CONFIRMACIÓN CatecismoJP
CONFIRMACIÓN CatecismoJP
CONFIRMACIÓN CatecismoJP
INDICE
1 Aquel que escucha mis palabras y las pone por obra, es como un hombre
prudente que edificó su casa sobre roca; y cayó la lluvia y llegaron las riadas y
soplaron los vientos: irrumpieron contra aquella casa, pero no se cayó porque
estaba cimentada sobre roca (Mateo 7, 24-25).
- ¿Por qué la casa de la que habla Jesús aguantó las inclemencias del tiempo?
- ¿A qué se refiere Jesús con "mis palabras"?
- ¿Qué tienen que hacer los cristianos para que su vida esté edificada sobre roca?
- Recuerda los diez mandamientos.
1. LOS MANDAMIENTOS
Dios entregó a Moisés diez mandamientos escritos
en dos tablas de piedra. Antes ya había escrito esta ley en
el corazón de las personas, pero quiso que también
quedaran escritos.
Las leyes existen para proteger un bien determinado:
para proteger la vida del motociclista es obligatorio usar
casco; para facilitar el trafico está prohibido pasarse el
semáforo en rojo; para asegurar el descanso de los
enfermos está prohibido hacer ruido en el hospital, etc.
Los mandatos de Dios, también. Los diez mandamientos están para asegurar que la vida de cada
persona y de toda la sociedad sea digna de su condición humana, y no puramente animal.
En las próximas páginas veremos qué bien protege o asegura cada Mandamiento. Tenemos que
comprender muy bien lo que nos dice Dios en cada Mandamiento para que nuestra conciencia pueda
juzgar correctamente y seguir el camino que lleva a la felicidad, en esta vida y en la otra.
1. ¿Dónde recibió Moisés los diez mandamientos? ¿Esas palabras iban dirigidas
exclusivamente a él?
2. ¿Para qué existen los diez mandamientos?
3. ¿Por qué le interesa a la conciencia conocer bien los Mandamientos?
[5]
2. EL PRIMER MANDAMIENTO
Sería contrario al primer mandamiento adorar a dioses falsos (idolatría), negar la existencia de
Dios, desconfiar de Él o prescindir de Él por autosuficiencia o comodidad.
3. EL SEGUNDO MANDAMIENTO
4. EL TERCER MANDAMIENTO
b. El domingo
Para los cristianos el sábado se ha
sustituido por el domingo, que significa "el
día del Señor", porque es el día en que Jesús
resucitó.
Los cristianos tenemos que santificar el
domingo, y las otras fiestas cristianas,
participando en la celebración de la Eucaristía
y haciendo una pausa en el trabajo, para que
el cuerpo y el alma puedan descansar.
Damos un buen ejemplo participando
los domingos en la Santa Misa, ya que es una
manera de demostrar que Dios está por
encima de todo y de reconocer su amor por
nosotros. El domingo, Dios nos espera en la iglesia
A. DISCÍPULOS Y MISIONEROS
B. ACTIVIDADES
2. Redacta los siguientes mandamientos sin utilizar la palabra "no" y sin alterar su significado
No matarás
No robarás
C. RECUERDA
• La fe es un don de Dios por el cual creemos lo que Él nos ha revelado y que la Iglesia nos
enseña.
• La esperanza es la virtud por la cual confiamos en la ayuda de Dios para alcanzar la vida
eterna.
• La caridad es la virtud que nos permite amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo por
amor a Dios. Es el principal mandamiento de Jesús.
• La adoración es mostrar a Dios nuestra reverencia por su grandeza infinita. Únicamente le
debemos nuestra adoración a Dios.
• La idolatría es la acción de adorar realidades creadas como si fuesen Dios.
• Blasfemar es decir palabras o hacer gestos ofensivos contra Dios, la Virgen o los santos.
• Jurar es poner a Dios por testigo de aquello que se dice.
[9]
LA FAMILIA Y LA VIDA
2 Amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen ... Porque si aman a
quienes los aman, ¿qué recompensa merecen? ¿No hacen eso también los
pecadores? Y si saludan sólo a sus hermanos, ¿qué hacen de más? ¿No
hacen eso también los paganos? (Mateo 5, 44-47).
• ¿Qué dice Jesús que tenemos que hacer con los enemigos?
• ¿Qué tiene más mérito, querer a los que nos quieren o a los que nos odian?
• ¿A qué recompensa se refiere Jesús?
• ¿Es difícil poner en práctica estas palabras? ¿Tenemos alguna ayuda para
hacerlo?
Como ya sabes, los tres primeros mandamientos hacen referencia al amor de Dios; los otros
siete, que estudiarás en adelante, hacen referencia al amor a los demás.
a. Obras de servicio
La Iglesia, a lo largo de la historia y hasta el día de hoy, ha impulsado obras de servicio a los
pobres, enfermos, niños, ancianos, encarcelados... Quiere seguir el ejemplo de Jesús y obedecer su
mandamiento nuevo.
Nosotros haremos realidad el mandamiento del amor si, como Jesús, sabemos servir a los demás
en la familia, en la escuela, en la calle, con los amigos, etc. Esta es una receta capaz de transformar
el mundo.
3. EL CUARTO MANDAMIENTO
• Deberes de los hijos. Honrar a los papás significa respetarlos, agradecer todo lo que hacen
por nosotros y obedecerlos. Los hijos contribuyen así a la armonía de la familia. Y tienen el
deber de ayudarlos cuando son mayores o están necesitados.
• Deberes de los papás. Por su parte, los papás tienen que amar y respetar a sus hijos, atender
sus necesidades materiales y espirituales, darles educación, aconsejarles y, especialmente, for-
marlos en la fe cristiana.
b. La autoridad
El cuarto mandamiento también manda respetar y obedecer a las personas que trabajan por
nuestro bien, como nuestros maestros. Un buen cristiano será siempre un buen ciudadano, que cumple
las leyes, es honrado en su trabajo y colabora en el buen funcionamiento de la sociedad.
[11]
4. EL QUINTO MANDAMIENTO
No matarás
a. La vida humana
b. La paz
Todos nos tenemos que esforzar, con la ayuda de Dios, para evitar los sentimientos de odio y
los deseos de venganza, que son la causa de la violencia entre los hombres.
Para que haya paz en el mundo, es necesario que haya justicia en la distribución de las riquezas;
y se ha de respetar la libertad y la dignidad de las personas y de las naciones. Y nunca, absolutamente
nunca, se puede usar el nombre de Dios para justificar la violencia.
A. DISCÍPULOS Y MISIONEROS
B. ACTIVIDADES
1. Relaciona las acciones de la columna central con las que se puedan completar las dos frases,
según el cuarto mandamiento. Algunas acciones corresponden a las dos frases.
