Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                
100% encontró este documento útil (1 voto)
907 vistas20 páginas

Tribunal de Transparencia Ordena A FFAA Entregar Documentos

Está en la página 1/ 20

Tribunal de Transparencia y Acceso a la

Información Pública
RESOLUCIÓN N° 000411-2023/JUS-TTAIP-SEGUNDA SALA

Expediente : 00197-2023-JUS/TTAIP
Recurrente : ERNESTO ALONSO CABRAL MEJÍA
Entidad : COMANDO CONJUNTO DE LAS FUERZAS ARMADAS
Sumilla : Declara fundado recurso de apelación

Miraflores, 6 de febrero de 2023

VISTO el Expediente de Apelación N° 00197-2023-JUS/TTAIP de fecha 23 de enero


de 2023, interpuesto por ERNESTO ALONSO CABRAL MEJÍA contra el Oficio N° 153
CCFFAA/SG/UAIP de fecha 11 de enero de 2023, por el cual el COMANDO
CONJUNTO DE LAS FUERZAS ARMADAS denegó su solicitud de acceso a la
información pública presentada con fecha 28 de diciembre de 2022 con Registro
00004203231.

CONSIDERANDO:

I. ANTECEDENTES

Con fecha 28 de diciembre de 2022, el recurrente solicitó a la entidad la entrega por


correo electrónico de la siguiente información:

“Tipo y cantidad de armamento y municiones utilizadas por las Fuerzas Armadas el


15 de diciembre en Huamanga (Ayacucho); entre el 11 y 14 de diciembre en
Andahuaylas (Apurímac) y el 16 de diciembre en Pichanaki (Junín), en el marco del
DS 143-2022-PCM”.

Mediante el Oficio N° 153 CCFFAA/SG/UAIP de fecha 11 de enero de 2023 la


entidad denegó dicho pedido alegando lo siguiente:

“Al respecto, su requerimiento fue solicitado con Memorándum N° 825


CCFFAA/SG/UAIP de fecha 29 de diciembre de 2022, obteniendo como respuesta
el Memorándum N° 025 ECMFFAA/D-3/DAI de fecha 10 de enero de 2023,
mediante el cual el Jefe de División de Operaciones del Estado Mayor Conjunto de
las Fuerzas Armadas, señala: “(…) es información que está exceptuada de ser
público, según lo establecido en el artículo 15°.- Excepciones al ejercicio del
derecho: Información Secreta, del Texto Único Ordenado de la Ley 27806, (…)”; por

1
Encausa a la entidad por el Ministerio de Defensa mediante el Oficio N° 00645-2022-MINDEF/SG-OAIP de fecha
27 de diciembre de 2022.

1
lo tanto, de acuerdo a lo descrito anteriormente, no es viable atender a su
requerimiento.”

Con fecha 23 de enero de 2023, el recurrente interpuso el recurso de apelación


materia de análisis contra la referida comunicación, señalando que la información
solicitada es reportada por los miembros de las Fuerzas Armadas conforme a lo
establecido en el Decreto Legislativo N° 1095, y además que su divulgación permite
fiscalizar la labor de dichos miembros en el marco de las violaciones de derechos
humanos ocurridas en Ayacucho, Apurímac y Junín, por lo cual no podrá ser
considerada como información clasificada.

Mediante la RESOLUCIÓN N° 000296-2023/JUS-TTAIP-SEGUNDA SALA de fecha


25 de enero de 2023, notificada a la entidad en fecha 30 de enero de 2023, esta
instancia le solicitó la remisión del expediente administrativo correspondiente y la
formulación de sus descargos.

Mediante el Oficio N° 517 CCFFAA/SG/UAIP recibido por esta instancia en fecha 2


de febrero de 2023, la entidad indicó lo siguiente:

“Por lo tanto. con Memorándum N° 822 CCFFAA/SG/UAIP de fecha 29 de


diciembre de 2022, se realizó el requerimiento del ciudadano en mención,
obteniendo como respuesta el Memorándum N° 025 EMCFFAA/D-3/DAI de fecha
10 de enero de 2023, mediante el cual el Jefe de la División de Operaciones Frente
Interno del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas. señala (...) pedidos de
información efectuados por el ciudadano Ernesto CABRAL Mejía, siendo que lo
solicitado es información que está exceptuada de ser público, según lo establecido
en el Artículo 15º .- Excepciones al ejercicio del derecho: información Secreta del
TUO de la Ley 27806, Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública
(...)". En tal sentido por medio del cual se da a conocer al administrado que, de
acuerdo a la normatividad anteriormente citada, no es viable atender o su
requerimiento.
Asimismo, con Memorándum N° 101 CCFFAA/SG/UAIP de fecha de 30 de enero
de 2023, se solicitó un informe explicativo a la División de Operaciones frente
Interno del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, referente a los motivos
por los cuales. no se brindó la información solicitada por el ciudadano Ernesto
Alonso CABRAL Mejía, obteniendo como respuesta el Memorándum N° 083
EMCFFAA/D 3/DAI de fecha 31 de enero de 2023, mediante el cual el jefe de la
citada División, remite el Informe Ampliatorio N° 002-2023/JCCFFAA/D-3/DAI de
fecha 31 de enero de 2023, detallando y justificando los motivos por los cuales no
era viable la entrega de la información solicitada por el administrado.”

Además, consta en autos el Memorándum N° 025 EMCFFAA/D-3/DAI, que indica:

“(…)
2. Al respecto, dichos memorándums se refieren o pedidos de información
efectuados por el ciudadano Ernesto Alonso CABRAL Mejía, siendo que lo
solicitado es información que esta exceptuada de ser público, según lo establecido
en el Artículo 15°.- Excepciones el ejercicio del derecho: Información Secreta, del
TUO de la Ley N° 27806, Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública;
motivo por el cual, las solicitud es en mención no proceden.”

A su vez, consta el Informe Ampliatorio N° 002-2023/JCCFFAA/D-3/DAI, que


refiere:

2
“(…)
3.- En ese sentido, en lo que se refiere el recurso de apelación interpuesto por
Ernesto Alonso CABRAL MEJÍA, contra la respuesta contenida en el Oficio N° 153-
CCFFAA/SG/UAIP, a través del cual el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas
(CCFFAA) atendió la solicitud de acceso a la información pública reencausada
mediante el Oficio N° 00645-2022-MINDEL/SG-OAIP de fecha 27 de diciembre de
2022. en primer término, se debe referir que dentro de la información (tipo y
cantidad de armamento y municiones utilizadas por las FFAA en Huamanga,
Andahuaylas y Pichanaki en el marco del D.S. T 43-2022- PCM) que el indicado
ciudadano peticionó se encuentra información que no posee carácter de
información pública, o dicho en otros términos dentro de las excepciones al derecho
de acceso, en aplicación debida e irrestricta de la Ley de Transparencia y Acceso a
la Información Pública, la Ley 27806.
4.- Lo anteriormente referido se encuentre taxativamente expuesto en el numeral
45.7 del Reglamento del Decreto Legislativo N° 1095: Decreto Legislativo que
establece reglas de empleo y uso de la fuerza por parte de las Fuerzas Armadas en
el territorio nacional, que a la letra establece: "Los pedidos de información o
documentación sobre una operación y acción militar son atendidos por la entidad
correspondiente de acuerdo a la normativa vigente sobre transparencia y acceso a
la información pública."
5.- Resulta innegable que el derecho de acceso a la información pública es un
derecho que consagra la Constitución Política del Perú; sin embargo, la propia
Constitución Política establece las informaciones que afectan la intimidad personal
y las que expresamente se excluyan por, ley o por razones de seguridad nacional
(conforme al numeral 5 del artículo 2 de la norma constitucional).
6.- En ese sentido, et derecho de acceso a la información pública ha sido
desarrollado a través, actualmente, del Texto único Ordenado de la Ley 27806, Ley
de Transparencia y Acceso a la Información Pública, aprobado con D.S. 02 -2019-
JUS, normativa que entre otros señala las situaciones de excepciones oí derecho
de acceso a información.
7.- Como ya se ha mencionado el derecho fundamental de acceso a la información
pública se encuentra reconocido en el artículo 2.5 de la Constitución de 1993. sin
embargo, el acceso a la información que se encuentra en poder, principalmente, de
las entidades estatales (Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas) tiene sus
"Límites", excluyéndose aquella cuyo acceso público se encuentra prohibido por la
Constitución, es decir, entre otras lo Información que afecte la seguridad nacional.
En ese contexto, las citadas excepciones han sido desarrolladas por los artículos
15º, 6º y 17º del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27806. Ley de Transparencia y
Acceso a la Información Pública, normativa concordante a lo dispuesto en la
Directiva General N° 01-2012-DE/SG "Normas para garantizar la Seguridad de las
Informaciones en el Ministerio de Defensa" y la Directiva N° 022- 21/JCCFFAA/SJ
"NORMAR LOS PROCEDIMIENTOS PARA EL ACCESO CLASIFICACIÓN,
ARCHIVO Y CONSERVACION DE LA DOCUMENTACION EN EL COMANDO
CON JUNTO DE LAS FUERZAS ARMADAS".
8.- No obstante, la información contenida en las excepciones señaladas en los
artículos 15, 16 y 17 son accesibles para el Congreso de la República, el Poder
Judicial, el Contralor General de la República; el Defensor del Pueblo y el
Superintendente de Banca, Seguros y Administradoras Privadas de Fondos de
Pensiones. Para estos efectos. el Congreso de la República sólo tiene acceso
mediante una Comisión Investigadora.
9.- Es así, que existe la autorización legal para que parte de la información que
posean las Entidades del Estado, en este caso el Comando Conjunto de las
Fuerzas Armados, sea considerada dentro de las excepciones previstas en la
normativa aplicable, por lo que en lo relacionado a lo petición denegada que es

