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Cartilla Nueva2016

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Para dejar de hacer Basura

¿Cómo puedo ayudar a cuidar el


planeta y a disminuir el impacto
de mis acciones desde el hogar, la
escuela y mi trabajo?

Practica las 3R

R educir

3R R eutilizar

R eciclar

REducir
Compra sólo lo necesario y practica un
Consumo Responsable.

El Consumo Responsable integra la capacidad de discernir y conocer a


profundidad qué implica adquirir un producto teniendo en cuenta todo su ciclo
de vida. Así, reducir tiene al menos dos niveles:

1 Reducir el impacto ambiental relacionado con


nuestras decisiones de consumo
2 Reducir la cantidad de residuos que generamos

Esta ‘R’ brinda grandes beneficios al disminuir la necesidad de extraer materia prima
virgen de la tierra

Consumo Responsable
Algunas preguntas que nos pueden ayudar a tomar mejores
decisiones a la hora de comprar un producto:
¿Realmente lo necesito?

¿Qué recursos necesitó para su producción y cuánto de cada uno (transporte,


energía, minerales, agua, aditivos, espacio, trabajo)?

¿Se requirieron productos tóxicos en su elaboración?

¿Tiene algún sello que lo certifique como un producto amigable con el ambiente,
con políticas de extracción responsable y sustentable?

¿Es una empresa responsable la que lo produjo?


¿Cómo es desechado? ¿Se puede reutilizar o reciclar?

15 buenas prácticas de consumo


responsable para ayudar al Planeta
1 Utilizar bolsas de tela y disminuir el uso de
bolsas de plástico.

2 Comprar productos en envases retornables y


evitar productos desechables.

3 Comprar productos que duren más y que


puedan ser reutilizados.

4 Evitar productos que provengan de materia


prima no renovable.

5 Evitar productos que provengan de técnicas no


sustentables de extracción y producción.
6 Cargar un termo para disminuir el consumo de
botellas y vasos desechables.

7 En vez de botarlos, donar muebles, artefactos,


ropa, juguetes, libros, etc.

8 Preferir los productos orgánicos por la salud


ambiental y propia. Comprar directamente a los
productores del campo.

9 Leer el etiquetado, preferir productos con sello


verde.

10 Conocer el historial de la empresa a la que


se le compran los productos.

11 Preferir los productos


envasados y/o elaborados con
material reciclado.
12 Preferir los productos que puedan ser
reutilizados, reciclados o que sean
biodegradables.

13 Evitar el consumo innecesario de papel.


Imprimir en ambas caras, reducir las márgenes,
el interlineado, el tamaño de la letra y reutilizarlo.

14 Preferir productos con menos empaques.

15 Transformar los residuos orgánicos en


abono, a través de técnicas sencillas como el
compostaje o la lombricultura.

REutilizar
Es la acción de volver a utilizar los bienes o productos con la
misma finalidad, alargando su vida útil.

En términos prácticos quiere decir no tirar las cosas cuando todavía


son útiles.

En esta ‘R’ se incluye la ‘R’ de Reparar, en relación a que es cada vez menos
frecuente que reparemos un producto que falla: preferimos botarlo y comprar uno
nuevo. Y cada vez las cosas se dañan más rápido por la Obsolescencia
Programada (los objetos se diseñan con una vida útil corta) y la Obsolescencia
Percibida (cuando se crea un producto con un cierto aspecto, y más adelante se
vende exactamente el mismo producto cambiando tan solo su diseño).

REciclar
Es el proceso mediante el cual se convierten los materiales en
productos nuevos.
Cuando reciclamos reducimos el consumo de materiales vírgenes, el
uso de energía, la contaminación atmosférica (producto de la
incineración), la contaminación hídrica (producto del contacto de los
residuos con el agua) y los gases de efecto invernadero.

Desde una visión de ciudad, la separación en la fuente por parte de


todos los ciudadanos es un componente fundamental del proceso de
reciclaje de un producto.

Separación en la Fuente
En tu hogar separa los residuos así:
En la bolsa blanca o traslúcida se depositan LIMPIOS Y SECOS los
siguientes residuos reciclables: papel, cartón, vidrio, plástico, metal,
Tetra Pak, textiles.

En la bolsa negra se deposita ‘lo demás’ (residuos orgánicos y


sanitarios, residuos de barrido, desperdicios, servilletas usadas,
pañales usados, entre otros).
¡IMPORTANTE!
El uso de las dos bolsas está dirigido a la ciudadanía que genera
residuos domiciliarios.
En ningún caso, los establecimientos que practican una separación en
tres o más compartimentos deben cambiarse al uso de las dos bolsas.
¡Cuidado! Hay residuos que no van en
la bolsa blanca ni en la bolsa negra:

1. Residuos hospitalarios de origen domiciliario


Debes llevarlos al hospital más cercano y depositarlos en las canecas
rojas. Allí, la empresa encargada del aseo los recogerá y les dará el
tratamiento apropiado.

2. Escombros domiciliarios
Si vas a hacer una remodelación en tu casa llama previamente al operador de aseo de
tu localidad para coordinar la recolección de los escombros que vas a generar. Es
importante tener en cuenta que según el Decreto Ley 2981 de 2013, el ciudadano que
genere los escombros debe pagar al operador de aseo por su recolección y limpieza.
Este servicio no es gratuito.

¡No arrojes los escombros en la vía pública ni en ecosistemas estratégicos. Es


un compromiso con tu ciudad y con tu hábitat!

3. Residuos posconsumo
Los bombillos, plaguicidas, medicamentos vencidos, pilas, baterías,
tóner de impresoras, residuos de aparatos eléctricos y electrónicos
(como los computadores y los celulares), incluso las llantas, debes
llevarlos a varios puntos establecidos en la ciudad destinados para su
recolección.

Estos residuos tienen componentes muy preciados y también otros muy


peligrosos que no deben entrar en contacto con el suelo o el agua.

Existen varias iniciativas que buscan promover la entrega voluntaria de


este tipo de residuos en la ciudad. Consulta los lugares más cercanos a
tu casa donde puedes entregarlos.
Nuestro Reciclador de Oficio

Los residuos reciclables serán recogidos por los recicladores de


oficio, que pasan por nuestras casas para enseñarnos a separar bien
nuestros residuos.
No olvides que estos residuos deben ser entregados entre 1 y 3 horas
antes de que pase el camión de aseo en el horario convenido.

La separación en la fuente es un compromiso social y ambiental.


Adicionalmente, es una práctica que dignifica el trabajo del reciclador de oficio
y una contribución a la sostenibilidad de la ciudad.

¿Cómo puedes comprometerte aún más?


1. Anímate a sacar los residuos orgánicos de la bolsa negra y
conviértelos en abono a través de técnicas sencillas como el
compostaje y la lombricultura.

De las 6.400 toneladas que llegan todos los días al Relleno Sanitario de Sincelejo, más
de 4.400 toneladas (el 70%) corresponden a residuos orgánicos.
Su conversión en abono es muy sencilla, basta con averiguar un poco. El
aprovechamiento de estos residuos es vital para minimizar la generación en la fuente y
es también una herramienta contundente para combatir el cambio climático y fertilizar
los suelos.

2. No botes por el desagüe el aceite vegetal usado.


Cada litro de aceite usado vertido por el desagüe contamina 1.000 litros de
agua limpia.

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