Ficha 5
Ficha 5
Ficha 5
Ficha # 5
Se menciona que es difícil determinar con precisión el número de habitantes debido a la falta de
registros periódicos y control por parte de la iglesia y el Estado. Sin embargo, se destaca que, a partir de
la segunda mitad del siglo XVII, la población comenzó a aumentar de manera significativa. Se menciona
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que mientras la población indígena en México crecía, en el virreinato del Perú seguía disminuyendo.
También se hace referencia a la migración de los indígenas a las ciudades y otras regiones para evitar el
pago de tributos y abusos, lo que llevó a la disminución de los originarios y el aumento de forasteros.
Además, se menciona el crecimiento de la población africana debido a la llegada de esclavos que fueron
vendidos para trabajar en las ciudades y haciendas. También se hace referencia a la migración forzada y
la reducción de los pueblos indígenas de tierras bajas debido a la colonización y los proyectos
misionales. menciona el crecimiento de la población criolla y mestiza en las ciudades, lo que generó una
mayor movilidad social. También se menciona la falta de estudios de demografía histórica que permitan
establecer cuantitativamente la situación de la población de Charcas, excepto en algunos datos sobre la
población indígena tributaria. Se muestra un cuadro que muestra el crecimiento poblacional de la
población tributaria en distintas provincias de Charcas entre 1683 y 1786. Se destaca que el crecimiento
poblacional fue moderado, con un aumento mayor en las tierras de valle como Chulumani, Mizque y
Tarija, mientras que en las tierras altiplánicas el aumento fue menor. También se menciona que uno de
los cambios más profundos entre el sistema económico y social prehispánico y el sistema colonial fue la
concepción sobre la tenencia y propiedad de la tierra.
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Los españoles lograron obtener la propiedad de la tierra a través de mercedes, que consistían en la
entrega de tierras como premio por su participación en la conquista. También se menciona el proceso
de composición de tierras, que implicaba cancelar un monto a la Corona para legalizar la posesión
anterior de tierras. Se destaca que las tierras más cotizadas para los españoles eran las de valle, donde
podían cultivar productos como vid, trigo y árboles frutales. En contraste, las tierras altas con vocación
pastoril eran menos valoradas por los españoles, por lo que las comunidades o ayllus pudieron
mantener su propiedad. En el siglo XVII, hubo regiones de Charcas con un mayor porcentaje de
haciendas, mientras que en otras se mantuvieron las comunidades o ayllus. Se menciona que las
haciendas se especializaron en la producción de granos, papa, cebada, vid y árboles frutales, y se
conocieron como haciendas de panllevar. Estas haciendas eran propiedades privadas pertenecientes a
personas individuales o instituciones como la iglesia, y su producción estaba destinada principalmente al
mercado interno. El trabajo en las haciendas no era asalariado, sino servil. Se menciona que la posesión
de una hacienda no solo tenía motivaciones económicas, sino también sociales y de estatus. Esto llevó a
la formación de una élite terrateniente en la mayoría de las ciudades de Charcas. es importante señalar
que también existían desigualdades internas. En la cúspide se encontraban los principales, quienes eran
los jefes de las comunidades y tenían poder y autoridad sobre los demás miembros. Debajo de ellos se
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Encontraban los tenientes, quienes eran los encargados de la administración interna de la comunidad.
Luego estaban los mayordomos, quienes se encargaban de la distribución y administración de las tierras
comunales. Finalmente, en la base de la jerarquía se encontraban los comuneros, quienes eran los
miembros comunes de la comunidad. A pesar de estas desigualdades, las comunidades mantenían una
serie de prácticas y valores comunitarios, como la reciprocidad y la redistribución. Los comuneros
trabajaban en forma colectiva en las tierras comunales, rotando las parcelas de cultivo y compartiendo
los frutos obtenidos. También se realizaban trabajos comunitarios, como la construcción y
mantenimiento de caminos y canales de riego.
