Live ¿Cómo detectar y actuar desde casa ante el bullying?

¿Cuál es el objetivo del Live?

Como profesionales de salud mental nos hemos preocupado por los casos de suicidio infantil
que han sido el resultado del bullying que reciben niños y adolescentes a nivel mundial,
además, que en la consulta privada hemos visto como este acoso afecta al desempeño y
desenvolvimiento de los involucrados. Por lo cual, consideramos que es de gran importancia
hablar sobre este tema y como puede abordarse desde casa
Contenido
- Concepto de Bullying
El bullying es toda forma de maltrato físico, verbal o psicológico que se produce entre
los niños y adolescentes de forma reiterada y a lo largo del tiempo.
Podríamos decir que son situaciones, acciones y conductas en las que uno o más
alumnos insultan, difaman, amenazan, chantajean, difunden rumores, pegan, roban,
rompen cosas, ignoran o aíslan de manera intencionada, sistematizada y prolongada
en el tiempo a un compañero.
- ¿Por qué surge el bullying?
o Muchos de los niños que son acosados son excluidos por sus compañeros por
una variedad de motivos. Entre los factores de riesgo se incluyen la carencia de
amigos - amigos de confianza, concretamente- y la soledad. Los niños que
pertenecen a grupos concretos, como minorías étnicas, y aquellos que sufren
alguna discapacidad suelen ser especialmente vulnerables al acoso. La
orientación sexual de los adolescentes también puede convertirles en objetivo.
- ¿Cómo detectarlo?
o ¿Cómo detecto si un niño o adolescente está siendo acosado?

 Hay diversos síntomas que pueden alertar sobre si un niño o

adolescente padece una situación de bullying. En la mayoría de los
casos el niño/adolescente se aísla o no se relaciona como antes,
además, puede comenzar a manifestar enfermedades psicosomáticas
como dolor de barriga o de cabeza y diversas excusas para no asistir al
colegio, cambia su carácter, se puede mostrar irritable cuando se le
llama la atención.
Otro de los síntomas puede ser que al volver del colegio algún material
como sus cuadernos, mochilas o dispositivos electrónicos se
encuentran rotos o se han perdido, también pueden regresar con
golpes en alguna parte del cuerpo.
Al intentar conversar o compartir con ellos en ocasiones se muestran
con una mirada huidiza, su postura puede mostrar cambios o cambia
sus hábitos de ropa para cubrirse, debemos sospechar que algo le
pasa. Puede que no sea acoso, pero debemos estar atentos a lo que
sucede.
o ¿Qué hacer si me doy cuenta que mi hijo sufre de bullying pero no me lo ha
dicho?
  Establecer una dinámica de comunicación y confianza diaria
 Si se sospecha que ocurre algo, se sugiere comenzar hablando del día
a día, y a partir de esa conversación general hacer preguntas como
“¿Qué tal te va con tu amigo XX?”
 Si se sienten preocupados, es importante verbalizar la preocupación
desde la tranquilidad y la calma, sin adornarla, abordar al
niño/adolescente diciendo: “Me preocupa que pueda estar pasándote
algo, te veo preocupado, con la cabeza en otra parte, ¿hay alguien que
te está molestando en clase?”
 Transmitir al niño/adolescente tranquilidad, calma y manejo de la
situación.
 Hablar con el niño/adolescente sobre cómo resolver sus problemas,
puede darse algún ejemplo de las dificultades que se nos han
presentado y cómo hemos podido resolverlas. Desde ahí les estamos
demostrando que todos tenemos problemas y que necesitamos contar
con otro para buscar soluciones.
 Indagar sobre qué cosas le dan vergüenza al niño/adolescente
 Transmitir la idea de transitoriedad, porque el niño/adolescente que
está ante una situación de acoso siente que jamás va a terminar y no
puede salir de ella. Por lo cual, les transmite calma decirles que los
sentimientos que tiene en este momento (miedo, sentirse pequeño
etc.) son pasajeros y que recibirá apoyo, compañía y ayuda para
superar esta situación.
- ¿Cómo actuar?
o Mi hijo me ha contado que sufre de bullying ¿Qué hago?

 La primera medida después de escuchar al niño/adolescente es poner

el caso en conocimiento en el colegio con el tutor y equipo directivo. El
protocolo del centro escolar variará según las políticas de cada uno,
pero se debe tener en cuenta que no es recomendable nunca resolver
el problema por cuenta propia, ya sea llamando a otros padres o
compartiéndolo a través de un grupo de WhatsApp, porque, en caso
de haber delito se pueden destruir pruebas.
Mientras se realiza el debido procedimiento con el colegio, en casa se
sugiere:
- Crear y mantener un clima de comunicación y confianza.
- Se debe reconocer la situación dando refuerzo y apoyo al
niño/adolescente
- Evaluar si el niño/adolescente necesita asistencia psicológica.
- Se recomienda mantener una actitud conciliadora y de
colaboración con el colegio, al mismo tiempo que se pide la
participación activa para parar la situación de acoso,
 esperando un tiempo razonable para que puedan actuar y
tomar medidas
o ¿Qué se le puede aconsejar al niño o adolescente?

