Selespeed
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Selespeed
eléctricos para asegurar un cambio entre marchas rápido. Uno opera el embrague, los
otros dos seleccionan la marcha y la cambian. Como promedio, un cambio entre
marchas dura sólo 300 milisegundos; el mejor valor es de tan sólo 240 milisegundos.
Puesto que "Easytronic" se basa en la ya experimentada caja de cambios manual del
Corsa, también goza de la ejemplar eficiencia de un 90% de su tecnología. En modo
automático, determina electrónicamente la relación ideal para las condiciones reales
de funcionamiento y controla el proceso de cambio. El Corsa 1.2 con "Easytronic"
funcionando en modo automático tiene un consumo de 6.2 l/100 km frente a los 6.3
l/100 km del mismo modelo con caja de cambios convencional. Esta caja de cambios
manual automatizada selecciona en todo momento la gama óptima de revoluciones
para cada situación, ajustando al máximo los consumos.
Los responsables técnicos de Opel aseguran que esta caja de cambios es tan
agradable y práctica de utilizar como un cambio automático y casi tan rápida al
cambiar como una caja manual manejada por un conductor experimentado al volante.
Para cambiar se empuja la palanca hacia delante y no es necesario levantar el pie del
acelerador ya que el propio sistema electrónico de control cierra por un instante la
mariposa del acelerador. Para reducir se tira de la palanca hacia atrás y la gestión
electrónica se encarga de dar un golpe de gas para engranar la marcha inferior con
suavidad. Tiene las ventajas de que resulta más barata de fabricar, menos pesada
(sólo 4 Kg. más que la misma caja en versión manual), los cambios se producen con
rapidez Para un rápido intercambio de datos, las unidades de control de la transmisión
y del motor están enlazadas por un Can bus de datos, lo que por ejemplo, reduce
ligeramente el par motor durante el cambio en sí, lo que produce un cambio de marcha
más suave y más cómodo. La rápida respuesta al acelerador representa una mayor
seguridad.
Por primera vez en este tipo de diseño pueden saltarse varias marchas a la vez; pasar
directamente de la quinta a la segunda marcha para adelantar a otro vehículo hasta
alcanzar la zona de potencia máxima y dotar al coche de toda su capacidad de
aceleración. El sistema también es capaz de reconocer condiciones de conducción
anómalas, también tiene un modo invernal que permite arrancar de parado con una
suave aceleración. Easytronic se encarga del proceso de embragar y desembragar. La
electrónica elimina la posibilidad de un abuso inadvertido (como en reducciones
cuando el régimen del motor es demasiado alto o retención de una marcha corta con
un alto número de revoluciones del motor).
Una cualidad novedosa de este cambio es la presión variable que hace el embrague
sobre el volante motor. Un coche no va siempre en la zona de máximo par motor y por
tanto no necesita siempre de toda la capacidad del embrague para transmitir el
movimiento. Así, cuando el par es bajo, el embrague presiona poco sobre el volante
motor. Se consigue con ello mayor rapidez en los cambios, porque en muchas
ocasiones el recorrido que tendrá que realizar el plato del embrague para
desembragar será menor que si estuviera completamente presionado sobre el volante
motor. Si con un frenazo inesperado, se activara el sistema ABS, independientemente
del modo seleccionado, desembraga. Esto desacopla la tracción del eje delantero y el
agarre existente de los neumáticos se utiliza únicamente para desacelerar de un modo
óptimo y mantener la estabilidad direccional, una clara ventaja de seguridad. En una
situación normal de frenado, incluso con modo manual, reduce las marchas a medida
que el coche se desacelera para evitar el riesgo de que el motor se cale. En modo
automático, las reducciones se realizan de manera
que el vehículo quede en la marcha más adecuada para acelerar de nuevo. En
cualquiera de los dos modos, cuando el conductor detiene completamente el vehículo
mediante la aplicación del freno desembraga. Al soltar el conductor el freno, el
vehículo puede "deslizarse" hacia adelante. El embrague permite una transmisión
parcial de la potencia, y ofrece así el lujo de un convertidor de par en una transmisión
automática convencional. Esta característica también facilita los arranques en cuesta.
Esta caja de cambios manual automatizada selecciona en todo momento la gama
óptima de revoluciones para cada situación, ajustando al máximo los consumos.
Según el director de Ingeniería de Opel el objetivo de la marca era desarrollar una
transmisión alternativa que ofreciera la comodidad de una automática a aquellos que
hasta ahora se han mantenido fieles a una caja de cambios manual, evitando
características como el aumento
- Selespeed Alfa Romeo Desde el año 1998 Alfa Romeo dispone de un sistema de
cambio automático secuencial llamado selespeed. Constructivamente la caja esta
compuesta por una caja de cambios de engranajes y un embrague monodisco en
seco, el cual dispone de una centralita que gestiona un sistema electrohidrahulico para
controlar el embrague del cambio. Igual que una caja manual, el cambio de marchas
de marchas se desacopla del motor perdiendo rendimiento de par. El sistema posibilita
de dos maneras el cambio de forma secuencial o de forma totalmente automática.