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Enfoque Humanista 20-07-2023

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Escuela Normal Superior

“Profr. José E. Medrano R.”


Organismo Público Descentralizado de Gobierno
del Estado 08MSU0190P

“Enfoque humanista”

Presenta:

Laisha Valles Cano


Iris Mayté guzmán Pérez

Catedrático: Víctor Hugo González Sosa

Diplomado En La Nueva Escuela Mexicana

“Bases curriculares”

Cd. Juárez, chih., jueves 20 de julio del 2023


En este trabajo se abordará el tema del humanismo en la educación la cual es una corriente
pedagógica que pone en el centro de su enfoque al ser humano y su desarrollo integral. Desde
esta perspectiva, se considera que la educación no debe limitarse únicamente a la transmisión de
conocimientos académicos, sino que también debe fomentar el desarrollo de habilidades
emocionales, sociales y éticas en los estudiantes.

El humanismo en la educación se basa en la idea de que cada individuo tiene un potencial


único y valioso, y que la educación debe estar orientada a promover el pleno desarrollo de este
potencial. Se busca cultivar la autonomía, la creatividad, el pensamiento crítico y la capacidad de
reflexión en los estudiantes, con el objetivo de formar personas auténticas, capaces de tomar
decisiones informadas y de contribuir de manera positiva a la sociedad.

Actividades de inicio:
Desde su experiencia, realice una breve descripción de qué es ser un buen docente con
características de trabajo humanista, ¿Qué hace?, ¿Para qué lo hace?, ¿Qué relación tiene con los
alumnos y docentes?, ¿Qué relaciones establece con los padres de familia?

Un buen docente con características de trabajo humanista es aquel que se enfoca en el


desarrollo integral de sus alumnos, más allá de la mera transmisión de conocimientos. Su
objetivo principal es brindar una educación de calidad que promueva el crecimiento personal,
social y académico de cada estudiante.

En primer lugar, un docente humanista se preocupa por conocer a sus alumnos


individualmente, sus intereses, habilidades y necesidades, para adaptar su enseñanza y generar
un ambiente de confianza y respeto. Reconoce la diversidad y la singularidad de cada estudiante,
promoviendo la inclusión y valorando las diferencias.

Además, un docente humanista se esfuerza por crear un ambiente de aprendizaje positivo,


estimulante y participativo, donde los alumnos se sientan motivados y desafiados a superarse.
Fomenta la autonomía, la creatividad, la colaboración y el pensamiento crítico en sus alumnos,
promoviendo así el desarrollo de habilidades que les serán útiles en su vida cotidiana.
En cuanto a la relación con los alumnos, un docente humanista establece un vínculo cercano y
afectuoso. Escucha activamente a los estudiantes, les brinda apoyo emocional, los orienta y los
anima a alcanzar sus metas. Busca el equilibrio entre la exigencia académica y el cuidado
emocional, reconociendo que el bienestar emocional es fundamental para el aprendizaje.

En relación con otros docentes, un buen docente humanista busca colaborar y compartir
experiencias, conocimientos y recursos. Participa en reuniones y espacios de trabajo en equipo
para enriquecer su práctica docente y contribuir al crecimiento colectivo. Valora la
interdisciplinariedad y la cooperación entre colegas para ofrecer a los alumnos una educación
integral y multidimensional.

En lo que respecta a los padres de familia, un docente humanista establece una comunicación
abierta y fluida. Reconoce a los padres como aliados en la educación de sus hijos y busca
establecer una relación de confianza y respeto mutuo. Informa a los padres sobre el progreso
académico y socioemocional de los estudiantes, promoviendo su participación en el proceso
educativo.

