Proyecto de Investigación Teórico
Proyecto de Investigación Teórico
Proyecto de Investigación Teórico
DURANTE EL EJERCICIO
DE LA ABOGACÍA
“AÑO DEL FORTALECIMIENTO DE LA SOBERANÍA NACIONAL”
UNIVERSIDAD NACIONAL DE TRUJILLO
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS
E.A.P DE DERECHO - SECCIÓN DE PREGRADO
PARA LA MATERIA:
ANÁLISIS CRÍTICO DE LA REALIDAD
Asesor:
Dr. Santiago Alberto Uceda Duclós
Integrantes:
González Ríos Jesús Eduardo
Gonzales Torres Marina Lizeth
Navarro Zavaleta Ariana Esther
Rodríguez Pesantes Kiyomi Keña
Vásquez Alvarado Shirley Rosmery
Vasquez Torres Edgar Lennin
TRUJILLO – PERÚ
2022
2
Resumen
Este trabajo busca discernir los prejuicios que existen y cuales son sus fundamentos
sobre el ejercicio de la abogacía. Se decidió elaborar una investigación de tipo teórica, usando
las técnicas del fichaje y análisis documental mediante los instrumentos de ficha de registro
de datos y guía de análisis de documentos, respectivamente. Esto con el fin de sustentar la
investigación en fuentes objetivas y ajenas al sesgo tan predominante en los prejuicios de los
cuales se busca un deslindamiento total. Del primer capítulo se rescatan cuatro situaciones
que sustentan la idea del abogado mentiroso: la retórica, la amplitud del Derecho, la
reiteración y el orgullo; de manera que, el abogado no es mentiroso por su profesión. En el
segundo apartado se resalta que constantemente está buscando tener ganancias personales,
económicas y poder, todo esto confirmado tanto por diversos personajes como los propios
abogados, sin embargo, no pueden ser generalizados como ambiciosos patológicos, ya que no
todos se identifican como tales. Por último, la tercera sección confirma que el agotamiento
emocional causado por el estrés en el ejercicio de la abogacía contribuye directamente a la
insensibilidad de los jurisconsultos, pues ello desemboca en una afección denominada
síndrome de Burnout. Por lo tanto, los resultados obtenidos muestran que existen tres
prejuicios muy marcados en el ejercicio de la abogacía que son la mentira, ambición e
insensibilidad, cada uno de ellos, con diversos argumentos que lo evidencian y que hacen que
las personas critiquen su labor.
Abstract
This work seeks to discern the prejudices that exist and what are their foundations on
the practice of law. It was decided to carry out a theoretical investigation, using the
techniques of recording and documentary analysis through the instruments of the data record
sheet and the document analysis guide, respectively. This in order to support the investigation
in objective sources and outside the bias so predominant in the prejudices of which a total
demarcation is sought. Four situations that support the idea of the lying lawyer are rescued
from the first chapter: rhetoric, the breadth of the Law, reiteration and pride; so that the
lawyer is not a liar by profession. In the second section, it is highlighted that he is constantly
seeking to have personal, economic and power gains, however, they cannot be generalized as
pathologically ambitious, since not all of them identify as such. Finally, the third section
confirms the emotional exhaustion caused by stress in the practice of law. Therefore, the
results obtained show that there are three very marked prejudices in the practice of law,
which are lies, ambition and insensitivity, each one of them, with various arguments that
show it and that make people criticize their work.
3
Introducción
Índice
Resumen ........................................................................................................................... 2
Abstract ............................................................................................................................ 2
Introducción ..................................................................................................................... 3
2. Antecedentes .................................................................................................................. 10
2.1. Internacionales ........................................................................................... 10
3. Problema ........................................................................................................................ 13
3.1 Problema General ....................................................................................... 13
3.2 Problemas Específicos ................................................................................ 13
4. Hipótesis ........................................................................................................................ 13
4.1 Hipótesis General........................................................................................ 13
4.2 Hipótesis Específicas .................................................................................. 13
5. Objetivos ........................................................................................................................ 13
5.1. Objetivo General........................................................................................ 13
5.2. Objetivos Específicos ................................................................................. 13
6. Justificación ................................................................................................................... 14
6.1. Teórica ...................................................................................................... 14
7. Metodología ................................................................................................................... 14
7.1. Tipo de Investigación ................................................................................. 14
7.2. Diseño de Investigación ............................................................................. 15
8.3. ¿Hasta qué punto un abogado puede mentir para favorecer a su cliente?.............25
10.3.1. Caso Nacional: Los cuellos blancos del puerto: Campaña presidencial
del CNM ...................................................................................................... 48
10.3.1.1.Datos de los implicados:...................................................... 48
7
10.3.1.2.Problemática ....................................................................... 48
1. Realidad Problemática:
Sin duda uno de los tópicos contemporáneos que la sociedad ha venido discutiendo,
durante los últimos años, está ligado a la ejecución y práctica del abogado, es decir, al
impacto que este genera a través de su intervención profesional en la sociedad. No obstante,
aunque se supone que la consecución de la ideal justicia es la orientación más clara para la
realización de aquella práctica, resultan cuestionables ciertas acciones, las cuales el abogado
incurre en ese intento de procurar la realización de dicho ideal. De ahí que tengamos a una
sociedad que constantemente crea estereotipos o etiquetas en referencia al ejercicio inmoral
que ejecutan algunos leguleyos.
A nivel histórico también se puede constatar la existencia de ciertos prejuicios que
integrantes de nuestra Nación, que se vieron marginados por el Estado, exclamaban
exacerbados debido a la conducta de operadores jurídicos como jueces y defensores que
direccionaban sus vidas al infortunio. Por ello en El mundo es ancho y ajeno, encontramos al
patriarca Rosendo Maqui quien tajantemente nos dice: “Se justifican con la ley y el derecho.
¡La ley!; ¡el derecho! ¿Qué sabemos de eso? Cuando un hacendado habla de derecho es que
algo está torcido y si existe ley, es sólo la que sirve pa fregarnos” (Alegría Bazán, p. 15). Es
evidente la desconfianza del personaje ante las leyes, pero ciertamente el problema de
trasfondo radica en el uso que el abogado y, en general, otros operadores jurídicos, hagan del
Derecho. Como el anterior pasaje novelístico, demostrado está que el engaño, el fin material
y la insensibilidad son para muchos abogados, antes que los principios ético-profesionales,
componentes que impulsan la práctica y aplicación del Derecho.
Ahora bien, regresando al presente, se puede comprobar que no existe gran diferencia
si de prejuicios que crea la sociedad con respecto al ejercicio del abogado se refiere. Por
ejemplo, en una investigación realizada en España que data del 2014, Partida Zuazquita
(2014) a través de datos empíricos demuestra que el 42 % de la población piensa que los
abogados no son solidarios y, por tanto, no estarían predispuestos a ayudar a los
desamparados de manera desinteresada. Por otra parte, el 69 % de los mismos consideran que
el abogado de hoy incurriría en medios deshonestos para defender un caso. A partir de
aquellos datos, la población suele afirmar que los representantes de la justicia no son
consecuentes con los valores propios de la profesión que ejercen, por tanto, a menudo, son
tildados de estafadores, ladronzuelos, metálicos o corruptos. En razón de dicha situación,
como otros investigadores, también nos planteamos saber cuáles son las bases para afirmar
9
que dichos prejuicios verdaderamente corresponden con la práctica que algunos abogados
hacen del Derecho. Las causales, básicamente, se explican a través de un análisis del mismo
abogado dentro de un determinado contexto. Así nos expone Torre Janampa (2019),
concluyendo que, en un ámbito de competitividad económico-laboral e individualismo,
predomina una racionalización de decisiones del abogado a partir de una evaluación costo-
beneficio de un caso. Y así, existen muchas otras explicaciones que retomaremos en el
desarrollo del presente trabajo.
Por otra parte, a partir de la experiencia personal, las razones que la sociedad comenta
giran en torno a tres características atribuidas, principalmente, al modelo actual de poner en
práctica los conocimientos jurídicos. Estas cualidades son la mentira, el afán materialista y la
insensibilidad, vicios que degeneran la función social del abogado en detrimento de su propia
imagen. Rafael Aldave (2021), en su artículo El Derecho y yo, advierte desde su experiencia
la carencia de valores en la labor que realizan litigantes, juristas, jueces, fiscales y cómo no,
abogados. De ahí su emotivo mensaje que se trae a colación a fin de recoger un testimonio
vivo sobre la decadencia en la escala axiológica en el uso del Derecho. “Así entendí al
derecho, no desde los tribunales y pasadizos donde se subastan las sentencias, no desde el
pragmatismo mundano y subalterno, sino desde su realismo y cientificidad social” (párr. 5).
Contrastando lo expresado por el citado autor, las características que antes fueron
enumeradas se engloban dentro del concepto de pragmatismo mundano, una corriente que
desvirtúa el ejercicio del Derecho, convirtiéndolo en algo puramente instrumental, frío y
antihumanista. En suma, las señales que brinda la sociedad son negativas en cuanto
encontramos la expresión de prejuicios que desacreditan al Derecho
En síntesis, la imagen social construida a partir del ejercicio inmoral del abogado es
tan cuestionable en nuestro tiempo como lo fue en un ayer. Por ello, es de relevancia social
adentrarse en la base que sostiene la existencia de dichos prejuicios que degradan una
profesión tan valiosa como el ser defensor de interés fundados en la justicia. Dentro de un
Estado Social de Derecho como el que, teóricamente, tenemos en la actualidad, la
contribución del abogado debe corresponder con una práctica responsable del Derecho, donde
se establezcan más vínculos con la sociedad a fin de que las democracias sigan floreciendo.
Finalmente, para dar espacio a la presente investigación, se debe subrayar la naturaleza
dialéctica y compleja de la humanidad a través de la siguiente frase: “Nuestra especie no está
cerrada por el determinismo biológico, sino que permanece abierta y creándose sin cesar a sí
misma, como anunció Pico della Mirandola” (Savater, p. 42).
10
2. Antecedentes
2.1. Internacionales
(Adragna, 2017) en su informe titulado: “Percepción de profesiones: estereotipos
vigentes en torno a profesionales”
[Informe técnico]. Sostuvo como objetivo intentar aproximarse a reconocer aquellos
estereotipos vigentes en el Ámbito Metropolitano de Buenos Aires (AMBA) con respecto a
las profesiones seleccionadas (Ingeniería, Contaduría, Abogacía, Psicología, Medicina,
Relaciones Públicas, Marketing y Diseño Gráfico). El tipo de investigación fue descriptivo,
de diseño de corte cualitativo (tipo de investigación: cuali-cuantitativo). El análisis se
realizará a 1531 personas mayores de 18 años del Área Metropolitana de Buenos Aires con
acceso a internet. Se concluyó que los abogados son percibidos como los más deshonestos y
egoístas. Los resultados señalan que quienes ejercen carreras más “tradicionales”, a saber, los
ingenieros y los contadores (y en un segundo plano, los médicos y abogados), son
contemplados como los más estructurados, de igual modo, para las carreras asociadas a las
ciencias exactas (Ingeniería y Contaduría) se conciben profesionales introvertidos; sin
embargo, también se los considera profesionales trabajadores y estructurados.
