El Dengue
El Dengue
El Dengue
El dengue es una enfermedad viral transmitida por mosquitos, que se caracteriza por producir un
importante dolor en las articulaciones y músculos, inflamación de los ganglios y erupción en la
piel. No todos los mosquitos contagian el dengue, solo aquellos que previamente han picado a
un individuo enfermo.
Existen cuatro tipos del virus del dengue. La primera vez que una persona es contagiada por
cualquiera de estos cuatro virus, adquiere el dengue. Nunca volverá a padecer dengue por el
mismo virus; pero si la persona vuelve a ser picada por un mosquito portador de uno de los tres
restantes virus, puede sufrir otra vez dengue. Por lo tanto, una persona puede tener hasta cuatro
enfermedades por dengue durante su vida.
2. ¿Cómo se contagia?
El dengue es transmitido por la picadura del mosquito Aedes Aegypti. Cuando este se
alimenta con sangre de una persona enferma de dengue y luego pica a otras personas, les
transmite esta enfermedad. El contagio solo se produce por la picadura de los mosquitos
infectados. No se transmite directamente de una persona a otra, ni a través de objetos ni de
la leche materna.
No hay vacuna disponible contra el dengue, por lo que si vivimos o vamos a viajar a una
zona de riesgo, la mejor prevención es evitar ser picados por mosquitos. Para eso:
Cuidado personal
Aplique repelente contra insectos en la piel expuesta.
Rocíe su ropa con repelente, ya que los mosquitos pueden picar a través de la ropa de
tela fina.
Use camisas de manga larga y pantalones largos.
Use mosquiteros en las camas si su habitación no tiene acondicionador de aire.
Para protección adicional, rocíe el mosquitero con insecticida.
Rocíe insecticidas en su habitación antes de la hora de acostarse.
Cuidados ambientales
Revise su casa y las zonas de los alrededores, como jardines y quintas, en búsqueda
de recipientes que puedan acumular agua estancada que no tenga ninguna utilidad.
Elimine el agua de los huecos de árboles, rocas, paredes, pozos, letrinas abandonadas.
Por ejemplo, rellene huecos de tapias y paredes donde pueda
juntarse agua de lluvia.
Entierre todo tipo de basura, como latas, cáscaras, llantas y demás recipientes u objetos
que puedan almacenar agua.
Ordene los recipientes que puedan acumular agua, póngalos boca abajo o colóqueles
una tapa.
Mantenga tapados los tanques y recipientes que colectan agua o que pueden
recolectarla si llueve.
Cambie el agua de los floreros cada tres días y límpielos frotándolos por dentro.
De ser posible, utilice productos alternativos en lugar de agua (geles, arena).
Cambie el agua de los bebederos de animales cada tres días y lávelos con esponja.
Mantenga limpias, cloradas o vacías las piletas de natación fuera de la temporada.
Mantenga desmalezados los patios y destapados los desagües de lluvia de los
techos.
Hable con sus amigos y vecinos para informarles acerca de las medidas para
prevenir el dengue.
En la mayoría de los casos, el dengue puede producir síntomas parecidos a una gripe; pero,
en algunos casos, puede causar una enfermedad grave con hemorragias. Si ha viajado o
vive en una zona donde se conocen casos de dengue y tiene fiebre alta, con intenso
malestar general, dolor de cabeza, dolor detrás de los ojos y dolores de los músculos y
articulaciones, consulte al Centro de Salud; allí le dirán si es posible que se trate de dengue
y qué debe hacer.
Consulte siempre a su médico. Evite tomar aspirina e ibuprofeno, porque pueden favorecer
las hemorragias. El único medicamento indicado en caso de dolor intenso o fiebre es
paracetamol.
Es necesario utilizar mosquiteros donde se encuentra el paciente mientras tenga fiebre, para
evitar que sea picado por mosquitos que, de esa manera, se infecten y puedan contagiar
después a otra persona.
1 Lee los enunciados y relaciona adecuadamente las ideas con las respectivas partes del
texto. Luego marca la alternativa correcta.