Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Sujetador Digital

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 16

ABRIL

Domingos: 12:30 h
Sujetador, 1920 Duración: 30 min
Por: Victoria Calandra Reula Asistencia libre
hasta completar aforo

A
Texto
Victoria Calandra Reula es licenciada en Historia por
la UCM y Máster Universitario en Métodos y Técnicas
Avanzadas de Investigación Histórica, Artística y Geo-
gráfica por la UNED Es miembro del Cuerpo Facul-
tativo de Conservadores de Museos desde mayo de
2021 y desempeña su labor profesional en el Área de
Investigación y Formación del Instituto del Patrimonio
Cultural de España.

Coordinación
M.ª del Mar Belver y M.ª José Pacheco

Maquetación
Daniel Martín Corona

Corrección de estilo
Ana Guerrero

© De las piezas de la colección del Museo del Traje,


Ministerio Cultura y Deporte

NIPO: 822-23-012-0
SUJETADOR, 1920

La moda oculta La necesidad de sujetar y cubrir


La ropa interior no suele apreciarse a el pecho existe desde siempre. Pode-
simple vista, pero influye enormemente mos hablar del empleo de bandas para
en cómo percibimos el resultado final de sostener los senos, por lo menos, des-
un atuendo o conjunto. A menudo oculta de la Antigüedad clásica. Las mujeres
tras varias capas de tela, es lo que vesti- griegas utilizaban el apodesmos y las
mos directamente sobre nuestra piel, y romanas el strophium o mamillare, una
se convierte en la frontera entre nuestro especie de banda realizada en cuero o
cuerpo y el mundo exterior. tela (fig. 1).
Modela silenciosamente la silueta Desde entonces, son incontables
que deseamos obtener, evidencia las las prendas que han formado parte del
formas que queremos que sean apre- vestuario interior femenino con el ob-
ciadas y esconde aquello de lo que es- jetivo de sostener o modelar la parte
peramos que nadie se percate. Cómo superior del cuerpo. Algunos ejemplos
nos haga sentir el tacto de su tejido, la son los cartones de pecho del siglo
comodidad de su ajuste y la calidez de XVI, que buscaban, mediante cuero,
sus fibras va a influir enormemente en tablillas y cartones, dotar al torso de
nuestro bienestar y en la seguridad con una superficie lisa y dura; o las cotillas
la que llevemos la ropa exterior. armadas con ballenas y tiras de junco

Figura 1. Detalle de un mosaico que representa a varias mujeres llevando un strophium para la
práctica de deporte, siglo IV d.C. Villa Romana del Casale, Sicilia.