(Partida, 2014) en su tesis titulada: “La imagen del abogado en la sociedad”
[Trabajo de fin de grado]. Esta investigación realizada en España, tuvo como
objetivo principal analizar las causas que originan la desvalorización social del ejercicio de la
abogacía. Para ello se hizo un trabajo de campo, pues se trató de una investigación mixta, y se
llevó a cabo mediante un cuestionario a modo de encuesta. La población consultada en la
encuesta para la elaboración de este trabajo académico se enmarcó dentro de un mismo grupo
formado por personas particulares con residencia en España y todas ellas mayores de edad.
Así pues, con este trabajo se llega a la conclusión de que unas de las causas principales que
influyen en la imagen del abogado es debido a la sensación negativa que tiene la población
española respecto a un posible mal funcionamiento de la justicia, en donde el descontento
social repercute en la figura del abogado por ser este el eslabón más cercano al ciudadano.
Asimismo, se observó cierto desconocimiento por parte de la ciudadanía sobre la función
esencial que tienen los abogados en el marco del actual Estado de Derecho. Entonces, resulta
imprescindible un mayor esfuerzo por parte de los abogados para comunicar su labor y
transmitir su verdadera función pública y social.
11
Berni (2019) en su tesis titulada: “La abogacía y la ética factores que impiden el actuar
ético del abogado en su ejercicio profesional a la luz de la ley 1123 de 2007 en el
Departamento de Caldas para los años 2014 y 2015”
[Tesis para obtener el grado académico de maestro en Ciencias del Derecho]. Esta
investigación tuvo por objetivo general identificar los factores que impiden el correcto actuar
ético del abogado en su ejercicio profesional. En cuanto a la metodología fue cualitativa de
tipo fáctica utilizando estadísticas y entrevistas semi-estructuradas a Magistrados de la Sala
Disciplinaria del Consejo Seccional de la Judicatura de Caldas. La muestra que se tomó fue
de 20 abogados litigantes, y los procesos disciplinarios sancionatorios para extraer las faltas
disciplinarias más concurrentes durante los años 2014 y 2015 y conocer los factores que
impiden el actuar ético del abogado en su ejercicio profesional. Obteniéndose como resultado
que existen faltas disciplinarias por parte de los abogados respecto a la mencionada ley como:
la negligencia profesional; al no presentar demandas, dejar vencer plazos; actos dilatorios,
manifestándose en presentar solicitudes improcedentes, carentes de argumentación; entre
otros. Es así, que se llega a la conclusión que es de vital importancia para el ejercicio de la
Litis que las instituciones universitarias modifiquen sus currículos de tal manera que le den
mayor importancia al estudio e interiorización de la ética en el ejercicio profesional de la
abogacía.
2.2. Nacionales
(Cotrina, 2019) en su tesis titulada: “Afectación al usuario-cliente por mala práctica
profesional del abogado y la sanción por el incumplimiento de los deberes deontológicos
en la abogacía”
[Tesis para optar título profesional de abogado] Tuvo como objetivo general analizar
la afectación que recibe el cliente por mala práctica profesional del abogado, además de
revisar el marco normativo entorno a las sanciones por el incumplimiento de los deberes
Deontológicos en la Abogacía, desarrollando una investigación cualitativa, basada en la
aplicación de cuestionarios a los miembros del comité de ética, y abogados, teniendo como
base su experiencia procedimientos de sanción por inconducta profesional. El tipo de
investigación fue descriptiva, de diseño de corte no experimental. El análisis se realizará
sobre 100 informantes, entre ellos Jueces, Fiscales, Abogados Litigantes, como a su vez los
miembros del Comité de Ética. Se concluyó en dos aspectos importantes, el primero es que
en muchos casos el abogado defensor no ejercicio de manera correcta su labor generando así
una afectación a los intereses personales y el segundo que los integrantes del comité de ética
suelen conocer a los investigados e influyen para que no se les sancione ya sea con
12
3. Problema
3.1 Problema General
¿Qué prejuicios existen y cuales son los fundamentos sobre el ejercicio de la abogacía?
3.2 Problemas Específicos
❖ ¿Cuáles son los argumentos para afirmar que los abogados son mentirosos?
❖ ¿Cuáles son los argumentos para aseverar que los abogados son ambiciosos?
❖ ¿Cuáles son los argumentos que fundamentan que los abogados evidencian un alto
grado de insensibilidad?
4. Hipótesis
4.1 Hipótesis General
Los prejuicios principales son que un gran porcentaje de abogados muestran ser mentirosos,
materialistas e insensibles. Esto a razón de los incontables casos y testimonios en donde
queda evidenciada una mala práctica por parte de los jurisconsultos.
4.2 Hipótesis Específicas
❖ La mentira constituye una razón evidente para que los prejuicios sobre el ejercicio de
la abogacía sean considerados legítimos.
❖ Analizar los argumentos que aseveran que la ambición es una razón fundamental para
que los prejuicios sobre el ejercicio de la abogacía sean considerados legítimos
14
conceptuales (esto es, teóricos) en que se enmarcan las distintas áreas del saber. Inicialmente,
es posible distinguir, al menos, tres dimensiones o funciones en las que la investigación
teórica contribuye a la gestación del conocimiento académico: una dimensión organizativa,
una productiva y otra crítica. Nótese que esta clasificación no pretende ser exhaustiva, así
como tampoco se considera que las dimensiones mencionadas sean mutuamente excluyentes
sino que, por el contrario, se implican unas a otras. (Barahona, 2013, p.8)
Según Arias (2019), la investigación teórica, también denominada investigación
especulativa es aquella que utiliza el pensamiento u operaciones mentales: imaginación,
intuición, abstracción y deducción para crear modelos, explicaciones o teorías acerca de
fenómenos no observables. (p.1)
7.2. Diseño de Investigación
● Lógico Teórico
El diseño lógico teórico de la investigación se define como una metodología de
trabajo investigativo que permite orientar una investigación desde las necesidades del
entorno, permitiendo articular una serie de elementos necesarios con el objetivo de en
primera instancia, poder identificar lo que genera la necesidad de investigar y luego describir
las etapas que se necesitan definir para encontrar la solución a dicho menester, en este caso
los prejuicios y sus fundamentos sobre los jurisprudentes. Los elementos que componen el
diseño lógico teórico, se combinan de una manera lógica para que el problema sea manejado
de manera eficiente, asimismo son tratados de distintas formas y articulados de acuerdo con
la visión particular de cada investigador. (Gonzáles y Sánchez, 2020)
● Teoría Fundamentada
La teoría fundamentada se sustenta en la teoría del interaccionismo simbólico, pues
busca comprender cómo definen los individuos un fenómeno o acontecimiento a través de su
interacción social. El objetivo principal de la metodología es, a través del estudio de
fenómenos sociales en contextos naturales, generar teorías que expliquen el fenómeno
estudiado. Ha sido aplicada ampliamente en las ciencias sociales y la psicología como una
herramienta para desarrollar teorías sobre procesos psicosociales relevantes como es el caso
de los prejuicios y sus fundamentos hacia los juristas. De hecho, su importancia radica en
describir el comportamiento humano y el mundo social. (Vivar et al., 2010)
16
7.3. Métodos
7.3.1 Método analítico
(Gutiérrez-Sánchez et., 1990, p.133) lo define como aquel “que distingue las partes
de un todo y procede a la revisión ordenada de cada uno de los elementos por separado”. Este
método es útil cuando se llevan a cabo trabajos de investigación documental, que consiste en
revisar en forma separada todo el acopio del material necesario para la investigación. Durante
la investigación se aplica en el Capítulo 1, específicamente en el apartado ¿Hasta qué punto
un abogado puede mentir para favorecer a su cliente?; asimismo, se trata en el Capítulo 3, en
el subtema titulado Insensibilidad, una mancha en la abogacía; así como en Causantes.
7.3.2 Método sintético
Es el que analiza y sintetiza la información recopilada, lo que permite ir
estructurando las ideas. Los mismos autores citan como ejemplo la labor de la investigación
que realiza un historiador al tratar de reconstruir y sintetizar los hechos de la época que está
investigando. Este ejemplo nos permite precisar que el análisis y la síntesis son métodos que
se complementan entre sí; no se da uno sin el otro. Durante la investigación se aplica en el
Capítulo 1 durante La naturaleza de la mentira desde la filosofía moral; asimismo, en el
Capítulo 2 específicamente en el apartado Tipos de ambición y por último en Argumentos
sobre la ambición del abogado.
7.3.3 Método deductivo
Es una forma de razonamiento que parte de una verdad universal para obtener
conclusiones particulares. En la investigación científica, este método tiene una doble función
“encubrir consecuencias desconocidas de principios conocidos” (Rodríguez et., 1975, p. 42)
el método deductivo se contrapone a la inducción. Durante la investigación se aplica en el
Capítulo 1, específicamente en el apartado la Irremediable llegada de la mentira en el
estudiante de Derecho.
7.3.4 Método inductivo
Es el razonamiento mediante el cual, a partir del análisis de hechos singulares, se
pretende llegar a leyes. Es decir, se parte del análisis de ejemplos concretos que se
descomponen en partes para posteriormente llegar a una conclusión. En ello se asemeja al
método analítico descrito con anterioridad. En suma, las investigaciones científicas
representan la síntesis de estudios y de investigaciones a lo largo de las cuales se van
estableciendo conclusiones generales sobre determinados conocimientos. Durante la
17
Técnica Instrumento
Una vez aclarado lo anterior, se puede constatar que el primer elemento de la mentira
es la divergencia entre lo que la persona sabe y lo que dice, y el segundo elemento se trata de
esa intención de engañar, es decir, la voluntad y la plena conciencia de hacerlo. Este último
es al final el más potente y que, en el caso de que exista, presupone la existencia del primer
elemento.
8.2. La mentira como medio ideal de la viveza criolla
Este apartado se adentra en la sociedad peruana para hallar un fenómeno sociocultural
que se ha desarrollado en el devenir de la historia republicana. Este es la viveza post-criolla,
denominado así por los sociólogos, que alude al comportamiento de un ciudadano peruano
que ejecuta medios inescrupulosos para conseguir ciertos fines, sean moralmente buenos o
malos. Ejemplo de ello es el omitir las reglas de tránsito, el no tributar al Estado o saltarse la
cola mediante un amigo o conocido. Parece una cualidad humana común al peruano, sin
aparente daño más que en el acto mismo donde se manifiesta; sin embargo, la viveza post-
criolla ha repercutido no solo en un ámbito personal, sino también profesional, laboral y
académico.
