habitantes de los cuales 2,970 pertenecen a


Urubamba, la ciudad capital que está a 2,879 metros sobre el mar.

(Germán Stinglich. Geografía Comentada del Perú. Curso universitario recomendado


por el Ministerio de Instrucción. Lima; Casa Editora SANMARTI Y Cía.; 1913. Pp. 405-
406.

FUENTE: Germán Stinglich, en Geografía Comentada del Perú. Curso universitario


recomendado por el Ministerio de Instrucción. Lima; Casa Editora SANMARTI Y
Cía.; 1913. Pp. 405-406.

17
Figura 03
MAPA DEL PARTIDO DE CALCA Y
URUBAMBA

FUENTE: Pablo Joseph de Oricain-1786. Archivo General de Indias. MP-Perú_Chile, 220. http://pares.mcu.es/.
DESCRIPCIÒN: Mapa del partido de Urubamba y Calca, donde se muestra la descripción geográfica de estas intendencias. 18
1.2 Síntesis de la evidencia arqueológica preinca del Valle de Yucay.

De las descripciones geográficas generadas desde el siglo XVI al siglo XX se


denota la importancia que tuvo el valle de Yucay como espacio poblacional. La
poca evidencia arqueológica descubierta en esta zona ha permitido especular
que la presencia antrópica en esta zona es inalterable aun desde tiempos
bastante antiguos. Los trabajos desarrollados por Pedro Taca (1980), Covey,
Araoz Silva y Bauer (2008) nos permite generar una breve síntesis de la etapa
anterior al desarrollo del Estado Inca.

Es necesario señalar que en esta síntesis hacemos uso de la cronología


cultural para la Región del Cusco que difiere bastante de la cronología clásica
que clasifica el pasado prehispánico de la cultura peruana y que fuera
desarrollada por John H. Rowe en la década de 1950 a partir de sus
excavaciones en el valle de Ica.

En ese sentido, la presencia del hombre en el valle de Yucay data desde el


inicios del Periodo Arcaico (9500 a.C. - 2500 a. C.), fase en la cual el valle y las
quebradas tuvieron la función de conductos para los cazadores y recolectores
arcaicos que discurrían entre el Valle Sagrado y las tierras bajas de Lares, las
pinturas rupestres ubicadas en Huayoccari,Toq’o toq’oyoc y la quebrada de
San Juan presumiblemente pudieron servir para señalar las rutas de
trashumancia.26

Al igual que en gran parte de la región del Cusco, el periodo Formativo (2500 a.
C. - 200 d. C.), significó en el valle de Yucay la presencia de los primeros
asentamientos poblacionales. En base a la identificación de más de una
decena de sitios formativos se pudo determinar que estos primeros pueblos se
establecieron en las laderas bajas y algunos sitios de altura del valle. La

26
COVEY, R. Alan y AMADO GONZALES. Donato. Imperial Transformations in Sixteenth-Century Yucay,
Perú. United States of America: University of Michigan; 2008. p. 04.
19
densidad poblacional era mucho menor en relación con áreas adyacentes,
como Maras, Chinchero, Ollantaytambo o Calca.27
La característica poblacional baja se continuó manteniéndose en los periodos
de Qotakalli y del Imperio Wari (200 d. C. – 1000 d. C), la presencia de tierras
de cultivo de riego, propicias para el cultivo del maíz, posiblemente no fue un
factor para una explotación agrícola intensiva de este espacio:

La falta de componentes claros del período Intermedio temprano


Horizonte medio sugiere algunos patrones interesantes para esta
área. En primer lugar, a pesar de la presencia de excelentes
tierras de cultivo para la agricultura de riego, no parece existir una
política regional basada en esta parte del valle desde el año 200-
1000, (…). En segundo lugar, esta parte del valle no parece haber
sido colonizada por el imperio Wari desde el año 600-1000, lo que
indica que la ocupación Wari de la región del Cusco no se dirigió a
todas las áreas que tenían potencial para la agricultura intensiva
de maíz. En cambio, la colonización Wari se restringió al área de
Lucre-Huaro.28

El periodo Killke (1000 a. C. – 1400 d. C.), es particularmente interesante ya


que supone el momento inicial de desarrollo del estado Inca. La decadencia y
desaparición del Imperio Wari dio motivo a la hegemonía de una serie de
grupos étnicos: Ayarmacas, Equecos, Quilliscachis, Pinaguas, Chilques,
Masques, Cuyos, Ancasmarcas, entre otros que rivalizaron con los Incas del
Cusco en un proceso de lucha por detentar su hegemonía a nivel de la región
del Cusco. La fuente cronística de los siglos XVI y XVII hace mención a estas
luchas y a la hegemonía posterior de los Incas que integraron a las etnias
sojuzgadas, en especial a las aliadas, como los Incas de privilegio.29

27
Idem.
28
La cita original en ingles dice: The lack of clear Early Intermediate period Middle Horizon components
does suggest some interesting patterns for this area. First despite the presence of excellent farmland for
irrigation agriculture, there does not appear to be regional polity based in this part of the valley from AD
200-1000 (…). Second, this part of the valley does not appear to have been colonized by the Wari empire
from AD 600-1000, indicating that the Wari occupation of the Cusco región did not target all areas that
had a potential for intensive maize agriculture. Instead, Wari colonization was restricted to the Lucre-
Huaro area. COVEY, R. Alan, ARAÓZ SILVA, Mirian y BAUER, S. Brian. Settlement Patterns in the Yucay
Valley and Neighboring Areas. En: COVEY, R. Alan y AMADO GONZALES. Donato. Imperial
Transformations in Sixteenth-Century Yucay, Perú. United States of America; University of Michigan; Ob.
Cit. p. 09.
29
Entre los cronistas que hablan acerca de este momento de lucha y adecuación están: Fray Bartolomé
de las Casas (1550), Pedro Sarmiento de Gamboa (1572), Miguel Cabello de Valboa (1586), Fray Martín
20
El valle de Yucay se ubicaba entre el espacio de los grupos étnicos Ayarmacas,
Quilliscachis y Ancasmarcas. Por su cercanía, casi inmediata con Maras, es
posible que Yucay haya sido territorio Ayarmaca. La investigación arqueológica
desarrollada para este periodo logro ubicar hasta 66 sitios o asentamientos en
donde se localizó cerámica Killke, estos asentamientos eran relativamente
pequeños con una extensión algo mayor a una hectárea, salvo un sitio
poblacional ubicado en la quebrada de Pumahuanca que midió entre 05 a 06
hectáreas, esto denotaría que en los siglos previos a la expansión Inca, el valle
de Yucay no era un espacio nuclear trascendente.30

1.3 El valle de Yucay durante el apogeo del Estado Inca (1400 d. C –


1532 d. C.)

Los cronistas de los siglos XVI y XVII no hacen mayor referencia en relación a
la forma como se asimiló el valle de Yucay al primigenio estado Inca. Este
aspecto se contrapone con otros espacios aledaños como Chinchero, Maras,
Calca, Pisaq y Ollantaytambo, de donde se tiene relatos de la forma como
estos lugares fueron anexados al Cusco.

En cambio, algunas crónicas y documentos de archivos históricos informan con


mayor detalle la forma y los mecanismos como el valle de Yucay se transformó
en parte conformante de la propiedad particular de los últimos dos soberanos
del Tawantinsuyu. En relación a la forma de la tenencia de las tierras antes de
la conquista hasta mediados del siglo XX, se manejaba la versión que los
cronistas, en especial Garcilaso de la Vega, propagaron que en el periodo Inca
el usufructúo de las tierras estaban subdivididas en tres formas: las del Inca,
las del sol y las del pueblo, este esquema de fraccionamiento de tierras
resultaba demasiado lacónico. Investigaciones realizadas por Jhon Rowe,
John Murra, Luis Miguel Glave y María Rostorowski precisaban que esta

de Murua (1590), Pedro Gutiérrez de Santa Clara (1600), Garcilaso de la Vega (1609) y Felipe Guamán
Poma de Ayala (1615), por citar a los más principales.
30
COVEY, R. Alan, ARAÓZ SILVA, Mirian y BAUER, S. Brian, Ob. Cit. Pp 09-11.
21
versión occidentalizada no podía ser la más adecuada y que había otras
formas más de tenencia de tierras entre ellas estaban las llamadas “tierras
personales del Inca”.

De la investigación etnohistórica asimismo se sabe que entre las llamadas


tierras del Inca existía una subdivisión en el usufructúo de las mismas. Unas
eran las tierras llamadas propiamente del Inca, y del cual los cronistas refieren
mayormente, tenían un carácter estatal y estaban diseminadas a lo largo del
Tawantinsuyu, ellas servían para proveer a diversos depósitos locales y
cuzqueños, se caracterizaban por ser cultivadas en grandes jornadas
multitudinarias por los miembros de los ayllus en las llamadas minkas, una
verdadera fiesta campestre con música, comida y bebida a costa del estado.
En esta categoría de tierras del Inca se clasifican también los grandes espacios
de pastales estatales que eran conocidos como las “moyas del Inca”.

Las otras tierras que había, eran las que el Inka asignó a las panakas o ayllus
reales, pertenecientes a los linajes de los soberanos Incas, las más de las
cuales se situaban en las cercanías del Cusco. Juan de Betanzos (1551)
señala que Inca Yupanqui -Pachakuteq Inca- fue quien repartió las tierras
aledañas al Cusco entre los curacas y señores principales que habían sido sus
adeptos:

Acabado de dar orden Inca Yupanqui e de haber hecho los ídolos


y casas del Sol, que habéis oído, mandó en la ciudad del Cuzco
que en un cierto día señalado fuesen en ella todos los señores
caciques y principales que en las provincias y comarcas de en
torno de la ciudad del Cuzco Vivian y a el habían dado
obediencia, porque tenía ciertas cosas que comunicar con ellos; e
oído el mando por los principales del Cuzco, luego enviaron sus
orejones por las provincias y comarcas que ya habéis oído, con
los cuales enviaban a mandar a los tales señores de ellas el
mando que el Inca Yupanqui tenia hecho, y que para aquel día
señalado fuesen todos a la ciudad. Y como los tales señores
supiesen el mando que el Inca Yupanqui mandaba, con la más
brevedad que posible les fue, se vinieron a la ciudad del Cuzco; y
siendo ya todos juntos, Inca Yupanqui les dijo, que ya veían que
el Sol era en su favor y que no era justo que se contentasen con
poco: que le parecía que, porque andando el tiempo la guerra no
22
les daría lugar a hacer sus tierras y repartirlas de la manera que
de una vez quería que se repartiesen, que para perpetuamente
ellos y sus descendientes sembrasen y se sustentasen, que le
parecía que sería bien que cada uno tuviese sus tierras señaladas
y conocidas, para que las sembrasen y aderezasen cada uno de
ellos con la gente de sus casas y amigos, todo lo cual decía a los
señores y moradores de la ciudad del Cuzco. Y ansi, todos juntos,
viendo la merced grande que les hacía de darles las tierras que
conociesen para perpetuamente a cada uno de ellos, todos juntos
y a una voz le dieron grandes gracias, llamándolo e intitulándolo
Indichuri, que dice Hijo del Sol. Y luego de allí mandó Inca
Yupanqui que todos fuesen a cierto sitio do las tales tierras
estaban pintadas, donde, como allí fuesen, dio y repartió las
dichas tierras, dando a cada uno de ellos las tierras que le pareció
que le bastaban. Y esto hecho, mando luego que aquellos tres
señores sus amigos se las fuesen a repartir a todos los de la
ciudad, bien ansi como se las había dado y señalado, y que esto
hecho, volviesen todos ellos delante del. Y ansi, los señores
fueron y dieron y repartieron las tierras, y metieron en las
posesiones de ellas a los tales que ansi les fue hecha la dicha
merced por el Inca Yupanqui.31

Los “tres señores, sus amigos”, según Betanzos, se llamaban Vica Quirao, Apu
Mayta y Quilliscachi Urco Guaranga, a estos tres les mandó poblasen el Hurin
Cuzco que era desde las casas del Sol (Qorikancha) hacia abajo hasta
Pumaqchupan. Desde las casas del Sol para arriba y todo lo que estaba al
interior de los dos arroyos (Saphi y Tullumayu), los repartió a los miembros de
su familia que eran hijos de señores y señoras de su propio linaje.32

Otro cronista; Pedro Sarmiento de Gamboa (1572), corrobora este hecho


señalando también que fue este gobernante el que ordenó desalojar a la
población en dos leguas al contorno de la ciudad del Cusco para luego
repartirlas según las necesidades de la elite inkaika, Sarmiento asimismo
precisa que luego Pachakuteq Inka tomó para su “recamara” el valle de Tambo:

Después que Pachacuti hizo lo que se ha dicho en la ciudad, miro


la población del pueblo y la gente que en el había. Y viendo que
no había bastantes tierras de sembrar, para que se pudiesen
sustentar, salió fuera del pueblo cuatro leguas en redonda de él, y
considerados los sitios, valles y poblaciones, despobló todos los

31
BETANZOS, Juan de. /1551/. Suma y Narración de los Incas. Cusco; UNSAAC; 1999. p. 53.
32
Ídem p. 55.
23
pueblos que estaban dos leguas en torno del pueblo. Y las tierras
de los pueblos que despobló aplicolas para el Cuzco y para sus
moradores, y los que despobló echolos a otras partes. Con lo cual
contento mucho a los ciudadanos del Cuzco, porque les daba
aquello que les costaba poco, y así hacia amigos con hacienda
ajena; y tomo para su recamara el valle de Tambo sin ser suyo. 33

Rostworwski cree que en un primer momento estas tierras fueron trabajadas


por los mismos miembros de las panakas, más conforme adquiría importancia
el apogeo inca, los miembros de las panakas empezaron a ejercer funciones
militares y administrativas que los desligaba de sus quehaceres agrícolas, esta
situación al parecer sería el origen del establecimiento de los yanaconas. Son
numerosas las menciones en las crónicas y en la documentación colonial sobre
el empleo de los yanaconas para el servicio de las panakas y del Inca, estos
servidores no recibían su sustento de los depósitos reales, sino que tenían sus
parcelas de chacras para cubrir sus necesidades, justamente con el correr del
tiempo, en la colonia específicamente, estas tierras que el inca o las panakas
habían cedido para el sustento de sus servidores, pasarían a ser reclamadas y
consideradas como propiedad particular de yanaconas.34

Entre estas tierras concedidas a las panakas reales estarían asimismo las que
se otorgaron para el sustento de las momias de los soberanos Incas y de las
coyas, sus mujeres principales. Nuevamente fue Pachakuteq Inca quien
reglamentó este aspecto:

Señaló y nombró (Pachakuteq Inka), cierta cantidad de yanaconas


y mamaconas y dioles tierras para en que sembrasen y cogiesen
para el servicio destos bultos y ansi mismo señaló muchos
ganados para los sacrificios que ansi se les habían de hacer y
este servicio e tierras e ganado dio e repartió a cada bulto por sí e
mandó que se tuviese gran cuidado continuamente a la noche e a
la mañana de dar de comer e beber a estos bultos y sacrificarlos
para lo cual mandó e señaló que tuviesen cada uno de estos un
mayordomo de los tales sirvientes que ansi le señaló que ansi
mismo mandó a estos mayordomos e a cada uno por sí que luego
hiciesen cantares los cuales cantasen estas mamaconas y

33
SARMIENTO DE GAMBOA, Pedro. /1572/ Historia de los Incas (Segunda parte de la Historia General
llamada Indica). Madrid;:Ediciones Atlas; 1965. Pp. 42-43.
34
ROSTWOROWSKI DE DIEZ CANSECO, María. “Nuevos datos sobre tenencia de tierras reales en el
Incario.” En: Revista del Museo Nacional. Tomo XXXI. 1962. Pp. 130-131.
24
yanaconas con los lores de los hechos de cada uno destos
señores en sus días ansi hizo los cuales cantares ordinariamente
todo tiempo que fiestas hubiesen cantasen cada servicio de
aquellos por su orden y concierto comenzando primero el tal
cantar e historia e loa los de Mango Capac e que ansi fueron
diciendo las tales mamaconas e servicio como los señores habían
sucedido hasta allí y que aquella fuese la orden que se tuviese
desde allí adelante para que de aquella manera hubiese memoria
dellos e sus antigüedades (…)35

El tercer tipo de tenencia, fueron las tierras incorporadas como propiedad del
Inca. Según el sistema instaurado en los momentos de apogeo del
Tawantinsuyu, a la muerte de un soberano los bienes y especialmente las
tierras que había obtenido en vida las heredaba su panaka o ayllu familiar. El
hijo que lo sucedía en el gobierno debía de generar sus propios recursos
buscando y adecuando tierras o espacios para su propiedad personal. Esta
costumbre fue percibida en los primeros momentos de la conquista, como lo
demuestra la versión de Pedro Sancho de la Hoz (1534):

Cada señor difunto tiene aquí su casa de todo lo que le tributaron


en vida, porque ningún señor que sucede (y esta es ley entre
ellos) puede después de la muerte del pasado tomar posesión de
su herencia. Cada uno tiene su vajilla de oro y de plata y sus
cosas y ropas aparte, y el que le sucede nada le quita. Los
caciques y señores muertos mantienen sus casas de recreo con
la correspondiente servidumbre de criados y mujeres, y les
siembran sus campos de maíz, y se les pone un poco en sus
sepulturas.36

En 1588, doña Beatriz Coya, hija de Sayre Topa y su esposo don Martín García
de Loyola, propietarios del Marquesado de Oropesa en el pleito que sostenían
con la corona española por el despojo que los funcionarios reales le habían
hecho de 563 yanaconas, presentan testigos que responden a una interrogante
que buscaba demostrar que los antiguos señores del Tawantinsuyu
acostumbraban durante sus reinados a formar asientos, moradas y
propiedades reales en lugares diversos, la pregunta decía textualmente:
35
BETANZOS, Juan de. Ob. Cit. p. 56.
36
SANCHO DE LA HOZ, Pedro. /1534/ Relación para su majestad de lo sucedido en la conquista De lo
sucedido en la conquista y pacificación de estas provincias de la Nueva Castilla y de la calidad de la tierra
después que el capitán Hernando Pizarro se partió y llevó a Su Majestad la relación de la victoria de
Caxamalca y de la prisión del cacique Atabalipa. Lima; Editores Técnicos Asociados S.A. 1968. Pp. 31-32.
25
(…) si saven que los yngas señores que fueron destos rreynos
tenían por vso y costumbre de hazer sus asientos y moradas
rreales en distintos y separados lugares en el tiempo que
rreynauan y en las dhas partes que ansi se arraygauan de
heredamientos, ganados, pastos, minerales de oro y plata,
arboledas y otras haciendas (…)37

La respuesta de los declarantes permite conocer los lugares específicos en


donde los Inkas históricos tuvieron sus “heredamientos, ganados, pastos,
minerales de oro y plata, arboledas y otras haciendas”. (Véase el cuadro 02).

Cuadro N° 02
Propiedades reales de los cuatro últimos soberanos Inkas
Viracocha Inka Pachakuteq Inka Topa Inka Yupanqui Huayna Qhapaq Inka
x Caquia x Tambo x Chinchero x Yucay
Xaquixaguana x Pisac x Guayllabamba x Quispiguanca
x Paucartica x Patallacta x Urcos x Canabamba
x Mollepongo x Calispuquio x Guaropampa
x Piccho x Xaquixaguana x Pilcobamba
x Vitcos x Zurite x Pomaguanca
x Vilcabamba
FUENTE: ROWE; John. Las tierras reales de los Incas. En: Arqueología, antropología e
historia de los andes: homenaje a María Rostworowski. Rafael Varón Gabai, Javier Flores
Espinoza. Lima; IEP, 1997. p. 87.

1.3.1 Los Inkas históricos y la sacralización del Valle de Yucay.

La información etnohistórica y la investigación arqueológica desarrollada en el


entorno del antiguo valle de Yucay han demostrado el tratamiento especial que
se dio a este espacio en un momento determinado del pasado prehispánico.

Desde la perspectiva económica las tierras eran aptas para el cultivo del maíz,
(Zea mays), producto considerado vital en los mecanismos religiosos y de
reciprocidad del estado Inka, que construyó para ello una infraestructura
agrícola admirable. John Murra expresa: “los famosos andenes construidos tan
trabajosamente en sitios como Yucay estaban destinados principalmente a

37
ROWE, John. Las tierras reales de los Incas. En: Arqueología, antropología e historia de los andes:
homenaje a María Rostworowski. Rafael Varón Gabai, Javier Flores Espinoza. Lima; IEP, 1997. p. 277.
26
incrementar la producción de maíz”38. Asimismo, la existencia de sitios de
almacenamiento o “qollqas” ubicadas estratégicamente en la margen izquierda
de la cuenca del río Vilcanota: Machuqolqa, Huaynaqolqa, Q’acllakancha;
denotan que estos lugares fueron destinados para guardar en su interior el
maíz que se producía a gran escala en el valle.

La arqueológica expresa que la arquitectura Inka se manifiesta en la región de


estudio, con grandes construcciones de terrazas cerca de Urubamba, Yucay y
Urquillos Estos representan una transformación de la producción económica
regional, un cambio hacia una producción más intensiva de cultivos, que se
evidencia por la presencia de varios complejos de almacenamiento en las
laderas sobre el piso del Valle:

(…) Durante la ocupación Inka, partes del área de estudio fueron


transformadas por el desarrollo de grandes propiedades incas,
que cambiaron la naturaleza de la producción agrícola y el
almacenamiento y trajeron nueva población en el Valle. Mucha
gente debe haber vivido en ciudades que se encuentran bajo
ciudades coloniales y contemporáneas, mientras que gran parte
de la población agrícola parece haber vivido en pequeños pueblos
o aldeas en los márgenes de las tierras reales. La población de
estas partes del valle fue aumentada por los retenedores de las
regiones provinciales, mientras que las áreas no desarrolladas
como fincas parecen haber estado ocupadas continuamente, lo
que sugiere que las poblaciones locales continuaron residiendo
allí(…).39

Por otro lado, la belleza natural y la benignidad de su clima, del que hablan las
crónicas y las descripciones de viajeros y enciclopedistas, hizo que el valle de
Yucay fuera adecuado como un espacio ideal para ser ocupado por la élite de
los gobernantes Inkas. Al igual que otros sitios como la ciudad y el valle del

38
MURRA, John. El Mundo Andino. Población, Medio Ambiente y Economía. Lima: Instituto de Estudios
Peruanos; 2002. p. 146.
39
During the Inka occupation, parts of the study area were transformed by the development of large
Inka estates, which changed the nature of agricultural production and storage and brought new
population in the Valley. Many people must have lived in towns that lie under Colonial and
contemporary towns, while much of the farming population appears to have lived in small villages or
hamlets at the margins of royal Iands. The population of this parts of the Valley was augmented by
retainers from provincial regions, while areas not developed as estates appear to have been occupied
continuously, suggesting that local populations continued to reside there. COVEY, R. Alan, ARAÓZ SILVA,
Mirian y BAUER, S. Brian, Ob. Cit. Pp. 16.
27
Cusco, Pisaq, Ollantaytambo, Chinchero o Machupicchu, por citar a los más
resaltantes, Yucay se convirtió en un espacio trascendente, sacralizado por la
presencia del Inca y las panakas reales.

Un documento que data de mediados del siglo XVI, publicado por Horacio
Villanueva el año de 1970 es la principal fuente que demuestra la forma como
el estado Inka transformó este espacio. El año de 1550 el cabildo del Cusco,
presentó una petición a la Real Audiencia de la ciudad de los Reyes
requiriendo que se repartan a los vecinos españoles de la ciudad del Cusco,
tierras baldías que los antiguos señores naturales habían dedicado al Sol:

(…) Sépades que Juan de Quiñones en nombre del Cabildo,


Justicia y Regimiento de ella por una petición que presentó en la
nuestra audiencia y chancilleria real que por nuestro mandato
reside en la ciudad de los Reyes… nos hizo relación diciendo que
cerca de esta dicha ciudad a cuatro leguas de ella hay gran
cantidad de tierras que en tiempo antiguo los Incas, señores
naturales que fueron de estos reynos, tenían dedicados al sol (…)
vos mandamos que luego que con ella seáis requeridos hayáis
información así de lo hecho como a instancia de parte y de los
caciques e indios del dicho valle y su comarca y de la cantidad de
tierras que son los que hay en el dicho valle de Yucay que dicen
que fueron dedicadas al sol y quien ha usado y usa de ellas(…).40

En parte de este documento bastante amplio, y del que nos ocuparemos más a
detalle en los capítulos segundo y tercero, se hace mención que el valle de
Yucay comprendía desde los términos de Calca e iba río abajo por las dos
márgenes del río de Yucay, comprendiendo los espacios de Huycho,
Guayoccari, Urcospampa (Urquillos), Guayllabamba, Yucay y Urubamba,
asimismo se consigna una descripción detallada de topónimos relacionados
con sitios que eran parte de las propiedades reales de Topa Inka Yupanqui y
Huayna Qhapaq. La parte central de esta “visita del Valle de Yucay”,
desarrollada por el Mariscal Alonso de Alvarado y que data del año de 155141
permite ver la forma cómo se adecuó el entorno paisajístico del valle de Yucay:

40 VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. “Documentos sobre Yucay en el Siglo XVI”. En: Revista del Archivo
Histórico del Cuzco. N° 13. 1970; p. 31.
41
La transcripción textual de esta visita tomada de la Colección Betancur ubicada en el Archivo Regional
del Cusco, (en adelante A.R.C.), se presentará como anexo documental del trabajo de investigación.
28
zonas de cultivo, andenerías, sitios residenciales, religiosos y de recreo
ordenados junto a sitios poblacionales y de producción de la población foránea
y originaria del valle (Véase cuadro N° 03).

CUADRO N° 03

TOPONIMOS Y CARACTERISTICAS EN EL VALLE DE YUCAY 1400 A 1532


TOPÓNIMOS PERTENENCIA
Huycho Del Sol y de Topa Inka Yupanqui
Urcospampa Topa Inka Yupanqui y Mama
Anahuarque, su esposa
Urpihuata Moya de Topa Inka Yupanqui
Chaquelaguayco Moya de Topa Inka Yupanqui
Guayoccari Topa Inka Yupanqui
Guayllabamba Topa Inka Yupanqui
Moyobamba Topa Inka Yupanqui
Huayocollo Huayna Qhapaq ¿?
Chalahuasi Raba Ocllo, mujer de Huayna Qhapaq
Acosca Huayna Qhapaq
Tambo (Yucay) Huayna Qhapaq
Andapache De los naturales del valle
Diez topos junto a Andapache Mama Anahuarque
Otorgados por Huayna Qhapaq a
Acusca mitimaes Cañaris, Chinchaysuyus y
Qollasuyus
Paucarchaca Huayna Qhapaq
Chuquibamba Huayna Qhapaq
Andenes más delante de Huayna Qhapaq y del Sol
Chuquibamba
Yucay (Bohíos) Huayna Qhapaq
Curicancha (Bohío) Del Sol
Pilcobamba Del Sol
Pilcobamba Huayna Qhapaq
Tierras en la ladera junto a un arroyo De los Naturales del valle
Yucaybamba Mamacunas del Inka
Collabamba Huayna Qhapaq
Chichobamba Indios Chicho
Quispeguanca Huayna Qhapaq
Chicón Moya de Huayna Qhapaq
Paca (pueblo) Indios Paca
Casas y pedazos de tierra junto al Huayna Qhapaq
puente al lado del pueblo de Paca
Chuquipingollo Huayna Qhapaq
Chuquibamba Del Sol
Urubamba Indios de Paca
Tomahuanca Huayna Qhapaq y que se la dio a una
mujer suya: Raba-chula
Coto (pueblecillo) Indios Coto
29
Cuzcacache (pueblo) Indios Caches
Taracache (pueblo) No menciona de quien es
Chauca (pueblo) Indios naturales
Chacaras de sal Del Sol
FUENTE: A.R.C. Documentos de la Dirección Del Archivo Regional del Cusco.
Genealogía de los Betancur. Libro 03. Ff. 24v-38.

Los trabajos de investigación arqueológica desarrollados por Ian Farrington


(1984), Susan Niles (1999), Covey, Araoz y Bauer (2007), han registrado la
ubicación de parte de los sitios que se menciona en la visita de 1551. De todas
ellas el sitio de élite más importante fue el palacio de Wayna Qhapaq en
Quispeguanca, (sitio en donde actualmente se ubica el cementerio general de
la ciudad de Urubamba), lugar en donde estaba albergada la momia del
gobernante después de su muerte. Igualmente identificaron refugios reales de
caza, (moyas del Inca), casas de recreo y santuarios pequeños en las
quebradas de Pumahuanca y Chicon y sobre las áreas de Urubamba y Yucay.

En base a la evidencia arqueológica y la fuente etnohistórica se sabe que


durante la ocupación Inca, gran parte del área del valle de Yucay fueron
transformadas por el desarrollo de grandes propiedades, que cambiaron la
naturaleza de la producción agrícola y el almacenamiento y trajeron nueva
población al valle. Mucha gente debió de haber en poblaciones que
posiblemente se encuentran soterrados en poblados coloniales y
contemporáneos. La población agrícola parece haber vivido en pequeños
pueblos o aldeas en los márgenes de las tierras reales. La densidad
demográfica del valle aumentó en relación a periodos anteriores especialmente
por la presencia foránea de mitimaes y yanaconas.

1.3.2 Yucay y Qespiwanka: Finca particular de Wayna Qhapaq.

La documentación etnohistórica dice que gran parte del Valle de Yucay estuvo
adscrita a dos soberanos Inkas. La zona que corresponde al actual distrito de
Huayllabamba (Huycho, Urpihuata, Urquillos y Guayllabamba) era propiedad de
Topa Inka Yupanqui. A Wayna Qhapaq le pertenecía gran parte del espacio de

30
los distritos de Yucay y Urubamba (Yucay, Chichobamba, Qespiwanka, Chicón,
Chuquipinqollo, etc).
Por otro lado, esta misma información documental señala el papel que Wayna
Qhapaq tuvo en la transformación drástica del valle de Yucay ya que Juan de
Betanzos dice que fue este gobernante quien ordenó la movilización del Cusco
y provincias para la mano de obra y asi poder edificar el valle de Yucay,
cambiar el curso del río a la parte izquierda del valle y retornar el antiguo curso
del rio; para ello ordenó derribar y aplanar cerros para adecuar en ellas
espacios de cultivo, casas y aposentos de recreo. Hecho ello y emulando a su
abuelo, (Pachakuteq Inka), repartió en el valle de Yucay estancias para la elite
del Cusco para que en ella tuviesen sus momias y el servicio que cuidasen de
ellas y cultiven sus parcelas respectivas. Asimismo, ordenó se edificasen
pueblos pequeños en donde puedan residir los mitimaes reducidos en dicho
valle:

Vuelto que fue Guayna Capac… a la ciudad del Cuzco mandó que
de toda la tierra viniesen cien mil indios y los más que pudiesen y
luego fue su mando a todas las provincias y dentro de seis meses
se juntaron ciento y cincuenta mil indios en la ciudad del Cuzco y
como el Ynga los viese mandó a los señores del Cuzco que se
fusen con aquella gente y la llevasen al valle de Yucay y él ansi
mismo fue con ellos y luego puso en obra en aderezar del valle e
hizo que el río fuese echado por la parte de hacia el Cuzco
haciéndole fortalecer y haciéndole madre por do fuese y por la
parte que el río iba hizo derribar los cerros y allanarlos y ansi hizo
el valle llano y de manera que en él se edificasen ya casas y
aposentos do él se fuese a recrear en el cual valle dio estancias a
los señores del Cuzco ansi a los vivos como a los muertos que
estaban en bultos para que allí pusiesen sus yanaconas mozos de
su servicio para que les labrasen sus verduras y hortalizas y
cosas de sus recreaciones y allí hizo Guayna Capac que se
edificasen muchos pueblos pequeños de a veinte y a treinta y
cincuenta indios en los cuales pueblos puso mucho indios
mitimaes de todas las naciones y provincias de la tierra (…).42

Sarmiento de Gamboa por su parte expresa que Pachakuteq Inka fue quien
inició la adecuación del valle de Yucay, haciendo estanques y casas de placer,
trabajo que se continuó durante el gobierno de Wayna Qhapaq que encargó a

42
BETANZOS, Juan de. Ob. Cit. p. 171.
31
su hermano bastardo: Sinchi Roca, famoso por su ingenio constructivo, para
que edificase todos los edificios de Yucay43, este mismo concepto es esgrimido
por fray Martín de Murua:“Este Cinchiroca hizo todos los edificios famosos que
hay en Yucay, todo para Huayna Capac, en que se ocuparon mucha multitud
de yndios”.44
Más contundente es la información emanada del juicio que doña Beatriz Coya y
Martín García de Loyola – Marqueses de Oropesa - siguen contra la corona
española por la propiedad de los yanaconas del valle de Yucay. En parte de
este proceso se pide a varios testigos indígenas contestar las siguientes
interrogantes:

Yten. Si saven e conocen que en tiempo de Guaina Cápac Ynga


señor que fue destos reinos el dho valle de Yucai fue como
recamara del dho Ynga y los yndios del dho valle así los naturales
del como los mitimas servían al dho Ynga y a sus hijos y mujeres
y parientes y les beneficiavan sus chácaras que tenían, en el dho
valle y eran asimismo camayos suyos en muchas cosas que en el
dho valle tenía digan e conocen y eran sus yanaconas e tenían
este nombre e con él le servían(…).

Iten si saven e conocen que muchos de los dhos yndios a quien él


dho Damián de la Vandera mandó tributar y servir y algunos otros
de secreto heran guardas del cuerpo de Guaina Capa e que no
embargante esto eran yndios tributarios y servían como los demás
del dho valle a todos los dhos sus encomenderos.45

Don Pedro Cochachin, mitimae en el valle de Yucay, de más de setenta años,


decía:

A la pregunta dos dixo queste testigo es yndio mitima del dho


valle de Yucay y le puso en el dho valle un capitán de Guaina
Capa e quel dho valle de Yucay se llamaba la casa del Ynga y
todos los mitimaes e naturales que en el dho valle avían servían al
dho Ynga y a sus hijos e mujeres e parientes e les beneficiavan [f.
97] las chácaras que tenían y le servían de yanaconas e camayos
como yos que los tenía el dho Ynga en el dho valle ocupados en el
servio de su casa y edeficios y sementeras que en el dho valle

43
SARMIENTO DE GAMBOA, Ob. Cit. p. 66.
44
MURUA, Fray Martín de. Ob. Cit. P.30.
45
A.R.C. Documentos de la Dirección Del ARC. Genealogía de los Betancur, (en adelante A.R.C.
Genealogía de los Betancur), Libro 04. 1574. Autos Seguidos por el capitán don Martín García de Loyola
y la Coya doña Beatriz, su mujer, con el fiscal de S. M. sobre los indios yanaconas del valle de Yucay. f.
92v.
32
hazía y esto save e vio desta pregunta… A la pregunta treze dixo
que muerto Guaina Capa en la Provincia de Quito traxeron su
cuerpo al dho valle de Yucai y para guarda del dho cuerpo los
capitanes tomaron de los yndios mitimas del dho valle quarenta
yndios a los quales pusieron por guarda del dho cuerpo y para
que tuviesen quenta con él e le diesen de comer e beber y le
beneficiasen chácaras de maíz para este efeto y en las fiestas
principales que hazian tenían cargo de sacar el dho cuerpo en
unas andas a ellos y de que le ofreciesen todos allí y no obstante
esto siempre pagavan su tributo y hazían el servicio personal que
los demás yndios del repartimiento.46

Otro testigo: Sebastián Tenezuela, indio cañar de más de setenta años que
vino como soldado de Chalcuchima y Quisquis, capitanes de Atawallpa, y que
se quedó luego a vivir en Yucay vio que todos los indios que habitaban en
dicho valle eran del Ynga y estaban divididos en dos parcialidades: una de
mitimas “que quiera dezir yndios advenedizos” y la de otra de naturales y que
todos servían al Inka como sus yanaconas. A la pregunta trece dijo:

(…) que save e vio este testigo que los yndios que se llamaban
apo yanaconas que quiere dezir criados del cuerpo de Guaina
Capa, estos tenían cargo de guardar el cuerpo de Guaina Capa e
hazer sacreficios e otros servicios según su rito antiguo y eran
todos ellos yndios tributarios del dho repartimiento de los mitimas
que en el avía y si se exsentaron de tributo en alguna manera fue
porque los caciques lo consentían e consintieron por la dha razón
e siempre pagaron tributo para ayuda a la tasa hasta que el dho
licenciado frei Pedro Gutiérrez los visitó por yanaconas e los
esentó del tributo de la dha tasa, y esto save desta pregunta. 47

Juan Bautista Rucana, natural del valle de Yucay que tenía 90 años poco más
o menos, había sido testigo presencial de la transformación que ordenó Wayna
Qhapaq del valle de Yucay:

A la pregunta dos dixo queste to es natural del dho valle de Yucai


e vio que en tiempo de Guaina Capa Ynga senor que fue destos
reinos el dho Guaina Cápac tenía el dho valle y asiento de Yucai
como casa suya por ser apacible y así hizo los hedeficios y casas
que en el dho valle avía pa su recreación e bibienda y en el dho
valle tenía muchos yos mitimas e yanaconas que quiere dezir yos
pa su servio los quales avía traído o recogido al dho valle de
muchas partes deste reino e todos ellos servían al dho Ynga y a
sus hijos e mujeres e parientes e les beneficiavan sus chácaras y

46
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f. 96v-97 y f. 100.
47
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f. 102v y f.105v.
33
les servían de camayos e como sus yanaconas y esto save e vio
desta pregunta porque en aquel tiempo hera este testigo moco de
hedad que se acuerda bien de lo que pasó.48

Bernardo Yupanqui, de sesenta años era hijo de Yupanqui, indígena cusqueño


que había sido trasladado al valle de Yucay en tiempos de Guayna Qhapaq
para que se encargue de los reparos de la “casa” de este Inka. Él agrega a lo
ya mencionado por los anteriores testigos que la población del valle no solo
estaba conformada por mitimaes y yanaconas sino también por naturales de
este sitio agrupados en los pueblos de Cache, Chicho, Paca y Chauca:

(…) A la pregunta dos dixo que Guaina Capa Ynga puso por
mitima en el dho valle a su padre deste t o que se llamava
Yupangui y era natural desta ciudad del Cuzco para que tuviese
quenta con el reparo de los edefícios y casas quel dho Ynga tenía
en el dho valle y después de cierto tiempo que él dho su padre
bibió en Yucay, nació este to en él y desde que se supo acordar
vio y entendió que todo el valle de Yucay se llamaba entre los y os
casa del dho Guayna Capa y no tierra ni puso a ninguna provincia
de quatro en questava repartido este reino subjeto y como es
notro el dho Guayna Capa tenía sus casas hechas en el dho valle
con todos los oficios de su servio y despensas y depósitos en que
le encerravan los frutos de las chácaras que el dho Ynga tenía
hechas pa benefo de lo qual save e vio este to que el dho Ynga
tenía en el dho valle muchos yos mitimas e camayos traídos de
diversas partes deste reino y ellos y los naturales del dho valle
que son los pueblos de Cache, Paca y Chicho y Chauca sirvieron
de [f. 118] camayos e yanaconas al dho Ynga repartiendo entre si
los oficios reales en que le avían de servir así en benef o de
chácaras como reparos de casas y edeficios, y esto save desta
pregunta.49

Otras fuentes documentales del siglo XVI corroboran lo afirmado por la


información legalista, muchas veces manipulada, de probanzas e
interrogatorios, en relación a Wayna Qhapaq y el valle de Yucay. En efecto, un
documento que data de 1569 relativo a las tierras de Paucarchaca, citas en el
pueblo de Yucay, menciona la existencia de albercas en donde el “Ynga” tenía
aves y pescado. Paucarchaca fue parte de las tierras de Wayna Qhapaq las
cuales después de 1532 habían sido abandonadas por los “criados del ynga”
quedando como terrenos baldíos y con su infraestructura en proceso de

48
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f. 107.
49
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f.117v-118.
34
destrucción. En 1569 Juan de Salas, vecino del Cusco, solicitaba estas tierras
al cabildo de la ciudad arguyendo que eran baldías y sin labrar. Hechas las
averiguaciones respectivas se llega a la conclusión que estas efectivamente
habían sido parte de la propiedad de Wayna Qhapaq.

Muy magnifico señor las tierras llamadas Paucar Chaca ques


desde la fuente deshecha hasta el desaguadero de los estanques
por la averiguación que tengo hecha que Juan de Salas pide
como se contiene por la provisión y merced del muy ylustre señor
licenciado Castro, governador destos rreynos son sin perjuicio de
persona alguna por que se averigua que fueron de Guaynacapa
Ynga y al presente está valdio y yermo y que no se labra y las
asequias con que se solían regar están deshechas y muchos de
los paredones caydos y quitado mucha piedra de los dhos
estanques ecepto lo que tiene Guaypar, yndio, sembrado, al
presente que será un silco de tierra y este no paga tributo de la
dha tierra por ser yanacona de Juan de Celiorigo y que él mismo
confiesa que se en entro en ello de su autoridad y así se le puede
hazer la dha merced conforme a la dha provisión de su señoría
que es fecho en el valle de Yucay a veinte y tres días de
noviembre de mil e quinientos y sesenta e nueve años.50

En base a la información documental y su contrastación con el estudio de la


arquitectura que se atribuye a Wayna Qhapaq, Susan Nilles (1999) plantea la
categoría de “finca real” que caracterizaría el tipo de construcción de carácter
nobiliario que los últimos soberanos Inkas y en especial Wayna Qhapaq,
ordenaron construir en sus propiedades particulares. Según Nilles: “Los
gobernantes incas tenían el deber de buscar la gloria realizando actos
valientes. Las historias formalizadas que relataban las loables acciones de un
lnca eran propiedad que sustentó la reputación que obtuvo y transmitió a sus
descendientes. También es importante la propiedad física que desarrolló para
mantenerse así mismo y a su corte durante su vida, ya que también mantendría
a su momia y su panaca.”51

50
ARC. Fondo Urubamba. Legajo 01. Siglo 1594-1693. 1651. Expediente incompleto sobre información
relativa a unas tierras denominadas Paucarchaca, cita en el pueblo de Yucay. Contiene averiguación
sobre la tenencia de dichas tierras que datan de mediados del siglo XVI en el que se indica que estas
fueron propiedad de Wayna Qhapaq. f. 2.
51
NILLES, Susan. The Shape of Inka History. Narrative and Architecture in an Andean Empire. EEUU;
University of Iowa Press; 1999. p. 121. El párrafo del texto en ingles ha sido traducido por las autoras del
trabajo de investigación.
35
Para Nilles la arquitectura Inka evidenciada en los restos de Qespiwanka y su
entorno inmediato (Kuichipuncu, Cochasontor, entre otros), son la expresión de
la forma de una forma de poder arquitectónico que sirvió para validar la
sacralidad y la historia alrededor de Wayna Qhapaq:

Recitar las historias formales que hablaban de sus gobernantes


no es la única forma en que los incas recordaban y mostraban los
acontecimientos históricos. En rituales funerarios y militares, se
crearon e interpretaron historias personales y públicas, a menudo
en un paisaje histórico. Lo más importante es que los eventos
fueron conmemorados en monumentos y obras de arquitectura
conmemorativa. Yo sostengo que en la arquitectura real, al igual
que en sus narrativas, los Incas formaron eventos históricos,
dando forma material a reclamos basados en victorias en batalla,
encuentros con dioses y hechos llevados a cabo por sus reyes.
Partí de algunos estudiosos que han considerado que la
arquitectura inca es esencialmente a histórica, anónima y dirigida
a las necesidades administrativas del estado. Sugiero que al
considerar la arquitectura real incaica, es crítico ser consciente de
la configuración histórica de la construcción y de las afirmaciones
sobre la importancia histórica que se le puede atribuir. Me
concentro en los trabajos atribuidos a Huayna Capac, para quien
tenemos edificios documentados y relatos históricos que son ricos
y variados… propongo una manera de leer la historia inca y una
manera de leer la arquitectura inca a la luz de esa historia. Si hay
un punto final en mi argumento es este: las historias reales de los
Incas son piezas de propaganda, creadas intencionalmente para
representar antepasados bajo una luz favorecedora. También
podríamos ver la arquitectura real como propaganda, diseñada no
solo para servir a las necesidades domésticas y rituales de su
creador, sino también para mejorar su reputación y confirmar su
lugar en la sucesión dinástica incaica. En ausencia de un sistema
inequívoco de escritura, un estilo arquitectónico reconocible
podría ser un reclamo de legitimidad y grandeza de un gobernante
Inca. Era una manera tangible de dar forma a su lugar en la
historia.52

52
Ídem. Pp. XVII-XVIII. Traducción del inglés por las autoras.

36
Figura 04

FIGURA HIPOTÉTICA DEL SITIO DE KUICHIPUNCU

FUENTE Susan Nilles. The Shape of Inka History. Narrative and Architecture in
an Andean Empire. EEUU; University of Iowa Press; 1999. Pp. 187-188.

Figura 05
FIGURA HIPOTÉTICA DEL SITIO DE KUICHIPUNCU EN EL
ENTORNO DE QESPIWANKA

FUENTE Susan Nilles. The Shape of Inka History. Narrative and Architecture
in an Andean Empire. EEUU; University of Iowa Press; 1999. Pp. 187-188.

37
Figura 06

ENTORNO ACTUAL DEL QESPIWANKA

FUENTE: Autoría de las tesistas. 2018.

Figura 07

CONSTRUCCIÓN ACTUAL DENTRO


DEL QESPIWANKA

FUENTE: Autoría de las tesistas. 2018.


38
Figura 08

ACTUALMENTE PALACIO DE
HUAYNA CAPAC O CEMENTERIO
GENERAL DE URUBAMBA

FUENTE: Autoría de las tesistas. 2018.

