Éxodo 3
Éxodo 3
Éxodo 3
Juan 1:18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le
ha dado a conocer.
Isaías 6:2 Dos serafines permanecían por encima de él, y cada uno de ellos tenía seis alas;
con dos se cubrían el rostro, con dos se cubrían los pies, y con dos volaban.
a. Viendo Jehová que él iba a ver: Dios no habló a Moisés hasta que Él tuvo la
atención de Moisés. Regularmente la Palabra de Dios no toca nuestro corazón de
la manera que podría llegar a hacerlo puesto que nosotros no prestamos atención.
– JESÚS HIJO DE DAVID
b. ¡Moisés, Moisés! Las primeras palabras de Dios para Moisés fue llamarle por su
nombre. Esto muestra de que a pesar de que Moisés era un pastor solitario y
olvidado detrás del desierto, Dios sabía quien era él, y Moisés era importante para
Dios.
. d. Y Él respondió: Dios le dijo a Moisés que hiciera dos cosas para mostrar un
honor especial a éste lugar debido a la inmediata presencia de Dios.
· Él le dijo a Moisés que guardara su distancia (No te acerques).
ii. Éste era un lugar santo; y debido a que Dios es santo siempre habrá una
distancia entre Dios y los hombres. Aún en la perfección el hombre nunca será
igual a Dios, aunque si seremos capaces de tener un relación más cercana con Él.
f. Entonces Moisés cubrió su rostro, porque tuvo miedo de mirar a Dios: Dios dijo a
Moisés que hiciera lo que era apropiado para una criatura frente a su Creador – el
reverenciar y reconocer Su santidad. Moisés respondió como un hombre que sabía que él
no sólo era una criatura, sino una criatura pecadora – él cubrió su rostro.