Es válido mencionar que los calificativos como el ser pendejo, rata, criollo, achorado,
vivo, mosca, etc. buscan denominar, en todos los casos, una forma característica de
contrastación ante la ley y/o una performance determinada (Aliaga Tejeda, 2012). De ahí que
se tenga ciertos abogados u operadores jurídicos que ante la carencia de una ética acorde a lo
que ejercen, eligen otros caminos para resolver conflictos, como el caso de un abogado que
entrega cierta suma de dinero a un juez para que este diera la razón a su patrocinado, aun
cuando este último puede ser culpable del delito imputado. Pero se debe ir al fondo del asunto
para conocer qué factores han provocado que la sociedad peruana se caracterice por una
marcada conducta orientada a facilitar las cosas con la intervención de medios
inescrupulosos.
De este modo, se encuentran, principalmente, la carencia de valores, el creciente
individualismo contemporáneo, el pragmatismo mundano, entre otros que se podrían
enumerar pero que ya se desprenden de los anteriores. No obstante, ¿qué hace que la viveza
pos-criolla esté impregnada en la sociedad peruana? Pues, básicamente la respuesta de la
sociedad peruana misma ante las manifestaciones de este fenómeno. A través de un ejemplo,
extraído de un clásico de la literatura peruana, se podrá entender este último punto:
“Debía picarle mucho, no paraba de frotarse, sobre todo en la pared de la cuadra que
tiene raspaduras. Su lomo parecía una bandera peruana, rojo y blanco, blanco y rojo,
yeso y sangre. Entonces el Jaguar dijo: si le echamos ají se va a poner a hablar como
22
un ser humano, y me ordenó: Boa, anda róbate un poco de ají de la cocina. Fui y el
cocinero me regaló varios rocotos. Los molimos con una piedra, sobre el mosaico, y
el serrano Cava decía: ¡rápido, rápido! Después el Jaguar dijo: cógela y tenla
mientras la ciñó. Daba brincos hasta los roperos, se torcía como una culebra y qué
aullidos los que daba. Vino el suboficial Morte, asustado con el ruido, y al ver los
saltos de la Malpapeada se puso a llorar de risa y decía: qué tales pendejos, qué tales
pendejos. (Vargas Llosa, 2001, pág. 192).
Del anterior fragmento se puede observar cómo una autoridad refuerza la conducta
despreciable de los personajes mediante la celebración y la risa por la acción cometida. Esto
es lo que ha consolidado la pervivencia de dicho fenómeno, tanto así que se ha convertido en
una característica generalizada de la actual cultura peruana. Por el contrario, ser de distinta
forma recibe el calificativo de mosquita muerta. Ahora bien, de acuerdo a la problemática del
prejuicio sobre el uso de la mentira en el ámbito jurídico, no resulta ser más que un caso que,
como el anterior, la sociedad lo aplaude, normalizando este comportamiento que a largo
plazo será fuente de sus frustraciones.
8.2.1. El legado histórico-cultural en la consolidación de la mentira
Ahora se hallará la raíz histórica que ha originado el advenimiento del anterior
fenómeno. En ese sentido, nos situamos entre un antes, representado por la sociedad incaica y
un después, con la llegada de los españoles al Perú y la consiguiente sociedad colonial.
8.2.1.1. La Sociedad Incaica
Panorámicamente, según el historiador Makurker Ovalle (1992), para esta civilización
“su derecho era consuetudinario. La norma aplicada se transmitía en las sentencias, refranes o
mandamientos que se comunicaban oralmente” (p. 136). En ese sentido, si su Derecho se
basaba en la aceptación generalizada de la comunidad, entonces ¿cómo era tratada la
mentira?,
Como se podrá recordar, la moral del incario supuestamente se basaba en tres
preceptos (ama sua, ama llulla, ama quella), sin embargo, una investigación realizada por el
autor Manuel Góngora Prado (2015) desmonta esta atribución, sustentando que no fue más
que reeducar en todas las formas de la conciencia social para lograr la tergiversación total de
los principios genuinos del llankay (trabaja), yachay (edúcate) y sonqoy (ama al ser humano,
a la sociedad y la naturaleza). De esta manera, la dominación no fue solo económica y
política, sino espiritual, en especial moral, educativa y cultural, para así garantizar por siglos
su dominación.
23
encontrarse en una mejor situación que la persona justa, es por ello que a veces consideran
necesario recurrir a la mentira.
La finalidad de todo juicio es encontrar la verdad acerca de cómo sucedieron los
hechos que son investigados, si el acusado es culpable, si el accidente ocurrió, si el
reclamo del trabajador es real y tantos otros casos que son planteados a diario en los
tribunales. Para lograr esa verdad todos los operadores deben comprometerse a
buscarla, estar convencidos de que ese es el objetivo principal, un deber moral y
ético que se debe cumplir, pues de lo contrario la justicia fracasa. (Huczek, 2017)
Por ello, es necesario que todos los operadores de la justicia se centren en cumplir un
objetivo, obviamente con ciertos límites, para conseguir llevar a cabo un litigio que responda
al lindero de la honestidad. Lamentablemente, a veces los valores que se inculcan y la propia
ley suele ser impedimento para que los abogados puedan buscar justicia, ya que a veces es
necesario investigar una causa, pero por ley, se necesita una justificación, la cual es difícil ser
adquirida. La mentira debe aplicarse siempre y cuando no se desligue del fin supremo del
Derecho que es la justicia, mientras sea usado para aquello, es válida, puesto que brinda más
puertas para la resolución justa de un caso.
Sin embargo, apoyar la mentira no suena totalmente correcto, debido a que como se
mencionó con anterioridad, desde la infancia se nos inculca que es malo, puesto que se
perjudica a la verdad que es otro valor muy importante dentro de la sociedad. El problema
radica cuando el abogado usa la mentira para su conveniencia propia y lograr fines injustos.
El jurista al firmar un contrato que, en el campo del Derecho, viene a ser acto jurídico,
establece su total compromiso por defender a un cliente, sin importar si las acciones de este
son moralmente correctas o incorrectas. Lamentablemente, es en estos casos donde la
sociedad cuestiona fuertemente a un letrado. Algunos, valientemente dan primacía a sus
principios por llegar a lo justo, mientras que otros solo se limitan a hacer su trabajo. Empero,
se menciona mucho que debe existir un límite en el uso de la mentira, la cual se considera
que debe ser usada mientras se este peleando por algo justo, límite que se ve rebasado por
múltiples jurisconsultos y, por ende, la sociedad los cuestiona duramente.
“La obligación de decir la verdad no nos exige que nuestras proposiciones sean
verdaderas, sino que apunta fundamentalmente a que nuestros textos o discursos
sean consistentes con aquello que consideramos como si fuera verdadero. El
reproche a la mentira, por su parte, tiene que ver en parte con una inconsistencia
entre lo que el hablante cree y lo que el mismo hablante declare” (Coloma, 2006, p.
38).
26
Primero que nada, debe tenerse en claro la idea de que absolutamente todas las
personas en algún punto de sus vidas han mentido, ya sea por una u otra razón que puede ser
o no justificable, claro, al margen del grado de daño que pudo haber ocasionado e
independientemente de si hubo un arrepentimiento o no. Así pues, en un experimento llevado
a cabo por investigadores de la Universidad de Ámsterdam y de Ben-Gurion en Israel
hicieron una encuesta a los participantes sobre sus comportamientos a la hora de mentir, este
incluía preguntas como la frecuencia con la que mentían, el porqué lo hacían, si las habían
dicho en las últimas 24 horas y si recordaban las mentiras que habían dicho. Los resultados
indicaron que las personas mienten en promedio dos veces al día, pero solo el 5% recuerda
todas sus mentiras. (La Nación, 2013)
Pues bien, si todos mentimos, en consecuencia, el sector de la población que ejerza
una profesión va a mentir, pero ¿por qué la sociedad identifica especialmente a los abogados
como mentirosos si en realidad todos mienten? Explorando un ámbito en particular de la
carrera de Derecho, el paso por la universidad, se puede destacar que, según la SUNEDU,
para el año 2017, había 130 636 estudiantes de Derecho en todo el país. Mientras que, en el
año 2018, cada cuatro horas egresaba un abogado (El Comercio, 2018). Y referente a ello se
encontró algo bastante interesante: “hay muchas razones por las que los cursos de ética son
tan poco populares, pero la más importante es probablemente que los estudiantes de Derecho
no creen que se van convertir en abogados sin ética” (Schiltz, 2005, p. 204). En otras
palabras, se podría afirmar que los estudiantes de Derecho no creen que se van a convertir en
abogados mentirosos; sin embargo, cabe resaltar algo importante.
27
Todos los estudiantes mienten, puede que diciendo que están enfermos para no
asistir a clase, mencionando que su acceso a internet presenta desperfecciones y por eso no
pudieron responder a la pregunta planteada por el docente o mandando hacer una tarea para la
que no tenían voluntad de resolver y luego haciéndola pasar como suya. Entonces, ¿qué es lo
que lleva al estudiante de Derecho a convertirse en mentiroso? Nada, porque ya lo es. El
estudiante de Derecho no es mentiroso por la carrera a la que pertenece, sino por el simple
hecho de ser estudiante, para ser más generales, por el hecho de ser persona y porque como
ya se mencionó, todas las personas mienten. De manera que no va a existir una irremediable
llegada de la mentira al alumno de Derecho, pues esta ya está en él. No obstante ¿Qué es lo
que hace que cuando este se vuelva un profesional pase a identificársele como mentiroso,
especialmente por ser de esta profesión? ¿Será acaso que en el ejercicio de la abogacía
realmente sucederá una pérdida total de ética y lo que ello conlleva?
Entonces, respondiendo a la primera pregunta ¿por qué la gente asocia la mentira
como herramienta del abogado? Las hipótesis planteadas se sustentan en base a tres
situaciones. La primera es debido a la argumentación jurídica, la cuál puede llegar a
manifestarse mediante el discurso y preguntas retóricas con el fin de persuadir o convencer
generando en la sociedad sospechas ante tales afirmaciones. La segunda refiere a la esencia
misma del Derecho, pues este es trascendental para el ser humano y, por lo tanto, todos
tendrán contacto con él, de manera que el acceso de la población al Derecho será más amplio,
generando que la cantidad de perspectivas que puedan emanar en base a él tenga el mismo
nivel de amplitud. La tercera es que el prejuicio del abogado embustero se ha ido
consolidando fuertemente en base a la reincidencia de casos a nivel histórico, pues cabe
recordar que un prejuicio se basa justamente en ello, en la constante repetición de una
situación.