3
MODELO DEL MES ABRIL 2023

de los siglos XVII y XVIII, cuya finalidad a su vez, implica la llegada de prendas
principal era estrechar la cintura.1 más fáciles de fabricar y de producir en
Según avance el siglo XIX, se va a ge- masa.
neralizar el corsé, precedente temporal
inmediato del sujetador moderno, por el Una nueva estética para un nuevo siglo
que se verá sustituido progresivamente, La ropa interior es reflejo de la exterior
como vamos a analizar más adelante. y viceversa; únicamente se entienden
en toda su concepción si son analizadas
Un poco de contexto histórico conjuntamente. Por este motivo es in-
La moda es espejo del agitado contex- teresante conocer la moda de los años
to histórico de las primeras décadas del 20 y los hitos inmediatamente anterio-
siglo XX y, especialmente, del llamado res que rompen definitivamente con la
periodo de entreguerras. Durante este estética decimonónica del corsé, el mi-
tiempo, la indumentaria de la mujer va riñaque y el polisón.
a vivir uno de los cambios más radicales Creadores como los fr anceses
de su historia, pues se va a ver afectada Jeanne Paquin y Paul Poiret dan paso a
por circunstancias como la limitación de la silueta que va a estar en boga a partir
materias primas, la irrupción masiva del de 1906, volviendo al estilo imperio y a la
trabajo de la mujer fuera del hogar o el línea recta marcada por el frunce bajo el
incremento de la práctica de actividad pecho que se llevaba un siglo atrás.
física al aire libre. En paralelo, el diseñador granadino
La fabricación manual continúa dis- Mariano Fortuny y Madrazo, inspirado
minuyendo en favor de una confección en los pliegues y drapeados de la Anti-
textil cada vez más industrializada, si- güedad clásica, va a introducir prendas
tuación que se ve favorecida por la bús- creadas que fluye libremente por el
queda continua de innovaciones tec- cuerpo de la mujer, adaptándose a su si-
nológicas y científicas en materiales, lueta natural. Estos novedosos diseños,
diseño y sistemas de producción. Ade- unidos a la influencia de la indumentaria
más, los patrones de consumo se ven oriental, de gran colorido y corte más
muy alterados por fenómenos socioeco- holgado, y de la estética Art Noveau,
nómicos como la emigración del campo darán paso a un nuevo concepto en el
a la ciudad, el crecimiento demográfico vestir que comienza a prescindir del uso
y, por supuesto, el nuevo rol que el gé- del corsé.
nero femenino asume durante y tras la El final de la Gran Guerra dará paso
Primera Guerra Mundial. a una radical transformación del vestir
Con los hombres en el frente, las femenino y del propio concepto de femi-
mujeres contraen de forma masiva nidad. El cabello se va a llevar más corto,
responsabilidades en el terreno laboral al igual que el largo de vestidos y faldas,
y social, traspasando como nunca antes y la línea de la cintura bajará a la cadera.
las fronteras del ámbito doméstico. Se Además, la preferencia por la delgadez y
impone un nuevo traje más práctico que, las formas rectas privilegiará una silueta
en la que los senos apenas se marcarán
1 REDONDO, M., 2022, pp. 5-11 (fig. 2). La liberación del cuerpo de la

4
SUJETADOR, 1920

de reforma del traje, orientado principal-


mente a paliar los efectos negativos del
vestir en la salud femenina y que pondrá
su foco de atención, aunque no exclusi-
vamente, en el empleo del corsé.4
Se pretende reducir el número de
prendas y simplificar su uso. Minimizar
los hábitos de la toilette (aseo y cuidado
personal) femenina significaba también
reducir el peso del atuendo, lo que re-
dunda en una mayor movilidad y como-
didad. También significaba vestirse más
rápidamente y sin necesidad de ayuda
externa.
La búsqueda de nuevas soluciones
para vestir a la moda sin el abandono de
las medidas instauradas por los movi-
mientos higiénicos dará lugar a prendas
más flexibles, que faciliten soporte y su-
Figura 2. Portada de la revista La Moda Ele- jeción, abandonando la anterior corse-
gante (Cádiz), del 22 de agosto de 1920. Imagen tería más rígida y estructurada
procedente de los fondos de la Biblioteca Na-
cional de España.3 Innovación en el diseño: la proliferación
de las patentes
mujer, acompañada de la transforma- Son muchos los nombres que destacan
ción que vive la ropa interior, será reflejo en el desarrollo de los primeros sujeta-
de la búsqueda de libertad también en el dores, en el que es una figura clave la
plano intelectual y laboral.2 diseñadora francesa Herminie Cadolle.
Patentó un modelo formado por dos
Las teorías higiénicas y sanitarias piezas, separando el corsé propiamente
Otro aspecto que podemos abordar a la dicho, para la parte de la cintura, de otra
hora de estudiar la lencería femenina es pieza que, apoyada sobre los hombros,
su relación con las teorías higiénicas y se encargaría de sostener el pecho.
sanitarias que, aunque ya existían con Este invento fue presentado en la
anterioridad, cobran renovado impulso Exposición Universal de 1889, bajo el
desde finales del siglo XIX. nombre de corselet gorge y Bien-être
La concepción de la ropa interior de (fig. 3). El desarrollo de patentes para
busto se aborda desde una nueva pers- sujetadores continuará a lo largo del
pectiva: la comodidad, la salud y el bien- siglo XX con todo tipo de innovaciones
estar femenino. Se inicia un movimiento para mejorar su construcción, forma y
confort.
2 PASALODOS, M., 2000, p. 377
3 https://hemerotecadigital.bne.es/hd/es/
viewer?id=7ef8392b-a103-47e3-b818-163ac3480f72 4 PASALODOS, M., 2000, p. 146

5
MODELO DEL MES ABRIL 2023

Figura 3. Detalle de la patente (1889) e ilustración publicitaria (1900) del modelo Bien-être paten-
tado por Herminie Cadolle.