Corregir
Amar
Obedecer
aconsejar
2.. En este texto se han infiltrado algunas palabras extrañas, descúbrelas y forma con ellas una
frase.
Un mandamiento nuevo les doy después: que se amen los pies unos a otros Apóstoles. Como Yo
Jesús les he amado, ámense también estas unos a otros. En esto de lavarles conocerán todos a
los que dijo son mis discípulos, si se tienen palabras amor unos a otros (Juan 13, 34-35)
Señor,
haz que yo busque:
consolar y no ser consolado,
comprender y no ser comprendido,
amar y no ser amado.
Porque:
dando es como se recibe,
olvidándose de sí es como uno se encuentra,
perdonando es como se recibe el perdón,
y muriendo es como se resucita a la Vida. Amén.
D. RECUERDA
• El prójimo son todos los demás, en el sentido de que debemos amar a todos, comenzando
por los más cercanos.
• La familia, formada por el matrimonio de un hombre y una mujer y los hijos, es la célula original
de la sociedad porque es el lugar donde aprendemos a relacionarnos.
• Que una persona o cosa es sagrada significa que pertenece o está dedicada a Dios. La vida
es sagrada porque Dios es su autor y, por tanto, es suya.
• La dignidad humana es el valor o excelencia que tienen todas las personas por el solo hecho
de serlo, independientemente de sus méritos personales.
• El odio es el sentimiento profundo de querer mal a una persona; la venganza es devolver a
alguien el mal que nos ha hecho. Ambos son contrarios al quinto mandamiento.
[14]
LA SEXUALIDAD Y LA VERDAD
3 Del interior del corazón del hombre proceden los pensamientos malos: robos,
homicidios, avaricias, maldades, engaños, impurezas, envidia, injurias, orgullo,
insensatez. Todas estas cosas malas proceden del interior y ensucian al hombre
(Marcos 7, 20-23).
a. La sexualidad
Dios creó al hombre y a la mujer, y les dio la
capacidad de amarse mutuamente. La sexualidad es una
forma de expresar este amor querido por Dios. Por tanto, la
sexualidad humana tiene un valor muy superior a la de los
animales por ser una relación entre personas, basada en el
amor.
El sexto mandamiento protege esta dignidad del
cuerpo y de la sexualidad. "No cometer actos impuros"
significa utilizar la sexualidad como una entrega generosa,
no para buscar egoístamente la satisfacción personal. No
respetarlo tiene consecuencias negativas para la
convivencia.
El noveno mandamiento también se refiere a la
sexualidad, pero con el pensamiento y el deseo, que
provocan las acciones. Si las miradas y las conversaciones
son puras, también lo serán los pensamientos y, por tanto,
las acciones.
b. La castidad
Cada persona tendrá que vivir la La sexualidad se desarrolla de acuerdo con la
castidad según su edad y naturaleza humana y el plan de Dios cuando es una relación
condición de vida con la ayuda de entre un hombre y una mujer, dentro del matrimonio y con
la gracia de Dios. la intención de manifestar el afecto y transmitir la vida a
los hijos.
¿Ha de vivir la castidad de la La castidad es la capacidad de la persona de
misma forma una persona casada
dominarse a sí misma para utilizar la sexualidad de acuerdo
que una soltera?
con esta dignidad y no de modo egoísta.
El matrimonio y el celibato
Jesús no se casó. El matrimonio no es una obligación para todos. Dios llama a
algunas personas a seguir el camino de la virginidad o del celibato por el Reino de
los cielos; estas personas renuncian al gran bien del matrimonio para ocuparse de
las cosas del Señor, procurando agradarlo. Catecismo, Compendio, n. 342
[15]
c. Nuestro entorno
A menudo, la publicidad, los medios de comunicación, el cine, la música, algunos videojuegos,
etc. se refieren al cuerpo humano de una forma vulgar, como si fuera un objeto, sin tener en cuenta la
dimensión espiritual de la sexualidad humana.
Esto rebaja la dignidad de las personas, especialmente de las mujeres que a menudo son vistas
como un objeto, y fomenta el egoísmo. Por desgracia, mucha gente sigue este comportamiento y
parece estar de moda, pero esto no quiere decir que sea bueno para las personas.
Tenemos que esforzarnos para que las costumbres de la sociedad respeten la categoría que
deben tener las relaciones entre el hombre y la mujer.
Sin miedo a la opinión de los demás, debemos tener el coraje de dar ejemplo de una vida limpia
con la palabra, la mirada, el pensamiento y las acciones.
2. EL OCTAVO MANDAMIENTO
b. La fama
Este mandamiento vela también por la buena fama a la
que tenemos derecho. Estos pecados de palabra faltan a la
caridad y al respeto a la verdad:
• La calumnia: hablar mal de una persona, sabiendo que
no es cierto.
• La difamación: hablar mal de una persona, aunque sea
cierto.
• La maledicencia: comentar los defectos de otra persona
a sus espaldas.
[16]
Tenemos la obligación de rectificar el daño que podamos haber ocasionado con las palabras.
Hay que decir la verdad, pero también hay que practicar la discreción: hay que guardar los
secretos y confidencias de quien ha confiado en nosotros. Tampoco es necesario acusar al culpable,
a menos que sea imprescindible para el bien de la sociedad.
d. El testimonio de la verdad
Si Jesús no hubiera dicho la verdad, podría haber evitado la muerte. Es más fácil callar que
decir la verdad, pero los cristianos, como Jesús, tenemos la obligación de decir la verdad que Dios
nos ha transmitido, aunque a otras personas no les guste oírla. A lo largo de la historia, ha habido
muchas personas que han defendido la verdad del Evangelio hasta llegar al martirio, si ha sido
necesario.
DISCÍPULOS Y MISIONEROS
A. ACTIVIDADES
1. En el apartado sobre el octavo mandamiento se hace referencia a diversas cosas que hay que
hacer y que hay que evitar para vivir bien este mandamiento. Escríbelas en dos listas paralelas.
[17]
2. Indica si estas frases son verdaderas o falsas.
V F
El sexto mandamiento enseña que la sexualidad es algo malo.
La sexualidad humana tiene el mismo valor que la de los animales.
La castidad capacita para utilizar la sexualidad de acuerdo con la
dignidad de las personas.
El cuerpo humano es un objeto y se puede usar como queramos.
La sexualidad humana según el querer de Dios es entre un hombre
y una mujer.
3. Estos diálogos son ejemplos de ideas explicadas sobre el octavo mandamiento. Busca en la
página correspondiente a qué hace referencia cada diálogo.
-Aquello que les dije de Pablo -¿Has hecho tú estas -Oye, Ana, ¿qué te dijo
no es verdad. Creía que lo había tareas? María?
hecho él, pero estaba
equivocado. Lo siento, Pablo. -No; me olvidé de -Lo siento, Isabel, pero
hacerlas y las copié de no te lo diré, no es
-Gracias, Javier Clara. asunto tuyo.
