El Gran Pajatén
El Gran Pajatén
El Gran Pajatén
Situado a 2 850 m.s.n.m., en el Parque Nacional del Río Abiseo, en el distrito de Huicungo,
provincia de Mariscal Cáceres, el Gran Pajatén está considerado como el máximo
patrimonio arqueológico de San Martín y declarado patrimonio cultural de la nación
mediante la Ley N° 23632.
El sitio arqueológico fue descubierto en 1963 por un grupo de gente de Pataz en su afán por
encontrar tierras propicias para la agricultura. Las ruinas se caracterizan por sus estructuras
circulares, que poseen diámetros diversos, de entre 2 y 14 metros, y que también presentan
enormes escalinatas de piedra. En total son 25 las estructuras, sin tomar en cuenta terrazas
de sostenimiento, así como construcciones pequeñas destruidas
El primer edificio consiste en una estructura de base circular, cuyo diámetro mide 13,50 m
de diámetro y posee una escalinata adosada a la parte frontal., conformada por 10
escalones. Una cornisa de lajas pizarrosas divide al edificio en us parte media. En la parte
inferior encontramos figuras antropomorfas y cabezas clavas, en tanto que en la parte
superior la ornamentación es de grecas escalonadas y representaciones geométricas. En la
parte interior del monumento arqueológico hallamos 10 figuras humanas en cuclillas con
las manos extendidas.
Junto al edificio primero, encontramos otro con 9,20 m de diámetro y también está lleno de
decorados, aunque sus dibujos son más reducidos y presenta más variedad.
LOS PINCHUDOS
Al igual que El Gran Pajatén, Los Pinchudos pertenecen al Parque Río Abiseo, y están
ubicados a 2 800 m.s.n.m. en medio de una espesa selva. Los Pinchudos están integrados
por siete mausoleos, cuyos muros fueron construidos con lajas de pizarra. Los elementos
iconográficos son muy similares a los del Gran Pajatén. En la parte superior del muro se
hallan incrustadas las tallas antropomorfas, que representan a varones desnudos, con
grandes genitales. Los brazos y manos reposan en el pecho. Las piernas se encuentran un
tanto flexionadas. Según Federico Kauffman Doig, “es un patrón universal en la
iconografía andina…una forma emblemática empleada para vincular la figura humana a la
del felino, con sus patas encogidas”.
La Puerta del Sol está tallada en un solo bloque de andesita de unas 10 toneladas de peso. Lo que
hace a este monumento el más célebre de Tiahuanaco es su friso con relieves, donde está
representado el más famoso ejemplo de la iconografía típica del Horizonte Medio (600 d.C.- 1000
d.C.). Se trata del Dios de los Báculos, una deidad representada de frente con un extraño tocado
que le da un aspecto solar. Sobre sus mejillas caen lágrimas y en las manos sostiene dos báculos
que están adornados con cabezas de cóndor y de puma.
MEDIO GEOGRÁFICO
La Cultura Chachapoya se desarrolló entre los años 800 y 1,470 d.c, en
la región nororiental del Perú, asentada en el departamento de
Amazonas, abarcando territorios que pertenecen al Bosque Seco
Ecuatorial y la Selva Alta, en una extensión de casi 300 km de longitud
y una altitud que varía entre los 900 y 4,300 msnm, con una rica
variedad de microclimas debido a la influencia de los vientos que traen
las lluvias desde la cuenca amazónica. Su límite norte fue la laguna
Pomacochas, en el departamento de Amazonas, su límite sur fue la
provincia de Pataz, en el departamento de La Libertad, por el este lo fue
el río Huallaga, y por el oeste el río Marañón.
La Cultura Sicán es el nombre que el arqueólogo japones Izumi Shimada, Fundador del Proyecto
Arqueológico Sicán, le dio a una cultura que precedió a la cultura Inca en lo que hoy es la costa
norte del Perú aproximadamente entre los años 700-1375 d.c . El termino Sican significa Templo
de la Luna. A la cultura Sicán se le conoce también como cultura Lambayeque, por el nombre de la
región donde se encuentra, pero aún existe controversia sobre si las dos son culturas diferentes.
La cultura Sicán se divide en tres períodos basándose en los cambios culturales.
Naylamp
Naylamp, Naymlap o Ñañlap es un personaje mitológico del Antiguo Perú. De acuerdo a
un relato recogido por cronistas españoles, provino del mar, trayendo la civilización a las
tierras lambayecanas (norte del actual Perú), donde fundó un reino o señorío en el que se
sucedieron varios reyes (cultura lambayeque), antes de ser conquistado por los chimúes. Se
le representa con rasgos antropomorfos y zoomorfos combinados (preferentemente de ave).
