Como Coordinar El Culto Taller
Como Coordinar El Culto Taller
Como Coordinar El Culto Taller
Historia
En el primer siglo, la cena del Señor era el centro del culto cristiano.
Los fieles se reunían con el objeto de conmemorar, por medio del
rompimiento del pan, la muerte expiatoria del Hijo de Dios.
Estas eran las características del culto primitivo, según resulta de los
escritores de aquella época. En todo prevalecía la simplicidad. Dios
era adorado en espíritu y en verdad, sin los ritos, ceremonias y
pompas que caracterizaban al paganismo.
Transición
Definición de conceptos.
El culto es para Dios. Al culto hay que venir aportando una actitud
reverente, una actitud ya sea de gozo o de arrepentimiento, pero
nunca de indiferencia, pues la Palabra dice en Deuteronomio 16:16:
«Ninguno se presentará delante de Jehová con las manos vacías».
Diremos más, el culto es una ofrenda para Dios en respuesta a lo que
Él ha hecho por nosotros, y en esa respuesta agradecida de adoración
y acción de gracias, o de súplica, arrepentimiento o búsqueda, en ese
acto de darse, de ofrendarse a si misma, la iglesia es edificada y
consolada, recibiendo la bendición como consecuencia directa de
cumplir el mandato bíblico: «Al Señor tu Dios adorarás y a Él sólo
servirás» (Mt. 4:10).
Max Thurian: «El culto cristiano sólo puede ser litúrgico, es decir
obra del pueblo, cuando sea toda la comunidad la que celebre el
culto, nadie debe estar pasivo, es una verdadera acción comunitaria”.
La liturgia es, por tanto, el conjunto de elementos que forman el
orden del culto y que sirven de cauce y expresión para guiar a la
congregación a un encuentro pleno con su Dios. Pero es algo más,
es la formulación correcta de esos elementos a fin de que
expresen toda la verdad de Dios en una forma adecuada.
Introducción:
La Presentación Personal
(1ºTimoteo4:12)
• No es recomendable improvisar.