Sobre el número de tributarios en diferentes regiones de Charcas son muy variados en relación a las
fechas de las revisitas de tributarios y las categorías tributarias. Se destaca que el pago colectivo fue una
fuente de abuso, ya que el Estado exigía el pago total establecido por la revisita, incluso si disminuía el
número de tributarios debido a muerte, ausencia o reserva. Se menciona que se realizaban revisitas
periódicas cada cinco años para censar a los tributarios y establecer los montos colectivos. Estas
revisitas son una fuente importante para el estudio de la población indígena. También se menciona que
en el siglo XVII, el monto de las tasas variaba dependiendo de diversas circunstancias, como la calidad de
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Las tierras trabajadas y las concesiones otorgadas por las autoridades coloniales. El pago se realizaba en
pesos corrientes de a 8 reales y, a veces, en especie. El monto anual variaba de una región a otra. Se
menciona que, durante la sublevación general de indios, hubo una disminución irregular en los montos,
pero posteriormente aumentaron. También se destaca que parte de lo recaudado se destinaba al pago
de salarios de corregidores y funcionarios civiles, así como al sínodo de los curas. Se menciona el
ejemplo de la provincia de Atacama, donde el número de indígenas y tributarios era menor que en el
altiplano, y las categorías se distribuían de manera diferente. Parcialmente de España, que veían en el
mercado indígena una oportunidad de expandir sus productos, y los intereses de los corregidores y
autoridades coloniales, que encontraban en el reparto una forma de obtener beneficios económicos.
El reparto consistía en la compra obligatoria de mercancías por parte de las comunidades indígenas, a
través de sus caciques. Estas mercancías eran entregadas por los comerciantes y luego pagadas por los
indígenas con su tributo. Sin embargo, el sistema de reparto presentaba numerosos problemas. En
primer lugar, las mercancías que se entregaban muchas veces eran de mala calidad o no eran necesarias
para los indígenas. Además, se establecían precios excesivos, lo que generaba un endeudamiento
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Constante de las comunidades. Esto llevaba a que los indígenas tuvieran que endeudarse cada vez más
para poder pagar el tributo y, a su vez, el reparto.
La situación se volvió insostenible y generó un profundo malestar entre los indígenas. Esto se sumó a las
otras formas de explotación y abuso que sufrían, como la mita y las diversas pensiones y cargas
impuestas por las autoridades coloniales. Finalmente, en el contexto de la sublevación general de indios
de 1780-1782, el reparto mercantil fue eliminado por la Corona.
El sistema de reparto mercantil en la región de Charcas fue impuesto por las autoridades coloniales y
benefició principalmente a los comerciantes europeos y criollos, mientras que perjudicó a los indígenas
y a otros sectores de la sociedad. Este sistema generó un malestar generalizado entre los indígenas y fue
una de las causas de la sublevación general de indios de 1780-1782. A pesar de ello, el reparto mercantil
también tuvo un impacto en la economía colonial al ampliar los mercados y la participación indígena en
ellos.
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Glosario.
Mercantilismo: Este era un sistema económico predominante durante el siglo XVIII en Europa, que
defendía la acumulación de riqueza, especialmente oro y plata, por parte de la nación a través de un
equilibrio comercial positivo.
Colonialismo: Durante el siglo XVIII, las potencias europeas establecieron colonias en todo el mundo,
explotando recursos y a menudo imponiendo su cultura y sistemas políticos a las poblaciones indígenas.
Absolutismo: Forma de gobierno en la que el monarca tiene un poder absoluto sobre su estado y su
pueblo. Fue la forma predominante de gobierno en Europa durante el siglo XVIII.
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Comentario.
Durante el siglo XVIII, el mundo experimentó una serie de cambios y transformaciones significativas en
su estructura económica, social, política y cultural. Este período, también conocido como la Ilustración o
la era de la Razón, marcó un cambio drástico en la forma en que las personas pensaban y veían el
mundo.
En términos económicos, el siglo XVIII fue testigo del nacimiento del capitalismo industrial. La
Revolución Industrial, que comenzó en Gran Bretaña, cambió significativamente la economía global. La
producción se trasladó de un modelo basado en el trabajo manual a uno basado en la maquinaria. Esto
llevó a un aumento dramático en la productividad y la riqueza, pero también creó una brecha
significativa entre los ricos y los pobres.
En conclusión, el siglo XVIII fue un período de grandes cambios y transformaciones que sentaron las
bases para el mundo moderno en términos de estructura económica, social, política y cultural.