39
CAPITULO II
TENENCIA DE TIERRAS EN EL VALLE DE YUCAY. 1550-1600

2.1. El proceso de la encomienda en el valle de Yucay.

Tras los sucesos de Cajamarca de 1532 y la fundación de la ciudad del Cusco


en marzo de 1534 se dio paso a la distribución de solares a los españoles que
iban a avecindarse en dicha ciudad. Asimismo, Francisco Pizarro ordenó el
reparto de encomiendas entre los principales actores de la conquista y de sus
integrantes.

Rafael Varón Gabai (2014) dice al respecto: “La expectativa más significativa
de la conquista, en su calidad de empresa económica, fue la adquisición de
propiedades, tanto para los socios de la compañía y sus otros inversionistas
como para el resto de los integrantes de la hueste. La mayoría de
conquistadores recibió una encomienda principal, que determinaba la ciudad de
su vecindad. Por su condición privilegiada, los Pizarro obtuvieron numerosas
encomiendas repartidas en las jurisdicciones de las ciudades de españoles
fundadas en el Perú. Francisco Pizarro fue quien abarcó las propiedades de
mayor valor; a él le siguieron sus hermanos Hernando y Gonzalo Pizarro, y sus
hijos doña Francisca y don Francisco Pizarro. Su hermano materno Francisco
Martín de Alcántara acumuló un patrimonio cuantioso, pero de menor magnitud
40
que los anteriores, mientras que resulta especialmente dificultoso establecer
aquello que fue otorgado a Juan Pizarro, debido a su muerte.”53

La condición privilegiada del entorno del valle de Yucay y la gran cantidad de


indígenas forasteros y naturales que habían quedado como rezago de la mano
de obra trasladada a esta zona por los soberanos Incas, en especial Wayna
Qhapaq, generó el interés de Francisco Pizarro quien lo tomó como una de sus
encomiendas más valiosas. Se sabe que legalmente las encomiendas
consideraban únicamente el usufructo del servicio personal y tributario de los
indígenas encomendados en un español, más esto realmente era letra muerta:
“en la práctica sin embargo los encomenderos se apropiaron impunemente de
tierras y otros recursos en el ámbito de sus encomiendas. Así, las minas fueron
denunciadas y estacadas por sus “descubridores” españoles, cuya explotación
les era otorgada a cambio de reservar una parte para la corona y pagar los
impuestos de fundición; pero las encomiendas cercanas eran empleadas como
fuente de mano de obra, alimentos e insumos, por lo menos hasta la época de
Gasca.”54

Francisco Pizarro había tomado la posesión del valle de Yucay usando para su
servicio a sus habitantes a quienes ordenó ir a trabajar a los cocales que este
tenía en Tono, Cañahuire, Paucarbamba y Yanatay, ubicados todos en el valle
de Pilcopata (Paucartambo), asimismo debían de trabajar las tierras de maíz
que tenía en Yucay y en el valle del Cusco (Tiopampa) y dar servicios
personales de “camarico” abasteciendo de leña y hierba a su encomendero.

Y cuando el marques don Francisco Pizarro entró en esta tierra,


tomó por si este valle entre otras cosas y empezóse a servir de
los indios del, de yanaconas, y por tributo como no se llevaba otro
entonces, mandábales beneficiar y coger y plantar las chacaras
de coca que el dicho marques tenía en los Andes que eran Tono,
Canahuire, Paucarbamba, Yanatai y otras de maíz en este valle y
en el Cuzco, otra que tenía el mismo que se decía Tiopampa de

53
VARON GABAI, Rafael. La Ilusión del Poder. Apogeo y decadencia de los Pizarro en la conquista del
Perú. Lima: Instituto Francés de Estudios Andinos; 2014. p. 271.
54
Ídem. p. 272.
41
maíz y en que le diesen mitayos y le hiciesen camarico de verdad
plena como entonces se usaba.55

Pizarro, para el control de la población de Yucay puso como cacique o curaca a


un indígena cañarí: don Francisco Chilche, quien por el papel que cumplió en
los primeros momentos de la conquista y en años posteriores como indígena
principal merece una reseña breve.

Las primeras referencias sobre Francisco Chilche son de Diego de Trujillo


(1571), quien en su crónica menciona que Chilche y otros tres indígenas
cañarís tras preguntar por el “capitán de los cristianos” y habiendo visto a
Francisco Pizarro le ofreció su obediencia y servicio, asimismo, según Trujillo,
fue Chilche quien en este mismo acto presentó a Manko Inka ante los
españoles:

(…) y al medio de la cuesta salió a nosotros Chilche el que al


presente es cacique de Yula (sic), y con tres indios Cañares, y
dijo: - ¿Cuál es el capitán de los cristianos? y mostrándole al
Gobernador, y él dijo: Yo te vengo a servir y no negare a los
cristianos, hasta que muera. Y así lo ha hecho hasta hoy.

Y luego por la misma cuesta bajó Mango Inga con otros dos, o
tres orejones, y traía una manta y camiseta de algodón amarilla, y
Chilche dijo al Gobernador: Este es hijo de Guaynava, que ha
andado huyendo de los capitanes de Atabalipa. Y así caminamos
al Cuzco, y media legua antes que llegásemos nos dieron mucha
guerra los indios (…) y al fin entramos en el Cuzco, se pusieron
en favor de los cristianos los indios Cañares y Chachapoyas que
serían hasta cincuenta indios los unos y los otros, con Chilche,
entramos en la ciudad del Cuzco, a donde luego nos vinieron
algunos indios de paz (…).56

Garcilaso de la Vega (1617) dice que antes de entrar al servicio de Francisco


Pizarro, de quien tomó el nombre, Chilche había sido yanacona de Wayna
Qhapaq. El cronista menciona asimismo un hecho crucial desarrollado en el
cerco que las tropas de Manko Inka hacen de la ciudad del Cusco en 1536: la

55
VILLANUEVA URTEAGA, Horacio Ob. Cit. p. 94.
56
TRUJILLO, Diego de. Relación del descubrimiento del reino del Perú. En: Crónicas de América 14;
Edición de Concepción Bravo. Madrid; Nilo, Industria Gráfica; 1985. p. 206.
42
muerte, a manos de Francisco Chilche, de un capitán Inka en un duelo singular
que ambos sostienen. Este hecho, según Garcilaso, motivo el desaliento del
ejército de Manko Inka que tomaron la muerte de su guerrero como señal de
mal agüero:

Durante el cerco, pasados los cinco meses de él, sucedió que un


indio capitán que se tenía por valiente… pidió licencia a los
superiores para ir a desafiar un Viracocha y matarse con él uno a
uno. Así fue, y puesto delante del cuerpo de guardia que los
españoles siempre tenían en la plaza,... hablo a grandes voces,
diciendo que si había algún Viracocha que con el osase entrar a
batalla singular… no hubo español que quisiese salir al desafío
por parecerles poquedad y bajeza reñir y matarse con un indio
solo. Entonces un indio cañarí, de los nobles de su nación que
cuando niño y muchacho había sido paje del gran Huayna Capac
y después fue criado del Marqués don Francisco Pizarro,… que
yo conocí y deje vivo en el Cuzco, cuando vine a España, pidió
licencia a Hernando Pizarro y Juan Pizarro y a Gonzalo Pizarro,
hermanos de su señor… que él quería, como criados de ellos,
salir al desafío… Hernando Pizarro y sus hermanos le
agradecieron y estimaron su buen ánimo y dieron licencia… y
ambos pelearon mucho espacio… hasta que el cañarí mató al otro
de una lanzada que le dio por los pechos, y le cortó la cabeza, y,
asiéndola por los cabellos, se fue a los españoles con ella, donde
fue bien recibido, como su victoria lo merecía. El Inca y los suyos
quedaron extrañamente escandalizados de la victoria del cañarí…
lo tomaron como malísimo agüero de su pretensión; y como ellos
eran tan agoreros, desmayaron tanto con este pronóstico, que de
allí adelante no hicieron en aquel cerco cosa de momento (…)57

Este acto heróico de Francisco Chilche y su liderazgo entre los cañarís,


adeptos a los españoles, trajo consigo que Francisco Pizarro lo nombre como
kuraka o cacique de los indígenas oriundos y foráneos del valle de Yucay, en
cuyo cargo estuvo mientras la encomienda estuvo en cabeza de Pizarro y sus
herederos. En 1548, cuando la encomienda pasó a manos de la corona, don
García Quispicapi, puso pleito a don Francisco Chilche sobre la propiedad de
los indígenas del valle, a resultas de este proceso ambos personajes llegaron
al acuerdo de que don García se hacía cargo de los oriundos o naturales del
valle y don Francisco de los mitimaes y forasteros:

57
GARCILASO DE LA VEGA, Inca. [1617] Historia General del Perú. Segunda parte de los Comentarios
Reales de los Incas. Buenos Aires; Emecé; 1944. P.181.
43
(…) el marqués don Francisco Pizarro, sirviéndose de los indios
nombró por cacique principal de todos ellos así de los mitimas
como de los naturales al dicho don Francisco Chilche y lo fue y
uso del dicho cargo hasta que estando todos en la cabeza de su
magestad don García Quispicapi pidió ante la justicia de esta
ciudad que atento a que él era cacique principal de todo el dicho
repartimiento se le diese el cacicazgo, por concierto que entre
ellos hubo y por sentencia que en la causa se dio mediante el
concierto quedaron por caciques principales de todos los indios
del dicho repartimiento los dichos don Francisco Chilche y don
García Quispicapi en que el dicho don Francisco Chilche fuese
cacique de los indios mitimas y el dicho don García Quispicapi
cacique de los indios naturales del dicho valle y así lo han sido y
usado de los dichos cargos hasta ahora.58

Enrique Torres Saldamando (1967) escribe que a través de una cedula real
que la corona española da en 1551, esta anexó a su poder la encomienda de
Yucay la que estaba avaluada en doce mil a trece mil pesos anuales, a cambio
concedía al hijo de Francisco Pizarro: “el derecho de percibir los tributos,
durante su vida, sin gobierno ni jurisdicción alguna en la encomienda y con la
obligación de que en los primeros años diera la mitad a su hermana doña
Francisca y después, por una sola vez seis mil ducados a los hijos de Gonzalo
Pizarro”.59

Cuadro N° 04
Encomenderos en Yucay
x Francisco Pizarro (¿?)
x Francisco Pizarro “menor” (¿?)
x Real Corona
x Diego Sayre Tupac Inka (1558)
x Beatriz Clara Coya y Martín García de Loyola (1570)
x Juan Enríquez de Borja y Ana María Coya de Loyola (1609)

FUENTE: PUENTE BRUNKE, José de la. Encomienda y Encomenderos en el


Perú. Sevilla; EXCMA Diputación Provincial de Sevilla; 1992. p. 355.

58
VILLANUEVA URTEAGA, Horacio Ob. Cit. p. 107.
59
TORRES SALDAMANDO, Enrique. Apuntes Históricos sobre las Encomiendas en el Perú. Lima; UNMSM;
1967; p. 33.
44
Es también en ese periodo que el virrey Andrés Hurtado de Mendoza hacía
tratos con Sayre Túpac, el segundo inca rebelde de Vilcabamba para que este
abandonará su refugio en esta zona del Ande. A cambio se le concederían
tierras y tributarios en el valle de Yucay, Jaquijaguana (Anta), Gualaquipa y
Pucara. Guillermo Lohmann Villena, (1948) dice al respecto:

El 12 de enero del repetido año (1557), libraba, el Marqués de


Cañete una provisión en la que, defiriendo a la solicitud del Inga,
le instituía Adelantado del valle de Yucay. El 13 del mismo mes y
año, el Virrey suscribió el título en cuya virtud se hacía merced a
Sayri Túpaj de ciertas rentas y gajes de no escasa monta. Se le
concedía a perpetuidad los repartimientos enclavados en el
mentado valle de Yucay, por título de mayorazgo al modo de los
fundados en España, con licencia real.… De hecho esta
encomienda poco fructificaba, porque como todo el valle era
ameno, estaba dividido en múltiples parcelas pertenecientes a los
vecinos del Cuzco, que las destinaban a viñas y sementeras. De
esta suerte, Sayri Túpa apenas tenía el nombre y título de señor
del valle de Yucay, el vergel más estimado por sus antecesores.
En cambio, otros repartimientos concedidos en la misma fecha
eran más provechosos. En efecto se otorgaron al Inga las
encomiendas de Jaquijahuana, Gualaquipa y Púcara… la renta
total que debía obtener de la recaudación de los tributos de estas
asignaciones se cifraba en 20.000 pesos ensayados anualmente
con la única restricción de ser inajenables y de no poder valerse
del servicio personal de sus feudatarios.60

Este Mayorazgo es el origen del Marquesado de Oropesa el cual comprendía a


más del valle de Yucay la jurisdicción del repartimiento de Maras, en todo caso
esta institución colonial del Marquesado no tuvo mayor influencia en cuanto al
acceso y la tenencia de tierras en nuestro ámbito de estudio, por ello es que
solo hacemos una breve referencia de su existencia.

60
LOHMANN VILLENA, Guillermo. “El Señorío de los Marqueses de Santiago de Oropesa en el Perú”. En:
Anuario de Historia del Derecho Español; Vol. 19. 1948. Pp. 353-354.
45
Figura 09
MAPA DE LAS PROPIEDADES
DE FRANCISCO PIZARRO

FUENTE: Varón Gabai 2014; p. 73.


DESCRIPCIÓN: Tras el reparto de encomiendas, se observa las tierras que
quedaron en poder de Francisco Pizarro.

46
2.2. El proceso de la reducción de indios de 1558 y 1572 en el valle de
Yucay.

2.2.1. Las reducciones de Urcos, Cachi y Yucay, primera agrupación de


naturales y advenedizos en el valle de Yucay.

La reducción de los asentamientos poblacionales prehispánicos, conocidos


comúnmente como ayllus fue unos de los mecanismos que desestructuró la
organización poblacional prehispánica. Franklin Pease (1992) dice: “Desde los
primeros tiempos coloniales abundaron las disposiciones regias que buscaban
reubicar a los pobladores andinos de manera tal que pudieran ser más
fácilmente evangelizados y también de forma que fuera más viable ejercer una
política tributaria… Convenía por muchas razones a la administración colonial
“reducir” la población a centros poblados, donde la gente aprendiera a vivir en
buena policía, es decir en buen orden a la manera europea, y donde fuera
posible aplicar las políticas evangelizadoras y tributarias…”61

Las reducciones a más del control religioso y tributario estaban centrados


asimismo en la restricción al acceso de la tierra de la población indígena, en
efecto Deborah Peole (1987), tomando el caso del proceso de las reducciones
en Chumbivilcas, es elocuente al decir que las reducciones si afectaron el
control de territorios y es mas a partir de las reducciones se daría lugar a la
pérdida de tierras por parte de los aborígenes dándose lugar a las "tierras
vacas" que darían origen a las haciendas.62

Una primera etapa de reducción de los indígenas de Yucay se efectuó en 1558,


en este año los indígenas del valle de Yucay son reducidos en tres pueblos:
Cache, Yucay y Urcos. Ejecutor de esta medida fue Damián de la Bandera,
corregidor y justicia mayor de la ciudad de San Juan de la Frontera de

61
PEASE G.Y., Franklin. Perú Hombre e Historia. Entre el siglo XVI y el XVIII. Lima; Ediciones Edubanco;
1992; p. 197.
62
P00LE, Deborah. “Korilazos, abigeos y comunidades campesinas en la provincia de Chumbivilcas.” En:
comunidades campesinas. Cambios y permanencias. Chiclayo, C.E.S. Solidaridad, 1987.
47
Huamanga, quien había sido nombrado por el virrey Marqués de Cañete como
visitador de los naturales y repartimientos ubicados en los términos del Cusco:

En treinta días del mes de junio de mil quinientos cincuenta y


ocho años, el muy magnífico señor Damián de la Bandera,
corregidor y justicia mayor en la ciudad de San Francisco de la
Frontera y sus términos y visitador por su majestad de los
naturales y de los repartimientos insertos en la dicha ciudad del
Cuzco,… dijo que por cuanto su majestad por una su real
provisión sellada con su real sello emanada del muy excelente
señor Marqués de Cañete, guarda mayor de la ciudad de Cuenca,
visorrey y capitán general en estos reynos y provincias del Perú…
le está cometida la dicha visita según por ella parecía (…).63

Cumpliendo la ordenanza el visitador Damián de la Bandera ordena parecer a


don Alonso Chilche cacique principal del valle de Yucay y a don García
Quispicapi, segunda persona, don Luis Quino, don Luis Apochico, Juan
Bautista, don Pedro Illanicana, Lope Martín Condemayta, don Alonso Tito, don
Diego Laytinba y Fabián Cuchillo, indígenas principales a quienes se les leyó y
ordenó cumplan con la provisión real.

Asimismo el visitador ordenó una visita general y empadronamiento de los


indígenas que habitaban en el valle con fines de determinar la población, los
pagos que correspondía a cada tributario y fijar el número de pueblos en donde
serían reducidos. Para ello se manda que en un plazo de veinte días, sin
ocultar nada y haciendo uso de las cuentas y quipus los datos demográficos se
haga el recuento de indígenas naturales y mitimaes y los lugares en donde
estos habitaban; el desacato a esta orden se castigaría con cien azotes y el
destierro perpetuo.

(…) que desde luego pongan sus cuentas y quipos según su


costumbre y manera de contar de todos los indios e indias que
tienen a su cargo que al presente hay en el dicho repartimiento
así naturales como mitimaes de todas edades presentes y
ausentes y en que pueblos y estancias viven, lo tengan hecho
dentro de veinte días primeros siguientes desde hoy dicho día sin
encubrir persona alguna para que se comienzan a visitar y

63
VILLANUEVA URTEAGA, Horacio Ob. Cit. p. 55.

48
empadronar … so pena de cien azotes y destierro de este dicho
reino perpetuamente… y se ejecutará en sus personas y bienes
para que a ellos sea castigo y a los demás ejemplo…64

El 20 de julio de 1558, el cacique y los principales del valle de Yucay


informaban, en base a sus cuentas y quipus, que ellos tenían a su cargo
setecientos noventa indígenas naturales y mitimaes, mayores a los quince años
y menores a los cincuenta, que tenían casas y tierras de cultivo asentados en
17 “pueblos”.

Parezio por averiguación e información que el dicho señor


corregidor y visitador hizo de palabras a los dichos caciques y
principales de suso nombrados, confesaron en su presencia ante
mí el escribano y testigos… que al presente hay y tienen a su
cargo en el dicho repartimiento setecientos y noventa indios
naturales y mitimaes de cincuenta años abajo y de quince años
arriba, varones casados y avecindados según su costumbre con
casa y chácara y los demás indios e indias muchachas y
muchachos de todas edades… todos los cuales viven y moran en
los dichos diecisiete pueblos…65

Esta población asentada hasta ese momento en 17 asentamientos es reducida


en tres lugares: pueblo de Cache, pueblo de Yucay y pueblo de Urcos.

A los cuales dichos tres pueblos el dicho señor Corregidor y


visitador mandó al dicho cacique y principales se pasen y
reduzcan y hagan pasar y reducir todos los dichos indios en cada
uno de ellos, los que en el tal pueblo fueren visitados según y
cómo adelante ira declarado por le constar como le consta en
ellos poder vivir y permanecer y ser el más útil y provechoso
pasarse y reducirse a ellos que a los demás pueblos y que en
ellos hagan sus casas y moradas, por la orden y según les está
mandado y no se tornen a pasar ni mudar ahora ni en tiempo
alguno so las penas que les serán puestas en los cuales dichos
pueblos los había de visitar y empadronar como si en ellos
tuvieran hechas sus casas y moradas pues se habían de pasar,
permanecer y vivir en ellos a los cuales dichos caciques y
principales que presentes estaban yo el dicho escribano les leí y
notifique y di a entender el dicho auto en sus personas como en él

64
Idem. p. 56.
65
idem. Pp. 57-58.
49
se contiene los cuales y cada uno de ellos dijeron que lo habían
oído y entendido y que estaban prestos de lo hacer y cumplir… 66

La documentación emanada de este proceso inicial de reducción en el valle de


Yucay muestra aspectos resaltantes en cuanto a la existencia y distribución de
sus ayllus prehispánicos. No sabemos la ubicación exacta del pueblo de
Cache, es posible que se haya asentado en inmediaciones de la margen
izquierda del río que atraviesa el valle en inmediaciones de la actual ciudad de
Urubamba. En la visita de 1551 se hace mención sobre dos ayllus: Cuzco
Cache y Taracache, los cuales se encontraban junto al río e inmediaciones de
un puente, asimismo se señala que estaban aledaños junto al ayllu Chauca.

Más delante de estos hay un pueblo Cuzcacache (las negritas


son nuestras), sujeto a don Francisco con sus tierras alrededor y
junto a esto hacia el río a mano izquierda esta otro pueblo junto a
una puente que se dice Taracache (las negritas son nuestras),
con sus tierras y labranzas alrededor, más adelante hay otro
pueblo que se dice Chaoca (las negritas son nuestras), junto al
camino, naturales del valle con sus tierras alrededor, sujetos al
dicho don Francisco.67

En la reducción de 1558 los Cache y los Chauca fueron integrados a otros dos
ayllus más: Guaro y Paca. Del recuento que se hace de la población total de
este pueblo se sabe que contaba con 989 personas de los cuales 292 eran
tributarios y los demás eran viejos, mujeres y niños de diversas edades.

CUADRO N° 05
Ayllus e indígenas tributarios reducidos en el pueblo de Cachi
Ayllu Guaro Ayllu Chauca Ayllu Cache Ayllu Cache Ayllu Paca

Principal Principal Principal Principal Principal


Don Luis Quino Don Luis Apochuco Cusipaucar Juan Bautista Don Pedro

66
Ídem. p. 58.
67
A.R.C. Genealogía de los Betancur. Libro 03. N° 2. Testimonio dado por Benito de la Peña, escribano de
esta ciudad del Cuzco en 22 de abril de 1552 de las diligencias practicadas en virtud de real provisión de
la Real Audiencia de Lima, expedida en 20 de octubre de 1550 sobre la averiguación que se hizo de los
indios que tenía el valle de Yucay y que tierras, casas y haciendas eran de los Yngas, señores que fueron
del Perú y tenían dedicadas al Sol y quien las poseía desde la conquista de los españoles, en cuyo
cumplimiento se calificó la extensión de dicho valle, tierras que fueron de Guainacapac, sus mujeres y de
otros Yngas, reyes gentiles del Perú con todo lo demás que resulta en la representación de él, según el
mapa que formaron y acompaña. f. 30v.
50
Gualparucana Illarucana

Tomas Cusipaucar Pilco Llamachucha Guamán


Ayba Caua Huchapaucar Quisperucana Cayoguaman
Gregorio Aminga Poma Aucagualpa Aucagualpa Paucar
Tipie Pilco Cayo Quispe Guaranga Uñapuri
Sasaconchui Gualpacoua Parcoba Guamancaua Guamán
Pillica Pilco Puricasa Llachuca Gerardo Gualpa
Yanquegualpa Conchui Huchasiue Yapo Cunia
Yanquesaubi Puruguarum Siuepaucar Pedro Acagualpa Nanpacata
Yanacona Llamacensi Iloncoso Cunya Auaninca
Pascual Gualpa Puro Pomaguaranga Guamanyumga Copa
Quispecalla Samoc Atao Guamancayo Guamaripuna
Chuquipigualpa Miguel Paucar Huchapaucar Yungapon Pedro Paucarquillo
Inquilcori Pauchi Alcalloua Pira Cristóbal Paucara
Marcos Paclla Guamanpuro Mancana Cayosongo Guamán
Cori Cusipaucar Illa Guamanpoma Paucar
Bartolomé Sicsi Cunyagualpa Ichicori Guamanrucana Quispeamanga
Chuquipoma Uscapaucar Illarucana Ipilco Guamanpusa
Chungo Cusigualpa Acamaqui Hacha Gualpacusi
Quispe Carhagualpa Condorpitui Machaca Paucar
Pillaca Ataopaucar Parato Cahagualpa Huchaisipsi
Rimache Ruquia Cusipaucar Cusigualpa Ataocara
Tayco Urpi Pilco Astaco Paucacara
Gualpa Unapaucar Cerpa Ataocori Thuchicusi
Tomás Corpa Gualpacusi Pomagualcha Baptista Hucharucana
Miguel Cori Urpi Queca Titogualpa Hutca
Aminga Chaspa Hanchucasa Aymara Pilco
Racutin Pilco Cusipaucar Cuuyagualpa Guamán
Pillaca Llamac Pillpi Uscagualpa Guamancuno
Hullaipa Canapaucar Haque Yapo Vima
Alonso Cuci Nasna Llamacgualpa Quia Mocac
Fabián Nina Uscagualpa Cusigualpa Cusipillco Cusigualpa
Poyasi Jonberi Urpigualpa Ibipaucar Rumi Guamán
Pati Pillaca Hinchapaucar Llamac Cayopaucar
Uybasca Comanca Ataocusi Quispeguarnisa Cayo Cusicayo
Rumi Miguel Cusiguaman Cayta Caque Aucasana
Cumipauci Llamaccusi Pana Ataopuri Puri
Guaipar Cusiconchi Guamancalla Paucargualpa Gualpa
Huancori Cusipaucar Llamacrriqua Cusipaucar Nabasyunga
Chiquimaqui Achata Sulcacayta Cayorucana Paucaryunga
Alonso Quito Huchaatao Cayta Atauaranga Caua
Rimache Caua Acamaqui Guamancayo Huchaatao
Cori Cayagualpa Llamacguaranga Ecocpuri Sisapaucar
Guamán Guauni Quispe Cayo Rumisina Illasaña
Gamoca Imán Uscagualpa Cusinaupa Ayagualpa Cusicopa
Uybapillaca Ucocrucana Cóndor Pilcoyucana Cusiatao
Gualpasauni Cayo Ancahachucha Cayoquita Llamacgualpa
Malacata Paucarmaylli Mita Llaquincho Usca
Hucharuna Paucarjusllo Corpa Uscagualpa Guamanpilco
Quispi Ompiri Ancapaucar Pilco Chauca Paucar
Oyba Cusigualpa Aucarhauchi Domingo Hacha Tuni
Rarisauni Yarcagualpa Cusigualpa Guamanquipa Sauni
Canchipallaca Rarca Cerpa Guamanylla Uscollo
Corpasauni Chuchaquenque Cusicaua Llamaguaranga Gualpa
Guamanchibire Cusigualpa Aucacoua Paucar
Ciniagualpa Illa Cusipaucar
Cusigualpa Llamacruyuyo Ataoquipa

51
Llamaccusi Gualpa Llamac
Juan Cusigualpa Cusiatao Auamanto
Caycha Llautocusi
Illapuri
Yacra
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. Pp. 59-66.

Cuadro N° 06

Población del pueblo de Cachi en 1558


Categoría Número
Indios tributarios 292
Indios viejos de cincuenta años arriba con sus mujeres 8468
cuarenta y dos
Muchachos de trece años hasta quince 23
Muchachos de diez años hasta trece 36
Muchachos de siete años hasta diez 43
Niños de cuatro años hasta siete 57
Niños de cuatro años abajo 156
Mujeres viejas 99
Mujeres viudas y solteras 29
Muchachas de trece años hasta quince 14
Muchachas de diez años hasta trece 24
Muchachas de siete años hasta diez 34
Niñas de cuatro años hasta siete 45
Niñas de cuatro años abajo 89
Total 989
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. Pp. 66-67.

El pueblo de Yucay estaba constituido por hasta siete ayllus: Cuzco,


Yanacona, Acosca, Chacho, Machi, Pomaguanca y Chicón. Es de suponer que
el pueblo, como asentamiento humano, estaba ubicado en el sitio en donde se
encuentra el pueblo capital del distrito de Yucay, con 357 indígenas tributarios
y 1084 personas de diverso sexo, edad y condición, Yucay contaba en 1558
con 1441 pobladores.

El tercer pueblo reducido en el valle de Yucay era el de Urcos, en el sitio que


desde el siglo XVII sería conocido como Urquillos, en el actual distrito de
Huayllabamba.Estuvo conformado por tres ayllus: el ayllu Cuzco el Ayllu

68
Es el resultado de la sumatoria de 42 indios viejos más sus mujeres.
52
Chinchero y el ayllu Guaillabamba, contaba con 140 indígenas tributarios. A
ellos se agregan los 503 indios e indias viejos, muchachos y muchachas de
diferentes edades con los cuales sumaban un total de 643 habitantes.

Concluido el proceso de visita y numeración de los ayllus congregados en los


tres pueblos, el visitador Damián de la Bandera, dio el auto por el cual
ordenaba a los caciques y principales que, en el plazo de tres meses, desde el
momento en que se les notificaba el auto, se muden ellos y los indígenas a su
cargo a los lugares en donde habían sido reducidos y en ellas construyan sus
moradas y permanezcan en ellas.

(…) En veinte y cinco días del mes de agosto del dicho año el
dicho señor corregidor y visitador… así hecha y acabada la dicha
visita dijo que mandaba y mandó a los dichos caciques y
principales de suso nombrados que dentro de tres meses
primeros cumplidos… muden y hagan mudar los indios
contenidos en la dicha visita en los pueblos que en ella van
declarados y en ellos hagan sus casas y moradas y permanezcan
en ellos sin estar para mudar donde estaban en la forma y
manera que les está mandado…69

La visita y reducción del Valle de Yucay de 1558 nos muestra algunas


características del momento. Desde una perspectiva demográfica la población
de las tres primeras reducciones organizadas en el valle de Yucay era de 3073
personas, del cual 789 estaban clasificados como tributarios, es difícil precisar
si este número poblacional es alto o bajo respecto a otros espacios de la
región del Cusco, la falta de fuentes documentales de similares características
temáticas y cronológicas no permite hacer las comparaciones necesarias. En
1551 se declaraba que la población del Valle de Yucay había decaído
significativamente en relación al periodo en que los soberanos Incas la
controlaban como su finca particular, esta disminución demográfica motivo la
presencia de “tierras vacas” que eran motivo de solicitud y reclamo de
españoles e indígenas.

Desde una configuración espacial los caciques del valle de Yucay


mencionaban la existencia de 17 “pueblos” los cuales posiblemente estaban
69
VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. p. 82.
53
asentados en el valle a partir de un ordenamiento dado en la última fase del
periodo Inca, en la relación de ayllus reducidos en los tres pueblos se
mencionan la presencia de 15 ayllus, quedando en incógnita la existencia de
dos de ellos. (Véase cuadro N° 11).

No sabemos cuáles fueron los criterios bajo el cual se agrupó a los ayllus o
pueblos prehispánicos en los pueblos de Cache, Yucay y Urcos, es probable
que este agrupamiento haya sido arbitrario, lo cual conllevó a desarticular
manejos espaciales precedentes. Los conceptos espaciales de bipartición
física, en Hana y Hurín o de tripartición social (Collana, Payan y Qoyao) no han
podido ser explicados en la distribución de ayllus de los pueblos de Cache y
Yucay.

54
CUADRO N° 07
Ayllus e indígenas tributarios reducidos en el pueblo de Yucay
Ayllu
Ayllu Cuzco Ayllu Yanacona Ayllu Acosca Ayllu Chacho Ayllu Machi Ayllu Chicón
Pomaguanca
Principal Principal Principal Principal Principal Principal Principal
Lope Martín Don Alonso Tito Don Diego Fabián Don Pedro Don Antonio Domingo
Condemayta Atauche Cusitumba Cuchillo Cochache Ucha Achuni
Topa Yupanqui Tapara Chincha Pedro Guanso Sauna Juan Rao
Concha Anpai Ticsiguaman Cauitana Tonetumba Tite Lorenzo Amysban García Poma
Cristóbal Roca Callachabi Pallacuzca Runincila Llauchipoma Gucocaca Callisaya
Quicana Ponga Atao Yallimarca Domingo Caca Poriyunga Tininpari Quecabaya
Topa Pongo Ataocori Andrés Cusinra Pedro Guainan Hanco Allisto Cupri Pomacusi
Topa Ianri Mincasipucai Cusi Ayti Camaracac Curacata
Pacua Ninagualpa Hernando Rrima Gualpacaua Paucaryauri Cristóbal Quecori Macoyrima
Topayupangui Corotopa Carmenga Cusipilco Tapicayco Panpachari Pauco
Iela Don Juan Ciylambor Pichicomba Juan Cusicaua Gualpa Guayani Guarmisa
Quisoyupangui Suma Diego Puri Cusiqueca Quispe Huchalan Gualcacache
Quispe Copa Auqui Ñaupa Rio Murucho Cristóbal Uacho
Aucachichac Usco Ambrosio Camiriyo Calata Llacua Sanapal Diego Sulca
Pedro Quipuc Quispe Rarini Chalco Chanilay Yamuncan Uica
Gualpacondor Quispeyupa Casani Gualpa Guamanatao Chapi Llacsatacma
Uyba Pedro Curbayupai Cusiguaman Achancalla Miche Nuti Tunquimarca
Juan Palcac Llacuac Gualpa Diego Cusiayma Raymi Capchimanta
Llaqui Quecacondor Pedro Mancho Apisincha Cuiri Yumucac Quispe
Angari Cochaguaman Lavisaon Timoteo Oyba Cusiguaman Panchitanco Machas
Nicarupa Pedro Camasca Cuyauchai Carmenga Aucacoba Aucayucra Tali
Domingo Catarumi Chancasupa Paucar Llacupauai Domingo Paucarsinse Juan Yauri Pomacuica
Juan Ampaur Alonso Ponga Diego Gualparuca Chucuri Puclla Ianac Machaguai
Cermeñoquino Pomahuico Ruco Juan Cori Llamaruqui Sulca Poquis
Illa Marcagualpa Cusipullo Atao Cusigualpa Mayo Ttangui Paripari
Ingarroca Pomarayac Llacua Poma Pomaquiso Ayarimac Anache
Cuscopaucar Corianca Guaraca Jumpar Condorpoma Pedro Guamán Tuniracha
Juan Chalco Manta Atoncacha Chauca Yauri Cóndor Queque
55
Pedro Quipuc Poma Chanbi Junaci Pacipiuco Yupanqui Pedro Sulca
Mocac Atauaranga Alonso Collo Vilcasupa Chujuicaja Quispe Cociquera
Corpa Guamán Marcos Caua Ande Uillajanampa Sacsa Tuyba
Rimache Cusiña Tillauayta Macha Guarcaycori Chocou Paulo Illanche
Gualpayupanqui Iasayupari Horco Paraspa Paiyacori Tiuro Casabanim
Gualla Unyaos Usco Pilco Guamancayo Bayasi Chicho
Juan Yanque Pillpe Maylochumgo Llamac Juan Condorsupa Bayan Parco
Marcos Uyua Hananpa Llancay Pillco Carosi Uilli Cristóbal
Quima Muyiu Gonzalo Hacha Gualpayunga Paucar Francisco Hacha Queque
Juan Antini Corpa Paye Cusicaua Ataocusi Yanpac Queque
Topayupanqui Vilca Yanque Domingo Baltazar Guamantopa Rimache Andrés
Juan Dañaupa Chanca Topayanca Hucha Cauaruna Condorcacha Marquicana
Andrés Topa Chanbi Pedro Yucra Guayna Hacha Aucamitina Juan Atic Pedro Amao
Juan Mancoro Vilcaruna Salcananca Pilco Yupari Agustín Cóndor Guainalli
Cristóbal Quispe Pomayanac Vilcapariban Cori Pomare Parasca Cauchachi
Carauiti Siunita Tomache Laymi Ñaupaico Chapra Callbari
Guacamayta Quiquia Guairac Gualpa Cóndor Parasca Tunquipoma
Urcoguaranga Caquicoya Andrés Cori Manta Pomayucra Guamancusi Gaspar Iarecusi
Pongopiña Albarchaico Cristóbal Tacuri Cusi Gualpatito Pedro Vilcajananpa Catari
Antonio Marigualpa Guaci Quispechaua Cusiyunga Chuquimuny Topayupanqui Aroata
Quiparhucha Uyba Gualpa Piscocha Gualpaci Jananpa
Sinca Coacalla Lluquemata Yupari Cori Paulo
Cóndor Yucay Cristóbal Caruagualpa Paucarcusi Guaripaucar
Vilcarina Seque
Hucha Allutco Nanpachi
Pillco Yaurimaca
Cusiurco Rantic
Francisco Puna Machaaui
Antonio Supa Ataopaucar
Puchihumache
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. Pp. 67-76.

56
Cuadro N° 08

Población del pueblo de Yucay en 1558


Categoría Numero
Indios tributarios 357
Indios viejos de cincuenta años arriba con sus mujeres 14070
setenta
Muchachos de trece años hasta quince 48
Muchachos de diez años hasta trece 66
Muchachos de siete años hasta diez 72
Niños de cuatro años hasta siete 98
Niños de cuatro años abajo 186
Mujeres viejas 159
Mujeres viudas y solteras 12
Muchachas de trece años hasta quince 62
Muchachas de diez años hasta trece 82
Muchachas de siete años hasta diez 63
Niñas de cuatro años hasta siete 64
Niñas de cuatro años abajo 32
Total 1441
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. Pp. 76-77.

70
Es el resultado de la sumatoria de 70 indios viejos más sus mujeres.

57
Cuadro N° 09

Ayllus e indígenas tributarios reducidos en el pueblo de Urcos


Ayllu Cuzco Ayllu Chinchero Ayllu Guaillabamba
Don García Toma, Principal Lucas Chico, Principal Don Felipe Yubilla
Principal
Urcoguaranga Diego Sulcapoma Ipquen
Rimache Ataomayo Mupache
Gualsucso Alaui Capachoma
Cota Uyba Nampari
Diego Pillacotopa Cuyno Puic
Rimache Conchui Vinansaca
Tiauanaco Diego Yucra Lope Guamancasa
Cucsopaucar Turuca Cansaya
Gualpa Quino Huchainati
Paucarguaman Ialauco Caque
Yanquegualpa Guarango Casiache
Anagualpa Lope Aruapoma Caqui
Tongor Chuquianas Guaranga
Topa Rimache Vilca
Pomaucha Pilimaza Quesa
Guamán Yupanqui Agustín Copa Pongo
Ituni Hamancay Antonio Pariguaman
Cusi Conchui Caruajalli
Diego Cusigualpa Chicullo Diego Chuploana
Ayba Guarman Auqui Culunta
Pasto Bernabé Amao Cutipa
Urco Icoua Antón Tacore Mocapa
Llamoc Uyua Caquina Sulca
Pirco Cusi Pedro Mulloricona
Gualpatito Ponquicha Guaraca
Ingapaucar Condori Llachi
Yucra Sillimini Ataocori
Chiban Melchor Rimache Guamanpuri
Cunchui García Cayo Guamancusi
Villapi Cusi Taco
Quispe Taquipapo Inquill
Gaspar Casayauri Martín Cahupilcapiche Iachana
Caquiacondor Bilcapi Piacori
Quispe Uisimapoma Uchuitopa
Agustín Rayme Uricalla Chiricsupa
Conac Toparemache Corma
Manuel Chalco Guacachara Guamancusi
Chuquivilca Cambi Ataocori
Martín Chaucalla Ninavilca Iaromama
Diego Poma Iacama
Astoguaman Pariuango
Caucha Tantapilco
Corillo Caquinaulla
Carpinti Ataochi
Rupti Agustín Cra
Cambi Chucholeibias
Poma Pallamachai
Sique
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. Pp. 79-81. 58
Cuadro N° 10

Población del pueblo de Urcos en 1558


Categoría Numero
Indios tributarios 140
Indios viejos de cincuenta años arriba con sus mujeres 7271
treinta y seis
Muchachos de trece años hasta quince 22
Muchachos de diez años hasta trece 23
Muchachos de siete años hasta diez 36
Niños de cuatro años hasta siete 34
Niños de cuatro años abajo 75
Mujeres viejas 45
Mujeres viudas y solteras 15
Muchachas de trece años hasta quince 21
Muchachas de diez años hasta trece 26
Muchachas de siete años hasta diez 25
Niñas de cuatro años hasta siete 23
Niñas de cuatro años abajo 86
Total 643
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. p.81

Cuadro N° 11

Ayllus reducidos en el valle de Yucay 1558


Pueblo de Cache Pueblo de Yucay Pueblo de Urcos
Ayllu Guaro Ayllu Cuzco Ayllu Cuzco
Ayllu Chauca Ayllu Yanacona Ayllu Guayllabamba
Ayllu Cache Ayllu Acosca Ayllu Chinchero
Ayllu Cache 72 Ayllu Chacho
Ayllu Paca Ayllu Machi
Ayllu Pomaguanca
Ayllu Chicón
FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Ob. Cit. Pp. 79-81.

No contamos con datos documentales que nos ayuden a explicar las


características de conformación y jerarquías de los ayllus que conformaban
estos tres pueblos ni por que el pueblo de Yucay contaba con ayllus y una

71
Es la sumatoria de 36 indios viejos más sus mujeres.
72
Es posible que en el marco de la bipartición prehispánica uno de estos ayllus era Hanan y el otro
Hurin.
59
población mucho mayor (7 ayllus y 1441 pobladores) en comparación con
Cache; (5 ayllus y 989 pobladores) y Urcos (3 ayllus y 643 pobladores), es
posible que la conformación de estos tres pueblos haya respetado patrones
poblacionales prehispánicos.

Tomando en cuenta la tripartición social del Qollana Payan y Cayao, es factible


hacer un bosquejo hipotético de la configuración social y poblacional de los tres
ayllus que conformaban el pueblo de Urcos. El principal o Qollana sería el Ayllu
Cusco, que estaría integrado por los descendientes de la panaka de Qhapaq
Ayllu que fuera el ayllu familiar de Topa Inka Yupanqui, estos habrían asimilado
en su interior, mediante alianzas matrimoniales, a los antiguos pobladores de
Huayllabamba.

Payan era el Ayllu Guayllabamba, el cual estaba integrado por parte de la


población mitimae que fueron asentados en el valle de Yucay durante el
gobierno de los últimos Inkas históricos (Pachakuteq Inka, Topa Inka Yupanqui
y Wayna Qhapaq Inka). Finalmente, Cayao era el Ayllu Chinchero conformado
por los yanaconas que se supone habían servido a Topa Inka Yupanqui,
mayores datos podrían ayudarnos en un futuro a confirmar o desechar este
supuesto que presentamos.

Tripartición de los ayllus del pueblo de Urcos


Collana Payan Cayao
Ayllu Cusco Ayllu Guayllabamba Ayllu Chinchero

En las sociedades prehispánicas se dieron maneras en la que los grupos de


poder aprovechaban servilmente el trabajo humano, en el estado inca los
grupos que estaban en esta condición recibían la denominación de yanas,
Cabello de Balboa (1586) expresa que los yanaconas se originan como grupo
social en el gobierno de Topa Inka, quien a partir de los ruegos de su consorte
la Coya Mama Ocllo, conmuta la pena de muerte de gente que se había

60
rebelado contra él, perdonándoles la vida a cambio de ser considerados como
sirvientes en perpetuidad:

aplicados para las guacas, ganados y sementeras de los


Yngas y mandó que jamás ninguno de aquellos fuesse
puesto en las vistas generales que se hiciesen y ansi fue
cumplido y hecho y porque el lugar donde este general
indulto se ganó y concedió, se llamase Yanayaco todos los
allí perdonados se llamaron de tal nombre de manera que
fue su nombre de los aplicados para su seruicio particular y
casero Yanayaco cona, y después para acomodar mejor a la
lengua un vocablo tan derramado y largo sincoparonlo,
quitándole de en medio aquella discion yaco, y ansi los tales
seruidores que no están sugetos a visitas sino que tienen a
cargo el ministerio de las haciendas de sus Señores son
llamados Yanacona, y de este nombre usamos el día de oy
los Españoles, con aquellos que nos sirven en casa sin ser
Jornaleros ni Mytayos.73

El ayllu Chinchero cumplía a cabalidad con todo lo expresado por Cabello de


Balboa. Documentación histórica de mediados del siglo XVI (1557), indica la
presencia de gente de este ayllu especializada en laborar las tierras de maíz
de Tiobamba (Maras) las que pertenecían a Topa Inka Yupanqui:

preguntado que yndios los sembraban [las tierras de Tiobamba]


dixo que los yndios de Chinchero de la encomienda de Yucay y
que heran yanaconas de topa ynga yupanqui, fue preguntado
que lo que de allí se coxia que para quien hera dixo que para
topa ynga yupanqui74

Este ayllu debió haber sido un grupo humano bastante extenso dedicado a
laborar las tierras que tenía Topa Inka Yupanqui, lo cierto en el periodo colonial
este grupo humano fueron asentados en Huayllabamba y en el actual distrito
de Chinchero el cual debería su nombre justamente por la presencia de este
ayllu yanacona dejando de lado su nombre primigenio de Cuper Pongo.

73
CABELLO VALBOA, Miguel /1586/ Miscelánea Antártica: una historia del Perú antiguo. Lima: Instituto
de Etnología, Facultad de Letras, Universidad Nacional Mayor de San Marcos. 1951. p. 347.
74
ROSTWOROWSKI, María. “Nuevos datos sobre tenencia de tierras reales en el Incario”. En: Revista del
Museo Nacional. Lima. Tomo XXXI. 1962. P. 141.
61
2.2.2. El proceso de la reducción Toledana en el valle de Yucay.

De manera general se sabe que las reducciones implementadas por el virrey


Francisco de Toledo a partir de 1570, desarticuló en gran manera el control del
espacio que tenían los grupos humanos en el Ande. Al contrario de la primera
reducción que solo fue ejecutada en sitios determinados, la reducción Toledana
incluyó a todo el virreinato peruano y estuvo articulada a una visita general de
la población tributaria.

