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La Semiología Vista Desde La Parte Nutricional

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LA SEMIOLOGÍA VISTA DESDE LA PARTE NUTRICIONAL

“si pudiéramos dar a cada individuo la cantidad adecuada de nutrición y ejercicio, ni muy poco
ni demasiado, habríamos encontrado el camino más seguro hacia la salud”
Hipócrates.

Mi propósito al escribir este ensayo es dar una concepción de la 1semiología y su relación


con la nutrición, para ello puedo decir que, durante la adolescencia, la alimentación es
fundamental debido a la mayor demanda de nutrientes para hacer frente a los numerosos cambios
físicos, sexuales y psicológicos que se experimentan durante este período. De igual manera
comienzan a partir de los diez años y van hasta los veinte años así mismo la cantidad de cambios
físicos, sexuales, cognitivos, sociales y emocionales que ocurren en este momento puede generar
expectativas y ansiedad para los niños y sus familias.
Llegando a este punto puedo decir que los cambios biomoleculares se expresan en el
organismo a través de signos y síntomas, siendo muchos de ellos tan objetivos que pueden ser
observados por el médico o nutricionista, pero otros requieren estudios paraclínicos y en su
defecto estudios especializados para ser evaluados en forma adecuada a través del acto clínico
donde científicamente se obtienen datos para ser integrados en síndromes que serán la base
del diagnóstico clínico y proponer luego el plan terapéutico médico o nutricional,
apareciendo en ocasiones casos críticos como los paciente en unidad de cuidados intensivos.
De igual modo la exploración del estado nutricional del individuo requiere distintas
herramientas que en su conjunto permiten realizar la evaluación o diagnóstico del estado
nutricional de forma global. Cabe señalar que estas herramientas son: una buena anamnesis,
exploración física, estudios analíticos y técnicas especiales. Los datos obtenidos pueden ser
evaluados de forma aislada o combinada y así por ejemplo la “valoración subjetiva global”,
incluye datos de anamnesis y exploración.
Debo agregar que diversas organizaciones de salud han destacado la importancia de
unificar criterios para el diagnóstico de la desnutrición y obesidad haciendo énfasis sobre todo en
el cambio del peso, cambio en la ingesta y las consecuencias que solo expresa riesgo. Puedo
anotar también que el abordaje clínico precisa el grado de afectación integrando signos, síntomas
clínicos, bioquímicos e imagenológicos que proporcionan certeza al tratamiento para poder
definir conducta con el paciente.

