Mandil Del Aprendiz
Mandil Del Aprendiz
Mandil Del Aprendiz
Platón
La Real Academia de la Lengua Española, define al mandil como el “delantal de tela fuerte o cuero,
que se cuelga del cuello, en especial el que se usa en ciertas actividades profesionales”.
Si bien existen distintos diseños de mandil según el grado de conocimiento que se posea dentro de
la orden o bien dentro de una obediencia en particular, en términos prácticos, el mandil debería
tener medidas similares en sus distintas versiones según cada grado.
El mandil del aprendiz se compone de dos partes, un trozo rectangular y otro triangular ambos
confeccionados en piel blanca, generalmente de cordero, esta solapa triangular que se eleva sobre
la cintura, tiene por finalidad cubrir desde el estómago a la parte superior de las piernas de quien
lo porta.
Es evidente que, al comparar la extensión del mandil del aprendiz con el de los grados superiores,
este tiene un área de protección mayor. Esto se relaciona con la labor de la masonería operativa,
en donde el desarrollo del trabajo masónico era practico con el desbastar de la piedra bruta para
la construcción en general de catedrales durante la edad media.
La labor del aprendiz operativo, consistía en dar forma a las piedras brutas, para posteriormente
ser incorporadas a la gran obra mancomunada realizada por todo el taller o conjunto de hermanos
en las labores de construcción.
La extensión superior de este mandil en particular, la cual cubre un área mayor del cuerpo de
quien lo utiliza, tiene como fundamento la protección para con él, durante la realización de su
trabajo. Debemos recordar que el aprendiz masón ejecuta su trabajo con el cincel y el mazo por
medio de la fuerza y la inteligencia, probablemente en un principio con más fuerza que
inteligencia y es por ello que al desbastar la piedra bruta los trozos de la misma son lanzados hacia
el aprendiz con la misma fuerza con la cual utiliza sus instrumentos. En razón de ello, su
vestimenta debía protegerlo.
El mandil del aprendiz, está conformado como ya dijimos por dos trozos de tela uno rectangular y
otro triangular, ambos de piel de cordero blanco.
Llama la atención que la solapa que se extiende en el mandil en el nivel de aprendiz sea un
triángulo, cuyos tres lados representan la edad del grado y, por otro lado, considerar que en su
totalidad se compone de una pieza de cinco lados (triangulo más rectángulo), en tanto que la
suma de ambas piezas dan un total de siete. Encontramos entonces en el mandil los números
relacionados a la masonería especulativa en sus tres grados, 3, 5 y 7.
Respecto al color, generalmente se señala que el blanco representa la pureza en el actuar del
masón al pulir la piedra bruta, pero es de igual manera importante señalar que la luz es un color y
fue el QH:. Isaac Newton quien en el año 1665 descubrió que la luz del sol al pasar a través de un
prisma se dividía en varios colores conformando un espectro.
El logro de Newton fue el de poder descomponer mediante un método científico la luz (color
blanco), comprendiendo de esta forma que son 7 los colores los que la conforman, por ello la
totalidad de la luz se corresponde con este número. Los colores son; rojo, naranjo, amarillo, verde,
azul y violeta (https://es.wikipedia.org/wiki/Dispersi%C3%B3n_refractiva)
En este sentido la luz o el color blanco representaría la totalidad, la unidad, que descansa sobre un
material noble como lo es la piel de cordero, la cual simboliza la resurrección.
Posterior al sacrificio, deviene la luz que trae consigo el cordero, cordero que en forma posterior
es asumida por la religión católica como símbolo de la resurrección de Jesús.
Conclusiones:
Si bien es cierto que podemos relacionar el origen simbólico del mandil a la masonería operativa,
no es menos cierto señalar que su concepto arquetípico es mucho más antiguo y se condice con
elementos que al día de hoy son y siguen siendo utilizados por nuestra orden, los que dice relación
con los números, la luz y el color. Esto es coherente con las herramientas que posee el aprendiz
masón en su grado, quien, debemos recordar, no sabe leer ni escribir, ya que no es capaz de leer la
palabra del grado, pero si es capaz de distinguir colores, interpretar números y dirigir sus pasos al
oriente en busca de la luz. Son elementos que podemos comprender desde los sentidos y no
necesariamente desde la razón, ello implica que para avanzar en nuestro camino y en la
construcción del templo interior, debemos desentrañar la información que en ellos se encuentra, y
que necesariamente exige un examen en conjunto tanto de la materialidad como desde la
racionalidad.
¿existen más interpretaciones del mandil del aprendiz además de las relacionadas con el trabajo
de pulir la piedra bruta?, ¿por qué no usamos mandil durante los trabajos en cámara, los cuales
son el equivalente hoy a los trabajos en taller que realizaban los masones operativos?, ¿el mandil
se debe mantener blanco o bien se debe dar cuenta del desgaste como muestra del trabajo
realizado?
Rodrigo Sánchez S
1º Grado
Valle de Santiago
Bibliografía
1) https://www.researchgate.net/publication/350617225_La_primavera_y_el_eterno_retorn
2) https://encyclopaedia.herdereditorial.com/wiki/P%C3%A1gina_principal
3) El libro del Aprendiz, Oswald Wirth
4) “Aspectos Ocultos del simbolismo del Mandil y las herramientas del aprendiz”, Del 2º Gran
Vigilante, fundador y ex miembro honorario de la R:. L:. Hermes Nº 52