En resumen, un buen docente con características humanistas se preocupa por el desarrollo


integral de sus alumnos, promoviendo un ambiente de confianza, respeto y colaboración. Su
labor va más allá de enseñar contenidos, busca formar personas autónomas, críticas y
responsables, capaces de enfrentar los desafíos de la vida con éxito.
Actividad de desarrollo:
Promoción de la cultura Fomento de la
de la paz: identidad con México:
Favorece el diálogo
Fomenta el amor a la
constructivo, la solidaridad y
Patria, el aprecio por su Responsabilidad
la búsqueda de acuerdos que
cultura, el conocimiento de ciudadana:
permiten la solución no
su historia y el compromiso Implica la aceptación de
violenta de conflictos y la
con los valores plasmados derechos y deberes
convivencia en un marco de
en su Constitución Política. personales y comunes. Bajo
respeto a las diferencias.
esta idea, las y los estudiantes
formados en la NEM respetan
los valores cívicos esenciales
Promoción de la
de nuestro tiempo.
interculturalidad: La Nueva Escuela
Fomenta la comprensión y el Mexicana: Principios y
aprecio por la diversidad
Orientaciones
cultural y lingüística, así La honestidad es el
como el diálogo y el comportamiento
intercambio intercultural
fundamental para el
sobre una base de equidad y
cumplimiento de la
respeto mutuo. Participación en la
responsabilidad social:
transformación de la
Permite que la sociedad se
sociedad:
desarrolle con base en la
Respeto de la dignidad Implica una dimensión
confianza y en el sustento de la
ética y política de la
humana: verdad de todas las acciones
escuela, en cualquier nivel
Promueve el respeto irrestricto para permitir una sana relación
de formación, lo que
a la dignidad y los derechos entre los ciudadanos.
representa una apuesta por
humanos de las personas, con
construir relaciones
base en la convicción de la
cercanas, solidarias y
igualdad de todos los
fraternas.
individuos en derechos, trato y
oportunidades.
En conclusión, es imperativo enfatizar el enfoque humanista en la educación actual, poniendo
énfasis en la dignidad y los derechos humanos, en contraste con un modelo educativo centrado
exclusivamente en el desarrollo de saberes y competencias técnicas. La educación humanista
reconoce que los seres humanos no son solo entidades que deben adquirir conocimientos y
habilidades, sino que también son seres dotados de emociones, valores y aspiraciones.

En primer lugar, el enfoque humanista en la educación fomenta el respeto y la valoración de


la dignidad humana. Al enfatizar la importancia de cada individuo y su derecho a ser tratado con
dignidad, se promueve un ambiente educativo inclusivo, donde se reconoce y celebra la
diversidad de los estudiantes. Este enfoque ayuda a generar un clima de respeto mutuo, empatía
y tolerancia, sentando las bases para una sociedad más justa y equitativa.

En segundo lugar, el enfoque humanista enfatiza el desarrollo de valores y virtudes que son
fundamentales para la convivencia y el bienestar colectivo. La educación no puede limitarse
únicamente a transmitir conocimientos y competencias técnicas, sino que debe formar personas
éticas, responsables y comprometidas con el bien común. El fomento de valores como la
solidaridad, la justicia, el respeto por los demás y la responsabilidad social contribuye a la
construcción de una sociedad más humana y sostenible.

Además, el enfoque humanista en la educación reconoce la importancia de desarrollar


habilidades socioemocionales. El aprendizaje no se reduce a la adquisición de conocimientos
académicos, sino que también implica el desarrollo de habilidades como la inteligencia
emocional, la empatía, la resolución de conflictos y la comunicación efectiva. Estas habilidades
son esenciales para que los estudiantes puedan relacionarse de manera saludable con los demás,
enfrentar los desafíos de la vida y contribuir de manera significativa a la sociedad.

Por último, el enfoque humanista en la educación promueve una visión integral del ser
humano, reconociendo su dimensión ética, social, cultural y emocional, junto con su desarrollo
intelectual. Esto implica que la educación no puede reducirse a la mera transmisión de
conocimientos, sino que debe brindar oportunidades para que los estudiantes reflexionen
críticamente sobre su entorno, desarrollen su autonomía y tomen decisiones informadas basadas
en una comprensión profunda de sí mismos y de los demás.

En resumen, la necesidad de enfatizar el enfoque humanista en la educación actual,


destacando la dignidad y los derechos humanos, se basa en la comprensión de que la educación
no se limita a la adquisición de conocimientos y habilidades técnicas, sino que también tiene la
responsabilidad de formar ciudadanos éticos, capaces de contribuir al bienestar individual y
colectivo. Al poner énfasis en los valores, las emociones y el desarrollo integral de los
estudiantes, la educación humanista sienta las bases para una sociedad más justa, equitativa y
humana.

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