C. RECUERDA
4 Nadie puede servir a dos señores, porque o tendrá odio a uno y amor al otro, o
prestará su adhesión al primero y menospreciará al segundo: no pueden servir a
Dios y a las riquezas (Mateo 6, 24-25)
No robarás
No codiciarás los bienes ajenos
a. Los bienes materiales
Para vivir con dignidad necesitamos comida, ropa, una casa, etc. Dios quiere que todas las
personas posean aquello que necesitan para vivir. Por tanto, es contrario a la ley de Dios que haya
gente que no tenga lo suficiente para vivir mientras otros acumulan grandes riquezas.
Por eso, el séptimo mandamiento prohíbe apropiarse injustamente de los bienes de otro (robar)
o impedir que los pueda tener. El décimo está relacionado con el séptimo porque evita el deseo
desmesurado de poseer cosas, que es la causa de estas injusticias: recuerda que las malas acciones
nacen en el corazón.
Pero "no robarás" significa también: pagar salarios justos a los trabajadores, no engañar en los
negocios, hacer bien el trabajo, pagar los impuestos, no estropear las cosas, ni las propias ni las que
están al servicio de la comunidad, compartir con los más pobres, etc.
El que ha robado o estropeado cosas de otro tiene la obligación de reparar el daño que ha
ocasionado.
b. El ejemplo de Jesús
Jesús quiso ser pobre: nació en un pesebre, rodeado de animales. Vivió con pocas cosas, pero
dignamente: tenía trabajo, casa, vestía bien, comía, etc.
Jesús se rodeaba tanto de pobres como de ricos, porque le interesaban las personas, no lo que
tenían; y nos enseñó que teníamos que compartir nuestros bienes.
c. La sobriedad
Una persona sobria sabe conformarse con vivir, como Jesús, sin más cosas que las necesarias y
sin sujetarse a ellas, simplemente usándolas. También cuida lo que tiene para que dure, no se deja
arrastrar por caprichos o por la última moda, deja lo mejor para los demás, etc.
Esto es muy difícil en una sociedad tan materialista como la nuestra: siempre queremos tener
más, comprar más, ganar más... y cada vez nos creamos más necesidades, y acabamos dando más
[19]
importancia al dinero y a las cosas que a las personas.
Los cristianos debemos estar por encima de los bienes materiales, sin dejarnos dominar por
ellos. De esta forma tenemos el corazón más libre para amar a Dios y compartir con los demás, que
es lo que realmente nos hace felices.
2. LA CREACIÓN
a. El trabajo
El hombre no tiene que esperar que la comida y todo lo que necesita le caiga del cielo. Dice
el libro del Génesis que después de crearlo,
Dios tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén
para que lo trabajara y lo guardara (Génesis 2, 1)
Esto significa que le dio la capacidad necesaria para que él mismo hiciera fructificar la tierra.
Trabajar es un derecho y un deber de las personas.
Con su trabajo, el que sea, cada persona utiliza sus capacidades para:
• Colaborar con Dios en la Creación.
• Obtener los bienes necesarios para él y para su familia.
• Servir al conjunto de la sociedad.
Además, el trabajo se puede santificar haciéndolo bien y ofreciéndolo a Dios, tal como hizo
Jesús, que fue un trabajador manual la mayor parte de su vida en la tierra.
b. La justicia
Por desgracia, en el mundo hay mucha pobreza: países enteros que viven en la miseria; millones
de personas, niños y niñas, que mueren de hambre, sin asistencia médica, sin cultura, sin
conocimientos...
Los responsables de las naciones y de las instituciones deben trabajar para eliminar estas
terribles injusticias, porque la humanidad tiene capacidad de sobra para hacerlo. Mientras tanto, los
cristianos no podemos dar la espalda a estas situaciones.
c. La naturaleza
Al principio, Dios le dio al hombre estas instrucciones:
Pueblen la tierra y domínenla, sometan a los peces, a los pájaros,
a las bestias y a todos los animales que se arrastran por la tierra ...
Les doy todas las hierbas que dan simiente, y todos los árboles
frutales: les servirán de alimento (Génesis 1, 28-29).
[20]
El séptimo mandamiento también se refiere al deber de respetar la Creación. La naturaleza no
es nuestra: Dios la ha puesto en nuestras manos para nuestro provecho y para alabar al Creador, pero
no podemos abusar de ella y destruirla; tenemos que cuidarla para que puedan disfrutarla las próximas
generaciones.
Debemos tratar con benevolencia a los animales porque son criaturas de Dios y no se les puede
hace sufrir inútilmente, pero tampoco debemos tener un amor desproporcionado hacia ellos, como si
fuesen personas.
¿Cómo tenemos que tratar a los ¿Qué nos pide el séptimo mandamiento
animales? ¿Qué dos extremos debemos sobre la naturaleza?
evitar?
3. EL CAMINO DE LA FELICIDAD
Ahora ya conocemos mejor el camino de los mandamientos, la ruta que nos lleva a la felicidad
en esta vida y en la otra. Los mandamientos son para todas las personas, no sólo para los cristianos;
y no son unos consejos para seguirlos si se quiere, sino que tenemos la obligación moral de hacerles
caso.
a. A favor de la virtud
No siempre es fácil cumplir todos los mandamientos porque tenemos la voluntad debilitada.
Por eso la vida cristiana consiste en esforzarse por practicar las virtudes que contrarrestan las malas
inclinaciones de nuestro corazón, que son siempre las mismas.
Esas malas inclinaciones reciben el nombre de pecados capitales, porque son la causa o la raíz
de todos los pecados que se pueden cometer. En todos los casos se trata de un interés o deseo
desordenado por cosas que, en sí mismas, son buenas. La virtud contraria es la moderación de este
desorden.
Y acaba diciendo:
... porque vuestra recompensa es grande en el cielo (Mateo 5, 3-12)
A. DISCÍPULOS Y MISIONEROS
San Francisco de Asís 4 de octubre
Francisco nació en Asís (Italia) en 1181. Hijo de una familia rica,
era un joven alegre y amigo de las fiestas. Un día decidió cambiar
de vida y dedicarse en exclusiva a Dios: renunció a las comodi-
dades, se vistió con un andrajo y se fue a vivir a una ermita
abandonada.
Pronto se le unieron otros jóvenes dispuestos a vivir pobres, por
amor a Dios. Se les conocía con el nombre de Franciscanos, y
vivían según las enseñanzas de Jesús, predicando el Evangelio y
ayudando a los pobres. Su trabajo continúa todavía hoy por el
mundo entero.
Francisco vivía muy unido a Dios y sabía descubrir su grandeza
detrás de todas las criaturas: de las personas, pero también de los
animales, el agua, el fuego, el sol, la luna...
