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Cuentos de Terror

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Cuentos de terror

Autores sergio yahir solano urias

Escuela Secundaria Tecnica 41


Cuentos de terror
Indice
Prologo ----------------------------------------------------- 4
Golpes en el coche -------------------------------------- 5
El loco de debajo de la cama ------------------------- 7
Desafio del cementerio -------------------------------- 9
Prologo
Inspirado en las obras y
peliculas de terror, suspenso
y ficcion.como los autores de
los cuentos se apoyaron

Golpes en el coche
Autor; Alvin Schwartz,
escrito en 1984.
Ilustrado; Imprenta Nacional

Una familia, compuesta por dos pequeños y sus padres,


viajaban por carretera hacia [....] cuando el coche se les
averió. Los padres salieron a buscar ayuda y, para que los
niños no se aburrieran, les dejaron con la radio
encendida. Cayó la noche y los padres seguían sin volver
cuando escucharon una inquietante noticia en la radio: un
asesino muy peligroso se había escapado de un centro
penitenciario cercano a [....] y pedían que se extremaran
las precauciones.
Las horas pasaban y los padres de los niños no
regresaban. De pronto, empezaron a escuchar golpes
sobre sus cabezas. “Poc, poc, poc”. Los golpes, que
parecían provenir de algo que golpeaba la parte de arriba
del coche, eran cada vez más rápidos y más fuertes.
“POC, POC, POC”. Los niños, aterrados, no pudieron
resistir más: abrieron la puerta y huyeron a toda prisa.
Solo el mayor de los niños se atrevió a girar la cabeza
para mirar qué provocaba los golpes. No debería haberlo
hecho: sobre el coche había un hombre de gran tamaño,
que golpeaba la parte superior del vehículo con algo que
tenía en las manos: eran las cabezas de sus padres. Solo
el mayor de los niños se atrevió a girar la cabeza para
mirar qué provocaba los golpes.

El loco de debajo de cama


Esta es la historia de una joven de [....], llamémosla Sara.
De pequeña, Sara tenía miedo a la oscuridad, hasta que
adoptó a un perro que le hacía compañía. Durante años,
Sara dormía tranquila porque sabía que bajo la cama
estaba su perro, y si tenía miedo solo tenía que extender
la mano: entonces, el perro empezaba a lamerla hasta
que se quedaba dormida.

Así pasaron los años y Sara se hizo adulta. Una noche,


en la radio, escuchó que cerca de [....] estaba en busca y
captura un asesino muy peligroso. Sara, acompañada de
su perro, no tenía miedo: se metió en la cama, extendió la
mano hacia el borde y el perro, como todas las noches,
empezó a lamerla.

Durmió del tirón y, al despertar, le sorprendió que el perro


no se hubiera cansado de lamerle la mano en toda la
noche. O eso creía: al abrir los ojos, encontró al perro
muerto sobre el suelo de la habitación. Bajo la cama, un
hombre seguía lamiéndole la mano.
El desafio del cementerio
Varias adolescentes habían ido a pasar la noche en casa de una amiga,
aprovechando que sus padres estaban de viaje. Cuando apagaron las
luces se pusieron a hablar de un viejo al que acababan de enterrar en un
cementerio cercano. Se decía que lo habían enterrado vivo y que se le
podía escuchar arañando el ataúd, intentando salir.

Una de las chicas se burló de aquella idea, así que las otras la desafiaron
a que se levantara y fuera a visitar la tumba. Como prueba de que había
ido, tenía que clavar una estaca de madera sobre la tierra de la tumba. La
chica se fue y sus amigas apagaron la luz otra vez y esperaron a que
volviera.

Pero pasó una hora, y otra más, sin que tuvieran noticias de su amiga. Se
quedaron en la cama despiertas, cada vez más aterradas. Llegó la
mañana y la chica no había aparecido. Aquel mismo día, los padres de la
chica regresaron a casa y, junto al resto de padres, acudieron al
cementerio. Encontraron a la chica tirada sobre la tumba… Muerta. Al
agacharse para clavar la estaca en el suelo, había pillado también el bajo
de su falda. Cuando intentó levantarse y no pudo, creyó que el viejo
muerto la había agarrado. Murió del susto en el acto.

FIN

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