1
La SEMIOLOGIA es el capítulo de la Medicina que se ocupa del estudio de los síntomas y los signos de las
enfermedades, valiéndose para ello de la Semiotecnia, que es el conjunto de procedimientos y métodos que utiliza el
médico para lograr su obtención.
Por otra parte, los cambios biomoleculares tienen expresión en los diferentes aparatos y
sistemas del organismo siendo algunos muy evidentes como la desnutrición 2marasmática,
3
kwashiorkor o la 4obesidad mórbida, pero no siempre es así. Es por eso que estos cambios, con
frecuencia, no son detectados por el sujeto o no les da importancia, y solo se atiende cuando
aparece los síntomas que van acompañados decadencia física. Cabe señalar que es así como el
enfermo solicita atención médica, de la nutricionista, quienes enfrentan una de las experiencias
más apasionantes del ser humano: el acto clínico en donde el paciente busca solucionar un
problema no resuelto, y con frecuencia, espera un resultado mágico e inmediato, llegando a la
ansiedad, depresión e irrespeto al personal de salud.
resultado mágico y rápido. Algunas veces acude lleno de preguntas dispersas o
influidas por la búsqueda en internet, que con frecuencia lo confunde más, pero
otras, llega en silencio o es incapaz de mantener una comunicación verbal efectiva.
El nutricionista por su parte, se enfrenta a un entramado de información que no es
fácil resolver ya que el paciente se alimenta por tradición, por instinto, con lo que
está disponible y con lo que más le gusta, entre muchas razones; pero casi siempre
con escaso conocimiento científico, dando como resultado un desbalance entre sus
necesidades, preferencias o posibilidades de alimentarse. A continuación, veremos
aplicada la semiología nutricional en algunos casos específicos:
Semiología del apetito y la saciedad: Desde el Corpus Hipocrático hay descripciones
clínicas de la malnutrición, pero en sobrevivientes de la segunda guerra mundial se
tienen mejores observaciones, más ordenadas de los cambios en la desnutrición
crónica, evaluación del estado nutricional, más adelante, del síndrome de
realimentación, así como los cambios del apetito y saciedad como importantes
indicadores y predictores del estado nutriciona.
Se destaca cuatro factores importantes en la regulación de la ingesta a saber: a.
socioculturales (estilo de vida y socioeconómicos), b. físicos o ambientales
(apariencia, tamaño de la porción, etc.), c. biológicos (hormonas, contenido
energético, cantidad, etc.) y d. psicológicos (expectativas, creencias, etc.), que
deben interrogarse y considerarse para identificar las áreas de oportunidad de
atención y riesgos del enfermo. Habrá que hacerlo con claridad en el lenguaje
utilizado y estar seguro de que se ha comprendido bien principalmente en cuanto al
tipo de alimentos, bebidas, cantidades, volúmenes, lugar donde se hacen los
alimentos y tiempo para alimentarse, entre otros. Los factores sensoriales como el
sabor, visión, textura, palatabilidad, olfato y audición son los determinantes del inicio
y final del acto de comer. Sin embargo, las condiciones situacionales (lugar donde
se alimenta, con quien, tiempo para alimentarse, etc.) y las psicológicas se
interactúan para que se inicie o termine el acto de comer y la satisfacción del sujeto.
2
El marasmo es una carencia grave de calorías y proteínas que tiende a aparecer en los lactantes y los niños de edad
temprana. De modo característico produce pérdida de peso, pérdida de músculo y grasa y deshidratación. La
lactancia materna, por lo general, protege contra el marasmo.
3
Es una forma de desnutrición que ocurre cuando no hay suficiente proteína en la dieta.
4
El término obesidad mórbida hace referencia a pacientes que oscilan de un 50 a 100% ó 45 Kg. por encima de su
peso corporal ideal. Un valor superior a 39 en el IMR (Índice de Masa Corporal) es un indicativo coherente de este
tipo de obesidad.
Por otra parte, la ausencia de apetito como lo es la anorexia se define como la
inapetencia, las faltas de ganas de comer, que frecuentemente es de origen
psicológico, pero puede ser secundario a la acción del factor de necrosis tumoral
alfa por su efecto anoxigénico común en enfermos con cáncer y enfermedades
crónicas.
No basta la anamnesis para un adecuado diagnóstico nutricional y es ahí donde la
exploración física exhaustiva, en conjunto con el médico permitirá evaluar los signos
clínicos que se pueden expresar en la piel, cavidad oral y composición corporal, y
estudios paraclínicos La hipofunción y la atrofia son evidentes con síntomas como
debilidad, cansancio, letargo, falta de concentración, aumento de la susceptibilidad
a infecciones, etc., pero también con signos de disminución de la masa y fuerza
Muchas veces el paciente acude lleno de preguntas dispersas o influidas por la búsqueda
en internet, haciendo que esto lo confunda ya que existen diferentes patologías que tiene igual
semiología, aunque otros pacientes llegan en silencio o son incapaz de mantener una
comunicación verbal efectiva. Por su parte, el profesional de salud se enfrenta a un entramado de
información que no es fácil resolver ya que el paciente se alimenta por tradición, por instinto, con
lo que está disponible y con lo que más le gusta, entre muchas razones; pero casi siempre con
escaso conocimiento científico, dando como resultado un desbalance entre sus necesidades,
preferencias o posibilidades de alimentarse.
Para concluir puedo anotar que el encuentro del paciente con el personal de salud es el
fundamento de la atención en donde un buen estudio semiológico y 5propedéutico del paciente
puede determinar un adecuado método científico que lleva primero a una identificación de
riesgos, después a un diagnóstico, para culminar en una adecuada meta y plan terapéutico-
nutricional, evaluable en forma continua para la comprobación de resultados. Volver a la
educación clínica es una excelente alternativa, siempre que se adecúen los estudios paraclínicos
sean especializados o no; como los modernos signos bioquímicos y de imagen para integrar
mejores y más precisos diagnósticos. De allí puedo concluir que la semiología va de la mano con
la nutrición siendo de vital importancia para un buen diagnóstico y tratamiento adecuado y
oportuno a tiempo de nuestros pacientes.

5
La propedéutica es el conjunto de saberes necesarios para preparar el estudio de una materia, ciencia o disciplina.
Es la etapa previa a la metodología. En la mayoría de las instituciones educativas, los estudios de posgrado incluyen
un curso propedéutico.

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