A todo esto, debe añadirse algo, existe un trasfondo que lleva a los estudiantes de
Derecho a mentir, hablando dentro de un contexto jurídico. Cuando se encuentran dentro de
una discusión esas ganas por querer tener la razón los lleva a afirmar cosas que realmente no
son ciertas o caer en contradicciones para demostrar que la tienen y eso los hace mentir. Así
pues, no engañan con el afán de generar un perjuicio sobre su contrincante, sino para ganar
una discusión. Desembocando en otro punto importante, puesto que este afán es en realidad la
manifestación de un sentimiento reiterativo en el mundo de la abogacía, el orgullo.
Por último, es necesario, evidenciar las razones que han desencadenado en esta
situación, así como ofrecer una solución ante ello. Es por eso que citando a un profesor de la
escuela de Derecho de la Universidad de Notre Dame, se menciona que:
28
8.5.1. Caso Nacional: Fiscal de la Nación desvirtúa una denuncia ante el Comité
8.5.1.2. Problemática
El titular del Ministerio Público, Pedro Chávarry, tras enterarse de una denuncia
interpuesta por un conjunto de abogados ante el Comité de Ética del CAL, es invitado a un
medio de comunicación nacional para que ofrezca su declaración. Ante esta oportunidad, el
fiscal expresó que “si por mentir me van a inhabilitar, todos los abogados tendríamos que
dejar el Colegio de Abogados”.
8.5.1.3. Descripción de los hechos
8.5.2.2. Problemática
Durante esta situación se pudo apreciar una actitud de alteración de pruebas por
parte de la abogada; sin embargo, como se mencionó debe tenerse en cuenta algunos hechos
adicionales. Los acusados demandaron haber sido víctimas de constantes abusos sexuales por
parte del padre y aun así iban a ser condenados a pena de muerte, la abogada logró que se les
diera cadena perpetua. Específicamente para este caso, resulta muy importante tener en
cuenta que no existe nada que justifique el asesinado; sin embargo, las secuelas psicológicas
causadas por el abuso pudieron haber tenido esta repercusión contra su progenitor y la
abogada al compadecerse de su situación llevó a cabo acciones que dentro de un marco de
legalidad no se consideran éticas.
9. Capítulo II: El deseo ruin, la ambición y los abogados
9.1. Definición de ambición
9.1.1 Etimología de la palabra ambición
Cuando se habla de conceptos, es de suma importancia comenzar por sus orígenes, la
etimología. Todo inicia en el latín ambitio, considerado también como ambitionis, compuesto
con ambi- que significa “alrededor” e itio “vuelta”, ello hacía alusión a un merodeo o rodeo,
es decir, a la acción de ir por uno u otro lado, acechando a la posible presa. Prontamente se
situó como una expresión que daba a entender el merodeo de quien va pretendiendo algo, por
lo tanto, la palabra, originariamente, se utilizaba en política para referirse a las solicitudes de
los candidatos para conseguir votos por vía legítima. Con el tiempo, la palabra se aplicaría de
forma general para designar al deseo de obtener algo.
9.1.2 Uso de la palabra en la actualidad
En nuestra lengua, la definición de ambición que nos estrega la RAE, habla de un
“deseo ardiente de conseguir algo, especialmente poder, riquezas, dignidad o fama”(Real
Academia Española, s.f., definición 1). Cuando se menciona “deseo ardiente”, la
interpretación puede darse de muchas maneras, siendo una respuesta un tanto difusa, sin
embargo, se puede convenir en que, de forma general, hace referencia a cierta voracidad o
ansiedad por la consecución de algo; dicho de otra forma, expone aquella urgencia o premura
por la obtención del bien deseado.
Ciertas comprensiones del concepto acuñan a la ambición como inherente a la
naturaleza humana y le otorgan, además, connotaciones benéficas en la medida que alguna
dosis de ambición es vital para el bienestar de la sociedad. Ello llega a razón de que esta no
es simplemente pasar sobre los demás solo para conseguir lo que se desea, por lo cual es
31
factible comprender que no será tampoco el deseo de crecer indiscriminadamente porque sí, o
sin sentido, inclusive es más bien el deseo que como seres humanos se tiene para buscar
protección, seguridad y bienestar (Díaz, 2019).
En otro sentido, ha sido relacionada con conductas anti-éticas o inmorales en la
medida que se evidencia a través de las guerras, el fraude, la corrupción y el engaño. En un
mundo donde los recursos han sido definidos como escasos, la ambición se despliega
entonces a expensas de los demás, a expensas de aquellos menos ambiciosos o con
menos competencias para adquirir lo deseado. Un punto importante a aclarar, es que hay
ambición en la medida en que hay escasez y que esa sensación de insuficiencia o necesidad
es construída como una amenaza permanente contra la que hay que luchar (Mandiola, 2017).
En ese sentido, su principal característica es entonces también su primera debilidad: la
incapacidad de saciarse. Para quien ambiciona nunca nada es suficiente, por lo que ha
constituido una mejora continua o la tendencia sin fin hacia la optimización.
9.2. Tipos de ambición
Muchas personas se preguntan si es bueno ser ambicioso, cuestión que ha sido
generada por la cultura y sociedad en la que se reside. Las familias usualmente educan a sus
hijos desde pequeños para no ser ambiciosos, ya que se posee la creencia de no deber
pretender o buscar más de lo necesario, focalizándose en el hecho de ser humildes
constantemente sin desear algo más allá de lo que se tiene.
Ello llega a ser problemático cuando todos los conceptos se centran en asociar la
humildad con la ausencia de abundancia, escasez o pobreza. En ese sentido, se cataloga a la
ambición únicamente como algo que daña al ser humano, un sentimiento negativo, malo y
perverso que tiene origen en las mentes que buscan gozar de superioridad frente al resto de la
sociedad.
Muy por el contrario, la ambición no es algo malo, de hecho, se basa en el deseo de
conseguir metas concretas que el sujeto se propone; estas una vez logradas, son sustituidas
por otras cada vez más importantes. Se dice que las personas ambiciosas llegan a más en la
vida, logran sus objetivos con éxito, mientras que los que carecen de ambición se conforman
con pocos logros y no suelen plantearse nuevas metas (Krieger, 2013).
La psicología distingue dos tipos de ambición: la ambición sana o normal y la
ambición desmedida o patológica. Dichos tipos se desarrollarán a continuación.
32
no se rendirá fácilmente ante los inconvenientes, ya que asumirá que los obstáculos son parte
de la vida. Como segundo punto está el asumir que los objetivos conlleva un esfuerzo; es
decir, no caen en la falsa e irracional creencia que sugiere que la vida debe ser fácil y sin
dificultades.
Adjunto a las características anteriores, también se tiene que este tipo de personas se
miden con ellos mismos, dejando de lado emociones destructivas como la envidia o la
comparación insana. Su felicidad y bienestar dependen de cómo les va a ellos y de si
consiguen o no sus metas, no de lo que consiguen otros o la infelicidad de los demás.
Por último, se tiene que a la hora de enfrentar problemas, los ambiciosos positivos
intentan resolverlo sin quedarse estancados o siendo personas dependientes, de hecho, ellos
no necesitan la aprobación de los demás para tomar acción y conseguir sus metas. Tienen
buenos niveles de autoestima y generalmente son socialmente aceptados.
9.2.2 Ambición desmedida o patológica
Cuando se habla de ambición patológica, existe un afán desmedido por lograr más y
más, una insatisfacción permanente, nunca se tiene suficiente y en definitiva una motivación
que, lejos de equilibrar la propia vida, la hace girar en función del trabajo y los objetivos
marcados. Detrás de este tipo de ambición, pueden esconderse diversas cuestiones (Itae,
2022).
La primera de ellas es la falta de autoconfianza, ya que al no confiar en sí mismo, el
trabajo y los éxitos laborales actúan como un disfraz de un problema aún mayor, la carencia
de autoestima. El estatus que se intenta crear como forma de recompensa social es superficial
y no logrará que la persona se sienta del todo realizada internamente.
La segunda se basa en el narcisismo, puesto que en el perfil narcisista se estipula la
necesidad constante de demostrar que se es mejor en todo. Con frecuencia destacan sus
logros, intentan ser el centro de atención, recibir halagos por su buen hacer para sentir que
están en un plano superior a los demás (Itae, 2022). Desde ese punto de vista, la ambición se
moverá hacia el camino de alcanzar logros sin tregua alguna, escalar para demostrar y nunca
darse por satisfechos. Es en el narcisismo donde cualquier logro ajeno es percibido como una
amenaza al ego, lo cual les motiva a seguir trepando en la vida a pesar de perjudicar a los
demás.
El tercero tiene como elemento principal a los celos, los cuales pueden también actuar
como un motor de la ambición patológica. Desde ellos, existe la inseguridad y desde la
inseguridad, los éxitos que no son propios pueden también ser vistos como amenazas a la
34
estabilidad. La persona con tendencia a los celos o a la envidia podrá, entre otras cosas,
luchar constantemente por el afán de no quedarse atrás respecto a los demás, sintiendo que lo
que hacen o consiguen los otros es siempre mejor que lo que ya se tiene o se ha conseguido
(Itae, 2022).
El cuarto es el miedo al rechazo en la vida personal, en ese caso se habla de personas
con una vida muy poco cultivada, puede ocurrir que apenas tengan amistades, vida social o
pareja. Como no hay elementos fuera del trabajo que gratifiquen su vida, los buscan en los
logros laborales, así pues existen personas que “viven para trabajar”, en las que realmente el
trabajo actúa como refugio para evitar afrontar otras parcelas de su vida que están mermadas,
y que debido a ello le supone miedo o resistencia enfrentarlas (Itae, 2022).
En realidad todos estos posibles orígenes de la ambición patológica la hacen
precisamente de ese tipo, puesto que la persona nunca tiene una vivencia positiva o sana de
sus experiencias personales y profesionales, ello porque siempre hay alguna carencia personal
no satisfecha.
Esta sección termina con una frase dicha por el psicoterapeuta José Baldeón, el cual
resume esta ambición diciendo lo siguiente: "Las personas generalmente buscan tres cosas:
fama (diferente de prestigio), poder y dinero. La cultura consumista empuja al hombre a
conseguir las cosas pisoteando valores y principios" (RPP, 2017, párr. 4 ). Es así que la
sociedad puede influir en el desenvolvimiento de una persona, la codicia o ambición
desmedida se puede insertar en la vida como lo haría una adicción por las drogas o el alcohol.
9.3. La ambición y su vínculo con la labor del jurisconsulto.
Montesquieu decía: “Un hombre no es desdichado a causa de la ambición, sino
porque está lo devora”. Estas sabias palabras del filósofo dejan en claro que la ambición
consume al ser humano, el constante deseo de poder, fama y riqueza, lamentablemente, ciega
a las personas, las cuales colocan esos intereses por encima de todo, incluso olvidándose de
sus valores a la hora de conseguir sus objetivos. A pesar de todo ello, existen personas que
consideran la ambición como algo positivo, pues impulsa a los seres humanos a lograr sus
metas, a esforzarse, a luchar por lo que quieren, el problema se torna cuando esto incluye
pasar por encima de los demás sin respetar sus derechos.
