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Autobiog Raf Í A

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LAS ARTES


PNFA ARTES Y CULTURAS DEL SUR

LILA TAMAYO

Autora: Lila Tamayo


civ-.11580257
Profesor César Araujo

Sanare, marzo 2023


“CONOCER LA HISTORIA PERMITE SABER DE DÓNDE Y CÓMO VENIMOS, PARA
LUEGO PENSAR POR NOSOTROS MISMOS QUÉ HACEMOS Y, POR ÚLTIMO, A
DÓNDE IREMOS”

LILA TAMAYO EN LA HISTORIA

Algunas palabras que definen a Lila Margot Tamayo Rivero, quien ha


participado en algunas actividades y se ha desempeñado como activista del
cristianismo comprometido en su adolescencia y juventud, donde combinaba esas
actividades con el trabajo en los comité de educación, de salud y grupos de
mujeres desde donde nació la Asociación Civil MONCAR que es actualmente una
cooperativa para la elaboración de dulces, salsa, encurtidos y mermeladas,
además de incluirse en grupos de caminatas y miembro fundadora del Consejo de
Derechos de niños, niñas y adolescentes desde el surgimiento de la LOPNNA en
2001.
También se desempeñó en las escuelas de la zona cafetalera donde realizó
trabajo en el área cultural, específicamente trabajando los cuentos, la
dramatización y montajes actorales. Estuvo por 5 años como responsable de la
Biblioteca Pública Maestro Renato Agagliate de Sanare, allí desempeñó un trabajo
con los escritores e historiadores para realizar jornadas de Historia Insurgente,
transcripción y publicación de obras de autores locales, documento de
descolonización, elaboración del Plan Estratégico y un sin número de actividades
para dar cumplimiento a los grandes objetivos de esta institución.

Transitó por Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez a través


del Centro de Experimentación para el Aprendizaje Permanente (CEPAP) donde
egresó como licenciada con su trabajo sobre la promoción de los valores a través
del teatro, posteriormente hizo su especialización en evaluación en la Universidad
Valle de Momboy para el apoyo a los liceos rurales. Más adelante cursó la
maestría en Educación Ambiental por la Universidad de los Llanos Ezequiel
Zamora con un trabajo sobre las organizaciones comunitarias en el territorio y su
relación con el trabajo ambiental.
Actualmente es docente jubilada con 28 años al servicio de una educación
altruista y liberadora. En la actualidad está cursando un doctorado en Artes y
Culturas del Sur a través de la Universidad Nacional Experimental de las Artes.es
y seguirá siendo activista y promotora sociocultural, apoyando iniciativas siendo
amiga de los artesanos, cultores, niños narradores, músicos y mucho más. Ella es
Sanare.

LILA TAMAYO ¿DE DÓNDE SERÁ?

Nació en Sanare un 23 de octubre de 1971, en una tarde de toros coleados


cuando la manga de Coleo estaba pegadita del Hospital y no había paso para que
mi mamá pasara con los dolores. Entonces se le calmaron esos dolores, logró
pasar y cuando apenas la iban a tender nació Lila. Su mamá cuenta que juraba
que era un niño varón por lo rápido que fue el trabajo de parto. Bueno nació una
muchachita sana y llorona. Al siguiente día fue llevada a Monte Carmelo y allí aun
reside. Lila es la número 4 de 12 hermanos (6 hembras y 6 varones de padre y
madre y todos están vivos)
Lila vivió fuera de su caserío por asuntos laborales: Trabajó en Las Lajitas y
en la Cooperativa de Palo Verde como ayudante contable para vaciado de actas,
libros, asientos de contabilidad. Dictaba clases a manera de colaboración y quedó
seleccionada por la Universidad Simón Rodríguez para un proyecto de
profesionalización en los años 90.

Se graduó de Licenciada en Educación y se radicó en Palo Verde por 9


años. En el año 2005 se fue a trabajar a la Comunidad Sabana del Padre ubicada
en Quebrada Honda de Guache, limita con campos de Araure, estado Portuguesa.
Luego se va a otro caserío llamado Miraflores II de la misma parroquia, muy
lejano, muy difícil acceso y en el año 2012 fue intervenida quirúrgicamente de un
problema en la base craneal. Saliendo excelente en su proceso de sanación.

En el año 2014 regresa a su Monte Carmelo de siempre; allí consigue


traslado para la Escuela donde cursó su primaria y allí permaneció poco tiempo;
sin embargo, allí sigue estando en la casa de su familia. Posteriormente estuvo en
Bojó y la llaman para que realizara la activación de los diferentes programas
literarios en la Biblioteca Pública. Allí desplegó una labor extendida en el apoyo a
todos los sectores culturales hasta el año 2022. Todavía esta profesora trabaja
con títeres, teatro, narración de cuentos y apoya a las comunidades en estas
áreas.