3
materia de apelación, se ha dado estricto cumplimiento a lo que establece la
Constitución y las Leyes.
10.- Como se indicó en su oportunidad, la información requerida por el peticionante
tiene la condición de clasificada dentro de las excepciones de ley, dado que se
establecen en ellas, documentación o información, cuyo objetivo es el lograr el
restablecimiento y mantenimiento del orden interno, en acciones militares en apoyo
al misionamiento constitucional de la Policía Nacional del Perú, dentro del marco de
un Estado de Emergencia que a la fecha continua en algunos lugares del territorio
nacional.
11.- Resulta lógico y necesario entonces que, en salvaguarda del éxito de las
acciones en apoyo o la misión constitucional de mantener y restablecer el orden
interno de nuestra gloriosa Policía Nacional, esta documentación e información
tengan un carácter y condición de clasificadas y reservadas, como para hacerse de
conocimiento público per se.
12- Este carácter de clasificados de los documentos, disposiciones e información.
como es de conocimiento público, no es absoluto, ni va en contra de la capacidad
fiscalizadora que posee la ciudadanía, sino que dicha capacidad se encuentra
focalizada o dirigida por ciertas autoridades a quienes, de ser requeridas, se da
acceso a la misma, por lo que estamos ante una situación en la que no se
encuentra autorizado la entrego de la información requerido a parte de la población.
13.- Se entiende ello, en el sentido que la difusión de dichos documentos e
Información, implicaría el posible y previsible hecho que no pudieran tener éxito las
acciones que el Estado despliega para el manteniendo del Estado de Derecho y
restablecimiento del orden y la paz social a nivel del orden interno, que como es
sabido viene siendo violentado por un grupo de personas, que una vez
identificados, serón denunciados y procesados por el daño que vienen ocasionando
al propio Establo, a las personas y a los bienes.
14.- En este caso, la eficacia y eficiencia de las acciones devienen de su buena
ejecución y carácter de reservado, en la obtención del objetivo deseado, siendo que
su difusión y entrega significo un riesgo latente en contrario.
15.- Es pertinente, resaltar que la excepción de acceso a dicho información se basa
en estricto y exactamente en las normativas nacionales del caso, que claramente
conoce el peticionante y sus abogados, que a su vez tiene sustento en normas y
estándares internacionales que regulan el empleo y uso de la fuerza, a los cuales
se da el debido y estricto cumplimiento.
16.- En cuanto a la supuesta falta de precisión de la excepción de la información
solicitado, basta la lectura del artículo 16 del TUO de lo ley 27806 (se pone en
negrita la que corresponde], que a la letra establece:
“Artículo 16.- Excepciones al ejercicio del derecho: Información reservada
El derecho de acceso a la información pública no podrá ser ejercido respecto de la
información clasificada como reservada. En consecuencia, la excepción comprende
únicamente los siguientes supuestos:
1. La información que por razones de seguridad nacional en el ámbito del orden
interno cuya revelación originaría un riesgo a la integridad territorial y/o la
subsistencia del sistema democrático. En consecuencia, se considera reservado la
información que tiene por finalidad prevenir y reprimir la criminalidad en el país y
cuya revelación puede entorpecerla y comprende únicamente:
a) Los planes de operaciones policiales y de inteligencia, así como aquellos
destinados a combatir el terrorismo, tráfico ilícito de drogas y organizaciones
criminales, así como los oficios, partes y comunicaciones que se refieran
expresamente o ellos.
b) Las informaciones que impidan el curso de las investigaciones en su
etapa policial dentro de los límites de la Iey. incluyendo los sistemas de
recompensa, colaboración eficaz y protección de testigos, así corno la
interceptación de comunicaciones amparadas por la ley.

4
c) Los planes de seguridad y defensa de instalaciones policiales,
establecimientos penitenciarios, locales públicos y los de protección de
dignatarios, así como los oficios, partes y comunicaciones que se refieran
expresamente a ellos.
d) El movimiento del personal que pudiera poner en riesgo la vida e integridad
de las personas involucradas o afectar la seguridad ciudadana.
e) El armamento y material logístico comprometido en operaciones
especiales y planes de seguridad y defensa del orden interno.
f) La información contenida en los Reportes de actividades con las sustancias
químicas tóxicas y sus precursores listados en la Convención sobre la
Prohibición del Desarrollo la Producción, el Almacenamiento y et Empleo de
Armas Químicos y sobre su Destrucción: la información contenida en los
Reportes sobre las instalaciones de producción de las sustancias químicas
orgánicas definidas: lo información relacionada con las inspecciones nacionales
e inspecciones realizadas por la Secretaría Técnica de la Organización para la
Prohibición de las Armas Químicos: la información concerniente a los procesos
productivos en donde intervienen sustancias químicas tóxicas y sus
precursores de las Listas 1, 2 y 3 de dicha Convención; y la información
concerniente al empleo de tas sustancias químicas tóxicas y sus precursores
de las Listas 1 y 2 de dicha Convención".
No existe duda alguna, que lo peticionado resulta ser visible y notoriamente
relacionado a lo que establece la excepción descrita.
17.- Lo señalado en el párrafo anterior, también se encuentra regulado y previsto en
la Directiva General 01 MINDEF/SG/G Normas para garantizar la seguridad de las
informaciones en el Ministerio de Defensa, la cual dentro de su anexo “1", sobre
clasificación y categorización de la documentación relacionadas a la información
RESERVADA según el literal d) del artículo 16 de la Iey de la materia, dispone:
1. La información que por razones de seguridad nacional en el ámbito del orden
interno cuya revelación originaría un riesgo a la integridad territorial y/o la
subsistencia del sistema democrático. En consecuencia, se considera reservada la
Información que tiene por finalidad prevenir y reprimir la criminalidad en el país y
cuya revelación puede entorpecerla y comprende únicamente:
e) El armamento y material logístico comprometido en operaciones especiales
y planes de seguridad y defensa del orden interno.
01: Adquisición, provisionamiento de armamento, munición y
artificios para su empleo en régimen de excepción.
05: Informe de consumo de munición de la Institución.
18.- Del mismo modo, Directiva General 022-21/JCCFFAA/SJ Directiva para normar
los procedimientos para el acceso, clasificación, archivo y conservación de la
documentación en el Comando Conjunto de los Fuerzas Armadas, la cual dentro de
su anexo “1", sobre clasificación y categorización de la documentación relacionadas
a la información secreto según el literal e) del artículo 16 de lo ley de la materia,
dispone:
03: Adquisición, provisionamiento de armamento, munición y artificios para su
empleo en régimen de excepción.
05: Informe de consumo de munición de la Institución.
19.- No puede suponerse menos afirmarse, como temerariamente expresa el
peticionante, que las Fuerzas Armadas han cometido actos de violación de
Derechos Humanos.
20.- Cabe agregar, que deben ser rechazadas tajantemente las aseveraciones
sobre que los lamentables fallecimientos acaecidos durante los actos de
movilización social en diferentes partes del territorio nacional, que en algunos casos
han devenido en actos vandálicos y de otros de connotación delictiva, pues dichas
lamentables y sensibles perdidas, vienen siendo investigados por la autoridad
competente conforme es de conocimiento público y que cito el propio peticionante.