• ¿En qué aspecto de la vida de Jesús se fijó especialmente Francisco?
• ¿De qué les sirvió a Francisco y a sus seguidores abandonar todas las cosas?
[22]
B. ACTIVIDADES
1. Añade los elementos de enlace que faltan entre estas palabras y, sin alterar el orden en
que aparecen, escribe una definición de la virtud de la sobriedad.
sobriedad / conformarse / vivir / más cosas / necesarias / sujetarse / ellas
3. Escribe a la derecha de estos bienes el mandamiento que lo protege; puede ser más de
uno.
El descanso
La vida y la salud
La gloria de Dios
Los bienes materiales
El honor de Dios
La familia
El cuerpo y la sexualidad
La verdad y la fama
4. Relaciona los pecados capitales con las virtudes que los contrarrestan.
Soberbia Paciencia
Avaricia Diligencia
Lujuria Caridad
Ira Generosidad
Gula Castidad
Envidia Humildad
Pereza Templanza
C. RECUERDA
1. NECESIDAD DE LA GRACIA
Poner en práctica todas las virtudes que hemos estudiado y cumplir todos los mandamientos es
muy difícil, o imposible, si contásemos únicamente con la fuerza de nuestra voluntad.
Pero Dios nos ayuda con su gracia, que es la presencia activa del Espíritu Santo en el alma de
los bautizados.
La gracia nos permite vivir siguiendo el ejemplo de Jesús y hacernos santos, que es el objetivo
de la vida cristiana, ¿te acuerdas? Cuando una persona se deja guiar por la gracia de Dios, poco a
poco va teniendo los mismos sentimientos de Jesús: se alegra por las mismas cosas que alegran a
Jesús, tiene compasión por los que sufren, quiere a todo el mundo indistintamente, etc.
Dios puede dar su gracia como quiera, pero Él mismo se ha comprometido a dárnosla de forma
segura a través de la oración y de los sacramentos, como estudiarás a continuación.
1. ¿Recuerdas por qué nuestra voluntad es insuficiente para evitar siempre el pecado?
2. ¿Cuáles son los medios para conseguir la gracia?
3. ¿Por qué crees que a la gracia también se le llama gracia santificante?
2. LA ORACIÓN
a. Formas de rezar
Es difícil querer a una persona de la que hemos oído hablar muy bien, pero a la que no
conocemos personalmente. Rezar quiere decir hablar con Dios: necesitamos relacionarnos con Dios,
hablar con Él, para poder amarlo y recibir su gracia.
Hay muchas formas de rezar.
• Podemos rezar desde nuestro interior, en silencio, con las palabras que salen del corazón. Podemos
rezar en la iglesia, en casa o en cualquier lugar.
• Podemos rezar repitiendo unas oraciones aprendidas, como el Padrenuestro o el Avemaría. Lo
importante es que lo digamos realmente con el corazón.
• Podemos rezar todos juntos en las celebraciones de la Iglesia, especialmente durante la misa. Esta
oración comunitaria se llama liturgia.
[24]
b. Sentido de la oración
Piensa que rezar no es sólo pedir favores a Dios; es también darle gracias, pedirle perdón,
alabarlo por su grandeza y su misericordia. Rezar es también contarle cosas en confianza, como
hablamos con nuestros papás. Pero también hemos de aprender a escuchar a Dios, que nos habla sin
palabras en el fondo del corazón.
Las personas que se tratan a menudo y se quieren, coinciden en muchas cosas y piensan de
forma parecida. Una persona que habla a menudo con su Padre Dios cada vez tiene más "el punto de
vista" de Dios.
3. LOS SACRAMENTOS
[25]
A todos nos hubiera gustado estar con Jesús hace dos mil años: si estuviésemos enfermos nos
curaría, si nos sintiéramos cansados nos animaría. Pues Jesús quiso que esto fuera posible y nos dejó
unos signos de su presencia: los siete sacramentos.
Los sacramentos son acciones materiales, que podemos ver y oír, a través de los cuales Jesús
actúa entre nosotros. En cada sacramento se combinan una acción y unas palabras que representan la
acción de Jesús y se llama signo sacramental.
Por ejemplo:
• En la Reconciliación realmente Jesús nos perdona a través de las palabras del sacerdote.
• En la Eucaristía realmente Jesús nos alimenta con el pan y el vino convertidos en su cuerpo y en su
sangre.
• En la Confirmación realmente Jesús nos da fortaleza para la lucha mediante el aceite con que nos
ungen.
Los sacramentos son los canales de la gracia de Dios para ayudarnos a ser santos. Cada vez que
recibimos un sacramento con buenas disposiciones, se hace más viva la presencia de Dios en
nosotros.
4. EL BAUTISMO
a. El nacimiento a la gracia
Jesús instituyó el sacramento del Bautismo cuando dijo a los apóstoles:
Vayan, conviertan a todos los pueblos bautizándolos
en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo (Mateo 28, 19)
A. DISCÍPULOS Y MISIONEROS
B. ACTIVIDADES
7. Líbranos...
D. RECUERDA
• Rezar es hablar con Dios con el corazón o con las palabras, para alabarle, adorarle,
pedirle ayuda y darle gracias.
• La liturgia es la oración en común de toda la Iglesia.
• Los sacramentos son acciones materiales a través de las cuales Jesús actúa entre
nosotros y nos da su gracia.
• El signo sacramental es la combinación de una acción y unas palabras que
representan la acción de Jesús en los sacramentos.
• Las disposiciones son la preparación interior para recibir la gracia de los
sacramentos.
[28]
6 Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo. Si alguno come este pan vivirá
eternamente; y el pan que Yo daré es mi carne para la vida del mundo ... El
que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y Yo en él. (Juan 6, 51-
56)
1. LA CONFIRMACIÓN
Cuando recibieron el Espíritu Santo, los apóstoles entendieron todo lo que Jesús les había
enseñado y fueron valientes para anunciar el Evangelio. Después, ellos transmitían esa luz y esa
fuerza del Espíritu Santo al imponer las manos sobre los bautizados.
La Confirmación es el sacramento que llena el alma de la fuerza del Espíritu Santo. Es como
una continuación del Bautismo: si el Bautismo es el nacimiento a la vida sobrenatural, la
Confirmación es el crecimiento de esta vida.
La Confirmación la puede recibir cualquier persona bautizada y que aún no haya sido
confirmada.
a. Efectos de la Confirmación
• Llena el alma del Espíritu Santo y nos une más a Jesús y al Padre.
• Nos hace miembros adultos de la Iglesia.
• Nos da valor para ser testigos de Jesús en todo lugar.
2. LA EUCARISTÍA
Jesús tenía que volver al Padre, pero también quería quedarse con sus discípulos. Durante la
Última Cena, convirtió el pan en su cuerpo y el vino en su sangre, y dio a los apóstoles el poder de
hacer lo mismo repitiendo sus gestos y sus palabras.