Si bien es cierto que el fin de las reducciones (sean las implementadas por el
Marques de Cañete o por Francisco de Toledo) buscaban en principio
congregar y reordenar a la población indígena en espacios más reducidos – de
ella el término de “reducción”- recientes estudios buscan demostrar que la visita
Toledana no fue catastrófica como se pensaba y que en muchos casos la
reducción se adaptó a principios organizativos y políticos anteriores a la
conquista. Marina Zuloaga (2014) dice que este hecho determinó que cada
reducción configure una característica propia distante de la intención de
uniformidad que se pensaba articular en todas ellas.

Esta adaptación de los principios organizativos y políticos


prehispánicos a la estructura político-territorial de las reducciones
implicó, desde luego, que cada una de ellas adquiriera desde sus
inicios un perfil y unas características propias y muy distintas
entre sí en desmedro de la intención homogeneizadora que el
sistema imperial pretendía con esta reforma. Estas diferencias se
muestran claramente, por ejemplo, en la dispar base demográfica
de todas ellas: Si bien el ideal era que se asentara en cada
reducción a unos 500 tributarios (unas 2000 a 2500 almas), las
reducciones de Huaylas superaron con creces dicha cantidad de
población agrupándose en las de Huaylas y Recuay más de 2500
tributarios en cada una, 900 en la de Marca y unos 700 en la de
Guaras que se acercaba más al tamaño ideal.75

75
ZULOAGA RADA, Marina. “Presentación de La conquista negociada: guarangas, autoridades locales e
imperio en Huaylas, Perú (1532–1610). Nuevos Avances de las reducciones Toledanas”. En: Bulletin of
the National Museum of Ethnology N° 39; 1; 2014. p. 139.
62
Cabe advertir que contrario al bien documentado momento de la reducción del
valle de Yucay de 1558, es casi nula la información que contamos para explicar
el segundo momento de 1572 en el ámbito de nuestro estudio.

Salvo para el recuento poblacional y de producción tributaria la visita general


de 1572 es muy genérica cuando representa al valle de Yucay, es probable que
el motivo se deba a que todo este espacio era una sola encomienda
perteneciente en ese entonces a doña Beatriz Coya, heredera de don Diego
Sayretopa Ynga.

En el repartimiento del valle de Yucay tiene en encomienda el


capitán Martín García de Loyola, como marido de doña Beatriz
Coya, hija y sucesora de don Diego Sairetopa Ynga, a quien le
encomendó por vía de mayorazgo el marqués de Cañete, virrey
que fue de este reino. Parece que en la visita general por el año
de 1570 se hallaron en el dicho repartimiento 708 indios de edad
de tributar. 120 viejos e impedidos que no pagan tasa. 656
muchachos de 17 años abajo. 1949 mujeres de todas edades y
estados, que por todas son 3433 personas.76

76
COOK, Noble David. Tasa de la visita general de Francisco de Toledo. Lima; Universidad Nacional de
San Marcos. 1975. p. 137.
63
Figura N° 10
REDUCCIONES TOLEDANAS EN EL VALLE DE YUCAY

Santiago de
Urubamba

Santiago de
Yucay

San Juan de
Guayllabamba

FUENTE: Imagen del Google Earth 2018.


DESCRIPCIÓN: Imagen hipotética de cómo quedó la ultima ubicación de los tres pueblos del
valle.

Más valiosa es la referencia que se hace de la población de yanaconas e indios


vacos del valle de Yucay que en un número de 418 estaban considerados
como hábiles para tributar. Los lugares en donde estaban distribuidos estos
indígenas yanaconas y vacos eran pertenecientes a la corona: “En el pueblo de
San Benito de Alcántara: ochenta y tres; en el pueblo de Santiago de Oropesa:
ciento ochenta y dos en el pueblo de San Bernardo: ciento cuarenta y cuatro y
en el de San Francisco de Maras: veinte indios”. 77

Exceptuando a San Francisco de Maras, aledaño al espacio que conforma el


valle de Yucay, son tres los pueblos existentes en 1572: San Benito de
Alcántara, Santiago de Oropesa y San Bernardo. Esta información se
contradice con otro documento de 1577 el cual es la relación de los caciques
principales de los pueblos ubicados en la jurisdicción del Cusco. En dicho
escrito el valle de Yucay, es considerado como un solo pueblo situado en la

77
Idem. p. 213.
64
provincia del Chinchaysuyu, cuyos caciques eran; don Cristóbal Villarimma y
don Hernando Guartatnola.

En la ciudad del Cuzco a primero día del mes de agosto de mil e


quinientos y setenta y siete años, ante el ilustre señor don Gabriel
Paniagua de Loayza, caballero de la orden de Calatravam
corregidor e justicia mayor en esta dicha ciudad… parecieron
presentes los caciques principales e indios de los pueblos y de la
juridición e distrito desta dicha ciudad, de las provincias, ayllos e
parcialidades siguientes: Los indios de la provincia de
Chinchaysuyu… Yucay. Don Xpoval Villarimma, por sí y en
nombre de sus indios, Don Hernando Guartatnola, cacique
principal y de los demás (las negritas son nuestras).78

En 1594, en el marco del juicio de residencia que se hace al corregidor del


Cusco don Antonio de Osorio, se consigna la relación de los pueblos que
conformaban este corregimiento, entre las poblaciones ubicadas en el
Chinchaysuyu se menciona a los pueblos de Santiago de Urubamba, Santiago
de Yucay y San Juan de Guayllabamba, todos ellos concentrados en el valle de
Yucay.79

Infortunadamente estas referencias son parciales y no ayudan a tener un


concepto más detallado por ejemplo sobre el proceso de pervivencia de los
ayllus prehispánicos. Datos más precisos se tienen para fines del siglo XVIII y
mediados del siglo XIX. (Véase cuadro N° 12)

78
ESPINOZA SORIANO, Waldemar. Los cuatro suyos del Cuzco. Siglos XX y XVI. En: Boletín del Instituto
Frances de Estudios Andinos VI; N° 3-4. 1977. p. 114.
79
ARC. Notarial Siglo XVI. Miguel de Contreras; Protocolo N° 4. 1596-1597. f.472. Memoria de los
pueblos que hay dentro de las diez leguas de la jurisdicción de la ciudad del Cuzco.
65
Cuadro N° 12

Relación de pueblos y ayllus del valle de Yucay entre los años de 1558 a 1836
1558 1572 1577 1594 1689 1784 1836
Pueblo Ayllus Pueblos Ayllu Pueblo Ayllu Pueblos Ayllu Pueblos Ayllu Pueblos Ayllus Pueblos Ayllus
s s s s s s
Guaro Yanacona Yanacona
Cache Sn. Libre Cañarí Libre
Cache Cache Benito No se San Pedro de Pumaguama Urubamba Cañarí
Chauca de indica Santiago No se Pueblo de No se Urubamba n Pumaguama
Paca Alcántar de indica Urubamba indica Cachic n
a Urubamba Mitma Cachic
Huaroc Mitma
Pueblo No se Huaroc
de indica Catan
Cuzco Yucay Paca
Yanacona Chuquibamb Pacac
Acosca No se Santiago No se Villa de No se a Collana
Yucay Chacho Santiago indica de Yucay indica Yucay indica Catan Yucay Lancha
Macho de Santiago de Collana Libre
Pomaguanca Oropesa Yucay Lancha Cañarí
Chicón Libre Cañarí Aliaga
Aliaga Guaraca
Uraparte Ccoscco
Huaraca
Cozco
Collana Ccollana
Cuzco Villa de Paniagua Pinagua
Urcos Guaillabamb San No se San Juan de No se Santiago de Yanaconas Yanaconas
a Bernardo indica Guayllabamb indica Guaillabamb No se Guayllabamb Libre Cañarí Guayllabamb Libre Cañarí
Chinchero a a a
indica a Huayocare Guayocari
y anexo de Urcos
Urcos
Urquillos
Urquillos Urquillos
FUENTE: ARC. Fondo Intendencia. Real Hacienda Legajo 163. 1784. Tesorería Fiscal. Padrón Original del Partido de Calca. Legajo 15. 1822-1836. VILLANUEVA URTEAGA
1979 y 1982.

66
2.3. La merced como forma de acceso a la tierra en el valle de Yucay.

Guevara Gil, en su libro sobre el proceso histórico y legal del origen y


consolidación de la hacienda Santotis dice: “Mediante una merced de tierras la
Corona o sus representantes (Virrey, Gobernador, cabildos autorizados),
concedían a un particular el dominio sobre una porción de terreno que hasta
ese momento había estado en condición de realengo y bajo el derecho
eminente del monarca hispano”.80

La merced de tierras fue junto a la compraventa uno de los mecanismos más


usuales de acceso a la tierra en el valle de Yucay, bajo esta modalidad los más
connotados vecinos españoles de la ciudad del Cuzco accedieron a la
propiedad de terrenos mediante peticiones que de manera constante hacían al
cabildo del Cusco.

2.3.1. Urcosbamba y la merced de tierras de 1551.

El año de 1550 el cabildo del Cusco, solicitaba a la Real Audiencia de la


ciudad de los Reyes (Lima), que se reparta vía merced a los vecinos
españoles de la ciudad del Cusco, tierras baldías que se ubicaban en el valle
de Yucay:
(…) Sépades que Juan de Quiñones en nombre del Cabildo,
Justicia y Regimiento de ella por una petición que presentó en la
nuestra audiencia y chancilleria real que por nuestro mandato
reside en la ciudad de los Reyes (…) nos hizo relación diciendo
que cerca de esta dicha ciudad a cuatro leguas de ella hay gran
cantidad de tierras que en tiempo antiguo los Incas, señores
naturales que fueron de estos reynos, tenían dedicados al sol (…)
vos mandamos que luego que con ella seáis requeridos hayáis
información así de lo hecho como a instancia de parte y de los
caciques e indios del dicho valle y su comarca y de la cantidad de
tierras que son los que hay en el dicho valle de Yucay que dicen
que fueron dedicadas al sol y quien ha usado y usa de ellas 81.

80
GUEVARA GIL. Jorge A. Propiedad agraria y derecho colonial. Los documentos de la hacienda Santotis.
Cuzco (1543-1822). Lima; Pontificia Universidad Católica del Perú. 1993. p. 86.
81 A.R.C. Genealogía de los Betancur. Libro 03. N° 2. Ob. Cit. f. 23-23v.
67
Motivo de esta solicitud era el miedo que mostraba el Cabildo cusqueño por la
mortandad que sufrían los recién nacidos debido a que la ciudad del Cusco
estaba asentada en un entorno climático frio, adverso para la crianza de los
hijos de los vecinos españoles. En vista de ello se solicitaba al virrey don
Antonio de Mendoza y a la Audiencia de la ciudad de los Reyes se reparta a
los españoles casados tierras en Yucay, las cuales estaban baldías y sin
dueño por haber sido antes de la conquista dedicadas al Sol.

Presentada la petición, la corona real, a través de la Real Audiencia de la


ciudad de los Reyes, considera justo el pedido del cabildo cusqueño pues era
conveniente para que crezca la población de la ciudad del Cusco. Pero antes
era necesario hacer las averiguaciones correspondientes en cuanto a la
utilidad de esta merced y evitar algún perjuicio a los indígenas habitantes del
valle de Yucay, en ese sentido se ordena al Mariscal Diego de Alvarado,
corregidor de la ciudad del Cusco haga las averiguaciones respectivas y
hechas estas se envíen a la Real Audiencia para que vistas estas se provea lo
más conveniente.

(…) es cosa conveniente y necesaria por la perpetuidad de la


dicha ciudad darse a personas, vecinos de ella o que en ella se
avecindasen para sus labranzas y crianzas y como la nuestra
merced fuese lo cual visto por los dichos nuestro Presidente y
Oidores fue acordado que debíamos mandar dar esta nuestra
carta para voz en la dicha razón y nos tuvimos por bien por la
cual vos mandamos que luego que con ella seáis requerido
hayáis información así de oficio como a instancia de partes y de
los caciques e indios del dicho valle y su comarca y de la
cantidad de tierras que son las que hay en el dicho valle de
Yucay que dicen que fueron dedicadas al Sol y quien ha usado y
usa de ellas y pro o daño se seguirá en que se repartan a los
naturales y españoles y hecha la dicha información cerrada y
sellada la enviareis con vuestro parecer a los dichos nuestro
Presidente y Oidores para que por ellos vista, cerca de ello
provean lo que convenga y no fagades en dé al /contrario/ so pe-
/f.24/ na de la nuestra merced y de quinientos pesos de oro para
la nuestra cámara. Dada en la ciudad de los Reyes a veinte días
del mes de octubre de mil y quinientos y cincuenta años.82

82
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f. 23v-24.
68
Casi un año después el cabildo del Cusco solicita al corregidor y justicia mayor
que cumpla con lo dispuesto en esta provisión y pueda hacer la vista de ojos
de las tierras de Yucay para en base a ella hacer la información
correspondiente, petición que es aceptada favorablemente.

Y luego el dicho señor corregidor tomó la dicha provisión en sus


manos y la beso, puso sobre su cabeza y dijo que la obedecía y
obedeció como carta y mandado de su Rey y señor natural a
quien Dios nuestro señor deje vivir y reinar por largos años, con
acrecentamiento de mayores reinos y señoríos. Y en cuanto al
cumplimiento de ella dijo que su merced ira a ver las tierras en
ella contenidas por vista de ojos y que vayan algunos de los
dichos regidores y vecinos a ver la dicha disposición de las dichas
tierras y que informados por todas vías de lo contenido en la dicha
provisión, su merced enviara la información y relación a la dicha
Real Audiencia como en la dicha provisión real se contiene y esto
dio por su respuesta en presencia de los dichos señores regidores
según que parece por un auto que se asentó en el libro del
cabildo a que me refiero, paso ante mí Sancho de Orue,
escribano.83

Este momento está refrendado en el libro de cabildo del Cusco, en efecto en la


sesión del día 07 de agosto de 1551 esta consignada la petición que el cabildo
hace al corregidor del Cusco para que haga la visita y vista de ojos de las
tierras de Yucay:

Este día requirieron al Sor Corregidor que vea la provisión que


esta ciudad tiene sobre las tierras de Yucay y que haga la
información y relación como por ella su Magestad lo manda, para
que se repartan las tierras entre los vecinos y le suplicaron que
vaya a verlo por vista de ojos, el cual lo aceptó e dijo que en
cumplimiento de lo que se contiene en la dha provisión que sus
mercedes piden que él irá al Yucay a las dhas tierras y hara la
información y la enviará, más que lo que se gastare que sea a
costa de la ciudad.84

Con fecha 12 de agosto de 1551, el mariscal Alonso de Alvarado, corregidor y


justicia mayor, junto a Juan Julio de Ojeda, regidor del cabildo del Cusco y el
licenciado Antonio de la Gama, conocedores ambos de las tierras ubicadas en
el valle de Yucay se apersonan en este lugar junto a varios “indios Yngas
83
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f. 24v.
84
A.R.C. Libro de Cabildo N° 01. 1545-1551. f. 159.
69
antiguos del Cuzco” a quienes piden que señalen gráficamente usando
materiales como tierra, piedras y otros elementos, las posesiones y heredades
que existían en ambas márgenes del río Yucay. En base a este bosquejo
debían de señalar luego las tierras y moyas existentes, a quienes pertenecieron
antes cuando la elite Inca las poseía y quienes las cultivaban o eran sus
dueños en el momento de la visita.

A los cuales dichos Yngas, el dicho señor corregidor y


acompañados les mandaron que así como tienen pintado este
dicho valle le señalen declarando en todo lo que tienen pintado
cuales son las tierras que los indios de este dicho valle
antiguamente han labrado en tiempo de los Yngas por suyas y
con que se sustentaban y de ellas tributaban que eran obligados a
tributar y que asimismo declaren y señalen en que partes y
lugares de este dicho valle es tan buenas tierras que eran del Sol
y del Ynga y de otros señores y señoras particulares en las cuales
los indios /f.26/ de este dicho valle no tenían parte ni señorío, ni
las labraban para sí y de la manera que antiguamente servían en
la labor de las dichas tierras.85

Joan Caritopa, Tito Cagua Quispe Gualpa y Bautista Ticsi, fueron los indígenas
nobles cusqueños que participan en esta visita, los cuales según sus ritos
antiguos: “mochando al Sol y la tierra y la guaca como lo tienen de costumbre,
prometieron de decir verdad y respondiendo a lo que les es preguntado por la
dicha lengua dijeron, teniendo delante la dicha pintura.”86

En otro momento la relación que estos tres personajes hacen sería contrastada
con la declaración de otros indígenas, en este caso los caciques de Calca:
Yocalla, Ynocochuri, Tito Ygiugi, Roca Yupanque y Ataure Sinche y de
Camaque, cacique de los indígenas naturales del valle de Yucay, este último
había conocido personalmente y participado en las guerras de Wayna Qhapaq,
todos estos indígenas corroboraron lo graficado y afirmado por los nobles
cusqueños.

(…) Y luego para más información de lo susodicho hicieron


parecer así a los caciques principales del repartimiento de Calca
que son Yocalla, Ynocochuri, y Tito Ygiugi y Roca Yupangue,

85
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f.25v-26.
86
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f. 26.
70
Ataure Sinche, los cuales por su aspecto parecen ser de edad de
más de cuarenta o cincuenta años y desde arriba y por ser
comarcanos al dicho valle y que lo saben y entienden y se les
mostró la dicha pintura y lo que los dichos caciques de suso
declarados, han dicho y declarado de esto.

Los cuales todos, habiéndolo visto, dijeron que es verdad, todo lo


que de suso está escrito y en la dicha pintura está muy bien
hecha y bien declarado según que los dichos indios orejones del
Cuzco lo han declarado y pintado por cuanto entre ellos se ha
tratado y platicado…

Y luego el dicho señor corregidor y los demás, hicieron parecer


ante sí para más averiguación de lo susodicho a Camaqui,
cacique y señor natural de los indios naturales de este valle, quien
no supo decir la edad que tenía más de que parece de más de
cincuenta años y que se acuerda y conoció muy bien a
Guaynacava y anduvo con él en la guerra, al cual se le mostró la
dicha pintura y lo que de suso tienen declarado los dichos
caciques Yngas orejones y los demás de suso declarados, el cual
habiendo visto la dicha pintura y lo demás de suso declarado y
habiéndolo bien visto y entendido por lengua del dicho Pedro
Delgado, dijo que la dicha pintura estaba bien hecha y que lo que
los dichos indios orejones del Cuzco de suso a dicho y declarado
es la verdad, esto lo sabe porque es cacique y señor natural de
este valle y que las tierras y moyas del Sol y del Ynga como como
de suso está declarado y de las demás señores que arriba se
contiene.87

Finalmente se llamó a don Francisco Chilche, cacique principal del valle para
que, de su parecer sobre este asunto, el cual salvo cierta discrepancia en
relación al lugar exacto donde se ubicaban las tierras nombradas
Chuquibamba, estuvo de acuerdo con lo demás.88

Con la información y la visita hecha el Mariscal Alonso de Alvarado ordenó que


a más del informe respectivo se anexe a ella un lienzo pintado por los mismos
informantes en el que se grafique el bosquejo que antes habían desarrollado.

A causa de la visita e información de las tierras del valle de Yucay y la propia


vista de ojos que hizo el mariscal Alvarado del valle de Yucay, este comprueba
el exceso de tierras y la poca población de indígenas que había en ella por lo

87
A.R.C. Genealogía de los Betancur. ff. 32-33.
88
A.R.C. Genealogía de los Betancur. f. 34-34v.
71
cual concluía que de hacerse la merced esta no sería en perjuicio de ninguna
persona y que con esta medida se solucionaba del riesgo de vida de los recién
nacidos e hijos pequeños de los vecinos españoles de la ciudad del Cusco
Finalmente señala el Mariscal Alvarado que el mejor sitio en donde se podría
dar la merced de tierras a los vecinos españoles se encontraba en la quebrada
de Hurcosbamba, sitio que antes había sido del Inka y que ahora era cultivado
para beneficio personal de don Francisco Chilche.

(…) por cuanto él ha visto por vista de ojos el dicho valle y tierras
y sitios que están pintados en la dicha pintura y ha hecho la
información que de suso se contiene y entiende la necesidad que
esta ciudad tiene o no tiene de las dichas tierras del valle,
proveídos en la dicha provisión y asimismo a entendido algunas
otras cosas de que esta ciudad tiene necesidad para el
recrecimiento y aumento de los hijos que nacen y se procrean en
esta ciudad y ha entendido que para los niños recién nacidos esta
ciudad tiene y es de temple desabrido, incompetente para que se
críen y también ha entendido y visto que no se crían en esta
ciudad los hijos de los casados y corren muy gran peligro /f.39/ y
riesgo de la vida hasta pasar de edad de dos años y porque el
riesgo es en tal manera que de diez hijos de españoles y
españolas que nacen, no se gozan ni logran los cuatro de ellos y
todo el pueblo es de común opinión que lo causa el mal temple
de esta ciudad, a cuya dicha causa a los vecinos muestran
desabrimiento y descontento en tal manera que a causa de no se
les sus hijos no muestran tener voluntad ni intención de
permanecer y perpetuarse en esta ciudad, atento a lo cual es su
parecer que en todo el dicho valle de Yucay hay tierras buenas y
abundantemente en que pueden los naturales que ahora hay, y
aunque fuesen en más cantidad, hacer sus sementeras y
labranzas en que sustentarse y en que coger mucho más maíz al
doble de que ellos dan y les está señalado por tributo y porque
tiene entendido que en tiempo antiguo eran en el dicho valle tres
tantos de indios y más de ellos que ahora son y tenían para todos
tierras abundantemente como los ha visto y por la información
parece, atento lo cual que su pares-/f.39v/ cer es que su alteza
podía hacer merced a los vecinos y casados de esta ciudad que
en ella residen del pedazo de tierra, chácaras y heredamiento
que está en la quebrada que va pintada a donde dicen
Hurcosbanba, desde lo alto hasta el río con otro pedazo de tierra
que está de la otra parte del río, frontero de esta tierra, hasta la
puente que está allí junto porque de dárseles esta tierra no se
sigue ningún perjuicio a los indios del dicho valle por cuanto
parece era del Ynga y lo que antiguamente en ello se cogía, lo
traían a esta ciudad para los señores naturales y sin esto como
ha dicho hay abundante y copiosamente de tierras para los
72
naturales que al presente hay, aunque hubiesen muchos más y
porque de esta tierra tampoco se aprovechan los indios del
común del dicho valle sino don Francisco, cacique /ad/venedizo a
él en las cuales tierra hace trabajar a los indios y se lleva él todos
los aprovechamientos.89

Días antes de la navidad de 1551 el virrey don Antonio de Mendoza otorgó un


mandamiento dando comisión al Mariscal Alvarado, para que, en su condición
de visitador y Corregidor del Cusco, señale y reparta entre los vecinos de la
ciudad, casados o que estén pronto a casarse, un solar en las tierras de
Hurcosbamba para que en ella puedan edificar una casa y huerta a donde
puedan llevar a criar a sus hijos menores. La merced de estos solares
condicionaba a quien lo obtuviera a que no podría enajenarlo bajo ningún
concepto a persona particular o institución religiosa alguna, en un plazo de seis
años, en caso se quebrantase esta prohibición perdería el poseedor del solar
la propiedad a ella y el comprador el valor y precio de la propiedad.90

Finalmente, el Virrey mandó al corregidor que vea el sitio más conveniente en


las tierras del Sol de Hurcosbamba en donde se pueda repartir los solares, en
tal manera que no se perjudique a los naturales y que le envíe una relación de
lo actuado en este reparto junto a la lista de los vecinos casados que habían
sido agraciados:

(…) y para dar y ratificar dichos solares mando que primero se


vea la más conveniente y cómoda parte que en las dichas tierras
del Sol hay para ello y a él señalen de manera que no se tomen
/f.21v/ las tierras a los indios particulares ni sea en su perjuicio y
hecho el repartimiento entre los dichos vecinos casados según
dicho es. Enviad ante mí la relación de ello y de los vecinos que
hay en la ciudad por casar y que tantos solares que darán por
repartir. Hecho en los Reyes a veinte y tres días del mes de
diciembre de mil y quinientos y cincuenta y un años. Don Antonio,
por mandado de su señoría. Baltasar Hernández. 91

A los 41 vecinos españoles de la ciudad del Cusco agraciados con los solares
repartidos en esta merced se les señaló sus propiedades en manzanas de

89
A.R.C. Genealogía de los Betancur. ff. 38v-39v.
90
A.R.C. Genealogía de los Betancur. Ff. 20v-21.
91
A.R.C. Genealogía de los Betancur. 21-21v.
73
dimensiones variadas en las que se ubican cuatro o dos solares casi todos a la
margen izquierda del riachuelo canalizado que baja de las alturas de la
quebrada de Urquillos. (Véase cuadro N° 13).
CUADRO N° 13

Vecinos españoles de la ciudad del Cusco agraciados por la


merced de solares de Urquillos de 1552
x El Mariscal Alonso de Alvarado x Diego Maldonado
x Martín de Andueza x Costilla
x Diego de Urbina x Pedro Alonso Carrasco
x Riveros x Berrio
x Alonso de Alva x Diego de Silva
x Pinelo x Don Pedro Puerto Carrero
x Betanzos x Francisco Villafuerte
x Domingo Hurtado de Hernández x Pineda
x Sancho de Orué x Barrientos
x Miguel Sánchez x Mansio Sierra
x Juan Diez x Trujillo
x Blas Gómez x Terrazas
x Martel x Francisco Gutiérrez
x Quiñones x Diego Maldonado de Álamos
x Pedro López x Don Juan de Mendoza
x Don Pedro de Cabrera x Frías
x Tomás Vásquez. x Hinojoza
x Garcilaso x Lope Martín
x Vasco de Guevara x Juan de Gallegos
x Palomino x Piedrahita
FUENTE: A. R. C. Genealogía de los Betancur. Libro 03. N° 2. Testimonio dado por
Benito de la Peña, escribano de esta ciudad del Cuzco en 22 de abril de 1552 de las
diligencias practicadas en virtud de real provisión de la Real Audiencia de Lima,
expedida en 20 de octubre de 1550… Croquis de la distribución de solares en la
quebrada de Urquillos. f. 45.

El efecto de esta merced fue perjudicial para cierto segmento de la población


indígena asentada en el lugar en especial para el cacique don Francisco
Chilche. La documentación valiosa cuyo título extenso dice: “Testimonio dado
por Benito de la Peña, escribano de esta ciudad del Cuzco en 22 de abril de
1552 de las diligencias practicadas en virtud de real provisión de la Real
Audiencia de Lima, expedida en 20 de octubre de 1550 sobre la averiguación
que se hizo de los indios que tenía el valle de Yucay y que tierras, casas y
haciendas eran de los Yngas, señores que fueron del Perú y tenían dedicadas
74
al Sol y quien las poseía desde la conquista de los españoles, en cuyo
cumplimiento se calificó la extensión de dicho valle, tierras que fueron de
Guainacapac, sus mujeres y de otros Yngas, reyes gentiles del Perú con todo
lo demás que resulta en la representación de él, según el mapa que formaron y
acompaña”, es precisamente el testimonio del proceso que Chilche sigue entre
1551 a 1552 en contra de la visita y posterior merced de las tierras de la
quebrada de Urquillos.

Queda como incógnita el proceso posterior que se dio luego de la distribución


de solares, es de suponer que esta merced se hizo efectiva, la documentación
de los siglos XVII, XVIII y XIX parece corroborar ello, ya que muestra a
Urquillos como un espacio en donde se asentó una serie de pequeñas fincas
de vecinos españoles del Cusco. En 1689 el cura de la doctrina de San Juan
de Guaillabamba lo dice claramente:

(…) y en distancia de un cuarto de legua está la quebrada de y


anexo de Urquillos, congregación de hacendados con convento
de Nuestro padre San Francisco… Los vecinos españoles
hacendados en dho anexo son los siguientes: D. Alejo de Valdés
y Bazán, caballero del orden de Calatraba, con casas y
haciendas. D. Antonio Ortiz Luengas del Campo, con casas y
haciendas, D. Gerónimo de Loaisa, vecino en la ciudad del Cuzco
y hacendado en dha quebrada. D. Juan Dabalos y Toledo,
hacendado en dha quebrada y vecino de la ciudad. Antonio del
Castillo, vecino y hacendado, Pedro de Villanueba, vecino y
hacendado, Matheo Guiral, vecino. Martín Sánchez, vecino en el
Cuzco, hacendado en dha quebrada, Pedro Silvestre, vecino y
hacendado, Melchor Jorge, vecino y hacendado, Francisco Dies
del Castillo, clérigo presbítero, hacendado en dha quebrada…92

92
VILLANUEVA URTEAGA, Horacio. Cuzco 1689. Documentos, economía y sociedad en el sur andino.
Cusco: Centro Bartolomé de las Casas; 1982. p. 272.
75
Figura N° 11
F
CROQUIS DE LA DISTRIBUCIÓN DE SOLARES PARA LOS
VECINOS DE LA CIUDAD DEL CUSCO

FUENTE: VILLANUEVA URTEAGA,Horacio. Ob. Cit. p.55).


76
2.3.2. El cabildo del Cusco y merced de tierras en el valle de Yucay.

La merced de tierras de la quebrada de Urquillos de 1552 no fue el único


momento en que esta forma de acceso a la tierra se dio en el valle de Yucay.
La revisión de los libros de cabildo de la ciudad del Cusco durante el siglo XVI
muestra a esta institución colonial otorgando igualmente mercedes a base de la
petición que hacían algunos vecinos de la ciudad.

Los cabildos fueron una institución clave en la conquista de


América. Con un territorio que desbordaba las fronteras del
mundo conocido y con recursos económicos y humanos en
aquellos tiempos limitados, la Corona era incapaz aún de
desplegar un cuerpo de servidores que controlaran sus recientes
posesiones. Frente a ello, los grupos de expedicionarios debieron
ocuparse por sí mismos del gobierno de las tierras que iban
ganando. En esta tarea se valieron del único recurso institucional
que les permitía establecer un cierto orden, control y gestión de
los nuevos espacios: los cabildos. Cualquiera fuese el nombre con
el que se le designase, el cabildo, concejo o ayuntamiento era una
institución de gobierno de villas y ciudades. Se encargaba de la
administración de los recursos locales y de regular la vida
económica de su respectiva comunidad. Era también un tribunal
de justicia de instancia menor, civil y criminal. Además, encarnaba
la personalidad jurídica de su localidad y tenía jurisdicción sobre
un amplio espacio —conocido como los «términos»— que podía
albergar a aldeas y áreas rurales..93

Esta facultad y privilegio de los cabildos de inicios de la conquista fue utilizada


convenientemente por alcaldes y regidores, elegidos entre los vecinos más
influyentes de la ciudad del Cusco, para otorgarse entre sí dadivas legales en
espacios estratégicos como el ámbito de la ciudad y el valle del Cusco,
Jaquijaguana, Quispicanchis, los valles de Tono y Toayma (Paucartambo),
Amaybamba, Calca, el valle de Yucay. Un recuento cronológico desarrollado
en base a la revisión de los libros de cabildo con respecto a Yucay y que
abarca los años de 1545 a 159794 nos muestra la veracidad de este aserto.

93
ALARCÓN OLIVOS, Marcos. “Los libros de cabildo y la temprana historia política del Perú colonial”. En:
Histórica; XLI.2. 2017. p. 145-146.
94
Como se puede ver en el cuadro N° 13, la cronología de los libros de cabildo no es correlativa, lo cual
conlleva a algunos vacíos en la explicación que pretendemos desarrollar sobre el papel de esta
institución colonial en el contexto de la tenencia de tierras en el valle de Yucay.
77
18 de enero de 1552. “En este día pidió por petición del tesorero García de
Melo una estancia y para ello un asiento que era de Topa Ynga Yupangue que
se llama Hurpeguata que es una quebrada que baja de Copere al valle del
Yucay, hizosele merced de ello porque los señores Diego Maldonado del
Álamo e Juan Julio de Hojeda, regidores, dijeron que ello lo habían visto…”95

14 de agosto de 1559. “Este día se confirmó a Juan de la Plaza un solar y


paredones que el señor corregidor licenciado Polo le señaló en la plaza del
Yucay y se proveyó en su petición como en ella parecerá.”96

14 de agosto de 1559. “Este día se confirmó a Sebastián Nuñes de Baldes,


unos paredones que el dicho señor corregidor le hizo merced en Yucay con
información de Sebastián de Cazalla y mandosele dar título como parecerá en
su petición.”97

14 de agosto de 1559. “Este día confirmaron a Martyn Marroquín y a Tomás


de Herrera, ciertos buhíos en Yucay que le hizo merced el señor corregidor con
parecer y confirmación de Sebastián de Cazalla y proveyose a su petición y en
ella parecerá.”98

25 de agosto de 1559. “Este día se confirmó la tierra de Yucay a Juan Nyeto y


lo del solar de monedero y se cometió a Diego de Truxillo para que vea a donde
se pueden dar solares en Yucay a Diego Ortiz de Guzmán y a Diego de los
Ríos y Lope de Zuazo y a Martyn de Meneses.”99

17 de noviembre de 1559. “Este día se le hizo merced a doña Ynes, hija de


Guanacaba, mujer de Gaspar Hernández de diez topos de tierra en Yucay con
parecer de Diego Hortiz y de Diego de Truxillo, regidores, con que no lo venda

95
A.R. C. Libro de Cabildo N° 01. 1545-1551. f. 169.
96
ARC. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. f. 34v.
97
ARC. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. f. 34v.
98
ARC. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. f. 34v.
99
A.R.C. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. f. 39v.
78
y lo goce ella y sus herederos, la merced se asentó en los títulos a que me
refiero.”100

22 de enero de 1560. “En este cabildo se proveyó confirmación de un solar


que el señor corregidor dio a Bermúdez en el Yucay que era de Mamaocllo
como se lo señalo siendo sin perjuicio.”101

01 de abril de 1560. “Este día a Juan de la Moneda se le hizo merced de unas


tierras en Mandococha, en Yucay conforme al parecer de Diego de Truxillo y
que sean sin perjuicio de tercero en cualquier tiempo y se le dio título de ello sin
perjuicio.”102

13 de julio de 1562. “Este día se hizo merced a Juan de Pancorbo de ciertas


tierras en el Yucay a do dicen Charca Gualla que es sin perjuicio que lo vio el
señor oidor y asentose al pie de la petición.”103

05 de abril de 1566. “A Julián de Umaran, regidor, merced de un solar en


Yucay como parecerá por los títulos.”104

10 de mayo de 1566. “Este día se hizo merced a Diego Sánchez de cuatro


topos de tierra en Yucay con parecer de Martyn Hurtado de Arbieto, regidor, a
quien se cometió, es cerca de do dicen Paca y de las de don Francisco
Chilche.”105

02 de agosto de 1566. “A Pedro Alonso Carrasco en el Yucay se le hizo


merced de un pedazo de tierra para huerta y casa con parecer de Martín de
Meneses como parecerá por el título ante mí el dicho escribano.”106

100
A.R.C. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. f. 52.
101
A.R.C. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. f. 63v.
102
A.R.C. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. f. 73.
103
A.R.C. Libro de Cabildo N° 04. 1561-1564. f.87v.
104
A.R.C. Libro de Cabildo N° 04. 1561-1564. f. 81.
105
A.R.C. Libro de Cabildo N° 04. 1561-1564. f. 82v.
106
A.R.C. Libro de Cabildo N° 04. 1561-1564. f.86v.

79
Cuadro N° 14

RELACIÓN DE LIBROS DE CABILDO DE LA GRAN CIUDAD DEL CUSCO


N° Años Folios Descripción
1 1545-1551 168
Libro de actas de las sesiones del cabildo de la
ciudad del Cusco
2 1557 120 Relación y cargo de los pesos de oro que se meten
en la caja de los bienes de los difuntos
3 1559-1560 123 Libro de actas de las sesiones del cabildo de la
ciudad del Cusco
4 1561-1564 185 Libro de actas de las sesiones del cabildo de la
ciudad del Cusco
5 1564-1567 121 Libro de actas de las sesiones del cabildo de la
ciudad del Cusco
6 1573-1578 235 Libro de actas de las sesiones del cabildo de la
ciudad del Cusco
7 1581-1584 164 Libro de actas de las sesiones del cabildo de la
ciudad del Cusco
8 1595-1597 177 Libro de actas de las sesiones del cabildo de la
ciudad del Cusco
FUENTE: Cuadro elaborado por tesistas en base al catálogo de la sección de Libros
de Cabildos de la ciudad del Cusco del Archivo Regional del Cusco.

Las mercedes de tierras en Yucay no solo contemplaban zonas de cultivo sino


también solares y espacios constructivos prehispánicos, como el caso del
tambo Inka de Yucay. En 1564 Diego de Silva, vecino de la ciudad, quien
convalecía de sus enfermedades en Yucay, solicita al cabildo se le adjudique
este espacio que estaba contiguo a una propiedad que había adquirido tiempo
antes de Diego de Trujillo.

Diego de Silva, vecino de esta ciudad digo que por la gravedad de


mis enfermedades como a vuestras mercedes notorio es, yo me
fui al valle de Yucay, termino de esta ciudad y con el buen temple
de él me he sentido aliviado y con aumento de salud y para hacer
en el asiento, compre a Diego de Truxillo, un pedazo de chácara
que está en la plaza del dicho valle y junto a ellas están unos
aposentos que no son de nadie ni de dárseme resulta perjuicio a
nadie ni a españoles y por causa de la dicha chácara a mí me
viene mayor acomodamiento.107

A cambio de estos aposentos él ofrecía construir en la plaza de Yucay otros


dos edificios mejores con salas, cocina y su caballeriza, los cuales servirían de
aposentos para los viajeros que iban a Yucay. El cabildo en un primer momento

107
A.R.C. Libro de Cabildo N° 4. 1561-1564. f. 175.
80
rehuyó el pedido, pero con el parecer favorable de García de Melo,
comisionado para ver sobre este asunto, otorgó la merced respectiva.

Y luego los dichos señores justicia y ayuntamiento dijeron que


hacían e hicieron merced a Diego de Sylva de los dichos
aposentos que pide en su petición y que la obra que se ofrece
hacer de buhíos y otros aposentos lo vea el procurador de la
ciudad para que como tal procurador se satisfaga que sean tales
cuales convenga y vistos de relación al cabildo para que se
asiente en este libro.108

La condición de obtener una merced, en especial los solares, era que estos
debían de ser habitados, esta circunstancia muchas veces no se cumplía y ello
conllevó a que en algún momento el cabildo ordenase el cumplimiento de esta
norma.

En este cabildo los dichos señores dijeron que por cuanto hay en
el valle de Yucay muchos solares dados por este cabildo a
personas y particulares y no los pueblan, mandaron dentro de dos
meses primeros los pueblen como fueren viviendo que no los
poblando los proveerán como cosa vista y mandaron se
apregonase.109

En el contexto cronológico de los libros de cabildo revisados hasta el momento


(1545-1578), se puede plantear que la merced fue uno de los mecanismos de
acceso a la propiedad inmueble que más se usó en pos de acaparar
posesiones en el valle de Yucay. La primera merced otorgada en 1552 a
García de Melo y el último otorgado en 1565 a Diego de Silva son los años
terminales en que el cabildo del Cusco otorgó mercedes en Yucay
seguramente por no haber más tierras o solares para solicitar, este panorama
parecer ser el mismo en otros lugares de la región, después de 1565 hasta
1574 se consigna solo dos mercedes de tierras; una estancia en Quispicanchis
a Rodrigo de Esquivel y un molino y tierras en Paucarpata a Diego Delgado.

108
A.R.C. Libro de Cabildo N° 4. 1561-1564. f. 175v.
109
A.R. C. Libro de Cabildo N° 5. 1564-1567. f. 97v.
81
2.4. El valle de Yucay y la primera visita y composición de tierras de 1594.

De la mano del proceso de las reducciones, aunque con más de dos décadas
de diferencia se dio también en los andes un proceso denominado “visita y
composición de tierras”, instrumento legal que sirvió para reducir aún más los
antiguos derechos a la tierra de la población indígena.

Ots Capdequi (1959), dice que: “La composición fue, tanto en el derecho
histórico español, como en el derecho propiamente indiano, una figura jurídica
por la cual en determinadas circunstancias, una situación de hecho – producida
al margen o contra el derecho – podía convertirse en una situación de derecho
mediante el pago al fisco de una cierta cantidad”.110

Partiendo de este concepto las composiciones, (que se derivan de la palabra


latina componere; que significa arreglar, ordenar); era utilizado en situaciones
diferentes a través del cual, por ejemplo, funcionarios reales o personas
particulares obtenían permisos reales para casarse, o bajo la llamada
“composición de extranjeros” muchas personas legalizaban su situación
domiciliaria en las indias, empero a las composiciones se las conoce más por
haber sido el instrumento legal que fue empleado de manera recurrente en la
consolidación de la propiedad agraria colonial.

Las composiciones de tierras tuvieron dos motivos fundamentales: la primera


resolver el problema de la frontera agraria del área rural del virreinato peruano,
después de casi medio siglo de dominación peninsular se había generado una
serie de conflictos entre españoles e indígenas con respecto a la posesión de
la tierra. Muchos propietarios de tierras, en especial españoles, a través de
diversos mecanismos legales e ilegales se habían adueñado poco a poco de
enormes extensiones de tierras conformando las primera e incipientes
instituciones agrícolas y ganaderas necesarias para el abastecimiento de los
mercados urbanos y mineros.

110
OTS CAPDEQUI, José María. España en América. El régimen de tierras en la época colonial. México:
Fondo de Cultura Económica; 1959. p. 37.
82
La segunda causa de las composiciones fue la angustia fiscal de la corona
española. “ante los problemas generados por la guerra con Inglaterra y por los
requerimientos de la Real flota que protegía las mercaderías que iban a
América y el metal que regresaba…”111

El inicio de las composiciones se podría remontar a 1573, fecha en que el


virrey Francisco de Toledo denunciaba el despojo que sufrían los indígenas de
sus tierras, hacia 1590, estos despojos comenzaron a ser un problema grande
para la corona española que decidió tomar cartas en el asunto y resolver
cuanto antes este problema reglamentando la tenencia de la tierra lo cual se
efectivizo el 01 de noviembre de 1591. Cabe señalar que en el lapso de los
siglos XVI al XVIII (1591 – 1788) se produjeron varias visitas y composiciones
generales, lo cual: “demuestra el continuo cambio en la propiedad y una
extensión constante de las haciendas, así como la necesidad de financiamiento
de la Hacienda Real.”,112 de todas estas las que marcaron en gran manera la
historia agraria de la región del Cusco son las de 1594, 1647 y la de 1657.

La primera visita y composición en el ámbito del corregimiento del Cusco se dio


entre 1593 a 1596 y fue realizada por el licenciado Alonso Maldonado de
Torres, oidor de la real audiencia de Lima. Este personaje una vez llegado de
Lima conformo dos grupos de visitadores, un grupo que estaba dirigido
personalmente por él y se quedaba en la ciudad del Cusco en donde recibía la
multitud de peticiones de los diversos propietarios que deseaban legalizar sus
propiedades adquiridas las más de las veces ilegalmente.

El segundo grupo de visitadores se dirigieron a las zonas rurales del


corregimiento del Cusco en donde tomaron contacto no solo con los
propietarios españoles de tierras lejanas al ámbito urbano sino que
especialmente iniciaron una serie de interrogatorios a los indígenas a quienes

111
GLAVE, Luis Miguel y REMY, María Isabel. Estructura agraria y vida rural en una región andina.
Ollantaytambo entre los siglos XVI y XIX. Cusco: Centro Bartolomé de las Casas; 1983. p. 87.
112
Idem. p. 89.
83
preguntaban sobre las tierras que tenían y las que antes de la llegada de los
españoles habían tenido, es decir cuáles habían sido antes las tierras del ayllu,
cuáles eran tierras del inka y cuáles eran del sol, una vez determinado y
aclarados la forma como los indígenas de los ayllus gozaban de sus tierras el
visitador empezaba a hacer el reparto de las tierras a cada componente del
ayllu a cada tributario se le asignaba una determinada cantidad de topos113
sean estos de sembrar papas, maíz, etc. Todo estaba condicionado al ámbito
geográfico en donde se ubicaba el ayllu, también se repartía tierras para las
viudas, huérfanos, viejos.

Una vez terminado de repartir las tierras el visitador indicaba que los tributarios
ni sus descendientes jamás podrían vender total o parcialmente las tierras que
se les daba, a la muerte del tributario las tierras pasaban a manos de sus hijos
y si este moría sin tener descendencia entonces sus tierras iban de nuevo a
mano del ayllu o comunidad de indios.

Terminado de hacer el reparto de tierras a los indígenas se procedía a


confirmar las tierras que los caciques o curacas de los ayllus tenían aún desde
la época de los incas adicionalmente se le daba topos de tierras a los cuales se
les denominaba como “tierras de cacicazgo” las cuales no podían ser vendidas
ni heredadas a sus hijos sino se transfería al cacique que le podría suceder en
el cargo. Asimismo, el visitador repartía a la comunidad de indios varios topos
de tierras denominadas como “tierras del común”, los cuales tendrían que ser
cultivados por todos los tributarios, el producto de esas tierras servía
exclusivamente para ayudar a la comunidad en el pago de sus tributos por lo
que estas tierras eran administradas por el curaca o cacique, asimismo se
destinaba tierras que servirían en caso de que la población aumente.

Hecha la distribución de las tierras para los indígenas tributarios de los ayllus o
comunidad de indios, el visitador repartía tierras a la iglesia, el cual tenía que

113
Según Glave y Remy, el tupu o topo es una unidad de medida netamente prehispánica, en metros
cuadrados un topo es igual a la multiplicación de: 80.25 mts. x 40. 12 mts. que sería igual a 3219.63. m2.
esta medida no es uniforme y varia en mayor o menor cuantía viendo la calidad de la tierra y la zona
donde está ubicada. (Cfr. Glave y Remy Ob. Cit. p. 524).
84
estar a cargo del cacique y de los alcaldes de indios, el producto de estas
tierras estaba destinadas para comprar la cera para las fiestas religiosas y para
trabajos destinados a mejorar la infraestructura de la iglesia.