Cultura recuay
Cronología: 200 - 600
La cultura recuay es una cultura preincaica que se desarrolló en la sierra del actual
departamento peruano de Áncash. Corresponde a la etapa llamada Desarrollos Regionales,
entre los 200 d.C. hasta los 600 d.C. Se le ha denominado también como cultura huaylas o
cultura santa.
Piquimachay (Piki machay: ‘cueva de las pulgas’ en quechua sureño) es una cueva
ubicada a unos 19 km al norte del centro de la ciudad de Ayacucho, unos 450 km al sureste
de Lima, capital del Perú. Se halla situada en la margen derecha del río Pongora, en el
distrito de Pacaycasa de la provincia de Huamanga del departamento de Ayacucho. Tiene
una longitud aproximada de 60 metros.
Esta cueva, al igual que la de Jayhuamachay, fue estudiada por el arqueólogo
estadounidense Richard MacNeish. En el estrato más profundo, que denominó Pacaicasa
(20 000 a 13 000 a. C.), encontró artefactos líticos de presunta fabricación humana, junto
con restos óseos de animales ya extinguidos, cuya antigüedad calculó en 20 000 a. C.,
considerándolas como las evidencias más antiguas de la presencia humana en el antiguo
Perú, del período lítico. Sin embargo, otros arqueólogos consideraron que no constituyen
indicios suficientes para afirmar la existencia del hombre de Pacaicasa. Es a partir del
segundo nivel, Ayacucho (13 000 a 11 000 a. C.), donde se hallan algunas evidencias más
confiables de la presencia del hombre a fines del Pleistoceno. Los estratos superiores de la
cueva pertenecen al período arcaico.
Es así como a seis leguas del Cusco, en el paraje Tambotoco de Pacaritambo, en un cerro
llamado Pumaorqo, habían tres ventanas o cuevas. De la central “capac toco” (ventana rica)
salieron nuestros ancestros: los cuatro Hermanos Ayar. Cada uno de ellos, al igual que sus
esposas, tenían poderes y habilidades especiales para iniciar la gran misión.
La primera pareja estaba constituida por Mama Guaco, la guerrera, una mujer hermosa y
fuerte que llevaba un aybinto (especie de onda) y que con un solo golpe podía ocasionar
grandes derrumbes. Su compañero Ayar Cachi, era el más dominante y belicoso de los
hijos de Viracocha, cuentan que tenía la fuerza de un rayo.
Ayar Uchu, en cambio, era místico y religioso, podía comunicarse con Viracocha a través
del viento, la tierra, el fuego y el agua;mientras que Mama Cora guardaba y transmitía los
secretos de las plantas medicinales que su padre les legó.
La tercera pareja estaba constituida por Mama Rawa, mujer semidiosa, alegre y más
laboriosa de las cuatro hermanas, podía hacer música con su tinya, sabía tejer y guardaba en
cada textil la memoria y la historia de su padre Viracocha;mientras que Ayar Aucca, brazo
derecho de Manco Capac, llevaba una pechera de plumas de guacamayo y tenía una fuerte
conexión con los espíritus ancestrales.
Cerraba el grupo el mayor de los Ayar y el de más autoridad Ayar Manco Capac, quien
tomó ese nombre porque salieron de la ventana de Capac-Toco y quiere decir “rico”. Ayar
Manco era astuto, sabio y un gran estratega. Traía consigo un halcón llamado Indi, al cual
todos veneraban y temían. Su esposa Mama Ocllo tenía la ternura de una madre, pero a la
vez con su mirada podía cautivar a cualquier fiera. Era la encargada de preservar las
familias.
La educación a inicios de la época incaica, era informal y suponía una enseñanza empírica
basada en las experiencias de los integrantes del Ayllu. Inca Roca, uno de los gobernantes
del Tahuantinsuyo, estableció, en su Administración (alrededor de 1350 d.c), los
Yachayhuasi o escuelas reservadas a la nobleza. En estos sitios, la educación era formal,
rigurosa y estructurada en donde los Amautas, los grandes maestros o sabios, podían
enseñarles todos sus conocimientos.
inca Urco podría ser considerado como el noveno gobernante de la etnia inca, sin embargo el
puesto lo ocupa Pachacútec. Inca Urco fue el hijo preferido de Viracocha Inca, y durante su
gobierno (siempre bajo la tutoría de su padre) escapó junto a él ante la inminente llegada del
poderoso ejército chanca. Probablemente fue el inca más detestado por su pueblo, pero lo que se
entiende con certeza es que hizo el gobierno más nefasto en la historia inca.