5
21.- Estas afirmaciones, no solo son dañosas para la imagen institucional de les
Fuerzas Armadas, sino que también van en contra de la presunción de inocencia
que gozan todos los ciudadanos de la Nación, dentro de las que se incluyen las
fuerzas del orden. citar publicaciones de medios de comunicación no prueban de
modo alguno tales aseveraciones y afirmaciones, lo cual deberá ser evaluado por
las instancias correspondientes para las acciones administrativas o legales que
pudieran corresponder y puestas en conocimiento del Procurador Público del
Ministerio de Defensa, a fin de que en razón de sus competencias evalúe el inicio
de las acciones legales correspondientes.
22- Finalmente, debe mencionarse que por todo lo expuesto, no corresponde la
entrega de la información peticionado al estar debidamente justificada y sustentado
las condiciones por las cuales se encuentra adecuada a la Constitución y las leyes
el carácter clasificado de lo información.”

Finalmente, en fecha 6 de febrero de 2023 se realizó un informe oral, en la cual


únicamente se apersonó el recurrente, quien ratificó el carácter público de lo
requerido.

ll. ANÁLISIS

El numeral 5 del artículo 2 de la Constitución Política del Perú establece que toda
persona tiene derecho a solicitar sin expresión de causa la información que requiera
y a recibirla de cualquier entidad pública, en el plazo legal, con el costo que
suponga el pedido, con excepción de aquellas informaciones que afectan la
intimidad personal y las que expresamente se excluyan por ley o por razones de
seguridad nacional.

En este marco, el artículo 3 del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27806, Ley de
Transparencia y Acceso a la Información Pública, aprobado por el Decreto Supremo
N° 021-2019-JUS2, establece que toda información que posea el Estado se
presume pública, salvo las excepciones de ley, teniendo las entidades la obligación
de entregar la información que demanden las personas en aplicación del principio
de publicidad.

A su vez, el artículo 10 del mismo texto dispone que las entidades de la


Administración Pública tienen la obligación de proveer la información requerida si se
refiere a la contenida en documentos escritos, fotografías, grabaciones, soporte
magnético o digital, o en cualquier otro formato, siempre que haya sido creada u
obtenida por ella o que se encuentre en su posesión o bajo su control.

Cabe anotar que el segundo párrafo del artículo 13 de la Ley de Transparencia,


establece que la denegatoria al acceso a la información solicitada debe ser
fundamentada por las excepciones de ley, agregando el primer párrafo del artículo
18 de la referida norma que las excepciones establecidas en los artículos 15, 16 y
17 del mismo texto son los únicos supuestos en los que se puede limitar el derecho
al acceso a la información pública, por lo que deben ser interpretadas de manera
restrictiva por tratarse de una limitación a un derecho fundamental.

Por su parte, el literal f) del numeral 1 del artículo 15 de la referida ley, establece
que el derecho de acceso a la información pública no podrá ser ejercido respecto a
la información expresamente clasificada como secreta, que se sustente en razones
de seguridad nacional, en concordancia con el artículo 163 de la Constitución
Política del Perú, que además tenga como base fundamental garantizar la

2
En adelante, Ley de Transparencia.

6
seguridad de las personas y cuya revelación originaría riesgo para la integridad
territorial y/o subsistencia del sistema democrático, así como respecto a las
actividades de inteligencia y contrainteligencia de la DINI dentro del marco que
establece el Estado de Derecho en función de las situaciones expresamente
contempladas en esta Ley. En consecuencia la excepción comprende únicamente
los siguientes supuestos:
1. Información clasificada en el ámbito militar, tanto en el frente interno como
externo:
f) El material bélico, sus componentes, accesorios, operatividad y/o ubicación cuyas
características pondrían en riesgo los planes de defensa militar contra posibles
agresiones de otros Estados o de fuerzas irregulares militarizadas internas y/o
externas, así como de operación en apoyo a la Policía Nacional del Perú, planes de
movilización y operaciones especiales relativas a ellas.

A su vez, el artículo 16 de la Ley de Transparencia refiere el derecho de acceso a la


información pública no podrá ser ejercido respecto de la información clasificada
como reservada. En consecuencia la excepción comprende únicamente los
siguientes supuestos:
1. La información que por razones de seguridad nacional en el ámbito del orden
interno cuya revelación originaría un riesgo a la integridad territorial y/o la
subsistencia del sistema democrático. En consecuencia se considera reservada la
información que tiene por finalidad prevenir y reprimir la criminalidad en el país y
cuya revelación puede entorpecerla y comprende únicamente:
e) El armamento y material logístico comprometido en operaciones especiales y
planes de seguridad y defensa del orden interno.

En ese contexto, el artículo 5 del Reglamento de la Ley de Transparencia, aprobado


por el Decreto Supremo N° 072-2003-PCM3, señala que cuando se denegara el
acceso a la información requerida por considerar que no tiene carácter público, las
entidades de la Administración Pública deberán hacerlo obligatoriamente en base a
razones de hecho y a las excepciones contempladas en la Ley de Transparencia.

En esa línea, el artículo 21 del Reglamento de la Ley de Transparencia señala que


las entidades que produzcan o posean información de acceso restringido llevarán
un registro de la misma, el cual se dividirá en información secreta e información
reservada. Asimismo, que en el registro deberán consignar los siguientes datos: “a.
El número de resolución del titular del sector o del pliego, según corresponda, y la
fecha de la resolución por la cual se le otorgo dicho carácter; b. El número de la
resolución la fecha de expedición y la vigencia del mandato cuando el titular del
sector o pliego, según corresponda, hubiese designado un funcionario de la entidad
para realizar la labor de clasificación de la información restringida; c. El nombre o la
denominación asignada, así como el código que se le da a la información con el
objeto de proteger su contenido, el mismo que deberá estar reproducido en el
documento protegido, con el objeto del cotejo respectivo para el momento que se
produzca la correspondiente desclasificación; d. La fecha y la resolución por la cual
el titular del sector o pliego, según corresponda, prorrogó el carácter secreto de la
información, por considerar que su divulgación podría poner en riesgo la seguridad
de las personas, la integridad territorial y/o la subsistencia del régimen democrático,
cuando ello corresponda; e. El número, tipo de documento y la fecha con que se
fundamentó ante el Consejo de Ministros el mantenimiento del carácter restringido
de la información, cuando ello corresponda; y, f. La fecha y la resolución de
desclasificación de la información de carácter reservado en el caso que hubiera
desaparecido la causa que motivó su clasificación, cuando ello corresponda.”

3
En adelante, Reglamento de la Ley de Transparencia.

7
Finalmente, el artículo 18 de la Ley de Transparencia establece que las
excepciones señaladas en los puntos 15 y 16 incluyen los documentos que se
generen sobre estas materias y no se considerará como información clasificada, la
relacionada a la violación de derechos humanos o de las Convenciones de Ginebra
de 1949 realizada en cualquier circunstancia, por cualquier persona.

2.1. Materia en discusión

De autos se advierte que la controversia radica en determinar si la información


solicitada por el recurrente se encuentra inmersa en la excepción al derecho de
acceso a la información pública prevista en el artículo 15 o el artículo 16 de la Ley
de Transparencia.

