Satélites Artificiales
Satélites Artificiales
Satélites Artificiales
Los satélites artificiales son utilizados para enviar y recibir comunicaciones de uso masivo
como telefonía, televisión o Internet, también sirven para prestar servicios educativos, con
En astronomía, un satélite es un objeto que orbita alrededor de otro objeto de mayor tamaño.
Existen dos tipos de satélites: los naturales y los artificiales; con respecto a los primeros, tan
solo en nuestro Sistema Solar hay varios, cientos de satélites naturales. Para nosotros, el más
conocido es la Luna.
Sobre la atmósfera terrestre orbitan satélites artificiales muy complejos que fueron creados
Prestar servicios educativos y de salud en zonas inaccesibles para otras tecnologías más
tradicionales.
Sin embargo, cuando nos referimos a los satélites artificiales, estamos hablando de cualquier
objeto no natural que está orbitando alrededor de un cuerpo celeste. Estos objetos suelen
tener un objetivo específico, como: entender mejor el universo, las comunicaciones, asuntos
Incluso, algunos satélites han sido lanzados al espacio con fines militares y de investigación
científica.
La mayoría de los satélites artificiales se encuentran orbitando alrededor del planeta Tierra.
A mediados del siglo pasado, en plena guerra fría, los científicos comenzaron a explorar la
El primer satélite artificial creado por el hombre fue lanzado por los rusos el 4 de octubre de
simple: una bola de aluminio del tamaño aproximado de los balones Nivea con los que
jugábamos en la playa, con cuatro antenas y baterías. Dentro del satélite, se instalaron
transmisores de radio que enviaban un beep-beep-beep que podía ser escuchado en todo el
mundo. Con un peso aproximado de 80 kilos, su funcionalidad era muy sencilla, pero
planeta, por lo cual lo importante en ese momento era comenzar a pensar en funcionalidades
que podían ser cubiertas por los satélites. El lanzamiento del Sputnik supuso el inicio de la
era espacial.
Muy poco después, el 3 de noviembre de 1957, los soviéticos lanzaron de nuevo un satélite
más grande, el Sputnik-2, el cual llevaba una importante carga a bordo: la perrita Laika. ¿Se
imaginan que en la época actual se realizara algo así, lanzar una perrita que sabemos que
moriría en el espacio? Desde luego, lo vemos ahora como una aberración, pero en esos
momentos el trato hacia los animales era diferente y primaba el probar cómo se comportaban
los seres vivos en el espacio, de cara a iniciar las primeras misiones tripuladas humanas.
Poco después, los Estados Unidos, que también pugnaban en la carrera espacial, lanzaron el
31 de enero de 1958 su primer satélite, el Explorer-1; este pesaba 30 libras (13.6 kilos), de las
cuales más de 18 se trataban de instrumentos científicos, que incluían un detector de rayos
Explorer-1 estuvo mandando datos a la Tierra durante cuatro meses y cesó sus
por ser el primero estadounidense, que además demostró la posibilidad de poder hacer ciencia
desde el espacio, sino porque gracias a él se descubrieron los Cinturones de Van Allen; esto
fue posible porque una de las cargas de pago científica que llevaba el satélite era un contador
Con estos hitos se inició la denominada era espacial, que se caracterizó por el muy rápido
llamada “carrera espacial”, mantenida entre los Estados Unidos y la Unión Soviética. Gran
de novedad e innovación.
Todos los satélites artificiales que se lanzan son registrados por una institución
localización de los satélites para, entre otros, evitar colocar satélites en el mismo punto y que
La SSN tiene registrado cualquier objeto fabricado por el hombre, con más de 10 cm de
Desde 1957, ha registrado más de 24.500 objetos orbitantes. Gran parte de ellos ya ha
finalizado su operación, por lo cual han seguido una órbita inestable, y se han desintegrado o
Para poder colocar un satélite que orbite la Tierra, es preciso un mecanismo impulsor lo
suficientemente poderoso como para que el satélite alcance una velocidad de 8 km por
segundo.
Además, es necesaria la construcción de un cohete que posea en su interior uno o dos cohetes
más pequeños, para poder alcanzar dicha velocidad. El cohete se mantiene activo por unos
El sistema de propulsión que lleva un satélite está determinado por la posición orbital que
necesita alcanzar y por el tipo de misión. El lanzador dejará ubicado al satélite en una órbita
superior o de escape; pero, además, el satélite puede llevar su propio módulo de propulsión
para realizar un ajuste fino de órbita (por ejemplo, en caso de que el lanzador no le haya
satélite PAZ se tiene que mantener siempre dentro de un tubo de 250 metros de diámetro).
