Partidos Politicos
Partidos Politicos
Partidos Politicos
Índice
I. Introducción
IX. La Derecha
X. El Centro
XI. La Izquierda
XII. Conclusión
XIII. Bibliografía
I. Introducción
Sin embargo, en países que han tenido una época democrática, los partidos subsisten
pese a los embates y sus dirigentes y afiliados logran conservar posiciones de liderazgo. El
desarrollo de la democracia en América del Sur así lo ha mostrado1
Que los partidos expresen diferentes intereses sociales explica que ellos buscan y
consiguen lealtades partidarias que les permiten sobrevivir durante décadas e incluso bajo
regímenes autoritarios o totalitarios,
La estabilidad del sistema de partidos sólo es posible de concebir cuando éste ha
conseguido una alta legitimidad en la ciudadanía y ello se logra cuando refleja a todos los
estratos sociales, sin discriminaciones de ninguna índole
Así mismo, en su Artículo 2do. “Son actividades de los partidos políticos aquellas
destinadas a poner en práctica sus principios, postulados y programas, para lo cual podrán
participar en los procesos electorales y plebiscitarios en la forma que determine la ley
respectiva.”2
2
Biblioteca del Congreso Nacional de Chile BCN "TÍTULO I De los Partidos
Políticos, de sus Actividades Propias y de su Ámbito de Acción”
https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1107684
David Hume tiene una visión crítica de los partidos políticos, como elementos
divisores de la sociedad.
“Partidos y facciones son una realidad; pero su legitimación no es asunto universal,
ni siquiera hoy día. Considerarlos legítimos requiere un freno al bien público ante el
reconocimiento de derechos individuales: necesitan al hombre terrenal como aquel centro
para el cual la actividad política es hecha. Siendo necesario poner en palabras esta
tendencia, el rol del intelectual se entrecruza con el político y ambos van transfigurando el
ambiente en largos períodos, eligiendo a cada paso senderos en las bifurcaciones de su
actuar.”3
Los partidos políticos deben contar con un Órgano ejecutivo, un Órgano Intermedio
Colegiado, un Tribunal Supremo y Tribunales Regionales.
Un Órgano Ejecutivo e Intermedio Colegiado por cada región donde esté
constituido.
Los partidos deben tener estos organismos, aunque los podrían denominar de otra manera,
deberán efectuarse elecciones de la totalidad de los miembros de los órganos y renovarse
con una periocidad no superior a cuatro años. Además, sus integrantes no podrán ser electos
por más de dos periodos consecutivos en su mismo cargo.
Las actividades propias de los partidos políticos son aquellas destinadas a poner en
práctica sus principios, postulados y programas, para lo cual podrán participar en los
procesos electorales y en los plebiscitos.
2.- Cooperar a requerimientos de las autoridades electas, en las labores que estas
desarrollen.
13.- Realizar las demás actividades que sean complementarias a las anteriores y que
no estén prohibidas por la Constitución o las leyes.
V. Participación e integración a un partido político.
investigaciones.
Electoral.
Justicia.
Los partidos políticos deben juntar a personas con derecho a sufragio, 0,25%
equivalente al electorado que hubiese votado en la última elección de diputados, en cada
una de las regiones donde esté constituyéndose. Si esa cifra de electores es menor, los
partidos políticos deberán afiliar, en dichas regiones al menos a 500 electores. Se efectuara
mediante declaración suscrita por cada ciudadano, ante cualquier notario, oficina del
Registro Civil o ante el funcionario habilitado en el Servicio Electoral. Este servicio es
gratuito.
VI. Formación de un partido político
Es necesario tener al menos 100 ciudadanos con derecho a voto, que no pertenezcan
a otro partido o que no estén formando otro partido, extendiendo una escritura pública que
debe contener las menciones:
3.- Nombre del partido, y si tuviere, siglas, lema y descripción literal del símbolo.
4.- Declaración de principios del partido, que debe incluir su compromiso con el
5.- Estatuto del partido que debe establecer, entre otros, los principios del partido, su
estatutos de los partidos políticos podrán establecer los requisitos adicionales para la
IX. La Derecha
El Centro es el segundo polo de la visión política chilena, hasta los años previos al
golpe militar estaba construido principalmente por la Democracia Cristiana que, ocupaba
un papel de centro muy especial, era un polo de tipo alternativista, con alto grado de
ideologismo, remiso a las alianzas y coaliciones, lo que cristalizaba en gran forma el
conjunto del juego político y arriesgaba a su permanente polarización por desbordes o
radicalizaciones tanto de la Derecha como la Izquierda.
Tácita o expresamente la mayoría de la militancia y las autoridades oficiales de la
Democracia Cristiana, con algunas excepciones, fueron subsumidas en la estrategia de la
Derecha que llevó al golpe militar. Este partido fue declarado en receso por el Gobierno,
esto provoco un viaje hacia la oposición.
Hasta el Plebiscito de 1980 la Democracia Cristiana es el partido con la más sólida
estructura orgánica a lo largo del país y con los mayores grados de permisividad para actuar
en cuanto partido, lo que no lo excluye de sufrir importantes olas represivas.
Después del inicio del movimiento de protestas en 1983, la Democracia Cristiana
encabezaba la Alianza Democrática, con sectores de derecha minoritarios, de centro y de
izquierda socialistas. Cuyo principal significado es desde el punto de vista de la
Democracia Cristiana, el establecimiento de una alianza con sectores de izquierda
socialistas y desde el punto de vista de estos últimos, su integración a una alianza sin
condicionar a ello la participación del Partido Comunista.
La Democracia Cristiana sigue siendo un partido muy organizado y bien
estructurado nacionalmente, con una tendencia natural al liderazgo dentro de la Oposición a
la dictadura.
XI. La Izquierda
El tercer polo del sistema partidario estaba constituído por la Izquierda, su mayor
expresión ideológica-política en las últimas décadas había sido la coalición denominada
Unidad Popular, gobernante entre 1970-1973 y que había girado permanentemente en torno
al eje Partido Socialista-Partido Comunista. Al rededor se habían agrupado sectores del
Partido Radical y de grupos venidos de la Democracia Cristiana. La Izquierda fue la
principal derrotada y víctima del golpe militar de 1973. Así mismo sufrió un proceso de
represión, fragmentación, dispersión y clandestinización de especial intensidad en los
primeros años del régimen militar y en muchos casos, las dinámicas políticas se
desarrollaron en el exilio.
Por un lado, un proceso de renovación ideológico-política en muchos de sus
intelectuales y en cuadros y militantes, que afecta en forma desigual a las diversas
fracciones orgánicas. Esta renovación rescata algunas tradiciones del mundo socialista
chileno junto con su auto-crítica. Por otro lado, se producen reunificaciones y
recomposiciones que hasta mediados de 1989 se expresaban en dos grandes partidos
socialistas los llamados Partido Socialista de Núñez o Arrate y de Almeyda, por el nombre
de sus secretarios generales.
La reunificación de los dos partidos socialistas en un solo gran partido, facilitada
por la convergencia en la misma línea política, por las presiones electorales, por la
necesidad de definirse en torno a la participación en el primer gobierno democrático, por la
presión de los sectores de base, por la incorporación del MAPU 7 y de importantes
contingentes de Izquierda Cristiana, cristalizó en diciembre de 1989 y aparece como uno de
los puntos cruciales en la recomposición del sistema partidario post-dictadura
7
El Movimiento de Acción Popular Unitaria MAPU, fue un partido político de
izquierda chileno, 1969, por Rodrigo Ambrosio, vinculado al campesinado y a los
movimientos estudiantiles universitarios.
En cuanto al Partido Comunista, puede decirse que, pese a que la represión y la
clandestinidad lo afectaron, logró mantener una estructura y organización a nivel nacional.
Sin embargo, es, paradojalmente en relación a esta continuidad orgánica, quizás el partido
que ha sufrido la más profunda transformación respecto de su línea y práctica políticas.
En efecto, hasta 1980, el PC siguió su línea clásica de partido obrero, marxista-
leninista, de corte gradualista, enemigo de las tendencias “ultra izquierdistas” o militaristas,
a las que culpaba de la derrota de la Unidad Popular.
Es correcto afirmar que los partidos políticos tienen como finalidad contribuir al
funcionamiento del sistema democrático y ejercer influencia en la conducción del Estado,
para alcanzar el bien común y servir al interés nacional.
Realizando actividades destinadas a poner en práctica sus principios, postulados y
programas, participando en los procesos electorales y en los plebiscitos.
Los partidos políticos han ido adoptando perfiles diferentes con el fin de hacer frente a las
necesidades del momento y las exigencias de quienes lo promueven.
Para poder formar un partido político es necesario cumplir con un mínimo de requisitos,
también debe prevalecer el cumplimiento de los principios propios del partido político.