2.2. Evaluación

Sobre el particular, toda documentación que obra en el archivo o dominio estatal es


de carácter público para conocimiento de la ciudadanía por ser de interés general,
conforme lo ha subrayado el Tribunal Constitucional en el Fundamento 5 de la
sentencia recaída en el Expediente N° 4865-2013-PHD/TC indicando:

“La protección del derecho fundamental de acceso a la información pública no


solo es de interés para el titular del derecho, sino también para el propio Estado
y para la colectividad en general. Por ello, los pedidos de información pública
no deben entenderse vinculados únicamente al interés de cada persona
requirente, sino valorados además como manifestación del principio de
transparencia en la actividad pública. Este principio de transparencia es, de
modo enunciativo, garantía de no arbitrariedad, de actuación lícita y eficiente
por parte del Estado, y sirve como mecanismo idóneo de control en manos de
los ciudadanos.”

Al respecto, el artículo 3 de la Ley de Transparencia, que consagra expresamente


el Principio de Publicidad, establece que: “Toda información que posea el Estado se
presume pública, salvo las excepciones expresamente previstas por (…) la
presente Ley”. Es decir, establece como regla general la publicidad de la
información en poder de las entidades públicas, mientras que el secreto es la
excepción. En esa línea, el Tribunal Constitucional en el Fundamento 8 de la
sentencia recaída en el Expediente N° 02814-2008-PHD/TC, ha señalado respecto
del mencionado Principio de Publicidad lo siguiente:

“(…) Esta responsabilidad de los funcionarios viene aparejada entonces con el


principio de publicidad, en virtud del cual toda la información producida por el
Estado es, prima facie, pública. Tal principio a su vez implica o exige
necesariamente la posibilidad de acceder efectivamente a la documentación
del Estado”.

Teniendo en cuenta ello, el Tribunal Constitucional precisó que le corresponde a las


entidades acreditar la necesidad de mantener en reserva la información que haya
sido solicitada por el ciudadano, conforme se advierte del último párrafo del
Fundamento 13 de la sentencia recaída en el Expediente N° 2579-2003-HD/TC:

“Como antes se ha mencionado, esta presunción de inconstitucionalidad se


traduce en exigir del Estado y sus órganos la obligación de probar que existe
un bien, principio o valor constitucionalmente relevante que justifique que se
mantenga en reserva, secreto o confidencialidad la información pública
solicitada y, a su vez, que sólo si se mantiene tal reserva se puede servir

8
efectivamente al interés constitucional que la justifica. De manera que, si el
Estado no justifica la existencia del apremiante interés público para negar el
acceso a la información, la presunción que recae sobre la norma o acto debe
efectivizarse y, en esa medida, confirmarse su inconstitucionalidad; pero
también significa que la carga de la prueba acerca de la necesidad de
mantener en reserva el acceso a la información ha de estar, exclusivamente,
en manos del Estado” (subrayado agregado).

En ese sentido, de las normas legales y los pronunciamientos efectuados por el


Tribunal Constitucional antes citados, se infiere que toda información que posean
las entidades de la Administración Pública es de acceso público; y, en caso dicha
información corresponda a un supuesto de excepción previsto en los artículos 15 a
17 de la Ley de Transparencia, constituye deber de las entidades acreditar dicha
condición, debido a que poseen la carga de la prueba.

En el caso de autos, el recurrente solicitó a la entidad “Tipo y cantidad de


armamento y municiones utilizadas por las Fuerzas Armadas el 15 de diciembre en
Huamanga (Ayacucho); entre el 11 y 14 de diciembre en Andahuaylas (Apurímac) y
el 16 de diciembre en Pichanaki (Junín), en el marco del DS 143-2022-PCM”.

Por su parte, la entidad denegó la solicitud en base a lo señalado en el


Memorándum N° 025 ECMFFAA/D-3/DAI de fecha 10 de enero de 2023, mediante
el cual el Jefe de la División de Operaciones del Estado Mayor Conjunto de las
Fuerzas Armadas, señaló que la información requerida se encuentra exceptuada de
ser entregada en mérito a lo señalado en el artículo 15 de la Ley de Transparencia.

Frente a ello, el recurrente interpuso su recurso de apelación señalando que la


información solicitada es reportada por los miembros de las Fuerzas Armadas
conforme a lo establecido en el Decreto Legislativo N° 1095, y además que su
divulgación permite fiscalizar la labor de dichos miembros en el marco de las
violaciones de derechos humanos ocurridas en Ayacucho, Apurímac y Junín, por lo
cual no podrá ser considerada como información clasificada.

A nivel de descargos, el Jefe de la División de Operaciones Frente Interno del


Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, mediante el Informe Ampliatorio
N° 002-2023/JCCFFAA/D-3/DAI, señaló que la información se negó en mérito a que
“(…) Resulta lógico y necesario entonces que, en salvaguarda del éxito de las
acciones en apoyo a la misión constitucional de mantener y restablecer el orden
interno de nuestra gloriosa Policía Nacional, estas disposiciones y planes
mantengan un carácter y condición de clasificadas y reservadas, como para
hacerse de conocimiento público per se”. En dicha línea, indica que, la clasificación
en secreta de la información no contraviene la capacidad fiscalizadora, por el
contrario, señala que dicha difusión “(…) implicaría el posible y previsible hecho que
no pudieran tener éxito las acciones que el Estado despliega para el manteniendo
del Estado de Derecho y restablecimiento del orden y la paz social a nivel del orden
interno. que como es sabido viene siendo violentado por un grupo de personas, que
una vez identificados, serán denunciados y procesados por el daño que vienen
ocasionando al propio Estado, a las personas y a los bienes”.

Asimismo, agrega que la clasificación de la información se encuentra regulada


mediante “la Directiva General 01 MINDEF/SG/G Normas para garantizar la
seguridad de las informaciones en el Ministerio de Defensa, la cual dentro de su
anexo “1 ", sobre clasificación y categorización de la documentación relacionadas a
la información RESERVADA según el literal d) del artículo 16 de la Iey de la
materia, dispone:

9
1. La información que por razones de seguridad nacional en el ámbito del orden
interno cuya revelación originaría un riesgo a la integridad territorial y/o la
subsistencia del sistema democrático. En consecuencia, se considera reservada la
Información que tiene por finalidad prevenir y reprimir la criminalidad en el país y
cuya revelación puede entorpecerla y comprende únicamente:
e) El armamento y material logístico comprometido en operaciones especiales y
planes de seguridad y defensa del orden interno.
01: Adquisición, provisionamiento de armamento, munición y artificios
para su empleo en régimen de excepción.
05: Informe de consumo de munición de la Institución.
18.- Del mismo modo, Directiva General 022-21/JCCFFAA/SJ Directiva para normar
los procedimientos para el acceso, clasificación, archivo y conservación de la
documentación en el Comando Conjunto de los Fuerzas Armadas, la cual dentro de
su anexo “1", sobre clasificación y categorización de la documentación relacionadas
a la información secreto según el literal e) del artículo 16 de lo ley de la materia,
dispone:
03: Adquisición, provisionamiento de armamento, munición y artificios para su
empleo en régimen de excepción.
05: Informe de consumo de munición de la Institución”.

Finalmente, señala que “(…) no puede suponerse menos afirmarse, como


temerariamente expresa el peticionante, que las Fuerzas Armadas han cometido
actos de violación de Derechos Humanos (…)”.

Teniendo en cuenta ello, y en tanto la entidad no negó la existencia de la


información solicitada, sino que indicó que tiene carácter secreto o reservado,
corresponde determinar si la entidad atendió el pedido del recurrente conforme a
ley.

Sobre la clasificación de la información solicitada como secreta

El artículo 15 de la Ley de Transparencia es el que ha establecido la obligación de


clasificar expresamente la información que califica como secreta como requisito
para restringir el acceso a dicha información:

“Artículo 15.- Excepciones al ejercicio del derecho


El derecho de acceso a la información pública no podrá ser ejercido respecto a
la información expresamente clasificada como secreta, que se sustente en
razones de seguridad nacional, en concordancia con el artículo 163 de la
Constitución Política del Perú, que además tenga como base fundamental
garantizar la seguridad de las personas y cuya revelación originaría riesgo para
la integridad territorial y/o subsistencia del sistema democrático, así como
respecto a las actividades de inteligencia y contrainteligencia de la DINI dentro
del marco que establece el Estado de Derecho en función de las situaciones
expresamente contempladas en esta Ley”.