La ambición se ha manifestado en diferentes profesiones, una de ellas viene a ser la
abogacía, pues muchas veces esta se ha visto criticada por las diferentes acciones que
ejecutan los juristas al momento de ejercer sus funciones. Muchos autores como por ejemplo
John Gardner señalan que: “Los creadores de las normas jurídicas no tienen fines morales,
son personas absolutamente cínicas, pues usan la creación del derecho solamente como
35
instrumento económico, retaliación o consolidación del poder” (Gardner, 2015, pág. 1106).
En nuestra sociedad esto se ha visto claramente evidenciado, puesto que un gran porcentaje
de los jurisconsultos se mueve por fines netamente económicos, esto se ha comprobado con
el último análisis que realizó el World Justice Project, pues señala que: “En Perú se ha visto
comprobado un alto nivel de corrupción, por ejemplo, el poder judicial que se encontraba en
41% ha subido dos puntos y según los estudios se esperaría que en los próximos años las
cifras aumenten” (Comex Perú, 2018).Es por todo esto, que muchos afirman que la labor del
abogado posee un estrecho vínculo con la ambición.
Una gran duda que surge es: ¿Los abogados se vuelven ambiciosos por como se
encuentra en la actualidad desempeñada su carrera o es que la ambición es algo natural en su
persona? La respuesta puede resultar compleja, respecto a ello Celis nos indica: “Todo ser
humano es ambiciosos, ya que esta es la propulsión que mueve los motores de tu vida, ya que
brinda la esperanza de llegar lejos” (2014). Sin embargo, Napoleón Bonaparte recalcaba que
“La ambición no se detiene, ni siquiera en la cima de la grandeza”, por lo que se debe tener
mucho cuidado ya que muchas personas a pesar de lograr sus objetivos no se sientes
satisfechas en los peores casos ni felices, al contrario, sienten que pudieron obtener mucho
más y van tras ello, sin importar los intereses de los demás o a quienes puedan afectar.
La carrera de derecho es un ejemplo de ello, puesto que, se conocen casos donde
algunos profesionales a pesar de poseer un trabajo adecuado además de excelente salario se
dejan influenciar por cuestiones materiales, llevándolos a ejercer de manera errónea sus
funciones como se muestra en el “Informe de la Procuraduría Anticorrupción, que revela el
impacto de la corrupción y tráfico de influencias en diversas instancias del Poder Judicial y el
Ministerio Público, donde se encuentran procesados 334 jueces y fiscales”(Ojo Público,
2020). Es lamentable saber, que existen abogados que no se conforman con sus sueldos ya
establecidos, sino que buscan obtener más dinero llevando a cabo otras actividades, las cuales
ponen en juego sus valores y disciplina. Como entes rectores de justicia deberían luchar por
ella, siendo ajenos a todo acto que pueda manchar su prestigio.
Tal como lo recalca Orce: “Subir a lomos de la ambición es como cabalgar sobre una
yegua salvaje. Al principio creemos que llevamos las riendas, pero si nos despistamos,
terminaremos con el trasero en el suelo y todo el cuerpo dolorido” (2014). A muchos juristas
esto es lo que les sucede, empiezan a desviarse por el camino equivocado y cuando quieren
ellos tomar las riendas, es tarde, su vida ya esta gobernada por la ambición que esta ansiosa
de poder económico y fama. Lo recomendable es que, a pesar de ello, se dome a la bestia,
puedan nuevamente disfrutar de su carrera sin ser adictos a la sensación de velocidad y
36
desenfreno.
Entonces con todo lo abordado, se puede ver que si existe cierto vínculo entre la labor
de jurisconsulto y la ambición, la cual mayormente se evidencia a través de la corrupción
pero que también puede estar en acontecimientos simples por ejemplo, cuando el abogado
empieza a solicitar dinero a su patrocinado y cada ves le exige más, muchas veces mintiendo
que es para su caso cuando en realidad lo utiliza para sus fines personales, o cuando adquiere
fama además de relevancia, por lo que ve oportuno exigirle más dinero a sus clientes. Como
estos casos pueden haber varios, donde el abogado deja de lado sus principios para poder
conseguir sus fines.
Lo recomendable frente a la ambición y después de haber visto en un subtema anterior
los tipos que desarrolla, es que se aborde desde la manera positiva, es decir el jurisconsulto
debe utilizarla como impulso para lograr sus objetivos, sin desviarse ni tratar de poseer más
de lo que ya ha conseguido, pues eso solo lo llevará a la infelicidad además de poco a poco ir
perdiendo sus valores y desvirtuando su profesión, creando una atmósfera llena de prejuicios
asimismo críticas hacia sus carrera.
9.4. Argumentos sobre la ambición del abogado.
El abogado en el transcurrir de su profesión puede desempeñar sus labores de manera
idónea o caer en la ambición. En este subtema se abordarán diversos argumentos tanto a favor
como en contra de esta cuestión.
9.4.1 A favor
9.4.1.1 El abogado siempre está buscando obtener ganancias
personales o económicas.
Si bien es cierto, el mundo se mueve por fines económicos y todas las carreras
profesionales se desempeñan bajo un sueldo, existen personas que a pesar que ya obtengan
todos esos beneficios quieren poseer todavía más, pues obtener un dinero extra es muy
conveniente. Esta situación lo evidencian los abogados, quienes ponen en juego sus valores, a
fin de obtener alguna consideración especial o simplemente aumentar su patrimonio, por
ejemplo, a pesar de que los jueces según la organización Tusalario ganen al inicio un sueldo
neto mensual de entre S/. 2,657 y S/. 6,477 y tras cinco años de servicio, entre S/.4, 001 y S/.
9, 348 al mes con una semana de 48 horas de trabajo (2019). Tienden a querer poseer más
dinero, pues en el año 2019 según el expediente 00029-2017-33-5002-JR-PE-03 se tuvo
como imputados catorce jueces por el delito de cohecho pasivo específico y otros en agravio
del Estado, al encontrarse en favor de la empresa Odebrecht, quien le había otorgado cierta
37
cantidad monetaria a fin de emitir fallos a su favor, lo más cuestionable fue que como sanción
solo se les impuso pagar un monto de S/ 100 000.00 por parte de cada uno de los acusados,
con el fin de que puedan evitar la prisión preventiva, Como estos casos existen muchos donde
se resalta la ambición tanto económica y personal en los jurisconsultos.
9.4.1.2 El gestor judicial constantemente esta buscando el poder.
Todas las personas en algún momento de su vida desean lograr o alcanzar el poder,
pues sentir que pueden ser ellos quienes designen funciones o manden, los hace sentir
seguros. El problema radica cuando abusan de este poder o siempre están buscando más,
aunque esto signifique sobrepasar los intereses personales de otros. Por ejemplo, en Perú ha
sido muy cuestionado el tráfico de influencias, pues muchos de los cargos se ocupan de esta
manera, los jurisconsultos utilizan sus contactos para alcanzar algún puesto de trabajo, pero
no cualquiera sino de los más anhelados ya sea como jueces, embajadores, decanos, entre
otros, dejando de lado a personas con altos conocimientos, por lo que cuando se encuentran
en el poder también ejercen sus funciones sin valores ni principios, dejando cegar por el
poder.
9.4.1.3 Los propios abogados afirman su ambición en diversos
ámbitos.
Como se mencionó en subtemas anteriores, la ambición puede poseer dos caras, una
buena y otra mala, dependiendo de como se maneje. En el caso de los abogados la mayoría
suele ir por el camino erróneo, dejando que esta la domine y deje su vida sin valores. A pesar
de ello, los juristas resaltan su ambición y no tienen vergüenza de decir que la poseen un
claro ejemplo de ello es Michael Lindsay quien manifestó: “Yo tengo el equipo para el
mundo normal de ser un abogado. Yo tenía la imaginación para eso. Yo tenía un tipo
divertido de la ambición”. Pero no es el único, pues hace muchos años atrás también ya lo
reconocían como una característica que forma parte de su ser además que les ayuda a
aumentar su patrimonio, es así que Jean de La Bruyère manifestaba “El esclavo solo tiene un
dueño; el ambicioso, tanto como personas le pueden ser útiles a su fortuna”. Pues justamente
como lo recalcan su fin siempre esta delimitado a alcanzar poder y aumentar sus fines
económicos.
Pero no solo ellos, afirman su ambición, sino ciertos personajes de manera indirecta a
lo largo del tiempo también lo han realizado, entre ellos se encuentran Manuel González
Prada, quien menciona: “Tienen por cerebro un fonógrafo con leyes y decretos; por corazón
un legado de pedidos y súplicas; por conciencia un monstruo engendrado que solo busca su
beneficio.” (García Toma, 2014) y Ricardo Palma que en una de sus tradiciones peruanas
38
cuenta como un abogado engatusa a San Pedro para ocupar el título de portero celestial
(Palma, 2012). Ambos escritores reflejan como el jurista anda en busca de poder, lo que
alimenta su ambición pero lo aleja de sus principios.
9.4.1.4 Datos estadísticos que demuestran la ambición de los jurisconsultos.
Como se ha venido demostrando es evidente la relación de la ambición en el ejercicio
de las funciones de los juristas, sin embargo, no existen datos estadísticos que midan ambas
variables, pero sí estadísticas que están vinculadas, como es el caso de la corrupción, puesto
que esta, al igual que la ambición se suele manejar bajo ciertos criterios económicos. Es así
que según el índice de percepción de Corrupción (IPC) en el año 2020, el Perú ocupaba el
puesto 94 de 180 economías en cuanto a este gran problema, evidenciando la indisciplina de
los administradores de justicia pero no solo ello, sino que “el poder judicial que se encontraba
en 41% de corrupción ha subido dos puntos y según los estudios se esperaría que en los
próximos años las cifras aumenten” (Comex Perú, 2018). Con todo ello, se demuestra que la
ambición va en aumento dentro de la profesión que desempeñan los abogados.
9.4.2 En contra: Los abogados no son ambiciosos
Cuando se dice que los abogados no son ambiciosos, significa que no poseen una
ambición patológica, ya que en un principio, si se la sabe dirigir, esta no causa ningún efecto
perjudicial hacia terceros. Adjunto a ello, es necesario mencionar que la abogacía es al mismo
tiempo arte, política, ética y acción. Estos al ser solo los contenidos de ella, la dotan de
forma, es decir, le entregan los elementos para darle un estilo. Dicho estilo no es la unidad,
sino la diversidad del abogado cuya actividad pueda simbolizar a todo el gremio, aunque es
muy probable que esta generalización no se encuentre del todo acertada.
Las personas al tener tan interiorizado el concepto de abogados que carecen de
valores éticos y se dejan llevar por su ambición cegada, impulsan ese tipo de acciones al
ofrecer coimas a los agentes policiales por alguna multa o para librarse de algún antecedente.
