El Embarazo Aspectos Biopsicosocial
El Embarazo Aspectos Biopsicosocial
El Embarazo Aspectos Biopsicosocial
SEMESTRE:
I CICLO
DOCENTE:
MG. FIDEL REQUENA
MATERIA:
PSICOLOGIA DEL DESARROLLO
INTEGRANTES:
A lo largo de estas 4 semanas, el feto crece hasta los 7 cm y llegará a pesar unos 8-14
gramos, aproximadamente.
A final del tercer mes de gestación, el feto llega a alcanzar un peso de entre 8 y 14
gramos y mide unos 6-7 cm, aproximadamente. Los órganos del futuro bebé ya están
formados, pese a que aún deben madurar y terminar de desarrollarse.
También se estarán formando los genitales, pero en este momento aún es pronto como
para que el especialista pueda confirmar el sexo del bebé con una ecografía.
Por su parte, la embarazada ya habrá cogido algo de peso y, seguramente, ya note cómo
ha aumentado su barriga.
Durante el cuarto mes de embarazo el feto se cubre de una capa de vello muy fino
denominado lanugo. Este vello le sirve al bebé como medio de protección contra el frío y,
por eso, el lanugo le recubre prácticamente todo el cuerpo.
Por otro lado, es importante mencionar que, en torno a la semana 15 de embarazo, sus
músculos faciales ya pueden realizar el movimiento de succionar y puede chuparse el
dedo. El aumento de tamaño del feto durante este cuarto mes de gestación hace que el
vientre de la mujer empiece a aumentar de tamaño y, por tanto, que ya sea bastante
evidente el embarazo de manera externa.
Además, a la embarazada le costará más dormir, hacer ciertos movimientos como atarse
los cordones o agacharse a recoger cosas del suelo. Adicionalmente, es probable que
haya más hinchazón en pies y tobillos.
Por otro lado, su piel va adquiriendo cada vez un aspecto más liso y sonrosado, debido a
que sigue la acumulación de grasa subcutánea. Pese a que el bebé está prácticamente
formado, sus pulmones aún no están maduros y, si tuviera lugar un parto prematuro, no
podrían respirar por sí mismos.
El cansancio durante este último período del embarazo también es bastante normal. Esto
ocurre no solo por el aumento de peso, que suele fatigar mucho, sino porque las
dificultades para dormir y descansar ya serán notables.
Se recomienda tomar mucho calcio, hierro, ácido fólico, proteínas y vitamina C. El estado
de gestación es muy avanzado, así que la embarazada debe cuidarse mucho.
Al finalizar el noveno mes de embarazo, el feto puede medir cerca de 50 cm y, su peso,
será de unos 2500 g de media. Durante este periodo, el bebé encaja su cabecita en la
pelvis materna, preparándose para el parto.
La piel del bebé ya no está arrugada y es más suave, debido a la grasa que se ha ido
acumulando debajo de ella y a la desaparición, casi completa, del lanugo. El color de la
piel ya no es tan rojo, sino que empieza a sonrojarse y se asemeja más al color definitivo
que tendrá en el momento del parto.
Como hemos comentado, desde hace ya algunas semanas, los movimientos del bebé son
menores debido a su aumento de tamaño y de peso, pero esto no significa que la
embarazada no sienta la presencia de su futuro hijo. De hecho, no debe pasar ni un solo
día en que no se sienta al bebé. No obstante, es habitual que ahora los movimientos se
sientan más bruscos, como si fuesen patadas, ya que el bebé tiene muy poco espacio
para moverse.
Este mes puede hacerse especialmente largo y molesto para la madre, aunque lo
vive con mucha ilusión: el parto se acerca y son muchas las ganas de verle la
carita al bebé.
Si, a partir de la semana 42, el bebé no ha visto la luz, lo habitual es que el especialista
encargado del seguimiento del embarazo provoque el parto, ya que el futuro hijo o hija
está listo para nacer y puede suponer un riesgo que se quede más tiempo del necesario
en el vientre de la madre.
El control periódico del embarazo desde el primer trimestre permite evitar muchos
problemas para la mamá y el bebé, tanto en el momento del parto como más adelante.
La manera más sencilla de hacer los controles es tomar contacto con el centro de salud
más cercano y visitarlo regularmente. Allí se le abrirá a la embarazada una historia clínica
y también se le entregará el "Carnet Perinatal", donde se anota el resultado de cada
control: el peso y la talla de la madre, la altura uterina, la tensión arterial y las vacunas
aplicadas, entre otros datos.
PRIMERA CONSULTA:
Primero el médico redactará el historial clínico completo: te preguntará sobre tus hábitos
de vida, tipo de trabajo, si has tenido embarazos anteriores y como fueron, si padeces
enfermedades o alergias para descartar patologías hereditarias. Debe tenerse en cuenta
el historial médico del padre, si se sabe, por si presenta alguna enfermedad que pueda
afectar al niño. Además, también se anotará el día de inicio de tu
última menstruación para determinar la fecha probable del parto.
Además de pesarte y pedirte analíticas, te harán una revisión ginecológica para ver y
medir la altura del fondo uterino. Podrás escuchar el latido del feto.
Otro control rutinario en el que te pesarán, tomarán la tensión y controlarán el latido fetal.
Si eres Rh negativo, te suministrarán una inyección de gammaglobulina anti-D para
prevenir que generes anticuerpos al final del embarazo y durante el parto.
Las visitas al ginecólogo serán cada semana, te efectuarán registros, que son
monitorizaciones fetales con un aparato que controla el latido cardíaco y las
contracciones uterinas mediante unas correas que se atan a la barriga materna, las
sesiones suelen ser de 30 minutos. También te exploran el canal vaginal para ver si se va
produciendo dilatación.
El momento del parto se acerca, pronto podremos ver la cara de nuestro bebé.
Video Ilustrativo:
https://www.youtube.com/watch?v=SLgqxChD3TQ
https://www.youtube.com/watch?v=C0QMQ0zSDiw