En la misma línea, el artículo 16 de la Ley de Transparencia refiere que el derecho


de acceso a la información pública no podrá ser ejercido respecto de la información
clasificada como reservada.

La obligación de clasificar la información que califica como secreta o reservada se


cumple a través de la emisión de una resolución del titular de la entidad que le
otorga dicho carácter, la cual a su vez se inscribe en un registro creado
especialmente para dicho fin. Al respecto, el artículo 21 del Reglamento de la Ley
de Transparencia establece lo siguiente:

10
“Artículo 21.- Registro
Aquellas entidades que produzcan o posean información de acceso restringido
llevarán un Registro de la misma, el cual se dividirá en información secreta e
información reservada.
En el Registro deberán consignarse los siguientes datos, de acuerdo a su
clasificación:
a. El número de la Resolución del titular del sector o del pliego, según
corresponda, y la fecha de la Resolución por la cual se le otorgó dicho carácter;
b. El número de la Resolución, la fecha de expedición y la vigencia del mandato
cuando el titular del sector o pliego, según corresponda, hubiese designado un
funcionario de la Entidad para realizar la labor de clasificación de la información
restringida;
c. El nombre o la denominación asignada, así como el código que se da a la
información con el objeto de proteger su contenido, el mismo que deberá estar
reproducido en el documento protegido, con el objeto del cotejo respectivo para
el momento en que se produzca la correspondiente desclasificación; (…)”
(subrayado agregado).

La resolución que clasifica la información no constituye un acto discrecional del


titular de la entidad o del funcionario delegado por éste, sino que la misma debe
dictarse con base en los supuestos de excepción establecidos en la Ley de
Transparencia, y cumplir con el deber de motivar adecuadamente las razones por
las cuales la información califica en alguno de dichos supuestos. Así lo ha
establecido el Tribunal Constitucional en el Fundamento 33 de la sentencia del
Pleno Jurisdiccional recaída en el Expediente N° 00005-2013-PI/TC, en el cual ha
precisado que la clasificación de la información no solo debe ser nominal, sino que
debe estar adecuadamente motivada en los supuestos de excepción establecidos
en la Ley de Transparencia:

“Como ya se ha explicado antes y así se desprende del respectivo mandato


constitucional y legal, la regla general en nuestro ordenamiento jurídico es la
publicidad de la información financiada por el presupuesto público, de modo
que la Administración tiene la obligación de hacer pública tal información. Las
excepciones son aquellas expresa y únicamente contenidas en los artículos 15,
16 y 17 del TUO de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública,
e incluso dichas excepciones se aplican de modo restrictivo y sólo cuando la
Administración ha justificado o motivado su clasificación como secreta,
reservada o confidencial. Si no se ha justificado debidamente la respectiva
clasificación carece de efectos la sola nominación formal (colocación de sellos
con las expresiones "secreto" o "reservado"), debiendo en todo caso ser la
última instancia administrativa en materia de transparencia y acceso a la
información pública la encargada de examinar si la información calificada de
secreta o reservada reviste realmente o no tal carácter” (subrayado agregado).

De las normas y la jurisprudencia citadas se desprende que cuando una entidad


alega que determinada información no puede entregarse por encontrarse
clasificada como secreta o reservada, la misma se encuentra en la obligación de
acreditar la existencia de la resolución que clasifica expresamente dicha
información como secreta, así como de comunicar el sustento con base en el cual
se considera que la información solicitada se encuadra en alguno de los supuestos
de excepción previstos en los artículos 15 o 16 de la Ley de Transparencia, no
bastando para ello la alusión genérica a dichos preceptos normativos, sino que es
necesario que se especifiquen las razones por las cuales la documentación
solicitada cumple con los distintos elementos que componen la excepción invocada.

11
Asimismo, conforme lo dispuesto por el citado artículo 21 del Reglamento de la Ley
de Transparencia, la clasificación de la información como secreta o reservada
también debe cumplir con determinados requisitos formales, como su aprobación
por el titular del sector o pliego o por un funcionario designado por este para dicho
fin, mediante una resolución debidamente motivada, la cual debe registrarse con un
número, fecha de emisión, y señalando la denominación del documento clasificado
y su código.

En el caso de autos, esta instancia aprecia que si bien la entidad ha alegado que la
información se encuentra clasificada como secreta y reservada, solo ha referido que
la entidad clasifica la información según la Directiva General 01 MINDEF/SG/G
Normas para garantizar la seguridad de las informaciones en el Ministerio de
Defensa y la Directiva General 022-21/JCCFFAA/SJ Directiva para normar los
procedimientos para el acceso, clasificación, archivo y conservación de la
documentación en el Comando Conjunto de las fuerzas Armadas; sin embargo,
dichos instrumentos normativos internos simplemente constituyen una guía que
regula el procedimiento para la clasificación, mas no corresponde a una resolución
que clasifica determinada información.

De este modo, la entidad no ha acreditado con ningún documento la aludida


clasificación, pese a que, como ya se señaló, la clasificación de información secreta
o reservada tiene determinadas formalidades, como que la misma haya sido
aprobada mediante una resolución del titular del sector o pliego, o funcionario
designado por éste, y que la misma se encuentre consignada en el registro
correspondiente, y en el cual se especifique la fecha de la resolución de
clasificación, la denominación de la información clasificada y su código, siendo que
ninguna de dichas formalidades han sido acreditadas por la entidad en el presente
caso.

En consecuencia, la entidad no ha cumplido con el requisito legal de la clasificación


de la información como secreta o reservada para denegar el acceso a la
información solicitada.

Sobre la motivación para calificar la información como secreta

No obstante lo anteriormente señalado, la entidad brindó respuesta al administrado


señalando que la información solicitada calificaba como secreta, invocando para
ello el artículo 15 de la Ley de Transparencia, pero sin precisar la sub causal
específica en la cual encajaban los documentos requeridos, con lo cual infringió su
deber de motivar adecuadamente la denegatoria de la información.

Sin embargo, en los descargos presentados a esta instancia la entidad ha aducido


que la información solicitada se encontraría inmersa en el literal “e” del numeral 1
del artículo 16 de la Ley de Transparencia. En tal sentido, la aludida norma
establece que:

“Artículo 16.- Excepciones al ejercicio del derecho: Información reservada


El derecho de acceso a la información pública no podrá ser ejercido respecto
de la información clasificada como reservada. En consecuencia la excepción
comprende únicamente los siguientes supuestos:
1. La información que por razones de seguridad nacional en el ámbito del orden
interno cuya revelación originaría un riesgo a la integridad territorial y/o la
subsistencia del sistema democrático. En consecuencia se considera reservada
la información que tiene por finalidad prevenir y reprimir la criminalidad en el
país y cuya revelación puede entorpecerla y comprende únicamente:

12
(…) e) El armamento y material logístico comprometido en operaciones
especiales y planes de seguridad y defensa del orden interno” (subrayado
agregado).

En dicho contexto, en el Informe Ampliatorio N° 002-2023/JCCFFAA/D-3/DAI,


emitido por el Jefe de la División de Operaciones Frente Interno del Estado Mayor
Conjunto de las Fuerzas Armadas, la entidad ha señalado que lo solicitado se
refiere a la “01. Adquisición, provisionamiento de armamento, munición
y artificios para su empleo en régimen de excepción. 05: Informe de consumo de
munición de la Institución”, conforme a lo regulado en la Directiva General 01
MINDEF/SG/G Normas para garantizar la seguridad de las informaciones en el
Ministerio de Defensa y la Directiva General 022-21/JCCFFAA/SJ Directiva para
normar los procedimientos para el acceso, clasificación, archivo y conservación de
la documentación en el Comando Conjunto de las fuerzas Armadas, con base en el
literal e) del numeral 1 del artículo 16 de la Ley de Transparencia, añadiendo que la
eventual develación de la información “(…) implicaría el posible y previsible hecho
que no pudieran tener éxito las acciones que el Estado despliega para el
manteniendo del Estado de Derecho y restablecimiento del orden y la paz social a
nivel del orden interno (…)”. Asimismo, ha precisado que “la eficacia y eficiencia de
las acciones devienen de su buena ejecución y carácter de reservado, en la
obtención del objetivo deseado, siendo que su difusión y entrega significa un riesgo
latente en contrario”, más aun cuando la declaratoria del Estado de Emergencia
Nacional continúa en algunas regiones del país.

Al respecto, como ya se ha establecido en la presente resolución, para la


denegatoria de una solicitud de acceso a la información pública la entidad debe
brindar una motivación suficiente que precise con claridad que la información
requerida encaja en los distintos elementos que componen una excepción. En el
caso de autos, es preciso destacar, en primer lugar, que la entidad ha brindado una
motivación distinta de la denegatoria de información, pues mientras en su respuesta
ha aludido al artículo 15 de la Ley de Transparencia (referida a información secreta
del ámbito militar), en sus descargos ha invocado el literal e) del numeral 1 del
artículo 16 de la referida ley (referida a información reservada del ámbito policial).

Sobre el particular, esta instancia considera necesario indicar que habiéndose


requerido información sobre armamento utilizado por las Fuerzas Armadas, en
estricto, el supuesto de excepción en entredicho sería el contemplado en el literal f)
del numeral 1 del artículo 15 de la Ley de Transparencia, relativo al “material bélico,
sus componentes, accesorios, operatividad y/o ubicación cuyas características
pondrían en riesgo los planes de defensa militar contra posibles agresiones de otros
Estados o de fuerzas irregulares militarizadas internas y/o externas, así como de
operación en apoyo a la Policía Nacional del Perú, planes de movilización y
operaciones especiales relativas a ellas”.

Sobre dicha excepción, la entidad debía brindar una motivación suficiente, lo que
implicaba acreditar dos supuestos que apareja la excepción invocada: a) primero,
que la información requerida se refiere a material bélico, sus componentes,
accesorios, operatividad y/o ubicación; y b) segundo, que la revelación de dicha
información afectaría la seguridad nacional, la seguridad de las personas, la
integridad territorial y/o subsistencia del sistema democrático, o perjudicaría las
actividades de inteligencia y contrainteligencia de la DINI, o los planes de defensa
militar.

A este respecto, la entidad en la respuesta brindada al ciudadano no ha expuesto


ninguna justificación, pues solo ha citado el artículo 15 de la Ley de Transparencia.

13
Y cuando se ha referido al artículo 16 de la citada ley, solo ha dicho de modo
genérico que la información se refiere a provisionamiento de armamento y consumo
de municiones y que ello podría afectar el éxito de las operaciones para recuperar
el orden interno. Sin embargo, la entidad no ha detallado de qué modo la
divulgación de la información solicitada afectaría la eficacia o el éxito de dichas
operaciones, más aun cuando la información se refiere a armas utilizadas en
operaciones ya ejecutadas, mas no en operaciones por ejecutarse.

Sobre el particular, es preciso destacar que los documentos solicitados fueron


documentos que la entidad debió elaborar en el contexto de la declaratoria del
Estado de Emergencia a nivel nacional, establecido por el Decreto Supremo Nº
143-2022-PCM, publicado el 14 de diciembre de 2022, en el cual se señaló:

“(…) Artículo 1.- Declaratoria de Estado de Emergencia


Declarar por el término de treinta (30) días calendario, el Estado de
Emergencia a nivel nacional. La Policía Nacional del Perú mantiene el control
del orden interno, con el apoyo de las Fuerzas Armadas.
(…)
Artículo 3.- Suspensión de los Estados de Emergencia vigentes a nivel
nacional
Durante la vigencia del Estado de Emergencia declarado en el artículo 1 del
presente Decreto Supremo, queda suspendida la vigencia de los Estados de
Emergencia declarados en distintos departamentos del país, en los cuales la
Policía Nacional del Perú se encuentra a cargo del control del orden interno.
Artículo 4.- De la intervención de la Policía Nacional del Perú y de las
Fuerzas Armadas
La intervención de la Policía Nacional del Perú y de las Fuerzas Armadas se
efectúa conforme a lo dispuesto en el Decreto Legislativo N° 1186, Decreto
Legislativo que regula el uso de la fuerza por parte de la Policía Nacional del
Perú, y en el Decreto Legislativo N° 1095, Decreto Legislativo que establece
reglas de empleo y uso de la fuerza por parte de las Fuerzas Armadas en el
territorio nacional y su Reglamento, aprobado por Decreto Supremo N° 003-
2020-DE, respectivamente”.

Es decir, mediante el aludido decreto supremo se autorizó la intervención de las


Fuerzas Armadas, en apoyo de la Policía Nacional del Perú, para el mantenimiento
del orden interno, disponiendo que su actuación se regulaba por el Decreto
Legislativo N° 1095, Decreto Legislativo que establece reglas de empleo y uso de la
fuerza por parte de las Fuerzas Armadas en el territorio nacional4, y su Reglamento
aprobado por Decreto Supremo N° 003-2020-DE5.

En dicho contexto, es el numeral 1 del artículo 20 del Decreto Legislativo N° 1095,


el que establece la obligación de la entidad de generar información relacionada con
el uso de armas de fuego en el marco de una operación militar: “Los miembros de
las Fuerzas Armadas que hagan uso de armas de fuego presentan en el término de
la distancia un informe por escrito a su superior, dando cuenta de los siguientes
aspectos: fecha, hora y lugar del incidente, unidad o elemento que participó en el
incidente, hechos que condujeron a su participación, la causa por la cual se abrió
fuego, el tipo y la cantidad de armas y municiones empleadas, daños personales o
materiales causados, número de eventuales detenidos, heridos o muertos,
debiendo acompañar, en lo posible, registros fílmicos o fotográficos existentes”
(subrayado agregado).

4
En adelante, Decreto Legislativo N° 1095.
5
En adelante, Reglamento del Decreto Legislativo N° 1095.

14
Ahora bien, es necesario resaltar en este punto que el uso de la fuerza por parte de
las Fuerzas Armadas en apoyo a la Policía Nacional para el restablecimiento del
orden interno en el contexto de un Estado de Emergencia, debe efectuarse en
respeto del marco del Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Así lo ha
establecido el numeral 5.2 del artículo 5 del Decreto Legislativo N° 1095, el cual
expresamente prescribe:

“5.2 Cuando la actuación de las Fuerzas Armadas en Estado de Emergencia se


orienta a realizar acciones militares en apoyo a la Policía Nacional para el
control del orden interno, rigen las normas del Derecho Internacional de los
Derechos Humanos”.

En dicha línea, el artículo 16 del aludido decreto legislativo establece que los
principios rectores que rigen antes, durante y después del uso de la fuerza son los
reconocidos por las normas del Derecho Internacional de los Derechos Humanos:
son los de legalidad, necesidad y proporcionalidad6.

Asimismo, el artículo 18 de la referida norma ha previsto que la fuerza debe ser


utilizada de modo progresivo según las circunstancias del caso concreto, esto es en
el marco de niveles de uso de la fuerza como son el nivel preventivo (involucra la
presencia militar, el contacto visual y la verbalización) y posteriormente y previa
advertencia cuando se han agotado las acciones preventivas, el nivel reactivo (que
involucra el control físico, el uso de medios no letales y uso de medios letales)7.