Es a razón de ello que Belén Carmona Sánchez en su libro “La ética en la práctica del
abogado” mencionó que: “Como estudiante, docente, abogado o juez, ninguno estamos
exentos de carecer de bondades éticas. Sin embargo, tenemos la libertad de decidir hacia
dónde queremos dirigir nuestro camino, que queremos ser para con uno mismo, como para
con nuestros semejantes” (Sierra, 2019, párr. 20).
En ese mismo sentido, como ejemplo de abogados que no se dejaron callar ni forman
parte del espectro corrompido de los jurisconsultos, es Federico Gertz. En 2015, el
funcionario denunció a la pareja de su hermano Federico y a las hijas de ella por su asesinato,
sin embargo, la Fiscalía de la capital mexicana evitaba a toda costa investigar el caso por
39
asuntos políticos. Por muchos años él luchó para que se hiciera justicia pese a las constantes
tentativas de soborno y la corrupción de los fiscales (El País, 2020). Resultado de su
movimiento, una de las implicadas logró por fin ser encarcelada al ser demostrada su
culpabilidad.
Sin duda, se puede afirmar que la ambición tiene dos caras. Su rostro luminoso brilla
por su autorrealización y su lado oscuro conduce al más profundo de los infiernos. De ahí la
importancia de aprender a gestionarla lo mejor posible. Como se pudo visualizar, será como
los cantos de sirena, por lo que dependiendo de cómo se interprete, ceder a sus impulsos o
resistirse estoicamente a su sugerente canción será una prueba de valor en la vida profesional
de cada abogado. Al final, la ambición será una mala hierba que crece únicamente en una
mente vacía.
Fuera de ello, también se vuelve importante acotar que 45.868 abogados y abogadas
del Turno de Oficio atendieron, tan solo en el 2019, a dos millones de asuntos de Justicia
Gratuita de ciudadanos. Aunque se puede llegar a pensar que por su poca remuneración, son
los más propensos a realizar actos no éticos, un 80% de los ciudadanos que recibieron este
tipo de asistencia la califica como positiva y gratificante (Gioconda, 2020). Ante ello, se
demuestra que los jurisconsultos no siempre actúan buscando ganancias monetarias, sino que
pueden hacer caso a fines altruistas en beneficio de un bien social.
9.5. Casos de Ambición
9.5.1 Caso Nacional: Abogada intentó ingresar droga en pescado.
9.5.1.1. Datos de los implicados:
● Nombre de la abogada: Rosa María Valladares Mendoza
● Edad: 55 años
● DNI: 00364819
● Lugar de los acontecimientos: Establecimiento Penitenciario de Tumbes
● Fecha y hora del acontecimiento: 27 de enero a las 12:28 am
9.5.1.2. Problemática
Según la página oficial del Gobierno del Perú el día Jueves 27 de enero del 2022 la
abogada identificada con el nombre de Rosa María Valladares Mendoza trato de ingresar
Establecimiento Penitenciario de Tumbes, sin embargo, esto no fue posible debido a que los
oficiales habían identificado que trataba de ingresar droga introducida en pescado.
40
9.5.2.2. Problemática
El ex abogado de Trump, confirmó que había alcanzado un acuerdo con la Fiscalía y
reconoció haber cometido delitos entre los que se encuentran la evasión del impuesto sobre la
renta y hacer contribuciones económicas corporativas ilegales a campañas electorales.
Además de pagar más de 130 mil dólares a dos mujeres para comprar su silencio, logrando no
afectar a Trump Corporation.
9.5.2.3. Descripción de los hechos
En enero de 2018, en un tribunal de Manhattan, Cohen dijo que el expresidente
Donald Trump miente. El candidato, según su ex abogado, ordenó los pagos, además estos
constituyeron una violación de la ley de financiación de campañas, infringiendo a su vez la
ley de impuestos. Todo lo ocurrido se resumiría en cinco cargos de evasión fiscal, un cargo
por hacer declaraciones falsas a una institución financiera, otro por hacer intencionadamente
una contribución corporativa ilegal y un último por una contribución de campaña excesiva a
petición de un candidato o campaña. Este se refiere a lo mencionado por la Wall Street
Journal, que informó que en octubre 2016, Cohen utilizó Asesores Esenciales LLC para pagar
a la actriz de películas pornográficas Stormy Daniels con respecto a un asunto que tenía con
Trump en 2006. El abogado dijo en The New York Times en febrero de 2018 que los $ 130
000 fueron pagados a Daniels de su bolsillo propio, que no fue una contribución de la
campaña de Trump. En abril de 2018, Trump reconoció por primera vez que Cohen lo
representaba en el caso Stormy Daniels, luego de haber negado el conocimiento del pago.
10. Capítulo III: Insensibilidad, mancha en la abogacía
La insensibilidad emocional puede definirse como la discapacidad de poder percibir
emocionalmente, identificar y evaluar los sentimientos de las otras personas o las situaciones
por las que están atravesando. Esta es la situación en la que se encuentran señalados los
abogados cuyo comportamiento está definido por el interés y el beneficio propio en desmedro
de la situación de sus clientes o de las personas que no cuentan con recursos necesarios, pero
que requieren de su trabajo.
En ese sentido, la insensibilidad forma parte de los estereotipos directamente
vinculados al ejercicio de la abogacía, cuya presencia constituye una mancha que resulta
contraproducente para resolver primero los conflictos de quienes son sus patrocinados y
también para poder desenvolverse en el mercado laboral.
42
10.1. Causantes:
10.1.1. Deficiente formación emocional
Una de las posibles causales de tal insensibilidad pueda deberse a la natural falta de
habilidades emocionales de quienes ejerzan la carrera de derecho. En ese sentido, estamos
también ante una escasa formación emocional que permita paliar las deficiencias de quienes
alguna vez fueron estudiantes y hoy defienden los intereses de las personas.
Dentro de las múltiples situaciones que se presentan en el ejercicio laboral, uno de ellos es el
de cometer errores y cuyo tratamiento requiere delicado tino y buen manejo de las
emociones. En donde está en escena, la reacción al problema, las consecuencias, y la reacción
del cliente ante lo que le sería perjudicial. Es por ello, que se requerirá habilidades
comunicativas con el cliente con bastante honestidad y ética con el fin de que los
inconvenientes propios de todo proceso no supongan el deterioro de la relación entre ambos.
Otra de las situaciones que requieren un especial tratamiento de las emociones es el
referido a la litigación. Dentro de la cual hay momentos en que los clientes no tienen la
capacidad emocional para continuar con un caso, por lo que requerirá de sensibilidad del
abogado para saber cuándo detenerse. “También responder a cartas argumentativas, decidir
sobre 1 de cada 10 opciones y trabajar con decisiones de alto riesgo requiere mucho trabajo
emocional. Si no estás consciente de las consecuencias emocionales que podría tener sobre tu
cliente o para la otra parte, entonces es más probable que brindes un consejo estratégico
deficiente” (microjuris, 2019). Es evidente que en este escenario de litigación hay un mayor
grado de incidencia de las emociones que tienen que ser adecuadamente gestionadas y
manejadas convenientemente.
El camino para administrar las emociones, por ejemplo, la ira, es integrar y aceptar
que la estás sintiendo; una vez integrada, esa fuerza de protección se activa de una manera
asertiva y sin violencia la persona puede detener el ataque, reflexionar sobre esa emoción,
encontrar sus orígenes en esa situación específica y encaminar su estado emocional a la
solución y reparación de la situación o la relación interpersonal que se está viendo afectada.
En el caso de una audiencia eso podría significar, entre otras acciones, objetar efectivamente
dentro del proceso.
10.1.2. Visión comercial de la profesión
La insensibilidad también tiene lugar en el ejercicio de la abogacía cuando solo es
percibida como una fuente de ingresos por parte de quienes la practican, es decir, su
“vocación” se reduce a una visión comercial de las labores como abogado. En ese sentido, “si
43
Además, respecto al caso del ejercicio del Derecho, deberíamos diferenciar el ámbito
de actuación del abogado (vg. Poder Judicial u organismos administrativos) o litigue de
forma autónoma. A su vez, tiene influencia la rama del derecho en la que se litigue, ya que
por ejemplo, un abogado penalista, que está en contacto con instituciones carcelarias, y en
general trabaja con la libertad de las personas, está expuesto a otras variables que aquel que
se especializa en derecho previsional. (Silva, 2018, p.5)
En otros, existen factores como las extensas jornadas de trabajo, un salario variable y
el alto grado de vulnerabilidad y conflictividad en las demandas de los clientes, son
componentes que conjugados con otras características como la duración en el tiempo,
factores socioeconómicos, y personales, hacen que un sujeto vivencie una sensación de “estar
quemado”, lo cual trae aparejadas distintas consecuencias a corto, mediano y largo plazo.
Por otra parte, se encuentra el letrado que trabaja en instituciones, atravesado por otras
variables como la estabilidad, antigüedad profesional, estructura, clima organizacional,
relaciones interpersonales y el salario. Siguiendo esta línea de pensamiento, Vita Escardó
señala que se juega gran parte de quienes somos, y lo que más “quema la cabeza” es no solo
la frustración por lo que cuesta poder sacarlos (a las víctimas, pacientes, clientes) de su
situación, sino especialmente los contextos institucionales tóxicos en que los profesionales se
manejan; entonces quedan entrampados entre dar asistencia a un otro, siendo los
profesionales la cara de la institución, y una institución que tiene un déficit en respaldar a ese
profesional. En esta paradoja el profesional “se quema”. También hace referencia a la
frustración constante por falta de recursos, falta de dinero, falta de tiempo, falta y exceso,
exceso de trabajo, exceso de población a la que hay que atender; generando que se empiecen
a perder los ideales, y eso va en detrimento del yo. La persona se empobrece, empobrece su
vida social, familiar y muchas veces se enferma. (Silva, 2018, p.6)
Desde este último punto de vista, puede hacerse una relación entre el ideal del yo de
un sujeto al tiempo de la elección vocacional, y la realidad posterior de su inserción
profesional, sin dejar de lado las herramientas individuales que desde lo psíquico cada uno
tiene para afrontar esa brecha entre lo que se imaginaba y lo que es. Cuanto mayor sea la
idealización, también mayor será la decepción si la vida post-universitaria no coincide con las
expectativas planteadas. No obstante ello, como todos estos conceptos está en permanente
construcción y reedición, pueden ser modificados teniendo en cuenta un equilibrio entre lo
ideal, lo real y lo posible.
45
10.2. Consecuencias:
10.2.1. Desvío del ideal profesional
Los abogados suelen ser, algo más que técnicos del Derecho. Ellos dan forma a
acuerdos y fabrican derecho. Inventan nuevas formas de vida social, completan lagunas,
resuelven conflictos y ambigüedades. Moldean la ley mediante el proceso de argumentación
jurídica, en el tribunal, en los escritos, en las negociaciones. Sin embargo, hay casos en los
que la praxis se ve teñida por factores externos que pierden el eje central de la profesión. Es
en ese sentido, que en la revista sobre enseñanza del Derecho descansa este comentario:
“Mira, he moldeado el derecho de esta manera, y de este modo, y de esta otra forma. He
creado mucho derecho. Pero no me responsabilicen por el contenido real del derecho que
produje. Ello fue determinado por quien resultó ser mi cliente en ese momento. Yo elijo a mis
clientes por quien resultó ser mi cliente en ese momento. Yo elijo a mis clientes según su
capacidad de pago. ¿En qué me concierne si el derecho por el que me pagan va en contra de
mis propias creencias morales? Yo soy tan solo un abogado y dejo a otros la decisión
final”(Kennedy, 2019); lo cual manifiesta un problema al notar que la actividad del abogado
no es neutra y cuando mayores son sus habilidades jurídicas, menos neutrales resultarán ellos
mismos. Es por ello, que si se colocan juntos el talento jurídico de los legisladores y los
resultados que ellos mismos desaprueban, intensificará la idea de un contexto con malos
resultados e invenciones inadecuadas. De tal forma, se debe moldear al Derecho en beneficio
de la comunidad, aun cuando no sean los mismos abogados quienes “tiraron del gatillo”, sino
un juez al resolver determinado caso.
10.2.2. Deficiente ejercicio profesional
El asunto ha sido abordado en la literatura peruana por muchos autores como Manuel
Scorza, quizá, de manera más insistente, pero Ciro Alegría describió en términos ya clásicos
la actuación de los operadores del derecho como un arte de fraguar pruebas y testigos, e
incluso sobornar al abogado de la parte contraria, para conseguir el objetivo del cliente, tal
como se refleja en este diálogo entre el tinterillo y el voraz hacendado, su patrocinado:
- [...] habrá que hacer destruir los hitos que van del arroyo Lombriz a El Alto y decir
que las tierras de la comunidad son las que quedan en torno a la laguna Yanañahui.
Así damos el golpe de gracia... Yo he estudiado muy bien el expediente y por eso me
demoré un poco en informarle. Quiero ahora los testigos. - Yo le mandaré a Zenobio
García con su gente y al Mágico que es un mercachifle que me ha servido bien
siempre, dándome el aviso de más de veinte colonos fugitivos. Por cada uno, en
realidad le pago diez soles, pero me ha servido y se puede contar con él. Con García
46
me entiendo hace tiempo. Ambos ya han estado actuando en relación con Rumi. No
crea que me duermo. Con el subprefecto tenemos lista la toma... apenas el juez... - ¿Y
el juez? - De mi parte. Si a mí me debe el puesto. Yo moví influencias y lo hice a
pesar de que ocupaba el segundo lugar en la terna. Don Alvaro se frotó las manos y el
tinterillo pidió permiso para encender un cigarrillo. Y apuntó: - Por eso es que le decía
de la necesidad de captar a Bismarck Ruiz. Yo le he puesto allí un vigilante, de
amanuense: un muchacho de buena letra que se le fue a ofrecer muy barato. Yo lo
compenso... usted me entiende... No crea que los indios dejan de husmear algo... El
otro día le mandaron uno con el informe de que usted parecía entenderse con Zenobio
García y el Mágico. Ruiz les respondió que no temieran 324 Los abogados de Lima en
la administración de justicia. Una aproximación preliminar porque los anularía
removiendo viejos asuntos que estos tenían pendiente con la justicia... ¿Ya ve usted?
Además, él podría apelar el fallo del juez... Los indios no saben nada de esto... si él se
hace el tonto y se queda callado... - ¡Indios espías! Déjelo a mi cargo, se arreglará. Y
le enviaré lo más pronto a García y Contreras, con otros, para que usted los aleccione
bien... (Alegría, El mundo es ancho y ajeno, p. 44).
Tal referencia, actúa como refuerzo de la idea que se aborda en este apartado,
aludiendo a la realidad peruana actual y la de siempre en el ámbito práctico de la profesión.
10.2.3. Despersonificación del abogado
En suma, en este apartado se verán las normas de una ética profesional, como la ética
judicial, son también reglas de la razón en cuanto prescriben las conductas que son
consistentes con la función social de esa profesión.
El profesional está moralmente obligado a todo aquello que es razonable para el buen
desempeño de las funciones y responsabilidades profesionales que ha asumido, para el
cumplimiento de los fines de la profesión, o para los bienes sociales que tiene bajo su tutela.
En estos campos de la ética aplicada a las profesiones, lo moral está en estrecha conexión con
los modelos y los estándares de excelencia de la práctica profesional. Es claro que para ser un
buen profesional no basta con ser una buena persona y podría decirse que esta no es una
condición indispensable.
Se requiere sobre todo “tener oficio, dominio de las reglas, eficiencia y maestría en la
práctica profesional. Se podrían formular incluso las siguientes paradojas: 1) alguien puede
ser una buena persona en el sentido moral, pero ser, al mismo tiempo, desde el punto de vista
técnico, un mal profesional y, a la inversa: 2) alguien puede ser moralmente reprochable en
47
muchos aspectos de su vida personal y de su calidad humana, pero ser al mismo tiempo muy
profesional, y técnicamente excelente”(Zan, 2019).
Vale acotar que en algunas profesiones sociales, como la del docente y la del juez, las
exigencias de la propia función profesional se conectan muy estrechamente con la calidad
moral de la persona, por razones obvias. La primera proposición, en cambio, es inconsistente
e inaceptable porque la responsabilidad y la rectitud de la conducta plantean a todo
profesional ante toda la exigencia moral básica de ser competente en el ejercicio de su
profesión. Y una buena persona, que ha incorporado la rectitud moral como cualidad o virtud
fundamental, si no posee ni se siente capaz de adquirir la debida competencia para una
función, naturalmente no la asume, o renuncia y deja su lugar a otros que tengan la aptitud
que se requiere para hacer bien las cosas. Puede pensarse que la actitud de autocrítica que
presupone mi aseveración es muy rara, y que es poco realista plantearla como una exigencia
moral.
Tiende a ser rara y poco realista como la moral misma, ni más, ni menos; y que no
requiere una especial capacidad de autocrítica, la cual sí puede ser más escasa, porque la
buena disposición moral conlleva mucha apertura, actitud de diálogo y humildad para
escuchar a los demás.
El hombre que no es soberbio, o arrogante, es accesible a la crítica y tiene siempre
buena oportunidad de saber, en el diálogo con los demás, cuántas veces se
equivoca.(Dworkin, 1984) En este sentido la moralidad tiene mucho que ver con la
posibilidad de conocer la verdad en general, y también, en especial, la verdad sobre nosotros
mismos. Según algunos autores, los códigos de ética profesional, o institucional, están a
mitad de camino entre la ética y el derecho. En rigor, la ética no es codificable. Conforme al
concepto de la ética, y a las diferencias con el derecho, en la medida en que los códigos de
ética judicial son dictados, supervisados o aprobados por el Poder Judicial, o por el
Legislativo (y quizás no puede ser de otra manera), y que prevén algún tipo de sanciones
externas, estamos ante una cierta forma de juridización de normas o reglas disciplinarias.
Con estas observaciones no se quiere de ninguna manera desacreditar a los códigos de
ética judicial (son los propios afectados quienes tienen que debatir sobre la conveniencia
práctica de imponerse tales códigos fijados por escrito); de lo que aquí se trata es solamente
de relativizar, desde el punto de vista de la Ética, la relevancia propiamente moral de estos
instrumentos.
48
● Nombres:
Walter Benigno Ríos Montalvo
Guido Aguila Grados
Maritza Sánchez Liza de Ríos
Julio Gutiérrez.
● Lugar de los acontecimientos: Consejo Nacional de la Magistratura
● Fecha y hora del acontecimiento:7 de febrero a las 5:20 pm
10.3.1.2. Problemática
El 7 de febrero pasado, a las 5 y 20 de la tarde, Walter Ríos llamó a su esposa,
Maritza Sánchez Liza de Ríos, que es defensora pública del ministerio de Justicia, para
contarle acerca del choque de facciones al interior del CNM por la elección de su nuevo
presidente; y que trataría de tender puentes con los consejeros Guido Aguila y Julio
Gutiérrez, por intermedio del muy notorio José Luis Cavassa Roncalla, para abogar por la
candidatura del antropólogo Orlando Velásquez.
10.3.1.3. Descripción de los hechos
Esta conversación se dio poco más de un mes después de que IDL-Reporteros
publicará el reportaje ‘Conversación en Trinidad Morán’, que reveló que el consejero Guido
Aguila había organizado una reunión en su casa para que el congresista fujimorista Héctor
Becerril persuadiera al consejero Baltazar Morales de votar por el candidato que él
respaldaba para la presidencia del CNM: el consejero Julio Gutiérrez.
Orlando Velásquez no era el candidato favorito del presidente saliente.
Sin embargo, el intermediario elegido por Ríos para hacer las gestiones a favor de
Velásquez era conocido por ser un operador político y tener cierto grado de cercanía con
algunos de los consejeros. También por estar envuelto en varios casos de corrupción.
Entrevistada por IDL-Reporteros, Maritza Sánchez dijo que “no recuerdo, hablo de muchas
cosas con mi esposo. No recuerdo el nombre del señor Cavassa. No recuerdo el contexto que
usted me está diciendo, lo niego”. Esta indicó que Ríos estaba con licencia médica, y que le
dejaría saber el interés de entrevistarlo.
49
Como preámbulo, este solo es un capítulo del amplio caso de “Los cuellos
blancos delpuerto”. Por ello, con los hechos anteriormente narrados se evidencia la falta
de ética porparte de los jueces y fiscales al burlar un evento democrático como lo es la
elección delnuevo presidente del ex Consejo Nacional de la Magistratura al tratar de
cohechar la voluntadde más fiscales para sumar los votos necesarios y llegar a la elección de
Orlando Velásquez. En este contexto, podemos ser testigos de las acciones de carácter
calculador e insensible porparte de los magistrados, Walter Benigno Ríos Montalvo,
Guido Aguila Grados, MaritzaSánchez Liza de Ríos y Julio Gutiérrez, quienes buscando
favorecer sus intereses económicos y de poder, sabotean el proceso democrático de la
elección de un presidente por medio de favores y apoyos que luego esperan ser pagados.
