Antonio M.
Antonio M.
Antonio M.
“La muerte es algo que no debemos temer, porque mientras somos, la muerte no
es y cuando la muerte es, nosotros no somos”.
Se aprecia, de este modo, que este poema responde a una técnica de la poética
simbolista, consistente en presentar primero un objeto, y desvelar después su
sentido profundo, el de esperanza frente al final trágico que se teme.
Este poema tiene un alto valor connotativo ,el léxico valorativo empleado es muy
sugerente e inspira múltiples significados y emociones. Resalta la sencillez y
sobriedad léxica de su mensaje poético, unidas a las más sinceras reflexiones. En
su descripción del olmo y su entorno encontramos muchos términos del campo
semántico de la naturaleza “olmo”, “hojas”, “lluvias”, “sol”, “musgo”, “álamos”,
“hormigas”, “ruiseñores” ... También se observa una abundante adjetivación que
transmite el reflejo de la desesperanza en lo que ve:“hendido”, “viejo”,
“centenario”, “podrido”, “carcomido”, “polvoriento”, que contrasta con la
sustantivación en torno a la esperanza a medida que avanza el poema: “vida”,
“hojas verdes”, “luz”, “milagro”, “primavera”.