LA HISTORIA COMO CIENCIA Y COMO DISCIPLINA CIENTÍFICA

“Es una disciplina que estudia y expone, de acuerdo con determinados


principios y métodos, los acontecimientos y hechos que pertenecen al
tiempo pasado y que constituyen el desarrollo de la humanidad desde sus
orígenes hasta el momento presente; además puede ser definida
como una ciencia humana y social singular, con una metodología de
investigación contrastada, unos conceptos teóricos de partida y un
lenguaje interpretativo propio; una ciencia al servicio de cada
generación como estudio de las experiencias pasadas, de las esperanzas
presentes”

DEFINICION OFICIALIZADA

De acuerdo a esta explicación histórica es muy importante realizar de


manera individual esta retrospectiva de nuestra propia existencia y de nuestra
manera de ver el mundo; además de ver y evaluar en qué he invertido el tiempo,
qué cosas siento necesario reforzar o retomar, o comprender, de qué manera
estaré segura y plena de haber cumplido o no con una misión de vida, con una
acción frente a los propósitos. En este sentido ver cuál ha sido mi propio
compromiso frente a mi Proyecto de vida.
Las reminiscencias y los bonitos recuerdos que nutren el alma, la mente, los
sentimientos, hacer esa revisión de vida. Examinar todo lo que sobrevive de una
cosa y sirve para recordarla, de qué valen estos recuerdos, qué nos enseñan
ahora.

CAMPO ES CAMPO, LO DEMÁS ES…

Origen y esencia, vivir entre raíces donde por momentos era de la época de los
recolectores, de los cazadores y agricultores. A veces siento que he vivido más de
lo real; es como si ya hubiese vivido seis o siete décadas, incluso una vez un
médico me dio la explicación científica que más adelante será develada.
Conozco y reconozco el rol de la historia en la cual el protagonismo luce
una especie de “enduendamiento” donde las realidades y los personajes
permanecen anónimos e invisibles y yo soy su fiel representante. Debido a esta
palabra y a que crecí en un hogar católico donde posteriormente me incluí a los 13
años en los grupos de la iglesia, guiados por los Hermanos de la Fraternidad
Carlos De Foucauld.
En medio de esas circunstancias y de vivir en un sitio donde no había luz
eléctrica y el hecho de vivir y crecer aislados como familia del resto de la
comunidad, nos criamos muy en solitario, para lo que se me hacía fácil
comprender el camino de espiritualidad y modo de vida de los Hermanos de la
Fraternidad a tal punto que llegué a conectarme bastante y a través de esa
cercanía logré escalar activamente trabajando en la Cooperativa por 7 años, al
tiempo que combinaba mi labor con el grupo juvenil y de catequistas, llevando por
varios lugares distintas acciones con títeres y teatro infantil.
En los años 90 participé en la conformación de la experiencia del
Bachillerato campesino, vinculación con Fe y Alegría, conformación de la
Biblioteca Campesina “Semillas el Saber” y posteriormente en la captación para
la profesionalización a través del Centro de Experimentación Para el Aprendizaje
Permanente de la Universidad Nacional Simón Rodríguez donde egresé como
licenciada en educación con énfasis en participación comunitaria y desarrollo
cultural.
En aquellos tiempos, con el ímpetu de la juventud no me daba cuenta cuan
mal le caería a la gente, ya que me obsesioné por leer y parecía que me comía al
mundo: quería corregir todo lo que decían o hacían, quería limpiar el último rincón
y ordenar todas las cosas. En mi mundo era inexplicable que las cosas no llevaran
una estructura. Entonces era muy exigente y detallista.
Después de 2012 siento que tuve un paréntesis extraño en la vida donde
abandoné el hábito de lectura y el mundo cultural. Me entregué a la familia y a la
escuela en un campo muy lejano en la zona cafetalera del municipio.

