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Guia Didactica Tema Depresion - Grupo Aramendi Azuaje Falcon Quero Vasquez Zambrano Zerpa

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Está en la página 1de 48

Trastorno Bipolar Tipo I y Tipo

II, Trastorno Ciclotímico

INTEGRANTES

IRENE ARAMENDI
ROXI AZUAJE
DEISY FALCÓN
MARÍA QUERO
GUÍA SAMANTHA VÁSQUEZ
DIDÁCTICA MARÍA P. ZAMBRANO
AURIMAR ZERPA
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

HISTORIA

Hipócrates en el siglo V a.C, y el romano Galeno en el siglo I a.C,


consideraban que la tristeza provenía de la bilis negra, siendo esto uno
de los cuatro humores del cuerpo; continuando en el siglo I d.C, Areteo
de Capadocia (Griego), se dice que fue el primero en considerar la
manía y la melancolía como trastornos relacionados, en sus escritos
mencionaba que algunos pacientes luego de estar melancólicos
cambian a otro estado: hacia la manía, de esta forma, es probable que
la manía sea una variedad del estado melancólico (Marco, López,
García, Valerio, y Franco, s/f).

Posterior, en la edad Media la medicina


se torna en el oscurantismo y la
superstición, así la enfermedad mental
puesto que los trastornos del
comportamiento eran tildados de índole
demoníacos, para el Renacimiento se
conoció como “la edad de oro de la
melancolía”, en esta época los
estudiosos expresaron que la depresión
se trataba de una característica de la
profundidad del espíritu humano (Marco,
López, García, Valerio, y Franco, s/f).
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

HISTORIA
Jean Pierre Falret en el año 1854 presentó el
nombre de Folie circulaire o lo que es lo mismo
locura circular, así para 1875 mediante diversos
hallazgos llevados a cabo se acuño la denominación
de psicosis maníaco-depresiva.

Se considera que paralelamente en el 1854


Francois Baillarger describió la 'folie à double forme'
o 'locura de doble forma', la cual se caracterizaba
por la sucesión de dos periodos: uno de excitación
y el otro de depresión (Marco, López, García,
Valerio, y Franco, s/f)

En este orden de ideas, comenzando el siglo XX


en 1921, el psiquíatra Emil Kraepelin publicó
'Manic-Depressive Insanity and Paranoia' dicho
trabajo, marco un hito puesto que propuso una
nueva clasificación dividida en tres grandes grupos
siendo estos: esquizofrenias, demencias y
enfermedad maniaco-depresiva, de este modo,
introdujo como entidad diferenciada el trastorno
bipolar. Cabe decir, que para el año 1980 el
término de maníaco-depresivo fue sustituido por el
de: Trastorno Bipolar, de acuerdo a lo establecido
por el DSM-III (Marco, López, García, Valerio, y
Franco, s/f).
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

CONCEPTO

Es un trastorno crónico y recurrente que se


caracteriza por fluctuaciones patológicas del estado
del ánimo. Las fases de la enfermedad pueden
incluir episodios hipomaniacos, maniacos y
depresivos. Estos episodios interfieren de forma
significativa en la vida cotidiana del paciente y en su
entorno, con importante repercusión en su salud y
calidad de vida (Martínez, Montalván y Betancourt,
2019).

Estos cambios en el estado de ánimo pueden afectar el


sueño, la energía, el nivel de actividad, el juicio, el
comportamiento y la capacidad de pensar con claridad
(Martínez, Montalván y Betancourt, 2019).

ETIOLOGÍA
De acuerdo a Uribe y Rojas (s/f), consideran
que los factores genéticos se estima que el
50% pueden ser responsables en lo que
respecta a la varianza en trastornos del
afecto, a su vez destacan la presencia de
otros factores los cuales son:

Factores psicológicos: se encuentra las


distorsiones cognoscitivas, la cual conlleva a
un estilo de atribución negativa, es decir que,
la modelación por medio de las figuras en la
familia destacado acontecimientos
estresantes o impredecibles suelen
desarrollar dicha atribución negativa.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

ETIOLOGÍA
Factores ambientales: no se considera que la
presencia única de un factor ambiental genere la
aparición de la psicopatología sin embargo, la
presencia de depresión en padres por ejemplo
conflictos, disciplina excesiva o padres ausentes, es
posible que contribuya a la aparición del mismo.

Eventos vitales adversos: pérdidas interpersonales,


rupturas en las relaciones interpersonales, duelo,
exposición a un suicidio, abuso, negligencia.

Factores biológicos: secreción anormal de cortisol,


alteraciones del sueño, respuesta anormal de la
hormona de crecimiento.

Por su parte, Gómez (2008), menciona que de


acuerdo a la etiopatogenia se considera que las
teorías sugieren la presencia de diversos factores:
neuroquímicas, genéticas, hormonales,
neurofisiológicas, psicosociales y neuroanatómicas.

Agrega que, en relación a la etiología genética se


ha comprobado en diversos estudios que la tasa de
concordancia en gemelos monocigotos es del 80%
mientras que el 20% para los casos dicigotos,
asimismo, se ha demostrado en familiares de
enfermos bipolares presentan un riesgo 10 veces
mayor de desarrollar la enfermedad en relación con
las personas sanas.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
Según lo establecido en el DSM-5
por la Asociación Americana de
Psiquiatría (2014), para un
diagnóstico de trastorno bipolar I es
necesario que se cumplan los
criterios al menos para un episodio
maníaco. Antes o después del
episodio maníaco pueden haber
existido episodios hipomaníacos o
episodios de depresión mayor.
Episodio maníaco

A. Un período bien definido de estado de ánimo


anormal y persistentemente elevado, expansivo
irritable, y un aumento anormal y persistente de la
actividad o la energía, que dura como mínimo una
semana y está presente la mayor parte del día,
casi todos los días (o cualquier duración si se
necesita hospitalización).

B. Durante el período de alteración del estado


ánimo y aumento de la energía o la actividad,
existen tres (o más) de los síntomas siguientes
(cuatro si el estado de ánimo es solo irritable) en
un grado significativo y representan un cambio
notorio del comportamiento habitual.
1. Aumento de la autoestima o sentimiento de grandeza.
2. Disminución de la necesidad de dormir.
3. Más hablador de lo habitual o presión para mantener la conversación.
4. Fuga de ideas o experiencia subjetiva de que los pensamientos van a gran
velocidad.
5. Facilidad de distracción.
6. Aumento de la actividad dirigida a un objetivo (social, en el trabajo o la
escuela, o sexual) o agitación psicomotora.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
Episodio maníaco
7. Participación excesiva en actividades que
tienen muchas posibilidades de consecuencias
dolorosas: dedicarse de forma desenfrenada a
compras, juergas, indiscreciones sexuales o
inversiones de dinero imprudentes.

C. La alteración del estado del ánimo es suficientemente


grave para causar un deterioro importante en el
funcionamiento social o laboral, para necesitar
hospitalización con el fin de evitar el daño a sí mismo o a
otros, o porque existen características psicóticas.

D. El episodio no se puede atribuir a los efectos


fisiológicos de una sustancia: droga, un medicamento,
otro tratamiento o a otra afección médica

Episodio hipomaníaco
Los criterios para su diagnóstico se presentan en el
apartado de hipomanía ubicado en la página 14.
Episodio depresivo mayor
A. Cinco o más de los síntomas que a continuación se
refieren, han estado presentes durante dos semanas y
representan un cambio del funcionamiento anterior; al
menos uno de los síntomas es, (1) estado de ánimo
deprimido o, (2) pérdida de interés o de placer.

1. Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día,


casi todos los días, según se desprende de la
información subjetiva
2. Disminución importante del interés o el placer por
todas o casi todas las actividades la mayor parte del día,
casi todos los días
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS

Episodio depresivo mayor

3. Pérdida importante de peso sin hacer dieta o


aumento de peso o disminución o aumento del
apetito casi todos los días.
4. Insomnio o hipersomnia casi todos los días.
5. Agitación o retraso psicomotor casi todos los días
6. Fatiga o pérdida de la energía casi todos los días.
7.Sentimientos de inutilidad o de culpabilidad
excesiva o inapropiada (que puede ser delirante)
casi todos los días (no simplemente el autorreproche
o culpa por estar enfermo).
8. Disminución de la capacidad para pensar o
concentrarse, o de tomar decisiones, casi todos los
días.
9. Pensamientos de muerte recurrentes (no sólo
miedo a morir), ideas suicidas recurrentes sin un
plan determinado, intento de suicidio o un plan
específico para llevarlo a cabo.

C. Los síntomas causan malestar


clínicamente significativo o deterioro en lo
social, laboral u otras áreas importantes del
funcionamiento.
D. El episodio no se puede atribuir a los
efectos fisiológicos de una sustancia o de
otra afección médica.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
Procedimientos de codificación y regitro
El código diagnóstico del trastorno bipolar I se basa en el tipo de
episodio actual o más reciente, así como en la gravedad actual, la
presencia de características psicóticas y el estado de remisión. Los
códigos se presentan a continuación:

A la hora de registrar el Especificar:


nombre de un diagnóstico se -Con ansiedad.
-Con características mixtas.
enumerarán los términos en el
-Con características melancólicas.
siguiente orden: Trastorno -Con características atípicas.
bipolar I, tipo de episodio actual -Con características psicóticas
o más reciente, especificadores congruentes con el estado de ánimo.
de gravedad/psicóticos/de -Con características psicóticas no
congruentes con el estado de ánimo.
remisión, y a continuación
-Con catatonia: Utilizar el código
tantos especificadores sin adicional 293.89 (F06.1)
código como correspondan al -Con inicio en el periparto.
episodio actual o más reciente. -Con patrón estacional.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

DIAGNÓSTICO
DIFERENCIAL
De acuerdo a lo planteado por Ramírez, Arias y
Madrigal (2020), se debe descartar la existencia
de una afección médica, sobre todo en el primer
episodio y en pacientes que debutan con
síntomas de forma tardía (después de los 50
años). Por lo tanto, se recomienda valorar el
contexto clínico de cada paciente de forma
individual.

La mayoría de los pacientes con trastorno


bipolar al inicio presentan un episodio depresivo, el
cual difiere de manera sutil de un episodio
depresivo unipolar. La depresión unipolar debe ser
un diagnóstico por descarte, primero se debe
descartar una enfermedad médica o efectos de
sustancias y después buscar dentro de los cuadros
depresivos indicadores de bipolaridad (Ramírez,
Arias y Madrigal, 2020).
Por su parte, la presencia de síntomas psicóticos
(alucinaciones, ideas delirantes) habitualmente no
se consideran síntomas propios de los pacientes
con trastorno bipolar I, por lo que requiere un
diagnóstico diferencial con trastornos que pueden
presentarse con psicosis, como la esquizofrenia. El
inicio de la esquizofrenia suele tener un inicio
insidioso y los pacientes carecen de la simpatía
característicamente asociada con la manía
(Ramírez, Arias y Madrigal, 2020).
El abuso de sustancias estimulantes tiene efectos similares a
los síntomas que se presentan durante episodios maníacos, en
caso de que los síntomas sean desencadenados por el uso de
tóxicos, estos usualmente desaparecen una semana después del
retiro de la sustancia.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

DIAGNÓSTICO
DIFERENCIAL
Asimismo, el TDH, comparte algunos síntomas
con el trastorno bipolar; los niños con TDH son
impulsivos con una hiperactividad motora,
dificultades de atención, que son los síntomas más
importantes del TDH que se comparten con una
manía. En este sentido, una de las características
más importantes a tener en cuenta en el
diagnóstico diferencial es que en el TDH estos
síntomas se mantienen el tiempo, mientras que en
trastorno bipolar en la adolescencia encontraríamos
que estos síntomas aparecen junto con euforia o
estado de ánimo irritable, y son episódicos en el
tiempo (Hernández, Montalván y Betancourt, 2019).

A su vez, Hernández, Montalbán y Betancourt (2019)


agregan que es difícil el diagnóstico diferencial con los
trastornos de ansiedad en adolescentes porque también
cursan con cambios en el estado de ánimo, con una irritabilidad
importante, y, aparte que la ansiedad aparece también de forma
muy “comórbida” con el trastorno bipolar, sobre todo en
adolescentes, encontrándose tasas de comorbilidad de un 60%.

En base a lo anterior, se debería


considerar cada niño de acuerdo
con su propia situación basal.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I

PREVALENCIA

Según lo presentado por la Asociación


Américana de Psiquiatría (2014) en el DSM-
5, en 11 países la tasa de prevalencia del
Trastorno Bipolar I ha sido de 0 a 0,6 %, y la
tasa de prevalencia a lo largo de la vida de
los hombres respecto a las mujeres es de
aproximadamente 1,1:1.

Cabe acotar, que la edad media de inicio


del trastorno bipolar es aproximadamente de
18 años.

Algunos estudios apuntan que los hombres


suelen presentar más frecuentemente manía
unipolar, una edad de inicio más temprana y una
mayor duración de los episodios maniacos, mientras
que las mujeres tienden a experimentar más
episodios con características mixtas y más episodios
depresivos (Martínez, Montalván y Betancourt,
2019).
HIPOMANÍA

CONCEPTO
La hipomanía o manía leve o
moderada, es un trastorno psiquiátrico
que se presenta con irritabilidad o
entusiasmo de aparición temporal; la
sintomatología primordial se basa en
humor exaltado en el trascurso de varios
días, agrupado a agitación, reducción del
lapso de sueño, hiperactividad y una
seguridad en sí mismo excesiva
manifestando cambios significativos en
concordancia a la fase anterior del
individuo (Troncoso y Mosher, 2018).

Según el DSM V (2014) el episodio hipomaníaco es un período bien


definido de estado de ánimo anormalmente y persistentemente elevado,
expansivo o irritable, y un aumento anormal y persistente de la actividad
o la energía, que dura como mínimo cuatro días consecutivos y está
presente la mayor parte del día, casi todos los días.

ETIOLOGÍA

De acuerdo con Troncoso y Mosher (2018) entre las causas


principales de la hipomanía resaltan, trauma emocional o físico,
herencia genética y desequilibrio bioquímico u hormonal.

Por otro lado, Rovira (2020) menciona


que según varias indagaciones se ha
percibido que hay distintos componentes
genéticos, ambientales y biológicos que
pueden intervenir en la causa de la
hipomanía.
HIPOMANÍA

ETIOLOGÍA
En primer lugar, en los factores genéticos concurre un
alto componente genético al momento de presentar o no,
este diagnóstico debido a que, numerosas
investigaciones han finiquitado que puede existir más de
una persona diagnosticada de trastorno bipolar en un
mismo grupo familiar. Además, el sistema límbico, que
corresponde al sistema nervioso central, se ocupa de
regular el estado de ánimo y al existir una tendencia
genética, este se podría encontrarse afectado (Rovira
,2020)

Seguidamente, Rovira (2020) señala que los factores


ambientales como presentar un nivel agudo de estrés,
percibir episodios de violencia, el espectro de un
acontecimiento importante traumático o la falta de sueño
influirían a que la enfermedad se desarrolle y, por
consiguiente, que el estado de ánimo se modifique.

Cabe destacar que, el uso de sustancias como el


alcohol, otras drogas y algunos medicamentos
específicos, logran que este trastorno se desarrolle.
Específicamente, los antidepresivos pueden ser los que
originen la hipomanía, puesto que consiguen estimular
un desvío emocional (Rovira, 2020).

En esta misma perspectiva, Uribe y Rojas (s/f) exponen los


siguientes factores que causan los trastornos bipolares:

·Factores genéticos: los trastornos bipolares manifiestan adherencia


en familias. Se piensa que los factores genéticos pueden ser causante
del 50% de la varianza en trastornos del afecto en estudios de adultos.
HIPOMANÍA

·Factores psicológicos: entre los factores cognitivos


se localizan la distorsión cognoscitiva; la cual lleva a
una forma de atribución negativa. La modelación a
través de figuras en la familia y la práctica de
acontecimientos imprevistos y estresantes
corresponde con el avance de la atribución negativa.

·Factores biológicos: secreción anormal de cortisol


debido alteración del eje hipotalámico- pituitario-
adrenal, alteraciones del sueño, reducción del periodo
REM, repuesta anormal de la hormona de crecimiento
y desregulación del sistema serotoninérgico.

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS

De acuerdo a la última versión del Manual Estadístico y Descriptivo de


los Trastornos Mentales, DSM 5, publicada por la Asociación Americana
de Psiquiatría (2014), los criterios que debe presentar una persona para
considerar que está presentando un episodio hipomaniaco son:
A. Un periodo definido de estado de ánimo anormal y persistentemente
elevado, expansivo o irritable y un aumento anormal y persistente de la
actividad o la energía, que dura como mínimo cuatro días consecutivos y
está presente la mayor parte del día, casi todos los días.

B. Durante el periodo de alteración del estado de


ánimo y aumento de la energía y actividad han
persistido tres (o más) de los síntomas siguientes
(cuatro si el estado de ánimo es solo irritable),
representan un cambio notorio el comportamiento
habitual y han estado presentes en un grado
significativo:
HIPOMANÍA

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS

1. Aumento de la autoestima o sentimiento de


grandeza.
2. Disminución de la necesidad de dormir (Ejemplo,
se siente descansado depues de 3 horas de sueño)
3. Más hablador de lo habitual o presión para
mantener la conversación.
4. Fuga de ideas o experiencia subjetiva de que los
pensamientos van a gran velocidad.
5. Facilidad de distracción (la atención cambia
fácilmente a estímulos externos irrelevantes), según se
informa o se observa.
6. Aumento de la actividad dirigida a un objetivo
(social, en el trabajo o la escuela, o sexual) o agitación
psicomotora.
7. Participación excesiva en actividades que tienen
muchas posibilidades de consecuencias dolorosas
(ejemplo, dedicarse de forma desenfrenada a compras,
juergas, indiscreciones sexuales o inversiones de
dinero imprudentes).

D. El episodio se asocia a un cambio inequívoco del funcionamiento que


no es característico del individuo cuando no presenta síntomas.

E. La alteración del estado de ánimo y el cambio en el funcionamiento


son observables por parte de otras personas.

F. El episodio no es suficientemente grave para causar una alteración


importante del funcionamiento social o laboral, o necesitar hospitalización.
Si existen características psicóticas, el episodio es, maníaco.

G. El episodio no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una


sustancia (ejemplo droga, tratamiento, un medicamento).
HIPOMANÍA

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS

Los episodios
Para que se diagnostique
hipomaniacos son un episodio hipomaniaco
frecuentes en el en niños deben exceder
trastorno bipolar, pero lo esperado para su fase
no son necesarios para de desarrollo en cada
su diagnóstico. ambiente y cultura.

En los adolescentes los


El inicio de estos
episodios hipomaniacos
episodios es brusco,
pueden asociarse a
escolares, con un incremento
ausencias
rápido de los síntomas
comportamiento
fracaso en 1 o 2 días.
antisocial,
escolar o consumo de
sustancias.
HIPOMANÍA

DIAGNÓSTICOS
DIFERENCIALES
De acuerdo a la Asociación Americana de Psiquiatría (1995), en el
DSM IV los trastornos diferenciales del episodio hipomaníaco son:
Trastorno del estado de ánimo debido a una
afección medica: El diagnóstico apropiado es el
de trastorno del estado de ánimo por afección
medica si la alteración del mismo se considera
una consecuencia fisiológica directa de una
enfermedad medica especifica como: esclerosis
múltiple, tumor cerebral, síndrome de Cushing,
entre otros. Esta decisión se basa en la historia,
los hallazgos de laboratorio y la exploración física.

Trastorno del estado de ánimo inducido por


sustancias: Se diferencia de un episodio
hipomaníaco por el hecho de que una sustancia
(ejemplo droga o medicamente) esta
etiológicamente relacionada con la alteración del
estado de ánimo. Por cuanto los síntomas
presente en estos episodios pueden ser
producidos por una droga o un tratamiento
antidepresivo con medicamentos, terapéutica
lumínica o electroconvulsiva.

Episodios maníacos: Si bien comparten los


síntomas, la alteración de la hipomanía no es tan
grave como para provocar un deterioro importante
social o laboral.
Eutimia: Se debe distinguir en especial en
personas que han estado crónicamente deprimidos
y no están acostumbrados a un estado de ánimo
no depresivo.
HIPOMANÍA

DIAGNÓSTICOS
DIFERENCIALES

Trastorno por déficit de atención con


hiperactividad: Ambos se caracterizan por la
actividad excesiva, un comportamiento
impulsivo, empobrecimiento del juicio y la
negación de problemas; no obstante el TDAH
tiene un inicio temprano, un curso crónico, la
falta de un inicio y final definidos y la
ausencia de un estado de ánimo expansivo.

PREVALENCIA

Como los episodios hipomaníacos se presentan tanto en el trastorno


bipolar tipo I como en el Tipo II, no existen estadísticas sobre este
específicamente, por ello su prevalencia se asocia con la del trastorno
Bipolar tipo II (Ver apartado de Prevalencia en el trastorno bipolar II)

TRATAMIENTO
Por lo mencionado anteriormente, el episodio hipomaniaco se trata
dentro de los trastornos bipolares, así revise el apartado de tratamiento
de ambos trastornos.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

HISTORIA

En 1994 fue declarado y definido


formalmente por el Research
Diagnostic Criteria un trastorno
bipolar en pacientes que
presentaban estados de excitación
relativamente leves, esa fue la
primera vez que apareció el término
bipolar II (Gitlin y Malhi, 2020).

Sorprendentemente, a pesar de que en


los años siguientes pasó a ser muy
reconocido y remitido, seguía sin ser
considerado un trastorno real, y fue para el
año 1994 (16 años más tarde) que el DSM
aceptó que la distinción entre bipolar I y
bipolar II era digno de reconocimiento
oficial y se decidiera incluirlo en su 4ta
revisión (Gitlin y Malhi, 2020).

Cabe destacar, que los mencionados autores explican que en los


últimos años, aunque parecía que el trastorno bipolar II ya había alcanzado
como diagnóstico un estatus que estaba a la par con otros importantes
trastornos del estado de ánimo, ha surgido un debate acerca de su validez
y utilidad como categoría diagnóstica.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

CONCEPTO

Es un tipo de trastorno bipolar caracterizado


por la presencia de un cuadro hipomaníaco en
un paciente que ha tenido antecedentes de
episodios depresivos mayores. Quienes
presentan este diagóstico suelen tener más
cantidad de episodios depresivos y padecer
un mayor número de episodios afectivos que
los bipolares tipo I (Vásquez, 2014).

ETIOLOGÍA
Según la Asociación Americana de
Psiquiatría (2014), los cantores existentes
son:

-El trastorno bipolar II puede ser precedido por


los diagnósticos de ansiedad, abuso de
sustancias y trastornos de conducta
alimentaria.
- Genéticos y fisiológicos: El riesgo de
desarrollar un trastorno bipolar II tiende a ser
mayor para los familiares de pacientes con
trastorno bipolar. Además, parecen existir
factores genéticos que influyen sobre la edad
de inicio de los trastornos bipolares.

PREVALENCIA
La prevalencia anual del trastorno bipolar II es del 0,3 % a nivel
internacional. Por su parte, es de 0,8% en Estados Unidos. Algunas
muestras clínicas indican que el trastorno bipolar II es más frecuente en las
mujeres que en los hombres (Asociación Americana de Psiquiatría, 2014).
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS

Según la Asociación Americana de Psiquiatría (2014), para un


diagnóstico de trastorno bipolar II es necesario que se cumplan los
criterios siguientes para un episodio hipomaníaco actual o pasado y los
criterios siguientes para un episodio de depresión mayor actual o pasado:

Episodio hipomaníaco

A. Un período bien definido de estado de ánimo anormal y


persistentemente elevado, expansivo o irritable, y un aumento anormal y
persistente de la actividad o la energía, que dura como mínimo cuatro
días consecutivos y está presente la mayor parte del día, casi todos los
días.

B. Durante el período de alteración del estado de ánimo y aumento de la


energía y la actividad, han persistido tres (o más) de los síntomas
siguientes (cuatro si el estado de ánimo es sólo irritable), representan un
cambio notorio del comportamiento habitual y han estado presentes en
un grado significativo:

1. Aumento de la autoestima o sentimiento de


grandeza.
2. Disminución de la necesidad de dormir (p.
ej., se siente descansado después de sólo tres
horas de sueño).
3. Más hablador de lo habitual o presión para
mantener la conversación.
4. Fuga de ideas o experiencia subjetiva de
que los pensamientos van a gran velocidad.
5. Facilidad de distracción (es decir, la
atención cambia demasiado fácilmente a
estímulos externos poco importantes o
irrelevantes), según se informa o se observa.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS

6. Aumento de la actividad dirigida a un objetivo


(social, en el trabajo o la escuela, o sexual) o
agitación psicomotora.
7. Participación excesiva en actividades que tienen
muchas posibilidades de consecuencias dolorosas
(p. ej., dedicarse de forma desenfrenada a
compras, juergas, indiscreciones sexuales o
inversiones de dinero imprudentes).
C. El episodio se asocia a un cambio inequívoco del funcionamiento que
no es característico del individuo cuando no presenta síntomas.
D. La alteración del estado de ánimo y el cambio en el funcionamiento
son observables por parte de otras personas.
É. El episodio no es suficientemente grave para causar una alteración
importante del funciona miento social o labora! o necesitar
hospitalización. Si existen características psicóticas, el episodio es, por
definición, maníaco.
F. El episodio no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una
sustancia (p. ej., una droga, un medicamento u otro tratamiento).

Nota: Un episodio hipomaníaco completo que


aparece durante el tratamiento antidepresivo
(p.ej. medicación, terapia electro convulsiva),
pero persiste en un grado totalmente sindrómico
más allá del efecto fisiológico de ese tratamiento*
es prueba suficiente de un episodio hipomaníaco.
Sin embargo, se recomienda precaución porque
uno o dos síntomas (particularmente el aumento
de la irritabilidad, nerviosismo o agitación
después de! uso de antidepresivos) no se
consideran suficientes para el diagnóstico de un
episodio hipomaníaco, ni indican necesariamente
una diátesis bipolar.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
Episodio de depresión mayor

A. Cinco (o más) de los síntomas siguientes han estado presentes


durante el mismo período de dos semanas y representan un cambio del
funcionamiento anterior; al menos uno de los síntomas es (1) estado de
ánimo deprimido o (2) pérdida de interés o de placer.

Nota: No incluir síntomas que se pueden atribuir claramente a una


afección médica.

1. Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día, casi todos los
días, según se desprende de la información subjetiva (p. ej. se siente
triste, vacío o sin esperanza) o de la observación por parte de otras
personas (p. ej. se le ve lloroso). (Nota: En niños y adolescentes, el
estado de ánimo puede ser irritable.)
2. Disminución -importante del interés o el placer por todas o casi todas
las actividades la mayor parte del día, casi todos los días (como se
desprende de la información subjetiva o de la observación).
3.Pérdida importante de peso sin hacer dieta o aumento de peso (p. ej.,
modificación de más de un 5 % del peso corporal en un mes), o
disminución o aumento del apetito casi todos los días. (Nota: En los
niños, considerar el fracaso para el aumento del peso esperado.)
4. Insomnio o hipersomnia casi todos los días.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
5. Agitación o retraso psicomctor casi todos los días (observable por
parte de otros, no simplemente la sensación subjetiva de inquietud o
enlentecimiento).
6. Fatiga o pérdida de la energía casi todos los días.
7.Sentimiento de inutilidad o culpabilidad excesiva o inapropiada (que
puede ser delirante) casi todos los días (no simplemente el
autorreproche o culpa por estar enfermo).
8. Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, o de
tomar decisiones, casi todos los días (a partir del relato subjetivo o de
la observación por parte de otras personas).
9.Pensamientos de muerte recurrentes (no sólo miedo a morir), ideas
suicidas recurrentes sin un plan determinado, intento de suicidio o un
plan específico para llevarlo a cabo.
B. Los síntomas causan malestar clínicamente significativo o deterioro en
lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.

C. El episodio no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una


sustancia o de otra afección médica.

Nota: Los Criterios A-C constituyen un episodio de depresión mayor.

Nota: Las respuestas a una pérdida significativa (p. ej., duelo, ruina
económica, pérdidas debidas una catástrofe natura!, una enfermedad o
discapacidad grave) pueden incluir el sentimiento de tristeza intensa,
rumiación acerca de la pérdida, insomnio, pérdida del apetito y pérdida de
peso descritas en el Criterio A, que pueden simular un episodio depresivo.
Aunque estos síntomas pueden ser incomprensibles o considerarse
apropiados a la pérdida, también se debería considerar atentamente la
presencia de un episodio de depresión mayor además de la respuesta
normal a una pérdida significativa. Esta decisión requiere inevitablemente
el criterio clínico basado en la historia del individuo y en las normas
culturales para la expresión del malestar en el contexto de la pérdida.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
Trastorno bipolar lI

A. Se han cumplido los criterios al menos para un episodio hipomaníaco


(Criterios A-F en “Episodio hipomaníaco” antes citado) y al menos para
un episodio de depresión mayor (Criterios A-C en “Episodio de
depresión mayor” antes citado).

B. Nunca ha habido un episodio maníaco.

C. La aparición del episodio(s) hipomaníaco(s) y de depresión mayor no


se explica mejor por un trastorno esquizoafectivo, esquizofrenia, un
trastorno esquizofreniforme, un trastorno de ideas delirantes, u otro
trastorno del espectro de la esquizofrenia y otros trastornos psicóticos
especificados o no especificados.

D Los síntomas de depresión o la incertidumbre causada por la


alternancia frecuente de períodos de depresión e hipomanía provocan
malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u
otras áreas importantes del funcionamiento.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

Codificación y
registro
El trastorno bipolar II tiene un código diagnóstico; 296.89 (F31.81). Su
gravedad actual, la presencia de características psicóticas, el curso y
otros especificadores no se pueden codificar, pero deberían indicarse por
escrito (p. ej., 296.89 [F31.81] trastorno bipolar II, episodio depresivo
actual, gravedad moderada, con características mixtas; 296.89 [F31.81]
trastorno bipolar II, episodio depresivo más frecuente, en remisión
parcial).

Especificar el episodio actual


o más reciente: Hipomaníaco
o Depresivo

Especificar si:
Con ansiedad
Con características mixtas
Con ciclos rápidos
Con características psicóticas congruentes con el estado de ánimo
Con características psicóticas no congruentes con el estado de ánimo
Con catatonía. Nota de codificación: código adicional 293.89 (F06.1).
Con inicio en el periparto
Con patrón estacional: Sólo se aplica al patrón de episodios de depresión
mayor.

Especificar el curso si no se cumplen actualmente todos los criterios


para un episodio del estado de ánimo:
En remisión parcial
En remisión total

Especificar la gravedad si se cumplen actualmente todos los


criterios para un episodio del estado de ánimo:
Leve
Moderado
Grave
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

DIAGNÓSTICOS
DIFERENCIALES

Según la Asociación Americana de Psiquiatría


(2014), los diagnósticos diferenciales del trastorno
bipolar II son:
Trastorno depresivo mayor: Un trastorno
depresivo mayor con síntomas de hipomanía o
maniacos puede ser uno de los más difíciles de
diferenciar con el TB II, es importante resaltar que
los síntomas presentados serán menores y con
menor duración que los solicitados para un
episodio maniaco.

Trastorno ciclotímico: en dicho trastorno


existen constantes periodos de síntomas
hipomaniacos y depresivos, sin embargo estos no
reúnen los criterios sintomáticos o la duración del
episodio depresivo mayor. Además, en el TB II
hay uno o más episodios de depresión mayor, a
diferencia del ciclotímico que no los presenta. Si
aparece un episodio de depresión mayor a los dos
años de un trastorno ciclotímico, se realiza un
diagnóstico de TB II. Trastorno de espectro de la esquizofrenia y
otros trastornos psicóticos: la esquizofrenia,
trastorno esquizoafectivo y trastorno delirante,
mantienen como principal característica periodos
de síntomas psicóticos que aparecen en ausencia
de síntomas afectivos prominentes. Otros
elementos a tomar en cuenta son la historia
familiar, el curso previo y los síntomas
acompañantes.

Trastorno de pánico y otros trastornos de


ansiedad: se deben considerar estos trastornos,
debido a que el TB II con frecuencia puede estar
acompañado por estos.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO II

DIAGNÓSTICOS
DIFERENCIALES

Trastorno por abuso de sustancias

TDAH: en niños y adolescentes, el TDAH puede confundirse con el TB


II. Síntomas como verborrea, aceleración del pensamiento, distraibilidad y
menor necesidad de sueño, pueden cubrir los síntomas de hipomanía.
Para poder diferenciarlos se debe conocer si los síntomas son o no un
episodio diferente, y si existe el aumento basal que se requiere para el
diagnóstico del TB II.

Trastorno de personalidad: La labilidad afectiva y la impulsividad son


tan frecuentes en los trastornos de la personalidad como en el trastorno
bipolar II, por lo que se debe estar alerta de que los síntomas supongan un
episodio diferente y además en que debe existir un incremento apreciable
sobre el estado basal para poder diagnosticar TB. No se debería
diagnosticar un trastorno de la personalidad durante un episodio afectivo
sin tratar, a menos que la historia de vida avale la presencia de un
trastorno de la personalidad.

Otros trastornos bipolares: Se debe


confirmar la presencia de un síndrome
completo de hipomanía y depresión, y además,
considerar si han existido en el pasado
episodios de manía para diferenciarlo del TB I,
otros trastornos bipolares, especificados o sin
especificar, o de otros trastornos relacionados.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS
De acuerdo al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e
Igualdad (2012), mencionan los siguientes tratamientos:

INTERVENCIÓN FARMACOLÓGICA
El objetivo que se pretende en el tratamiento del trastorno bipolar
de los episodios agudos maniacos, hipomaniacos o mixtos es lograr
la reducción de los síntomas de manera rápida , a tal efecto los
fármacos son:

•Litio: de acuerdo a estudios se ha comprobado la


eficacia del mismo en episodios de manía aguda,
considerándose a su vez con mayor efecto o igual que
el valproato, además con un efecto similar a los
antipsicóticos.

•Anticonvulsivos:
- Carbamapecina: se recomienda valorar previo
antecedentes personales hematológicos,
hepáticos o cardíacos, se metaboliza por el hígado
dando lugar a un metabólico activo y se elimina
por vía renal.

- Valproato: su acción se traduce en una inhibición


de la liberación de dopamina pre sináptica lo cual
explica su efecto antimaníaco.

- Oxcarbazepina:cabe decir, que a pesar de que el


medicamento ha sido estudiado en Europa desde
la década de los 80 no se ha logrado establecer
su dosis óptima y niveles terapéuticos adecuados.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS

• Antipsicóticos:
- Haloperidol: vía de administración oral e intramuscular, se
indica para el tratamiento de la manía asimismo para el control
de losepisodios de agitación psicomotora, y además de
coadyuvante en el tratamientode los estados graves de
ansiedad.

-Aripiprazol: se considera útil para el manejo de episodios


maníacos, además se recomienda por ser de mayor seguridad
que los antipsicóticos clásicos, sin embargo, puede presentar
algunos efectos adversos a corto plazo siendo estos: nauseas,
dispepsia, cefaleas, acatisiamovimientos involuntarios; no
obstante no presenta una acción sedante.

- Olanzapina: se recomienda para el tratamiento de la manía.

- Risperidona: se ha comprobado su eficacia en lo que respecta


a manía aguda, se considera que la sintomatología se reduce de
manera rápida y eficaz.

- Quetiapina: al igual que el anterior para el tratamiento de manía


aguda, evidencias han demostrado que reduce los signos
ysíntomas de agitación y agresión en pacientes con manía
aguda.

- Ziprasidona: para el tratamiento de episodios maniacos o


mixtos.

- Asenapina: un fármaco atípico el cual recientemente ha


recibido la indicación para el tratamiento de la manía aguda
moderada o severa en Europa en el trastorno bipolar I.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS

• Otros: agentes bloqueadores de los canales de Calcio, de


acuerdo a ensayos clínicos se ha estudiado que los mismos
ejercen una eficacia para el manejo de los episodios de manía
aguda siendo estos:

- Tamoxifeno: inhibidor de la PKC, en el manejo de la


manía aguda.

- Alopurinol: eficaz en episodios de manía aguda.

•Benzodiazepinas: son mayormente utilizadas en los casos


donde se evidencia la presencia de síntomas tales como:
agitación, ansiedad, insomnio. Los fármacos dentro de esta rama
se encuentran: Lorazepam y Clonazepam.

Ahora bien, para el tratamiento farmacológico de los episodios


depresivos agudos se tiene:

• Antipsicóticos
- Aripiprazol: (5-30 mg/día) para el tratamiento de
depresión bipolar aguda tipo I, si bien, no se ha
demostrado una gran relevancia con el fármaco
mencionado.

- Quetiapina: efectividad en el tratamiento de


depresión bipolar aguda tipo I y II con tolerabilidad
moderada.

- Olanzapina: reducción de síntomas depresivos. La


combinación del fármaco con fluoxetina resulta ser
más eficaz.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS

• Anticonvulsivos
- Valproato: sirve para reducción de síntomas
depresivos en la depresión agua bipolar.

- Lamotrigina: muestra resultados débiles.

• Antidepresivos

- Paroxetina: se recomienda dosis máxima en el día


de 20 mg.

- Fluoxetina: eficacia en síntomas de ansiedad.

• Otros
- Ácidos grasos omega 3: para tratamiento de la
depresión aguda.

- Antiglucocorticoides: para el tratamiento de


episodios depresivos no psicóticos.

- Modafinilo: reducción en lo que respecta a fatiga y


energía.

- Escopolamina: reducción de síntomas depresivos y


ansiosos.

-Celecoxib: podría mejorar el efecto antidepresivo de


los antipsicóticoso los estabilizadores del ánimo en la
depresión aguda.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I Y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS

TERAPIA ELECTROCONVULSIVA

La terapia electroconvulsiva (TEC) es


una técnica de tratamiento que consiste
en la inducción eléctrica sobre el sistema
nervioso central de convulsiones
generalizadas, de tipo tónico clónico
repetidas en diferentes sesiones.

Es usada como segunda elección en el tratamiento del trastorno


bipolar, para alcanzar una mejoría rápida de los síntomas graves una
vez que han resultado ineficaces otras opciones terapéuticas en las
fases depresivas y maníacas; o bien la situación actual del paciente es
potencialmente amenazante para su vida

Los principales efectos adversos de esta


técnica son de tipo cognitivo, asociándose a un
estado confusional postictal transitorio y a un
período más prolongado de alteración de la
memoria anterógrada y retrograda, que se
resuelve habitualmente a las pocas semanas del
cese del tratamiento
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I Y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS

INTERVENCIONES PSICOSOCIALES
Psicoeducación
La psicoeducación intenta proporcionar un marco
teórico y práctico en el cual los afectados puedan
comprender y afrontar mejor el trastorno y sus posibles
consecuencias. Además de transmitir información al
paciente se le entrena en habilidades prácticas que
mejoren su afrontamiento del trastorno.
El enfoque psicoeducativo pretende:

• Incrementar la conciencia de enfermedad.


• Potenciar la adherencia al tratamiento.
• Entrenar en la detección precoz y manejo de pródromos.
• Fomentar hábitos de vida saludables evitando conductas de
riesgo como el abuso de sustancias.
• Fomentar la regularidad de hábitos y el manejo del estrés.

Terapia cognitivo-conductual

Se trata de intervenciones estructuradas y limitadas en el


tiempo que incluyen técnicas de reestructuración cognitiva,
modificación de estilos de afrontamiento, resolución de
problemas, entre otras. Se establece una relación entre el
terapeuta y el paciente basada en la colaboración activa.
Los elementos básicos de las TCC serían:
• Se postula que existe una relación estrecha entre pensamiento, emoción y
conducta.
• Mediante diferentes técnicas se pretende entrenar al sujeto en la detección y
modificación de las distorsiones cognitivas y potenciar conductas que favorezcan
un mejor afrontamiento de la enfermedad y sus consecuencias.
• Se educa a los pacientes sobre la enfermedad, se promueve adherencia al
tratamiento, se les entrena en la detección temprana, se aplican técnicas
cognitivas y conductuales para el manejo de crisis, pautas para promover un
estilo de vida saludable y para protegerlos ante recaídas.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS

INTERVENCIONES PSICOSOCIALES

Intervención familiar

La intervención familiar promueve una


relación de trabajo y colaboración entre el
paciente, la familia y los profesionales de la
salud. Las intervenciones pueden ser
administradas en diferentes formatos:
unidad familiar o en grupo; con el paciente y
la familia (es la más frecuente) o sólo con
los familiares; y en diferentes contextos
(hospitales, domicilio, centros de salud
mental o de rehabilitación).

La mayoría de intervenciones comparten los siguientes


componentes:

• Módulo psicoeducativo: junto con la información sobre la


enfermedad y su tratamiento, incorpora el entrenamiento en
estrategias de afrontamiento para la prevención y manejo de recaídas.
• Entrenamiento en habilidades de comunicación: pretende mejorar la
comunicación entre los miembros de la familia a través del desarrollo
de habilidades tales como la escucha activa, la expresión de
emociones o la petición asertiva de cambios en la conducta del otro.
• Entrenamiento en resolución de problemas: pretende que los
distintos miembros de la familia sean más competentes en la
resolución de dificultades cotidianas.
TRASTORNO BIPOLAR
TIPO I Y TIPO II

TRATAMIENTO PARA
AMBOS TIPOS

INTERVENCIONES PSICOSOCIALES

Terapia interpersonal y de ritmos


sociales

La terapia interpersonal y de ritmos


sociales (IPSRT) utiliza, entre otras,
estrategias como la automonitorización, la
programación gradual de tareas, la
educación sobre el TB y su tratamiento, y
técnicas propias de la terapia interpersonal
para la resolución de las áreas
problemáticas. Se plantea como una terapia
individual y estructurada que se centra en:

• Las relaciones e interacciones interpersonales:


a través de la identificación y afrontamiento de
eventos problemáticos que generan conflictos
interpersonales, pérdidas, sufrimiento,
dificultades en las habilidades interpersonales y/o
asunción de roles y que pueden influir sobre la
enfermedad.

• Las rutinas cotidianas: se pretende la mejora y


regularidad de ritmos en la vida diaria con el
objetivo de reducir el riesgo de recaídas. Se hace
especial hincapié en la regulación del sueño.
TRASTORNO
CICLOTíMICO

HISTORIA

Según Salazar, Peralta y Pastor (2009) el


término ciclotimia fue utilizado por primera vez en
1877 por Hecker, discípulo de Kahlbaum; ambos
lo utilizaron para designar un trastorno
caracterizado por episodios periódicos de
depresión y exaltación, agrupándola con la
distimia y la hipertimia, como “trastornos
mentales parciales con evolución no
degenerativa”.
De acuerdo con dichos autores,
Kahlbaum se refería al tipo más leve de
trastorno bipolar, una definición también
aceptada por Kraepelin y otros autores;
siendo, Kurt Schneider quien utilizara el
término ciclotimia como sinónimo de
enfermedad maníaco–depresiva.

Ewald Hecker implantó el


vocablo “ciclotimia” por primera ¿Sabias qué?
vez en el vocabulario Hecker, resalta el buen
psiquiátrico por medio de su auspicio habitual de la
artículo publicado en 1877; ciclotimia (en oposición
consecutivamente, en 1898, con la parálisis general
anunció una investigación de progresiva y la diferencia
diez páginas con una verídica de otros trastornos
representación de las psiquiátricos, como la
particularidades clínicas de la melancolía, la histeria o la
ciclotimia, clarificando el trabajo neurastenia (Luque y
anterior de Kahlbaum sobre Berrios, 2011).
esta entidad (Luque y Berrios,
2011).
TRASTORNO
CICLOTIMICO

HISTORIA

En concordancia con Luque y Berrios (2011)


Hecker definía la ciclotimia como una entidad
nosológica determinada por los cambios
periódicos del ánimo, que fluctúa entre una
entusiasmo moderado y una depresión distímica.

Las particularidades atómicas son, en el


trascurso de la distimia, la inhibición psíquica sin
delirios ni alucinaciones, la desesperanza, los
lamentos somáticos inespecíficos y,
principalmente, la predisposición a la crítica y al
reclamo; mientras que en el período hipertímico,
los pacientes muestran un ánimo elevado,
incremento del pensamiento, autoestima
desmedida, derroches económicos, sexualidad
elevada y permanencia de la irritabilidad y la
hipercrítica (Luque y Berrios, 2011).

Cabe considerar, por otra parte que Gaston


Deny implanta el significado de ciclotimia en
Francia en una investigación publicada en 1908
y, un año más tarde, en el trabajo especial de
grado de su estudiante Pierre Kahn; es
importante señalar que, Deny, que
anteriormente había intercalado las ideas de
Kraepelin sobre la demencia precoz y la locura
maniaco-depresiva, posee una idea suficiente
amplia de la ciclotimia, debido que incluye
argumentos de neurastenia, psicastenia, fobia y
obsesión.
TRASTORNO
CICLOTIMICO

HISTORIA

Asimismo, es relevante mencionar que si bien


la ciclotimia de Hecker y Kahlbaum se parece
a la concepción de trastorno bipolar II, es
necesario adaptarla en los procedimientos de
codificación actuales, puesto que los
conceptos diagnósticos forman fenómenos
didácticos que pueden transformarse a lo largo
del tiempo (Luque y Berrios, 2011).

En este orden de ideas, desde sus inicios,


podemos encontrar un historial de
investigaciones que dan lugar a sus
comienzos normalmente en la
adolescencia o en la edad adulta temprana
y a veces se considera que refleja una
predisposición temperamental hacia otros
trastornos; agregando, con respecto a los
niños, poca frecuencia, pero una edad
promedio de inicio a los 6 años y medio
(Asociación Americana de Psiquiatría,
2014).

Sin embargo, es importante resaltar, que a través de


los años investigaciones han encontrado que las
personas que presentan este trastorno suelen tener
antecedentes de múltiples cambios de residencia,
son diletantes (conocedor o aficionado a las artes,
especialmente a la música) y participan en diferentes
cultos religiosos; cabe resaltar que, entre un 5–10%
de los pacientes ciclotímicos presentan dependencia
de sustancias; en el cual, un tercio de los pacientes
ciclotímicos evoluciona hacia un trastorno afectivo
mayor, siendo la mayoría de las veces a un trastorno
bipolar II (Salazar, Peralta y Pastor, 2009).
TRASTORNO
CICLOTIMICO

CONCEPTO

Trastorno bifásico menos grave, caracterizado por períodos


alternantes de hipomanía y depresión moderada. Es un estado crónico y
no psicótico donde los síntomas deben estar presentes durante al
menos 2 años con una frecuencia equivalente en ambos sexos.
Comienza habitualmente gradual, al final de la adolescencia o al inicio
de la vida adulta con un porcentaje significativo de abuso frecuente de
sustancias. A su vez, llevando las oscilaciones recurrentes del estado
de ánimo a dificultades sociales y profesionales (Kaplan y Sadock,
2011)

ETIOLOGÍA

De acuerdo con Salazar, Peralta y Pastor (2009) la mayoría de los


investigadores cree que la depresión es el resultado de la interacción
entre las características biológicas y las vulnerabilidades fisiológicas de
una persona y la frecuencia de sucesos estresantes o situaciones
difíciles de superar en su vida.

Según los autores ya mencionado se puede encontrar que el inicio de


los síntomas de un trastorno ciclotímico se produce generalmente de
forma insidiosa; se ha estimado que un 10% de pacientes ambulatorios
y un 20% de pacientes ingresados por un trastorno límite de
personalidad presentaban a la vez un trastorno ciclotímico; sin
embargo, de acuerdo con los datos genéticos aproximadamente un
30% de los pacientes con este trastorno presentan historia familiar de
trastorno bipolar I y estudios revelan que algunos pacientes se
caracterizan por haber sido especialmente sensibles, hiperactivos o
con un estado de ánimo muy variable en la infancia; sumando, el abuso
de alcohol y otras sustancias que terminan por ser frecuente en estos
pacientes, que utilizan estas sustancias para automedicarse
TRASTORNO
CICLOTIMICO

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
Según la Asociación Americana de Psiquiatría (2014) en el DSM V:

A. Durante dos años como mínimo (al menos


un año en niños y adolescentes) han existido
numerosos períodos con síntomas
hipomaníacos que no cumplen los criterios
para un episodio hipomaníaco, y numerosos
períodos con síntomas depresivos que no
cumplen los criterios para un episodio de
depresión mayor.

B. Durante el período de dos años citado


anteriormente (un año en niños y
adolescentes), los períodos hipomaníacos y
depresivos han estado presentes al menos la
mitad del tiempo y el individuo no ha
presentado síntomas durante más de dos
meses seguidos.
C. Nunca se han cumplido los criterios para
un episodio de depresión mayor, maníaco o
hipomaníaco.

D. Los síntomas del Criterio A no se


explican mejor por un trastorno
esquizoafectivo, esquizofrenia, un trastorno
esquizofreniforme, un trastorno de ideas
delirantes, u otro trastorno del espectro de la
esquizofrenia y otros trastornos psicóticos
especificados o no especificados.
TRASTORNO
CICLOTIMICO

CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS
E. Los síntomas no se pueden atribuir a los
efectos fisiológicos de una sustancia (p. ej.,
una droga, un medicamento) o a otra
afección médica (p. ej., hipertiroidismo).

F Los síntomas causan malestar


clínicamente significativo o deterioro en lo
social, laboral u otras áreas importantes
del funcionamiento.

En los niños el
promedio de
inicio de este tra
storno es a los
6 años y medio
TRASTORNO
CICLOTIMICO

DIAGNÓSTICOS
DIFERENCIALES
De acuerdo a la Asociación Americana de Psiquiatría (2014), los
diagnósticos diferenciales del trastorno ciclotímico son:

Trastorno bipolar y trastornos relacionados


debidos a otra afección medica / Trastornos
depresivo debido a otra afección médica: Ambos
trastornos se realizan cuando la alteración anímica
se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una
enfermedad medica específica y normalmente
crónica. En caso de que los síntomas hipomaniacos
o depresivos no son consecuencias de una afección
medica se codifican tanto el trastorno mental
primario como la enfermedad médica.

Trastorno bipolar inducido por sustancias y/o


medicamentos y trastornos relacionados/
Trastorno depresivo inducido por sustancia y/o
medicamentos: Estos se distinguen del trastorno
ciclotímico al valorar que existe una sustancia o
medicamento que se relaciona etiológicamente con
la alteración anímica, y los cambios de humor que
sugieren un trastorno ciclotímico desaparecen al
cesar el uso de la sustancia o el medicamento.

Trastorno Bipolar I, con ciclos rápidos


/Trastorno Bipolar II, con ciclos rápidos: En el
trastorno ciclotímico nunca llega a cumplirse los
criterios tanto de un episodio depresivo mayor
como de uno maniaco o hipomaniaco, mientras
que en el especificador con ciclos rápidos de
ambos tipos de trastorno bipolar si requiere un
episodio completo de alteración.
TRASTORNO
CICLOTIMICO

DIAGNÓSTICOS
DIFERENCIALES

Trastorno límite de la personalidad: Este trastorno se asocia a


cambios marcados del ánimo, si reúne los criterios de ambos
diagnósticos deberían codificarse y diagnosticarse ambos.

PREVALENCIA

De acuerdo a la Asociación Americana de


Psiquiatría (2014), la prevalencia a lo largo
de la vida del trastorno ciclotímico es de
aproximadamente el 0,4-1 %; la
prevalencia dentro de los trastornos del
humor oscila entre el 3 y el 5 %; en la
población general, el trastorno ciclotímico
es igualmente frecuente en los hombres
que en las mujeres.

Ahora bien, la proporción hombre–mujer


en el trastorno ciclotímico es
aproximadamente de 3 a 2, y de un 50–
75% de los pacientes han iniciado el
trastorno entre los 15 y los 25 años;
manteniendo que en los ambientes
clínicos es más probable que acudan a
tratamiento las mujeres con trastorno
ciclotímico que los hombres (Salazar,
Peralta y Pastor, 2009).
TRASTORNO
CICLOTIMICO

TRATAMIENTO

En concordancia con Zúñiga, Sandoval, Urbina y Villaseñor (2005) el


tratamiento del trastorno ciclotímico se puede dividir en dos partes:

·Tratamiento Biológico: Los fármacos antimaníacos son la primera


elección para el tratamiento para este trastorno. Los datos
experimentales son limitados en estudios con litio aunque otras
sustancias antimaníacas, por ejemplo, carbamazepina también son
eficaces. Las dosis y las concentraciones plasmáticas de estos
fármacos deben ser las mismas que para el trastorno bipolar. El
trastorno con antidepresivos con estos pacientes debe realizarse con
precaución por su mayor susceptibilidad a los episodios maníacos o
hipomaníacos precipitados por estos fármacos. Entre un 40 y 50% de
los pacientes con un trastorno ciclotímicos tratados con antidepresivos
experimentan estos episodios.

·Tratamiento Psicosocial: La
psicoterapia se dirige a incrementar la
conciencia de enfermedad de los
pacientes y ayudarles a desarrollar
estrategias de afrontamiento ante sus
cambios de humor. Los terapeutas suelen
ayudar también al paciente a reparar los
perjuicios laborales y familiares
producidos durante los episodios de
hipomanía debido a la larga duración del
trastorno ciclotímico, los pacientes
pueden necesitar tratamiento durante
toda la vida. Las terapias familiares y de
grupo pueden proporcionar apoyo,
educación y recursos terapéuticos a los
pacientes y a las personas que le rodean.
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