Finalmente, el visitador ubicaba las llamadas “tierras sobrantes” que eran las
que se vendían en remate a españoles que tenían sus propiedades en
inmediaciones de ellas o a personas que buscaban adquirir tierras114.

Todo este procedimiento era testimoniado por escrito por un escribano de visita
y este testimonio era entregado al cacique o curaca de los indígenas visitados
el cual era guardado “bajo tres llaves” ya que este documento constituía el
título con el cual ellos podrían defender y demostrar la posesión que tenían de
sus tierras.

Desde este preámbulo la primera visita y composición de tierras de 1594 en el


valle de Yucay está documentada parcialmente desde algunos fragmentos
testimoniales que tenemos de algunos ayllus de los pueblos de Huayllabamba
Yucay y Urubamba a base de los cuales se pretende desarrollar una visión
preliminar de este momento, la cual en otro momento se podrá ampliar de
mejor manera a la luz de nuevos datos documentales.

Dos documentos incompletos ubicados en los fondos Urubamba y del notario


Teófilo Puma que se encuentran en la Sección Histórica del Archivo Regional
del Cusco tratan, parcialmente, sobre la primera visita y composición de tierras
que se dio en el actual distrito de Huayllabamba en 1594. El primero es un
documento trunco de la composición y reparto que se hizo en el ayllu
Guayllabamba, el segundo, inserto dentro de un expediente de restitución de
tierras trata del mismo tema en relación al ayllu Yanacona o Urco. En base a
estas dos fuentes veamos la forma como se dio este proceso.

114
La descripción que hacemos de los procedimientos como se hacían los repartos de tierras en la
primera visita y composición de tierras la hemos desarrollado a partir de la primera visita y
acomodamiento de los indios del pueblo de Sumaro, ubicado en Chinchaypuquio. visita que fue
estudiada e investigada por el historiador Donato Amado para mayor información cfr. AMADO
GONZALES, Donato. “Reparto de tierras indígenas y la primera visita y composición general. 1591-1595.”
En: Histórica. Vol. XXII; N° 2. 1998. Pp. 197-207.
85
El 08 de julio de 1594, el corregidor de Yucay, quien fué Alonso López
Barriales, recibe comisión del oidor licenciado Alonso Maldonado de Torres,
visitador general de tierras y composición en la cual Maldonado de Torres
nombra a López Barriales como juez comisario para la repartición de tierras en
el valle de Yucay.

Con este cargo Alonso López Barriales se presenta en el pueblo de


Huayllabamba el 26 de agosto de 1594 y habiendo ordenado que todos los
caciques, alcaldes y principales se reúnan, les hace entender el motivo de su
presencia e inicia la visita y composición de tierras con el respectivo
empadronamiento y declaración de las tierras que los indios de Huayllabamba
usufructuaban:

En el pueblo de Guaillabamba a veinte e seis días del mes de


agosto de mil e quinientos noventa y quatro años. Alonso López
Barriales, corregidor de este partido e juez comisario para la
repartición de las tierras del por comisión del señor licenciado
Alonso Maldonado de Torres del consejo de su magestad e su
oidor en la real audiencia de los Reyes, juez e visitador general
dela dhas tierras, venta e composición dellas, etc. En
cumplimiento de lo que el dho señor le manda vino a este dho
pueblo y en el estando juntos los caciques, alcaldes e principales
e demás yndios del les dio a entender la dha comisión para que
/f.3/ todos ellos se junten para los empadronar aber las tierras
que tiene e poseen e las que no la tiene para les repartir e dar a
cada uno las necesarias para su sustento e de sus hijos y
herederos e aumento de los suso dhos y abiendolo así todos
oydo y entendido se juntaron todos los yndios y demás personas
de este dho pueblo de todas hedades y estados y los
empadronaren por sus aíllos e declararon las tierras e pastos e
quebradas que tiene e poseen todas las quales fueron
generalmente medidas por Juan López Delgado, persona de
ciencia e conciencia para lo suso dho que juramentado para ello
e después desto por el dho padrón que se hizo de los suso dhos
que por sus ayllos el dho corregidor les fue midiendo e
repartiendo por ellos a cada uno lo que a menester todo por su
orden.115

115
A.R.C. Fondo Urubamba. S.L. Siglo XVI-XIX. Expediente incompleto del libro de reparto de tierras de
los ayllus de Guayllabamba, reducidos en el pueblo del mismo nombre. Ff.2v-3.

86
Hecho este primer acto de empadronamiento y averiguación se inicia al acto
de medir las tierras, el cual es desarrollado por Juan López Delgado, “persona
de ciencia y conciencia”, tras lo cual Alonso López Barriales da paso al acto de
repartir las tierras de maíz y de trigo, utilizando el topo y el silco como unidad
de medida. La cantidad de topos de tierras, específicamente de las tierras de
maíz que se reparten a los ayllus Guayllabamba y Urco difieren, por lo que es
bueno verlos de manera separada.

Al indígena que detentaba el cargo de curaca del ayllu Guayllabamba, don


Pedro Sasa Concho, se le reparte cuatro topos de tierras de trigo y tres topos y
medio de tierras de maíz, al indígena principal pero que no detentaba cargo,
Don Cristóbal Muqui, se le reparte tres topos de tierras de trigo y dos topos de
tierras de maíz, a los tributarios, sean estos solteros o casados, en general se
reparten dos topos de tierras de trigo y dos de maíz. A los indígenas viejos y a
los huérfanos se les reparte un topo de tierras de trigo y un topo de tierras de
maíz, en el caso de las mujeres viejas y viudas solo recibían a medio topo de
tierras de maíz y de trigo, hay casos, no explicados, en las que a un tributario
se le da tres topos de tierras de trigo y una de maíz, o de mujeres de edad no
determinada , mujeres viejas y viudas que solo reciben un topo o medio topo
de maíz y no se les reparte tierras de trigo.

Las tierras de trigo del ayllu Guayllabamba estaban ubicadas en Caquiapata,


Guacra, Pichincho, Quisguarpata, Patarache, Pomañaupa, Ypocheco,
Mayllapuquio, Capapata, Puito. Las de maíz son más variadas y van desde
Guayocare, Guailla, Quincha, Taravilca Urco, Guaropuquio, Tantapata,
Tancabamba, Chuquicallua, Parobamba, Tavirca Urco, Raravilca Cucho,
Taracalla Urco, Coyachuqui y Acomaca entre otros.

Como tierras de comunidad se señalaron catorce topos de tierras de maíz que


serviría para el pago de la tasa. Estos catorce topos se ubicaban en los
andenes que tenían en Condebanba y Utcabanba y Siuairo Pastar Chuquil,
Vero y en Condebanba Siuaoro. Igualmente, se le daba al ayllu Guayllabamba

87
dos topos de tierra en el sitio de Conoc para que sea cultivado con alfalfa, el
fruto de este alfalfar serviría para el servicio del tambo y de la justicia.

Tierras de la comunidad deste ayllo guayllabamba(las


negritas son nuestras)
La comunidad deste ayllo se le dejaron para pagar la tasa de
maíz catorce topos que tenían en andenes en Condebanba y
Utcabanba y Siuairo Pastar Chuquil, Vero y en Condebanba
Siuaoro.

Y asimismo se les dexo a este ayllo otros dos topos de tierra para
un alfalfar en Conoc, para el servicio del Tambo y de la justicia. 116

El testimonio del reparto hecho a los indígenas del ayllu Urco o Yanacona que
hasta antes de ser reducidos en el pueblo de Huayllabamba se asentaban en
la quebrada de Urquillos mencionan las tierras de maíz que se les había
entregado en la primera visita y composición de 1594, las cuales estaban
ubicadas en Guayocare, Casanabamba y Chuquicallua. Al curaca, Melchor
Guamán Rimasca, se le da dos topos de tierras de maíz, a diferencia de la
generalidad del reparto de topos que se da en el ayllu Guayllabamba, los
tributarios del ayllu Yanacona o Urco reciben tierras de manera indistinta, unos
tienen topo y medio, otros un topo y otros solo medio topo, las razones para
esta diferenciación no son explicadas y queda como interrogante. (Comparece
el cuadro de tierras repartidas al ayllu Guayllabamba con el cuadro del reparto
hecho al ayllu Yanacona) Consultar cuadro 15 en anexo
.
CUADRO N° 15

116
A.R.C. Fondo Urubamba. S.L. Siglos XVI-XIX. 1594. Expediente incompleto del reparto de tierras hecho
en el pueblo de Guayllabamba, hecho por Alonso López Barriales, juez visitador y repartidor de tierras
en el valle de Yucay, por comisión dada por el oidor Alonso Maldonado de Torres. Documento trunco.
f.6.
88
A partir del testimonio del reparto de tierras del ayllu Yanacona se puede tener
asimismo un cuadro más detallado de la configuración territorial de los ayllus
conformantes de la reducción de Guayllabamba. Alonso López Barriales,
encargado de la visita y reparto del valle de Yucay, determina los sitios en
donde la iglesia y las cofradías debían de tener sus tierras, el cual citamos
textualmente:

Tierras que dejaron a la iglesia de este pueblo y cofradías


della

Para los ornamentos de la yglesia e servicio della le dejaron dos


topos de tierra de maíz en Chuquicallua.

A la Cofradía de las Ánimas /f.20v/ del Purgatorio del pueblo de


Guayllabamba, se le dio quatro topos de trigo en el asiento de
Abalinga, linda con Xptobal Chuquiyana.

A la Cofradía de Nuestra Señora del dho pueblo de


Guayllabamba, se le dieron tres topos de tierra en Patta Racche
en la hoyada y llano que lindan con Benito Guaman Pucri.117

Asimismo, el visitador declara que los espacios de pastos en donde los


indígenas de Huayllabamba pastaban sus ganados y caballos serían de uso
común de la misma forma que lo habían hecho desde tiempos pasados, uso
común refrendado y mandado por disposición de la majestad del rey.

Lo mismo pasaba con las arboledas denominadas de madera brava que


habían crecido naturalmente en las quebradas de Urquillos, por ejemplo, los
cuales eran de uso común. La excepción se daba en los alisos y quisguares
que eran propiedad de los indígenas que los habían plantado.

Las árboledas de las quebra- /f.21v/ das y otras partes de


qualesquier suertes que sean an de ser comunes el corte dellas a
estos dhos yndios y a otras qualesquier personas exepto los

117
A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 02. 1700-1769. Memorial presentado por Marcos Chiguantopa,
cacique principal y gobernador del pueblo de Guayllabamba. Incluye repartición de 1595. f. 19v-20.
89
alisos y quisguares que son de los dhos yndios que los
plantaron.118

Las tierras de sembrar papas ubicadas en sitios altos no fueron medidas y son
repartidas, indicándose que se debían de mantener su usufructo a la manera
como la tenían de costumbre, es decir se seguía manteniendo el manejo y
control prehispánico de estas tierras:

Las chacaras de papas, quinua y ocas que los dhos yndios tienen
en las punas las han de tener y labrar según y de la forma y
manera que siempre las han tenido y poseído e labrado porque
estas tales no se venden ni se las reparten y se les quedan para
que cada uno tenga las que tenían y labren las demás que
pudieren ellas y sus hijos y herederos sin entretenerse otra
ninguna persona en ellas.119

118
A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 02. 1700-1769. Memorial presentado por Marcos Chiguantopa,
cacique principal y gobernador del pueblo de Guayllabamba. Incluye repartición de 1595. Ff. 21-21v.
119
A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 02. 1700-1769. Memorial presentado por Marcos Chiguantopa,
cacique principal y gobernador del pueblo de Guayllabamba. Incluye repartición de 1595. f. 21v-22.

90
CUADRO Nro 16

REPARTO DE TIERRAS DE TRIGO Y MAIZ HECHO A LOS INDIGENAS DEL AYLLU GUAYLLABAMBA DURANTE LA PRIMERA
VISITA Y COMPOSICIÓN DE TIERRAS DE 1594

Nombre Categoría T° trigo Lugar T° maíz Lugar


Don Pedro Sasaconcho Cacique segunda persona 4 Caquiapata 4 Guaiocare, Guailla, Quincha
Don Cristóbal Muqui Principal, tributario 3 Caquiapata 2 Taravilca Urco,
Francisco Tatil Guana Tributario 2 Guacra 2 Guaropuquio, Tantopata
Juan Vala Tilo Tributario 2 Pichincho 2 Tantopata
Francisco Aucaocha Tributario 2 Pichincho 2 Junto camino real que va a Cuzco
Pedro Cusiguaman Tributario 2 Pichincho 2 Chuquicallua
Julián Quispi Tributario 2 Pichincho 2 Barobamba
Francisco Guachac Tributario 2 Pichincho 2 Tancabamba, Tantopata
Alonso Guaranca Tributario 2 Pichinchui 2 Tantopata, Tauilca Hurco
Benito Sucso Bisnay Tributario 2 Quisguarpata 2 Guaropuquio, Quincha
Thomás Yanaychaca Tributario 2 Pichinchuya 1 Tancabamba
Gonzalo Tini Chaca Tributario 2 Quisguarpata 2 Guaropuquio, Tantopata
Antón Halloclla Tributario 2 Caquiapata, Guacra 2 Guaropuquio, Tantopata
Diego Guallo Mango Tributario 2 Patarache 2 Guaropuquio, en el arroyo
Alonso Guamán Yacolla Tributario 2 Pomañaupa 2 Rarauilca Cucho, en el cerro
Cristóbal Yacha Tributario 2 Quisguarpata 2 El cerro, Tancabamba
Benito Pariapoma Tributario 2 Ypocheco 2 En unos andenes y la quebrada
Domingo Pariguanca Tributario 2 Ypocheco 2 Taracalla Hurco, Tantopata
Juan Pariapoma Tributario 2 Guacra 2 Quincha, Tantopata
Martín Humpay Tributario 2 Mayllapuquio 2 Tancarbamba, Tantopata

91
Cristóbal Chuqui Yana Tributario 2 Capapata 2 Tarauilcahurco, Runtopata
Gabriel Chuquicondor Tributario 2 Patarache 2 Tarauilcahurco, Tantopata
Andrés Carguayamo Tributario 2 Maillapuquio 2 Tancabamba, Tantopata
Juan Vichaycala Tributario 2 Maillapuquio 2 Taravilcahurco, Tantopata
Benito Colque Ricra Tributario 2 Puito 1½ Tancabamba, Coyachuqui
Juan Sulca Tributario 2 Puito 2 Tancabamba, Acomaca
Agustín Chuquirupai Tributario 2 Puito 2 Guaropuquio, Tantopata
Pedro Apaguaman Tributario 2 Maillapuquio 2 Tancabamba, Tantopata
Cristóbal Sucay Puclla Tributario 2 Maillapuquio 2 Tancabamba, Tantopata
Manuel Tinisaca Tributario 2 Patarache 2 Tancabamba, Tantopata
Pedro Parisaca Tributario 2 Patarache 2 Guaropuquio, Acomaca
Cristóbal Yabilla Tributario 2 Patarache 2 Tarauilcahurco, Tantopata
Juan Yauilla Tributario 2 Patarache 2 Tarauilcahurco, Tantopata
Sebastián Manda Tributario 2 Maillapuquio 2 Tarahuilcahurco, Tantopata
Diego Mullisaca Tributario 2 Patarache 2 Guaropuquio, Tantopata
Agustín Yaro Mania Tributario 2 Pomanaupa 2 Acomaca
Pedro Halahue Tributario 2 Hulli 2 Quincha, Tantopata
Diego Tocas Tributario 2 Caquiapata 2 Rara Vilcacucho, Quincha
Benito Chico Tributario 2 Poma Ñaupa 2 Tancabamba, Tantopata
Hernando Tinipuclla Tributario 2 Maillapuquio 2 Tarauilca Hurco, Tantopata
Hernando Ticona Tributario 2 Paropata 2 Tarauilca, Tantopata
Simón Torralva Tributario 2 Quilapata 2 Tarauilcahurco, Tantopata
Marcos Culaca Tributario 2 Patarache 2 Tarauilcahurco, Tantopata
Diego Sucha Tributario 2 Maillapuquio 2 Tarauilcahurco, Tantopata
Tomás Guaman Tributario 2 Maillapuquio 2 Guaropuquio, Tantopata
Juan Tinipuchai Soltero, tributario 2 Maillapuquio 2 Tarauilca Cucho, Tantopata
Francisco Pomamango Tributario 2 Guacra 2 Quincha, Tantopata
Hernando Cutipa Tributario 2 Patarache Calala 2 Tarauilca Urco, Tantopata
Juan Yauri Tributario 2 Patarache 2 Tancabamba, Yumcha
Marcos Suguaico Tributario 2 Patarache 2 Tancabamba, Tantopata
92
Lorenzo Cutillo Tributario 2 Maillapuquio 2 Tancabamba, Tarauilca Hurco
Hernando Masma Tributario 2 Ollisinai 2 Tarauilca Hurco, Quincha
Juan Copa Tributario 3 Guacra, Patarache 1 Acomalo
García Puclla Haca Tributario 2 Guaropuquio, Tantopata 2 Guaropuquio, Tantopata
Juan Uilinpaz Tributario 2 Guacra, Quisuarpata 2 Quincha, Acomaca
Simón Zaca Tributario 2 Aguacsinca 2 Guaropuquio, Tantopata
Agustín Chanapauca Tributario 2 Maillapuquio 2 Tancabamba, Tantopata
Juan Cuitar Tributario 3 Abasinga, Patarache 1 Acomaca
Lorenzo Guamán Suyuri Tributario 4 Guacra, Patarache, 1 Acomaca
Tucucuya120
Juan Uguia Tributario 3 Poma Naupa Guacra 1 Acomaca
Diego Nina Lloclla Tributario 3 Pomanaupa, Patarache 1 Acomaca
Baltasar Quispi Tributario 3 Guacra, Patarache 1 Acomaca
Alonso Gualpa Cusi Tributario 5 Patarache 1 Acomaca
Juan Copa Tributario 2 Maillapuquio 2 Acomaca
Alonso Guamán Cusi Tributario 2 Guacra 2 Acomaca, Tantopata
Cristóbal Cota Saca Tributario 2 Patarache 2 Tarauilca Hurco, Quincha
Benito Yugi Tributario 2 Aguasinca, Mailla 2 Tarauilca Hurco, Tantopata
Jorge Pariacondor Tributario 2 Maillapuquio 2 Vitcobamba, Tantopata
Diego Quispi Tributario 2 Patarache 2 Tancabamba, Tantopata
Pedro Guamán Cusi Huérfano 1 Maillapuquio 1 Tantopata
Isabel Anguia Viuda ½ Maillapuquio
Catalina Paula Quilaca Viuda ½ Maillapuquio ½ Tantopata
Ynes Pazacul Vieja viuda ½ Maillapuquio ½ Acomaca
Isabel Yache Vieja viuda ½ Maillapuquio
Juana Nacho ½ Maillapuquio
Ana Pachua Vieja viuda ½ Maillapuquio ½ Tantopata
Catalina Poma Suyo Vieja viuda ½ Maillapuquio ½ Tantopata

120
De los cuatro topos, uno le corresponde a su hijo Pablo Poma.
93
Isabel Pampai Vieja viuda ½ Maillapuquio ½ Tantopata
Ynes Conchu Vieja viuda ½ Maillapuquio 1 Tantapata
Pedro Pilitanca Huérfano 1 Maillapuquio 1 Urcobamba
Beatriz Chaucas Vieja ½ Maillapuquio 1 Tantapata
Isabel Coca Vieja ½ Maillapuquio 1 Tantapata
Ynes Comalla Vieja viuda ½ Maillapuquio ½ Tantapata
Ynes Binos Vieja viuda ½ Maillapuquio 3 silcos Tantapata
Catalina Chimbo Viuda ½ Maillapuquio ½
Ana Saca Viuda ½ Maillapuquio 1 Tantapata
Ynes Pecta Viuda ½ Maillapuquio 1 Tantapata
Isabel Guampa Viuda ½ Maillapuquio ½ Tantopata
Ynes Sasi Vieja ½ Maillapuquio ½ Quincha
Ana Vilcama Vieja viuda ½ Maillapuquio
Isabel Soso Vieja ½ Maillapuquio ½ Tantopata
Pedro Cusiguaman Huérfano 1 Maillapuquio ½ Vitcobamba
Gaspar Anauca Huérfano ½ Maillapuquio 1 Vitcobamba
Catalina Casacho 2 Saguaipampa ½ Vitcobamba
María Sasi Chumbi ½ Saguaipampa
Bautista Toan Viejo 1 Maillapuquio 1 Tantopata
Alonso Sipán Huérfano 1 Maillapuquio 1 Tancabamba
Juan Quispi Huérfano 1 Maillapuquio 1 Vitcobamba
García Hucha Toma 1 Maillapuquio 1 Quincha
Pedro y García Cóndor Huérfanos 2 Patarache 1 Tantopata
Luisa Macalli Vieja ½ Maillapuquio 1 Tantopata
Diego Chancos Mudo 1 Maillapuquio 1 Tantopata
María Carba Chumbi Viuda 1 Pomanaupa
María Pisa Huérfana 1 Pomapuquio
Pedro Cóndor Soltero 1 Pomapuquio
Catalina Chimbo ½ Tantopata
Isabel Guairoc Viuda 1 Tantopata
94
Ynes Sisa Ñusta 1½ Guaiopuquio
Beatriz Mormo Vieja ½ Acomaca
FUENTE: A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo N° 1. 1594-1693. 1594. Expediente incompleto del reparto de tierras hecho en el pueblo de Guayllabamba,
hecho por Alonso López Barriales, juez visitador y repartidor de tierras en el valle de Yucay, por comisión dada por el oidor Alonso Maldonado de Torres.

95
Mucho más fragmentada es la fuente histórica que documenta el proceso de la
primera visita y composición en San Pedro de Yucay, el cual trata
particularmente del reparto que se hace a los ayllus Ynga Cusco, Guaraca y
Yanacona. (Véase cuadro N° 17).

Los topónimos de las tierras de maíz de estos tres ayllus muestran un manejo
de espacio reciproco bastante amplio que va desde Charcaguaylla (Urubamba)
hasta Guayocari y Urquillos (Casanabamba), este contexto es incompleto en
cuanto a poder determinar los espacios de cultivo temporales en donde se
producía principalmente el trigo y la papa.

Otro aspecto que queda asimismo en incertidumbre es el manejo que tendrían


los ayllus del pueblo de Yucay de las quebradas de arboledas necesarias en
cuanto a la obtención de la leña o de maderos para las construcciones. Las
referencias ubicadas en los libros de cabildo muestran en 1573 que la
quebrada de Chicón junto a otras quebradas, era considerado como propios de
la ciudad del Cusco estando a cargo del ayllu Yanacona el cuidado,
suponemos que durante la visita y composición de 1594 persistiese esta
condición.

Este día se acordó que porque hay seis yanaconas que tienen a
guarda la quebrada de Chicón y demás quebradas de esta ciudad
y no hay ordenanzas para castigar a los que cortan y talan la
madera que hay en las dichas quebradas y hacen otros daños así
españoles como indios acordaron que se hagan ordenanzas y
para que las hagan y ordenen y se traigan a este cabildo se
cometió a los señores Domingo de Artaza y contador Miguel
Sánchez.121

Por otro lado, existía en la reducción de Yucay un grupo de individuos


considerados como “indios reservados por ser Yngas de este pueblo”, rezagos
de las antiguas panaka reales ubicadas en este valle en el periodo de Wayna
Qhapaq.

121
A.R.C. Libro de Cabildo N° 06. 1573-1578. f. 6.
96
Indios reservados por ser Yngas deste Pueblo

A Don Alonso Topa Cusigualpa Ynga se le dio un topo en Sillaquincha


linda con tierras de Juan Gómez y otro topo en Pucroquincha linda
con Don Alonso Puchana y otro topo a su mujer Leonor Tocto Sicsa
que lo heredo de Beatriz Sicssa. Entro junto a Urubamba linda con Don
Pedro Poma Rimache

A Madalena Chimbo viuda se le dio tres papacanchas en


Yucayquincha linda con Francisco Sirincho y un topo en Acosca linda
con tierras del padre Diego de Escudero y Francisca Sirincho

A María Sánchez huérfana mestiza se le dio medio topo en


Guaillaquincha linda con Agustín Maillaguaman y medio topo en
Acosca linda con Luisa Ramires y la acequia

A Felipe Quispe Topa se le dio medio topo en Uquipata linda con


Isabel Hasto

A Isabel Sasi viuda se le dio medio topo en Chuquipata linda con su


hijo Felipe Quispi

A Doña Inés Sisa Ocllo se le dio medio topo en Yucaibamba hasta en


derecho de Pedro Guallpa Roca

A Doña Inés Guanca Tocto hija de Gualpa Roca Ynga se la dio un topo
Yucaibamba linda con Maria Lerma hasta la repartición de Gualpa
Roca

A Doña Mencia Guaco Ocllo se le dio por decreto del Señor Oidor un
topo en los andenes de este pueblo linda con Juan Picarro y Juan de
Salas

A Doña Magdalena Chimbo Ocllo mujer de Don Fernando Guartanaula


e nieta de Guaina Capac se le dio un topo en Collapampa que un silco
desde un andén de unas arboledas linda con un andén llamado
Antipampa y el Camino de Yucay122

Algunos de estos personajes de este ayllu, como doña Magdalena Chimbo Ocllo,
eran descendientes directos de Guayna Capac, esta no era un cuestión rara, en el
valle de Yucay usufructuaban propiedades no solo los que poblaban en ella sino
también personajes de los llamados “indios nobles” que residían en las parroquias
de la ciudad del Cusco, es el caso de doña Catalina Chimbo Ocllo, mujer de Guayna

122
A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo N° 1. 1594-1693. Sin fecha. Expediente incompleto y trunco de la
visita y reparto de las tierras del valle de Yucay hecho por el licenciado Alonso Maldonado de Torres.
F.76-76v.
97
Capac, ella en 1569 otorgaba en donación tierras en Yucay a doña Catalina Tocto
Usica, viuda de don Cristóbal Paullo Inka:

(…) Catalina Chimbo Ocllo, india natural desta ciudad del Cuzco, mujer
que fui de Guaynacapac Ynga señor que fue de estos reynos del Pirú,
(…) otorgo y conozco que hago gracia y donación… a vos doña
Catalina Tocto Uxica, viuda mujer que fuiestes de don Xpoval Paullo,
hijo del dho Guayna Capac, mi marido … un pedazo de tierras que
tengo y poseo en el valle de Yucay con cuatro buhios que están fechos
dentro del dicho pedazo de tierras, los tres de ellos grandes y el uno
pequeño, que está a las espaldas del solar y casas que en el dho valle
tiene Diego de Silva, vecino de esta ciudad, que alinda con casas de
Gualparoca, indio y con casas de Timnuela, indio, hermano de don
Francisco Chilche, cacique del dicho valle y un topo de chácaras de
maíz que tengo y poseo en el dicho valle llamado Chuquimaran que
alinda con huerta de la mujer e hijos de Juan Sierra, difunto y con
chácara de Luis Choncaya, indio que me los dio y dono el dho Guayna
Capac Ynga, mi marido, como señor natural que era de estos reinos.123

Cuadro N° 17

Tierras de maíz de los ayllus Ynga Cuzco, Guaraca y Yanaconas


reducidos en el pueblo de San Pedro de Yucay
Ayllu Ynga Cuzco Ayllu Guaraca Ayllu Yanacona
Cacique don Juan
Ayrambo
ƒ Chicho ƒ Yaguai Inquilla ƒ Chuquicucho
ƒ Chichobamba ƒ Chucucucho (andenes)
ƒ Chuquicucho ƒ Mandorcocha Quincha ƒ Paucarchalla
ƒ Acosca Pampa ƒ Mandorcocha ƒ Sillaguailla
ƒ Yucay Quincha ƒ Chichobamba ƒ Unuraquina
ƒ Yucaybamba ƒ Chicho ƒ Guailla
ƒ Chanchaguar ƒ Amacpongo ƒ Antapacha
ƒ Quespiguanca ƒ Acosca ƒ Chuqui Ucruguailla
ƒ Cocaguasi ƒ Choco ƒ Chuqui Ocro
ƒ Choquicocha ƒ Antapacha ƒ Maiopata
ƒ Chanchaliguas ƒ Chicho ƒ Challaguasi
ƒ Quillabamba ƒ Choquipata ƒ Uqui Caviña
ƒ Mayopata ƒ Tancabamba ƒ Guaillamisca
ƒ Chanchaliguar ƒ Yucayquencha ƒ Sillaguailla
ƒ Amacpongo ƒ Pueblo Viejo de Chicho ƒ Ampatobamba
ƒ Mandorcocha ƒ Pomatanca ƒ Quirubamba
ƒ Cochapampa ƒ Chicón ƒ Parobamba

123
A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo N° 1. 1594-1693. 1569-1629. Testimonio de escrituras y otros
papeles interesantes de fincas e imposiciones. f.1.
98
ƒ Guayllamisca ƒ Picho ƒ Quillabamba
ƒ Vilcapata ƒ Chanchale Guasi ƒ Quillipata
ƒ Chacavinaypata ƒ Tomebamba ƒ Acoscabamba
ƒ Pomapampa ƒ Quispiguanca ƒ Cuyguasipampa
ƒ Harcaviñay ƒ Maillapuquio ƒ Mollebamba
ƒ Chuiunu ƒ Pacaraqui ƒ Cochabamba
ƒ Cocaguasi ƒ Vitcoquiguar ƒ Licancaguilla
ƒ Guainatambo ƒ Mandorcocha
ƒ Pomapuquio
ƒ Mayopata Acosca
ƒ Zapallo Guasi
ƒ Yucay Quincha
ƒ Yucay Bamba
ƒ Charcaguailla Pata
ƒ Guayocare
ƒ Casanabamba
ƒ Yllaguasi
ƒ Rucuinabamba
FUENTE: A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 01. 1594-1693. Sin fecha. Expediente
incompleto y trunco de la visita y reparto de las tierras del valle de Yucay hecho por el
licenciado Alonso Maldonado de Torres. 22 folios.

2.5. El proceso de compra venta de bienes inmuebles en el valle de Yucay.


1550-1599.

El estudio que desarrollamos sobre la tenencia de tierras en el valle de Yucay


estaría incompleto si no se tomase en cuenta el proceso de compra venta de
tierras efectuados en el lapso de la segunda mitad del siglo XVI y que están
registrados en los 39 protocolos correspondientes a este periodo, conservados
en la sección histórica del Archivo Regional del Cusco.

Cuadro N° 18

Listado de protocolos del Siglo XVI ubicados en la Sección Histórica del Archivo
Regional del Cusco
N° Escribano Años N° Escribano Años
01 Gregorio de Bitorero 1560-1579 21 Antonio Sánchez 1569
02 Gregorio de Bitorero 1561-1562 22 Antonio Sánchez 1570-1572
03 Pedro Cervantes 1580-1582 23 Antonio Sánchez 1572
04 Miguel de Contreras 1596-1597 24 Antonio Sánchez 1570-1572
05 Pedro de la Carrera Ron 1586-1596 25 Antonio Sánchez 1573-1574
06 Alonso de Guerrero 1588 26 Antonio Sánchez 1576-1578
07 Juan de Olave 1595 27 Antonio Sánchez 1579-1581
08 Juan de Olave 1596 28 Antonio Sánchez 1581-1582
09 Cristóbal de Lucero 1598 29 Antonio Sánchez 1582-1583
10 Luis de Quesada 1571-1573 30 Antonio Sánchez 1583-1584
99
11 Luis de Quesada 1571-1581 31 Antonio Sánchez 1587-1589
12 Luis de Quesada 1584-1585 32 Antonio Sánchez 1587-1589
13 Luis de Quesada 1586 33 Antonio Sánchez 1588-1600
14 Juan de Quirós 1576-1577 34 Antonio Sánchez 1590-1593
15 Juan de Quirós 1579 35 Antonio Sánchez 1590-1593
16 Juan de Quirós 1583 36 Antonio Sánchez 1593-1594
17 Antonio de Salas 1571-1600 37 Antonio Sánchez 1594-1595
18 Antonio de Salas 1596-1597 38 Gerónimo Sánchez 1589
19 Antonio Sánchez 1566-1567 39 Gerónimo Sánchez 1592
20 Antonio Sánchez 1568
FUENTE: Archivo Regional del Cusco. Listado de protocolos notariales.

En ese sentido se ha preparado una ficha en formato que Excel (incluida en los
anexos del trabajo de investigación), para desarrollar el registro
correspondiente que incluye aspectos básicos como quienes participan en la
actividad de la compraventa, (vendedor y comprador), el topónimo o lugar en
donde se ubica el bien, los linderos de la propiedad, la cantidad de tierras en
venta, generalmente determinado en topos, el precio en que se vende, la fecha
de venta y la fuente notarial de donde se extrae la información. Queda siempre
la atingencia de que lo sistematizado no muestra realmente el total de la
actividad de la compra venta en Yucay en el ínterin de nuestro espacio
cronológico de investigación, esta dificultad se plantea por las fragmentaciones,
mutilaciones y deterioro que han sufrido algunos de estos documentos
notariales así como que los 39 protocolos notariales existentes en el Archivo
Regional, es solo una parte de la producción protocolar que se dio en el siglo
XVI, empero pensamos que esta sistematización nos ha sido de utilidad en
nuestro propósito de ubicar topónimos de los espacios productivos y
habitacionales ubicados en Yucay.

Ficha Nro 1 registro record de tenencia de propiedad inmueble (CONSULTAR ANEXO)

100
El paso de la propiedad indígena de la tierra a manos de propietarios
españoles y mestizos es bastante grande y concuerda con la imagen general
que se tiene de la pérdida del dominio de la tierra que sufrió la población
indígena, el cual no sería más que el preludio para la conformación de las
grandes propiedades que a partir de 1594 dan origen a las haciendas. Por otro
lado, la presencia de personajes indígenas, descendientes de los últimos
soberanos Incas es también constante en las transacciones de bienes
inmuebles.

Cuadro N° 19

Topónimos ubicados en los protocolos notariales del siglo XVI


Topónimo Característica Lugar
Sondor Tierras Urquillos
Minabamba Tierras Valle de Yucay
Angasmori Tierras Valle de Yucay
Patacaua Tierras Valle de Yucay
Guaynatambo Tierras Yucay
Pomaguanca Tierras Yucay
Guancaparara Tierras Yucay
Ayamaylla Tierras Yucay
Chuquibamba Tierras Yucay
Chicho Tierras Yucay
Quiquijana Tierras Yucay
Pucamarca Tierras Yucay
Acosca Tierras Yucay
Cachobamba Andenes Yucay
Paca Tierras Yucay
Guaynacolca Tierras Guayllabamba
Coto Tierras Yucay
Yagua Guaci Tierras Yucay
Lucre Tierras Yucay
Pilcobamba Tierras Yucay
Valle de Urcos Tierras Guayllabamba
Chicón Tierras Urubamba
Illacparara Tierras Urubamba
Mutuybamba Tierras Urubamba
Cachollabamba Tierras Urubamba
Quishuarpata Tierras Yucay
Guayllabamba Valle y tierras Guayllabamba
Guaylla Tierras Guayllabamba
Mollecancha Tierras Yucay
Coquepata Tierras Yucay
101
Paropata Tierras Yucay
Yucaybamba Tierras Yucay
Allpasondor Casas del tiempo del Inka Urquillos
Urcos Andenes Urquillos
Ancascochabamba Tierras Yucay
Salitral
Michicabamba Tierras Yucay
Quispeguanca Tierras Urubamba
Sumapunco Tierras ¿?
Sacsipata Tierras Urubamba
Sumipata Tierras Urubamba
Yucaybamba Tierras Yucay
Guayocari Tierras Guayllabamba
Challaguasi Tierras Yucay
Guachacpuquio Tierras Yucay
Cuntipampa Andenes Urquillos
Siguairo Andenes Urquillos
Catan Tierras Urubamba
Antapache Tierras Urubamba
Paca Tierras Urubamba
FUENTE: Ficha de registro record de tenencia de propiedad inmueble en
el valle de Yucay: 1560-1599. En función al Fondo Urubamba y
Colección Betancour.

102
CAPITULO III
PROSPECCION Y CONTRASTACION HISTÓRICA DEL VALLE DE
YUCAY

Uno de los objetivos del trabajo de tesis es el de contrastar en el espacio actual


de piso de valle de los distritos de Huayllabamba, Yucay y Urubamba la
pervivencia y ubicación de topónimos históricos del siglo XVI, la información
documental recopilada nos ha mostrado la amplitud de nombres que determinan
principalmente espacios productivos muchos de los cuales, hipotéticamente, aún
perviven en la concepción territorial de los habitantes del antiguo valle de Yucay.

En oposición a ello tenemos que los tiempos han cambiado y el valle de Yucay
desde el siglo XVI a la fecha ha sufrido una serie de cambios en su manejo
social y territorial. El paisaje espectacular y la diversidad de sitios arqueológicos
prehispánicos que se ubican en ella han hecho de esta parte del “valle sagrado
de los Inkas” un espacio netamente turístico aún desde mediados del siglo XX
permitiendo el desarrollo de una economía de servicios, receptora de visitantes
nacionales e internacionales, asimismo en las últimas décadas se ha
manifestado el cambio de la tenencia de la propiedad inmueble las cuales en
gran parte han pasado a formar parte del activo de grandes empresas turísticas
o de propietarios foráneos nacionales y/o extranjeros. Es posible que este
aspecto haya generado que parte del conocimiento espacial ancestral haya
variado o se esté perdiendo irremediablemente.

Desde esa idea este capítulo busca evidenciar a partir de la prospección y


contrastación del dato toponímico ubicar a base de la referencia oral de la

103
población local de los distritos de Urubamba, Yucay y Huayllabamba los
topónimos descritos en el siglo XVI y que aún subsisten a la fecha.

El concepto de toponimia desde una perspectiva común es el conjunto de los


nombres propios de lugar de un país o de una región, desde la lingüística se
define como una rama de la onomástica que estudia el origen de los nombres
propios de lugar, así como el significado de estos, de este modo la toponimia:
“estudia los hidrónimos (nombres de los ríos y los arroyos), los orónimos
(nombres de las montañas), los limnónimos (nombres de las lagunas y los
lagos) y otros términos que permiten nombrar a lugares geográficos. Muchas
veces, la toponimia se complementa con la geografía, la historia y otras
ciencias.”124

3.1. Sistematización de topónimos en relación a la tenencia de tierras en


el valle de Yucay en el siglo XVI.

Cuadro N° 20

Sistematización alfabética de topónimos ubicados en el valle de Yucay en el siglo XVI


y su probable ubicación actual
Topónimo Característica Ubicación actual
Distrito Anexo y/o Poblado
Abasinga, Aguacsinga Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Acomaca Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Acomalo Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Acosca Tierras de maíz Yucay Yucay
Acosca Pampa Tierras de maíz Yucay Yucay
Allpasondor Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Amacpongo Tierras de maíz Yucay Yucay
Ampatobamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Ancascochabamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Andapache, Antapacha Tierras de maíz Yucay Yucay
Angasmori Tierras de maíz Yucay No determinado
Antipampa Andenes- tierras de maíz Yucay No determinado
Ayamaylla Tierras de maíz Valle de Yucay No determinado
Barobamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Cachobamba Andenes-tierras de maíz
Cachollabamba Tierras de maíz Urubamba No determinado
Calala Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Capapata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Caquiapata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Casanabamba Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Catan Tierras de maíz Urubamba No determinado
Chacavinaypata Tierras de maíz Yucay No determinado

124
https://definicion.de/toponimia/.

104
Chalaguasi, Challaguasi Tierras de maíz Huayllabamba Huayllabamba
Challaguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Chanchaguar Tierras de maíz Yucay No determinado
Chanchaliguar Tierras de maíz Yucay No determinado
Chanchaleguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Chaquelaguayco Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Charcaguaylla Pata Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Chauca Pueblo prehispánico Urubamba Urubamba
Chicho Pueblo prehispánico – Urubamba Urubamba
tierras de maíz
Chichobamba Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Chicón Arboledas- tierras de Urubamba Urubamba
maíz
Choco Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuiunu Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuqui Urco Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuqui Ucruguailla Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuquibamba Andenes-tierras de Yucay Yucay
maíz
Chuquibamba Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Chuquicallua Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Chuquicocha Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuquicucho Andenes - tierras de Yucay No determinado
maíz
Chuquimaran Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuquipata Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuquipingollo Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Cocaguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Cochapampa Tierras de maíz Yucay No determinado
Collabamba Tierras de maíz Yucay Yucay
Collapata Tierras de maíz Yucay No determinado
Coquepata Tierras de maíz Yucay No determinado
Coto Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Coyachuqui Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Cozca Arboleda Urubamba Urubamba
Cuntipampa Andenes- tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Curicancha, Coricancha Buhíos-tierras de maíz Yucay Yucay
Cuyguasipampa Tierras de maíz Yucay No determinado
Cuzcocache Pueblo prehispánico Urubamba Urubamba
Guachacpuquio Andenes- tierras de maíz Yucay Yucay
Guacra Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Guailla Misca Tierras de maíz Yucay No determinado
Guailla Quincha Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Guaillaquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Guancaparara Tierras de maíz Valle de Yucay No determinado
Guaropuquio Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Guaropuquio Quincha Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Guayllabamba Sitio poblacional Huayllabamba Huayllabamba
colonial- tierras de maíz
Guaynatambo Tierras de maíz Yucay No determinado
Guayoccari Tierras de maíz Huayllabamba Guayocari
Harcaviñay Tierras de maíz Yucay No determinado
105
Huayocollo Tierras de maíz Huayllabamba Huayllabamba
Huli Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Huycho Tierras de maíz Huayllabamba Huicho
Illacparara Tierras de maíz Urubamba No determinado
Licancaguila Tierras de maíz Yucay No determinado
Lucre Tierras de maíz Yucay No determinado
Mandorcocha Tierras de maíz Yucay No determinado
Mandorcocha Quincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Mandorpata Tierras de maíz Yucay No determinado
Mayllapuquio Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Mayopata Tierras de maíz Yucay No determinado
Michicabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Minabamba Minabamba Valle de Yucay No determinado
Mollebamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Mollecancha Tierras de maíz Yucay No determinado
Moyobamba Tierras de maíz Huayllabamba Huayllabamba
Moyobamba Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Mutuybamba Tierras de maíz Urubamba No determinado
Ollisinai Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Paca Pueblo prehispánico Urubamba Urubamba
Pacachaca Andenes Urubamba Urubamba
Pacaraqui Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Parobamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Paropata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Paropata Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Patacaua Tierras de maíz Valle de Yucay No determinado
Patarache Tierras de trigo Huayllabamba Racchi
Patashuayla Arboleda Urubamba Urubamba
Paucarchaca Sitio recreacional Yucay No determinado
prehispánico– tierras
de maíz, ají, camote
Paucarchalla Tierras de maíz Yucay No determinado
Pichincho Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Pinchincui Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Pichinchuya Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Picho Tierras de maíz Yucay No determinado
Pilcobamba Andenes-Tierras de Yucay Yucay
maíz
Pomaguanca Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Pomañaupa Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Pomapampa Tierras de maíz Yucay No determinado
Pomapuquio Tierras de maíz Yucay No determinado
Pomatanca Tierras de maíz Yucay No determinado
Pucamarca Tierras de maíz Yucay No determinado
Pueblo viejo de Chicho Tierras de trigo Urubamba No determinado
Puito Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Pucroquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Quebrada de Urcos Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Quincha Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Quilapata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Quillabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Quillipata Tierras de maíz Yucay No determinado
106
Quiquijana Tierra de maíz Yucay No determinado
Quirubamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Quisguarpata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Quespiguanca Sitio residencial Urubamba Cementerio
Huayna Qhapaq general de
Urubamba
Rarauilca Cucho Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Rucuinabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Sacsipata Tierras de maíz Urubamba No determinado
Siguairo Andenes- tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Sillaguailla Tierras de maíz Yucay No determinado
Sillaquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Sondor Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Sumapunco Tierras de maíz Valle de Yucay No determinado
Sumipata Tierras de maíz Urubamba No determinado
Tambo de Yucay Estructura prehispánica Yucay Pueblo de Yucay
Tancapata Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Tancabamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Tancabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Tantopata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Taquillabamba Andenes Yucay Yucay
Taracache Pueblo Prehispánico Urubamba Urubamba
Taracalla Urco Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Taravilca Urco Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Tomahuanca Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Tomebamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Tucucuya Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Unuraquina Tierras de maíz Yucay No determinado
Uqui Caviña Tierras de maíz Yucay No determinado
Uquipata Tierras de maíz Yucay No determinado
Uquipalpa Andenes Urubamba Urubamba
Urcospampa, Urcos Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Urpihuata Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Urubamba Tierras de maíz Urubamba Ciudad de
Urubamba
Vilcapata Tierras de maíz Yucay No determinado
Vitcobamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Vitcoquiguar Tierras de maíz Yucay No determinado
Xauxero Tierras de maíz Yucay Yucay
Yagua Guasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Yaguai Inquilla Tierras de maíz Yucay No determinado
Yllaguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Ypocheco Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Yucay Espacio urbano Yucay Yucay
prehispánico y colonial
Yucaybamba Tierras de maíz Yucay
Yucayquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Zapallo Guasi Tierras de maíz Yucay No determinado
FUENTE: Ficha de registro record de tenencia de propiedad inmueble en el valle de Yucay:
1560-1599, A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 01. 1594-1693. Sin fecha. Expediente
incompleto y trunco de la visita y reparto de las tierras del valle de Yucay hecho por el
licenciado Alonso Maldonado de Torres.
107
Cuadro N° 21

Sistematización alfabética de topónimos del siglo XVI ubicados en el Distrito de


Huayllabamba
Topónimo Característica Ubicación actual
Distrito Anexo y/o Poblado
Abasinga, Aguacsinga Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Acomaca Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Acomalo Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Allpasondor Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Ancascochabamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Barobamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Calala Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Capapata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Caquiapata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Casanabamba Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Chalaguasi, Challaguasi Tierras de maíz Huayllabamba Huayllabamba
Chaquelaguayco Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Chuquicallua Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Cuntipampa Andenes- tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Guacra Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Guailla Quincha Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Guaropuquio Quincha Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Guayllabamba Sitio poblacional Huayllabamba Huayllabamba
colonial- tierras de maíz
Guayoccari Tierras de maíz Huayllabamba Guayocari
Huayocollo Tierras de maíz Huayllabamba Huayllabamba
Huli Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Huycho Tierras de maíz Huayllabamba Huicho
Mayllapuquio Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Moyobamba Tierras de maíz Huayllabamba Huayllabamba
Ollisinai Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Paropata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Patarache Tierras de trigo Huayllabamba Racchi
Pichincho Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Pinchincui Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Pichinchuya Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Pomañaupa Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Puito Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Quebrada de Urcos Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Quincha Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Quilapata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Quisguarpata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Rarauilca Cucho Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Siguairo Andenes- tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Sondor Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Tancapata Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Tancabamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Tantopata Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Taracalla Urco Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Taravilca Urco Tierras de maíz Huayllabamba No determinado

108
Tucucuya Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
Urcospampa, Urcos Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Urpihuata Tierras de maíz Huayllabamba Urquillos
Vitcobamba Tierras de maíz Huayllabamba No determinado
Ypocheco Tierras de trigo Huayllabamba No determinado
FUENTE: Ficha de registro record de tenencia de propiedad inmueble en el valle de Yucay:
1560-1599, A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 01. 1594-1693. Sin fecha. Expediente
incompleto y trunco de la visita y reparto de las tierras del valle de Yucay hecho por el
licenciado Alonso Maldonado de Torres.