Otro nombre que destaca es el de (sobre todo rayón, acetato y nylon), cada
Mary Phelps Jacobs, también conocida vez más baratas y de las que surgen
como Caresse Crosby, que en 1914 pa- nuevos tejidos, lo que a su vez repercu-
tentó en Estados Unidos el Backless bra tirá en el diseño y la comodidad de las
o “sujetador sin espalda”, ligero, cómodo prendas interiores.
de llevar y con un sistema de sujeción En cualquier caso, no se abandona
mediante cintas que prácticamente de- ni inmediatamente ni de forma total la
jaba la espalda al descubierto. confección con materiales tradicionales,
El desarrollo de patentes para sujeta- como el lino, la seda o el algodón; y un
dores continuará durante mucho tiempo ejemplo de esto es el sujetador prota-
después con todo tipo de innovaciones gonista de esta publicación que, como
para mejorar su construcción, forma y veremos más adelante, está confeccio-
confort, así como con el fin de diversi- nado en tul de seda. De hecho, es ha-
ficar su uso: reductor, de lactancia, etc. bitual que en una misma pieza convivan
Dichas patentes a menudo vendrán de la técnicas y fibras convencionales con las
mano de empresas dedicadas a la con- de nueva invención.
fección industrial de lencería y darán Para la seda, la fibra natural más
lugar a productos comercializables a apreciada y empleada en las piezas
gran escala. más lujosas, se buscará un sustituto
químico que sea capaz de reproducir
La carrera tecnológica por la invención su brillo, caída y suavidad. El rayón
de nuevas fibras y tejidos jugará un papel fundamental durante
Los nuevos avances científicos y tecno- los años 20, pues uno de sus pro-
lógicos aplicados a la industria textil da- cesos, de secado rápido, le confiere un
rán lugar a las llamadas fibras químicas brillo similar al de la seda; es el rayón

6
SUJETADOR, 1920

cupro, conocido también como “seda tancial vino con la introducción de las
artificial”. fibras elásticas y, por tanto, de los te-
También se pretende mejorar el jidos elásticos. En la década de 1930
procesado de las fibras naturales. Un se generalizó el uso del Lastex, 5 pre-
ejemplo es la mercerización del algodón sentado en 1929 por Dunlop Rubber
–procedimiento que trata las fibras con Co., cuyo uso fue muy popular en la
sosa cáustica– para obtener sedalina, confección de sujetadores porque con-
tejido de aspecto suave y fino. servaban su forma después de mucho
El desarrollo del elástico también lavado y uso.6
va a ser importante. En los primeros
años del siglo XX se utilizaron cintas de
5 Núcleo de látex rodeado por hilos de algodón,
goma recubiertas de tejidos de al- rayón o seda
godón y seda, que únicamente se uti- 6 HAMILTON, L., 2018, p. 79
lizaban en algunas zonas concretas 7 https://hemerotecadigital.bne.es/hd/
del sujetador, como las bandas en el es/viewer?id=e696394d-e400-4ffe-a34d-
347cb560d25a&page=25
cierre. Sin embargo, la mejora sus-

Figura 4. Detalle de la página 168 del número de la revista La Moda Elegante. (1/6/1922). Imagen
procedente de los fondos de la Biblioteca Nacional de España.7

7
MODELO DEL MES ABRIL 2023

El desarrollo industrial unido a la in- su producción industrial, las mujeres los