Así Jesús podría estar con nosotros de una forma real y física, no sólo en el recuerdo. Por eso
la Eucaristía es el tesoro más grande de la Iglesia porque en ella encontramos al mismo Jesús
[29]
resucitado.
Jesús está presente en la Eucaristía de un modo verdadero, real, sustancial: con su Cuerpo y su
Sangre, con su Alma y su Divinidad (Compendio del Catecismo de la Iglesia, n. 282)
El signo sacramental
El sacerdote toma el pan y dice: "esto es mi cuerpo,
que será entregado por ustedes"; después toma el vino
y dice: "éste es el cáliz de mi sangre, que será
derramada por ustedes... "
3. LA CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA
a. Significado de la misa
Si sabemos qué significa la misa, entendemos por qué es tan importante en la vida cristiana. El
sacrificio de Jesús en la cruz es tan decisivo para nuestra salvación, que el Hijo de Dios nos dejó el
modo de poder participar en él como si hubiésemos estado presentes.
• La Última Cena
La tarde del jueves, Jesús anunció lo que haría al día siguiente en la cruz. Por eso dijo:
... esto es mi cuerpo, que será entregado por ustedes
y ... esta es mi sangre, que será derramada por ustedes.
• El sacrificio del Calvario
Al día siguiente, en efecto, Jesús entregó su cuerpo y su sangre para pedir perdón a Dios:
... por ustedes y por todos los hombres en remisión de los pecados.
• La celebración de la Eucaristía
Cada vez que se celebra la santa misa, se actualiza el sacrificio de Jesús en la cruz y se nos da
como alimento: ... hagan esto en conmemoración mía.
[30]
La Eucaristía es el sacrificio mismo del Cuerpo y de la Sangre
de Jesucristo, que él instituyó para perpetuar en los siglos, hasta
su regreso, el sacrificio de la Cruz, dando así a la Iglesia el
memorial de su Muerte y Resurrección.
(Compendio del Catecismo de la Iglesia, n..271)
b. Partes de la misa
• liturgia de la Palabra
- Lecturas: escuchamos la Palabra de Dios en el Antiguo y el Nuevo Testamento, y la
homilía del sacerdote.
- Oración de los fieles: pedimos a Dios por las necesidades de todo el mundo.
• liturgia de la Eucaristía
- Ofertorio: se presenta el pan y el vino que se convertirán en el Cuerpo y la Sangre de
Jesucristo; es decir, en la víctima del sacrificio.
- Plegaria eucarística: es el momento más importante de la celebración, el sacerdote dice
las palabras de la Consagración, y el pan y el vino se convierten en el Cuerpo y la Sangre de
Cristo. Es el momento del sacrificio.
- Comunión: la víctima que se ha ofrecido a Dios en sacrificio se da como alimento a los
que han participado en él.
Cuando vamos a misa es como si nos trasladásemos a Jerusalén hace dos mil años y
asistiéramos a la muerte y la resurrección de Jesús obteniendo todos sus beneficios.
7. ¿Por qué se hizo hombre el Hijo de Dios? ¿Eso es importante para nosotros?
8. ¿Qué palabras utilizó Jesús para decir a los apóstoles que celebrasen la Eucaristía?
9. Describe las palabras y el gesto que se utilizan para empezar y acabar la Eucaristía.
10. ¿Qué se dice cuando acaba la proclamación de la lectura?
11. ¿Qué actitudes debemos mantener en el momento de la Consagración?
4. PAN DE VIDA
a. Alimento del alma
En la Eucaristía también podemos recibir a Jesús como alimento del alma. Él dijo: "coman…,
beban... " mientras repartía el pan y el vino. Comulgar es la mejor forma de participar en la Santa
Misa; es muy recomendable, pero no estamos obligados a hacerlo siempre.
La Eucaristía la puede recibir cualquier persona bautizada, con estas condiciones:
• Estar en gracia de Dios: no tener conciencia de ningún pecado grave (comulgar sin estar
en gracia sería un sacrilegio).
• Guardar el ayuno eucarístico: no comer ni beber desde una hora antes (si es necesario, se
puede beber agua y tomar medicinas).
• Saber a quién recibimos: hacerlo de manera consciente, con fe y amor.
La Sagrada Comunión nos une tan intensamente a Jesús, y por tanto a Dios, que tenemos
que estar muy bien preparados por dentro, y si podemos por fuera, y no hacerlo nunca por rutina.
La Custodia es un objeto litúrgico que sirve para exponer a Jesús Sacramentado a la vista
de los fieles.
La fiesta de la Eucaristía
La Iglesia celebra solemnemente la fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, o del "Corpus
Christi", en latín. Es una fiesta muy popular, con costumbres muy bonitas que expresan la
alegría de los cristianos de todos los tiempos por la presencia de Jesús en la Eucaristía.
A. DISCÍPULOS Y MISIONEROS
B. ACTIVIDADES
1. Responde a estas cuatro preguntas, primero sobre la Confirmación y luego sobre la Eucaristía.
• ¿Cuál es el signo sacramental? • ¿Qué se requiere para recibirlo?
• ¿Cuándo lo instituyó Jesucristo? • ¿Cuáles son sus efectos?
2. Compara estos dos textos del Nuevo Testamento; entre uno y otro los discípulos han recibido al
Espíritu Santo. ¿Qué diferencia encuentras en su actitud? ¿Por qué se ha producido este cambio?
Al atardecer de aquel día, con las puertas Todos los días, en el Templo y en las casas, no
del lugar donde se habían reunido los cesaban de enseñar y anunciar el Evangelio de
discípulos cerradas por miedo a los Cristo Jesús (Hechos 5, 42)
judíos... (Juan 20, 19)
3. Ya conoces todos los sacramentos de la iniciación cristiana. Relaciona estas palabras con el
sacramento correspondiente.
Agua Alimento Recibe por esta señal del don del Espíritu Santo
Pan y vino Crecimiento En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
D. RECUERDA
7
16
Un joven fue a ver a Jesús, y le preguntó:
—Maestro, ¿qué cosa buena debo hacer para tener vida eterna?
17
Jesús le contestó:
—¿Por qué me preguntas acerca de lo que es bueno? Bueno solamente
hay uno. Pero si quieres entrar en la vida, obedece los mandamientos
(Mateo 19, 16-17).
1. NUESTRA VIDA
Para vivir en sociedad es muy importante
observar las leyes establecidas. Por ejemplo, en el
deporte, si no se cumple el reglamento –y se
hacen trampas-, no se puede jugar. Aún más grave
es el respeto debido a las leyes del tráfico porque
su infracción provoca accidentes y muertes. La
ley más importante que hemos de observar los
católicos es la ley de Dios, que se contiene en el Decálogo que hemos estudiado. Por eso dijo Jesús
al joven rico: “Si quieres entrar en la vida, cumple los Mandamientos” (Mateo 19, 17). Para
facilitarnos su cumplimiento, la Iglesia ha establecido algunas obligaciones para el cristiano que
llamamos Mandamientos de la Iglesia.