Cuadro N° 22

Sistematización alfabética de topónimos del siglo XVI ubicados en el Distrito de Yucay


Topónimo Característica Ubicación actual
Distrito Anexo y/o Poblado
Acosca Tierras de maíz Yucay Yucay
Acosca Pampa Tierras de maíz Yucay Yucay
Amacpongo Tierras de maíz Yucay Yucay
Ampatobamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Andapache, Antapacha Tierras de maíz Yucay Yucay
Angasmori Tierras de maíz Yucay No determinado
Antipampa Andenes- tierras de maíz Yucay No determinado
Cachobamba Andenes-tierras de maíz Yucay Yucay
Chacavinaypata Tierras de maíz Yucay No determinado
Challaguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Chanchaguar Tierras de maíz Yucay No determinado
Chanchaliguar Tierras de maíz Yucay No determinado
Chanchaleguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Choco Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuiunu Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuqui Urco Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuqui Ucruguailla Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuquibamba Andenes-tierras de Yucay Yucay
maíz
Chuquicocha Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuquicucho Andenes - tierras de Yucay No determinado
maíz
Chuquimaran Tierras de maíz Yucay No determinado
Chuquipata Tierras de maíz Yucay No determinado
Cocaguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Cochapampa Tierras de maíz Yucay No determinado
Collabamba Tierras de maíz Yucay Yucay
Collapata Tierras de maíz Yucay No determinado
Coquepata Tierras de maíz Yucay No determinado
Curicancha, Coricancha Buhíos-tierras de maíz Yucay Yucay
Cuyguasipampa Tierras de maíz Yucay No determinado
Guachacpuquio Andenes- tierras de maíz Yucay Yucay
Guailla Misca Tierras de maíz Yucay No determinado
Guaillaquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Guaynatambo Tierras de maíz Yucay No determinado
109
Harcaviñay Tierras de maíz Yucay No determinado
Licancaguila Tierras de maíz Yucay No determinado
Lucre Tierras de maíz Yucay No determinado
Mandorcocha Tierras de maíz Yucay No determinado
Mandorcocha Quincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Mandorpata Tierras de maíz Yucay No determinado
Mayopata Tierras de maíz Yucay No determinado
Michicabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Mollebamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Mollecancha Tierras de maíz Yucay No determinado
Parobamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Paucarchaca Sitio recreacional Yucay No determinado
prehispánico– tierras
de maíz, ají, camote
Paucarchalla Tierras de maíz Yucay No determinado
Picho Tierras de maíz Yucay No determinado
Pilcobamba Andenes-Tierras de Yucay Yucay
maíz
Pomapampa Tierras de maíz Yucay No determinado
Pomapuquio Tierras de maíz Yucay No determinado
Pomatanca Tierras de maíz Yucay No determinado
Pucamarca Tierras de maíz Yucay No determinado
Pucroquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Quillabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Quillipata Tierras de maíz Yucay No determinado
Quiquijana Tierra de maíz Yucay No determinado
Quirubamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Rucuinabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Sillaguailla Tierras de maíz Yucay No determinado
Sillaquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Tambo de Yucay Estructura prehispánica Yucay Pueblo de Yucay
Tancabamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Taquillabamba Andenes Yucay Yucay
Tomebamba Tierras de maíz Yucay No determinado
Unuraquina Tierras de maíz Yucay No determinado
Uqui Caviña Tierras de maíz Yucay No determinado
Uquipata Tierras de maíz Yucay No determinado
Vilcapata Tierras de maíz Yucay No determinado
Vitcoquiguar Tierras de maíz Yucay No determinado
Xauxero Tierras de maíz Yucay Yucay
Yagua Guasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Yaguai Inquilla Tierras de maíz Yucay No determinado
Yllaguasi Tierras de maíz Yucay No determinado
Yucay Espacio urbano Yucay Yucay
prehispánico y colonial
Yucaybamba Tierras de maíz Yucay
Yucayquincha Tierras de maíz Yucay No determinado
Zapallo Guasi Tierras de maíz Yucay No determinado
FUENTE: Ficha de registro record de tenencia de propiedad inmueble en el valle de Yucay:
1560-1599, A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 01. 1594-1693. Sin fecha. Expediente
incompleto y trunco de la visita y reparto de las tierras del valle de Yucay hecho por el
licenciado Alonso Maldonado de Torres.
110
Cuadro N° 23

Sistematización alfabética de topónimos del siglo XVI ubicados en el Distrito de


Urubamba
Topónimo Característica Ubicación actual
Distrito Anexo y/o Poblado
Cachollabamba Tierras de maíz Urubamba No determinado
Charcaguaylla Pata Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Chauca Pueblo prehispánico Urubamba Urubamba
Chicho Pueblo prehispánico – Urubamba Urubamba
tierras de maíz
Chichobamba Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Chicón Arboledas- tierras de Urubamba Urubamba
maíz
Chuquibamba Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Chuquipingollo Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Coto Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Coyachuqui Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Cozca Arboleda Urubamba Urubamba
Cuzcocache Pueblo prehispánico Urubamba Urubamba
Illacparara Tierras de maíz Urubamba No determinado
Moyobamba Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Mutuybamba Tierras de maíz Urubamba No determinado
Paca Pueblo prehispánico Urubamba Urubamba
Pacachaca Andenes Urubamba Urubamba
Pacaraqui Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Paropata Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Patashuayla Arboleda Urubamba Urubamba
Pomaguanca Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Pueblo viejo de Chicho Tierras de trigo Urubamba No determinado
Quespiguanca Sitio residencial Urubamba Cementerio
Huayna Qhapaq general de
Urubamba
Sacsipata Tierras de maíz Urubamba No determinado
Sumipata Tierras de maíz Urubamba No determinado
Taracache Pueblo Prehispánico Urubamba Urubamba
Tomahuanca Tierras de maíz Urubamba Urubamba
Uquipalpa Andenes Urubamba Urubamba
Urubamba Tierras de maíz Urubamba Ciudad de
Urubamba
FUENTE: Ficha de registro record de tenencia de propiedad inmueble en el valle de Yucay:
1560-1599, A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 01. 1594-1693. Sin fecha. Expediente
incompleto y trunco de la visita y reparto de las tierras del valle de Yucay hecho por el
licenciado Alonso Maldonado de Torres.

111
3.2. Breve referencia de los espacios toponímicos más resaltantes del
Valle de Yucay vistos a partir de la documentación etnohistórica.

La referencia documental sistematizada nos ha permitido constatar la


existencia de una amplia diversidad de topónimos en el valle de Yucay, de los
cuales algunos de ellos son mencionados constantemente en la documentación
colonial. Hacer la referencia documental y el significado toponímico es lo que
pretende desarrollar para ello a más de la documentación existente haremos
uso también de los Lexicones y vocabularios generados en los siglos XVI y
XVII entre ellos: “Lexicón o vocabulario de la lengua general del Perú” de
fray Domingo de Santo Tomas (1560), “Arte, y vocabulario en la lengua
general del Perú llamada Quichua” impreso por Antonio Ricardo (1586) y el
“Vocabulario de la lengua general de todo el Perú llamada Quichua” de
Diego Gonzales Holguín (1608).

a. Acosca.- Aco o Acco: "arena" (Ricardo 1586; 17), (Gonzales Holguín


1608 /1952/: 44), más el sufijo sca. Acosca significaría “enarenado o cubierto
con arena.” Acosca se ubica al sureste del actual distrito de Yucay, aledaño al
río Vilcanota. En el periodo prehispánico era considerado como tierras de
Wayna Qhapaq Inka, Las referencias documentales en relación a este sitio lo
mencionan como punto limítrofe con las tierras de Guayocollo – ubicadas en
Guayllabamba - y aledaño al camino real que se dirigía a Yucay.125

b. Antapacha.- Anta: “cobre o alambre” (Santo Tomas 1560; 109), “cobre”


(Ricardo 1586; 20), “metal o cobre, puca anta; el cobre simple” (Gonzales
Holguín 1608 /1952/: 50) Pacha “habito, vestidura” (Santo Tomas 1560; 158),
“tiempo, suelo, lugar, ropa, vestidura” (Ricardo 1586; 122), “tiempo lugar”
(Gonzales Holguín 1608 /1952/: 184).

Antapacha o andapacha está al este del distrito de Yucay y aledaño – camino


real de Yucay por medio – a las tierras de Acosca, eran considerados como
tierras de los indígenas naturales del valle. En un documento notarial de 1597

125
A.R.C. Genealogía de los Betancur. Libro 03. f. 41v, A.R.C. Notarial Siglo SVI. Antonio de Salas Prot. 18.
1596-1597. f. 78 y f. 718v y Antonio Sánchez Prot. 25. 1573-1574. f. 743.
112
se menciona que por la parte de arriba lindaba “con el cerro y montañuela que
se dice de Tucura”126

c. Chicón.- Salvo haya habido una corrección en su escritura inicial no


existe significado – en los lexicones quechuas y aymaras - acerca de este
topónimo.

Chicón es la quebrada y el cerro nevado que se ubica en la parte alta, al norte,


de la ciudad de Urubamba, el Inka consideraba a este espacio como su moya
particular: “A la mano derecha de estos tambos hay una quebrada entre dos
cerros que se dice Chicón la cual era moya de Guayna Caba y en ellas hay
arboleda y muchas tierras en los cuales en tiempo del Ynga no había ninguna
casa de indios y ahora hay ciertas casas del Ynga y un cañar que tiene allí su
casa y era esta arboleda y prado que nunca se sembraban, de esta quebrada
sale un arroyo que viene derecho hasta dar al río.”127

Chicón continúo siendo estimado como un sitio estratégico en la colonia, sus


bosques y arboledas eran propiedad del cabildo del Cusco, institución que
determinó en muchos momentos una serie de ordenanzas para su cuidado
instalando en ella a indígenas yanaconas que bajo las órdenes de Francisco
Chilche se encargaban de su preservación128. Es posible que a la fecha como

126
A.R. C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 28, Notarial Siglo XVI. Antonio de Salas Prot. 18. 1596-1597.
f. 589v.
127
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03; Ob. Cit. 29v.
128
El concierto otorgado en 1559 entre el cabildo del Cusco y don Francisco Chilche textualmente dice:
“En este día sus mds trataron y concertaron que por q to la quebrada de Chicón que tiene esta cibdad en el
valle de Yucay esta muy desypada y a talada y ay nescesidad que se remedye y replante y que se tenga
qta con ella para que perpetumte aya madera en ella y la cibdad tenga con que se sustentar de la dha
madera y porque es cosa útil y de gran probecho, que se haga concierto con don Fran co Chilche, cacique
del dho balle de Yucay para que tenga q ta con la dha quebrada y la haga aderecar y reparar y que linpie
la madera que ay puesta y la que se pusyere de aquí adelante y para que la replante, acordaron y dieron
horden al dho don Franco en esta manera. Que la dha quebrada se plante toda por mano del dho don
Franco desde lo baxo a lo alto, eceto cierto pedaco que se dize Calispuquyo que el dho don Fran co dixo ser
suyo y de sus yos la qual averiguación queda para qu do el señor corro baya a berla y que plantada toda la
dha quebrada por todas ptes el dho don Franco tenga cuydado y ta de regarla y limpiar asý la madera que
agora esta nascida y puesta como la que se pusyere de aquý adelante y reparar y sacar acequias y azer y
poner todo lo demás nesceso para el benefizio de la dha quebrada y dar horden como ningún yndio
siembre en lo que se llama y es quebrada de Chicón syno fuere fuera del monte, syno que todo lo que se
/roto/ /f.37v/ y es monte lo plante muy espeso y conforme a la horden que en semejantes montes se
tiene y para ayuda de esto la cibdad da al dho don Fran co lo que se pudiere cobrar de la yglesya y de Ju o
113
rezago de este acuerdo aún subsista en Chicón la presencia de una comunidad
denominada Yanacona.

d. Chicho.- Chichuni: “empreñarle la hembra” (Santo Tomas 1560; 122),


Chichu: “preñada” ((Ricardo 1586; 62, Gonzales Holguín 1606 /1952/; 96).

(…) hacia la sierra hay un pueblo de indios que se dice Chicho,


naturales de este valle los cuales son todas suyas las tierras que
llegan hasta la sierra y hasta Quispiguanca, las cuales tierras se
llaman Chichobanba.129

Ubicada al este de la ciudad de Urubamba y aledaña a Quespiwanka, hasta


1551 Chicho era un pueblo en donde habitaban indígenas naturales del valle
de Yucay. Tras el primer proceso de reducción que se dio en el valle de Yucay
el ayllu Chicho es reducido en el pueblo de Yucay y las tierras que
usufructuaban en Chichobamba pasan a manos de foráneos o de
descendientes de los antiguos soberanos Inkas.130

e. Guayoccari. Cari: “hombre varón” (Domingo de Santo Tomás 1560;


117), “varón” ” (Ricardo 1586; 34). Los lexicones quechuas no mencionan un
significado para la palabra Guayo. El lexicón aymara de Ludovico Bertonio
dice: Huayu: “Nombre: un ramizo de uvas, plátanos y cosas semejantes”
(Bertonio 1612 /1879/; 159), Cari: “Interjección del que pide” (Bertonio 1612
/1879/; 37).

Sitio de topónimo aymara Huayocari significa “dame un ramo de uvas o


plátanos”, ubicada en el actual distrito de Guayllabamba, en 1551 era referido

de la Placa y de los demás que están obligados a plantar y se tasara en dos pos y se compelerá a los
pobladores que lo paguen y más se le da la tercia pte de toda la dha madera en esta forma: que
concluydo de plantar la dha quebrada después de triada y grande la dha arboleda y pareziere que della
se puede sacar aprobechamiento alguna quando a la dha cibdad le pareziere que será byen benderla e
aprovecharse dellas en qualquier manera, que en tal caso el dho don Fran co y sus herederos y subcesores,
ayan su terzia pte, comunicando el aprobechamy to con sus yos en noe de los qles e syno haze este
contrato y que se obliga que siempre terna el cuydado de plantar y replantar y limpiar la dha quebrada y
de parte de la cibdad y suya se otorgue escrytura en forma obligándose por él y por sus sucesores a lo
dho y el dho don Franco fue contento dello y de lo cumplir y lo firmó de su no e en presencia de los S.s.”
A.R.C. Libro de Cabildo N° 03. 1559-1560. Ff. 37-37v.
129
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. Ff. 29-29v.
130
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Antonio Sánchez. Protocolo 21. 1569. f. 881v, Gerónimo Sánchez de
Quesada. Protocolo 38. 1589. f. 583v, Pedro de la Carrera Ron. Protocolo 05. 1586-1596. f. 743.
114
como una quebrada habitada por indígenas en donde existían pequeñas
arboledas, los linderos de Guayocari son mencionados en un documento de
compraventa de 1589 que señala que colindaba por un lado con el camino real
que iba a Calca y por abajo con el río de Yucay: “… siete topos de tierras que
yo tengo a donde dicen Guayocari que lindan por una parte el camino real que
ba hacia Calca y por otra parte con tierras de Don Felipe Cota Pongo Piña y
por la parte de abajo con el rio grande de Yucay.”131

f. Guayllabamba. Guaylla o Quiuazapa: “ervazal de mucha yerva”;


Guayla: “baldio o dehesa común”; Guaylla o guayla: “pasto o prado para
yerva” (Domingo de Santo Tomás 1560; 133); Huaylla: “prado, floresta”
Huayllapampa: “Prado” ” (Ricardo 1586; 91) pampa: “hera donde trillan”
“plaza, lugar donde no hay casas, campo raso como vega” (Domingo de Santo
Tomás 1560; 159).

En 1551 es graficado como un llano, ubicado a la mano derecha del río de


Yucay132. En los primeros años de la década del setenta del siglo XVI en el
marco del segundo proceso de reducción del valle de Yucay este llano es
adecuado como un pueblo de indios bajo la advocación de San Juan apóstol,
congregándose en ella a los ayllus ubicados en su entorno inmediato.

g. Huycho.- Salvo haya habido una corrupción en su escritura inicial no


existe significado – en los lexicones quechuas y aymaras - acerca de este
topónimo.
Primeramente señalaron del dicho valle comenzando de los
términos de Calca que es a la parte del río arriba, una rinconada a
la mano derecha de la parte del río de la dicha rinconada que
dijeron llamarse Huycho, que solía ser antiguamente la mitad del
dicho valle rinconada de Topa Ynga Yupangue hacia la parte de
abajo, viniendo hacia el valle de Yucay. Y la otra mitad de la dicha
rinconada a la parte del río arriba del Sol en la cual parte del Sol,
dijeron que antiguamente estaban indios del ayllo del Cuzco que
quiere decir naturales en que solían haber más de cien indios y

131
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Gerónimo Sánchez de Quesada. Protocolo 38. 1589. f. 256.
132
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 27.
115
que ahora habrá diez indios y en lo del dicho Topa Ynga dos o
tres de /f.26v/ los cuales indios y de todas las dichas tierras se
sirve de ellas don Francisco, cacique del dicho valle de Yucay133

Huycho marca el inicio del antiguo valle de Yucay que colindaba con Calca. En
ella, durante el periodo prehispánico, tenían tierras el Sol y Topa Inka Yupanqui
las que estaban a cargo de los indígenas del ayllu Cuzco. No tenemos mayor
referencia documental del siglo XVI que nos ayude a explicar a este espacio
luego de 1550.

h. Paca.- Pacani: “esconder, encubrir algo”, (Domingo de Santo Tomás


1560; 159), Paca: “cosa secreta” (Ricardo 1586; 121), Paca: “cosa secreta,
encubierta o escondida o guardada de verla” (Gonzales Holguín 1608 /1952/;
182) Paca: “un pájaro grande como águila y una especie destas se llama
Cocotaapaca q’ es muy grande poco menor q’ buitre, otra se llama
Curiquenque de cola blanca, otra se llama Yana chucu paca, es entreverada de
negro y pardo…” (Bertonio 1612 /1879/; 141).

A mano izquierda de esta casa de Quispeguanca al lado de ella


hay un prado y laguna que era del Ynga, a la mano izquierda de
este prado hay un pueblo que se dice Paca que es de indios
naturales de este valle, con sus tierras junto a la puente. 134

En sus tierras se ubicaba otro pueblo prehispánico, aledaño a Quespiwanka,


hay referencias que mencionan que los indígenas del ayllu Paca estaban
encargados de servir a Wayna Qhapaq Inka. Paca abarcaba hasta la margen
derecha del río de Yucay, en 1576 ya eran tierras particulares de españoles,
entre ellos el capitán Martín de Meneses, quien asimismo tenía posesiones en
la parte alta de la otra margen del río, en Huaynaqolqa para ser más
precisos.135

i. Pomaguanca.- Poma: “león, animal” (Santo Tomás 1560; 162) Puma:


“león” (Ricardo 1586; 134; Gonzales Holguín 1608 /1952/; 198), Huanca:

133
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 26-26v.
134
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 29v.
135
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Antonio Sánchez. Protocolo 26. 1576-1578. f. 1168
116
“piedra labrada, dura” (Ricardo 1586; 85) Puma: “león” (Bertonio 1612 /1879/;
175), Huanca: “piedra muy grande” (Bertonio 1612 /1879/; 146).

Pomaguanca es el topónimo que identifica las tierras, la quebrada y el cerro


nevado ubicados al oeste de la actual ciudad de Urubamba. Las tierras eran
propiedad del sol y según el documento de 1551 las hacia labrar la madre de
Guascar Inka136. Años después todo este espacio ya conformaba propiedades
de diversas personas entre ellas doña María de Betanzos, hija de doña
Angelina Yupanqui137.

j. Quespiguanca.- Quispi o Quispe: “piedra preciosa o cualquier piedra


transparente” (Santo Tomás 1560; 171), Quespi: “cosa transparente como
vidrio, cristal, etc.” (Ricardo 1586; 140) Quespi: “cosa transparente como vidro
cielos (sic) o cristal y toda piedra preciosa” (Gonzales Holguín 1608 /1952/:
204). Para guanca véase Pomaguanca.

De todos los sitios históricos del valle de Yucay, Quespiguanca es, junto a
Yucay y Urcosbamba, uno de los más importantes. En ella se ubicaba la
morada principal que Wayna Qhapaq había mandado construir en este valle.
La visita de 1551 expresa: “Dicen que acabadas las tierras de Chichobanba de
la otra parte de un camino hay unos tambos que se dicen Quispeguanca que
eran de Guaynacaba”.138

La sistematización notarial del siglo XVI desarrollada no muestra mayor


información con respecto a este lugar, lo cual no significa que su trascendencia
se haya perdido en el periodo colonial, por el contrario, gran parte del asiento
de Quespiguanca continuó siendo usufructuada por descendientes de Wayna
Qhapaq en este caso la hija de Sayre Tupaq: doña Beatriz Coya, quien en
conjunto con el capitán Martín García de Loyola, su esposo, tuvieron en un
primer momento una huerta que con el correr de los años se convierte en un
obraje bastante conocido en el siglo XVII, otra parte de las tierras de

136
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 43.
137
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Antonio Sánchez. Protocolo 21. 1569. f. 881v.
138
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 29v.
117
Quespiguanca pasaron a ser propiedad de otros personajes de la sociedad
cusqueña del siglo XVI entre ellos Sancho de Orozco:

Sancho de Orozco vecino de la ciudad del Cuzco a favor de Pedro


Vázquez, las estancia, buhíos y tierras en el valle de
Xaquixaguana donde dicen Marco, que linda por una parte con
tierras y pasto y ciénagas y por el otra el camino real y por otra
parte con tierras de Diego López de Campo y por otro cerro y
tierras de los indios Canco. Y más le vendo una huerta y tierras
en el valle de Yucay que llaman Quispiguanca (las negritas
son nuestras) que tiene por linderos la huerta del capitán Martin
García de Loyola y por la parte de arriba un andén llamado
Paropata y por otra parte con tierras y chácaras de los indios.139

Al presente en Quespiguanca se ubica el cementerio general de la ciudad de


Urubamba.

k. Yucay.- Salvo haya habido una corrupción en su escritura inicial no


existe significado – en los lexicones quechuas y aymaras - acerca de este
topónimo.

Las referencias documentales de la visita de 1551 dicen que Yucay era parte
de las tierras de Guayna Qhapaq en el cual este soberano había mandado a
construir unos recintos cuadrangulares denominados como buhíos.

Volviendo hacia la sierra a mano derecha, junto a la moya y prado


que arriba esta dicho hay una heredad que se llama
Chuquibanba que era de Guayna/ca/ba y más adelante hay unos
andenes de mucha tierra y muy buena que era del Ynga y del Sol,
por la mitad de los cuales baja un arroyo de agua y por la ladera
de la sierra del mismo arroyo va otro entre los dichos andenes y el
tambo hay unos buhíos de Guaynacaba que fueron los antiguos
donde solían llamar Yucay y ahora también se llama así, más
hacia el tambo hay otro buhío del Sol que se llama Curicancha y
ciertas tierras también del Sol, Quesalla Pilcobanba y también
este Pilcobanba de la otra parte de la casa del Sol hay otro
pedazo de tierra que era de Guaynacaba que se llama también
Pilcobanba. Del dicho arroyo que va por la ladera en la misma

139
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Gerónimo Sánchez de Quesada. Protocolo 39. 1592. Protocolo deteriorado
en la parte de la foliación.
118
ladera hay ciertas tierras /f.29/ que eran y son de los naturales del
valle…140

En la época Inka Yucay estaba rodeado por andenes y por recintos y tierras
dedicadas al sol, asimismo en su entorno se ubicaban las tierras de
Yucaybamba y el sitio de Paucarchaca, todas las cuales eran parte de un solo
entorno.
Con la presencia hispana el contexto de Yucay sufre un contraste bastante
radical, en primer lugar en ella se instala una primera y segunda reducción de
indios, asimismo gran parte de sus tierras pasan a ser propiedad particular de
indígenas y españoles.141

l. Urubamba.- Vropaccha: “araña como quiera” (Santo Tomás 1560; 179),


Vru: “araña” (Ricardo 1586; 167), Vru: “todo género de gusano” (Gonzales
Holguín 1608 /1952/: 232). Para bamba véase Guayllabamba.

Hasta antes de la segunda reducción Toledana, Urubamba era un conjunto de


tierras de cultivo sin mayor trascendencia, tan es así que no es mencionado en
la visita de Yucay de 1551 y tampoco aparece en los registros protocolares del
siglo XVI que hemos sistematizado, excepto en el año de 1596 en el que ya es
categorizado como “pueblo” aledaño a las tierras de Catan y espacios de
cultivo de los indios del ayllu Paca:

Juan Flores de Guzmán residente en esta ciudad del Cuzco,


vende a favor de Francisco Hernández oficial sastre dos topos y
un poco menos de silco de tierras de sembrar maíz, que yo tengo
en la cabezadas del pueblo de Urubamba Valle de Yucay en el
asiento que llaman Catan, que linda por la parte de arriba con
tierras de los indios de Paca del dicho pueblo de Urubamba y por
la parte de abajo y los dos lados dos calles reales del dicho
pueblo de Urubamba142

140
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 28v-29.
141
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Antonio Sánchez. Protocolo 21. 1569. f. 1268, Antonio Sánchez. Protocolo
25. 1573-1574. f. 480v y f. 641, Antonio Sánchez. Protocolo 26. 1576-1578. f. 760, Joan de Quiros.
Protocolo 14. 1576-1577. s.f., Joan de Quiros Protocolo 15. 1579. f. 240 y f. 347v entre otros.
142
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Joan de Olave. Protocolo 08. 1596. f. 820.
119
m. Urcosbamba. Vrco: “cabeza o cerro” Vrco: “macho animal en cualquier
especie” (Santo Tomás 1560; 178), Vrcco: “el macho de los animales” Vrcco:
“el cerro” (Gonzales Holguín 1608 /1952/: 232). Para bamba véase
Guayllabamba.

Urcosbamba corresponde a toda la llanada y la quebrada que luego se conoció


como Urcos y desde inicios del siglo XVII como Urquillos, la visita del valle de
Yucay de 1551 es bastante amplio y claro cuando describe este espacio:

(…) y así tornando a proseguir el río abajo a la mano izquierda


entre el río y la sierra, dijeron llamarse una gran llanada y una
gran rinconada Hurcosbanba por la cual rinconada viene una
quebrada de agua a dar en el dicho río del Yucay en el cual al
principio de él, dijeron haber ciertos buhíos que eran de la mujer
de Topa Ynga Yupangue que se llamaba Mama Anaguarque, lo
cual dijeron que era del Ynga, así la dicha llanada de
Hurcosbanba como la dicha rinconada la cual llega hasta una
punta de la sierra que está esta al fin de la rinconada…143

La calidad de sus tierras regadas por el canalizado río que desciende de las
alturas de Cuper (Chinchero) y su clima benigno motivaron para que en ella el
cabildo del Cusco obtenga la merced por el cual repartió los solares y huertas
en donde se criaban los hijos menores de los vecinos de la ciudad del Cusco.
Asimismo, en este espacio, se asentó la primera reducción o pueblo de indios
de Urcos la cual posteriormente sería traslada a Guayllabamba en 1572.
La referencia documental en relación Urcos o Urcosbamba – bastante amplia,
por cierto – muestra la presencia de otros sitios en su interior, caso Sondor,
Casanabamba, Siguairo, Cuntipampa entre otros.144

143
A.R.C. Genealogía Betancur. Libro 03. f. 26v.
144
A.R.C. Notarial Siglo XVI. Gregorio de Bitorero. Protocolo 01. 1560-1579. f.1603, Antonio Sánchez.
Protocolo 28. 1581-1582. f. 1054, Antonio Sánchez. Protocolo 29. 1582-1583. f. 474v, Luis de Quesada.
Protocolo 13. 1586. f.97v, Alonso de Guerrero. Protocolo 06. 1588. f. 641v, Antonio de Salas. Protocolo
18. 1596-1597. f. 184.
120
3.3. Prospección y contrastación de topónimos y la memoria oral del
poblador actual del valle de Yucay.

Hecha la sistematización de los topónimos ubicados en la documentación del


siglo XVI, el paso siguiente es la contrastación en campo de estos nombres con
la población del valle de Yucay, subdivididos actualmente en los distritos de
Urubamba, Yucay y Huayllabamba.

Esta actividad se desarrolló concretamente en alguna de las comunidades


campesinas existentes aun en estos tres distritos. Para el desarrollo de la
misma se elaboró fichas de entrevista en el cual se recogió la información
recabada a los informantes y que contemplaban aspectos como:

x Conocimiento general de su entorno a partir de la memoria de los cerros


o lugares más representativos o sagrados que tienen en su distrito.
x Conocimiento y nombre de sus espacios productivos.
x Remembranza o conocimiento de sitios o topónimos que aparecen en
los documentos del siglo XVI.145

Cuadro N° 24

Comunidades campesinas ubicadas en el antiguo valle de Yucay


Distrito de Urubamba Distrito de Yucay Distrito de Huayllabamba
Chichubamba Sayhua Yucay Nueva Luz de
Huayllabamba
Chupani Racchi Ayllu
Cuncani Urquillos
Pacca Huaynaccolcca
Vilcanota
Pallccaraqui
San Isidro de Chicón
San José de Media Luna
Suttoc Pacchac
Yanacona
FUENTE: Directorio de comunidades campesinas del Perú-2009.

145
La ficha utilizada para las entrevistas se presentan en el anexo del trabajo de tesis.Fichas llenadas a
través de entrevista oral a los pobladores.
121
La carencia de tiempo ha sido el factor que no ha permitido aplicar las fichas de
entrevista en todas las comunidades que aparecen en el Directorio de
Comunidades Campesinas del 2009 (véase cuadro N° 23), es así que en el
distrito de Urubamba se decidió hacer la entrevista a pobladores de la
comunidad de Yanacona, en Yucay la comunidad del mismo nombre ya no
tiene existencia legal y ha sido reemplazada por los comités de regantes y de
ellos se obtuvo la información respectiva, en cuanto a Huayllabamba se
entrevistó a los comuneros de Urquillos y a pobladores de la capital de distrito.

De lo obtenido en estas entrevistas se puede mostrar algunos aspectos


resaltantes en cuanto al conocimiento que tiene la población local de su
entorno geográfico en primer término de los lugares más representativos
simbolizados en las elevaciones montañosas más altas del valle de Yucay en
este caso los cerros nevados del Pumawanka y el Chicón y el cerro de Saywa
que constituyen los elementos naturales más representativos para el poblador
de Urubamba y Yucay, a ellos habría que agregar el cerro de Saywa,
considerado asimismo un sitio sagrado. En el caso de Huayllabamba y su
anexo de Urquillos su representación tutelar está determinada por otro cerro
nevado; el Pitusiray.

Cuadro N° 25

Cerros y lugares representativos en el valle de Yucay


Urubamba Yucay Huayllabamba Urquillos
Pincusa Saywa Qoriwairachina Huacacapilla
Irupata Atawayco Mariano Pilco Yarovillca
Hito Chicón Pitusiray Unokillo
Caballomarca Pumawanka Huayrawasi Huakaqolqa
Saywa C’añibamba Rampa Wayrawasi
Ccatan Cruzmocco Mayuhuaca Pitusiray
Qhapashaya Pillco Mariano Pilco
Chicón Pachachaki
Pumawanka Rampa
Sirihuani Condor Huachana
Paruorcco Olosaywa
Choromocco
Huayoccari
FUENTE: Fichas de entrevista de prospección toponímica en el antiguo valle de
Yucay.

122
Figura N°12

CERROS REPRESENTATIVOS EN EL VALLE DE YUCAY REFERENCIADOS EN BASE A


LA INFORMACIÓN DE LA POBLACIÓN LOCAL

FUENTE: Google Earth 2018

Más indefinida es la referencia que hemos recogido en cuanto a los espacios


productivos. En la comunidad de Yanacona, (Urubamba) sus sitios de cultivo
reciben la denominación de tierras de comunidad y no señalan una subdivisión
de estas. En el distrito de Yucay mencionan la existencia de tres lugares bien
definidos, todos ellos dedicados al cultivo del maíz y de hortalizas.

- Uno Raqui, ubicado en la parte alta,


- Molino que estaría en el intermedio del valle y,

123
- Tupuna situado en la parte baja

En Huayllabamba igualmente los espacios productivos están relacionados al


cultivo del maíz y hortalizas, al igual que en Yucay los pobladores indican la
existencia de tres sitios:

- Acosca
- Moyocca
- Ttauto

En cuanto al recuerdo y la pervivencia de topónimos del siglo XVI los


resultados muestran que un gran porcentaje de estos se han perdido, este
panorama es general en los tres distritos del antiguo valle de Yucay. (Véase
cuadros N° 26, 27 y el cuadro 28).

En el distrito de Urubamba de 29 topónimos antiguos 12 aún son reconocidos


en la territorialidad de los pobladores, en Yucay, en donde tenemos 77
topónimos, la memoria oral mantiene 19 de ellos y finalmente en Huayllabamba
de 49 topónimos aún existen y son identificados solo 13 nombres.

Es posible que está perdida toponímica se haya dado aún a inicios del siglo
XVII, a partir de la formación de las haciendas que a partir de diversos
mecanismos accedieron al control de la tierra en el valle de Yucay, en todo
caso un análisis toponímico en larga duración que abarque el espacio temporal
de los siglos XVI, XVII, XVIII, XIX y XX nos podría dar perspectivas mucho más
concretas sobre este aspecto. Otra respuesta está relacionada con los cambios
poblaciones ocurridos en el valle; gran parte de la población autóctona del valle
de Yucay fue diezmada siglos antes durante las epidemias que se dieron entre
los siglos XVII al XIX – las grandes epidemias de 1720 y 1836 por ejemplo - por
otro lado, desde un contexto más actual un informante expresaba un aspecto
bastante resaltante:

124
Los abuelos que conocían los nombres de los sitios y de los
linderos de nuestra comunidad han fallecido hace años, ahora los
jóvenes no tienen interés en las tierras, somos pocos los que
seguimos trabajando la tierra, los demás han preferido venderlo a
personas foráneas146

Cuadro N° 26

Pervivencia de topónimos en el distrito de Urubamba


N° Sitio Si No En donde se ubican
01 Cachollabamba X
02 Charcaguaylla Pata X Charcaguaylla
03 Chauca X
04 Chicho X Cerca al cementerio
05 Chichobamba X Ahora se llama Chichopampa
06 Chicón X La quebrada y el nevado
07 Chuquibamba X
08 Chuquipingollo X
09 Coto X
10 Coyachuqui X
11 Cozca X
12 Cuzcocache X
13 Illacparara X
14 Moyobamba X
15 Mutuybamba X
16 Paca X Al lado de Quespihuanca
17 Pacachaca X Junto al puente
18 Pacaraqui X Detrás del cerro en la comunidad de
Yanacona
19 Paropata X Ahora se llama Paru Orcco
20 Patashuayla X
21 Pomaguanca X Al fondo de Yanacona
22 Pueblo viejo de Chicho X
23 Quespiguanca X En el cementerio general
24 Sacsipata X
25 Sumipata X
26 Taracache X
27 Tomahuanca X
28 Uquipalpa X
29 Urubamba X Actual ciudad de Urubamba
FUENTE: Fichas de entrevista de prospección toponímica en el antiguo valle de
Yucay. Hecho por las tesistas en el año 2018

146
Versión de Cayetano Masías Uscamayta, natural de Yucay; 55 años, grado de instrucción secundaria.
125
Cuadro N° 27

Pervivencia de topónimos en el distrito de Yucay


N° Sitio Si No En donde se ubican
01 Acosca X
02 Acosca Pampa X
03 Amacpongo X Se conoce ahora como Amacpunco
04 Ampatobamba X
05 Andapache, Antapacha X
06 Angasmori X Ahora es Anccasmayori
07 Antipampa X En Yucay pueblo
08 Cachobamba X
09 Chacavinaypata X Ahora es Vinopata junto al camino
Hatun Ñan
10 Challaguasi X
11 Chanchaguar X
12 Chanchaliguar X
13 Chanchaleguasi X
14 Choco X
15 Chuiunu X
16 Chuqui Urco X
17 Chuqui Ucruguailla X Ahora es Turuchuaylla
18 Chuquibamba X
19 Chuquicocha X
20 Chuquicucho X
21 Chuquimaran X
22 Chuquipata X
23 Cocaguasi X
24 Cochapampa X
25 Collabamba X Junto a Tenería
26 Collapata X
27 Coquepata X
28 Curicancha, Coricancha X En la Plaza principal
29 Cuyguasipampa X
30 Guachacpuquio X Inicio de quebrada de agua
31 Guailla Misca X
32 Guaillaquincha X
33 Guaynatambo X
34 Harcaviñay X
35 Licancaguila X
36 Lucre X
37 Mandorcocha X Está por el reservorio
38 Mandorcocha Quincha X
39 Mandorpata X
40 Mayopata X En la ribera del río
41 Michicabamba X
42 Mollebamba X
43 Mollecancha X
44 Parobamba X
45 Paucarchaca X Junto al puente de oroya
46 Paucarchalla X

126
47 Picho X
48 Pilcobamba X Junto a Guachac
49 Pomapampa X
50 Pomapuquio X
51 Pomatanca X
52 Pucamarca X
53 Pucroquincha X
54 Quillabamba X
55 Quillipata X
56 Quiquijana X
57 Quirubamba X
58 Rucuinabamba X
59 Sillaguailla X
60 Sillaquincha X
61 Tambo de Yucay X Actual palacio de Sayritupa
62 Tancabamba X
63 Taquillabamba X
64 Tomebamba X
65 Unuraquina X Actual Unuraqui
66 Uqui Caviña X
67 Uquipata X
68 Vilcapata X
69 Vitcoquiguar X
70 Xauxero X
71 Yagua Guasi X
72 Yaguai Inquilla X
73 Yllaguasi X
74 Yucay X Actual pueblo de Yucay
75 Yucaybamba X
76 Yucayquincha X
77 Zapallo Guasi X

FUENTE: Fichas de entrevista de prospección toponímica en el antiguo valle de


Yucay. Hecho por las tesistas en el año 2018

Cuadro N° 28

Pervivencia de topónimos en el distrito de Huayllabamba


N° Sitio Si No En donde se ubican
01 Abasinga, Aguacsinga X
02 X Ahora se conoce como Acosca,
Acomaca
donde se produce maíz
03 Acomalo X
04 Allpasondor X Actual Sondor
05 Ancascochabamba X
06 Barobamba X Actual Paropampa
07 Calala X
08 Capapata X
127
09 Caquiapata X
10 Casanabamba X En la quebrada de Urquillos
11 Chalaguasi, Challaguasi X
12 Chaquelaguayco X
13 Chuquicallua X
14 Cuntipampa X
15 Guacra X
16 Guailla Quincha X
17 Guaropuquio Quincha X
18 Guayllabamba X Actual pueblo de Huayllabamba
19 Guayoccari X
20 Huayocollo X
21 Huli X
22 Huycho X Más allá de Urquillos, al sur
23 Mayllapuquio X
24 Moyobamba X Creen que ahora se llama Moyoca
25 Ollisinai X
26 Paropata X
27 Patarache X Actual comunidad de Racchi
28 Pichincho X
29 Pinchincui X
30 Pichinchuya X
31 Pomañaupa X
32 Puito X Creen puede ser Pitusiray
33 Quebrada de Urcos X Entrada donde se encuentra la
Cooperativa o ex hacienda
34 Quincha X
35 Quilapata X Ahora es Quilcapata
36 Quisguarpata X
37 Rarauilca Cucho X Ahora es Ramra
38 Siguairo X
39 Sondor X
40 Tancapata X
41 Tancabamba X
42 Tantopata X
43 Taracalla Urco X
44 Taravilca Urco X
45 Tucucuya X Creen pueda ser Tucuna
46 Urcospampa, Urcos X Actual Urquillos
47 Urpihuata X En la quebrada de Urquillos, ex
hacienda
48 Vitcobamba X
49 Ypocheco X
FUENTE: Fichas de entrevista de prospección toponímica en el antiguo valle de
Yucay. Hecho por las tesistas en el año 2018

128
3.4 Cartografía temática toponímica.

Parte final de este capítulo es la elaboración de una cartografía temática


toponímica el cual consiste en ubicar en el programa geográfico Google Earth
puntos base de topónimos del siglo XVI que perviven a la actualidad.
Igualmente, se ha intentado ubicar alguna cartografia histórica del valle de
Yucay; (mapas coloniales, fotos aéreas antiguas y cartas nacionales), que
permitan visualizar los procesos de cambio que se han dado en este espacio.

129
3.4.1. Cartografía Histórica del Valle de Yucay.

Figura Nro 13
FOTO ÁEREA DE PARTE DEL VALLE DE YUCAY (1963)

FUENTE: Direccion Desconcentrada de Cultura Cusco.

130
Figura Nro 14

UBICACIÓN DEL VALLE DE URUBAMBA

FUENTE: Instituto Geográfico Nacional. Carta Nacional 27r. Urubamba; escala ¡/100 000.

131
3.4.2. Cartografía Toponimica Histórica.
Figura Nro 15
TOPÓNIMOS DEL SIGLO XVI UBICADOS EN LA PROSPECCIÓN HISTÓRICA DESARROLLADA EN EL ANTIGUO VALLE DE YUCAY

FUENTE: Google earth 2018. 132


Figura Nro 16

TOPONIMOS DEL SIGLO XVI UBICADOS EN LA PROSPECCIÓN HISTÓRICA


DESARROLLADA EN EL PISO DE VALLE DE LOS ACTUALES DISTRITOS DE
URUBAMBA

FUENTE: Google earth 2018.


Figura Nro 17

TOPONIMOS DEL SIGLO XVI UBICADOS EN LA PROSPECCIÓN HISTÓRICA


DESARROLLADA EN EL PISO DE VALLE DE LOS ACTUALES DISTRITOS DE
YUCAY

Figura Nro 18

FUENTE: Google earth 2018.

134
Figura Nro 18

TOPONIMOS DEL SIGLO XVI UBICADOS EN LA PROSPECCIÓN HISTÓRICA


DESARROLLADA EN EL PISO DE VALLE DEL ACTUAL DISTRITO DE
HUAYLLABAMBA

FUENTE: Imagen tomada del Google earth 2018.

135
CONCLUSIONES

Considerando los diferentes procesos de cambios que surge a causa de la


irrupción española en el valle de Yucay; el reparto de tierras, la compra y venta y
otros; definitivamente estos hechos afectaron a la preservación de la toponimia y
pervivencia de los nombres de origen de las comunidades ubicadas en el antiguo
valle de Yucay, lo que representa incluso una amenaza para la perdida completa
de sus orígenes lo cual hemos comprobado en cierta medida por la información
oral de los pobladores.

1. Hasta antes de 1532, el valle de Yucay fue un espacio geográfico sacralizado


en donde la elite Inka adecuó espacios de culto, residencia y de producción
dedicados al Sol, a las personas de los soberanos Topa Inka Yupanqui y Wayna
Qhapaq y de las panakas reales que usufructuaron este espacio, como parte de sus
propiedades personales encargando su conservación arquitectónica y el manejo
agrícola a yanaconas. Sin embargo, una vez más con la irrupción española
observamos que un territorio sacro como fue Yucay pierde categoría y es
transformado en una rica encomienda propiedad nada menos que de don Francisco
Pizarro.

2. Las tierras del valle de Yucay ya en propiedad de los invasores y de los


descendientes de las panakas reales y naturales, aprovecharon el momento de
crisis de los años de 1537 a 1548 accedieron al dominio de estas tierras.

3. A partir de la segunda mitad del siglo XVI la dinámica de cambio en el


manejo de tenencia de tierras fue reglamentada en cierta medida por el cabildo del
Cusco, otorgadas individualmente en diversos momentos y de manera grupal en el
año de 1551, cuando se repartió solares y huertos en la quebrada de Yucay.

136
La otra modalidad de cambio en la tenencia de la tierra en este espacio se dio
especialmente a partir de la compraventa registrada en los protocolos notariales que
corresponden a estos años.

