Ensayo Final Catequetica
Ensayo Final Catequetica
Ensayo Final Catequetica
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Catequesis y evangelización, Celestino Barradas, Ed. Voz y Vida, 2000, pp. 56
persona, no la pedagogía que nosotros como personas queremos utilizar de
Dios.
En este sentido los evangelios, son una muestra de lo variada que puede
ser la pedagogía de Dios, sin olvidar que el fin es el mismo, que todos los
hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad. Cada evangelio
nos muestra una forma de proceder distinta de parte de Jesús, sin embargo
el fin es el mismo en los cuatro Evangelios.
3. Un tercer problema en la pedagogía de la fe, es que pensamos que sólo
debemos enseñar contenidos de fe, cuando el proceso de la pedagogía es
un acompañamiento a quien esta aprendiendo. Por lo que la pedagogía no
sólo se centra en un dar contenido y como darlo, sino en un dar razón de lo
que se cree y se ora. El catequista esta invitado a realizar su pedagogía de
catequesis con toda su integridad teórica y práctica.
Hay mas problemas en relación a la pedagogía de la fe, pero considero que estos
son los tres que mas nos están trayendo conflictos en la parroquia donde
desarrollo mi servicio de catequesis. Al mismo tiempo, considero que la solución a
estos problemas es la realización de talleres de formación humana, espiritual y
pedagógico en la parroquia, para todos los que son agentes de pastoral y
catequistas.
Las metodologías de la catequesis
Para llevar a cabo el proceso catequético es necesaria la utilización de métodos y
la realización de actividades. Estos medios dinamizan el proceso y reflejan un
estilo de hacer catequesis. Se exigen métodos activos que permitan conseguir los
objetivos y se necesitan actividades que dinamicen el aprendizaje.
El método es, en el amplio campo de la pedagogía, el camino que permite llegar a
algo propuesto de antemano, es el procedimiento que utilizamos con el fin de
influir en determinados procesos de aprendizaje. Desde este punto de vista,
ningún método utilizado en la catequesis tiene valor absoluto en sí mismo, siempre
está en función de los objetivos que se quieren conseguir. Por eso el método se
valora como un instrumento que posibilita el aprendizaje, nunca como un fin en sí
mismo.