- ¿Qué sucedería si los ciudadanos de un país no cumplieran las leyes de
tráfico, impuestos, horarios laborales, etc.? Pongan algunos ejemplos.
- ¿Y qué sucedería si un católico desprecia la ley del Evangelio y los
mandatos de la Iglesia?
2.o Mandamiento: Nuestro Señor quiso que el perdón de los pecados se consiguiese a través de un
signo sensible, e instituyó el sacramento de la Penitencia, que también llamamos Confesión. El
Derecho de la Iglesia dice: “Todo fiel que haya llegado al uso de razón está obligado a confesar
fielmente sus pecados graves al menos una vez al año” (Código de Derecho Canónico c. 989).
También hay que recibir este sacramento si se va a comulgar, y en peligro de muerte.
5.o Mandamiento: Los fieles católicos están obligados a ayudar a la Iglesia en sus necesidades (de
culto, de apostolado, de sostenimiento de los sacerdotes, etc.).
A. ACTIVIDADES
4. ¿Verdadero o falso?
a) La Iglesia no tiene el derecho de mandar a los fieles católicos.
b) La Iglesia nos manda recibir el sacramento de la Eucaristía al menos una vez al año.
c) Hay que recibir el sacramento de la Penitencia si se va a comulgar, y en peligro de muerte.
d) El sacramento de la Penitencia también se llama Reconciliación y confesión.
[35]
B. MI COMPROMISO CRISTIANO
Ya vimos que el cristiano no puede vivir como un pagano evitando el sacrificio y la cruz. La
Iglesia, para ayudarnos a seguir a Cristo por el camino de la cruz, nos manda guardar ayuno y
abstinencia.
- Son días de ayuno y abstinencia el miércoles de Ceniza y el Viernes Santo.
- Son días de abstinencia de carne los viernes de Cuaresma. Son también de penitencia los
viernes del año que no sean fiesta de precepto. Pero la abstinencia de carne impuesta por ley
general puede sustituirse –según la libre voluntad de cada fiel- por cualquiera de las formas de
penitencia recomendada por la Iglesia: ejercicios de piedad, mortificaciones y obras de caridad
(ofrecer el trabajo, entregar una limosna…).
- La ley de abstinencia obliga a los que han cumplido catorce años. La ley de ayuno obliga desde
los veintiún años cumplidos hasta los sesenta incoados (59 cumplidos).
C. PARA RECORDAR
D. REFLEXIONA
Leemos en familia estas palabras del papa Benedicto XVI dirigidas a los jóvenes en una Jornada
Mundial de la Juventud:
“Queridos amigos, a veces puede resultar incómodo tener que programar en el domingo la Misa.
Pero si tomáis este compromiso, constataréis más tarde que es exactamente lo que da sentido al
tiempo libre. No os dejéis disuadir de participar en la Eucaristía dominical y ayudad también a los
demás a descubrirla. Ciertamente, para que de ella emane la alegría que necesitemos, debemos
aprender a comprenderla cada vez más profundamente, debemos aprender a amarla.
Comprometámonos a ello, ¡vale la pena!” (Benedicto XVI, Homilía 21.VIII.2005).
8 “María significa estrella del mar; como la estrella del mar orienta a puerto
a los navegantes, María dirige a los cristianos a la gloria” (Santo Tomás
de Aquino, s. XIII).
d) La Asunción a los Cielos: los cristianos creemos que la Virgen María al final de su vida
fue elevada en cuerpo y alma a la gloria celestial. El Papa Pío XII definió este dogma de fe el año
1950. Dios no permitió que el cuerpo santísimo de la Virgen María se corrompiera en el sepulcro.
María, glorificada en el Cielo, es la Reina y Señora de todo el universo.
Estos cuatro privilegios están definidos por la Iglesia como dogmas de fe. Además, el Magisterio
de la Iglesia enseña que la virgen María es:
Madre del Redentor y Corredentora, pues participó estrechamente en toda la obra redentora de
su Hijo Jesús. Especialmente estuvo presente en el Sacrificio en el Calvario, sufriendo con su Hijo y
ofreciendo su propio sacrificio por la salvación de todos los hombres (Juan 2, 4; 13, 1; 19, 25-27).
Y es mediadora de todas las gracias, pues Jesús nos la dio como Madre antes de morir en la
Cruz. María continúa desde el Cielo su misión de rogar por nosotros a su Hijo, obteniéndonos tantas
gracias con su intercesión poderosa.
“Como el océano recibe todas las aguas, así María recibe todas las gracias.
Como todos los ríos se precipitan en el mar, así las gracias que tuvieron los
ángeles, los patriarcas, los profetas, los apóstoles, los mártires, los confesores
y las vírgenes se reunieron en María” (San Buenaventura, s. XIII).
A. PARA APRENDER
¿Quién es la Virgen María? La Virgen María es la Madre de Jesucristo, nuestro Señor y nuestro
Dios. Ella es la cristiana perfecta. Es nuestra Madre del Cielo. Ayuda a todos los hombres y pide
por ellos a su Hijo, Jesús.
¿Es la Virgen María Madre de Dios? Sí. María es Madre de dios porque Jesús, su Hijo, es
verdaderamente el Hijo de Dios, de la misma naturaleza que el Padre.
¿Fue concebido Jesús como los demás hombres? No, pues Jesús fue concebido en las
entrañas de la Virgen María sin intervención de varón, por obra y gracia del Espíritu Santo.
[39]
B. ACTIVIDADES
1. Relaciona:
2. Investiga: ¿Qué iglesias o santuarios marianos más importantes hay en tu país? ¿Y en tu ciudad?
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A B
4. Investiga qué día del año se celebran las siguientes fechas en honor de la Virgen y anótalo en
cada casilla:
C. MI COMPROMISO CRISTIANO
Si queremos ser muy fieles a Dios, debemos ser muy buenos hijos de Santa María. Ella nos
conducirá siempre a su Hijo. Los buenos cristianos han acudido siempre a la Virgen en sus
necesidades ordinarias. Ella, como buena Madre, nunca dejará de oír nuestras peticiones. Hay
muchas oraciones en las que acudimos a nuestra Madre del cielo. Vamos a aprender bien estas
oraciones para rezarlas a la Virgen María:
9 Jesús les dijo: "Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda
creatura".(Marcos 16, 15)
OBJETIVOS
A. CONOCIMIENTOS
a. Saber explicar lo que significa ser testigo de Jesucristo
b. Expresar de qué manera los confirmados pueden y deben ser testigos de Cristo.