4. Gran parte de los topónimos de sitios ubicados en el valle de Yucay ya no son


parte del manejo territorial de la población local actual. De un total de 155
topónimos rescatados de los documentos del siglo XVI solo 44 aún perviven a la
actualidad. Es posible que está perdida toponímica se haya dado aún a inicios del
siglo XVII, con la formación de las haciendas.

137
FUENTES PRIMARIAS Y BIBLIOGRAFÍA

FUENTES PRIMARIAS

ARCHIVO REGIONAL DEL CUSCO

Fondo: Cabildo del Cusco.


Sección: Libros de Cabildo de la Ciudad del Cusco

Libro N° 01. 1545-1551.


Libro N° 03. 1559-1560.
Libro N° 04. 1561-1564.
Libro N° 06. 1573-1578.

Fondo Urubamba

Legajo 01. 1594-1693.

1594. Expediente incompleto del reparto de tierras hecho en el pueblo de


Guayllabamba, hecho por Alonso López Barriales, juez visitador y repartidor de
tierras en el valle de Yucay, por comisión dada por el oidor Alonso Maldonado de
Torres.

1569-1629. Testimonio de escrituras y otros papeles interesantes de fincas e


imposiciones.

1651. Expediente incompleto sobre información relativa a unas tierras


denominadas Paucarchaca, cita en el pueblo de Yucay.

Sin fecha. Expediente incompleto y trunco de la visita y reparto de las tierras del
valle de Yucay hecho por el licenciado Alonso Maldonado de Torres.

Legajo 02. 1700-1769.

Memorial presentado por Marcos Chiguantopa, cacique principal y gobernador del


pueblo de Guayllabamba. Incluye repartición de 1595.

Sin Legajo. Siglo XVI-XIX.

Expediente incompleto del libro de reparto de tierras de los ayllus de


Guayllabamba, reducidos en el pueblo del mismo nombre

138
Fondo Documentos de la Dirección Del Archivo Regional del Cusco
Sección: Colección Genealogía de los Betancur.

Libro N° 03. N° 2. Testimonio dado por Benito de la Peña, escribano de esta


ciudad del Cuzco en 22 de abril de 1552 de las diligencias practicadas en virtud de
real provisión de la Real Audiencia de Lima, expedida en 20 de octubre de 1550
sobre la averiguación que se hizo de los indios que tenía el valle de Yucay y que
tierras, casas y haciendas eran de los Yngas, señores que fueron del Perú y
tenían dedicadas al Sol y quien las poseía desde la conquista de los españoles, en
cuyo cumplimiento se calificó la extensión de dicho valle, tierras que fueron de
Guainacapac, sus mujeres y de otros Yngas, reyes gentiles del Perú con todo lo
demás que resulta en la representación de él, según el mapa que formaron y
acompaña.

Libro N° 04. 1574.

Fondo Notarial
Sección: Siglo XVI.

Escribano Protocolo Años


Gregorio de Bitorero 01 1560-1579
Miguel de Conteras 04 1596-1597
Pedro de la Carrera Ron 05 1586-1596
Alonso de Guerrero 06 1588
Joan de Olave 08 1596
Cristóbal de Luzero 09 1598
Luis de Quesada 12 1584-1585
Luis de Quesada 13 1586
Antonio de Salas 18 1596-1597
Joan de Quirós 14 1576-1577
Joan de Quirós 15 1579
Joan de Quirós 16 1583
Antonio Sánchez 20 1568
Antonio Sánchez 21 1569
Antonio Sánchez 25 1573-1574
Antonio Sánchez 26 1576-1578
Antonio Sánchez 28 1581-1582
Antonio Sánchez 29 1582-1583
Antonio Sánchez 30 1583-1584
Gerónimo Sánchez de Quesada 38 1589

139
BIBLIOGRAFÍA

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América: es a saber: de los Reynos del Perú, Nueva España, Tierra-
Firme, Chile y Nuevo Reyno de Granada. Tomo V. Madrid; Imprenta
de Manuel Gonzales. Versión digital del original ubicado en Duke
University Library.

ALARCÓN OLIVOS, Marcos.


2017. “Los libros de cabildo y la temprana historia política del Perú
colonial”. En: Histórica; XLI.2.

AMADO GONZALES, Donato.


1998 “Reparto de tierras indígenas y la primera visita y composición
general. 1591-1595.” En: Histórica. Vol. XXII; N° 2.

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1970 “cartografía histórica cuzqueña. Mapas del Cuzco existentes en el
Archivo General de Indias”. En: Revista del Archivo Histórico del
Cuzco. N° 13.

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1999 /1551/. Suma y Narración de los Incas. Cusco: UNSAAC.

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Colección geográfica e histórica de los arzobispados y obispados del
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CABELLO VALBOA DE, Miguel


1951 /1586/ Miscelánea Antártica: una historia del Perú antiguo. Lima: Instituto de
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CIEZA DE LEÓN, Pedro.


1962 /1553/ La Crónica del Perú. Madrid: Espasa Calpe.

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1982 /1649/. Relación de la ciudad del Cuzco. Prologo y transcripción de María del
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144
ANEXO

145
CUADRO NÚMERO 15

REPARTO DE TIERRAS DE TRIGO Y MAIZ:


A LOS INDIGENAS DEL AYLLU YANACONA DURANTE LA PRIMERA VISITA Y
COMPOSICIÓN DE TIERRAS DE 1594
Topo
Ayllo de los Yanaconas de su Magestad de Guayllabamba de que
es Curaca Melchor Guamán Rimasca

A Melchor Guamán Rimasca, principal de este ayllo, tributario


cassado se le dieron dos topos de maíz, el uno en Guayocare,
linda con Felipe Conssa y otro en /f.13/ la quebrada de Hurcos 2
linda con Juan Coro y Luissa Po (sic), nieto.

A Antón Poma Condor, se le dio un topo de maíz en Cassana Bamba, 1


linda con Diego Quispe.

A Diego Acache, cassado, tributario se le dio medio topo de maíz en ½


Guaiocare, linda con Diego Guaman Cocho.

A Juan Tumaylla, cassado, tributario se le dio un topo de maíz, el 1


medio en Guayocare linda con Juan Atao y el otro medio en
Casanabamba linda con Miguel Chanca.

A García Guayta, casado tributario se le dio un topo de maíz, el medio 1


en Guayocare /f.13v/ linda con Juan Toma y el otro medio topo en
Casanabamba, linda con Gaspar Guaman Churasca.

A Juan Guaman Cucho se le dieron tres topos de trigo en 4.1/2


Guaynacolca, linda con doña Mariana de Olivares y un topo de maíz el
medio en Guayocare; linda con Gaspar Guaman Churasca y el otro
medio topo en Casanabamba, linda con el dho y Martín Tumaylla.

A Gaspar Guaman Churasca, tributario se le dieron dos medio topos el 1


uno en Guaiocare linda con Domingo Quispi y el otro medio en
Casanabamba linda con Juan Guaman Cucho.

/f.14/ A Xptobal Chuqui Condor, cassado, tributario se le dio topo y 1½


medio de maíz, el uno en Cassanabamba, linda con Pedro
Pomacondor y el medio en Guayocare linda Diego Hacache.

A Pedro Pomacondor, casado, tributario se le dio topo y medio de maíz 1½


el uno en Casanabamba, linda con Juan Guaman digo Xptobal Chuqui
146
Cóndor y el medio en Guayocare linda con Francisco Mucha.

A Juan Ciqui, casado, se le dieron dos topos de maíz el uno en 2


Guayocare linda con Lucas Apo Sucsso y el otro en Casanabamba
linda con Phelipe Quispe.

A Juan Guari, tributario, viudo se le dio topo y medio /f.14v/ de maíz el 1½


uno en Casanabamba, linda con Lucas Mauiri y el medio en
Guayocare, linda con Pedro Canchari.

A Juan Quispi Coro, casado se le dio un topo de maíz en Guayocare 1


linda con Hernando Aymara.

A Lucas Apo Suco, casado, tributario se le dio un topo de maíz en 1


Guayocare, linda con Juan Quispe Coro.

A Agustín Cusi Paucar, casado, tributario se le dio topo y medio de


maíz el uno en Casanabamba, linda con Leonor Capa y le medio en 1½
Guayocare, linda con Diego Uayapa.

A Alonso Cacya, casado, tri- /f.15/ butario se le dio topo y medio de


maíz el uno en Casanabamba, linda con Juan Coro y el medio en 1½
Guayocare linda con Juan Quispi.

A Pedro Coro casado, tributario se le dio un topo de maíz en 1


Guayocare, linda con Diego Malqui.

A Vizente Condori, soltero, tributario se le dio un topo de maíz en 1


Guayocare con Pedro Ticlla Yauri.

A Diego Malqui, casado, tributario se le dio medio topo de maíz en ½


Guayocare linda con Pedro Coro.

A Diego Guayapa, tributario, casado se le dio topo /f.15v/ y medio de


maíz, el uno en Casanabamba, linda con Miguel Guancara y el medio 1½
topo en Guayocare linda con Alonso Caquia.

A Alonso Sapanta, tributario, casado se le dio un topo de maíz en 1


Casanabamba, linda con Miguel Chanca.

A Juan Acos, tributario, se le dio un topo de maíz, el medio en


Guayocare, linda con Alonso Aroni y el otro medio en Casanabamba 1
linda con Alonso Sapanta.

A Miguel Chanca, casado, tributario se le dio /f.16/ un topo de maíz, el

147
medio en Guayocare, linda con Juan Acos y el otro medio en 1
Casanabamba linda con Juan Tomaylla.

A Phelipe Quispe, tributario, se le dio un topo de maíz en 1


Casanabamba, linda con Juan Guare.

A Pedro Ticllay se le dio un topo de maíz en Guayocare linda con 1


Pedro Pomacondor.

A Miguel Guancara, tributario se le dio un topo de maíz en 1


Casanabamba, linda con Juan Condori y Beatriz de Zamora.

A Juan Marcas, tributario de tasa se le dio un topo /f.16v/de maíz en 1


Guayocare linda con Juan Cayo.

A Hernando Yalli, casado, se le dio un topo de maíz en Casanabamba 1


linda con Andrés Caccha.

A Gonzalo Aroni, tributario, se le dio un topo de maíz en Guayocare 1


linda con Juan Marcas.

A Phelipe Aucayalli, se le dio un topo y medio de maíz, el uno en


Casanabamba, linda con Hernando Yalli y el medio en Guayocare, 1½
linda con Juan Seque.

A Domingo Quispi, tributario se le dio topo y medio de maíz, el uno en


Casanabamba, linda /f.17/ con doña Ana Pilco Sisa y Diego Guayssa y 1½
el medio en Guayocare linda con Agustín Cusipaucar.

A Diego Quispi, tributario se le dio topo y medio de maíz el uno en


Casanabamba, linda con Bartolomé Tomaylla y el medio en Guayocare 1½
linda con García Chanca.

A Agustín Chonta Guaman, soltero, tributario se le dio un topo de maíz 1


en Guayocare, linda con Marcos Auca Aymara.

A Francisco Mocha, casado tributario se le dio un topo de maíz, la


mitad /f.17v/ en Casanabamba, linda con Martín Chilcasi y el otro 1
medio en Guayocare, linda con Xptobal Choque.

A Joan Atao, casado tributario, se le dio un topo de maíz la mitad en


Guayocare, linda con Juan Yari y la otra mitad en Casanabamba linda 1
con García Guayta.

A García Chanca Guayba, se le dio un topo de maíz en Guayocare 1

148
linda con Miguel Coro.

A Pedro Canchari, tributario, casado se le dio un topo de maíz el medio


en Guayocare, linda con Juan Sulca y el /f.18/ otro medio en 1
Casanabamba linda con Martín Callopa.

A Martín Callopa, viejo casado, se le dio medio topo en Casanabamba, ½


linda con Pedro Cusi Guaman.

Viejos reservados, huérfanos, viudas y solteras de este ayllo de


don Melchor Guaman Rimasca

A Martín Callopa, viejo, se le dio medio topo de maíz en ½


Casanabamba, linda con Pedro Cusiguaman.

A Martín Tomaylla, viejo casado, se le dieron tres silcos de maíz en ¾ s.


Casanabamba, linda con Francisco Mocha.

A Juan Coro, huérfano se le dio /f.18v/ un topo de maíz en 1


Casanabamba linda con Melchor Guaman Rimasca.

A Diego Usco Condor, huérfano se le dio medio topo de maíz en ½


Casanabamba, linda con Alonso Tocto.

A Diego Mateo, huérfano, se le dio un topo de maíz en Casanabamba


linda con Gerónimo Curi Yana. 1

A Diego Guayta, huérfano, se le dio topo y medio de maíz en 1½


Casanabamba, linda con Domingo Quispe.

A Antón Puro, viejo, se le dio medio topo de maíz en Casanabamba ½


linda con Ynes Coca.

/f.19/ A Hernando Pomacondor, viejo, se le dio medio topo de maíz en ½


Casanabamba linda con Juan Seque.

A Juan Sulcaguaman, viejo se le dio un topo de maíz en Guayocare, 1


linda con Miguel Chanca.

A Xptobal Mayon, huérfano, se le dio un topo de maíz en 1


Casanabamba, linda con Alonso Puri.

A Alonso Puri, viejo, se le dio un topo de maíz en Casanabamba linda 1


don Diego Guayta.

149
A Leonor Casa se le dio un topo de maíz en Casanabamba, linda 1
/f.19v/ con Alonso Puri.

A María Coca, viuda, se le dio un topo de maíz en Casanabamba linda 1


con Juan Chaquall.

A Juan Llacta, viejo, se le dio un topo de maíz en Casanabamba linda 1


con María Coca.

Juan Poma, casado, se le dio un topo de maíz en la quebrada de Urcos 1


junto a la huerta de Carbajal.

A Bartolomé Tomaylla, huérfano, se le dio un topo de maíz en el 1


asiento de Casanabamba el qual linda con Juan Llacta, viejo de este
ayllo de Melchor Guaman /f.20/ Rimasca, principal.

A Pasqual Vilcaguaman, viejo, se le dio un topo de maíz en el asiento 1


de Casanabamba el qual linda con tierras de Bartolomé Maylla del dho
ayllo.

A Martín Chilasi, tributario, yanacona, se le dio un topo en Casana, 1


linda con Diego Alca Condor.

FUENTE: A.R.C. Fondo Urubamba. Legajo 02. 1700-1769. Memorial presentado por Marcos
Chiguantopa, cacique principal y gobernador del pueblo de Guayllabamba. Incluye repartición
de 1595.

150
ARCHIVO REGIONAL DEL CUSCO.
DOCUMENTOS DE LA DIRECCION DEL ARC.
GENEALOGÍA DE LOS BETANCUR. LIBRO 03.

/f.12/ N° 2. Testimonio dado por Benito de la Peña, escribano de esta ciudad


del Cuzco en 22 de abril de 1552 de las diligencias practicadas en virtud de
real provisión de la Real Audiencia de Lima, expedida en 20 de octubre de
1550 sobre la averiguación que se hizo de los indios que tenía el valle de
Yucay y que tierras, casas y haciendas eran de los Yngas, señores que
fueron del Perú y tenían dedicadas al Sol y quien las poseía desde la
conquista de los españoles, en cuyo cumplimiento se calificó la extensión de
dicho valle, tierras que fueron de Guainacapac, sus mujeres y de otros
Yngas, reyes gentiles del Perú con todo lo demás que resulta en la
representación de él, según el mapa que formaron y acompaña.

Nota. Acompaña el plan original de la repartición de los solares del valle de


Yucay, hecho el año de 1550 de orden de la Real Audiencia y del Superior
Gobierno.

/f.13/ En la ciudad del Cuzco de estos reinos y provincias del Perú, a veinte y ocho
días del mes de abril año de mil y quinientos y cincuenta y dos años, ante el muy
magnífico señor el mariscal don Alonso de Albarado, corregidor y justicia mayor en
esta dicha ciudad, por su majestad, y en presencia de mí Benito de la Peña,
escribano público y de los testigos de yuso escritos, pareció presente, Bartolomé
Arballo, en nombre de don Francisco Chilche, cacique y por virtud de su poder que
presento y presentó la petición siguiente.

Sepan cuantos esta carta de poder vieren como yo don Francisco Chilche, cacique
del valle de Yucay, estante en el arrabal de esta ciudad que se llama Carmenga,
otorgo y conozco por esta presente carta que doy y otorgo mi poder cumplido,
libre, llenero, bastante según que como yo he y tengo y de derecho en tal caso se
requiere y más puede, debe valer a vos el tesorero García de Melo, vecino de esta
dicha ciudad, ausente, y a voz Bartolomé Arballo, procurador de causas que estáis
presente y a cada uno y cualquier de vos, por sí insolidum generalmente para en
todos mis pleitos /f.13v/ y causas y negocios civiles y criminales que yo he y tengo
y espero haber y tener y mover con cualesquier persona y de cualquier calidad y
condición que sean y con el corregimiento, justicia y regimiento y personas
particulares de esta dicha ciudad y de otras partes y las tales personas los han o
tienen o esperan haber o tener y mover contra mí así en demandando como en
defendiendo y para que en razón de lo susodicho y de cualquier cosa de ello
podáis parecer y parezcáis ante lo señores presidente y oidores de la Audiencia
Real de estos reinos y ante otros cualesquier jueces y justicias que sean,
eclesiásticas o seglares y ante ellos cualquier de ellos, por mí y en nombre de los
caciques e indios del valle de Yucay, a mi sujetos, por quien presto voz y caución
de rato para que estarán y pasaran por lo que por virtud de este poder hicieredes
(sic) so expresa obligación que para ello hago de mí persona y bienes, podáis
151
suplicar y supliquéis de cualesquier provisión y provisiones que estuvieren dadas y
se dieren en razón de cualesquier proveimientos de tierras, chacaras y es-
/f14/tancias que se hubieren hecho en el dicho valle de Yucay y en Urcos y en
otras partes que me vengan perjuicio y a los dichos indios y pedir que no se
cumplan, contra de ello, responder y replicar y poner en los dichos mis negocios y
causas cualesquier demandas, pedimentos, respuestas, replicatos (sic) de ello y
de lo que contra mí se pidiere y presentar cualesquier testigos, escrituras y
probanzas y ver presentar y jurar y conocer los de contrario y recusar jueces y
escribanos y poner tachas a los testigos de contrario y los jurar con debida
solemnidad y apartar de to/do/ ello y sacar y ganar cualquier provisiones reales y
las hacer notificar y pedir que se cumplan y sacar de todo ello cualesquier
testimonios, escrituras y las presentar en juicio y hacer cualesquier protestaciones
y juramentos de verdadero derecho en mi anima y los diferir a las otras partes y
convenir y pedir y oír suyas interlocutorias y definitivas y las consultar y apelar y
suplicar de ellas y las seguir por todas instancias y sacar de todo ello cualesquier
cartas ejecutorias y mandamientos y hacer y hagáis /f.14v/ todos los autos y
diligencias judiciales y extrajudiciales que convengan y sean necesarios de
hacerse y que yo mismo haría y hacer podría presente siendo, aunque sean de tal
calidad que según derecho requieran y deban haber, mi más especial poder y
mandado y presencia personal y para que podáis sustituir este poder en una o
más personas y se lo revocar y otros de nuevo lo sustituir quedando en una o más
personas quedando en vos este dicho poder que cuan cumplido y bastante poder
como yo he y tengo para todo dicho es. Otro tal y ese mismo lo doy y otorgo a vos
los dichos tesorero García de Melo y Bartolomé Arballo y otros sustitutos con
todas sus incidencias y dependencias, anexidades y conexidades y para lo haber
por firme obligo mi persona y bienes y so la dicha obligación vos relievo y a otros
sustitutos en forma de derecho en testimonio de lo cual otorgue esta carta de
poder ante escribano público y testigos de ella, que fue fecha y otorgada en la
ciudad del Cuzco a veinte y tres días del mes de abril, año del nacimiento de
nuestro salvador Jesucristo de mil y quinientos y cincuenta y dos años, testigos
que fueron presentes a ello; Toribio Escudero y Francisco Camargo y Miguel Vla
(sic) y Baltasar de Garay y lengua que juró que el dicho don Francisco, cacique, lo
otorgo /f.15/ como de suso se contiene, estantes en dicho arrabal y porque el
dicho don Francisco dijo que no sabe firmar, lo firmó el dicho Toribio Escudero en
el registro de esta carta, por testigo Toribio Escudero y yo Diego Muñoz Thernero,
escribano de su Majestad público del número de esta ciudad del Cuzco, presente
fui con los dichos otorgantes y testigos y lo hice escribir según ante mi paso e hice
aquí mi signo en testimonio de verdad. Diego Muñoz, escribano público.

Petición. Muy magnifico señor.

Don Francisco Chilche, cacique de Yucay, por mi procurador, digo que es venido a
mí noticia que vuestra merced tiene una real provisión, emanada y librada por los
muy poderosos señores presidente y oidores de la audiencia real de su Majestad
que reside en la ciudad de los Reyes, la cual es venido a mí noticia ahora
nuevamente que se ganó a pedimento del cabildo de esta ciudad y vecinos de ella
152
en la cual dice que se contiene y manda dar chacaras y solares a los vecinos de
esta ciudad en el valle de Yucay que yo tengo y de donde yo soy cacique y que se
le diesen a donde dicen Urcos en el dicho valle o en otras partes de él, según que
en la dicha provisión real y mandamiento de ella se contiene, cuyo tenor aquí
resumido y con el acata-/f.15v/ miento debido digo que la dicha real provisión se
debe obedecer como carta y mando de su majestad, a quien Dios prospere y deje
vivir y reinar por largos tiempos con acrecentamiento de más reinos y señoríos, y
en cuanto al cumplimiento, hablando con la dicha reverencia y acatamiento digo
que se debe sobreseer y no cumplir porque fue dada y librada sin oírme pues se
pidió en mi perjuicio, porque todo el dicho valle de Yucay y a donde dicen Urcos es
mío, en unas partes dejo yo y mis indios de sembrar un año y le siembro otro,
dejando holgar las dichas tierras por sus mitas sembrando las unas unos años y
las otras otros, por manera que siempre siembro y siembran los dichos mis indios
en todo el dicho valle y allí sembramos yo y los dichos mis indios para pagar los
tributos de la tasa y si me quitasen las dichas tierras seria ocasión para no poder
pagar los tributos que así soy obligado a dar y la real intención de su Majestad
nunca es hacer ningún agravio a ninguna parte y si la dicha provisión dio, seria
con siniestra relación y su Majestad tiene mandado en sus leyes y pragmáticas
que tiene hechas para estas partes de las Yndias que seamos amparador y
defendidos y que siempre se nos guarde nuestra justicia y por derecho y leyes
está dispuesto que /f.16/ cuando alguna carta o provisión real se diere y librare en
ejecución y perjuicio de alguna persona para quitarle algún derecho o hacienda o
parte de ella que fuere cobrada y dada sin audiencia que sea obedecida y no
cumplida, y así se debe hacer en esta real provisión y mandamiento, porque
siendo dada en mi tan notorio perjuicio y para quitarme las tierras que yo tengo y
poseo sin oírme, debe sobreseer y así lo pido y a mayor gratificación de mi
derecho, hablando con la dicha reverencia y acatamiento que debo, suplico de la
dicha real provisión y del cumplimiento de ella para ante su Majestad y para ante
los muy poderosos señores sus presidente y oidores donde emanó y para ante
quien y con derecho debo y si necesario es pido y requiero a vuestra merced las
veces que de derecho soy obligado, sobresea el cumplimiento de ella, hasta que
sea por mí bien informado su Majestad sobre el derecho que tengo a las dichas
tierras y bien informado mande lo que más sea servido por los dichos señores
presidente y oidores en su nombre y pido a vuestra merced me otorgue la dicha
suplicación para que pueda informar a su Majestad sobre mi derecho y si no lo
hiciere y toda-/f.16v/ via mandare cumplir, protesto las veces que puedo y debo no
me pare perjuicio y que sea en si ninguno y desde ahora para entonces y desde
entonces para ahora tan quan ad futuro gravamine y lato con quato (sic), apelo del
tal mandado que vuestra merced hiciere y de no sobreseer ella y de todo lo demás
que vuestra merced mandare y actuare sobre esta causa para ante su Majestad y
los dichos señores presidente y oidores, debajo de cuya protección y amparo
pongo mi persona y bienes y pido a vuestra merced que esta mi suplicación y
apelación mande de poner a las espaldas de la dicha real provisión y que me sea
otorgada con los apóstolos, con las instancias y afincamientos del derecho y si
denegados me fueren de la tal negación otra y otra vez apelo y tantas cuantas
veces me fuere denegada y juro a Dios y a esta cruz + en forma que la dicha
153
suplicación y apelaciones no las hago de malicia sino por lo que toca y conviene a
mi derecho y así pido testimonio en forma de lo susodicho para guarda de mi
derecho ante el presente escribano y testigos para lo cual es, etc.

Presentado el dicho escrito y poder, luego el dicho señor /f.17/ corregidor dijo que
traiga el dicho escrito firmado de letrado y traído firmado lo habrá por presentado,
lo cual mando, estando presente el dicho Bartolomé Arballo y para más
abundamiento yo el presente escribano se lo notifique, testigos: Diego Muñoz
Escribano y Rodrigo Hernández de Niebla y el licenciado Jaén, Alonso de
Alvarado, Benito de la Peña, escribano público.

Y después de lo susodicho en dos días del mes de mayo, año de mil y quinientos
y cincuenta y dos años, ante el dicho señor corregidor, el dicho Bartolomé Arballo,
hizo presentación de este escrito por cuanto lo está y firmado de rubrica del
letrado y el dicho señor corregidor dijo que lo oía, testigos: Diego Muñoz Escribano
y Pedro López de Cacalla y Juan de Berrio.

Y después de lo susodicho en dos días del mes de mayo, de este dicho año, ante
el dicho señor corregidor y en presencia de mí el dicho escribano pareció presente
Bartolomé Arballo y presentó un escrito del tenor siguiente.

Muy magnifico señor

Don Francisco Chilche, cacique de Yucay por mi procurador, afirmándome en la


suplicación que tengo hecha ante vuestra merced de la provisión que los vecinos
de esta ciudad trajeron /f.17v/ para tomar chácaras y solares en el dicho valle de
Yucay y si necesario es haciendo la dicha suplicación de nuevo digo que vuestra
merced me la debe otorgar por lo que dicho y alegado tengo a que me refiero
porque demás de las causas que tengo dadas digo que las dichas tierras son de
los indios naturales del dicho valle antiguamente y si los Yngas algún tiempo
tuvieron alguna parte de las dichas tierras eso fue tomándolas de hecho y por
fuerza como tiranos que eran y siendo las dichas tierras como dicho tengo de los
dichos indios naturales, ahora que ceso la tiranía de los dichos Yngas se vuelven
a los dichos indios naturales, así los dichos indios y yo en su nombre como
cacique de ellos las hemos tenido y poseído y llevado los frutos de ellas para
nuestro mantenimiento y para dar los tributos que somos obligados. A vuestra
merced pido me otorgue la dicha suplicación según qué pedido tengo y sobresea
el cumplimiento y ejecución de la dicha provisión hasta tanto que su Majestad sea
informado de la verdad e informado mande lo que fuere servido y en todo pido y
requiero a vuestra merced todas las veces que de derecho soy obligado, haga
según qué pedido tengo en la suplicación que tengo hecha a la cual vuestra
merced respondió que la trajese firmada de letrado y yo la /f.18/ traigo firmada y si
necesario es ahora la presento de nuevo y lo pido por testimonio y que me sea
hecha cumplimiento de justicia etcétera. Luego el dicho señor corregidor dijo que
lo oía, testigos que fueron presentes: Pedro López de Cacalla y Juan de Berrio y
Diego Muñoz Escribano.
154
Y después de lo susodicho en la dicha ciudad del Cuzco en siete días del dicho
mes de mayo del dicho año de mil y quinientos y cincuenta y dos años, el dicho
señor corregidor don Alonso de Alvarado, dijo respondiendo a los dos escritos
presentados por Bartolomé Arballo en nombre de don Francisco Chilche, dijo que
los días pasados le fue mandado a su merced por una provisión de la Real
Audiencia, fuese al valle de Yucay e hiciese información de las tierras del que
había vacas y cuyas eran a causa de que por esta ciudad se había pedido se les
hiciese merced de que se les diese en el dicho valle algunas estancias y solares
para que pudiesen ir a ella a criar sus hijos a causa de que los que Dios aquí les
daba de diez se le morían ocho y que a causa de esto vivían con gran descontento
y con menos deseo y voluntad de permanecer y perpetuar en la dicha ciudad y por
virtud de la dicha provisión fue /f.18v/ al dicho valle e hizo la dicha información,
tomando en ella el dicho del dicho don Francisco y de otros comarcanos antiguos
y de edad, por la cual dicha información y fisión (sic) del dicho don Francisco,
pareció muchas tierras ser y llevar el fruto de ellas los señores pasados Yngas y
no los indios del dicho valle ni el dicho don Francisco por cuanto no eran suyas ni
ningún derecho tenían a ellas los caciques del dicho valle, mayormente que el
dicho don Francisco es /ad/venedizo y no es parte para pedir lo que pide y la dicha
información que así hizo por virtud de la dicha provisión la envió a la Real
Audiencia, al señor Visorrey y su señoría ilustrísima, proveyó sobre ello un
mandamiento para que vista las causas tan convenientes al servicio de Dios y de
su Majestad y de los hijos que naciesen se criasen y aumentasen y esta ciudad se
perpetuase y permaneciesen los vecinos en ella, mandó que atento a esto se
diesen solares a todos los casados, al cual dicho mandamiento se refiere y en
cumplimiento del dicho mandamiento como mero ejecutor, él obedeció y cumplió e
hizo lo que por el su señoría le mandaba, dando a los casados a cada uno un
solar, el cual fue sin perjuicio de nadie y porque quedan por dar y repartir mu-/f.19/
chas tierras en cantidad que eran de los señores antiguos pasados, antes yendo al
dicho valle los indios pobres naturales del dicho valle dijeron holgarse mucho de
ello porque decían que don Francisco se las hacia sembrar por fuerza y llevaba el
provecho sin darles ninguna cosa de ello y en su conciencia dijo que le parecía era
en muy gran servicio de nuestro señor y bien de esta ciudad lo que su señoría
había proveído y mandado y estaba hecho y repartido y que era sin perjuicio de
los indios naturales y que en lo que toca a don Francisco, convenía su señoría
ilustrísima mandase poner la tasa más que a los españoles se había hecho,
porque se servía de los indios en hacer nuevas estancias de coca, donde se
morían los indios y que en el tributo que daban empiece a cada uno conforme a la
posibilidad sin que el dicho don Francisco les mandase trabajar en su propia
hacienda para ser solo él rico en lo cual sino pone remedio lo será y es más que
cuanto vecino de esta ciudad, con gran perjuicio de los indios y con esto en
hacerlo saber a su señoría descargaba y descargo su conciencia y que si
testimonio /f.19v/ quisiere que se le dé con que vaya inserta la información que su
merced hizo en que está el dicho del dicho don Francisco y la provisión real y el
mandamiento de su señoría y esto dijo que daba y dio por su respuesta y firmolo.
Testigos: el licenciado Alvarado y Antonio Marchena y Martín Ruiz de Porras y
155
Alonso de Oryhuela, vecinos y estantes en esta dicha ciudad. Alonso de Alvarado.
Etcétera.

Y después de lo susodicho en este dicho día, mes y año susodicho yo el dicho


escribano notifique el dicho auto a Bartolomé Arballo en el dicho nombre, testigos
los dichos.

Mandamiento de su señoría. Yo don Antonio de Mendoca, Visorrey y


Gobernador y Capitán General en estos Reinos del Perú por su Majestad y su
presidente en el Audiencia y Cancillería Real que en ellos reside, etcétera. Hago
saber el Mariscal Alonso de Albarado, corregidor y justicia por su Majestad, en la
ciudad del Cuzco y bien sabéis como los días pasados Juan de Quiñones,
procurador de esa dicha ciudad y vecinos de ella hizo relación en esta Real
Audiencia y dijo que a cuatro leguas de ella había gran cantidad de tierras que en
tiempo antiguo los naturales Yngas tenían dedicadas al Sol y que a causa de estar
ofrecidas a él a ningunos indios se aprovechaban de ellas aunque en aquel tiempo
había en el /f.20/ dicho valle cantidad de más de tres mil indios y que ahora no
había setecientos y que si en las dichas tierras del Sol los indios del dicho valle
tenían otras muchas donde labraban y hacían sus sementeras aunque fuesen
muchos más de los que son y que era cosa muy conveniente y necesaria para que
esa dicha ciudad se perpetuase que las dichas tierras se diesen y repartiesen a
los vecinos de ella donde pudiesen hacer huertas y casas y tener sus labranzas y
crianzas sobre el cual se mandó dar y dio provisión real para que vos el dicho
corregidor hubiesedes (sic) información, así de vuestro oficio como a pedimento
de partes y supiesedes y averiguasedes que cantidad de tierras eran las que en el
dicho valle de Yucay había de los Yngas, dedicadas y ofrecidas al Sol y que
personas se aprovechaban de ellas y que pro y utilidad seguiría de que se
repartiesen o que daño o perjuicio vendría de ello y que la información con vuestro
parecer lo enviasedes cerrado y sellado a la dicha Real Audiencia para que visto
se proveyese lo que conviniese y la información de todo lo susodicho con vuestro
parecer fue traída y presentada ante mí con una pintura que de las dichas tierras
enviasteis y don Pedro Luis de Cabrera y Pedro López de Cacalla, procuradores
de esa ciudad en nombre de todos los vecinos y republica me pidieron la /f.20v/
viese y que pues claramente constaba la gran necesidad que la dicha ciudad y
vecinos de ella tenían de que en el dicho valle de Yucay se les diese y repartiese
tierras en que pudiesen edificar casas y hacer huertas pues la dicha ciudad del
Cuzco no tenía otra parte ninguna donde se les diese y de esta manera se
perpetuaría y permanecería y no de otra por causa que los niños que en la dicha
ciudad nacían no se criaban en ella y adolecían y fallecían luego como era público
y se había visto por experiencia y así acontecía en vuestro parecer y que en las
dichas tierras que se les diesen harían casas y huertas donde los enviarían a criar
que era buen temple de tierra que en nombre de su Majestad hiciese merced a la
dicha ciudad y vecinos de ella de mandarles repartir entre todas las dichas tierras
pues había tantas causas y tan evidentes y bastantes para ello y no venía ningún
daño y por mi visto y todo lo susodicho atento lo que pedía la dicha información y
parecer y pintura, costa para que la dicha ciudad del Cuzco vaya a crecimiento y
156
se perpetúe y que los niños que le nacieren se puedan criar confiando de vos el
dicho Mariscal Alonso de Albarado que bien y fielmente haréis lo que por mí os
fuere cometido y que tenéis noticia de lo susodicho y habéis visto las dichas
tierras, mande dar este mi mandamiento por el cual en nombre de su Majestad os
doy comisión y facultad para que en el dicho valle de Yucay en las tierras
susodichas y declaradas que estaban ofre-/f.21/ cidas por los Yngas al Sol, deis y
señaléis y podáis dar y señalar y repartir a cada uno de los vecinos casados de la
dicha ciudad del Cuzco y a los que de aquí adelante se casaren y no a otros, un
solar en las dichas tierras para que en él puedan hacer y edificar casa y huerta
donde lleven y puedan llevar a criar sus hijos y así señalado yo en nombre de su
Majestad le hago merced de él y pueda tomar y tome la posesión del tal solar, al
cual mandó que por si ni por interpuestas personas en ninguna manera la puedan
vender, dar ni donar ni enajenar a iglesia, monasterio ni a persona eclesiástica ni a
vecino ni a otra persona que allí tenga solar en ningún tiempo ni a otras personas
que no lo tengan dentro de seis años, so pena que por el mismo caso sin otra
declaración ni sentencia alguna haya perdido y pierda el vendedor el tal solar y
todo lo que en el hubiere edificado y quede libre para poder hacer merced de el a
otro vecino y pierda el que él comprare el valor y precio del tal solar lo cual aplico
en esta manera, la tercera parte para el denunciador y la otra para la cámara de
su Majestad y la otra tercia parte para el juez que lo sentenciare y para dar y
ratificar dichos solares mando que primero se vea la más conveniente y cómoda
parte que en las dichas tierras del Sol hay para ello y a él señalen de manera que
no se tomen /f.21v/ las tierras a los indios particulares ni sea en su perjuicio y
hecho el repartimiento entre los dichos vecinos casados según dicho es. Enviad
ante mí la relación de ello y de los vecinos que hay en la ciudad por casar y que
tantos solares que darán por repartir. Hecho en los Reyes a veinte y tres días del
mes de diciembre de mil y quinientos y cincuenta y un años. Don Antonio, por
mandado de su señoría. Baltasar Hernández.

Y después de lo susodicho en diez días del mes de mayo y del dicho año antes
dicho señor Corregidor y en presencia de mí el dicho escribano, pareció presente
Bartolomé Arballo en el dicho nombre y presentó un escrito del tenor siguiente.

Muy Magnífico Señor

Don Francisco Chilche, por mi procurador digo que a mi noticia ha venido que
vuestra merced fue al valle de Yucay a repartir las tierras que en la provisión se
contienen sin embargo de la suplicación que tengo hecha y yo ahora en el dicho
nombre contradigo cualquier partición de tierras y solares que en el dicho valle se
dieren y cualquier posesión que de tierras o de parte de ellas se dieren a cualquier
persona, afirmándome en la suplicación y suplicaciones que de la dicha provisión
real tengo hechas y protesto que cual-/f.22/ quier cosa que se hiciere no pare
perjuicio al dicho mi parte ni a los dichos sus indios y suplico como suplicado
tengo y apelo de todo lo que ha hecho e hiciere sobre esta causa desde ahora
para entonces y de entonces para ahora y pidolo por testimonio, etcétera.

157
Y presentado el dicho escrito, luego el dicho señor Corregidor digo que él tiene,
respondido a los escritos presentados por el dicho Bartolomé Arballo y con ello
mismo, responde y que si testimonio quisiere que se lo mandaba y manda dar con
todo lo que tiene mandado y como lo tiene mandado y no lo uno sin lo otro sino
todo junto sin faltar nada y que además de esto vuestra merced enviara la traza
que ha hecho y dará relación de todo al señor Visorrey de estos reinos, testigos
que fueron presentes el Licenciado Jaén y Antón Ruiz de Porras y Hernán Gómez,
el mozo, Alonso de Albarado.

Y después de lo susodicho en doce días del dicho mes de mayo del dicho año,
ante el dicho señor Corregidor y en presencia de mí Benito de la Peña, escribano,
pareció presente el dicho Bartolomé Arballo y presentó un escrito del tenor
siguiente.

Muy Magnífico Señor. Don Francisco Chilche por mi procurador /f.22v/ digo que yo
tengo suplicado de una provisión real que los vecinos de esta ciudad ganaron para
que se les diese solares y tierras en Yucay y vuestra merced me otorgó la
suplicación y mando que si testimonio quisiese que se me diese lo procesado y yo
he pedido el dicho testimonio al presente escribano y no me lo quiere dar y dice
que ha de poner con él una probanza que se hizo ante Sancho de Orue lo cual de
derecho no se debe hacer sino darme el testimonio que pido porque demás de
que no ha lugar ponerse la dicha probanza ella está en la ciudad de los Reyes y
estando allá es costa y molestia tornase ahora a sacar, pido a vuestra merced
mande dar el dicho testimonio como pedido tengo y pido justicia y pidolo por
testimonio para lo cual es, etcétera.

Presentado el dicho escrito luego el dicho señor Corregidor dijo que mandaba y
mandó lo que mandado tiene y que no se le dé testimonio ninguno sino como lo
tiene mandado y que asimismo se le de todo lo que hasta hoy su merced tiene
hecho y señalado y traza que sobre ello se ha hecho y las demás tierras del Sol
que irán declaradas para que se den a los demás que se casaren como él señor
Visorrey lo tiene mandado y que visto su señoría haga lo que fuere servido,
testigos: el licenciado Jaén y Rodrigo Hernández de Niebla y Bartolomé Arballo.
Alonso de Alvarado.

/f.23/ Probanza e información que se hizo sobre las tierras del Valle de Yucay

Don Carlos, por la Divina Clemencia, Emperador Semper (sic), Augusto Rey de
Alemania, Doña Juana, su madre, y el mismo Don Carlos por la misma gracia,
Reyes de Castilla, de León, de Aragón, de las dos Secilias, (sic) de Jherusalen, de
Nabarra, de Granada, de Toledo, de Balencia, de Galizia, de Mallorcas, de Sevilla,
de Cerdeña, de Córdoba, de Corzega, de Murcia, de Jhaén, de los Algarbes, de
Algezira, de Gibraltar, de las Yslas de Canaria, de las Yndias, islas y tierra firme
del mar océano, Condes de Flandes y de Tirol, etcétera. A vos el nuestro
corregidor que al presente es o por tiempo fuere de la ciudad del Cuzco o nuestro
juez de residencia, salud y gracia. Sepades que Juan de Quiñones en nombre del
158
cabildo y justicia y regimiento de ella por una petición que presentó en la nuestra
Audiencia y Cancillería Real que por nuestro mandado reside en la ciudad de los
Reyes, ante los nuestros Presidente y Oidores de ella nos hizo relación diciendo
que cerca de esa dicha ciudad a cuatro leguas de ella hay gran cantidad de tierras
que en tiempo antiguo los Yngas, señores naturales que fueron de estos reinos
tenían dedicadas al Sol y que a esa causa ninguno se servía ni aprovechaba de
ellas aunque en el valle donde están /f.23v/ había cantidad de más de tres mil
indios y que ahora no hay aún setecientos visitados y que en las dichas tierras del
Sol que allí hay tienen los indios otras muchas en que labran y con que se poder
sustentar aunque fuesen más indios en cantidad de los que son y que por ser
dedicadas a su idolatría del Sol, los dichos indios no las labran y que es cosa
conveniente y necesaria por la perpetuidad de la dicha ciudad darse a personas,
vecinos de ella o que en ella se avecindasen para sus labranzas y crianzas y
como la nuestra merced fuese lo cual visto por los dichos nuestro Presidente y
Oidores fue acordado que debíamos mandar dar esta nuestra carta para voz en la
dicha razón y nos tuvimos por bien por la cual vos mandamos que luego que con
ella seáis requerido hayáis información así de oficio como a instancia de partes y
de los caciques e indios del dicho valle y su comarca y de la cantidad de tierras
que son las que hay en el dicho valle de Yucay que dicen que fueron dedicadas al
Sol y quien ha usado y usa de ellas y pro o daño se seguirá en que se repartan a
los naturales y españoles y hecha la dicha información cerrada y sellada la
enviareis con vuestro parecer a los dichos nuestro Presidente y Oidores para que
por ellos vista, cerca de ello provean lo que convenga y no fagades en dé al
/contrario/ so pe-/f.24/ na de la nuestra merced y de quinientos pesos de oro para
la nuestra cámara. Dada en la ciudad de los Reyes a veinte días del mes de
octubre de mil y quinientos y cincuenta años.

Yo Pedro de Abendaño, escribano de cámara de su Cesarea y Católica Majestad,


la hice escribir por su mandado con acuerdo del su Presidente y Oidores.
Testigos: Simón de Alcate, por Canciller el licenciado Mexia, el licenciado Cianca,
el doctor Bravo de Saravia, el licenciado Fernando de Santillán.

En la ciudad del Cuzco a siete días del mes de agosto de mil y quinientos y
cincuenta y un años, estando dentro de las casas del ayuntamiento y cabildo de
esta ciudad, los muy magníficos señores justicia y regimiento de esta ciudad,
conviene a saber: Mariscal Alonso de Alvarado, corregidor y justicia mayor de esta
ciudad y Diego Hortiz de Guzmán, alcalde ordinario y Juan Julio de Ojeda y el
capitán Juan Alonso Palomino y Pedro Alonso Carrasco y Tomás Basquez,
regidores, por ante mí el presente escribano pidieron al señor Corregidor que vea
la sobre dicha provisión que está ciudad tiene sobre las tierras de Yucay y que la
cumpla y haga la información que en ella se contiene y para mejor verificar la
verdad e informar a su Majestad, le rogaron lo fuese a ver por vista de ojos y hacer
en el dicho valle la información.

/f.24v/ Y luego el dicho señor corregidor tomó la dicha provisión en sus manos y la
beso, puso sobre su cabeza y dijo que la obedecía y obedeció como carta y
159
mandado de su Rey y señor natural a quien Dios nuestro señor deje vivir y reinar
por largos años, con acrecentamiento de mayores reinos y señoríos. Y en cuanto
al cumplimiento de ella dijo que su merced ira a ver las tierras en ella contenidas
por vista de ojos y que vayan algunos de los dichos regidores y vecinos a ver la
dicha disposición de las dichas tierras y que informados por todas vías de lo
contenido en la dicha provisión, su merced enviara la información y relación a la
dicha Real Audiencia como en la dicha provisión real se contiene y esto dio por su
respuesta en presencia de los dichos señores regidores según que parece por un
auto que se asentó en el libro del cabildo a que me refiero, paso ante mí Sancho
de Orue, escribano.

Y después de lo susodicho en doce días del mes de agosto de mil y quinientos y


cincuenta y un años el dicho señor Mariscal en cumplimiento de lo contenido en
esta dicha provisión real, tomando y llevando consigo a Juan Julio de Ojeda,
regidor y al licenciado Antonio de la Gama, como a personas que tenían noticia
/f.25/ de las tierras y partes del dicho valle y a otras personas y vecinos que de ello
pudiesen saber, fue al dicho valle de Yucay y mandó a los indios Yngas antiguos
de este Cuzco que consigo llevó para el efecto contenido en la dicha provisión,
que en suelo echando y con tierra y piedra y otros aparejos pasen y señalen este
dicho valle de Yucay y las tierras y heredades que de la una parte del río y de la
otra hay para que así pintado y señalado, siéndoles preguntado puedan mejor
señalar y nombrar las dichas tierras y moyas, cuyas eran en tiempo antiguo y
quien las tiene ahora y a quien pueden pertenecer y en el entretanto que lo
pintaban el dicho señor corregidor y otras personas fueron a ver y mirar por el
dicho valle adelante y los dichos indios quedaron pintando y señalando el dicho
valle como les fue mandado por ante mí el dicho escribano.