Del mismo modo, la norma en cuestión en su artículo 19 también ha previsto las


circunstancias excepcionales en las cuales pueden utilizarse armas de fuego,
destacando que su uso solo puede justificarse en la protección de la vida o la
integridad física del propio personal militar o de alguna otra persona, y ello por
cuanto la posibilidad de afectar la vida e integridad física con el empleo de un arma
de fuego solo puede estar justificado en la salvaguarda de un bien jurídico de la
misma importancia8.
6
“a. Legalidad.- El uso de fuerza por parte de los miembros de las Fuerzas Armadas debe estar amparado en el
presente Decreto Legislativo y su Reglamento.
b. Necesidad.- El análisis de la necesidad en cuanto al uso de la fuerza por parte de los miembros de las Fuerzas
Armadas implica dos verificaciones: (i) haber agotado el despliegue de medidas que no implican el uso de la fuerza
y que permitiesen alcanzar el resultado esperado; y, (ii) luego de esta verificación, llegar a la conclusión de que un
eventual uso de la fuerza resulta inevitable para alcanzar dicho resultado.
c. Proporcionalidad.- Es la equivalencia o correspondencia entre la gravedad de la amenaza y el grado de fuerza
empleada, debiendo ser ésta la mínima necesaria en relación a dicha amenaza y en función al resultado legal
esperado”.
7
“Artículo 18.- Niveles de uso de la fuerza
18.1.Preventivo
a. Presencia Militar.- Es la demostración de autoridad, en la que los miembros de las Fuerzas Armadas están
uniformados, equipados, en actitud diligente y de alerta, actuando preventiva y disuasivamente a fin de mantener o
restablecer el orden interno.
b. Contacto Visual.- Es el dominio visual sobre una persona, grupo de personas, vehículos, áreas o
instalaciones, que permite ejercer un cierto control sobre la situación.
c. Verbalización.- Es el uso de la comunicación oral, utilizando el tono y los términos necesarios que sean
fácilmente comprendidos, con miras a mantener o restablecer el orden interno.
18.2 Reactivo
Agotadas las acciones del nivel preventivo y antes de usar la fuerza en el nivel reactivo, se realiza la advertencia
correspondiente, procediendo al uso de la fuerza gradualmente, siempre y cuando la situación lo permita, de la
manera siguiente:
a. Control físico.- Es la acción militar que utiliza técnicas de fuerza corporal, con el fin de controlar, reducir,
inmovilizar o conducir ante la autoridad que corresponda a quienes se encuentren alterando el orden interno.
b. Medios no letales.- Se refiere al empleo de equipamiento y armas con bajo potencial de daño, para
contrarrestar o superar la amenaza existente.
c. Medios letales.- Excepcionalmente, se puede proceder al empleo de armas de fuego, de acuerdo a lo previsto en
el Artículo 19 del presente Decreto Legislativo”.
8
“Artículo 19.- Uso excepcional
19.1 Excepcionalmente, los miembros de las Fuerzas Armadas en cumplimiento de la
misión asignada pueden usar armas de fuego en defensa propia o de otras personas, en

15
En dicho escenario, la intervención de las Fuerzas Armadas en el contexto del
restablecimiento del orden interno no conlleva una actuación discrecional, sino que
la misma se encuentra claramente reglada, en salvaguarda de evitar sacrificios
innecesarios de la vida o la integridad física que puedan producirse como
consecuencia del uso de la fuerza que ejecute el personal militar. Tal es la finalidad
de someter el uso de la fuerza al Derecho y de tutelar con ello la vida de las
personas, que las normas aquí citadas incluso han previsto la rendición de cuentas
por parte del personal militar cuando se efectúe en el seno de una operación militar
el empleo de la fuerza letal, pues además del informe contemplado en el artículo 20
del Decreto Legislativo N° 1095, al que ya se hizo referencia, el artículo 31 de dicha
norma establece que el comandante a cargo de la operación debe presentar un
informe de las incidencias ocurridas durante la operación ejecutada:

“Artículo 31.- Presentación de informe


Concluidas las operaciones o acciones previstas en el presente Decreto
Legislativo, el comandante de la fuerza militar presenta un informe por escrito a
su superior, dando cuenta de los siguientes aspectos: fecha, hora y lugar de las
operaciones o acciones, unidad o elemento participante, hechos que
condujeron a su participación, las operaciones o acciones efectuadas, sus
resultados y otros aspectos de relevancia”.

Finalmente, el Reglamento del Decreto Legislativo N° 1095 en los numerales 45.7 y


45.8 ha previsto incluso la posibilidad de acceder a información sobre operaciones
militares en las cuales se haya hecho uso de la fuerza, a través de un
procedimiento de acceso a la información pública:

“Artículo 45.- Procedimientos como consecuencia del empleo o uso de la


fuerza
(…)
45.7 Los pedidos de información o documentación sobre una operación o
acción militar son atendidos por la entidad correspondiente de acuerdo a la
normativa vigente sobre transparencia y acceso a la información pública.
45.8 Toda persona tiene derecho a recibir información completa, veraz y
oportuna sobre las personas heridas o fallecidas como consecuencia de una
operación o acción militar, así como sobre las personas que hayan sido
intervenidas (…)” (subrayado agregado).

Esta norma no califica pues la información sobre una operación militar ejecutada en
la cual se haya hecho uso de la fuerza como secreta, sino que deriva el tratamiento
de los pedidos de información sobre dicha materia a la Ley de Transparencia, lo
que conlleva a presumir el carácter público de dicha información, y a restringir su
acceso solo en determinados supuestos tasados en las excepciones, y bajo una
interpretación restrictiva de las mismas.

caso de peligro inminente de muerte o lesiones graves, o con el propósito de evitar la


comisión de un delito particularmente grave que entrañe una seria amenaza para la vida, o
con el objeto de detener a una persona que represente ese peligro y oponga resistencia a
su autoridad, o para impedir su fuga, y sólo en caso de que resulten insuficientes las
medidas menos extremas para lograr dichos objetivos.
19.2 Si como consecuencia del uso de las armas de fuego se produjeran heridos, los
miembros de las Fuerzas Armadas habilitan la atención médica inmediata, sin
discriminación. En caso de que se registren personas fallecidas se adoptan los protocolos
correspondientes para el tratamiento de los restos humanos. En ambos casos, se procede a
informar a los familiares”.

16
En dicha línea, es pertinente destacar que el Tribunal Constitucional en el
Fundamento 8 de la sentencia recaída en el Expediente N° 02814-2008-PHD ha
establecido que una de las funciones esenciales del acceso a la información pública
es la posibilidad de fiscalizar el ejercicio de la función pública por parte de
funcionarios y servidores públicos:

“Uno de los elementos esenciales del Estado Social y Democrático de Derecho


es la responsabilidad de los funcionarios. Ello implica una capacidad
fiscalizadora importante por parte de la población a fin de controlar a los
funcionarios y servidores públicos, idea central o nuclear del sistema
democrático. Esta responsabilidad de los funcionarios viene aparejada
entonces con el principio de publicidad, en virtud del cual toda la información
producida por el Estado es, prima facie, pública. Tal principio a su vez implica o
exige necesariamente la posibilidad de acceder efectivamente a la
documentación del Estado. Como ya se dijo en la STC 04912-2008-HD/TC, el
tener acceso a los datos relativos al manejo de “la res pública resulta esencial
para que exista una opinión pública verdaderamente libre que pueda fiscalizar
adecuadamente la conducta de los gobernantes” (fundamento 3)” (subrayado
agregado).

En el caso de autos, la información sobre el armamento y municiones empleados


en un operativo militar en la medida que permite escrutar que el ejercicio de la
función pública –que incluye la actuación del personal militar- se realizó conforme a
ley es información de naturaleza pública, que solo puede quedar restringida con
base en un supuesto de excepción específico y siempre que se acredite que su
divulgación puede afectar el bien jurídico protegido por dicha excepción, y que la
protección de dicho bien resulta más importante que el acceso a la información
pública en el caso concreto (principio de proporcionalidad).

En el presente procedimiento, sin embargo, la entidad no ha cumplido su obligación


de motivar adecuadamente que nos encontremos en un supuesto de información
secreta, pues si bien la información sobre armamento se encuentra descrita en el
literal f) del numeral 1 del artículo 15 de la Ley de Transparencia, la entidad no ha
justificado cómo la revelación de dicha información puede afectar la seguridad
nacional, la seguridad personal, la integridad territorial o la subsistencia del sistema
democrático, o los planes de defensa militar, tratándose de información relativa a
operaciones militares ya ejecutadas.

