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Formacion P2

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Universidad Tecnológica de Culiacán

Agricultura Sustentable y Protegida

Francisco Campaña Beltran


Silverio Molina
Edgar Paul Quintero

Formación Sociocultural II
Proyecto 2do Parcial
Monocultivo de maíz
Descripción de la problemática

El monocultivo es una forma de agricultura que se basa en la siembra de un solo


tipo de cultivo en un campo. En cambio, un sistema de policultivo implica que en un
campo se siembran dos o más cultivos al mismo tiempo. Cuando se habla de
monocultivo, es importante señalar que, aunque cada año se planta un cultivo
diferente en una parcela determinada, el concepto de un único cultivo en el campo a
la vez se sigue denominando “monocultivo”.

Lejos de lo que podría pensarse, no son los grandes productores del país, asidos al
modelo de agroexportación, de monocultivos, los que proveen de maíz para la
alimentación humana en México, sino los pequeños productores que aportan el 50%
del maíz blanco que consumimos, y que proviene de unidades de producción que se
desarrollan en pequeñas superficies de temporal con variedades nativas.

Un número creciente de autoridades locales, comités de ciudadanos e


investigadores independientes piden un modelo de producción agrícola más
respetuoso con el medio ambiente, la salud de los ciudadanos, la belleza de los
paisajes y su significado cultural y social. Es precisamente en estas áreas donde se
registran las primeras victorias contra el monocultivo intensivo, obligando a frenar su
avance y retroceder ante la fuerte oposición de las comunidades locales.

Consecuencias ambientales de los monocultivos incluyen cambios al ciclo del agua,


disminución de la variabilidad genética de las especies y amenazas a la
biodiversidad. La mejor opción para el medio ambiente sería implementar sistemas
agrícolas diversificados.

El uso intensivo de la tierra mediante los monocultivos acentúa los efectos del
cambio climático, al favorecer la degradación de los suelos, particularmente en
áreas costeras bajas, deltas de los ríos, tierras secas y áreas de permafrost.

Esos efectos se derivan de las muy importantes sinergias surgidas de ambos


procesos por estar muy ligados entre sí, ya que mientras más sean los efectos del
cambio climático mayor será la degradación de la tierra, y si seguimos degradando
la tierra contribuiremos mayormente al cambio climático.

No obstante lo anterior, durante décadas la investigación de instituciones de


educación superior ha sido incompatible con el entorno social, cultural y ambiental
de las áreas rurales, porque “abrazó el paradigma de la agricultura industrial,
basada en agroquímicos, plaguicidas, semillas mejoradas, maquinaria y riego,
mediante la cual los agrónomos orientaron sus esfuerzos a convertir el campo en
pisos de fábrica con monocultivos agrícolas y ganaderos”.

Análisis del tema

El monocultivo de maíz es una práctica agrícola común en muchas regiones del


mundo, y particularmente en América Latina. Consiste en el cultivo extensivo de una
única variedad de maíz en grandes extensiones de tierra, en detrimento de la
diversidad de cultivos. Aunque esta práctica puede brindar beneficios económicos a
corto plazo, también plantea una serie de problemas ambientales, sociales y
económicos a largo plazo que deben ser considerados y analizados.

En primer lugar, el monocultivo de maíz tiene un impacto negativo en la


biodiversidad. Al centrarse en una sola variedad de maíz, se limita la variedad de
plantas y animales presentes en los ecosistemas agrícolas. Esto puede resultar en
la pérdida de hábitats naturales, la disminución de la diversidad genética de las
especies y la reducción de la resiliencia de los ecosistemas ante enfermedades y
plagas.

Además, el monocultivo de maíz a menudo requiere el uso intensivo de


agroquímicos, como fertilizantes y pesticidas, para maximizar la producción. Estos
productos químicos pueden contaminar los suelos, los cuerpos de agua y afectar
negativamente la salud de los trabajadores agrícolas y las comunidades cercanas.
También contribuyen al problema global de la resistencia a los pesticidas y al
deterioro de la calidad del suelo a largo plazo.

Otro aspecto preocupante es la dependencia económica que el monocultivo de maíz


puede generar. Al concentrar la producción en un solo cultivo, los agricultores se
vuelven más vulnerables a las fluctuaciones de los precios internacionales y a los
cambios en la demanda del mercado. Esto puede tener un impacto negativo en la
seguridad alimentaria y en la economía local, especialmente si los precios del maíz
se desploman o si se enfrenta una plaga o enfermedad que afecte la producción.

El monocultivo de maíz también puede tener efectos sociales negativos. La


concentración de tierras y recursos en grandes explotaciones agrícolas a menudo
desplaza a pequeños agricultores y comunidades rurales, generando desigualdades
y conflictos. Además, la mecanización y la intensificación del trabajo agrícola
pueden llevar a la pérdida de empleos en el campo y a la migración hacia áreas
urbanas en busca de oportunidades laborales.

Para abordar estos desafíos, es fundamental fomentar una agricultura más


diversificada y sostenible. Promover la rotación de cultivos, la agroecología y el uso
de prácticas agrícolas regenerativas puede ayudar a reducir la dependencia del
monocultivo de maíz y sus impactos negativos. Además, es importante apoyar a los
pequeños agricultores y fomentar la participación de las comunidades locales en la
toma de decisiones relacionadas con la agricultura.

En conclusión, si bien el monocultivo de maíz puede ofrecer beneficios económicos


a corto plazo, también conlleva una serie de problemas ambientales, sociales y
económicos a largo plazo. Es necesario repensar y transformar nuestros sistemas
agrícolas hacia enfoques más sostenibles y diversificados, que promuevan la
resiliencia, la equidad y la preservación de los recursos naturales para las
generaciones futuras.