Los indios Yngas que se llevaron para la dicha averiguación al Yucay y lo pintaron
son los siguientes: Joan Caritopa, Tito Cagua Quispe Gualpa, sobrino del Ynga y
Bautista Ticsi, todos ellos al parecer en su aspecto de edad de cuarenta y cinco
años poco más o menos.

Después de lo susodicho en el dicho valle de Yucay en trece días del dicho sobre
mes y año suso /f.25v/ dicho, el dicho señor corregidor, estando presente el dicho
Juan Julio y el licenciado de la Gama y Juan de la Placa, y el licenciado Jaén y el
licenciado Albarado y otros muchos otros vecinos y personas que allí se hallaron y
estando pintado y señalado el dicho valle y presentes los dichos indios Yngas
orejones y otros muchos así del dicho valle como de otras partes que para el dicho
efecto se juntaron , preguntándoles el dicho señor corregidor para mejor ser
informado de las tierras y particularidades del dicho valle del Yucay a las
preguntas y repreguntas que se les hicieron declararon lo que se sigue adelante
públicamente en presencia de los indios del dicho valle de Yucay y de los demás
que allí se hallaron.

A los cuales dichos Yngas, el dicho señor corregidor y acompañados les


mandaron que así como tienen pintado este dicho valle le señalen declarando en
160
todo lo que tienen pintado cuales son las tierras que los indios de este dicho valle
antiguamente han labrado en tiempo de los Yngas por suyas y con que se
sustentaban y de ellas tributaban que eran obligados a tributar y que asimismo
declaren y señalen en que partes y lugares de este dicho valle es tan buenas
tierras que eran del Sol y del Ynga y de otros señores y señoras particulares en
las cuales los indios /f.26/ de este dicho valle no tenían parte ni señorío, ni las
labraban para sí y de la manera que antiguamente servían en la labor de las
dichas tierras.

Y luego los dichos indios, caciques Yngas de suso declarados por lengua de
Pedro Delgado, intérprete, indio natural de este dicho valle, debajo de juramento
que para ello hizo de declarar la verdad de lo que los dichos indios dijeren los
cuales todos asimismo juraron en forma según su ley y mochando al Sol y la tierra
y la guaca como lo tienen de costumbre, prometieron de decir verdad y
respondiendo a lo que les es preguntado por la dicha lengua dijeron, teniendo
delante la dicha pintura, lo siguiente.

Primeramente señalaron del dicho valle comenzando de los términos de Calca que
es a la parte del río arriba, una rinconada a la mano derecha de la parte del río de
la dicha rinconada que dijeron llamarse Huycho, que solía ser antiguamente la
mitad del dicho valle rinconada de Topa Ynga Yupangue hacia la parte de abajo,
viniendo hacia el valle de Yucay. Y la otra mitad de la dicha rinconada a la parte
del río arriba del Sol en la cual parte del Sol, dijeron que antiguamente estaban
indios del ayllo del Cuzco que quiere decir naturales en que solían haber más de
cien indios y que ahora habrá diez indios y en lo del dicho Topa Ynga dos o tres
de /f.26v/ los cuales indios y de todas las dichas tierras se sirve de ellas don
Francisco, cacique del dicho valle de Yucay que se ha entrado en ella, y más
dijeron que en la dicha rinconada tenían los indios, que allí habitaban, algunas
tierras suyas en poca cantidad y que el Sol tenia dedicadas tierras en la dicha
rinconada y Topa Ynga Yupangue las cuales están señaladas y conocidas hoy en
que dicen que Topa Ynga Yupangue había cuatro topos y del Sol tres y que estos
indios eran obligados a labrar las tierras que adelante se señalaran que se dicen
Hurcospanpa (sic) y así tornando a proseguir el río abajo a la mano izquierda
entre el río y la sierra, dijeron llamarse una gran llanada y una gran rinconada
Hurcosbanba por la cual rinconada viene una quebrada de agua a dar en el dicho
río del Yucay en el cual al principio de él, dijeron haber ciertos buhíos que eran de
la mujer de Topa Ynga Yupangue que se llamaba Mama Anaguarque, lo cual
dijeron que era del Ynga, así la dicha llanada de Hurcosbanba como la dicha
rinconada la cual llega hasta una punta de la sierra que está esta al fin de la
rinconada y estar en ellos poblados algunos indios en todo lo cual dijeron no tener
indio particular y ninguna cosa y dicen que no saben los topos de las tierras que
podría haber más de que es bueno y que estas tierras las sembraban /f.27/ los
indios que tienen dicho para el Ynga y que lo que de ellas procedía que era en
gran cantidad lo llevaban al Cuzco y se hacía de ello lo que el Ynga mandaba.

161
Fueles preguntado que quien tienen ahora estas tierras y las posee y las siembra
y se aprovecha de ellas y porque causa, dijeron que los indios de Chincheron
(sic) que sirven ahora a don Francisco, cacique de Yucay, que cuando se alzó la
tierra se bajaron de la sierra hasta cuarenta indios los cuales están poblados en
las laderas de esta rinconada y siembran todas estas heredades con los demás
que se tiene dicho y el maíz y todo lo que en ellas se coge lo dan al dicho
Francisco, cacique del dicho valle, dijeron más que el arroyo, arriba de la dicha
rinconada, se llamaba Hurpeguata (sic) y más arriba Chaquelaguayco (sic) la
cual se llama Moya del Ynga y lleno de arboleda donde se holgaba el Ynga, lo
cual es una quebrada estrecha, lo cual vio el dicho señor corregidor y los demás
por vista de ojos. Y de la otra parte del río a la mano derecha yendo el río abajo
como se va se dice Guayocari (sic), lo cual es de Hernando Pizarro y está en
ellos algunos indios y hay alguna poca de arboleda.

Más adelante el río abajo a la mano izquierda otro poco de llano que se llama
Guaylapanba (sic) en lo cual dijeron que del camino /f.27v/ hasta el río, viniendo
por el dicho camino hasta dar en una chacara que se dice Moyobanba (sic),
quedando la puente en medio, era tierra de Topa Ynga Yupangue con una casa y
buhío que están de la otra parte del camino hacia la sierra a mano derecha,
frontero de la dicha puente y que, lo del camino hacia la sierra a mano izquierda,
estaban rinconado de Topa Ynga, lo cual todo dice que lo tiene el dicho don
Francisco y que se ha entrado en ello y que mucha parte de ello no se labra.

De la otra parte del río, a mano derecha, en este derecho hay unas casas que
eran del Ynga que se dice Guayocollo (sic), y otra tierra que se llama
Chacaguaci (sic), en lo cual hay diez casas, la cual Chacaguaci era de Raba
Ocollo (sic), mujer que fue de Guaynacaba (sic), la cual era madre de Guascar, el
cual mató Atabalipa y no tuvo más hijos que este, lo cual tiene y se ha metido en
ello don Francisco, cacique de este valle.

Yendo el río debajo de la otra parte del río a la mano derecha, pasando una punta,
desde la cual empieza a ensanchar el valle que está enfrente de la puente hay un
pedazo de tierra que se dice Acosca (sic), en la cual hay una casa de
Guaynacava la cual dicha tierra está señalada desde la dicha casa, hasta el
camino y por otra parte su cerca (¿?) hasta la punta de la sierra la cual /f.28/
dijeron ser de Guaynacava un pedazo pequeño de la cual tierra, que será un topo,
siembran los hijos de Gualpa Roca y lo demás el dicho don Francisco, cacique.

Yendo el río abajo por el mismo camino y tierra, tienen un topo de tierra los hijos
de Cayo Topa que en nombre de cristianos se llamó don García y luego
prosiguiendo por el camino y tierras, algunas tierras que hay y confinan por el
dicho camino hasta llegar al Tambo y de la otra parte una moya del Ynga que es
un prado donde [ilegible] con sus ayllos son de unos mitimaes Quichuas, sujetos al
dicho don Francisco. En esta moya y prado hay una laguna que se dicen
Madorcocha (sic), que se lavaba en ella Guaynacava. Y en este derecho, de la
otra parte del arroyo junto a la sierra, hay unas tierras en la ladera, las cuales
162
están señaladas y se llama Andapache (sic), las cuales tierras eran y son de los
naturales del valle y junto a esto hay otros diez topos de tierras, a la mano
izquierda, hacia el río que dicen era de la madre del Ynga que se llamaba Mama
Anaguarque y que ahora lo tiene doña Angelina, porque dicen que se le dio el
Marques, desde la punta que tenemos dicho, yendo por el camino abajo a mano
izquierda, pegado con el río hay un pedazo de tierra que asimismo se dice
Acusca (sic), lo cual antiguamente era /f.28v/ del Ynga y lo dio a unos mitimaes
cañares y Chinchasuyu (sic) y Collasuyo y ahora están en ello un cacique cañari
que se llama Palchi Chapara (sic), más debajo de esto está dicho hay un estanque
que se dice Paucarchaca que era moya del Inga para su recreación en lo cual
había unas pocas de tierras para ají y camote.

Volviendo hacia la sierra a mano derecha, junto a la moya y prado que arriba esta
dicho hay una heredad que se llama Chuquibanba que era de Guayna/ca/ba y
más adelante hay unos andenes de mucha tierra y muy buena que era del Ynga y
del Sol, por la mitad de los cuales baja un arroyo de agua y por la ladera de la
sierra del mismo arroyo va otro entre los dichos andenes y el tambo hay unos
buhíos de Guaynacaba que fueron los antiguos donde solían llamar Yucay y ahora
también se llama así, más hacia el tambo hay otro buhío del Sol que se llama
Curicancha y ciertas tierras también del Sol, Quesalla Pilcobanba y también este
Pilcobanba de la otra parte de la casa del Sol hay otro pedazo de tierra que era de
Guaynacaba que se llama también Pilcobanba. Del dicho arroyo que va por la
ladera en la misma ladera hay ciertas tierras /f.29/ que eran y son de los naturales
del valle, todos los cuales dichos andenes de Yngas y del Sol las tiene ahora el
dicho don Francisco, cacique y dicen que cada un andén de ellos tenía un nombre
que no se acuerda de ellos y que de ciertas provincias venían cada uno a sembrar
su andén y conforme a la provincia que lo sembraba se llamaba el andén.

Más adelante del tambo entre el dicho tambo y los andenes a la mano derecha
hay una moya que confina con los dichos andenes en la cual hay unas fuentes de
agua que manan de las cuales se hace un pequeño estanque de agua donde el
Inga tenia pescado y totora para hacer lo que traían en las orejas, junto a la moya
a mano izquierda delante del tambo estaban mitimaes yngas del Cuzco donde
ahora el dicho don Francisco tiene su casa junto a esto, hacia el camino real hay
un pedazo de tierra que era de las mamaconas del Ynga que se llama
Yucaybanba la cual tiene el dicho don Francisco, yendo más delante de la otra
parte de un arroyo hay un pedazo de tierra que se llama Collabanba y que era de
Guaynacaba que ahora lo tiene el dicho don Francisco. Junto a esta chacara la
mano derecha hacia la sierra hay un pueblo de indios /f.29v/ que se dice Chicho,
naturales de este valle los cuales son todas suyas las tierras que llegan hasta la
sierra y hasta Quispiguanca, las cuales tierras se llaman Chichobanba. Dicen
que acabadas las tierras de Chichobanba de la otra parte de un camino hay unos
tambos que se dicen Quispeguanca que eran de Guaynacaba. A la mano
derecha de estos tambos hay una quebrada entre dos cerros que se dice Chicón
la cual era moya de Guayna Caba y en ellas hay arboleda y muchas tierras en los
cuales en tiempo del Ynga no había ninguna casa de indios y ahora hay ciertas
163
casas del Ynga y un cañar que tiene allí su casa y era esta arboleda y prado que
nunca se sembraban, de esta quebrada sale un arroyo que viene derecho hasta
dar al río.

A mano izquierda de esta casa de Quispeguanca al lado de ella hay un prado y


laguna que era del Ynga, a la mano izquierda de este prado hay un pueblo que se
dice Paca que es de indios naturales de este valle, con sus tierras junto a la
puente.

Al lado de este pueblo a la mano izquierda junto a la puente y río hay tres casas
con ciertos pedazos de tierras que son del dicho Ynga que se sembraban ají y
coca y algodón y maní, lo cual tiene el dicho don Francisco, cacique.

/f.30/ A la salida de Chicón, moya del Ynga, de la parte del arroyo el valle abajo
esta otro pedazo de tierra que se dice Chuquipingollo que era de Guaynacaba, la
cual tiene el dicho don Francisco.

A la mano izquierda de esto hacía el río pasando un camino hay un pedazo de


tierra que era chácaras del Sol que se dice Chuquibanba que dicen que eran más
de doscientos topos de tierras, cerca de esto dice que hay una casa de doña
Juana Marcachinbo, con dos topos de tierras alrededor. Junto a esto hay ciertas
tierras que se dice Churubanba que las sembraban los indios de Paca, arriba
dichos, las cuales dichas tierras de Chuquibanba (sic) que eran del Sol tiene el
dicho don Francisco.

Antes de entar en una quebrada donde tiene algunos indios Diego de Trujillo y una
estancia hay un pedazo de tierras que se dice Tomaguanca que era de Guayna
Caba y dicen que la dio a una mujer suya que se llamaba Raba Chula, la cual
tiene don Francisco.

Dicen que adelante, pasado un arroyo que sale de la quebrada de Truxillo está un
poblezillo que se llama Coto que es de don Jorge, hijo de Ocusicha, cañar, que
mataron en tiempo de la guerra, capitanes de /f.30v/ Goncalo Picarro, porque eran
amigos de los capitanes que servían al Rey.

A la mano derecha de este pueblezuelo hacía la sierra hay ciertas yanaconas que
eran de la dicha Rabao Chilo, y las tienen ahora el dicho don Francisco y se sirven
de ellas.

Más delante de estos hay un pueblo Cuzcacache (sic), sujeto a don Francisco con
sus tierras alrededor y junto a esto hacia el río a mano izquierda esta otro pueblo
junto a una puente que se dice Taracache, con sus tierras y labranzas alrededor,
más adelante hay otro pueblo que se dice Chaoca, junto al camino, naturales del
valle con sus tierras alrededor, sujetos al dicho don Francisco.

164
Delante de este pueblo que se dice Chaoca, está una casa grande que hizo
Mango Ynga junto al camino y entre el río y esta casa, está un pedazo de tierra
que era moya de Guaynacaba, lo cual tiene el dicho don Francisco.

De la otra parte del río a la mano izquierda hay unas chacaras de sal que eran del
Sol y las tiene don Francisco.

Delante de los dichos entran las tierras de Tambo, repartimiento de Hernando


Picarro.

Fueles preguntados si todo lo que han dicho y mostrado, /f.31/ pintado es verdad,
los cuales todos dijeron que si y que siendo necesario lo pintaran cada y cuando
que se les mandare para lo enviar a la real audiencia.

Fueles preguntado qué tantos indios solían haber en este valle del Yucay en
tiempo que las dichas tierras de suso declaradas eran del Ynga y Guaynacaba y el
Sol y los demás y antes de las guerras, así de los naturales de este dicho valle
como de los mitimaes, puestos por los señores en él. Dijeron les parece que había
dos mil indios, ciento más o menos.

Fueles preguntado qué tantos puede haber ahora. Dijeron que no lo saben más de
que les parecía que hay mucha cantidad menos que antes y que se remiten a la
visita que hicieron los visitadores que los visitaron.

Fueles preguntado que digan que si los dos mil indios que habían en este valle, si
saben que sin meterse ni labrar las chácaras, moyas y tierras que tenían para el
Sol y eran del Ynga, tenían sus chácaras particulares que labraban para su
sustentación y para dar su tributo y si tenían hartas tierras y chácaras en cantidad
aunque eran muchos indios. Dijeron que saben que antiguamente los dichos
/f.31v/ indios no la labraban para sí ningunas tierras del Sol ni del Ynga y que sin
estas saben que tenían hartas tierras en que labraban y cogían para su
sustentación y para lo demás que les era mandado.

Fueles preguntado si saben que los indios que ahora hay en el dicho valle y si
tienen hartas chácaras y tierras para poderse sustentar y dar su tributo, sin llegar a
las del Sol y de/l/ Ynga o de Guayna Cava pues dicen que antes eran dos mil
indios y ahora son pocos.

Dijeron que les parece y saben que si los dichos indios que ahora hay labran y
benefician las tierras en que solían labrar y sembrar en los tiempos pasados y no
las dejasen estar perdidas y baldías como las dejan por venirse a labrar,
escogiendo en unas partes y en otras a pedazos que de esta manera que hay
muchas tierras en cantidad para que pudiesen los dichos indios labrar y coger
para su sustentación y tributos aunque fuesen muchos más de los que son y que
los dichos indios por tener mucha demasía de tierras se andan escogiendo en
unas parte y en otras donde les parecía mejor.
165
Fueles preguntado que digan si saben que todas las tierras que hay en este valle
así las que ahora siembran como las que antiguamente solían sembrar es tierra
fructuosa y de buen temple y sí donde quiera que se siembran y benefician se da
buen maíz y chunnyos (sic)

Dijeron que si y que el dicho valle es de la calidad que se les /f.32/ preguntan y no
firmaron porque dijeron que no sabían.

Y luego para más información de lo susodicho hicieron parecer así a los caciques
principales del repartimiento de Calca que son Yocalla, Ynocochuri, y Tito Ygiugi y
Roca Yupangue, Ataure Sinche, los cuales por su aspecto parecen ser de edad de
más de cuarenta o cincuenta años y desde arriba y por ser comarcanos al dicho
valle y que lo saben y entienden y se les mostró la dicha pintura y lo que los
dichos caciques de suso declarados, han dicho y declarado de esto

Los cuales todos, habiéndolo visto, dijeron que es verdad, todo lo que de suso
está escrito y en la dicha pintura está muy bien hecha y bien declarado según que
los dichos indios orejones del Cuzco lo han declarado y pintado por cuanto entre
ellos se ha tratado y platicado.

Fueles preguntado, que digan que en tiempos pasados cuantas de las tierras y
moyas que están pintados, por del Sol y del uigua (sic) [debe ser Inga], eran del
Inga y del Sol, que tantos indios les parecía que había en el valle así de los
naturales como de mitimaes y otros cualesquier que hubiese en el dicho valle.

Dijeron que les parece y saben que había muy gran de indios en este valle en
tiempo antiguo, no se determinan en la cantidad, más que ahora hay muy pocos
en comparación de los que solía haber.

Fueron preguntados que digan si en el tiempo antiguo que las dichas tierras y
moyas que /f.32v/ /que/daron para el Sol y el Inga, si saben que no las sembraban
los indios particulares para sí, ni tenían que ver en ellas y que si en estas tierras
tenían ellos chácaras, tierras en este valle suyas propias que sembraban y cogían
estas para su sustentación y para lo demás que les era mandado.

Dijeron que en las dichas chácaras del Sol y del Yngua (sic) ningún indio
sembraba para sí ninguna cosa porqué todo las sembraban para el sol y para el
Yngua y ellos tenían suyas, propias, hartas para sustentarse y dar su camarico
como parece en las tierras de labranzas que ahora hay en el dicho valle.

Fueron preguntados que digan qué pues dicen que en tiempo antiguo eran
muchos más indios en cantidad que los que ahora son y dicen que sin labrar las
chácaras del Sol y del Ynga tenían hartas chácaras en que labrar y se
sustentaba/n/ que ahora que son pocos indios en el dicho valle, si saben que se

166
podían muy bien sustentar e que tienen sus tierras para ellos abundantemente sin
tocar en las del Sol y del Inga.

Dijeron que como tienen dicho en el tiempo del Ynga eran muchos indios y ahora
son muchos menos y entonces se sustentaban sin aquellas chácaras y tierras que
[ilegible] esta. Que ahora siendo tan pocos indios en este valle se pueden muy
bien sustentar y pasar sin ellas pues que tienen /f.33/ y pasar sin ellas pues que
tienen otras muchas y muy buenas tierras y chácaras en que hacen sus
sementeras mayormente, siendo como es este valle fértil y de buen temple y que
adonde quiera que labran la tierra da fruto.

Y luego el dicho señor corregidor y los demás, hicieron parecer ante sí para más
averiguación de lo susodicho a Camaqui, cacique y señor natural de los indios
naturales de este valle, quien no supo decir la edad que tenía más de que parece
de más de cincuenta años y que se acuerda y conoció muy bien a Guaynacava y
anduvo con él en la guerra, al cual se le mostró la dicha pintura y lo que de suso
tienen declarado los dichos caciques Yngas orejones y los demás de suso
declarados, el cual habiendo visto la dicha pintura y lo demás de suso declarado y
habiéndolo bien visto y entendido por lengua del dicho Pedro Delgado, dijo que la
dicha pintura estaba bien hecha y que lo que los dichos indios orejones del Cuzco
de suso a dicho y declarado es la verdad, esto lo sabe porque es cacique y señor
natural de este valle y que las tierras y moyas del Sol y del Ynga como como de
suso está declarado y de las demás señores que arriba se contiene.

Fuele preguntado que diga si en tiempo antiguo, cuan de las tierras y moyas que
están pintadas por del Sol y del Inga eran del Ynga y del Sol /f.33v/ que tantos
indios le parece que había en el valle así de los naturales y mitimaes y otros
cualesquier que hubiese en este valle.

Dijo que en tiempo antiguo después, que él se acuerda solían haber en el valle
dos mil y seiscientos indios y que habrá ahora hasta quinientos o seiscientos
indios con muchos y todos.

Fuele preguntado que diga si en tiempo antiguo que las dichas tierras y moyas
que quedaron para el Sol y para el Inga si las sembraban los indios particulares
para sí y que no tenían que ver en ellas.

Dijo que todo lo que en las dichas tierras del Sol y del Ynga se cogían era para el
Ynga y se los llevaba al Cuzco y a donde se le mandaba y que los dichos indios
no llevaban para sí ninguna cosa de ello.

Fuele preguntado que diga si los indios que antiguamente dice que había si
sembraban alguna cosa para ellos en las tierras y chácaras del Sol y del Ynga o
que chácaras sembraras para su sustentación y para pagar su tributo.

167
Dijo que en las dichas tierras que es preguntado ningún indio sembraba para si
[ilegible] cosa sino para el Ynga como dicho tiene y que los indios sembraban en
sus chácaras propias que tienen y tenían en este valle y que de ellas se
sustentaban y pagaban lo que el Ynga les mandaba.

/f.34/ Fuele preguntado que diga que pues en tiempos pasados había tanta
cantidad de indios y ahora hay tan pocos, si tienen hartas tierras para los indios
que son en que labran y hacen sus sementeras sin entremeterse en las del Sol ni
del Ynga.

Dijo que como hay pocos indios ahora en el valle y muchas tierras, andan
buscando en el valle las mejores que les parece y dejan de labrar las que de antes
labraban y para los indios que ahora hay, hay hartas tierras para sustentarse y
pagar sus tributos sin llegar a las del Sol ni del Ynga.

Fuele preguntado que quien les mandó sembrar a los indios de este valle las
dichas tierras del Sol y del Ynga y las demás que en tiempo antiguo no eran
suyas, como las siembran.

Dijo que las tierras de los andenes que están junto al tambo las siembran para dar
el tributo a su amo y que las tierras de Hurcosbanba no sabe quién ni como las
siembran, ni para quien es lo que en ellas se coge.

Y después de lo susodicho en trece días del mes de agosto de mil y quinientos y


cincuenta y un años, el dicho señor Mariscal y acompañados, para más
información y averiguación de lo susodicho /f.34v/ hicieron parecer ante sí a don
Francisco Chilche, cacique principal de este dicho valle al cual se le mostró y dio a
entender la figura y pintura que de todo el dicho valle está hecha y lo que los
dichos indios Yngas, orejones de suso han declarado y se le preguntó si demás de
estas hay otras algunas tierras que sean del Sol o del Inga o de otros señores, el
cual habiéndolo todo visto por lengua del dicho Pedro Delgado, dijo que la dicha
pintura y figura según que está pintada, esta buena y cierta en todo ello, salvo que
a donde los dichos Ingas orejones tenían pintado en Chuquibanba las tierras que
decían eran del Sol estaban un poco más debajo de la otra parte del arroyo en las
tierras que dicen Coto y no a donde lo tenían pintado y que lo que se dice
Chuquibanba era de yanaconas del Inga y que todo lo demás que los dichos
indios orejones tienen declarado y dicho de suso es verdad y las tierras que tienen
señaladas por del Sol y del Inga y de otras señoras es así como los dichos
orejones lo tienen declarado y pintado y figurado.

Fuele preguntado que diga que tantos indios solía haber en este valle de Yucay y
así /f.35/ naturales como mitimaes y otros cualesquier en tiempo, en tiempos (sic)
antiguo antes que los españoles viniesen a esta tierra.

Dijo que solían haber según le han dicho en tiempo antiguo tres mil indios.

168
Fuele preguntado qué tantos indios hay al presente en este dicho valle que sean
sus sujetos.

Dijo que hasta ochocientos indios poco más o menos.

Fue preguntado si sabe que en tiempo antiguo los indios que había en este valle
sembraban las dichas tierras del Sol y del Inga y de otras señoras para lo cual /el/
Ynga les mandaba y que ellos no se aprovechaban de ninguna cosa de ello.

Dijo que ha oído decir que en tiempo antiguo en las dichas tierras del Sol y del
Ynga no se nombran los indios particulares ninguna cosa para sí, salvo que las
labraban y beneficiaban y lo que de ellas se cogía daban al Ynga y si lo llevan al
Cuzco y hacían de ello lo que les mandaba y que después que como el Marques
don Francisco Picarro se las dio para que las sembrasen los indios para ellos y
para el dicho Marques.

Fuele preguntado qué pues las dichas tierras eran del Inga y del Sol y los indios
de este valle no solían aprovecharse de ninguna cosa de ellas en tiempo antiguo
más de labrarlas y lo que /f.35v/ de ellas se cogía hacer lo que el Ynga les
mandaba, que porqué causa y como se ha metido en ellas y tomado y usurpado
para sí.

Dijo que porque el dicho Marques se las dio y les mandó que las labrasen para el
dicho Marques y para este declarante y para sus indios y que por esto las
sembraban y se metió en ellas y las han sembrado por hacer lo que el dicho
Marques les mandaba, porque de otra manera ellos no se osaran entremeter en
las tierras del Ynga y del Sol.

Fue preguntado qué pues dice que las dichas tierras le dio el Marques, si le dio
título de ellas.

Dijo que no le dio título de las dichas tierras por escrito, más de mandárselo como
su amo que las labrasen como dicho tiene.

Preguntado que diga que dice que había tres mil indios en tiempo antiguo en este
repartimiento y sin labrar para sí las tierras del Sol y del Inga, tenían ciertas tierras
para su sustentación y dar sus tributos, que ahora que dice que tiene no más de
ochocientos indios que si tienen ciertas tierras para él y para ellos, sin labrar las
del Sol y del Inga.

Dijo que los indios que ahora hay en este valle no siembran en las chácaras del
Sol /f.36/ y del Inga y que las labran para que con lo que de ellas se coge se
pague el tributo que les está mandado dar a su amo y que los indios siembran en
sus chácaras que tienen en este valle.

169
Fuele preguntado que diga que en las tierras que llaman Hurcosbanba a donde
están tierras del Ynga y tierras del Sol y de otras mujeres del Ynga y otros
señores, qué tanto maíz se podría coger en todo ello y que tantos topos de tierra
había poco más o menos.

Dijo que son muchas tierras y que no sabe la cantidad de topos que eran y que se
podía coger en ellos, labrándose como se labra, quinientas fanegas de maíz,
porque en tiempos del Ynga las labraban mejor y se cogían más.

Fuele preguntado que diga que en la parte a donde está señalado la rinconada
que dicen de Huycho a donde es la mitad tierras del Sol y la otra mitad tierras del
Ynga, que diga y declare que tantos topos de tierra será todo aquello y que tanto
maíz se podía coger en todo ello.

Dijeron (sic) que en la dicha parte del Sol y en la parte de Mama Oclo (sic) que era
del Ynga hay cuatro topos de tierras y que se coge en ellas hasta cincuenta
pochas (sic) de maíz.

Fuele preguntado que diga que en las tierras de Guaylabanba (sic) que están junto
a la puente /f.36v/ hasta llegar en Moyobanba que tantos topos de tierras hay en
ellos.

Dijo que estas tierras que le es preguntado no eran del Ynga sino de tres
principales orejones que tenían allí sus mujeres mamaconas y que de lo que de
ellas se cogían se sustentaban y que ahora se están allí las mismas mujeres
mamaconas y que ellas y quien ellas quieren siembran estas tierras y que estas
mamaconas son de este repartimiento y que la cantidad de tierra que es no lo
sabe, lo cual todo se averiguo entre el dicho don Francisco y los dichos orejones

Fue preguntado que diga que un pedazo de tierra que se dice Acosca, qué tanto
topos de tierra eran y quien lo tiene y posee y lo siembra y coge la sementera.

Dijo que todo ello eran treinta topos de tierras de las cuales, los veinte y cuatro
topos tiene y posee este que declara y los otros seis los tienen los indios de Lari,
que están encomendados en Diego de Truxillo.

Fuele preguntado que diga, que los andenes y tierras que llaman Chuquibanba,
que están hacia la sierra que eran del Sol y del Ynga, qué tantos topos eran todos
ellos y que tanto maíz se coge en ellos y quien lo siembra y que se hace el maíz
que en ellos se cogen.

Dijo que serán hasta cien topos de tierras /f.37/ los dichos andenes y que podían
coger en ellos sembrándolos todos mil fanegas de maíz, que las hace sembrar
este declarante para su sustentación y pagar su tributo.

170
Fuele preguntado que diga que unas tierras que están junto a su cada que se
llaman Yucaybanba que eran de los (sic) mamaconas del Ynga, qué tantos topos
de tierra son y que tanto maíz se cogerá en ellos.

Dijo que será hasta treinta topos de tierras, que lo labran los herederos de Gualpa
Rocha (sic) y este declarante y otros (sic) mamaconas e indios y que no sabe el
maíz que en ello se puede coger.

Fuele preguntado que un pedazo de tierra que se llama Collabanba que está más
adelante en el dicho valle que tanta tierra será y quien lo siembra.

Dijo que era hasta ocho topos y que la mitad siembra este que declara y la otra
mitad siembran los indios de Mares (sic) de antiguamente.

Fuele preguntado que diga que una chácara que se dice Chuquipingollo que era
de Guaynacaba que está cerca de la quebrada de Chicón que tantos topos de
tierras es y quien lo siembra.

Dijo que serán cuatro topos y que la siembra este declarante que se la dio el Mar-
/f.37v/ques y que asimismo tiene junto a esta otra chácara de seis topos que se
dice Carupata que asimismo se la dio el Marques a este declarante.

Fue preguntado que las tierras y chácaras que eran del Sol a donde dicen
Chuquibanba que tantos topos de tierras eran y quien los tiene y posee.

Dijo que no lo sabe qué tantos topos son y un indio viejo que estaba presente dijo
que podía haber treinta topos y que en parte las siembran algunos indios del valle
porque no son buenas tierras.

Fuele preguntado que diga que un pedazo de tierras que están en el dicho valle a
donde dicen Pomaguanca que era de Guaynacaba y de Rabapilco, su mujer, que
tantos topos de tierras y quien lo tiene y posee.

Dijo que habrá cien topos de tierras y todo lleno de piedras y que algunos indios
siembran algunos pedacillos de ello y que todo no vale nada.

A todo lo cual que dicho es declaró el dicho don Francisco A las preguntas que de
suso le son hechas.

En la dicha ciudad del Cuzco a diez días del mes de setiembre de mil y quinientos
y cincuenta y un años, vista la dicha información, el dicho señor Mariscal, en
cumpli-/f.38/miento de lo proveído en la dicha real provisión, dijo que para que
mejor conste de las dichas tierras del Yucay y de los términos y partes de ellas a
los señores de la Real Audiencia y para que con más claridad puedan proveer en
el caso lo que fueren servidos, que mandaba y mandó que demás de la dicha
información que en el caso ha hecho y de su parecer que de suso será proveído,
171
que de los dichos indios Yngas orejones que tienen dicho sus dichos y pintado el
dicho valle del Yucay en tierra, ahora nuevamente se les dé lienzo y recado para
que de la misma forma y manera, pinten y señalen y figuren el dicho valle por las
particularidades y partes que le tienen pintado y figurado para que se lleve a la
dicha Real Audiencia, juntamente con todo lo demás que sobre ello se ha hecho y
visto por los dichos señores presidente y oidores puedan mejor determinar y
proveer lo que vieren que conviene y asimismo mando que en todas las partes de
la dicha pintura donde fuere necesario vaya escrito y dado razón de lo que es
cada cosa para que conforme a ello más claramente se averigüe lo que su alteza
pretende saber para ser informado y así lo mandó y lo firmó. Alonso de Albarado.

/f.38v/ Y luego incontinenti el dicho señor Mariscal dijo que por cuanto por la dicha
real provisión les mandó que demás de hacer la dicha información de su parecer,
firmado de su nombre de lo que le pareció en razón de las dichas tierras y valle del
Yucay y de lo proveído en la dicha provisión e información y que haciendo y
cumpliendo lo que este caso le es mandado es su voto y parecer debajo de mejor
juicio y deliberación lo siguiente.

Dijo que por cuanto él ha visto por vista de ojos el dicho valle y tierras y sitios que
están pintados en la dicha pintura y ha hecho la información que de suso se
contiene y entiende la necesidad que esta ciudad tiene o no tiene de las dichas
tierras del valle, proveídos en la dicha provisión y asimismo a entendido algunas
otras cosas de que esta ciudad tiene necesidad para el recrecimiento y aumento
de los hijos que nacen y se procrean en esta ciudad y ha entendido que para los
niños recién nacidos esta ciudad tiene y es de temple desabrido, incompetente
para que se críen y también ha entendido y visto que no se crían en esta ciudad
los hijos de los casados y corren muy gran peligro /f.39/ y riesgo de la vida hasta
pasar de edad de dos años y porque el riesgo es en tal manera que de diez hijos
de españoles y españolas que nacen, no se gozan ni logran los cuatro de ellos y
todo el pueblo es de común opinión que lo causa el mal temple de esta ciudad, a
cuya dicha causa a los vecinos muestran desabrimiento y descontento en tal
manera que a causa de no se les sus hijos no muestran tener voluntad ni intención
de permanecer y perpetuarse en esta ciudad, atento a lo cual es su parecer que
en todo el dicho valle de Yucay hay tierras buenas y abundantemente en que
pueden los naturales que ahora hay, y aunque fuesen en más cantidad, hacer sus
sementeras y labranzas en que sustentarse y en que coger mucho más maíz al
doble de que ellos dan y les está señalado por tributo y porque tiene entendido
que en tiempo antiguo eran en el dicho valle tres tantos de indios y más de ellos
que ahora son y tenían para todos tierras abundantemente como los ha visto y por
la información parece, atento lo cual que su pares-/f.39v/ cer es que su alteza
podía hacer merced a los vecinos y casados de esta ciudad que en ella residen
del pedazo de tierra, chácaras y heredamiento que está en la quebrada que va
pintada a donde dicen Hurcosbanba, desde lo alto hasta el río con otro pedazo de
tierra que está de la otra parte del río, frontero de esta tierra, hasta la puente que
está allí junto porque de dárseles esta tierra no se sigue ningún perjuicio a los
indios del dicho valle por cuanto parece era del Ynga y lo que antiguamente en
172
ello se cogía, lo traían a esta ciudad para los señores naturales y sin esto como ha
dicho hay abundante y copiosamente de tierras para los naturales que al presente
hay, aunque hubiesen muchos más y porque de esta tierra tampoco se
aprovechan los indios del común del dicho valle sino don Francisco, cacique
/ad/venedizo a él en las cuales tierra hace trabajar a los indios y se lleva él todos
los aprovechamientos.

Y el efecto, a cuya causa le parece que su alteza puede hacer esta merced es que
por el descontento que tienen /f.40/ los casados y vecinos del temple de esta
ciudad por no lográrseles sus hijos y por estar en desapacible asiento esta ciudad
y no tener a donde se ir a recrear si alguna enfermedad se les recrea a curarse,
por ser como es tierra caliente, podría en la dicha tierra bien tanteada y mirada
darse a cada un vecino y a otras personas casados en esta ciudad, tanta tierra
cuanta un buen solar, poco más o menos, en que pudiesen cada uno hacer un
pedazo de huerta y una casa pequeña para en que se puedan ir a holgar y tener
alguna recreación y criarse aves, porque en esta ciudad ninguna se cría y
teniendo este pedazo de casa y huerta, podrían los tales vecinos y casados irse
allá con sus mujeres a donde podrían estar criando a sus hijos hasta que les
pareciese que pudiesen venir a esta ciudad con ellos, de esta manera, tendrían
contento e intento a permanecer y perpetuarse en esta ciudad y tierra y habiendo
entendido el intento y voluntad de todos los demás vecinos de esta ciudad y visto
que es cosa conveniente al bien público de esta ciudad y reino y servicio de Dios,
nuestro señor, y de su majestad, dio este parecer, salvo mejor juicio y deliberación
y lo firmó. Alonso de Alvarado. Sancho de Orue, escribano.

/f.40v/ En la dicha ciudad del Cuzco de estos reinos y provincias del Perú, a diez y
seis días del mes de mayo, año del nacimiento de nuestro salvador Jesucristo, de
mil y quinientos y cincuenta y dos años el muy magnifico señor el Mariscal don
Alonso de Alvarado, corregidor y justicia mayor en esta dicha ciudad y sus
términos y jurisdicción por su majestad, por presencia de mí Benito de la Peña,
escribano de su majestad y público del número y cabildo de esta dicha ciudad, dijo
que en cumplimiento de un mandamiento del muy ilustre señor don Antonio de
Mendoza, Visorrey de estos reinos, él había ido al valle del Yucay y a la quebrada
de Urcosbanba y en la dicha quebrada se había informado de los indios
comarcanos y del dicho valle y de indios viejos de mucha edad que sabían y
entendían, cuyas eran aquellas tierras y como y de qué manera. Y sabido e
informado de como toda la dicha quebrada y llanos de ellas hasta el río grande
solía ser de los Yngas pasados y que otras muchas tierras del dicho valle que
adelante haría mención y que la dicha quebrada llamada Hurcosbanba y las
demás tierras del Ynga, las sembraban antiguamente los indios de las provincias
comarcanas al dicho valle y lo que de ellas se cogía lo traían a esta ciudad y
ponían en depósitos en Chinchero y en otras partes y ahora las sembraban
solamente los indios que había en el dicho valle de Yucay para solo don
Francisco, cacique de algunos de los dichos indios, fue informado y le dijeron que
se holgaban de que los cristianos ocupasen aquel pedazo de tierra porque ellos
tendrían menor trabajo y más lugar para entender /f.41/ en sus haciendas y que
173
les quedaban otras muchas tierras que eran del Ynga que se sembraban y habían
de sembrar para el dicho don Francisco y que así vista por su merced la dicha
quebrada y llanos y andenes de ella hasta el río grande que era sin perjuicio de los
naturales y que solo de ello se aprovechaba el dicho don Francisco para sus
granjerías, había tomado y repartido la mitad de ella entre los vecinos casados
como por su señoría le fue mandado, conforme a una traza que juntamente con
esto a su señoría ilustrísima enviaba por la cual vería lo que de la dicha quebrada
se había tomado y toma lo que de ella queda dando a cada vecino casado como le
había dado un solar de doscientos y noventa y ocho pies y las demás tierras que
parece en el dicho valle ser antiguamente de los señores Yngas son las
siguientes.

Encima de la puente, viniendo de Urcosbanba para el tambo de Yucay, pasado el


río, esta otra chácara que dicen que la sembraban para Guayna Caba, llamase
Challaguaxi, estas dicen que se han metido a labrarla algunos indios y que lo más
se deja de labrar por ser ruin tierra y preguntando a los /f.41v/ indios que allí se
hallaban que tanto maíz se cogía en ella, dicen que mucho.

Frontero de la puente, viniendo al dicho tambo está otra chácara de Guayna Caba,
que se llama Guallocollo, esta es la que don Francisco había vendido a Pedro
Alonso Carrasco, cerca de esta está otra chácara del Ynga que se llama Acosca
que es la que está cercada, dicen que él Marques, que haya gloria, dio la más
parte de ella a un indio, hijo de Gualpa Roca y que la siembra ahora. Los andenes
todo que están fronteros del tambo del Yucay eran de Guayna Caba y para ellos
sembraban, sin tener en el los indios cosa ninguna, dicen que cogían en ellos; mil
ciento o mil doscientas fanegas de maíz y que ahora después que los Yngas
dejaron se señorear se han metido indios principales del dicho valle en parte de
ellos y preguntado a los indios que porqué han dejado las tierras que ellos solían
sembrar dicen que porque eran mejores las del Ynga y que las suyas han dejado
perder y que en estos andenes hay algunas que no se siembran por falta de
indios. Dice que se cogen de estos andenes don /f.42/ Francisco, seiscientas y
setenta fanegas de maíz, lo cual dicen que es para la tasa y que con sus
yanaconas siembra el otro pedazo de tierra, dijo no sabe que tanto coge, todo esto
declaro Quispe Capia indio principal del dicho valle, hijo del cacique principal que
solía mandarlo, todo lo cual declaró juntamente con Suna y Quispe Gualpa,
orejones principales del Cuzco. Saliendo del tambo de Yucay y río abajo desde las
casas de don Francisco hasta una chácara que se llama Unoyacosca que era de
Mama Ocollo (sic), madre de Guaynacaba siémbrala ahora don Francisco y un
principal suyo que se llama Vilca, dicen que no tiene más de un topo de
sembradura. Debajo de esta, está otra que solían sembrar mamaconas de
Guaynacaba e indias suyas, siembra ahora, parte de ella don Francisco y parte
sus anaconas (sic) y parte Gualparoca e indios del valle, llamase está
Yucaybanba.

Debajo de esta, yendo a los tambos de Quispeguanca, están unos andenes


grandes que el uno se llama Cachobanba y el otro Collabanba que eran de
174
Guayna Caba, tienen ambos de sembraduras treinta y ocho topos. Los siembra
don Francisco y Pedro de Orue; don Francisco siembra los veinte y seis topos y
los doce Pedro de /f.42v/ Orue. Preguntado cómo los siembra Pedro Orue, dicen
que los sembraban los indios de Maras que eran del Ynga y que se han quedado
en costumbre de sembrarlos hasta ahora y esto declaro Acamaque, principal
orejón del valle y el que tiene cargo de sembrar y coger estas chácaras estando
presentes los dos principales del Cuzco: Suna y Quispe Gualpa.

Encima de los tambos de Quispeguanca, cerca de ellos está otra chácara que era
de Mama Ocollo, madre de Guaynacaba que tiene cuatro topos de sembradura y
se llama Oquipalpa, siémbrala don Francisco. Junto a esta, está otra que era de
mamaconas de diez topos de sembradura, dicen que las siembran sus hijos de
Vilca, un principal y don Francisco. Cerca de esta, está otra que se llama
Paropata que era de una mujer de Guayna Caba que se llamaba Coya Coxiriman,
dicen que tendrá diez y seis topos de sembradura y ahora la siembra don
Francisco.

Dicen que la quebrada de Quispeguanca que está un/a/ arboleda Chicón Guayco
que era de Guaynacaba solía tener venados y otras cosas de montería, dicen que
hay mucha madera en ello /f.43/ y que ahora la tiene don Francisco por suyo y
tiene en ellos anaconas suyos que lo guardan.

Cerca de Pomaguanca el valle abajo está otra chácara que se llama Pomaguanca
que era del Sol y la sembraba Raba Ocollo, madre de Guascar Ynga, dicen que
era cien topos de sembradura y que lo siembran ahora indios del valle y don
Francisco, siembra ahí otro pedazo.

Y debajo de Pomaguanca esta una arboleda que se llama Coto que era del Sol
que tiene ahora los hijos de Ocosicha entre esta arboleda hay chácaras que se
siembran, son de sus hijos de Ocosicha.

Hay cerca de Pomaguanca otro monte que se llama Cozca que era de Topa Ynga
Yupangue y junto a esta arboleda está una chácara de cuatro topos que era del
Ynga Roca, tío de Guayna Caba y que lo siembran indios del valle por suyo. De
esta arboleda que se dice Cozca está una chácara que se llama Moyobanba que
era de Hachache, un sobrino de Topa Ynga Yupangue, dicen que tiene /f.43v/
ocho topos de sembradura y que la siembra doña Angelina, mujer de Juan de
Betanzos.

El río abajo yendo a Tambo esta otra arboleda con unos buhíos que hizo Mango
Ynga que se llama Patas Guayla solía ser de Guayna Caba.
Debajo de Quispe Guanca esta otra arboleda que se llama Charca Guila que era
de Guayna Caba.

175
Junto a la puente de Maras, ciertos buhíos que están allí y unos andenes que
están alrededor de ellos que se llama Pacachaca era de Guayna Caba los
siembra ahora de ají don Francisco y Gualpa Roca.

Debajo del tambo de Yucay a mano derecha como vamos el río abajo, pegado a la
sierra están unos buhíos del Ynga y una fuente y andenes de chácaras que se
llama Guacha son las chácaras pocas, las siembra un principal del Cuzco, eran de
Guaynacaba.