La entidad en su respuesta al pedido de información no brindó al administrado


ninguna justificación adecuada de la denegatoria, pues solo citó el artículo 15 de la
Ley de Transparencia, y tampoco ha subsanado dicha omisión brindando a esta
instancia una motivación suficiente de dicha denegatoria, por lo que la presunción
de publicidad sobre la información requerida se mantiene.

Adicionalmente a ello, esta instancia debe enfatizar que el derecho de acceso a la


información pública, además de permitir el escrutinio del ejercicio de la función
pública, sirve también para el ejercicio de otros derechos fundamentales. En ambos
campos su ejercicio resulta trascendente. Por ello su limitación no solo debe
basarse en la invocación de una excepción, sino que es preciso que se justifique,
en base al principio de proporcionalidad, que la divulgación de información afecta el
bien jurídico protegido por la excepción y que la protección de dicha información
resulta más importante que el acceso a la misma en las circunstancias del caso
concreto.

17
En dicho contexto, en el supuesto que se estableciera que la información solicitada
estuviera relacionada con graves violaciones a los derechos humanos, la Ley de
Transparencia le otorga a la misma una protección máxima en cuanto a su
publicidad, pues el último párrafo de su artículo 18 ha previsto que no puede
clasificarse como secreta o reservada:

“Las excepciones señaladas en los puntos 15 y 16 incluyen los documentos


que se generen sobre estas materias y no se considerará como información
clasificada, la relacionada a la violación de derechos humanos o de las
Convenciones de Ginebra de 1949 realizada en cualquier circunstancia, por
cualquier persona. Ninguna de las excepciones señaladas en este artículo
pueden ser utilizadas en contra de lo establecido en la Constitución Política del
Perú”.

Lo que supone que en el caso en que exista una vinculación entre la información
requerida y el conocimiento de las circunstancias, causas y responsables de
hechos que califican como graves violaciones a los derechos humanos, la
mencionada información goza de un marco de máxima publicidad.

En dicho contexto, conforme lo ha señalado el Tribunal Constitucional en la


sentencia recaída en el Expediente 2488-2022-HC/TC, el derecho a conocer la
verdad de lo sucedido en casos de graves violaciones a los derechos humanos no
solo constituye un derecho de las víctimas de dichas violaciones, sino que dicho
derecho a la verdad cuenta también con una dimensión colectiva, en virtud a la cual
la sociedad en conjunto “(…) tiene el derecho de conocer la verdad sobre los
hechos o acontecimientos injustos y dolorosos provocados por las múltiples formas
de violencia estatal y no estatal. Tal derecho se traduce en la posibilidad de conocer
las circunstancias de tiempo, modo y lugar en las cuales ellos ocurrieron, así como
los motivos que impulsaron a sus autores. El derecho a la verdad es, en ese
sentido, un bien jurídico colectivo inalienable”.

Bajo este marco explicativo, para este Tribunal resulta claro que la prohibición de
clasificar como secreta o reservada la información relacionada a graves violaciones
a derechos humanos tiene su fundamento en el derecho a la verdad. Tratándose de
daños graves a la dignidad humana, que socavan el modelo mismo de Estado
Constitucional y Democrático de Derecho, el interés en el conocimiento de la
información sobre dichas violaciones a los derechos humanos es general. La
máxima publicidad de dicha información garantiza, además, la vigilancia sobre las
investigaciones adelantadas por los Estados para la determinación de
responsabilidades por dichos hechos.

En dicho contexto, conforme al artículo 18 de la Ley de Transparencia, en el


supuesto que la información solicitada (en el presente caso, sobre el armamento y
municiones utilizados el 15 de diciembre en Huamanga (Ayacucho); entre el 11 y 14
de diciembre en Andahuaylas (Apurímac) y el 16 de diciembre de 2022 en
Pichanaki (Junín)) se encontrara relacionada a la vulneración de derechos humanos
o de las Convenciones de Ginebra de 1949, realizada por cualquier persona, en
cualquier circunstancia, la misma no puede ser clasificada como reservada, secreta
o confidencial.

En consecuencia, corresponde estimar el recurso de apelación y ordenar a la


entidad que entregue la información pública requerida por el recurrente.

Finalmente, de conformidad con el artículo 35 del Reglamento de la Ley de


Transparencia, aprobado por el Decreto Supremo N° 072-2003-PCM, en aplicación de

18
la Ley N° 30057, Ley del Servicio Civil, corresponde a cada entidad determinar la
responsabilidad en que eventualmente hubieran incurrido sus funcionarios y/o
servidores por la comisión de presuntas conductas infractoras a las normas de
transparencia y acceso a la información pública.

Asimismo, el artículo 4 de la Ley de Transparencia, señala que todas las entidades de


la Administración Pública quedan obligadas a cumplir lo estipulado en la presente
norma y que los funcionarios o servidores públicos que incumplieran con las
disposiciones a que se refiere esta Ley serán sancionados por la comisión de una falta
grave, pudiendo ser incluso denunciados penalmente por la comisión de delito de
Abuso de Autoridad a que hace referencia el artículo 376 del Código Penal.

Además, el artículo 368 del Código Penal establece que el que desobedece o resiste
la orden legalmente impartida por un funcionario público en el ejercicio de sus
atribuciones, salvo que se trate de la propia detención, será reprimido con pena
privativa de libertad no menor de tres ni mayor de seis años.

Por los considerandos expuestos y de conformidad con lo dispuesto por el artículo 6 y


en el numeral 1 del artículo 7 del Decreto Legislativo N° 1353, Decreto Legislativo que
crea la Autoridad Nacional de Transparencia y Acceso a la Información Pública,
Fortalece el Régimen de Protección de Datos Personales y la Regulación de la
Gestión de Intereses; asimismo, ante la abstención formulada por la Vocal Titular
Silvia Vanesa Vera Muente declarada fundada9 anteriormente y el orden de prelación
establecido en la Resolución Nº 031200212020 de fecha 13 de febrero de 2020,
interviene la Vocal Titular de la Primera Sala María Rosa Mena Mena.

SE RESUELVE:

Artículo 1.- DECLARAR FUNDADO el recurso de apelación presentado por


ERNESTO ALONSO CABRAL MEJÍA contra la respuesta contenida en el Oficio
N°152-CCFFAA/SG/UAIP de fecha 11 de enero de 2023; y, en consecuencia,
ORDENAR al COMANDO CONJUNTO DE LAS FUERZAS ARMADAS que entregue
la documentación solicitada, conforme a los considerandos expuestos en la presente
resolución, bajo apercibimiento de que la Secretaría Técnica de esta instancia, de
acuerdo a sus competencias, remita copia de los actuados al Ministerio Público en
caso se reporte su incumplimiento, en atención a lo dispuesto por los artículos 368 y
376 del Código Penal.

Artículo 2.- SOLICITAR al COMANDO CONJUNTO DE LAS FUERZAS ARMADAS


que, en un plazo máximo de siete (7) días hábiles, acredite a esta instancia la entrega
de dicha información al recurrente ERNESTO ALONSO CABRAL MEJÍA.

Artículo 3.- DECLARAR agotada la vía administrativa al amparo de lo dispuesto en el


artículo 228 de la Ley N° 27444.

Artículo 4.- ENCARGAR a la Secretaría Técnica del Tribunal de Transparencia y


Acceso a la Información Pública, la notificación de la presente resolución a ERNESTO
ALONSO CABRAL MEJÍA y al COMANDO CONJUNTO DE LAS FUERZAS
ARMADAS, de conformidad con lo previsto en el artículo 18 de la norma antes citada.

9
Conforme a lo resuelto en la Resolución N° 2323-2021-JUS/TTAIP-PRIMERA SALA de fecha 8 de noviembre de
2021.

19
Artículo 5.- DISPONER la publicación de la presente resolución en el Portal
Institucional (www.minjus.gob.pe).

JOHAN LEÓN FLORIÁN


Vocal Presidente

VANESSA LUYO CRUZADO MARIA ROSA MENA MENA


Vocal Vocal

vp: fjlf/jmr

20

También podría gustarte