 Nadie tiene derecho a pegarte, humillarte o insultarte.

 La violencia nunca está justificada. Si lo sabemos es más fácil no
tolerarlo.
 ¡Fuera la culpa!, lo que le pasa “no es por su culpa”.
 Necesita ayuda el niño/adolescente sólo no puede, así que se
recomienda que muestre sus sentimientos a otras personas como sus
padres, hermanos o un profesor, que se sienta en confianza de
contarles lo que le está sucediendo porque las emociones deben
verbalizarse y no sufrir en silencio.
- ¿Qué no se debe hacer si un niño o adolescente sufre bullying?
o Sobreproteger: La sobreprotección no es buena, porque el niño/adolescente
ya se encuentra bastante avergonzado y con la autoestima baja por no haber
podido manejar la situación, por lo cual, la sobreprotección aumentaría esa
sensación.
o Sobrerraccionar: Pensar enseguida en la denuncia, el cambio de centro, o ir al
colegio con una actitud desafiante, exigente y cuestionadora del quehacer de
los profesores hace que el niño/adolescente se avergüence más y se encierre
más en sí mismo y no se sienta seguro de contar lo que le sucede.
o No contar con el niño/adolescente como parte del proceso: se puede informar
sobre los pasos que se van a seguir para que opine sobre cada uno de ellos y
así cumpla un papel activo en la resolución de la situación que está viviendo.
Se debe respetar su decisión en caso no quiera que se proceda de cierta
manera, de presentarse esta situación se puede preguntar por qué rechaza esa
acción e investigar cuáles son los motivos
- ¿Cuáles son las consecuencias para los niños que sufren bullying?
o Las consecuencias del bullying hacen que la víctima pueda presentar
sentimientos de indefensión, sumisión e inferioridad.
o Los estudios reflejan un abanico de consecuencias negativas a largo plazo
tanto para las víctimas como para los acosadores. En los niños el acoso
produce una serie de consecuencias negativas como depresión, ansiedad,
pensamientos suicidas, descontento con la vida, desórdenes alimentarios,
dificultad para relacionarse, sufrir soledad y estar aislado socialmente.
Además, los estudiantes acosados son más proclives a tener dificultades
académicas, entre las que se incluyen el bajo rendimiento escolar o la falta de
atención y de asistencia, entre otros.
Los efectos sociales, emocionales y psicológicos producidos por consecuencia
del acoso pueden ser graves y durar desde la infancia hasta la edad adulta. Por
otra parte, numerosos estudios también han encontrado una importante
relación entre acosar a otros y mostrar síntomas depresivos y tendencias
 suicidas. El bullying también se ha relacionado con futuros comportamientos
de delincuencia juvenil, como robos y atracos, actos de vandalismo, piromanía,
ataques físicos, crimen organizado y tráfico de drogas. Los niños que perpetran
el acoso también tienen mayores probabilidades de adquirir hábitos de riesgo
como beber, pelearse, herirse en peleas y llevar armas.
- ¿Es necesario buscar ayuda psicológica?
o La ayuda psicológica puede ser necesaria en muchos casos, tanto en relación
con las víctimas, como con los acosadores. Unos y otros pueden necesitar la
ayuda psicológica que permita reorientar su manera de ver y estar en el
contexto en que se ubican.
La persona que sufre, que siente el dolor por la agresión perpetrada contra él,
puede necesitar ayuda psicológica inmediatamente. Siempre va a depender de
sus recursos personales, de su capacidad para afrontar este tipo de
circunstancias, de su edad, de las características del acoso que sufre, de su
intensidad y frecuencia. También dependerá de la existencia de alguna red de
apoyo social en la que pueda sentirse cómodo, del apoyo familiar y de la
rapidez con que se tomen medidas al respecto. Pero esta ayuda debe ir
siempre acompañada de una actuación eficiente del centro educativo y del
compromiso de todos por acabar el acoso y, por tanto, con el sufrimiento. La
ayuda psicológica sin un abordaje serio del problema en el centro educativo
puede no tener los resultados esperados. Y hemos de insistir que también
muchos acosadores podrían necesitar ayuda psicológica que le permita
enfocar las relaciones interpersonales desde otra perspectiva. Más empática y
basada en el respeto