Planteamiento de una posible solución

Para poder solucionar el problema de monocultivo, es necesario darles alternativas


a los productores, las cuales no afecten la sustentabilidad económica de sus
operaciones al igual que darles incentivos

Un ejemplo de la lucha contra los monocultivos en la Unión Europea es el “greening”


o pago verde, que consiste en entregar una subvención anual a los agricultores que
incorporen costumbres respetuosas con el planeta, entre la que se destaca la
diversificación de cultivos.

Una respuesta es la diversificación de cultivos, un conjunto de prácticas orientadas


a restaurar los ecosistemas de las tierras de cultivo. Aunque amplía, la idea en
realidad es simple: cuando se logra tener diferentes tipos de plantas, las tierras de
cultivo son más saludables y productivas; también, puede contribuir a hacer frente a
desafíos como el crecimiento demográfico, el cambio climático y la inseguridad
alimentaria y nutricional.

Aunque suene obvio, la mejor alternativa para los monocultivos son los policultivos,
como se mencionó previamente, es decir la rotación o distribución de diferentes
tipos de cultivos. Se trata de combinar diferentes especies para que se
complementen y aprovechen mejor los nutrientes del suelo, como es en el caso de
la milpa, la práctica tradicional donde los cultivos se ayudan entre sí.

El policultivo es una práctica agrícola en la que se cultiva más de una especie de


cultivo en ecosistemas naturales. El enfoque es completamente opuesto al
monocultivo y se ha convertido en un truco agrícola muy popular en todo el mundo.
Es conocido por sus beneficios para la salud y el medio ambiente. Más aún, existen
diferentes tipos de policultivo, como la permacultura, el cultivo de cobertura y el
cultivo intercalado.
El policultivo tiene la capacidad de controlar malezas y plagas, y no hay necesidad
de usar químicos adicionales. No estaría mal decir que el policultivo es una opción
sostenible. En la sección a continuación, compartimos información sobre diferentes
prácticas asociadas con la agricultura de policultivo, como;

● Cultivo intercalado: se trata de cultivar más de dos plantas y cultivos en


superposiciones temporales y espaciales. Es una práctica muy beneficiosa
con tierras limitadas, y las leguminosas son el ejemplo más común.
● Cultivo de cobertura: se trata de cultivar junto con otras plantas. Para ilustrar,
las leguminosas y las gramíneas son ejemplos típicos de cultivos de
cobertura y son adecuados para prevenir las posibilidades de erosión del
suelo. Además, mejora la retención de agua y suprime las malas hierbas.
● Cultivo en franjas: se trata de cultivar diferentes plantas en hileras
intercambiables. No mezcla diferentes especies de plantas, pero agiliza el
ciclo de nutrientes y reduce las posibilidades de erosión del suelo.

Hay diferentes funciones del policultivo, como un mejor control de enfermedades


porque reduce las posibilidades de enfermedades de las plantas ya que se usan
menos pesticidas. En segundo lugar, ayuda con el manejo de plagas porque son
menos predominantes en dichos campos. Sin olvidar que el policultivo ayuda a
controlar mejor las malas hierbas. En resumen, ¡el policultivo es extremadamente
efectivo y sostenible.

Porque o en base a qué eligieron una posible solución

Nosotros elegimos principalmente la opción de “Cultivos de cobertura”, debido a que


puedes incluir una diversificación de cultivo, entre las temporadas altas donde se
siembra el monocultivo, lo cual aporta varios beneficios de tener diversidad de
cultivos, y al mismo tiempo, es una práctica en la cual, los productores pueden
seguir sembrando en teoría un monocultivo.

Otra opción que elegimos que puede ser implementada es el policultivo, pero en un
modo más ligero que el policultivo tradicional, ya que se puede sembrar entre el
monocultivo, y aporta nutrición y protección.

Pero al final, todas estas estrategias son para mejorar la fertilidad del suelo, ya que
ha sido degradado por mal manejo de la tierra como en el caso del monocultivo.

Un suelo fértil tiene la capacidad de proporcionar el agua y nutrientes necesarios


para las plantas que en él habitan. Por tanto, la fertilidad del suelo en la agricultura
es algo muy a tener en cuenta para todos aquellos que se dedican al campo.
No solo las plantas se ven beneficiadas por ello, existen microorganismos y otros
organismos vivos, cuya aportación es una pieza más del engranaje, y sin los cuales
todo el ecosistema se vendría abajo. Es por ello que conseguir mantener la fertilidad
en niveles óptimos es lo que dará buenos resultados, tanto a corto como a largo
plazo.

Como característica física está la capacidad del suelo de brindar condiciones


estructurales adecuadas para el sostén y crecimiento de los cultivos. En los estudios
de fertilidad física de suelos se estudian aspectos como la estructura, espacio
poroso, retención hídrica, densidad aparente y resistencia a la penetración.

De Medio Ambiente Y Recursos Naturales, S. (s. f.). Monocultivos agrícolas y

ganaderos, incompatibles con el entorno s. . . gob.mx.


https://www.gob.mx/semarnat/articulos/monocultivos-agricolas-y-ganaderos-

incompatibles-con-el-entorno-social

colaboradores de Wikipedia. (2023). Monocultivo. Wikipedia, la enciclopedia

libre. https://es.wikipedia.org/wiki/Monocultivo

Saud, D. (2021). Monoculture farming: pros and cons explained. Folio3

Dynamics Blog. https://dynamics.folio3.com/blog/monoculture-farming/

Abel.Diaz. (2018, 26 marzo). La importancia de la fertilidad del suelo. Viveros

california. https://www.viveroscalifornia.com/curiosidades/plantas-de-fresas-

fertilidad-suelo

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