EN EDUCACIÓN FORMAL 1995-

Con esos excesos “inusuales” o extraños que me permití como estar al


100% en lo que me gustaba: trabajar, participar, impulsar… entré al mundo de la
educación formal y lo primero que obtuve fueron decepciones, estuve en la crisis
de las huelgas educativas del año 1994 y 95. Mis hijas no tenían docentes y así
fue como me incluí de voluntaria siendo humillada, traicionada, vilipendiada.
Abandoné en Monte Carmelo y me fui a trabajar por 9 años en un Colegio Privado
en donde entregué los mejores años de mi vida hasta el año 2005, siempre del
lado de los invisibles…

No quise irme cuando hubo el gran boom de las Escuelas Bolivarianas


lanzadas desde 1999 con la finalidad de avanzar y brindar otras opciones en las
instituciones educativas. Luego la prosecución hacia la secundaria donde también
me buscaron para coordinar y lo rechacé debido a que me gustaba muchísimo el
trabajo en el colegio en donde estuve.
Para 2005 sí me retiré del Colegio (AVEC) y me fui a la Zona Cafetalera del
municipio a trabajar por 10 años. Entre 2006 y 2013 trabajé bastante con los
Consejos Comunales en todo el municipio, aporté mi experiencia y consolidación
en misión Ribas y Misión Sucre, apoyando además la conformación del Consejo
Federal de Gobierno.
Durante ese tiempo sufrí un trastorno temporario de carácter neurológico
calificado en FEDER como de tipo u origen desconocido que ya se venía
manifestando, pero nunca lo atendí, hasta que me ocupé de resolver en 2012
siendo mi segunda oportunidad de vivir. Esta condición según uno de los
especialistas que evaluó el caso se dio por estrés y distrés excesivo y conllevó a
saturar unas arterias del tallo craneal que rozaban al nervio facial ocasionando
torcedura de la hemicara y movimientos involuntarios. La cirugía consistió en la
descomprensión de ese nervio sellando con una venda ese circuito para evitar esa
manifestación.

Después de pasar todo este proceso y pese a que estaba activa en muchas
cosas, apoyando a mucha gente, a las misiones, consejos Comunales, escuelas…
pues en este asunto únicamente estuvieron mis familiares más cercanos. Los
problemas laborales eran interminables y seguía siendo acosada “inusual y
extraordinariamente” porque según el director todos los comentarios hacia mi
función eran muy exaltados y esto iba en detrimento de él y del resto de docentes
que por sus continuas ausencias y carencias se sentían aludidos.

Cosa inexplicable para mí, pues no me molestaba en absoluto que ellos


“echaran el carro” en todos los aspectos, y me internalicé en que yo rendía cuenta
de mi actuación y de mi vida, no de la vida ni actuación del resto. Seguía siendo
estrictamente planificada y ordenada y vivía en mi mundo. Hasta que me salió el
traslado a la comunidad donde inicié mi función docente y es mi lugar de origen
donde para ese entonces vivían mis padres. En este tiempo hice mi
especialización y maestría como prueba ante mi propia persona para evaluar mis
capacidades, ya que yo misma sigo sin entender por qué permití que el abuso y
las injusticias formaran parte de mi historia. Para esta fecha realicé mi segunda
autobiografía. La primera fue en el pregrado del CEPAP en los 90’ y la segunda
para la Universidad Valle de Momboy en 2013.

En 2014 y 2015 quedé fuera del ministerio y es una época de mi vida en


donde no sé por dónde me pasó toda la formación y el activismo que había vivido.
Permití todos los abusos que puede tolerar una mujer. Resulta que el mismo
director que cuestionaba y obligaba a hacer cosas indebidas y que quería levantar
expedientes por trabajar y no pasaba de amenazar y descontar el bono bolivariano
llegó a ser el “jefe” de la dirección municipal de educación y estando yo en aquella
escuelita donde me inicié en un ambiente hostil y hasta aterrador, tras año y
medio de hostigamiento decidí hablar con él mi caso, resultando que él y mi actual
director hicieron de las suyas y escalaron una posición más en la violencia
continuada que llevaban. Allí fue donde perdí mi sueldo, quedé fuera del ministerio
y me costó recuperar mi carpeta con documentación en original.

En 2016 recuperé mi estatus ante el Ministerio de Educación y trabajé hasta


2018 en la Escuela de Bojó como maestra de cultura donde encuentro de nuevo
mi brújula, comparto de nuevo con la cooperativa de mujeres, hago contacto con
el padre Mario, con amistades de mi época y con la biblioteca de la comunidad.
Otra etapa en la cual mi familia me costeaba todos mis gastos.
Ahí me sale la propuesta de apoyar la conformación del Consejo Local de
Planificación Pública debido al trabajo que venía haciendo en la sistematización de
la Semilla Campesina y otros eventos y me salí en comisión de servicio para
activar la estructuración, sistematización y registro del CLPP.
En el seno de estos debates surgió la necesidad de apoyar a la Biblioteca
Pública de Sanare como institución de gran importancia en el territorio, tras un
recurso presupuestario que venía desde el gobierno central, también se debatió el
fortalecimiento institucional que era muy necesario. Allí salió la propuesta de que
mi persona pasara a realizar esa función de apoyo para levantar a esa institución.
Labor que cumplí sin descanso desde esa fecha, enero 2018 hasta diciembre de
2022.
Estando en la coordinación general del espacio se logró cambiar el nombre
de Andrés Bello a Biblioteca Maestro Renato Agagliate por ser este ilustre
personaje quien dedicó más de 30 años ininterrumpidos como director encargado
y desplegando allí su labor filosófica, ambientalista, literaria, musical, investigativa
y apoyando a personajes e instituciones de la localidad y del país entero, llegando
a ser la única Biblioteca de la red en ser premiada por la UNESCO.
Luego de esta experiencia actualmente estoy activa en el diplomado sobre la Vida
y Obra de Simón Bolívar y en el PNFA de la Unearte.