En unos andenes grandes que están sobre el tambo del Yucay, siembran los
indios que son de Truxillo, vecino del Cuzco, quince topos de tierra, dicen /f.44/
que como los sembraban para el Ynga, se han quedado con ellos.

Pegado al tambo del Yucay está un pedazo de tierra de dos topos que se llama
Pilcobanba que eran del Sol, siémbralos unas mamaconas suyas.

Cerca de Pilcobanba, está otro pedazo de tierra que se llama Xauxero que son
dos topos que eran de Guaynacaba, siémbralos ahora unos hijos de un yanacona
que se llama Yanque que era del Marques.

Entre el tambo de Yucay y una puente que está arriba están unos estanques de
agua que se llaman Paucarchaca que hay ocho topos de chácara y las
sembraban para las palomas lo siembran ahora los indios del valle.

Encima del tambo del Yucay hay una chácara que se llama Taquilla Banba que
era de Guaynacaba que tendría ocho topos, siémbrala los indios del valle. Alonso
de Alvarado.

Por mandado del señor corregidor. Benito /f.44v/ de la Peña, escribano público. Va
entre renglones /o/ diz, Dicha, pidote del y/o diz particulares en que labran para su
sustentación y averiguación //va testado o diz pober valle riva parte escoger //va
enmendado// o diz se meter en la dicha // no le enpesca todo lo suso dicho. Vale y
pase por testado.

Yo el dicho Benito de la Peña, escribano de su majestad y público del número de


esta dicha ciudad del Cuzco, presente fui a lo que de mí se hace mención y lo
demás que con ello se acumuló, doy fe que va cierto y corregido con el original y
quedan en mi poder lo original, lo cual todo va todos en treinta y dos hojas con
estas que va mi signo lo cual di y escribo de pedimento del dicho Bartolomé
Arvallo y de mandamiento del dicho señor corregidor y por ende hice aquí este mi
signo a tal en testimonio de verdad. Benito de la Peña, escribano público.
Derechos quince pesos.

176
PROYECTO DE TESIS: “TENENCIA DE TIERRAS Y PROSPECCIÓN HISTORICA DEL VALLE DE YUCAY: 1550-1600”
FICHA REGISTRO RECORD DE TENENCIA DE PROPIEDAD INMUEBLE EN EL VALLE DE YUCAY
Vendedor Comprador Lugar Linderos Cantidad Precio Fecha Fuente
Linda con solares de vos los dichos Diego Hernández y doña Beatriz y Gregorio de Bitorero.
Don García Diego Sondor Quebrada por la otra parte con chácara de doña Inés, hija de Mango Ynga y por la Protocolo 01.
1 topo 40 pesos 23-12-1560
Tomac Hernández de Urcos otra parte con el camino real que va a Calca. 1560-1579. f.1603.

Diez topos de tierras y chácara que tengo y poseo en el valle de Yucay,


donde dicen Pilcobamba que son en el pedazo que yo hube y compre
de Pedro Guerrero, que alindan saliendo del pueblo de Yucay para Gregorio de Bitorero.
Joan Colegio y
Pilcobamba- Guayllabamba por una parte con el camino real y por otra parte con Protocolo 01.
Fernández compañía de 10 topos 120 pesos 05-02-1579
Yucay tierras de mí el dicho Joan Fernández Coronel y de doña María Coya, mi 1560-1579. f. 302.
Coronel Jesús
mujer, y con tierras de don Juan Ayrambo y por la parte de arriba con
tierras de indios cañaris.
Tres topos de tierras y chacaras de maíz, que yo el dicho Juan de
Quiñónez tengo en el valle de Yucay, que se llama Minabamba e Antonio Sánchez
Juan Quiñones, Damián de la Minabamba y Angasmori, que compre de Diego de Trujillo vecino de esta ciudad, que Protocolo 20. 1568.
alinda por los dos lados con chacaras y tierras del dicho Diego de 3 topos 100 pesos 28-10-1568
indio Bandera Angasmori f. 135.
Trujillo y por la parte de arriba con chacaras de los indios del dicho Valle
de Yucay.

Tres topos de tierra y chacara con 4 bohios y arboledas y andenes en


el valle de Yucay donde dicen Patacaua que alinda por una parte con Antonio Sánchez
Francisco una acequia que es parte de la dicha tierra y de la chacara de Don Protocolo 20. 1568.
Pedro Ochoa Patacaua 3 topos 150 pesos 24-09-1568
Quantias Francisco Sayre y por otra parte con otra acequia que divide con ella f. 1445v.
chacaras de Perico Guayacondo y por la parte de arriba con la barranca
de Cachobamba y por la parte de abajo con la cienaga.
Francisco Sayre Topa Ynga natural de esta ciudad, dijo que Jerónimo
Antonio Sánchez
Genovés le a prestado 100 pesos en plata corriente , para pagar sus
Francisco Sayre Gerónimo Obligación por Protocolo 21. 1569.
Guaynatambo deudas y pleitos y que le quiere hacer escritura de obligación por ellos y No indica 30-03-1569
Topa Genovés 100 pesos f. 372v.
empeñarle unas tierras y chácaras que tengo en el valle de Yucay que
se llaman Guaynatambo.
Una estancia e tierra que tengo e poseo en el valle de Yucay llamada
Pomaguanca que herede de Doña Angelina Yupanqui mi madre que
tiene cuatro bohios llamados Pomaguanca y diez topos de tierras los
dos topos salteados y otros dos llamados Guancaparara y Pucamarca y
otro topo en Ayamaylla y dos topos de tierras en Chuquibamba y otros
Pomaguanca, dos topos en Chicho, otro topo en Quiquijana en que se entro Don
Guancaparara Alonso indio la qual dicha estancia y tierras alindan los dos topos de
Pucamarca Chicho con chácaras de indios Guancavilcas que llaman Panao y con Antonio Sánchez
Doña María de Alonso de Ayamaylla una acequia grande y por la parte de hacia el tambo de Yucay y con Estancia y 10 Protocolo 21. 1569.
350 pesos 29 -06-1569
Betanzos Tapia Chuquibamba chacara de Cupipullo indio y por otra parte con chacara de Limache y topos f. 881v.
Chicho los otros dos topos en Guancaparara alinda con chácara de Yupari y
Quiquijana con chácaras de Condor y por la parte de arriba con montes y acequias
y el topo de Aymaylla alinda por todas partes con chacaras de Carua

177
Ocllo yndia y el topo de Quiquijana alinda con chacara de Asay, indio y
el topo de Pucamarca alinda con Chacara del dicho Yupari y Condor
indios y los otros dos topos de tierra de Chuquibamba alindan con
Chacaras de Topa Ynga y de Guayna Capa.
Dos solares que tengo çercado en el Valle de Yucay en la plaza de el y
alinda por una parte con la plaza y por un lado una calle que pasa por
entre el dicho solar y el tambo y por la espaldas con casas de Cristóbal Antonio Sánchez
Nuño de Rui Lope de 2 solares y Protocolo 21. 1569. f.
Plaza de Yucay de Holgado, que compre de Juan Diaz de Betanzos. Y asimismo vendo 500 pesos 06-11-1569
Mendoza Torres otro pedazo de tierra que tengo entre las casas de Don Garpar Quispi tierras 1268.
Capi, que compre del dicho Juan Diaz de Betanzos los cual todo voz
vendo con los bohios y paredones que en ello hay y con lo a ello anexo.
Un solar con un pedazo de tierra que tiene a las espaldas que tengo y
poseo en el valle de Yucay que fue de Juan Díez de Betanzos y lo hube
Solar y Antonio Sánchez.
Rui López de Joan de y compre de Nuño de Mendoza, vecino de esta ciudad que alinda por
Yucay pedazo de 400 pesos 16-06-1573 Protocolo 25. 1573-
Torres Robledo dos partes con calles reales y por otra parte con solar de Cristóbal
tierra 1574. f. 480v.
Holgado y por detrás con el pueblo de Santiago de Oropesa del dicho
valle.
Un topo de tierra y chacara de maiz, que tengo y poseo en el valle de
Yucay, en medio de los cuatro topos donde dicen Acosca, que por Antonio Sánchez.
Don Pedro Don Antonio
Acosca ambas partes alinda con tierras de mi el dicho Don Pedro y por otra Un topo 43 pesos 05-02-1574 Protocolo 25. 1573-
Guaritito Ynga Puinchua
parte con una acequia y por otra parte con tierras de los mitimaes del 1574. f. 23v.
dicho valle.
Un solar que tengo y poseo en el valle de Yucay con sus corrales y
huerta y piedra y todo lo que está dentro de lo que está cercado que Antonio Sánchez.
Rui López de Juan Pérez
Yucay alinda por una parte con la plaza del dicho valle y por las espaldas y por Un solar 350 pesos 14-07-1574 Protocolo 25. 1573-
Torres Montañes
todas cuatro partes con calle reales. 1574. f. 641.

Otorgamos que hacemos trueque y cambio en esta manera, que yo la


dha Isabel Vispa doy a vos la dha Catalina Tocto un topo de tierra y
chacara de maíz que tengo y poseo en el dicho valle donde dicen
Sondor que alinda con huerta de la dha Catalina Mexia y con chacara
de un indio llamado Hanacolla y de don Antonio Marigualpa, indio y con Antonio Sánchez.
Isabel Vispa Catalina Tocto Sondor y Acosca chacaras de la mujer de don García Quispicapi y yo la dha Catalina Un topo Trueque 05-08-1574 Protocolo 25. 1573-
Tocto doy a vos la dha Isabel Vispa otro topo de tierra y chacara de 1574. f. 743.
maíz con una huertezuela y un buhio en el dho valle donde dicen
Acosca que alinda con la acequia grande y con chacara de doña Beatriz
Cocol y con chacara de cañares mitimaes.
Un topo de tierra y chacara de maíz que tenemos y poseemos en el
valle de Yucay y es un anden grande que se llama Cachobamba que yo
la dicha doña Magadalena Chimbo Ocllo, hube y herede de Guayna
Hernando Capa, mi abuelo y lo tengo de merced hecha por el licenciado Lope
Guartanaula y García de Castro, gobernador que fue de estos reinos con quatro topos Antonio Sánchez.
Capitán Martín Cachobamba
doña de tierras que me quedan en el dicho anden que alinda por una parte un topo 40 pesos 27-10-1574 Protocolo 25. 1573-
de Meneses (andenes)
Magdalena con chacara de vos el dho capitán Martín de Meneses y por otra parte 1574. f. 1059v.
Chimbo con los otros cuatro topos que nos quedan y por la parte de arriba hacia
Quispiguanca con un pedregal donde hace remate el dho andén y por la
parte de abajo con la pared que hace el dicho andén.
Un solar que tengo y poseo en el valle de Yucay y plaza de el que hube
y compre de Sebastián Cazalla difunto, que alinda por una parte con la Antonio Sánchez.
El Factor Juan Doña Teresa
Plaza de Yucay iglesia vieja del dicho valle y por otra parte con una calle real y por las Un solar 250 pesos 01-05-1576

178
Protocolo 26. 1576-
de Salas de Orgoñes espaldas con otra calle que al presente tiene hecho una huerta Don 1578. f. 760.
Francisco Acuña y por delante con la plaza mayor.
Una estancia y huerta de frutales y tierras llamada Paca que tenemos y
poseemos en el valle de Yucay en que hay las cosas siguientes… en
los andenes arrimados a la huerta sobre el río ay dos topos de tierra y
chacara un andén grande que llama Cachopata que tiene cuatro topos
de tierra y otros tres topos de tierra por bajo del dicho anden de
Estancias de Antonio Sánchez.
Capitan Martín Cristóbal de Cachopampa, un pedazo de tierra en un isla que esta entre el camino estancia y
Paca y 3640 pesos 17-10-1576 Protocolo 26. 1576-
de Meneses Lugones real de Yucay y el río grande que tendrá diez topos de tierra poco más huerta
Guaynacolca 1578. f. 1168.
o menos e hay de la otra banda del río un pedazo de tierra donde
siembre tres hanegas de cebada… una estancia llamada Guaynacolca
con los depósitos y siete topos de tierra de maíz y una huerta con
treinta arboledas y un galpón de de ochenta pies de largo con su puerta
y llave.
Un pedazo de tierras y solar en el dicho valle de Yucay a donde dicen
Yucay que tiene un silco poco más o menos que linda por una parte con Joan de Quiros.
Constanza Andrés de
Pueblo de Yucay tierras y solares de Don Pedro Sucno y por otra parte con tierras y Un silco 30 pesos 23-05-1577 Protocolo 14. 1576-
Chimbo Orma Salcedo
guertas de don Diego y con el camino que va a Guayllabamba. 1577. s.f.

Un pedazo de tierra y chácara que tengo que tengo en el valle de Yucay


donde dicen Coto que se dice Yaguaguasi, Lucre y alinda con tierras de Antonio Sánchez.
Diego Yalli Antonio y Coto, Yagua
Gerónimo Ginoves y de Francisco Guaman Pacho en que hay un topo Un topo 40 pesos 25-04-1578 Protocolo 26. 1576-
Pachiy Lucas Preve Guaci y Lucre
de tierra poco más o menos. 1578. f. 518.

Un solar y pedazo de tierra… en el valle de Yucay que alinda de la una


parte con huerta que la dicha Doña Teresa compro de Hernándo Trujillo, Joan de Quiros
Hernando de Doña Teresa
Yucay hijo de Francisco de Trujillo, vecino que fue de la ciudad del Cuzco y por No indica 34 pesos 30-04-1579 Protocolo 15. 1579.
Jaen de Orgoñes
un lado con una alberca y asimismo linda con las casas que solía ser f. 240.
de Tenuezuela, indio cañar.
Solar y tierras en el valle de Yucay que compre de Bernardo Terrazas Joan de Quiros
Pascual de
Marcos Serrano Yucay revisar. Solar y tierras 700 pesos 11-09-1579 Protocolo 15. 1579.
Benavides
f. 347v.
Linda saliendo del pueblo de Yucay para Guayllabamba por una parte
Gregorio de Bitorero.
Joan con el camino real y por otra parte con tierras de mí el dicho Juan
Compañía de Pilcobamba- Protocolo 01.
Fernández Fernández Coronel y de doña María Coya, mi mujer y con tierras de don 10 topos 120 pesos 05-02-1579
Jesús Yucay 1560-1579. f.302.
Coronel Juan Ayrambo y por la parte de arriba con tierras de indios Cañares.

Un topo y medio de tierras y chácara de sembrar maiz en el valle de


Antonio Sánchez.
Don Francisco Baltazar Yucay donde dicen Urcos que alinda con la viña de Marcos Rivadeneira
Urcos topo y 1/2 95 pesos 07-11-1581 Protocolo 28. 1581-
de Loayza Álvarez y con el río grande de Yucay y con tierras de los herederos de don
1582. f. 1054.
García Toma, indio.
Dijo que por su alma y conciencia tiene tratado y comunicado de hacer
limosna a una doncella pobre pobre que el padre Diego de Torres Rector
de la Compañía de Jesus de esta dicha ciudad nombrare y señalare de
Casas y huertas 500 pesos de plata ensayada de principal, las quales han de estar Antonio Sánchez.
Beatriz de Monasterio de Casas y Censo de 500
de Yucay y impuestas sobre las casas y huertas del valle de Yucay y 07-10-1582 Protocolo 28. 1581-
Saldaña Santa Clara huerta pesos
Guayllabamba Guayllabamba, que alinda con casa y huerta que fue del Gobernador 1582. f. 628.
Martin Hurtado de Arvieto y por otra parte con la hermita y sobre unas
tierras de pan llevar que tengo junto a la puente de Guayllabamba.

179
Don Francisco Un topo de tierras que poseo en el valle de Urcos de esta ciudad, que
tiene por linderos con tierras y chacaras por ambas partes de los yndios Antonio Sánchez.
Tito Juan de
Valle de Urcos de Yucay y a la cabecera con chacaras del dicho comprador. Un topo 50 pesos 12-12-1582 Protocolo 29. 1582-
Uscamayta Lizarazo
1583. f. 474v.
Ynga
Otorgo y conozco que hago gracia y donación buena y pura y perfecta
irrevocable que el derecho llama entre vivos a la dicha Doña Paula de
diez topos de tierra; los cinco topos en la quebrada de Chicon a donde
dicen Illacparara y Mutuybamba que lindan con tierras de la ciudad del
Chicón-Illac
Cuzco y con la arboleda que alli tiene y de la otra parte con las mismas Joan de Quiros.
Don Hernando Doña Paula Parara,
tierras de la dicha ciudad del Cuzco hacia el rio y por otra parte con 10 topos donación 16-09-1583 Protocolo 16. 1583.
Barlat Naula Cusi Guarcay Mutuybamba,
corralones que llaman Yurac Sondor y los otro cinco topos son en el f. 584.
Cachollabamba
dicho valle de Yucay que llaman Cachollabamba que esta junto a Paca
que linda con tierras que fueron de Martín de Meneses y por las
cabezadas con tierras de la comunidad de los indios del dicho valle de
Yucay y con el camino real que va a Paca.
Vende a censo y tributo anual a favor de la Compañía de Jesús por
doscientos catorce peso y dos tomines, impuestos sobre las casas
principales y huerta que tengo en el valle de Yucay que alinda por una
Casas principales Censo de 214 Antonio Sánchez.
Don Tristán de Compañía de parte con la calle real que va al pueblo de Urubamba y por otra parte con
y huerta de No precisa pesos 2 31-07-1583 Protocolo 30. 1583-
Silva Jesús calle que va a Quisguarpata y por delante la plaza de Yucay y por las
Yucay tomines 1584. f. 752.
espaldas con solares de Andres Sánchez y sobre la mitad de la
estancia, tierras y casas que tengo y poseo en San Sebastián valle de
esta ciudad.
"Hago gracia y donación, cesión y traspaso... a la dicha Ínes Sisa, mi
hija de dos topos de tierras y chácaras de sembrar maiz que tiene en el
valle de Guayllabamba, el topo y medio llamado Guaylla, que alinda con
tierras de don Diego Poma y con indios del dicho pueblo y el medio
Solar y dos Antonio Sánchez.
Doña Leonor Guayllabamba y topo junto al dicho pueblo de Guayllabamba que alinda con tierras de
Ines Sisa topos de donación 07-04-1584 Protocolo 30. 1583-
Tunso Guaylla indios del dicho pueblo. Y asimismo le hace donación de un solar que
tierras 1584. f. 458.
tiene en el dicho pueblo como esta, cercado con los buhios, que es en
la plaza publica y alinda con casa de don Felipe cacique de Guayocare
y por otra parte con calle real y por otra parte con casa de Juan Martin
indio.
Un topo de tierras y chacaras, poco más o menos de sembrar que
tengo y poseó en el dicho valle que hube de la señora doña Teresa
Orgoñez difunta, que se la dio por la paga de los mil peso de sus Antonio Sánchez.
Andrés don Tristán de
valle de Yucay servicios y alinda por la una parte con la huerta y casas del dicho don un topo 100 pesos 08-07-1584 Protocolo 30. 1583-
Sánchez Silva
Tristan de Silva y por otra parte con el camino real que va la plaza de 1584. f. 905.
Yucay y por otra parte con tierras de Juan Ayrambo.
“Un solar en el valle de Yucay y huerta que a por linderos la iglesia vieja Antonio Sánchez.
Don Tristán de Rodrigo de solar, casa y
Pueblo de Yucay del dicho pueblo y plaza principal, que tiene la casa empezados a 1700 pesos 24-08-1584 Protocolo 30. 1583-
Silva Esquivel hacerlos… y por precio de mil setecientos pesos. huerta
1584. f. 1031.
Un pedazo de tierra y chácara y con sus arboledas de lambran y
quisguar y unos corrales y paredones que tengo y poseo en el valle de
Cosca, Yucay donde dicen Cosca Quisguarpata Mollecancha Coquepata,
Quisguarpata, Paropata, que herede de mis padres y pasados y alinda por una parte Antonio Sánchez.
Don Pedro Joan Pérez de No
Mollecancha, con tierras y chácaras de los indios de Cachec y por otra parte con 88 pesos 03-10-1584 Protocolo 30. 1583-
Antino Ynga Montañes determinado
Coquepata, tierras de Doña Ana Guaco mi tia y por otra parte con la acequia y 1584. f. 1154.

180
Paropata tierras de los indios de Cachec y por la parte de arriba con los cerros y
acequia y corral y arboleda de quisguar que entra en esta venta.
"Vendemos y damos en venta real … un pedazo de tierra que tenemos
Francisco y poseemos en el valle de Yucay donde dicen Quisuarpata que será un Antonio Sánchez.
Paucar Gonzalo silco que hubimos y compramos de Juana Tocto Ocllo, india y alinda Protocolo 30. 1583-
Quisuarpata por una parte con solar de Diego Plaza y doña Constanza y por otra Un silco 30 pesos 30-05-1584
Chipana y Barbosa 1584. f. 669
Leonor Vispa parte con solar de doña María, hija de Anta Palla, y con un andén de (expediente suelto).
Damián de la Vandera y con tierras de indios.
Otorgo e conozco que vendo y doy por juro de heredad… a Juan de
Salas, procurador del numero de esta ciudad… un pedazo de chácara Luis de Quesada.
Doña Isabel
Juan de Salas Yucaybamba de sembrar maíz de un topo o poco más que tengo en el valle de Yucay Un topo 60 pesos 3-09-1584 Protocolo 12. 1584-
Ynautuco
a donde dicen Yucaybamba que tiene por linderos tierras de los indios 1585. f. 71.
Guancavilcas y de Fabián Cuchillo y el ejido del valle.
Pedazo de solar que tengo en el valle de Yucay y con el nueve topos
Luis de Quesada.
Don Tristán de Francisco de tierras de sembrar maiz, que alinda por una parte con la iglesia vieja Solar y 9
Yucay 2500 pesos 08-08-1584 Protocolo 12. 1584-
Silva López de Yucay y por otra parte con la plaza principal y por otra parte con topos
1585. f. 505.
tierras de Juan Celiorigo y con el rio del dicho valle.
Un topo y medio de tierras y una casas del tiempo del ynga que
llaman Alpasondor, que huvimos por herencia de Don Francisco Topa
Yupangui nuestro padre que por linderos el dicho topo de tierras que se
llama Urcospampa por las cabezadas con tierras de Gomez de Tordoya
Don Francisco y de los indios de Guayllabamba y el medio topo que son dos andenes
Luis de Quesada.
Tito Juan de Allpasondor y que se llama Urcos de sembrar maiz con sus arboledas de alisos e
1 1/2 topo 90 pesos 08-02-1586 Protocolo 13. 1586.
Uscamayta Lizarazo Urcos (andenes) quisguar queda por lindero por una parte estancia de Doña de Doña
f.97v.
Ynga Constanza Tantaviche y con tierras y arboledas de Gerónimo Ynga,
vecino de esta ciudad en medio del dicho medio topo la huerta de los
herederos de Juan de Cimca y por la frente linda con tierras de los
indios de Guayllabamba y por la parte de arriba el cerro grande de
Urcos con sus aguas de riego.
Tres topos de tierras que yo poseo en el valle de Yucay a donde dicen
Salitral que alinda por la parte de arriba con el lago y tierras de mi el
Luis de Quesada.
Juan Salitral-Ancas dicho vendedor y por otra parte linda ocn tierras y chácaras de los
Joan Flores 3 topos 120 pesos 09-02-1586 Protocolo 13. 1586.
Fernández Cochabamba indios del pueblo de Yucay y por la otra parte linda con la misma
f. 142.
llanada del Salitral que los dichos tres topos de tierras se llaman
Ancascochabamba.
Pedazo de tierras que tenemos en la otra parte del puente y rio de
Guayllabamba hasta tres silcos de tierras que linda por una parte con la
plaza de la dicha puente y por la otra parte con tierras de Beatriz de Luis de Quesada.
Don Lucas Francisco
Guayllabamba Saldaña y por la otra parte con un callejon que va a la casa que era de 3/4 de topo 34 pesos 04-06-1586 Protocolo 13. 1586.
Landavisnay Xuarez
Hernando Machicao y por otra parte con tierras de los indios cañaris de f. 390.
Yucay y por otra parte con paredones y casas del indio que guarda el
puente del dicho rio.
pedazo de tierras que yo hube y herede de la dicha mi madre que esta
en el valle de Yucay donde dicen en Michicabamba que sera hasta

181
medio topo de tierra que linda por una parte con la acequia grande que Luis de Quesada.
Juan Diego de
Michicabamba pasa por delante de la casa de Diego de Mercado y por otra parte linda 1 topo 40 pesos 06-10-1586 Protocolo 13. 1586.
Velasquez Mercado
con tierras de Hernando Guarta Naula y por otra parte con tierras de f. 681.
Doña Ines Guanca Tocto mi tia y por otra parte con tierras de Doña
Catalina Cica Ocllo india difunta.
Otorgo y conozco que vendo… a Sancho de Horozco… un topo de tierra
de sembrar maíz que yo he y tengo en el valle de Yucay a donde dicen Alonso de Guerrero.
Francisco
Sancho de Orozc Quispe Guanca Quispe Guanca que linda por la parte de arriba con tierras y huerta del 1 topo 40 pesos 14-01-1588 Protocolo 06. 1588.
Ponca
dicho Sancho de Horozco y por parte de abajo con tierras de Felipe f.8.
Macha y por un lado con tierras de Cusi Minca, indio.
p p q y g yp
el valle de Yucay a donde dicen Sumac Puncu que lindan por la parte de
arriba con una acequia que por allí pasa y por la parte de abajo con el Alonso de Guerrero.
Don Hernando Padre Alonso
Sumac Punco rio que va a Yucay y por las dos partes con tierras de Ojeda y un 1 topo 100 pesos 06-02-1588 Protocolo 06. 1588.
Guantanaola Peña
guayco con toda la arboleda que esta plantado en el dicho topo de f. 57.
tierra.
Pedazo de tierra de hasta medio topo que yo tengo y poseo en el valle
de Hurcos a do dicen Hurcos Pampa que linda por una parte con tierras
Don Fernando Alonso de Guerrero.
Catalina de del gobernador Martín Hurtado de Arbieto y por otra parte con tierras de
Ayarmanco Hurcosbamba 1/2 topo 50 pesos 14-08-1588 Protocolo 06. 1588.
Figueroa mí el dho vendedor y por otra parte el río grande de Yucay y por otra
Ynga f. 641v.
parte linda con la acequia de agua y tierras de los indios del capitán
Loyola.
Que lindan por una parte con tierras de los indios de tasa y por otra
Alonso de Guerrero.
Don Francisco Gabriel de Sacsipata y parte el camino real que va a la quebrada de Chicón y por otro lado con
2 topos 160 pesos 24-10-1588 Protocolo 06. 1588.
Guartanaula Ureña Sumipata tierras de doña Constanza Tanta Viche y por otra parte con tierras de
f. 818.
Alonso, indio menor.

Un pedazo de solar con dos buhios y medio topo de tierras, que está en
una cuadra en el valle y pueblo de Yucay, que compre de Don Luis
Guaman Tito, que alinda por una parte con tierras de doña Isabel
Guzman que antiguamente el dicho solar de almagro negro y por otra Gerónimo Sánchez
Hernando Francisco Pueblo de Yucay parte con el paredon y buhio de los herederos de Poma, indio y por otra Solar, buhios de Quesada.
460 pesos 28-01-1589
Carrasco Hernández y Yucaybamba parte con tierras de don Luis y por la otra parte linda con el camino real y 1 topo y 1/2 Protocolo 38. 1589.
que por allí pasa y va corriendo hasta la frente y tierras y buhios de la f. 37.
dicha Isabel de Guzman y asi mismo le vendo un topo de tierras en el
valle de Yucay a donde dicen Yucaybamba que yo hube y compre de
Doña Leonor hija de Don Francisco Chilche, que linda con tierras de las
hijas de Don Francisco Chilche.
7 topos de tierras que yo tengo a donde dicen Guayocari que lindan por Gerónimo Sánchez
El capitán una parte el camino real que ba hacia Calca y por otra parte con tierras de Quesada.
Diego del Río Guayocari 7 topos 490 pesos 07-04-1589
Martín Dolmos de Don Felipe Cota Pongo Piña y por la parte de abajo con el rio Protocolo 38. 1589.
grande de Yucay. f. 256

Gerónimo Sánchez
Don Juan Un topo de tierras que posee donde dicen Chichobamba, que linda con
Cristóbal Cusi de Quesada.
Pascac Topa Chichobamba tierras de don Luis Guaman Tito y por otro con tierras de don Pedro 1 topo 100 pesos 02-08-1589
Condor Protocolo 38. 1589.
Ynga Guari Tito y por otra parte linda con tierras de don García Rima Topa y
f. 583v
por otra parte con tierras de Don Diego Sico indio oparuna.

Gerónimo Sánchez
Alonso 6 topos de tierras que tiene en el valle de Yucay donde dicen Coto con

182
Juan Antonio de Quesada.
Hernández de Coto sus arboledas de Quisguares y paredones que en ello está que linda 6 topos 300 pesos 24-10-1589
Genoves Protocolo 38. 1589.
Ostacio con tierra del vendedor y por otra parte con tierras de los yndios de
f. 839
Urubamba y el camino real que va de Yucay a Tambo y Amaybamba.
Un pedazo de tierra de trigo y maíz que serán tres o cuatro topos de
don Miguel tierra poco más o menos que yo tengo y poseo en el asiento de Urcos Pedro de la Carrera
Gabriel Ruiz Jerónimo de Urcos del valle de Yucay que tiene por linderos por la parte de arriba un cerro 1/2 topo No precisa 14-10-1595 Ron. Protocolo 05.
Cabrera llamado Ticatica y por la parte de abajo tierras de la comunidad de los 1586-1596. f. 652.
yndios de Guaillabamba y por un lado tierras de doña Constanza de
Costilla y por el otro lado tierras de Alonso de Campos.

El un topo de tierra junto al pueblo de Guayllabamba, que a por linderos


de la una parte con tierras de Juan de Valdivieso y por la otra tierras de
Gregorio de Cisneros y por la otra parte alinda con tierras de Ana de Pedro de la Carrera
Alonso Scoto Guayllabamba y
Ana de Encinas Navarrete y por la otra parte con el camino que va al valle de Urcos y el 2 topos 160 pesos 15-11-1595 Ron. Protocolo 05.
de Escobar Chichobamba
otro topo de tierra a donde dicen Chichobamba que tiene por linderos 1586-1596. f. 743.
por la una parte con tierras de María de Lerma y por los otros lados
alindan con tierras e chacaras de los yndios del dho valle de Yucay.

Un topo de tierras de sembrar maiz que tenemos y poseemos en Urcos


Doña Ana Pilco Antonio de Salas.
en el valle de Yucay llamada Casana, que tiene por linderos por la una
Sisa Palla y Alonso Pucho Casana-Urcos 1 topo 120 30-07-1596 Protocolo 18. 1596-
parte el camino real que va al pueblo de Yucay y por otra parte con
Diego Guamán 1597. f. 75.
Chacara de Martín Guanco y por otra con chacara de Sebastián Taclo,
indios y por otra parte con tierras de nos los dichos vendedores.
Un topo de tierras de Sembrar maiz, que poseen en el valle de Yucay a
donde dicen Challaguasi que linda por una parte con tierras de Baptista
Antonio de Salas.
Don Juan indio hijo de Francisco Chilche y hacia la parte de Yucay y por la
Cristóbal Torci Challaguasi 1 topo 120 pesos 09-08-1596 Protocolo 18. 1596-
Cuzco cabezada con chacara de Maria Capa y por otro lado con tierras de los
1597. f. 78.
vendedores y por la parte de abajo con la acequia grande que llaman
Acosca con que se riegan las dichas chácaras.
Un topo de tierras de sembrar maiz, en el valle de Yucay llamadas
Antonio de Salas.
Martín Francisco Guachac Puquio que lindan por un lado con chacaras de los indios
Guachacpuquio 1 topo 45 pesos 30-08-1596 Protocolo 18. 1596-
Bustinza Tanta Lares y por otra parte con el cerro grande y por la otra parte con tierras
1597. f. 122.
de Juan Valdivieso y por la parte de abajo con la cienaga.
Un obraje de Ropa, que yo tengo en el valle de Yucay, en el asiento de
Urcos con tres guertos que estan debajo de una cerca, que tiene por
lindero por la parte de abajo el río grande y por la de arriba con el
camino real que va Guayllabamba y con otro camino que viene de Antonio de Salas.
Don Miguel de Lazaro García No
Obraje de Urcos Guayllabamba al dicho obraje y por otra parte con tierras de Don 10500 pesos 23-09-1596 Protocolo 18. 1596-
Berrio de Medina determinado
Hernando Salas y con dos topos de tierras de Beatriz Saldaña. Más le 1597. f. 126.
vende debajo del dicho obraje 34 topos de tierras, mas de lo que hubiere
la rancheria de los indios yanaconas que alli tiene para el servicio del
obraje.
Una fanegada de tierras de maiz sembrar, en el valle de Urcos de Yucay
Jusephe donde dicen Cuntipampa y Siguairo que son dos andenes uno grande y
Capitan Antonio de Salas.
Villela, Cuntipampa y otro pequeño, que han por linderos por la parte de arriba con un cerro y
Francisco de 1 fanegada 500 pesos 05-04-1595 Protocolo 18. 1596-
corregidor de Siguairo-Urcos la acequia que va del molino que allí cerca tiene dicho capitán don
Loayza Francisco y huerta de Juan de Zambrano y por la parte de abajo un 1597. f. 184.
los Aymaraes
anden grande que llaman de la comunidad llamado Condorbamba.
Tres topos de tierras de sembrar maiz con su arboleda, las cuales
dichas tierras estan junto al pueblo de de Urubamba, que es en el valle
Joan de Olave.
Juan Flores de Diego de Junto al pueblo de de Yucay, que linda por una parte con tierras de Antonio Charo y por

183
3 topos 150 pesos 10-12-1596 Protocolo 08. 1596.
Guzmán Pisaña Urubamba otra parte con tierras de Antonio Ocampo y por otra parte con tierras de
f. 816.
los indios mitimaes de la encomienda de Martín García de Loyola y por
la frente con tierras de mi el dicho Juan Flores Guzmán.
En la cabezadas del pueblo de Urubamba Valle de Yucay en el asiento Joan de Olave.
Juan Flores de Francisco
Catan que llaman Catan, que linda por la parte de arriba con tierras de los 2 topos 150 pesos 10-12-1596 Protocolo 08. 1596.
Guzmán Hernández
indios de Paca del dicho pueblo de Urubamba y por la parte de abajo y f. 820.
los dos lados dos calles reales del dicho pueblo de Urubamba.

Una casa que son dos buhios en que estan cuatro aposentos un patio y
una guerta de arboleda dos alfalfares en tres pedazos en el valle de
Yucay que lindan con patio y buhio de doña Isabel de Guzman y por
Jerónimo delante el camino que va a Paca y por otra parte con una sanja que va a Antonio de Salas.
Doña Jerónima Casa y topo
Sánchez de Antapache dar a la puentezuela de las casas de Don Francisco Chilche, mas un 1075 pesos 30-04-1597 Protocolo 18. 1596-
de Torres de tierra
Quesada topo de tierras en el dicho valle que compre de Sancho de Horosco y de 1597. f. 589v.
Berrio que se dice Antapache que linda con tierras de Favian indio y por
la parte de abajo con una cequia de agua que lo cerca y por la parte de
arriba con el cerro y montañuela que se dice de Tucura.

Dos topos de tierras de sembrar maiz que yo tengo en el valle de Yucay


Antonio de Salas.
Joan de Francisco en el asiento de Challa Guasi, que linda por una parte con Juan
Challaguasi 02 topos 190 pesos 05-05-1597 Protocolo 18. 1596-
Villafuerte Valdez Bazán Valdievieso español y por la otra parte con Diego Chapa e indios que
1597. f. 663v.
son en la quebrada de Challaguasi y con todas sus entradas y salidas.
Cuatro topos de tierras de maiz sembrar que yo tengo y poseo en el
valle de Yucay donde dicen Acosca que los dos de ellos lindan por una
parte con tierras de Doña Beatriz Cuculi india difunta y con don Luis
Ynga y por la parte de arriba con una acequia y arboleda y por la otra Antonio de Salas.
Alonso Arias Gonzalo de
Acosca banda con tierras de Doña Beatriz... y los otros dos topos lindan por 04 topos 180 pesos 22-03-1597 Protocolo 18. 1596-
de Jirón Porras
una parte con chácara de la dicha doña Beatriz Cuculi y por otra con 1597. f. 718v.
chacaras de Palque Chacya yndio cañari y el río que pasa por el dicho
valle y por la parte de arriba con una acequia y camino que pasa al
tambo de Yucay.
Linda por la parte de arriba con tierras de la dicha Isabel Guacoma y por
Cristóbal de Luzero.
Don Cristóbal Isabel la parte de abajo con tierras del vendedor don cristobal Chigua Naupa y
Urcos 1 topo 20 pesos 10-07-1598 Protocolo 09. 1598.
Chigua Naupa Guacoma por otra parte con tierras de Petronilla mulata y por otra parte con tierras
f. 321.
de la comunidad de los yndios de Guayllabamba.

184
FICHAS DE ENTREVISTAS, UTILIZADA COMO FUENTE ORAL A LOS POBLADORES
DEL VALLE.

FICHA NUMERO 01

Ficha de entrevista

I. Datos Generales

1. Nombres y Apellidos: ………………………………………………………………...


2. Grado de Instrucción: ……………………………………………………………......
3. Comunidad de Origen: .......................................................................................

II. Conocimiento de su entorno espacial

4. ¿Cuáles son los nombres de los cerros o lugares más representativos de su


comunidad?
……………………………………………………………………………………………

III. Conocimiento de sus espacios productivos.

5. ¿Qué produce su comunidad?


……………………………………………………………………………………
6. ¿Cuáles son los nombres de sus sitios productivos?
……………………………………………………………………………………………………

IV. Remembranza de topónimos antiguos.


1. ¿Conoce usted los siguientes sitios y si los conoce en donde se ubican?
N° Sitio Si No En donde se ubican
01 Abasinga, Aguacsinga
02 Acomaca
03 Acomalo
04 Allpasondor
05 Ancascochabamba
06 Barobamba
07 Calala

185
08 Capapata
09 Caquiapata
10 Casanabamba
11 Chalaguasi, Challaguasi
12 Chaquelaguayco
13 Chuquicallua
14 Cuntipampa
15 Guacra
16 Guailla Quincha
17 Guaropuquio Quincha
18 Guayllabamba
19 Guayoccari
20 Huayocollo
21 Huli
22 Huycho
23 Mayllapuquio
24 Moyobamba
25 Ollisinai
26 Paropata
27 Patarache
28 Pichincho
29 Pinchincui
30 Pichinchuya
31 Pomañaupa
32 Puito
33 Quebrada de Urcos
34 Quincha
35 Quilapata
36 Quisguarpata
37 Rarauilca Cucho
38 Siguairo
39 Sondor
40 Tancapata
41 Tancabamba
42 Tantopata
43 Taracalla Urco
44 Taravilca Urco
45 Tucucuya
46 Urcospampa, Urcos
47 Urpihuata
48 Vitcobamba
49 Ypocheco

186
FICHA NÚMERO 02
Ficha de entrevista

V. Datos Generales

7. Nombres y Apellidos: ………………………………………………………………...


8. Grado de Instrucción: ……………………………………………………………......
9. Comunidad de Origen: .......................................................................................

VI. Conocimiento de su entorno espacial

10. ¿Cuáles son los nombres de los cerros o lugares más representativos de su
comunidad?
……………………………………………………………………………………………

VII. Conocimiento de sus espacios productivos.

11. ¿Qué produce su comunidad?


……………………………………………………………………………………
12. ¿Cuáles son los nombres de sus sitios productivos?
……………………………………………………………………………………………………

VIII. Remembranza de topónimos antiguos.


2. ¿Conoce usted los siguientes sitios y si los conoce en donde se ubican?
N° Sitio Si No En donde se ubican
01 Cachollabamba
02 Charcaguaylla Pata
03 Chauca
04 Chicho
05 Chichobamba
06 Chicón
07 Chuquibamba
08 Chuquipingollo
09 Coto
10 Coyachuqui
11 Cozca
12 Cuzcocache
13 Illacparara
187
14 Moyobamba
15 Mutuybamba
16 Paca
17 Pacachaca
18 Pacaraqui
19 Paropata
20 Patashuayla
21 Pomaguanca
22 Pueblo viejo de Chicho
23 Quespiguanca
24 Sacsipata
25 Sumipata
26 Taracache
27 Tomahuanca
28 Uquipalpa
29 Urubamba

FICHA NÚMERO 03

Ficha de entrevista

IX. Datos Generales

13. Nombres y Apellidos: ………………………………………………………………...


14. Grado de Instrucción: ……………………………………………………………......
15. Comunidad de Origen: .......................................................................................

X. Conocimiento de su entorno espacial

16. ¿Cuáles son los nombres de los cerros o lugares más representativos de su
comunidad?
……………………………………………………………………………………………

XI. Conocimiento de sus espacios productivos.

17. ¿Qué produce su comunidad?


……………………………………………………………………………………
188
18. ¿Cuáles son los nombres de sus sitios productivos?
……………………………………………………………………………………………………

XII. Remembranza de topónimos antiguos.


3. ¿Conoce usted los siguientes sitios y si los conoce en donde se ubican?
N° Sitio Si No En donde se ubican
01 Acosca
02 Acosca Pampa
03 Amacpongo
04 Ampatobamba
05 Andapache, Antapacha
06 Angasmori
07 Antipampa
08 Cachobamba
09 Chacavinaypata
10 Challaguasi
11 Chanchaguar
12 Chanchaliguar
13 Chanchaleguasi
14 Choco
15 Chuiunu
16 Chuqui Urco
17 Chuqui Ucruguailla
18 Chuquibamba
19 Chuquicocha
20 Chuquicucho
21 Chuquimaran
22 Chuquipata
23 Cocaguasi
24 Cochapampa
25 Collabamba
26 Collapata
27 Coquepata
28 Curicancha, Coricancha
29 Cuyguasipampa
30 Guachacpuquio
31 Guailla Misca
32 Guaillaquincha
33 Guaynatambo
34 Harcaviñay
35 Licancaguila
36 Lucre
37 Mandorcocha
38 Mandorcocha Quincha
39 Mandorpata
189
40 Mayopata
41 Michicabamba
42 Mollebamba
43 Mollecancha
44 Parobamba
45 Paucarchaca
46 Paucarchalla
47 Picho
48 Pilcobamba
49 Pomapampa
50 Pomapuquio
51 Pomatanca
52 Pucamarca
53 Pucroquincha
54 Quillabamba
55 Quillipata
56 Quiquijana
57 Quirubamba
58 Rucuinabamba
59 Sillaguailla
60 Sillaquincha
61 Tambo de Yucay
62 Tancabamba
63 Taquillabamba
64 Tomebamba
65 Unuraquina
66 Uqui Caviña
67 Uquipata
68 Vilcapata
69 Vitcoquiguar
70 Xauxero
71 Yagua Guasi
72 Yaguai Inquilla
73 Yllaguasi
74 Yucay
75 Yucaybamba
76 Yucayquincha
77 Zapallo Guasi

190
INDICE

AGRADECIMIENTO ................................................................................................ II
PROYECTO DE INVESTIGACIÒN…. .................................................................... III
INTRODUCCIÒN .................................................................................................... 1
CAPITULO I ........................................................................................................... 4
1. EL VALLE DE YUCAY: FINCA PARTICULAR DE LOS INKAS……………...4

1.1. Los cronistas y viajeros y su visión del valle de yucay. ………………….4

1.2. Síntesis de la evidencia arqueológica preinka del valle de yucay…...…19

1.3. El valle de Yucay durante el apogeo del estado inka (1400 d. C – 1532
d.C.) ……………………………………………………………………..……21

CAPITULO II ......................................................................................................... 40
2. TENENCIA DE TIERRAS EN EL VALLE DE YUCAY. 1550-1600…………40

2.1 El proceso de la encomienda en el valle de Yucay……………………....40

2.2 El proceso de la Reducción de Indios del año 1558 y 1572 en el valle de


Yucay… Yucay…………………………………………………………………………..47

2.3 La merced como forma de acceso a la tierra en el valle de


Yucay…...Yucay………………………………………………………………………….67

2.4 El valle de Yucay y la primera visita y composición de tierras de


1594……1594…………………...……………………………………………………… 82

2.5 El proceso de compra venta de bienes inmuebles en el valle de Yucay.


…………..1550-1599………..…………………………………………………………..99

CAPITULO III ...................................................................................................... 103


3. PROSPECCION Y CONTRASTACION HISTÓRICA DEL VALLE DE
YUCAY……………………………………………….………………………….103

3.1 Sistematización de topónimos en relación a la tenencia de tierras en el


. valle de Yucay en el siglo XVI…………………………………..………….104

191
3.2 Breve referencia de los espacios toponímicos más resaltantes del valle de
. Yucay vistos a partir de la documentación etnohistórica………….....…..112

3.3 Prospección y contrastación de topónimos y la memoria oral del poblador


actual del valle de Yucay…………………………………………..………….121

4.1. Cartografía temática toponímica………………………………………….129

4.1.1. Cartografía Histórica del Valle de Yucay………………………………...130


4.1.2. Cartografía Toponímica Histórica…………………………..…………….132
5. CONLUSIONES................................................................................... 136
6. BIBLIOGRAFÌA .................................................................................... 138
7. ANEXO ................................................................................................ 145
7.1 Reparto de tierras de trigo y maiz…….……………………..……………146
7.2 Documentos de la direccion del archivo ……..…………….…………....150
7.3 Ficha registro record de tenencia propiedad inmueble en el Valle de
Yucay………………………………………………………………….…….177
7.4 Fichas de entrevista………………………………………….…………….187

192

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