B. ACTITUDES
a. Deseos de ser testigos de Jesús con nuestras palabras y nuestras obras
1. NUESTRA VIDA
Tú has presenciado numerosos acontecimientos deportivos.
Fútbol, básquet, tenis, ciclismo… Has sido testigo de esos
acontecimientos y podrías hablar sobre lo que sucedió en cada uno de
ellos: goles que se marcaron, las mejores jugadas del partido, caídas y
lesiones, etc.
También habrás presenciado algunas buenas acciones de unas personas
con otras: ayudar a un ciego a pasar la calle, atender a un enfermo… Tú
eres testigo de esa persona cuando comunicas su buena acción a los
demás.
Lo mismo sucede en la vida cristiana. Ser testigo de Cristo es dar
testimonio de la vida de Cristo con nuestras palabras y sobre todo con
nuestras obras.
- ¿Cuándo eres testigo de otra persona?
- ¿Cuándo eres tú testigo de Cristo?
Para que pudieran ser sus testigos, les prometió que recibirían la fuerza del Espíritu Santo.
Jesús cumplió esta promesa el día de Pentecostés. Ese día los Apóstoles, llenos del Espíritu Santo,
experimentaron una gran transformación interior: antes eran ignorantes, ahora entendían las
Escrituras y las enseñaban a todos; antes, abandonaron a Jesús, ahora dan la cara por Él, con
valentía y fortaleza (Hechos 2, 7 y 11).
- Explica por qué Jesús quiere que los confirmados sean sus testigos
aquí en la tierra
- ¿Qué quiere decir que, para ser testigos de Cristo, debes “vivir según
Jesucristo”?
A. DISCÍPULOS Y MISIONEROS
B. MI COMPROMISO CRISTIANO
Lo más importante que puedes hacer para ser testigo de Jesucristo, es imitarle en su amor a Dios,
a la Virgen María y a todos los hombres. Esos han de ser tus grandes amores. Trata a Jesús con
frecuencia y cariño en la Santa Misa y en la Sagrada Comunión; pídele perdón en el sacramento de
la Penitenta; ofrécele tu trabajo y deportes; dale gracias en tus alegrías y pídele ayuda para hacer
lo que te cuesta; habla con Él cuando te levantes por la mañana y ofrécele el día que comienza;
visítale en el sagrario; vive tu fe; ayuda a tus padres, hermanos y compañeros; sé alegre y optimista,
sincero y generoso; pídele que te dé un buen corazón. Así serás testigo del amor de Cristo. Tus
amigos y conocidos se sentirán atraídos por la luz de tus buenas obras.
- Concreta dos o tres propósitos para ser testigos de Cristo ante nuestros
prójimos
[43]
C. ACTIVIDADES
- Lee los números 1306 al 1308 del Catecismo de la Iglesia Católica y escribe lo que a la luz
de esa doctrina, le podrías responder al tío de Antonio.
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D. MI COMPROMISO CRISTIANO
- Habla con tus padres sobre lo que pueden hacer para ser testigos valientes de Cristo en su entorno
de familiares y amigos. Concreten dos o tres acciones que pueden poner en práctica.
EL SACRAMENTO DE LA CONFIRMACIÓN
1. NUESTRA VIDA
Quizá no te acuerdes de cuando eras pequeño, pero entonces eras muy
débil y necesitabas todo de los demás: protección, comida… Ahora eres mucho
más fuerte, sabes defenderte y pronto sabrás cuidar de ti mismo y de los demás.
En la vida sobrenatural ocurre algo parecido. Cuando recibimos el
Bautismo nuestra vida espiritual es débil y no sabemos nada de Dios. Poco a poco
vamos creciendo, aprendemos con la Palabra del Señor, pedimos a Jesús perdón
de nuestros pecados en el sacramento de la Confesión y nos alimentamos con la
Eucaristía. Ahora te acercas a la madurez cristiana, que te llegará cuando recibas
el sacramento de la Confirmación.
2. EL SACRAMENTO DE LA CONFIRMACIÓN
En el Antiguo Testamento, los reyes eran ungidos.
En el Nuevo Testamento el Ungido por excelencia es
Jesucristo. Incluso las palabras mesías y Cristo significan
Ungido, es decir, aquel que está lleno del Espíritu Santo.
Jesús prometió a los Apóstoles que les enviaría el
Espíritu santo: cuando el espíritu Santo descienda sobre
ustedes, recibirán fuerza para ser mis testigos en
Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los confines
del mundo (Hechos 1, 8).
Jesús cumplió su promesa el día de pentecostés.
Ese día, los apóstoles (que ya estaban bautizados) fueron
confirmados y fortalecidos en la fe al recibir con una especial fuerza el don del Espíritu Santo. A
partir de ese día, los apóstoles comenzaron a bautizar y a administrar el sacramento de la
confirmación, como puede leerse en los Hechos de los Apóstoles:
Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén supieron que los de samaria habían aceptado
el mensaje Dios, mandaron allá a Pedro y a Juan. Al llegar, oraron por los creyentes de Samaria,
para que recibieran el Espíritu Santo. Porque todavía no había venido el Espíritu Santo sobre
ninguno de ellos; solamente se habían bautizado en el nombre del Señor Jesús. Entonces Pedro y
Juan les impusieron las manos, y así recibieron el Espíritu Santo (Hechos 8, 14-17).
Por tanto, después de administrar el Bautismo, los Apóstoles comunicaban el don del Espíritu
santo mediante la imposición de las manos. Este sacramento se le llama confirmación por que
confirma y refuerza la gracia recibida en el Bautismo (Catecismo, Compendio n. 266).
[45]
Lee atentamente los efectos de la confirmación y razones como debe influir este
sacramento en la vida del cristiano. Indica al menos tres consecuencias.
4. LITURGIA DE LA CONFIRMACIÓN
El sacramento de la confirmación puede y debe recibirlo, una sola vez, aquel que ya ha sido
bautizado. Para recibirlo con fruto hay que estar en gracia de Dios.
La Confirmación refuerza la vocación a la santidad recibida en el Bautismo. Es una
llamada a llevar a la vida la fe que profesamos, si fuera preciso hasta el límite, hasta el martirio a
causa de la fe (mártir significa testigo). El Papa Benedicto XVI ha enseñado: “Muchos cristianos,
desde los orígenes de la Iglesia, testimoniaron su fe con la efusión de su sangre. A los primeros
mártires seguirán otros a lo largo de los siglos hasta nuestros días” (Ángelus, 26-XII-2005).
También en nuestro tiempo, en algunas ocasiones, profesar la fe cristiana requiere el heroísmo
de los mártires. Sin embargo, la mayoría de las veces los cristianos estamos llamados a dar testimonios
de nuestra fe en Jesucristo en las circunstancias ordinarias de la vida: en la familia, en la escuela, en
la amistad, el deporte, en la ayuda a los necesitados.