HABER SIDO HONESTA, DECIDIDA Y SINCERA TIENE SU PRECIO

No supe cómo ni cuando la pirámide de los valores se averió y persiguen a


quien es honesto, a quien trabaja, a quien se lleva bien con los demás y no tiene
una pizca de malas intenciones. El saber que soy muy exigente y que jamás me
presté para cosas dudosas, ha sido uno de los elementos por los cuales no soy de
confianza de ningún politiquero ni enchufado de ninguna parte. Nunca me presté
para hacerle daño a nadie, a pesar de que por mi obsesión de querer que el
mundo funcionara perfectamente pudiera haber elevado la voz ante tanta
desfachatez, pero me incliné y me enfoque como “aquel colibrí” en hacer mi parte.
Esas turbulencias de las cuales sólo quedó la lección y en momentos un aire de
arrepentimiento por la falta de temple para frenarlas a tiempo.

Con el padre Mario Grippo; un hombre sin igual multilingüe, filósofo,


teólogo, literato quien huyendo de la II Guerra Mundial se vino de Italia a
refugiarse trabajando específicamente en el huero orgánico, en la formación de
personas del campo, en la medicina natural y homeopatía, a formar sin descanso
en la Cooperativa. A esa generación que él atendió desde 1970 hasta 2018 solo
les entregó la convicción de que el elemento formativo junto al trabajo liberador
serán las principales herramientas para un mundo justo y solidario produciendo lo
necesario para vivir.

Mi influyente número dos Renato Agagliate; esplendoroso caballero


humilde, sano, historiador, escritor, fotógrafo… de muchas profesiones entre ellas
la de “maestro” hablaba 5 idiomas oficiales y más de 8 lenguas originarias. Llego a
Sanare en 1976 y formaba al pueblo a través de los cuentos montados en lindas
diapositivas plegables y con su maletín y su carro andaba por varios caseríos... lo
conocí en eso y me impresionaba muchísimo; escuché por primera vez la postura
crítica ante el patriarcado, donde me enseñaron a expresarme y a fijar una postura
frente a la vida, así como a consolidar esos valores. El y el Padre Mario coincidían
en casi todo: La medicina natural, la Liberación de la mujer, la Ecología humana,
mental, natural, social, el trabajo de la tierra, en fin…
Gaudy María García mi maestra en el trabajo social, quien me agarró muy
muchachita para trabajar con ella como asistente de contabilidad por 7 años.
Luego fundamos la Cooperativa Moncar (para elaboración de productos para el
consumo humano a base de frutas y hortalizas) de donde me retiré por asuntos
laborales; estudiamos juntas en el CEPAP de la Universidad Simón Rodríguez,
con ella y con los personajes antes mencionados escuché por primera vez la
propuesta de un reservorio y divulgación de la importancia de la semilla autóctona.
Gaudy sensible con el tema no solo porque venía de más de 30 años de trabajo
en Las Lajitas; sino que el trabajo de MONCAR también la vinculaba directamente
con la semilla; por el uso de la dulcería, salsas, mermeladas, encurtidos y que se
topaba con clientes que querían mermeladas de especies que ya estaban extintas.
Bueno luego Gaudy se asumió maestra oficialmente del Ministerio de
educación, fundando y liderando e Liceo de Monte Carmelo, siguiendo su trabajo
en Moncar, y activada en el evento de la semilla, aportando ideas, atendiendo
entrevistas, organizando. La gran experiencia de Gaudy la hizo merecedora de
giras internacionales desde donde trajo semillas e inició con sus estudiantes y
compañeras de Moncar a promover el dia de la semilla y otras acciones
vinculantes y vinculadas a ésta.
Siguen marcando mi vida, esta gente de Sanare que son inspiradores como
Los Morochos Escalona, Ana Rosa Goyo, Rebeca Riera, Wilmer (Orquesta Típica)
y muchos más.

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