Módulo de potencia
El satélite tiene que generar y distribuir la cantidad adecuada de potencia para que puedan
funcionar todos sus instrumentos y módulos, o subsistemas. El método más empleado para
ello es mediante paneles solares, los cuales convierten la luz solar en electricidad. El satélite
se diseña para que sus paneles solares estén orientados siempre hacia el Sol. Cuando la
plataforma está en eclipse debido al paso de un objeto celeste o porque se gira el satélite para
Puesto que las diferentes unidades que componen el satélite pueden requerir diferentes
voltajes, puede ser necesario convertir y estabilizar el voltaje “bruto” producido por el panel
solar antes de ser distribuido a las diferentes unidades, o bien la conversión se puede realizar
dentro de estas.
Módulo de navegación
satélite pueda mantener su actitud, esto es, su orientación deseada. Esta capacidad es
requerida para mantener los paneles solares apuntados hacia el Sol y los instrumentos
sensores de Sol y de estrellas, los cuales tienen mapeada la posición con alta precisión de
estos astros; por esto, detectándoles y mediante triangulación, se puede calcular la posición y
Con ello, se requiere un sistema de propulsión y/o volante de inercia controlado por el
desde la Tierra, y de transmitir hacia esta los datos de telemetría, tanto de la que contiene los
datos de los instrumentos, como los de salud del satélite (se refiere a la denominada
telemetría de HouseKeeping, que son una serie de parámetros que monitorizan el estado del
de niveles de baterías y propulsión, de estado de paneles solares, etc.). Por lo tanto, incluye
digital/analógico.
Los comandos recibidos de la Tierra son almacenados y procesados; pueden ser de tiempo
real, es decir que tienen que ser ejecutados en el momento en el que se reciben, o time-
tagged, en el que el propio comando incluye información del tiempo en el que se debe
ejecutar.
Con respecto a los datos que se mandan a la Tierra, estos también son procesados y
encapsulados adecuadamente, incluyendo, según el caso, encriptación (para que una antena
que no sea propia que esté escuchando en la Tierra no sea capaz de entender la información
transmitida) y técnicas de corrección de errores, para que, en caso de que se pierdan paquetes
principal del satélite y de la misión, y que puede, así mismo, incorporar otros elementos
secundarios.
Hay varios tipos básicos de satélites artificiales que orbitan sobre la Tierra: satélites
Geoestacionarios: son aquellos que se mueven en dirección este-oeste por encima del
Dentro de estos dos tipos básicos, tenemos algunos tipos de satélites que se encargan de
observar y detectar las características de la atmósfera, los océanos y las masas de tierra. Son
geosincrónicos y los heliosincrónicos. Los primeros son aquellos que orbitan alrededor del
planeta a la misma velocidad que la rotación terrestre. Los segundos son los cuales pasan
cada día a la misma hora sobre un punto determinado del planeta. La mayoría de los satélites
que son utilizados en las telecomunicaciones en la predicción del tiempo son geosíncronos.
Los satélites artificiales deben ser puestos en órbita mediante algún tipo de lanzamiento
espacial, el cual, una vez alcanzada la región de la atmósfera deseada, abandona al artefacto
para siempre. Aunque hay cientos de órbitas posibles, generalmente los satélites se ubican en
SATÉLITES NATURALES
Los satélites naturales son todos aquellos cuerpos celestes no artificiales que orbitan
alrededor de otro, que normalmente suele ser más grande. Reciben el nombre de "lunas" y
giran alrededor de los planetas del Sistema Solar. En este artículo de GEOenciclopedia te
Es todo cuerpo celeste no artificial que orbita alrededor de otro, generalmente más grande. El
concepto se refiere a todos aquellos que también reciben el nombre de “lunas” y se mueven
conocido es el de la Tierra, llamado simplemente Luna, que es el único que el planeta posee.
Los planetas interiores o terrestres tienen pocos o ningún satélite, y en contraste, los demás
planetas poseen varios satélites que a raíz de su descubrimiento fueron designados con
diversos nombres, de los cuales algunos provienen de las mitologías griega y romana.
Características
Tal como la Tierra se mueve alrededor del Sol, los satélites naturales se mueven
partir de nubes de gas y polvo que se encontraban alrededor de los planetas durante
No todos tienen el mismo tamaño. Unos son más grandes que la luna de la Tierra,
pero otros son mucho más pequeños que esta. La luna más grande mide 5,262
Muchos son esféricos, mientras que otros presentan una forma muy irregular.
días en completar una vuelta, pero Ganímedes completa su órbita en 7.16 días.
Tipos
mismo sentido en el que este gira en torno al Sol. Así, si la luna gira de este a oeste y
su planeta también, es un satélite regular porque está en órbita directa alrededor del
cuerpo más grande. Ejemplos: Ío, Ganímedes, Europa, Tetis, Titán, Miranda, Ariel y
Oberón.
Satélites naturales irregulares: sus órbitas siguen órbitas muy alejadas de sus planetas,
debido a que es posible que no se hayan formado en ellas, sino que pudieron ser
Asimismo, sus órbitas son muy elípticas y muy inclinadas. Ejemplos: Febe, Himalia,
Leda y Nereida.
mucho más pequeñas que se mueven en torno a algunos asteroides y cuerpos celestes
más.