Como Experimentar La Seguridad en Cristo
Como Experimentar La Seguridad en Cristo
Como Experimentar La Seguridad en Cristo
Introducción:
Después de un naufragio en una terrible tempestad, un marino pudo
llegar a una pequeña roca y escalarla, y allí permaneció durante muchas
horas. Cuando al fin pudo ser rescatado, un amigo suyo le pregunto:
¿No temblaba de espanto por estar tantas horas en tan precaria situación,
amigo mío?
A. Explicación.
El texto nos dice que un día Jesús les dijo a sus discípulos:
“crucemos a la otra orilla del lago”. La expresión no nos deja ver
una invitación, a la cual hubiesen podido no aceptar. Mas bien el
tono es de una orden, a lo cual los discípulos tenían dos opciones:
obedecer o desobedecer. En la descripción del texto nos indica que
los discípulos obedecieron subiendo a un abarca que los llevaría a
la otra orilla del lago (Mar de Galilea).
Que cruzaran a la otra orilla con él. Esto les implico obedecer a
una orden de Jesús (mandamiento). “así que subieron a una barca
y salieron”
Entonces los discípulos hicieron la voluntad de Cristo obedeciendo
al mandato. Lejos de sus pensamientos estaba que al obedecer a
la voluntad de Dios algo podía presentarse no tan agradable.
B. Aplicación.
1. Hacer la voluntad de Cristo implica obedecer sin pensar o
preguntar qué puede pasar.
2. Experimentar la seguridad en Cristo depende de nuestra
obediencia para hacer su voluntad.
A. Explicación.
Los discípulos navegaban con Jesús, hacia el destino que él les
había dicho. Habían decidido obedecer para que la voluntad de
Jesús se cumpliera en sus vidas. Iban muy confiados y tranquilos
porque El señor iba con ellos en la barca. Jesús tomado por el
cansancio del trabajo ministerial se queda dormido. De pronto son
sorprendidos por una tempestad muy pero muy fuerte, el texto
dice: “Feroz”. Era tan fuerte que la embarcación comenzó a
llenarse de agua y esta era sinónimo de un pronto naufragio, los
discípulos entraron en alto peligro.
B. Aplicación.
1. Obedecer y caminar con Jesús no nos exime o exonera de que
las tormentas de la vida nos envuelvan.
2. Cuando se levanta una tormenta a veces pensamos que Jesús
está durmiendo, y por lo tanto no nos puede ver ni escuchar.
3. Las tormentas desatan miedo en nuestra vida por el peligro que
muchas de ellas presenten.
4. Siempre habrá propósitos de Dios cada vez que crucemos por
una tormenta, en el momento no lo podemos entender, pero
después sí.
5. Si bien, la presencia de Cristo en nuestra vida no nos exime de
las tormentas, si nos asegura protección y seguridad.
B. Aplicación.
1. Quien más si no Jesús para calmar las tormentas de nuestra
vida.
2. A quien mas acudir cundo todo esta por terminar y nada
podemos hacer.
3. En la tormenta la experiencia y el conocimiento muchas veces
no funcionan.
4. En las tormentas Cristo nos enseña a depender de él.
A. Explicación.
Por la expresión del texto, los discípulos despertaron a Jesús no
pensando que él podía detener la tempestad. Su fe se había
menguado al punto de quedar nula. ¿Dónde está su fe? La
pregunta era válida, es que ellos andaban con Jesús, en 8:1-2 nos
muestra que los doce discípulos eran acompañantes de Jesús en
su ministerio y por esta razón habían visto hacer muchos
milagros. Habían sido testigos oculares de la resurrección del hijo
de la viuda de Nain (7:11), y muchos más milagros.
B. Aplicación.
1. En las tormentas la fe puede menguar, pero no permitamos que
quede nula. Confiemos hasta el último segundo.
2. Hebreos 11:6 dice: “…sin fe es imposible agradar a Dios, Todo el que
desee acercarse a Dios debe creer que el existe y que él recompensa a los que lo
buscan con sinceridad”
3. Ilustración. Cuando sintamos que nuestra fe se este agotando
vayamos a Jesús y digamos como el padre que aquel joven que
era atormentado por un espíritu inmundo.
Marcos 9:22-24.
Papá: ten misericordia de nosotros y ayúdanos si puedes.
Jesús: ¿Cómo que si puedo? Todo es posible si uno cree.
Papá: al instante clamo: sí, creo, pero ayúdame a superar la
incredulidad.
Jesús sano al hijo de aquel hombre.
Conclusión:
Hoy puedes experimentar la seguridad en Cristo reconociendo:
1. Esta caminando en la voluntad de Dios o en la suya.
2. Que, aunque está en Cristo no esta exonerado de enfrentar
tormentas
3. Necesitas aprender a depender de Dios
4. Necesita que su fe sea fortalecida.
Vamos a orar por todos los que están pasando por tormentas y estén
necesitando que Jesús se levante y ordene a la tormenta que sece. Si
Jesús lo orden todo va a cambiar.