10.3.2 Caso Internacional: Imputación al abogado Bento, por asociación
ilícita, cobro de sobornos, enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
10.3.2.1. Datos de los implicados: Abogado de Argentina
● Nombre del abogado: Walter Bento
● Edad: 56 años
● Lugar de acontecimientos: Mendoza
● Fecha del acontecimiento: 5 de mayo del 2021
10.3.2.2. Problemática:
Gracias a los datos proporcionados por la página web del diario Heraldos, es que se
sabe que el día 5 de mayo del 2021 el, entonces, juez federal Walter Bento fue imputado por
la Fiscalía General de Mendoza por asociación ilícita, cobro de sobornos, enriquecimiento
ilícito y lavado de activos. Sin embargo, el estado de este proceso legal se encuentra en pausa
y a la espera de su pronta resolución.
Los datos que aparecieron en el teléfono del detenido Walter Bardinella Donoso,
acusado de narcotráfico, y las declaraciones de Diego Barrera, el principal imputado por el
secuestro y homicidio del empresario y despachante de Aduana Diego Aliaga, vecino del juez
y quien hacía negociados a nombre de Bento.
Por otro lado, una de las pruebas que más comprometen al juez es la relación Aliaga. Según
la acusación, hubo 265 llamadas, en un lapso de 8 meses, entre el ex despachante y un
teléfono que estaba agendado con el nombre de “primo”. Al constatar la Fiscalía general
50
quién era el propietario del ese número de teléfono, descubren que era el teléfono oficial de
Bento. Hasta el momento el juez se ha negado de entregar su teléfono IPhone 12 Pro porque,
según argumenta su abogado Mariano Cúneo Libarona, “nadie está obligado a aportar
pruebas en su contra”.(Florez, 2021)
11. Conclusiones
En conclusión, a lo largo del ejercicio de las funciones de los jurisconsultos existen
tres prejuicios que son la mentira, ambición e insensibilidad, cada uno ellos, con diversos
argumentos que lo evidencian y que hacen que las personas critiquen la labor del letrado.
Entre ellos se encuentran diversas estadísticas, opiniones tanto de abogados como de otros
grandes personajes, la historia y casos nacionales e internacionales.
De lo abarcado en el primer capítulo, hemos podido hallar el pluralismo
interpretativo que existe a nivel filosófico en la pretensión de definir a la mentira. Las
perspectivas y concepciones disímiles evidencian la complejidad que entraña el concepto.
Asimismo, mediante la mirada histórico-sociológica y comparativa, se pudo ver el problema
de la mentira como un reflejo de la sociedad misma, carente de valores. Además, se puede
afirmar que, todas las personas mienten, por lo tanto lo harán también los estudiantes de
Derecho, pero no por pertenecer a esa carrera, sino por el simple hecho de ser persona. Así
pues, cuatro situaciones sustentan la idea del abogado mentiroso: la retórica, la amplitud del
Derecho, la reiteración y el orgullo. De manera que, el abogado puede ser calificado como
mentiroso; sin embargo no lo son debido a la profesión que ejercen.
En síntesis en el segundo capítulo la ambición es el deseo ardiente de conseguir algo y
se cataloga de dos maneras. La primera es una ambición sana, esta significa alcanzar los
propósitos de vida, pero cuando se vuelve excesiva e impide apreciar lo conseguido, se
convierte en patológica, esta posee un vínculo estrecho con el ejercicio de la abogacía,
muestra de ello es que el abogado constantemente esta buscando tener ganancias personales,
económicas y poder, todo esto ha sido confirmado tanto por diversos personajes como los
propios abogados asimismo existen datos estadísticos que evidencian su falta de principios y
51
valores. Sin embargo, los abogados no pueden ser generalizados como ambiciosos
patológicos, ya que a pesar de tener representantes contraproducentes, no todos se identifican
como tales. Ejemplo de ello es la cantidad de jurisconsultos de oficio que no se mueven por
valores económicos, sino por fines mayormente altruistas.
En definitiva, los fundamentos para afirmar que los abogados muestran un alto nivel
de insensibilidad se sustentan en la deficiente capacidad emocional la cual impide la correcta
reacción ante diversas situaciones problemáticas y su efectiva solución. Así mismo, en la
vocación jurídica se puede identificar la reducción de esta, a una visión comercializadora,
dirigida principalmente al pragmatismo dejando de lado la conexión axiomática que tiene la
carrera con la realidad, trayendo consigo a nuestra comunidad a una suerte de “abogado
dron” que se desliga de aquellos fines humanísticos, que rigen esta noble profesión.
12. Recomendaciones
Una vez concluido el informe de investigación consideramos interesante tratar los
prejuicios de la mentira, el materialismo y la insensibilidad de los abogados desde un método
correlacional experimental, con el fin de que estos estereotipos fueran contrastados con otras
variables y puedan ser sometidos a prueba desde otras fuentes como encuestas, testimonios o
datos estadísticos que podrían enriquecer la investigación, desde el punto de vista
metodológico.
De este modo, damos por finalizado el informe, pero instamos a la continuidad en el
estudio de los estereotipos que recaen sobre la labor del abogado con el fin de desmitificarlos
o reafirmarlos. De esta manera podremos acercarnos más a la realidad y evitaremos que
quienes se encuentren ejerciendo dicha labor no sean objeto de cuestionamientos que poco
tienen que ver con hechos objetivos.
52
13. Referencias
Aldave, R. (03 de Mayo de 2021). El Derecho y yo. Recuperado el 03 de Noviembre de 2021,
de Rafo Aldave_Blog Personal:
https://www.facebook.com/quesabenadie.18/photos/a.121109496735555/1302252524
90646/
Alegría, C. (1971). El Mundo es ancho y ajeno (Tercera ed.). Buenos Aires, Argentina:
Editorial Losada. Recuperado el 11 de Noviembre de 2021, de
http://blogs.ubc.ca/novelaandina/files/2019/09/alegria_el-mundo-es-ancho-y-
ajeno2.pdf
https://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:Um23EFVodhoJ:https://dial
net.unirioja.es/descarga/articulo/4888225.pdf+&cd=1&hl=es&ct=clnk&gl=pe
BBC News. (21 de agosto de 2018). Estados Unidos: Michael Cohen se declara culpable de
fraude fiscal y de violar la ley electoral por orden de Donald Trump. BBC.
https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-45254783
Celis, J. (2014). La ambición no es mala. (3) https://xdoc.mx/preview/la-ambicion-no-es-
mala-autor-juan-sebastian-5f35a6b6d969e
Coloma, R. (2006). Vamos a contar mentiras, tralará. . . o de límites de dichos de los
abogados. Revista de Derecho, 19(2), 27–52.
https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-09502006000200002
Comex Perú (6 julio del 2018). A media tabla en el índice de estado de
derecho.https://www.comexperu.org.pe/articulo/a-media-tabla-en-el-indice-de-estado-
de-derecho
Díaz, P. (22 de junio de 2019). El poder de la ambición. La mente es maravillosa.
https://lamenteesmaravillosa.com/el-poder-de-la-ambicion/
Drane, J. (2019). Honestidad en la medicina: ¿Deberían los doctores decir la verdad?
Universidad de Chile. Pennsylvania: Centro Interdisciplinario de Estudios en
Bioética. Recuperado el 05 de Enero de 2022, de https://confilegal.com/20210823-
opinion-podemos-mentir-los-abogados-en-interes-del-cliente/
Duarte, J., & Sánchez , G. (2017). La mentira, una reivindicación moral: De cómo la mentira
es útil en un paciente terminal. Revista de la Medicina Interna de México, XXXIII(5),
668-674. Recuperado el 05 de Febrero de 2022, de
http://www.scielo.org.mx/pdf/mim/v33n5/0186-4866-mim-33-05-668.pdf
El Comercio. (2018). La carrera de Derecho en el Perú”. Recuperado de
https://elcomercio.pe/suplementos/comercial/pregrado-universidad-institutos/estos-
son-numero-carrera-derecho-peru-1003473
Etimología Chilnet. (s.f.). Amibitionis. En Diccionario etimológico. Recuperado en 7 de
febrero de 2022, de http://etimologias.dechile.net/?ambicio.
Expediente 00029-2017-33-5002-JR-PE-03, 00029-2017-33-5002-JR-PE-03 (Corte Superior
de Justicia Especializada en Delitos de Crimen Organizado y de Corrupción de
Funcionarios 25 de Noviembre de 2019). Recuperado el 6 de Diciembre de 2021, de
https://www.gacetajuridica.com.pe/boletin-nvnet/ar-web/Exp.%2000029-2017-33-
5002-JR-PE-03.pdf
54
Mukarker, V. (1992). De los delitos y las penas en Derecho incario. THEMIS, 135-
150. Recuperado el 05 de Enero de 2022, de
http://repositorio.ugm.cl/bitstream/handle/20.500.12743/424/DE%20%20LOS%20%2
0DELITOS%20%20Y%20%20LAS%20%20PENAS.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Ojo Público (6 mayo del 2020). Enemigo en casa: los jueces y fiscales corruptos que coparon
el sistema de justicia en Perú. https://ojo-publico.com/1809/el-enemigo-en-casa-
magistrados-corruptos-en-el-sistema-de-justicia
Orce, I. (2014). Las dos caras de la ambición. La vanguardia.
https://blogs.lavanguardia.com/metamorfosis/las-dos-caras-de-la-ambicion-80163
Organización Tu Salario (2019). Salario de los Jueces. https://tusalario.org/peru/carrera-
profesional/peru-salario-y-ocupacion/peru-jueces
Oxford Languajes. (s.f.). Ambición. En Diccionario de español. Recuperado en 7 de febrero
de 2022, de https://languages.oup.com/google-dictionary-es/
Palma, R. (2012). Tradiciones peruanas. (J. Juárez, & J. Martínez, Edits.) Lima, Lima, Perú:
Municipalidad de Lima. Recuperado el 5 de Diciembre de 2021, de
https://www.descubrelima.pe/wp-content/uploads/2020/03/TRADICIONES-
PERUANAS.pdf
Partida, G. (2014). La imagen del abogado en la sociedad. Informe deInvestigación,
Universidad Internacional de la Rioja, Madrid. Recuperado el 30 deEnero de
2022, de
https://reunir.unir.net/bitstream/handle/123456789/2787/TFG_DERECHO_Gustavo_
10_10_2014.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Pérez, M. (2019). La mentira desde la perspectiva de la moral y del derecho penal. Tesis de
Bachiller, Universidad Pontificia de Comillas , Facultad de Derecho, Madrid.
Recuperado el 05 de Febrero de 2022, de
https://repositorio.comillas.edu/rest/bitstreams/271064/retrieve
Quiroz, A. (2013). Historia de la corrupción en el Perú (Primera ed.). (J. Flores, Trad.) Lima,
Perú: Instituto de Estudios Peruanos. Recuperado el 08 de Noviembre de 2021
Real Academia Española. (s.f.). Ambición. En Diccionario de la lengua española.
Recuperado en 7 de febrero de 2022, de https://dle.rae.es/ambici%C3%B3n
Rodríguez, Andrés, & Pérez, Alipio (2017). Métodos científicos de indagación y de
construcción del conocimiento. Revista Escuela de Administración de
57
14. Anexos