novación y optimización de fibras y te- realizarían ellas mismas en casa o los
jidos va a provocar que la ropa interior se encargarían a costureras o talleres cer-
estandarice y se pueda producir a gran canos, inspirándose en las novedades
escala. La lencería se convierte en una en moda que llegaban a través de las re-
prenda más de consumo, que sigue las vistas, la publicidad y, posteriormente,
tendencias del momento. el cine. Previsiblemente, el sujetador
objeto de estudio de esta publicación se
Revistas y publicidad: el escaparate de encuadraría en este contexto.
las novedades De forma progresiva, la confec-
La ropa interior o “ropa blanca” –aunque ción puramente artesanal del sostén
este concepto también abarca elemen- se abandonará, introduciendo cada vez
tos como las sábanas, las toallas o los mayor número de técnicas de produc-
pañuelos– se aprendía a coser en casa ción mecánicas y el uso generalizado
desde niña e incluía la confección del de la máquina de coser, y se comerciali-
ajuar propio. A esta transmisión genera- zaría en tiendas especializadas, proceso
cional del conocimiento se unieron otros que puede seguirse a través de la intro-
métodos de aprendizaje como la con- ducción de etiquetas con el nombre del
sulta de manuales de patronaje, corte negocio o de la marca comercial en la
y confección, y la suscripción a revistas prenda.
de moda dirigidas al público femenino.
Estas últimas incluían artículos, pe- Del corsé al sujetador: brassières, sou-
queños relatos, todo tipo de consejos tiens y bust supporters
prácticos, diseños para bordados y en- Aunque el corsé todavía se encontraba
cajes, y, especialmente, numerosas en pleno uso a comienzos del siglo XX,
ilustraciones y figurines, a menudo ya desde el siglo XIX coexistía con otro
acompañadas de patrones. La ropa in- tipo de prendas que podríamos situar en
terior por lo general siempre tenía un un estadio intermedio entre este y el su-
apartado específico, aunque mucho más jetador.
breve (fig. 4). Bajo nombres como br a ssière,
La evolución de la ropa interior se soutien-gorge, bust bodice o bust sup-
puede trazar también a través de catá- porter vamos a encontrar prendas más
logos y tarjetas comerciales, junto con la cortas y con tirantes, que focalizan la
abundante publicidad de negocios como atención en los senos y que empiezan a
las corseterías, las mercerías, sederías, prescindir del uso de ballenas, aunque
etc. dedicados a la venta y a la confec- no siempre (fig. 5).
ción por encargo de lencería. Según avancen los años se impondrá
Cabe pensar que la realización de los el termino brassière, del que proviene la
primeros sujetadores siguió en un primer palabra bra, que en inglés significa suje-
momento un patrón similar de confec- tador. Independientemente del nombre
ción completamente artesanal y acotada con el que se le denominara, lo que
al ámbito doméstico o al establecimiento estaba claro es que el sujetador había
de confianza. Hasta la generalización de llegado para quedarse, adaptando sus

8
SUJETADOR, 1920

se separan las copas, dando lugar a un


escote cada vez más redondeado a modo
de preludio de la figura que predominará
durante la década siguiente (fig. 7).
Los elementos de cierre de los pri-
meros sujetadores van a ser variados:
tiras y lazada, cordón y ojetes, botones y
presillas, etc., y, más adelante, se intro-
ducirán los corchetes metálicos. Tam-
bién comienza a ser habitual encontrar
tiras elásticas en la parte posterior, lo
que permitía a la mujer un mayor grado
de comodidad y flexibilidad.
En cuanto a las técnicas de confec-
ción de tejidos destacan el tafetán, el
raso y el tul, junto con el encaje –a la
aguja, mecánico, de Valenciennes, etc.–
para cintas y puntillas. El bordado se uti-
liza a menudo para marcar las iniciales
de la propietaria.

Figura 5. Anuncio de Le Nouveau Soutien-Gor-


Y llegamos a nuestro protagonista
ge en el número del 15 de octubre de 1906 de la Es en este contexto donde podemos
revista francesa Femina, confeccionado en lino ubicar el sujetador protagonista de esta
y sin ballenas. Se publicita como esencial para publicación, de carácter extraordinario
las mujeres que quieren jugar al tenis, montar a dentro de las colecciones del Museo del
caballo o llevarlo bajo una ligera blusa para ir a
la costa.

materiales, corte y estructura a las os-


cilaciones que la silueta femenina vivirá
a lo largo de todo el siglo XX.
El comienzo de los años 20 y la figura
recta y esbelta que los acompaña pro-
vocará la proliferación del sujetador es-
tilo bandeau o venda, sencillo y de corte
recto, con y sin tirantes, sin marcar el
escote ni las copas (fig. 6).
Sin embargo, a finales de la década
de 1920, la atención se va a centrar en Figura 6. Sujetador estilo bandeau de La Espa-
elevar y separar los senos, por lo que ñola, confeccionado en raso de algodón y enca-
el patronaje se vuelve más complejo. je a la aguja, ca. 1925. Museo del Traje, Madrid
Vamos a encontrar modelos en los que (MTCE021706).

9
MODELO DEL MES ABRIL 2023

Traje. Centro de Investigación del Patri- No tiene iniciales bordadas ni eti-


monio Etnológico y en las colecciones quetas, tratándose de una confección
museísticas españolas en general. artesanal y hecha a medida. El complejo
La parte delantera tiene un escote en trabajo de patronaje en la parte de las
forma de pico y se abrocha en el centro copas, que utiliza el recurso de las pinzas
mediante cuatro botones de nácar y para mejorar su ajuste, hace pensar
cuatro presillas de tela, de las cuales también en un posible taller o modista
una apenas conserva el hilo interior que que estuviera al tanto y siguiera las no-
le daría forma. De la parte más elevada vedades en lencería (fig. 8). Además, los
de cada copa nacen sendos tirantes de materiales empleados, su rica decora-
seda, adornados con un pequeño lazo, ción y la delicadeza en su confección nos
que unen la pieza con la parte trasera, remiten a una propietaria con un alto
de corte recto. Todo su borde está deco- poder adquisitivo.
rado con puntilla de encaje. Esta pieza fue adquirida por el Es-
Está confeccionado en tul de seda de tado mediante Orden Ministerial de 24
color beis, lo que le da ese aspecto se- de mayo del año 1991 para el entonc
mitransparente; y presenta abundante es Museo Nacional del Pueblo Español
decoración mediante diversos recursos –hoy Museo del Traje–.
como las tiras de vainica y las bandas de El sujetador entró como parte de un
entredoses y pasacintas. lote de doscientas quince piezas que

Figura 7. Sujetador en raso de seda, 1920-1930, Museu del Disseny.

10
SUJETADOR, 1920

estaba conformado principalmente por tipologías– además de la ya citada de


textiles y elementos de indumentaria, indumentaria tradicional.
entre las que se pueden destacar un im- Su colección de trajes regionales
portante grueso de trajes regionales que fue depositada en el Museo del Traje
pertenecieron a las colecciones de María en 1991, formando lote con otras piezas
Regordosa. de indumentaria y accesorios, así como
María Regordosa (1888-1920) fue algunos elementos de cultura popular.
una coleccionista de principios del siglo En el informe de la colección no se hace
XX, proveniente de una importante fa- alusión directa a este sujetador que, por
milia dedicada a la boyante industria sus características estéticas y técnicas,
textil del momento. Su espíritu curioso tampoco parece que formara parte de
y aventurero, junto con un gran amor ninguno de los conjuntos de la indumen-
por el arte y las antigüedades, la llevó a taria tradicional mencionados, sino de
recorrer toda España en busca de ele- esas “otras piezas” que entraron en el
mentos únicos. Formó colecciones de lote de compra. Por este motivo, sola-
joyas, abanicos o tapices –entre otras mente podemos entrar en el terreno de

Figura 8. Fotografía de detalle del sujetador, en la que puede apreciarse el uso de pinzas para la
construcción de la copa. Museo del Traje, Madrid (CE021707).

11
MODELO DEL MES ABRIL 2023

Figura 9. Detalle de etiqueta con la talla del sujetador “A’Lure Alphabet” de Warner, ca. 1938. Fo-
tografía de Tigz Rice. The Underpinnings Museum.

las suposiciones a la hora de establecer sistema de tallaje para la copa mediante


si pudo formar parte del guardarropa el empleo de letras –de la A a la D– se-
personal de María Regordosa, si se in- gún el tamaño y la forma de los senos,
tegró posteriormente en la colección o, independientemente del contorno del
en definitiva, cuáles fueron las circuns- busto. Es en este momento cuando va-
tancias que desembocaron en que el mos a poder encontrar modelos con los
sujetador formara parte de la colección tres aspectos que hoy podemos ver en
adquirida en 1991. casi cualquier sujetador que se comer-
cialice en el mercado: tamaño de la ban-
Lo que vino después da o contorno, letra de copa y tirantes
La silueta de moda durante de los años ajustables (fig. 9).
30 exigirá que el diseño de los sujetado- A la hora de abordar el diseño del
res evolucione para proporcionar unos sujetador se empezará a prestar más
senos más elevados y separados. Esta atención a su parte trasera, debido a la
década traerá una innovación que conti- proliferación de vestidos de noche que
núa hasta hoy y sin la que no puede en- mostraban ampliamente la espalda.
tenderse la industria lencera actual: el Triunfará el modelo Kestos (ya paten-

12
SUJETADOR, 1920

tado en 1926), uno de los primeros sos- Aparecerán modelos de sujetador más
tenes producidos comercialmente con largos, que llegarán hasta la cintura y
copas separadas, cuyas tiras traseras buscarán aplanar el vientre, siendo habi-
ajustables permitían lucir la espalda al tual el empleo de aros y el emballenado.
aire en los vestidos con un amplio es- La lencería de firma, lujosa y con aca-
cote. bados de calidad, convivirá con una con-
Además, se introducirán elementos feccionada de forma industrial dirigida a
como las almohadillas y los rellenos, que la clase media. Los materiales sintéticos
elevarán y moldearán el busto, aunque y la estandarización del sistema de ta-
habrá que esperar a los años 50 para llas facilitarán la producción en serie de
encontrar una mayor variedad. Por otra estos modelos, abandonándose casi por
parte, el uso de elementos como los aros completo su confección artesanal y a
metálicos no se generalizarán hasta fi- medida. Proliferará la fundación y recon-
nalizar la II Guerra Mundial, debido a la versión de firmas dedicadas al diseño de
escasez de este material durante el con- lencería y los modelos se diversificarán
flicto bélico. enormemente, acercándonos cada vez
Se buscará cada vez más una mayor más al panorama que conocemos en la
elevación de los senos, que se con- actualidad.
seguirá mediante nuevas técnicas de
costura para reforzar las copas y, en al- En conclusión
gunos casos, el uso de varillas de celu- La evolución de la moda femenina de las
loide. Estas innovaciones en el patronaje primeras décadas del siglo XX no puede
y en las técnicas de costura continuarán entenderse en toda su complejidad sin
en uso y perfeccionamiento en los años analizar la evolución del sujetador. De la
40 y 50 para conseguir los senos puntia- misma manera, tampoco las implicacio-
gudos y separados que requería la moda nes que representan la creación y uso de
del momento.8 esta prenda pueden abordarse sin tener
En 1947 Christian Dior va a presentar en cuenta cómo evoluciona la sociedad,
la colección Corolle –línea que posterior- la moda y las innovaciones tecnológicas
mente será conocida como New Look–, que la acompañan.
que terminará de apuntalar la silueta Si el estudio de la moda y de la in-
que va a acompañar a las mujeres de dumentaria es una de las vías más di-
mediados del siglo XX. La mujer repre- rectas y “sinceras” para acercarnos a
sentativa del New Look tendrá los hom- nuestro pasado, puede decirse que la in-
bros redondeados, un busto elevado, una vestigación de la ropa interior femenina
cintura muy ceñida y faldas de mucho nos lleva inexor a blem ente a una
vuelo y volumen. Además, el mismo mejor compresión de la historia de la
Christian Dior lanzará una colección mujer. De su intimidad y vida cotidiana,
de lencería ready to wear o “listo para pero también de cómo se muestra al
llevar”, símbolo de la unión entre alta exterior y cómo es percibida por los
costura, lencería y confección en serie. demás; y, en definitiva, de la relación
entre su cuerpo y el mundo simbólico
8 HAMILTON, L., 2018, p. 85-87. que la rodea.

13
MODELO DEL MES ABRIL 2023

Bibliografía
• AVELLANEDA, D. (2006): Debajo del vestido y por encima de la piel… Historia de la ropa interior
femenina, Buenos Aires, Nobuko.

• BURGOS, C. DE (1927): La mujer moderna y sus derechos, Valencia, Sempere.

• GAVARRÓN, L. (1982): Piel de ángel. Historias de la ropa interior femenina, Barcelona, Tusquets.

• HAMILTON, L.: (2017), «Exhibition. Lift and separate. technology and the bra» [en línea]. En:
The Underspinning Museum. Disponible en:

https://underpinningsmuseum.com/exhibition-lift-separate-technology-and-the-bra/

• HAMILTON, L. (2018): “Support and Uplift. How Technology Defined the Bra during the
Twentieth Century”, The Journal of Dress History, Vol. 2, n.º 3, pp.73-99.

• LLORENTE, L. (2022): Los tejidos de entreguerras, 1920-1939, Modelo del mes de noviembre.
Madrid: Museo del Traje. Disponible en:

https://www.culturaydeporte.gob.es/dam/jcr:b414b4b1-0da1-44bb-937a-90b2f4c4e331/
mdm11-2022-tejidos-digital.pdf

• PASALODOS, M. (2000): El traje como reflejo de lo femenino. Evolución y significado. Madrid


1898-1915 [en línea]. Tesis Doctoral, Universidad Complutense de Madrid, Facultad de Geografía
e Historia, Madrid. Disponible en: https://eprints.ucm.es/id/eprint/2536/

• PASALODOS, M. (2008): Corsé. 1900-1905, Modelo del mes de septiembre. Madrid: Museo del
Traje. Disponible en:

ht tps://w w w.cul tur ayd ep or te . g ob.e s/mtr a je/d a m/jcr : f4 d f a 62 1- e 8 b d- 4 ea7-9 d28-
6e0e8de378a9/09-2008.pdf

• PUERTAS, F. (2012): El sostén, mitos y leyendas. Manual de uso. Córdoba: Arcopress.

• REDONDO, M. (2022): Cotilla 1750-1760, Modelo del mes de febrero. Madrid: Museo del Traje.
Disponible en:

https://www.culturaydeporte.gob.es/dam/jcr:6e3111d7-20c1-4863-b3a4-cd687fcbaead/
mdm02-2022-cotilla-digital.pdf

• RIERA, M. (2014): 200 años de ilustración de moda en España. Barcelona: Comanegra.

• VAQUERO, I. (2007): «El reinado de la Alta Costura. La moda de la primera mitad del siglo
XX» [en línea], Indumenta. Revista del Museo del Traje, n.º 0, pp. 123-134. Disponible en:
https://www.culturaydeporte.gob.es/mtraje-indumenta/dam/jcr:0cd96564-482f-4d6c-9db8-
8fd441f869b4/indumenta00-13-iva.pdf

• VELASCO, A. (2021): Historia de la moda en España. De la mantilla al bikini. Madrid: Catarata.

14
MODELO DEL MES | CICLO 2023

Estas breves conferencias tienen lugar en la primera área de la exposición perma-


nente. En ellas se analiza e interpreta una pieza de especial importancia. A los asis-
tentes se les entrega gratuitamente este cuadernillo con el contenido de la confe-
rencia.

Domingos: 12:30 h
Duración: 30 min
Asistencia libre hasta completar aforo

ENERO
Vestido, Gallenga, 1917
Laura Jiménez

FEBRERO
Vestido, Coppelia, Galerías Preciados, 1965
Lorenzo Caprile

MARZO
Traje de charra de la Infanta Isabel, 1865
Ana Guerrero

ABRIL
Sujetador, 1920
Victoria Calandra

MAYO
Colección Antonio Prast, 1925
Fotógrafo de la Exposición del Traje Regional
Concha Herranz

JUNIO
Abanico, 1885
Marcos Narro

SEPTIEMBRE
Camisa Dalí
Lydia García
Con un lector de códi-
OCTUBRE gos QR accedes a las
Revista ‘Telva’, nº 1, octubre 1963 publicaciones en pdf
María Prego de esta actividad.

NOVIEMBRE
Álbum de siluetas de caballeros
Clara Berástegui

DICIEMBRE
Prendas interiores masculinas de indumentaria tradicional
Victoria Vasquez

En www.museodeltraje.es tiene a su disposición todas las publicacio-


nes de Modelo del Mes en la sección Biblioteca | Publicaciones periódicas.
MUSEO DEL TRAJE
Av. Juan de Herrera, 2. Madrid, 28040
Tel. 91 550 47 00
difusion.mt.@cultura.gob.es
www.museodeltraje.es
@museodeltraje

(MTFCE021707)

También podría gustarte