A. APÓSTOLES Y MISIONEROS
B. MI COMPROMISO CRISTIANO
El día de la Confirmación recobremos los dones del Espíritu Santo: sabiduría, entendimiento,
consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios.
La confirmación “nos dispone para el combate que ha de sostener el cristiano si quiere vencer las
dificultades y los obstáculos que quieren apartarnos de Cristo”. Puedes reflexionar sobre estas
palabras haciéndote las preguntas siguientes:
- ¿cuáles son los aspectos de la vida cristiana que más me cuestan?
- ¿cuáles son los principales obstáculos en mi vida de cristiano?
- ¿Por qué a un verdadero cristiano le es necesario luchar?
- ¿Me marco objetivos concretos para mejorar mi vida cristiana?
Concreta algunos puntos de lucha para mejorar. Pide a Jesús y María que te ayuden.
C. PARA APRENDER
3. ¿Qué significa ser testigo de Jesús? Ser testigo de Jesús significa vivir como
discípulo suyo, dar a conocer su Palabra y trabajar por su Iglesia.
4. ¿Qué son los dones del Espíritu Santo? Los dones son unas cualidades
sobrenaturales que Dios concede para seguir con docilidad sus inspiraciones y facilitar el
ejercicio de las virtudes cristianas.
5. ¿Cuándo poseemos los dones del Espíritu Santo? Los dones se conceden en el
Bautismo y se consolidan en la Confirmación. Se dejan de poseer siempre que se pierda la
gracia santificante, es decir, con el pecado mortal, y se recuperan también con la gracia
santificante.
6. ¿Qué son los dones de sabiduría, entendimiento, consejo y ciencia? Estos cuatro
dones influyen sobre todo en el entendimiento, aunque de manera diversa:
▪ Por el don de sabiduría, en alma juzga las cosas terrenas a la luz del fin último que es
Dios. Da al alma visión sobrenatural para analizar los acontecimientos y obrar en
consecuencia.
▪ Por el don de entendimiento, comprendemos que la verdad revelada nunca va contra
la razón, sino que la ayuda a comprender mejor las verdades humanas. Este don exige en
el cristiano el estudio de la doctrina cristiana.
▪ Por el don de consejo, el espíritu santo nos guía para tomar en cada momento las
determinaciones que más convengan a nuestra santidad y poder aconsejar correctamente
a los demás.
▪ Por el don de ciencia, juzgamos más rectamente las cosas de este mundo en cuanto
so medios para conocer a su Creador.
[48]
7. ¿Qué son los dones de fortaleza, piedad y temor a Dios? Estos tres dones actúan
sobre la voluntad:
▪ Por el don de fortaleza, el Espíritu Santo ayuda a resistir ante las tentaciones y además
nos ayuda para emprender nuevas metas hacia la santidad ayuda a luchar con constancia.
▪ Por el don de piedad, permite hacer con gusto las cosas de Dios y alcanzar mayor
intimidad con Él. Este don ayuda a luchar contra la tibieza.
▪ Por el don de temor a Dios, se nos inspira reverencia a Dios y temor de ofenderle. Nos
aparta del mal impulsándonos hacia el bien.
8. ¿En qué consiste la virtud de fortaleza? Es la virtud que nos lleva a afrontar por Dios
cualquier sacrificio por duro que sea. El don del Espíritu Santo viene a dar suavidad y calor
amoroso a la virtud. Esta virtud adopta dos formas fundamentales: el heroísmo en los
pequeños detalles cotidianos y el heroísmo de las grandes empresas. En ambas líneas
puede estar presente el don de la fortaleza.
La fidelidad en lo pequeño es accesible a todo el mundo, practicable a todas horas y
prepara el alma para la fidelidad en las grandes empresas a que Dios puede quizás
destinaros. Es además la fórmula de “canonización” que usa el Evangelio: “Por qué fuiste
fiel en lo pequeño…, entra en el gozo de tu Señor” (Mateo 25, 21).
D. ACTIVIDADES
3. ¿Qué es el Santo Crisma? ¿En qué consiste el rito esencial del sacramento de la
Confirmación? ……………………………………………………………………………………..
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4. Concreta con tus padres lo que pueden hacer en familia para preparar sus almas a la
venida del Espíritu Santo el día de tu Confirmación. Escribe esos propósitos y vive cada
una de esas cosas con la ayuda de la Virgen María.
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[49]
2
5
1
4
7
E. CELEBRACIÓN DE LA CONFIRMACIÓN
N., RECIBE POR ESTA SEÑAL El obispo añade: La paz sea contigo.
EL DON DEL ESPIRITU SANTO.
El confirmando responde: Y con tu espíritu.
Y el confirmando responde: Amén.
[50]
CONFIRMACIÓN
Sus orígenes
Los Apóstoles bautizaban y luego “imponían las manos
sobre los bautizados.
Efectos
Comunica más profundamente la filiación divina
Liturgia de la
Confirmación
Imposición de la mano y unción con el
Santo crisma (y las palabras del
sacramento)
Ministro de la
Confirmación El Obispo
[51]
I. ORACIONES
II. RECUERDA
Después de comulgar, procura tener unos minutos para dar gracias. Es un detalle de respeto con
Jesús continuar un ratito después de Misa dándole gracias por la comunión recibida. Puedes leer
despacio y con atención estas oraciones
Rezar un Padrenuestro por las intenciones No veo las llagas como las vio Tomás,
del Santo Padre. pero confieso que eres mi Dios:
Nota: Está concedida indulgencia plenaria al que, haz que yo crea más y más en ti,
después de haber debidamente confesado y que en ti espere y que te ame.
comulgado, rece esta oración (en los viernes de
cuaresma y pascua) delante de alguna imagen de ¡Oh memorial de la muerte del Señor!
Jesús crucificado, añadiendo un Padrenuestro por Pan vivo que da la vida al hombre:
el Papa. concédele a mi alma que de ti viva,
y que siempre saboree tu dulzura.
ADORO TE DEVOTE
Te adoro con devoción, Dios escondido, Señor Jesús, bondadoso Pelícano:
oculto verdaderamente bajo estas límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre,
apariencias. de la que una sola gota puede liberar
A ti se somete mi corazón por completo, de todos los crímenes al mundo entero.
y se rinde totalmente al contemplarte.
Jesús, a quien ahora veo oculto,
Al juzgar de ti se equivocan la vista, el tacto, te ruego que se cumpla lo que tanto ansío:
el gusto, que al mirar tu rostro ya no oculto,
pero basta el oído para creer con firmeza; sea yo feliz viendo tu gloria. Así sea.
creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios;
nada es más verdadero que esta Palabra de
verdad.
V. OTRAS ORACIONES