Traumatismo Encefalocraneano
Traumatismo Encefalocraneano
Traumatismo Encefalocraneano
Se define por Traumatismo encefalocraneano a una lesión en el encéfalo y/o envolturas a causa
de una descarga de energía directa o secundaria a la inercia (1).
Fisiopatología intracraneana:
Esto quiere decir que el volumen de cualquiera de los tres causará la disminución de volumen de
los otros dos.Estos elementos además se relacionan en otra ecuación que se desprende de la
hipótesis de Monroe-Kelly: PPC "H PAM – PIC, en que la presión de perfusión cerebral (PPC) es el
resultado de la resta de la presión arterial media (PAM) y la presión intracraneana (PIC). De esta
ecuación se deduce que aumentos de la PIC o disminuciones de la PAM generan un descenso de
la PPC con el consiguiente daño por isquemia del tejido cerebral. Se consideran valores adecuados
de PPC en adultos de 70 mm de Hg (1).
Se clasifica dependiendo del estado grave en el que se encuentra el paciente, y esto se puede
determinar a través de la escala de glasgow (ECG):
Al evaluar a un adulto con antecedentes de TEC, la historia clínica es crucial; un análisis detallado
de las circunstancias exactas del accidente guiará el tratamiento inicial del paciente adulto con
TEC. Es necesario conocer la altura de la caída, el tipo de superficie, la posición del paciente, el
estado de conciencia inicial y posterior; esta historia permite al médico sospechar posibles
lesiones graves. En un accidente de vehículo es necesario conocer la velocidad del teléfono móvil,
la posición del adulto, el uso de cinturones de seguridad; Además, la salud de los acompañantes
es interesante. Deben identificarse las condiciones médicas que pueden estar asociadas con un
traumatismo (p. ej., hemofilia). Finalmente, se debe preguntar a los compañeros y al equipo de
traslado sobre antecedentes de convulsiones, cambios en el nivel de conciencia durante el
traslado, uso de sedación, vómitos, dolor de cabeza e irritabilidad (1). La evaluación inicial del
examen físico debe ser lo más precisa posible porque sirve como punto de referencia para futuras
evaluaciones patológicas, que pueden evolucionar rápidamente con el tiempo. De acuerdo con la
guía de evaluación ATLS, siempre se prioriza el manejo de la vía aérea, la inmovilización de la
columna, la ventilación, la circulación y un examen físico general completo, con especial atención
a las lesiones abiertas de cráneo, fracturas, síntomas de fractura de cráneo (hemorragia de oído,
hemorragia periorbitaria). y/o contusión retroauricular). Una vez evaluados y establecidos estos
parámetros, se debe evaluar el estado de conciencia del paciente; el método más utilizado y
común es la escala de coma de Glasgow (ECG). El método publicado por Teasdale y Jennett en
1974 evalúa el nivel de conciencia en una escala de 3 a 15 puntos basada en el estado de alerta, la
respuesta verbal y la respuesta motora. Luego, si se sospecha una lesión medular, se debe realizar
un breve examen neurológico, en el que se evalúa la reacción pupilar, el déficit motor y/o
sensitivo, el reflejo plantar, el tono muscular del esfínter. Todos estos parámetros deben
evaluarse varias veces para que los signos de deterioro neurológico puedan investigarse a tiempo
(1).
Para un adulto, evaluar el estado de conciencia puede ser una tarea difícil; Hay que tener en
cuenta que tienen un comportamiento limitado, un lenguaje en desarrollo y un miedo innato a los
extraños. Esto es cierto para la mayoría de los pacientes de TEC que permanecen despiertos; Se
puede obtener información valiosa simplemente observando a un adulto con sus compañeros
durante la realización de la historia clínica. Todos los movimientos dolorosos de un niño despierto
deben retrasarse. En lactantes con fontanela abierta, la palpación de esta fontanela proporciona
información sobre la presión intracraneal (1).
Estudios complementarios
La resonancia magnética cerebral es una prueba que tiene poca indicación en la fase aguda de la
TEC, aunque puede distinguir mejor las lesiones más pequeñas, como el daño axonal difuso,
especialmente en el tronco encefálico. También es mejor que la TC para detectar pequeñas
hemorragias extra axiales y contusiones hemorrágicas que pueden pasar desapercibidas en la TC.
Sin embargo, debido a su baja disponibilidad en nuestra realidad, no será analizada en
profundidad en este artículo (1).
CONCLUSION:
Referencia: