Biolixiviación de Níquel A Partir de Un Saprolito Garnierítico Usando Dos Cepas de
Biolixiviación de Níquel A Partir de Un Saprolito Garnierítico Usando Dos Cepas de
Biolixiviación de Níquel A Partir de Un Saprolito Garnierítico Usando Dos Cepas de
Trabajo de investigación presentado como requisito parcial para optar al título de:
Magíster en Ciencias – Biotecnología
Director:
Ph.D. Marco Antonio Márquez Godoy
Línea de Investigación:
Biomineralogía y biohidrometalurgia
Grupo de Investigación:
Minería Aplicada y Bioprocesos
Resumen
Este estudio evaluó independientemente dos cepas comerciales de Acidithiobacillus
thiooxidans, en la biolixiviación de níquel de una muestra de laterita de alto grado tipo
saprolito, proveniente de la mina Cerro Matoso en Montelíbano, Colombia. La muestra se
caracterizó utilizando métodos espectroscópicos como FRX, DRX, FTIR y SEM-EDS. Se
determinó que la principal fase mineral que la compone es cuarzo, acompañado de
filosilicatos del grupo de la serpentina y en menor medida inosilicatos anfíboles. Su
composición reveló una alta concentración de óxido de níquel de 14.7%. Inicialmente, se
realizó una adaptación de las cepas utilizando concentraciones progresivas del mineral, desde
2% hasta 16% de pulpa (p/v). La mayor solubilización de níquel fue de 39.2% en un período
de 12 días con 2% de pulpa mineral y estos valores se redujeron al aumentar la concentración
de sólidos. Durante este proceso se observó la formación de precipitados con diferentes
concentraciones de níquel y otros iones, producto de bajas concentraciones de ácido en el
medio. Posteriormente, se evaluaron distintas variables con el fin de incrementar la
extracción de níquel del mineral. Se realizaron ensayos con diferentes pH de inicio en el
medio, se incrementó el tiempo de residencia del mineral y se probaron diferentes
concentraciones de azufre elemental de 2, 3, 4 y 6%. No se encontraron diferencias
significativas en el níquel extraído con pH de inicio 2, 1.7 y 1.4, pero sí entre éstos y el pH
inicial de 2.8 usado en la fase de adaptación. Al incrementar el tiempo de residencia del
mineral a 30 días, las bacterias pueden reducir el pH a valores que aceleran la solubilización
de níquel, la cual fue del 54%. Adicionalmente, se encontró que el aumento en los porcentajes
de azufre elemental, tiene efectos significativos sobre la velocidad de producción de ácido
sulfúrico, permitiendo extraer hasta el 91% del níquel. Mediante los diversos ensayos
realizados, se determinó que la muestra presentaba un comportamiento más refractario. La
cinética de solubilización del níquel, no corresponde con la que se reporta para las lateritas
tipo saprolito y se asemeja más a la cinética de la limonita.
V Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Por otro lado, este estudio generó una alta resistencia al níquel en ambas cepas de A.
thiooxidans, el cual alcanzó concentraciones de 14.2 g/L en solución. Finalmente, los
espectros FTIR realizados durante los diferentes ensayos, mostraron reducción en la
intensidad de bandas asociadas a componentes octaédricos y tetraédricos con re-precipitación
de sílice amorfo. La alta lixiviación de níquel lograda en este estudio, la adaptación de las
cepas a fuertes condiciones de estrés y el bajo gasto en reactivos y energía, constituyen una
potencial biotecnología aplicable al procesamiento de este tipo de minerales así como al de
otros materiales.
Abstract
This study evaluated independently two commercial strains of Acidithiobacillus thiooxidans,
in the nickel bioleaching of a high grade laterite saprolite type sample, from the Cerro Matoso
mine in Montelíbano, Colombia. The sample was characterized using spectroscopic methods
such as XRF, XRD, FTIR and SEM-EDS. It was determined that the main mineral phase in
the sample was quartz, accompanied by phyllosilicates from the serpentine group and to a
lesser extent inosilicates from the amphibole group. Its composition revealed a high nickel
oxide concentration of 14.7%. Initially, the adaptation of the strains was carried out using
progressive concentrations of the ore, from 2% to 16% pulp density (w/v). The highest nickel
solubilization was 39.2% in a period of 12 days with 2% ore pulp and these values were
reduced by increasing the solids concentration. During the process the formation of
precipitates with different concentrations of nickel and other ions was observed, this was a
consequence of low acid concentrations in the medium. Subsequently, different variables
were evaluated in order to increase the extraction of nickel from the ore. Experiments were
performed with distinct initial pH in the medium, the residence time of the ore was increased
and various elemental sulfur concentrations of 2, 3, 4 and 6% were tested. No significant
differences were found in nickel leached with initial pH of 2, 1.7 and 1.4, but between these
and the initial pH of 2.8 used in the adaptation phase. By increasing the residence time of the
mineral to 30 days, the bacteria can reduce the pH to values that accelerate nickel dissolution,
which was 54%. Additionally, it was found that the increase in elemental sulfur percentages
has significant effects on the production speed of sulfuric acid, allowing extracting up to 91%
of nickel from the ore. Through the tests carried out, it was determined that the sample
exhibited a more refractory behavior. The leaching kinetics of nickel does not correspond to
that reported for saprolite and resembles more to limonite leaching kinetics. On the other
hand, this study allowed creating a high nickel resistance in both A. thiooxidans strains,
reaching concentrations of 14.2 g/L Ni2+ in solution. Finally, FTIR spectra executed during
VII Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
the experiments, showed a reduction in the intensity of bands associated with octahedral and
tetrahedral components with re-precipitation of amorphous silica. The high nickel leaching
achieved in this study, the adaptation of the strains to strong stress conditions and the low
expenditure in reagents and energy, constitute a potential biotechnology applicable to the
processing of this type of ores as well as other materials.
Contenido
Pág.
Resumen ........................................................................................................................... IV
Abstract ............................................................................................................................ VI
Lista de figuras .................................................................................................................. X
Lista de tablas ................................................................................................................. XII
Introducción ....................................................................................................................... 1
1. Marco teórico .................................................................................................................4
1.1 Características del níquel y formación de depósitos ...................................................4
1.2 Formación y mineralogía de la laterita de Cerro Matoso ...........................................7
1.3 Producción y demanda de níquel ...............................................................................8
1.4 Procesos empleados en la extracción de níquel .........................................................9
1.5 Biolixiviación de minerales y microorganismos involucrados en el proceso ..........11
1.6 Mecanismos de oxidación bacteriana de sulfuros ....................................................13
1.6.1 Ruta del tiosulfato ..............................................................................................15
1.6.2 Ruta del polisulfuro ...........................................................................................16
1.7 Mecanismos de lixiviación en minerales lateríticos ..................................................17
1.7.1 Goethita ..............................................................................................................17
1.7.2 Esmectitas ...........................................................................................................17
1.7.3 Minerales del grupo de la serpentina ..................................................................18
1.8 Biolixiviación de níquel ...........................................................................................18
1.9 Resistencia a níquel y otros metales en microorganismos acidófilos ......................23
Lista de figuras
Pág.
Figura 1-1: Rango de perfiles lateríticos en climas secos y húmedos ................................ 6
Figura 1-2: Extracción de níquel y ferroníquel a partir de lateritas y sulfuros ..................10
Figura 1-3: Diagrama ilustrando los mecanismos de oxidación bacteriana de sulfuros .. 14
Figura 1-4: Comparación esquemática entre la ruta del Tiosulfato y del
Polisulfuro en la biolixiviación de sulfuros metálicos (MS) ............................................. 15
Figura 2-1: Imágenes de fragmentos de las muestras de mineral ...................................... 26
Figura 2-2: Ubicación de Cerro Matoso, departamento de Córdoba, Colombia .............. 27
Figura 3-1: Imágenes de algunos de los grupos de granos separados
macroscópicamente en la muestra .................................................................................... 38
Figura 3-2: Espectro DRX de la muestra general molida y de granos separados
macroscópicamente ............................................................................................................ 39
Figura 3-3: Espectros infrarrojo de la muestra general molida y de granos separados
macroscópicamente ............................................................................................................ 41
Figura 3-4: Imágenes de SEM con SE y BSE de la muestra mineral ............................... 47
Figura 3-5: Análisis elemental (SEM-EDS) de algunos de los granos del mineral
separados macroscópicamente ........................................................................................... 48
Figura 3-6: Evolución de los diferentes parámetros fisicoquímicos y biológicos
durante la adaptación a diferentes porcentajes de pulpa mineral ....................................... 50
Figura 3-7: Espectro FTIR del precipitado producido durante el proceso ....................... 58
Figura 3-8: Análisis elemental (SEM-EDS) de partículas del
precipitado producido en el proceso .................................................................................. 59
Figura 3-9: Espectros FTIR de los ensayos con 2% de pulpa .......................................... 62
Figura 3-10: Espectros FTIR de los ensayos con 16% de pulpa ...................................... 62
Figura 4-1: Espectro de DRX de la segunda muestra de saprolito ....................................73
Figura 4-2: Espectro infrarrojo de la segunda muestra de saprolito ................................. 74
Figura 4-3: Evolución de los diferentes parámetros fisicoquímicos y biológicos para
los experimentos con 16% (p/v) de pulpa mineral y pH de inicio de 2, 1.7 y 1.4. ............ 76
Figura 4-4: Evolución de los diferentes parámetros fisicoquímicos y biológicos
para los experimentos con pH inicial 1.4 durante el período extendido a 30 días ............. 82
Figura 4-5: Porcentaje de níquel y hierro disueltos en los ensayos usando
H2SO4 sin microorganismos con pH 1.4 y 0.5. .................................................................. 87
Figura 4-6: Comparativo de los sulfatos producidos en los ensayos biológicos con pH
inicial 1.4 y agregados como H2SO4 en el ensayo sin microorganismos. ...........................88
XI Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Lista de tablas
Pág.
Tabla 1-1: Producción mundial de níquel y reservas ........................................................... 8
Tabla 3-1: Composición química de la muestra ................................................................37
Tabla 3-2: Grupos de bandas obtenidos mediante FTIR .................................................. 44
Tabla 3-3: Minerales presentes en la muestra de saprolito ................................................ 47
Tabla 3-4: Porcentaje de hierro solubilizado con diferentes porcentajes de pulpa
mineral ................................................................................................................................ 53
Tabla 3-5: Porcentaje final de níquel solubilizado con diferentes porcentajes de pulpa
mineral ..................................................................................................................55
Tabla 3-6: Frecuencias de las bandas del espectro infrarrojo del precipitado y posibles
asignaciones ....................................................................................................................... 58
Tabla 4-1: Composición química de la segunda muestra de saprolito garnierítico .......... 72
Tabla 4-2: Bandas obtenidas mediante FTIR para la segunda muestra de saprolito,
minerales a las que se asocian y asignaciones............................................................. 75
Tabla 4-3: Porcentaje de hierro solubilizado en ensayos con diferentes pH de inicio ..... 79
Tabla 4-4: Porcentaje de níquel solubilizado en ensayos con diferentes pH de inicio ...... 80
Tabla 4-5: Porcentaje de níquel solubilizado en los ensayos con tiempo de residencia de
30 días ................................................................................................................................. 85
Introducción
Las lateritas de níquel representan las mayores reservas presentes en la litósfera de este metal
básico. Estas contienen cerca del 72% del níquel y cobalto disponible mundialmente, no
obstante, aproximadamente el 40% de la producción actual es derivada de lateritas como
saprolito y limonita (Dalvi et al., 2004). A diferencia de los sulfuros, el níquel y cobalto en
las lateritas no se encuentran como minerales discretos, sino como cationes sustituidos
dentro de oxihidróxidos de magnesio y hierro como la goethita, óxidos de manganeso o
arcillas, formando parte de las estructuras de estos minerales hospederos (Liu et al., 2009).
En el caso de la limonita, los minerales hospederos son principalmente oxihidróxidos de
hierro férrico, típicamente goethita. La demanda de níquel ha sido cubierta principalmente
mediante la extracción a partir de sulfuros, los cuales son fácilmente procesables. Sin
embargo, el continuo agotamiento de este recurso, ha intensificado el desarrollo de procesos
para extraer el níquel a partir de lateritas (Dalvi et al., 2004).
Existe una alta diversidad en la composición de las lateritas, lo cual ocurre incluso en un
mismo depósito. Por esta razón, se presentan grandes diferencias en la reactividad de los
minerales que las componen y consecuentemente en sus tasas de lixiviación (Hunter et al.,
2013; Liu et al., 2009). Varios estudios han investigado la cinética de lixiviación de estos
minerales y abordan diversos mecanismos con el fin de mejorar este proceso (Crundwell,
2014; Hellman et al., 2012; Rubisov et al., 2000; MacCarthy et al., 2015; McDonald y
Whittington, 2008; Simate et al., 2009; Zakaznova-Herzog et al., 2008). Las tecnologías
convencionales utilizadas para el procesamiento de lateritas, como la lixiviación ácida a
presión son de difícil manejo, generan altos gastos energéticos y en reactivos, convirtiéndose
en una fuente importante de contaminación ambiental.
Introducción 2
Este tipo de procesos presenta diferentes ventajas como la reducción en costos y un menor
impacto ambiental, respecto a las prácticas convencionales. Debido a que la minería es un
importante sector económico en Colombia, es necesario comenzar a incorporar estas
biotecnologías que ya son comúnmente usadas en diferentes partes del mundo. Cerro Matoso
constituye una de las minas más importantes de níquel laterítico en Suramérica y los altos
volúmenes de residuos producidos por ésta, requieren alternativas de procesamiento con
mejores enfoques ambientales. De acuerdo a lo anterior, este estudio propuso investigar la
biolixiviación de níquel y mineralogía de una muestra de laterita tipo saprolito de la mina
Cerro Matoso, utilizando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans.
Una de las limitaciones en la lixiviación del saprolito, es al alto consumo que genera de
ácido sulfúrico, debido a su alto contenido de magnesio (Rubisov et al., 2000; Whittington
et al., 2003b). Por otro lado, el níquel es un elemento tóxico, que bajo ciertas concentraciones
puede inhibir la actividad metabólica y crecimiento en A. thiooxidans (Maeda et al., 1996;
Nogami et al., 1997). Por esta razón, se realizó una adaptación de las dos cepas de A.
thiooxidans hasta una concentración de 16% de mineral (p/v) (15.5 g/L de Ni).
Posteriormente, el objetivo consistió en evaluar diferentes variables que afectan la
solubilización de níquel, determinando el efecto de diferentes pH, porcentajes de azufre
elemental agregados como fuente energética y tiempo del proceso de biolixiviación.
3 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Este estudio constituye la primera investigación realizada con este tipo de minerales en el
grupo de Minería Aplicada y Bioprocesos de la Universidad Nacional de Colombia – Sede
Medellín. Como parte de la revisión bibliográfica, en Colombia sólo se reporta un trabajo de
características similares realizado por Pedraza y Parra (1985), con una bacteria aislada (A.
ferrooxidans), en la lixiviación de un saprolito de Cerro Matoso. En esta medida, esta
investigación contribuye al conocimiento de la cinética de lixiviación de este tipo de
minerales. Permitió desarrollar en las cepas una resistencia a 14.2 g/L de níquel y una
extracción de hasta el 91% de este metal, lo que le atribuye potencial a escala comercial.
1. Marco teórico
Los depósitos niquelíferos pueden ser generados mediante diversos procesos naturales:
En primer lugar, mediante un proceso denominado licuación que ocurre por diferenciación
magmática, generando depósitos de Cu-Ni. Este se produce como una segregación, debido
a la inmiscibilidad de los componentes del magma. Así, en una mezcla de sulfúricos con
magmas silicatados, cada uno tiende a segregarse cuando ocurre saturación con azufre,
formando un líquido de sulfuros inmiscible (Schulz et al., 2010).
5 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Para que un magma sulfurado constituya un depósito económico, es preciso que se concentre
de forma abundante en zonas restringidas del sistema magmático. En el caso de intrusiones
máficas-ultramáficas estratificadas, es habitual la acumulación gravitatoria del líquido
sulfurado en la base de la cámara magmática. En el caso de sistemas más dinámicos, como
en conductos de alimentación de magmas, la acumulación de sulfuros más importante suele
darse en las zonas de entrada o zonas más anchas de los conductos, donde se ralentiza la
velocidad de flujo (Suárez, 2011).
Por último, los depósitos de níquel pueden darse como lateritas niquelíferas que son una
mezcla heterogénea de óxidos de hierro y silicatos de magnesio hidratados. Estos se forman
por la acción de un clima tropical intenso con abundantes precipitaciones, generando
meteorización de las rocas ultramáficas hospederas. Los depósitos lateríticos constan
generalmente de tres capas: zona de limonita, saprolito y zona de garnierita (Coto et al.,
2008). Las rocas ultramáficas comprenden las dunitas (esencialmente olivino monomineral),
peridotitas (olivino, piroxeno y hornblenda), piroxenitas (ortopiroxeno y clinopiroxeno),
hornblenditas (hornblenda monomineral) y serpentinitas (esencialmente serpentina
Mg3Si2O5 (OH4)) (Dalvi et al., 2004). Las rocas ultramáficas como la peridotita y
serpentinita poseen trazas de níquel, alrededor de 0,25%.
El agua que contiene ácidos orgánicos y dióxido de carbono se filtra a través del material
meteorizado. El hierro, níquel, magnesio y sílice se disuelven en esta agua. En la parte
superior del depósito, el hierro es oxidado por el aire y se precipita como óxidos de hierro
Capítulo 1 6
Cerca al lecho rocoso el magnesio y sílice se precipitan formando silicatos de magnesio del
grupo de la serpentina como Mg3Si2O5(OH)4. El níquel se precipita como nepouíta
(Ni3Si2O5(OH)4) y la mezcla de estos minerales se denomina garnierita. Otros minerales
encontrados en esta capa son: talco (Mg3Si4O10(OH)2), willemseíta (Ni,Mg)3Si4O10(OH)2,
clinocloro (Mg,Fe)5Al(Si3Al)O10(OH)8, nimita (Ni,Mg,Al)6 (Si,Al)4O10(OH)8, sepiolita
(Mg4Si6O15(OH)2 6H2O) y falcondita (Ni,Mg)4Si6O15(OH)2 6H2O. Esta capa de la laterita es
conocida como saprolito (Crundwell et al., 2011).
Puede existir otra capa de material arcilloso perteneciente al grupo de minerales denominado
esmectitas, que contienen minerales como la nontronita. Las arcillas pueden estar presentes
en las capas de limonita o saprolito o formar una capa individual (Crundwell et al., 2011)
(Figura 1-1).
Figura 1-1: Rango de perfiles lateríticos en climas secos (Australia occidental) y húmedos
(Indonesia). Contenido de Ni, Co, Mg y Fe que se puede encontrar en cada capa (Tomado
de Dalvi et al., 2004).
Los depósitos lateríticos de níquel presentan alta variabilidad incluso en la misma región.
Al oeste de Australia la zona de esmectita muestra una mineralogía muy heterogénea con
7 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
El perfil laterítico consta de una zona de canga superior, debajo de la cual se encuentra la
zona de limonita, seguida por una zona superior e inferior de saprolito. El contenido de
níquel en la peridotita parental varía de 0.28% a 0.36% y el grado de corte para materiales
en el perfil laterítico es 1.5%. Existe un tipo de mena masiva y como relleno de fractura,
siendo la primera la más importante del depósito económicamente. En ésta, los minerales de
níquel dominantes son las esmectitas y serpentinas, los cuales se encuentran
abundantemente en la zona superior del saprolito. La pimelita, nimita y sepiolita con níquel,
rellenan fracturas en la zona superior e inferior del saprolito.
de manganeso. El níquel en ambas zonas de canga y limonita, fue bastante móvil y las
condiciones alcalinas en las zonas de saprolito promovieron su deposición como garnierita.
Tabla 1-1: Producción mundial de níquel y reservas (Tomado de U.S. Geological Survey,
2016)
Producción minera (t) Reservas
2014 2015
Estados Unidos 4.300 26.500 160.000
Australia 245.000 234.000 19`000.000
Brasil 102.000 110.000 10`000.000
Canadá 235.000 240.000 2`900.000
China 100.000 102.000 3'000.000
9 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Figura 1-2: Extracción de níquel y ferroníquel a partir de lateritas y sulfuros. Las lateritas
ocurren como capas de saprolita, esmectita y limonita. Debido a su distinta composición y
mineralogía requieren diferentes métodos de extracción. El saprolito, que tiene un contenido
relativamente bajo en hierro es fundido. La limonita y esmectita que tienen alto contenido
en hierro son lixiviados y refinados (Tomado de Crundwell et al., 2011).
sulfúrico, utilizando autoclaves muy costosas, lo cual genera un alto gasto en equipos y
reactivos (McDonald y Whittington, 2008).
Figura 1-4: Comparación esquemática entre la ruta del Tiosulfato y del Polisulfuro en la
biolixiviación de sulfuros metálicos (MS). Las líneas punteadas indican la ocurrencia de
compuestos intermediarios del azufre. A. thiooxidans (Tt), A. ferrooxidans (Tf), L.
ferrooxidans (Lf) (Tomado de Schippers y Sand, 1999).
Los sulfuros metálicos solubles en ácido, pueden también ser disueltos por la actividad de
bacterias oxidantes de azufre. En la ausencia de iones de hierro férrico, estas bacterias
oxidan el sulfuro libre (H2S) producido por el ataque de protones. Esto lo realizan vía azufre
elemental a ácido sulfúrico, regenerando así, los protones consumidos previamente por la
solubilización del sulfuro metálico (Rohwerder y Sand, 2007). Schippers y Sand (1999)
establecieron las siguientes reacciones para este mecanismo:
Las células que crecen en azufre elemental también producen sustancias poliméricas
extracelulares. Sin embargo, estas tienen una composición diferente a las producidas por
células que crecen adheridas a la pirita y no poseen grupos cargados positivamente. Por esta
razón, la adherencia al azufre elemental consta básicamente de interacciones hidrofóbicas
(Gehrke et al., 1998).
espacio periplásmico. Por esta razón, estas bacterias no pueden oxidar directamente el azufre
elemental extracelular. Rohwerder y Sand (2003) proponen que en la membrana externa de
las bacterias, existe un grupo de proteínas transportadoras que contienen grupos tiol, que les
permite mover átomos de azufre hacia el espacio periplásmico. En esta medida, el azufre
octamérico reacciona formando átomos de azufre sulfano (átomos de azufre en estado de
oxidación 0 o -1) unidos a grupos tiol, los cuales son transportados al periplasma donde son
oxidados por la SDO.
1.7.1 Goethita
Se ha encontrado que las tasas de disolución de la goethita en ácido, se encuentran
relacionadas con la forma de sus cristales. Adicionalmente, existe un efecto de la sustitución
iónica del hierro en su estructura. La goethita puede ser resistente al ataque de protones
cuando hay sustitución de hierro por aluminio y cromo.
De acuerdo al área superficial, las goethitas que contienen cromo se disuelven a una tasa
muy inferior respecto a las goethitas con níquel y aluminio sin sustitución, mientras que las
que contienen cobalto y manganeso doblan la velocidad de disolución de estas últimas
(McDonald y Whittington, 2008). La solubilización de la goethita se describe con la
siguiente reacción:
extracción a partir de lateritas tienden a dominar, debido a que son la principal reserva de
níquel (Dalvi et al., 2004). En cuanto a biolixiviación de sulfuros de níquel, la mayoría de
las publicaciones corresponden a estudios con pentlandita o concentrados de pirrotita (Fe7S8)
ricos en níquel. García et al. (1997) emplearon un mineral de pentlandita (Fe,Ni)9S8 con
11% de níquel, que contenía adicionalmente pirrotita, calcopirita (CuFeS2) y cubanita
(CuFe2S3). En este estudio se utilizaron A. ferrooxidans y A. thiooxidans. Después de cuatro
semanas recuperaron el 40% de níquel con A. ferrooxidans y el 30% con A. thiooxidans.
Giaveno y Donati (2001) realizaron biolixiviaciones durante 37 días, con 0.2% de pulpa de
heazelwoodita (Ni3S2). Emplearon las cepas puras de A. ferrooxidans, A. thiooxidans y en
consorcio, obteniendo la mayor lixiviación de níquel (50%) con los cultivos mixtos. Para
los ensayos con A. thiooxidans, lograron mayores extracciones cuando agregaban hierro
férrico al medio, ya que éste incrementa el ataque químico al sulfuro. Ambas cepas
experimentaron concentraciones alrededor de 700 mg/L de Ni2+. En el estudio realizado por
Kai et al. (1995), una cepa de A. ferrooxidans fue adaptada mediante cultivos sucesivos a
una concentración de 1000 mg/L de sulfuro de níquel comercial. En este caso encontraron
que en seis días de biolixiviación, esta cepa recuperó el 40% del contenido de níquel (85
mg/L).
El estudio de Heinzle et al. (1999), muestra los resultados de una planta piloto usando el
proceso BioNIC®. Con una concentración de 17.5% (p/v), los microorganismos estuvieron
bajo concentraciones de 23.8 g/L de níquel. Obtuvieron recuperaciones mayores a 90%,
durante un tiempo de retención del mineral de 7 días. Esta tecnología ha evolucionado e
incorporado el uso de bacterias termoacidófilas y otras corporaciones como Bactech y
Mintek han estado desarrollando biotecnologías para la extracción de metales básicos a
partir de concentrados de sulfuros (Watling, 2008).
Por otro lado, los hongos requieren grandes cantidades de carbono orgánico para su
crecimiento y producción de agentes lixiviantes. Esto implica un gasto importante en
nutrientes de alto costo o su reemplazo por fuentes de carbono menos costosas, aunque esto
podría repercutir en el éxito del proceso (Alibhai et al., 1993; Burgstaller y Schinner, 1993).
Se ha encontrado también que las cinéticas de reacción en la lixiviación con hongos, son
muy lentas y por tanto no aplicables en un proceso con tanques agitados (Alibhai et al.,
1993). Adicionalmente, la pérdida de níquel puede ocurrir como resultado de una adsorción
pasiva o bioacumulación (Tzeferis, 1994).
Coto et al. (2008), usaron ácidos inorgánicos y orgánicos producidos por cultivos de A.
thiooxidans y Aspergillus niger, para analizar la extracción de níquel y cobalto a partir de
residuos de laterita del proceso CARON. Las principales fases de este mineral eran fayalita
(Fe,Mg)2SiO4, donatita (Fe,Mg)(Cr,Fe)2O4, magnetita Fe2+(Fe3+)2O4 y trevorita Ni(Fe)2O4,
con 2500 mg/L de Ni. Al agregar el mineral directamente a los cultivos de A. thiooxidans
(método a 1 paso), obtuvieron 100% solubilización de níquel y 80% de cobalto en 15 días;
Capítulo 1 22
con 2.5% de pulpa. En las concentraciones de 5% y 10% (p/v) del mineral, recuperaron
alrededor del 80% de Ni. Con A. niger la lixiviación fue 7% para níquel y 16% para cobalto,
usando 5% de pulpa mineral. Concluyen que el ácido orgánico producido por A. niger no es
un agente lixiviante tan efectivo como el ácido sulfúrico producido por A.thiooxidans, para
la extracción de metales a partir de colas de lateritas.
Mohapatra et al. (2009), estudiaron la lixiviación de níquel y cobalto a partir de una laterita
con una concentración de 0.62% de Ni, utilizando un consorcio de especies de
Acidithiobacillus. Los microorganismos fueron adaptados a concentraciones de 1000 mg/L
de Ni. Probaron 4 formas del mineral que se encontraba asociado a una matriz de goethita:
el mineral sin pretratar, tostado a 300 °C, tostado a 400 °C y 600 °C. El proceso fue realizado
en reactores de 40 L, con 10% (p/v) de pulpa. Las mayores recuperaciones de níquel
(77.23%) y cobalto (73.22%) se obtuvieron con el mineral pretratado con tostación a 600
°C, después de un periodo de 31 días. En experimentos realizados previamente en
erlenmeyers y en condiciones similares, Mohapatra et al. (2008) obtuvieron recuperaciones
de 59% de Ni (4560 mg/L) y 65.09% de Co, usando 10% (p/v) de densidad de pulpa.
Otros estudios han explorado otras rutas metabólicas para solubilizar níquel a partir de
lateritas. Hallberg et al. (2011), emplearon cuatro bacterias acidófilas con capacidad de
catalizar la reducción de hierro férrico a ferroso en la extracción de níquel a partir de una
laterita de bajo grado. En este proceso, estos microorganismos utilizan el hierro férrico como
aceptor de electrones en ausencia de oxígeno, y sulfuro de hidrógeno u otros compuestos
orgánicos como donador de electrones, dependiendo de la especie. El mineral estaba
compuesto principalmente por cuarzo y goethita así como cantidades importantes de
silicatos de magnesio. El contenido de níquel era de 0.4% asociado en su mayoría a goethita.
Seleccionaron A. ferrooxidans con base a que puede usar azufre elemental como fuente de
energía más económica. En este caso solubilizaron más del 70% de níquel presente en el
mineral en 14 días, concluyendo que la disolución reductiva es viable para bioprocesar
minerales de óxidos férricos.
23 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Un transporte activo del metal tóxico fuera de la célula, conversión enzimática, secuestro
intra o extracelular, exclusión mediante una barrera permeable y reducción en la sensibilidad
celular. La resistencia y homeostasis de la célula implica en muchos casos la combinación
de estos mecanismos. Por otra parte, autores como Trevors et al. (1985) demostraron que la
resistencia de las bacterias a metales pesados se encuentra codificada en plásmidos, aunque
en el género Acidithiobacillus parece no ser así (Valenti et al., 1990; Chisholm et al., 1998).
Nogami et al. (1997), estudiaron los efectos del sulfato de níquel sobre la azufre dioxigenasa
y sulfito oxidasa (enzimas responsables de la oxidación de compuestos inorgánicos de
azufre) de la misma cepa usada por Maeda y colaboradores. Sus resultados establecieron
que la actividad de la azufre dioxigenasa se inhibía 91% y 100% con 3 y 10 mM de sulfato
de níquel, respectivamente. En cuanto a la sulfito oxidasa, encontraron una inhibición en su
actividad de 74% y 94% a concentraciones de 1 y 10 mM de sulfato de níquel. Finalmente
demostraron que el níquel se une a la membrana plasmática de la célula, lo cual inhabilita
la actividad de ambas enzimas.
Otros estudios como el de Mirete et al. (2007), demostraron la presencia de varios genes que
confieren resistencia a níquel en microorganismos presentes en un drenaje ácido de mina.
Esto lo realizaron mediante la construcción de librerías metagenómicas, identificando 13
clones diferentes con mecanismos de resistencia a este metal, además de cobalto y cadmio.
25 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
En los ensayos realizados por Leduc et al. (1997), encontraron que la oxidación de sulfato
ferroso continuaba en varias cepas de A. ferrooxidans en concentraciones de Ni2+ de 160
mM. Este estudio concluye que las cepas tienen diferentes sensibilidades al níquel y otros
metales. No obstante, en términos generales demostraron resistencia de esta especie a altas
concentraciones de níquel y cobre.
2. Metodología general
Para los análisis FTIR, DRX y SEM-EDX, se realizó una separación mediante lupa
binocular de diferentes granos de la muestra conforme a sus colores y texturas, obteniendo
7 grupos. El objetivo de este procedimiento fue obtener una mejor definición de las fases
presentes en la muestra, debido a que la composición química y mineralógica de las lateritas
niquelíferas es compleja y la distribución de níquel y otros metales puede encontrarse en
diversas fases minerales.
Los análisis FRX fueron realizados con la colaboración del Centro de I&D Argos. Los
análisis SEM-EDX se realizaron con un microscopio electrónico de barrido marca JEOL
JSM 5910LV con espectrómetro EDX, con preparación previa de secciones pulidas
metalizadas con oro. Para los FTIR, se usó un espectrómetro Shimadzu 8400S, mediante la
técnica de transmisión y empleando pastilla con bromuro de potasio, con una relación 1:100
(mineral:KBr). El rango espectral utilizado fue de 4000 a 400 cm-1, con la función de
Capítulo 2 28
Para la difracción de rayos X se usó el difractómetro Rigaku Miniflex II, con radiación Cu
Kα y monocromador de grafito, a 30 kV y corriente de 15 mA. El barrido se realizó en 2
entre 3° y 70°, bajo el modo paso a paso de 0.02, tiempo por paso de 2 s y con la muestra
rotando sobre su eje. Los difractogramas se analizaron en el software X`pert HighScore Plus
(versión 2.2.1, Panalytical).
Para los ensayos de adaptación se usaron las mismas condiciones de la activación bacteriana.
El mineral usado en los ensayos se esterilizó previamente en autoclave. Los experimentos
de adaptación consistieron en un control (medio + mineral + azufre sin inóculo), un ensayo
y una réplica para cada cepa. Este proceso se realizó en 7 etapas, iniciando con una densidad
de pulpa de 2% (p/v), seguida por 4%, 8%, 10%, 12%, 14% y
29 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
16%. El pH inicial del medio se fijó en 2.8 con ácido sulfúrico (98%) y la duración de cada
etapa fue de 12 días.
A partir de los ensayos anteriores, se evaluó el tiempo de residencia del mineral, extendiendo
hasta 30 días la duración del tratamiento de pH que presentó los mejores resultados, de
acuerdo a los parámetros medidos.
Por otra parte, para complementar el estudio de la cinética de solubilización del níquel, se
planteó un tratamiento químico a un pH muy bajo de 0.5, el cual se mantuvo en el tiempo,
conservando las condiciones mencionadas anteriormente.
Se empleó un medidor HQ 40d multi HACH Company® con electrodos de Ag/AgCl para
el pH y Eh. El contenido de sulfatos se determinó usando el método turbidimétrico 4500
SO4 E (APHA, 1999). Para el análisis de hierro, se utilizó el método colorimétrico de la orto-
fenantrolina 3500 Fe B (APHA, 1999), empleando el espectrofotómetro Genesys 10 UV de
Thermo Scientific®. La biomasa se calculó mediante conteo celular en cámara de Neubauer
siguiendo la metodología de Zapata (2004).
Resumen
La biolixiviación es actualmente una tecnología aplicada con éxito en diferentes regiones
del mundo, a nivel industrial y existen aplicaciones en esta área para extraer metales como
oro y cobre. Más recientemente, éstas han sido extendidas a otros metales de interés como
el níquel, zinc, entre otros. Varios estudios han establecido la viabilidad de extraer níquel
mediante la lixiviación con microorganismos acidófilos. En este trabajo se estudió la
biolixiviación de níquel de un saprolito garnierítico de una laterita colombiana, usando dos
cepas de Acidithiobacillus thiooxidans. Las cepas se sometieron a un proceso de adaptación
a concentraciones progresivas del mineral, hasta 16% de pulpa (p/v). La muestra mineral se
caracterizó antes, durante y al finalizar el proceso mediante DRX, FTIR y SEM-EDS. Se
determinó que la principal fase mineral es cuarzo y una mezcla de silicatos de níquel y
magnesio del grupo de la serpentina. La mayor solubilización de níquel (39.2%), se obtuvo
usando el porcentaje más bajo de pulpa mineral (2%) y los valores se redujeron a medida
que la densidad de sólidos aumentaba. Los resultados indican un comportamiento refractario
del mineral, donde varios factores pudieron afectar la lixiviación de níquel, como su posible
precipitación en forma de sulfato. Los espectros FTIR mostraron cambios en la intensidad
de diferentes bandas durante el proceso, que sugieren lixiviación preferencial de Mg2+ que
de Ni2+ y re-precipitación de sílice. Este estudio constituye un primer acercamiento a la
biolixiviación de lateritas niquelíferas colombianas, por lo que requiere más contribuciones
que investiguen otros factores y variables que repercuten sobre este proceso.
3.1 Introducción
Las lateritas de níquel constituyen actualmente el principal recurso disponible de este metal
a nivel mundial. A pesar de esto, la producción a partir de sulfuros continúa siendo mayor,
ya que el procesamiento de las lateritas consume mucha más energía y su complejidad
mineral impone retos importantes. En general, el saprolito rico en silicatos ha sido tratado
mediante procesos pirometalúrgicos, mientras que la limonita compuesta principalmente por
goethita, es tratada por procesos hidrometalúrgicos (McDonald y Whittington, 2008).
Aunque los diferentes desarrollos en este tipo de procesamiento han vuelto viable la
explotación de estos recursos, la energía y costos requeridos continúan siendo muy altos
respecto a la usada en el procesamiento de sulfuros con una eficiencia insuficiente (Rice,
2016).
El mineral empleado fue cedido por la mina Cerro Matoso, operada por el grupo
multinacional de recursos BHP Billiton y ubicada en el municipio de Montelíbano,
departamento de Córdoba, Colombia. Este corresponde a un saprolito garnierítico, al cual
se le realizó una molienda pasante malla 200 Tyler (< 74 µm). Se realizó un análisis químico
mediante Fluorescencia de rayos X (FRX), para conocer su composición general y contenido
de níquel. Se usó microscopía electrónica de barrido (SEM) para observar la estructura del
mineral y determinar mediante espectroscopía de energía dispersiva (EDS) la composición
química de diferentes fases presentes. Adicionalmente, se usaron Espectroscopía Infrarroja
con Transformada de Fourier (FTIR) y Difracción de rayos X (DRX) para la caracterización
de la muestra.
Para los DRX se usó el difractómetro Rigaku Miniflex II que usa la radiación Cu Kα y
monocromador de grafito, a 30 kV y corriente de 15 mA. El barrido se realiza en 2 entre
3° y 70°, modo paso a paso, con un tamaño de paso de 0.02, tiempo por paso de 2 s y con la
35 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
muestra rotando sobre su eje. El análisis de los difractogramas se realizó con el software
X`pert HighScore Plus.
Durante este proceso se hicieron mediciones de pH para verificar la actividad de las cepas.
Se usó el medidor HQ 40d multi HACH Company® con electrodos de Ag/AgCl para pH y
Eh (PHC30101-MTC30101). La biomasa se calculó mediante conteo celular en una cámara
de Neubauer marca Marienfeld, de acuerdo con Zapata (2004). Los erlenmeyer se retiraron
del agitador cuando la biomasa alcanzó alrededor de 108 cel/ml y se procedió a iniciar el
proceso de adaptación de las bacterias usando diferentes porcentajes de mineral.
bajos porcentajes de pulpa producía una reducción en los valores de pH que podrían afectar
la viabilidad de las cepas.
El monitoreo del proceso en cada etapa se realizó cada tres días, tomando muestras en tubos
falcon en una cabina de seguridad biológica de flujo laminar. A partir de estas muestras, se
realizaron mediciones de pH, Eh, sulfatos en solución, biomasa y concentración de hierro
en solución. El contenido de sulfatos se determinó de acuerdo al método turbidimétrico 4500
SO4 E (APHA, 1999). Para el análisis de hierro, se utilizó el método colorimétrico de la orto-
fenantrolina 3500 Fe B (APHA, 1999), usando el espectrofotómetro Genesys 10 UV de
Thermo Scientific®. Las pérdidas por evaporación en el medio fueron compensadas con
agua destilada.
Por otra parte, se evaluó la transformación del mineral mediante FTIR comparando las
muestras obtenidas los días 0, 6 y 12 en cada etapa de adaptación. Las muestras para
determinar el contenido de níquel en solución, también se tomaron los días 0, 6 y 12 del
proceso. Este procedimiento fue realizado por el Instituto de minerales CIMEX, mediante
espectrometría de absorción atómica.
Los resultados por Fluorescencia de rayos X determinaron que el mineral contenía 14.6%
de NiO (Tabla 3-1). Además del alto contenido de níquel, la muestra también presentó altos
contenidos de sílice (65.9% SiO2), magnesio (9.6% MgO) y en menor grado hierro (2.5%
Fe2O3). Los elementos como el calcio, aluminio, azufre y sodio se observaron en baja
concentración. Estos resultados indican que la muestra está mineralógicamente constituida
principalmente por silicatos, en virtud del alto contenido de Si y los bajos contenidos de Fe.
Compuesto (%p)
SiO2 65.966
NiO 14.663
MgO 9.680
Fe2O3 2.549
TiO2 0.016
Al2O3 0.594
Mn3O4 0.009
CaO 0.740
Na2O 0.102
P2O5 0.007
SO3 0.662
V2O5 0.003
Cr2O3 0.061
SrO 0.016
BaO 0.010
escasa presencia en la muestra. Finalmente los granos P6 de color verde claro, con hábito
granular, mostraron baja dureza, siendo los más representativos y abundantes de la muestra
(Figura 3-1).
P1 P2
P3 P4
P5
P6
Figura 3-2: Espectro de DRX de la muestra general molida (P0) y de granos separados
macroscópicamente (P1, P2 y P6).
La banda en ~3647 cm-1 se subdivide en dos pequeñas bandas (no visibles en la Figura 3-
3) en 3647 y 3630 cm-1. Las bandas en 3647, 3433, 1627, 1078 y 613 cm-1 se han reportado
para la garnierita, lizardita y nepouíta (Baron y Petit, 2016; Boev et al., 2009; Gerard y
Herbillon, 1983; Ghoorah et al., 2014; Golightly y Arancibia, 1979; Liu et al., 2010; Luo et
al., 2009; Mellini et al., 2002; Post y Borer, 2000; Sufriadin et al., 2012; Yariv y Heller-
Kallai, 1975), esta última también se ha encontrado en el clinocrisotilo (Post y Borer, 2000).
Las bandas en 1163, 950, 796, 777, 690 y 461 cm-1 corresponden al cuarzo (Chukanov,
2014), aunque las bandas en 677 y 690 cm-1 se han descrito en esmectitas con alto contenido
de níquel (pimelita) y garnierita (Brindley et al., 1979; Gerard y Herbillon, 1983). La banda
débil presente en 713 cm-1 se ha reportado para la antigorita (Yariv y Heller-Kallai, 1975) y
pecoraíta (Frost et al., 2008), las restantes se han encontrado en la garnierita, nepouita o
diferentes serpentinas (Baron y Petit, 2016; Brindley et al., 1979; Frost et al., 2008; Gerard
y Herbillon, 1983; Fuchs et al., 1998; Sufriadin et al., 2012; Yariv y Heller-Kallai, 1975).
y diferentes serpentinas (Brindley et al., 1979; Frost et al., 2008; Fuchs et al., 1998; Sufriadin
et al., 2012).
Figura 3-3: Espectros infrarrojo de la muestra general molida (P0) y de granos separados
macroscópicamente (P1-P6).
Capítulo 3 42
El espectro de P4 presentó las siguientes bandas en cm-1: 3691, 3661, 3632, 3570, 3435,
1639, 1091, 1046, 993, 957, 817, 756, 682, 663, 607, 506, 464, 443. Las bandas 3691 y 957
cm-1 se relacionan con el clinocrisotilo, crisotilo y lizardita (Post y Borer, 2000; ; Yariv y
Heller-Kallai, 1975), mientras que las bandas 3435, 1639, 1091, 993 y 682 cm-1 se han
reportado para la garnierita (Sufriadin et al., 2012). Las bandas en 3661, 3632 y 3570 cm-1
corresponden a pequeños hombros no visibles en la Figura 3-3, que se han reportado para la
antigorita (Mellini et al., 2002). El pequeño hombro en 817 cm-1 se relaciona con Al3+
43 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
tetraédrico en serpentinas de níquel (Serna et al., 1979). Las bandas 756 cm-1 y 607 cm-1 se
asocian a la pecoraíta (Frost et al., 2008), aunque esta última también se relaciona con la
lizardita (Baron y Petit, 2016; Golightly y Arancibia, 1979; Yariv y Heller-Kallai, 1975) y
el clinocrisotilo (Post y Borer, 2000). Las últimas tres bandas del espectro se asocian con la
nepouita y lizardita (Frost et al., 2008; Yariv y Heller-Kallai, 1975).
El espectro de P5 presentó las siguientes bandas en cm-1: 3688, 3655 y 3635 (pequeños
hombros no visibles en la Figura 3-3) 3435, 1874, 1797, 1624, 1166, 1082, 1014, 794, 777,
692, 623 y 461. Las bandas en 3688, 3435 y 1082 cm-1 se observan en la garnierita (Sufriadin
et al., 2012), aunque la primera también se reporta para la lizardita, así como 1624 cm-1
(Ghoorah et al., 2014; Luo et al., 2009), crisotilo (Boev et al., 2009) y antigorita (Wunder et
al., 2010). Los hombros en 3655 y 3635 cm-1 se han reportado para la antigorita (Mellini et
al., 2002). La banda en 623 cm-1 está relacionada con la antigorita (Ghoorah et al., 2014;
Post y Borer, 2000) y nepouíta (Baron y Petit, 2016). Algunas bandas típicas del cuarzo
también se encuentran presentes en 1874, 1797, 1166, 794, 777, 692 y 461 cm-1. La banda
en 1014 cm-1 se ha reportado para el clinocrisotilo (Post y Borer, 2000).
Para el último espectro (P6) se obtuvieron las siguientes bandas en cm-1: 3649, 3435, 1705,
1626, 1166, 1079, 1022, 964, 796, 779, 675, 613, 461, 432. En éste se muestran bandas
relacionadas con la garnierita, nepouita y pecoraíta principalmente (Baron y Petit, 2016;
Frost et al., 2008; Sufriadin et al., 2012). Las bandas en 1626, 1079, 964 y 613 cm-1 también
se han observado en la lizardita (Golightly y Arancibia, 1979; Post y Borer, 2000; Yariv y
Heller-Kallai, 1975). Algunas bandas en forma de hombro relativas al cuarzo en 1166, 796
y 779 cm-1 (Chukanov, 2014) y la banda en 432 cm-1 tiene relación con el clinocrisotilo (Post
y Borer, 2000), lizardita (Baron y Petit, 2016; Mellini et al., 2002) y antigorita (Boev et al.,
2009).
En la Tabla 3-2 se presentan los grupos de bandas obtenidos para los diferentes espectros
FTIR y sus asignaciones. Los grupos de bandas se asociaron con los minerales en los cuales
están presentes, ya que una misma banda se ha reportado para diferentes serpentinas. Esto
se debe a la naturaleza de los filosilicatos, en los cuales ocurren múltiples fases
simultáneamente, la presencia de moléculas de agua en la estructura o adsorbidas en la
Capítulo 3 44
superficie mineral, la forma y tamaño de las partículas minerales así como defectos en la
estructura, han dado lugar a información espectroscópica imprecisa. Adicionalmente, los
filosilicatos presentan substituciones octaédricas y tetraédricas de los cationes centrales en
un amplio rango (total o parcial), produciendo diversas composiciones químicas que afectan
radicalmente los espectros infrarrojos (Baron y Petit, 2016; Scholtzová et al., 2003; Serna et
al., 1979; Yariv y Heller-Kallai, 1975).
3435-3425 Garnierita, pecoraíta, nepouita, lizardita. Tensión OH del agua (Frost et al., 2008)
1091-1078 Cuarzo, crisotilo, clinocrisotilo, antigorita, Tensión fuera de plano Si-O (Ghoorah et
lizardita, garnierita. al., 2014)
1046-950 Pecoraíta, crisotilo, nepouita, garnierita. Tensión en plano Si-O (Frost et al., 2008)
694-690 Cuarzo, clinocrisotilo, nepouita, garnierita, Flexión simétrica SiO (Müller et al., 2014)
lizardita. Libraciones OH (Serna et al., 1979)
511-461 Cuarzo, nepouita, pecoraíta y garnierita. Flexión Si-O (Wilkins e Ito, 1967)
432-430 Pecoraíta, nepouita, antigorita, crisotilo, Flexión Mg-OH (Post y Borer, 2000)
clinocrisotilo, lizardita, garnierita.
45 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Las asignaciones se dieron conforme a diversos trabajos con esta clase de minerales. No
obstante, para algunos grupos de bandas existen algunas diferencias. Las bandas presentes
entre 3700 y 3400 cm-1 corresponden a vibraciones de tensión O-H, las vibraciones más
altas entre 3691 y 3688 cm-1 corresponden a los grupos OH externos coordinados con el
magnesio de las capas octaedrales y las bandas en 3630 a 3570 cm-1 se han asignado a
vibraciones de tensión OH internos (Ghoorah et al., 2014; Luo et al., 2009; Mellini et al.,
2002), esta última indica una ligera variación en la fuerza de la unión O-H que se atribuye a
la presencia de cationes octaedrales diferentes al magnesio (Mellini et al., 2002).
En el estudio realizado por Wilkins e Ito (1967) y Scholtzová et al. (2003), se demuestra que
la región de vibración de tensión de los grupos hidroxilo, se divide en diferentes bandas
(hasta 4), de acuerdo al grado de sustitución del magnesio central octaédrico por otros
cationes divalentes. A medida que la sustitución de magnesio asciende, las bandas van
reduciendo sus frecuencias de vibración. En el espectro de la muestra general, se observaron
en esta región tres bandas con frecuencias en 3673, 3647 y 3630 cm-1. Los autores reportan
una vibración en 3676 cm-1 cuando no hay sustitución de alguno de los 3 Mg2+ centrales que
rodean el grupo OH interno, en 3647 cm-1 cuando el Ni2+ sustituye 2 de los 3 Mg2+ y de 3627
cm-1 cuando hay sustitución total por Ni2+.
Las bandas 3435-3425 cm-1, se han adjudicado a grupos hidroxilo unidos a cationes
trivalentes como Al3+ o Fe3+, por substitución tetraédrica y octaédrica en serpentinas (Fuchs
et al., 1998; Heller-Kallai et al., 1975; Liu et al., 2010; Serna et al., 1979). Por otro lado,
Chukanov (2014), presenta el espectro infrarrojo de una especie de cuarzo asociada con
elbaíta y rodicita, el cual tiene dos bandas de poca intensidad en 1880 y 1800 cm-1, cuya
posición coincide con las bandas obtenidas en los espectros de P1, P2 y P5, aunque el origen
de estas vibraciones se desconoce.
Las bandas entre 1085 a 1078 cm-1 representan la vibración de tensión fuera de plano de la
red de sílice, mientras que las que se encuentran entre 964 y 950 cm-1 se producen por la
vibración de tensión en plano Si-O (Liu et al., 2010; Rinaudo et al., 2003). Fuchs et al.
Capítulo 3 46
(1998), plantea que estas últimas vibraciones se producen por uniones Si-O con cationes
trivalentes.
Brindley et al. (1979), reportaron la presencia de una banda en 670 cm-1 en el talco y sus
variedades, asignada a libraciones OH. En este estudio mostraron como la sustitución
progresiva del magnesio por níquel, genera una frecuencia en 705 cm-1 relacionada con el
mineral willemseíta. De manera similar, Baron y Petit (2016) reportaron 3 bandas para la
lizardita pura en magnesio en 634, 607 y 562 cm-1, atribuidas a flexiones OH. A medida que
aumenta la sustitución de Mg2+ por Ni2+, nuevas bandas aparecen en frecuencias superiores
a 634 cm-1. En el caso de la nepouita, donde hay sustitución total de Mg2+ por Ni2+,
observaron una amplia banda en 674 cm-1 con un hombro en 600 cm-1.
Boev et al. (2009) atribuyeron a la banda en 623 cm-1 la flexión O-H y las bandas entre 607-
609 cm-1 se asignaron a la flexión Si-O-Si. Mientras que Mellini et al. (2002), determinaron
que estas bandas se asocian con la flexión R2+-OH interna (donde R2+ consiste
principalmente en Mg2+), aunque también puede ser atribuida a libraciones NiOH (Frost et
al., 2008). De acuerdo a Golightly y Arancibia (1979), la banda en ~610 cm-1 se atribuye a
vibraciones OH y su intensidad es directamente proporcional a la ocupación del magnesio
en la capa octaédrica.
La banda que se encuentra en 443 cm-1 ha sido asignada a la flexión Mg-OH (Ghoorah et
al., 2014; Post y Borer, 2000), así como a la flexión Si-O (Luo et al., 2009). Las bandas entre
432 y 430 cm-1 se asignan a una flexión Mg-OH (Post y Borer, 2000), aunque Serna et al.
(1979), la relaciona con una flexión Ni-OH.
Finalmente, la Tabla 3-3 compila los minerales relacionados en los diferentes espectros del
saprolito usado en este estudio y su abundancia relativa.
47 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Tabla 3-3: Minerales presentes en la muestra de saprolito (el término garnierita abarca los
diferentes minerales señalados por la llave).
3.3.4 SEM-EDS
La Figura 3-4 muestra la estructura del mineral y diferentes fases presentes en la muestra
general, con partículas de mayor tamaño relacionadas con el cuarzo y partículas menores
asociadas a la serpentina de níquel. El análisis elemental por EDS de los granos aislados
(Figura 3-5), reveló una composición química que se relaciona con su descripción física y
con los minerales descritos en los espectros DRX y FTIR.
Figura 3-4: Imágenes de SEM con SE (izquierda) y BSE (derecha), de la muestra mineral
(Serp: serpentina, Qz: cuarzo).
Capítulo 3 48
P1
Elemento Peso (%)
OK 46.73
Si K 53.27
Total 100
P1
Elemento Peso (%)
OK 46.64
Si K 53.36
Total 100
P2
Elemento Peso (%)
OK 42.04
Mg K 21.5
Si K 25.22
Fe K 6.79
Ni K 4.45
Total 100
P3
Elemento Peso (%)
OK 25.96
Mg K 9.56
Si K 16.47
Fe K 46.25
Ni K 1.77
Total 100
P6
Elemento Peso (%)
OK 32.14
Mg K 6.64
Si K 20.16
Fe K 0.83
Ni K 40.23
Total 100
Figura 3-5: Análisis elemental (SEM-EDS) de algunos de los granos del mineral separados
macroscópicamente.
En la Figura 3-6 A se observa la caída del pH con el tiempo, presentando valores finales
menores directamente proporcionales al porcentaje de pulpa usado. Por otra parte, con base
en el comportamiento de los controles, se determinó que el mineral al contacto con el medio
de cultivo genera un fuerte incremento en el pH. Sin embargo, en los ensayos bióticos, es
evidente que la tendencia al aumento en el pH es contrarrestada (al menos en parte) por la
acción indirecta de las bacterias, mediante la producción de ácido sulfúrico a partir del azufre
elemental agregado (Schippers y Sand, 1999). No obstante, se observó que el incremento en
la concentración del mineral, retrasa la cinética de la caída del pH, como se evidencia en la
tendencia al aumento del pH durante los primeros tres días en los ensayos con porcentajes
de pulpa superiores a 8%.
Capítulo 3 50
A 60000 B
8
3 20000
2
10000
1
0 0
0 3 6 9 12 0 3 6 9 12
Días Días
100
C 700 D
90
80 600
Potencial redox (mV)
70 At15
500
S0 oxidado (%)
60 At19
50 400
40
300
30
20 200
10 100
0 0 3 6 9 12
2% 4% 8% 10% 12% 14% 16% Días
51 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
70 E 9.5 F
60
9
50
40
8.5
30
8
20
7.5
10
0 7
0 3 6 9 12
0 3 6 9 12
Días Días
40 G
35
30
Ni Extraído (%)
25
20
15
10
0
0 3 6 9 12
Días
Los sulfatos en solución, mostraron un patrón consistente con las mediciones de pH, que
indican que un menor porcentaje de pulpa (2%) permite una rápida producción de ácido
Capítulo 3 52
sulfúrico por las bacterias (Figura 3-6 B). De acuerdo con Dopson et al. (2007), al aumentar
la cantidad de mineral agregada al medio, se incrementa también la concentración de iones
y viscosidad de éste por la solubilización de elementos que reducen las tasas de transferencia
de oxígeno. En esta medida, el oxígeno puede convertirse en un factor limitante para la
oxidación de azufre elemental bacteriana.
Los ensayos con la cepa 19377 alcanzaron los mayores potenciales de óxido-reducción. Por
otra parte, es notable que los porcentajes de pulpa más altos generan menores potenciales de
óxido-reducción en los primeros dos días. Esto puede producirse debido a mayores
incrementos en el pH con el aumento de la concentración de mineral, que reducen la
movilidad de los elementos en la solución (Deutsch y Siegel, 1997).
El hierro en solución aumentó con el tiempo excepto en los controles (Figura 3-6 E). La
liberación del hierro presente en el mineral, está mediada por la producción de ácido
sulfúrico de las bacterias (Liu et al., 2010), por lo que en los controles no se observa el
incremento de este parámetro a diferencia de los ensayos y réplicas. En la Tabla 3-4 se
muestran los porcentajes de hierro total solubilizado por cada cepa con diferentes
concentraciones de mineral.
Tabla 3-4: Porcentaje de hierro solubilizado (media ± DE) con diferentes porcentajes de
pulpa mineral.
2%a 4%b 8%c 10%c 12%de 14%bd 16%e
At 15494 59.41± 4.9 25.82± 7.95 8.49± 0.51 14.96± 0.93 36.91± 0 29.8± 0.33 41.34± 0.99
At 19377 55.62± 3.4 19.93± 0.61 7.92± 0.02 13.09± 1.23 34.45± 2.26 30.1± 1.51 41.83± 0.06
Los porcentajes con el mismo superíndice no difieren significativamente entre sí (α = 0.05).
Capítulo 3 54
Las tasas de crecimiento celular son un indicador general de la actividad fisiológica de las
bacterias, las cuales son afectadas por la toxicidad de diversos iones, induciendo
mecanismos de protección celular (Mykytczuk et al., 2011). La actividad bacteriana bajo las
fuertes condiciones de estrés producidas por la concentración de sólidos, sugieren una alta
resiliencia de las cepas usadas en este estudio.
los porcentajes de pulpa más altos de 12, 14 y 16%, lo cual se relaciona con la similitud de
la cinética del pH para estos tres ensayos.
Tabla 3-5: Porcentaje final de Ni2+ solubilizado (media ± DE) con diferentes porcentajes de
pulpa mineral.
En los controles sin inóculo todos los valores son cercanos a 0%, los mayores porcentajes
de solubilización de níquel se lograron usando el porcentaje de pulpa más bajo (2%). El
incremento en el porcentaje de pulpa produce una reducción en el níquel que se libera del
mineral. Esto puede ser una consecuencia de una mayor concentración de mineral, donde
los iones hidrógeno disponibles son insuficientes para desplazar más cationes metálicos de
la matriz del mineral. Por otra parte, una mayor densidad de pulpa puede generar una mezcla
inefectiva de los sólidos y líquidos, limitando una transferencia eficiente de gases a las
células (Ochoa et al., 1999).
La mayor concentración de Ni2+ lixiviada por las bacterias en este estudio fue de 1521 mg/L,
durante la adaptación a 14% de pulpa mineral. De acuerdo con Maeda et al. (1996), 774
mg/L de NiSO4 inhiben completamente el crecimiento celular de A.thiooxidans. Esto indica
que las cepas lograron una mayor tolerancia al níquel mediante los cultivos sucesivos, ya
que incluso bajo esta condición no hubo inhibición del crecimiento ni del metabolismo
microbiano.
Otro de los factores que se debe considerar en la solubilización de níquel en este estudio, es
la mineralogía de las lateritas, ya que su alta variabilidad incluso en la misma región, puede
generar respuestas muy diferentes durante su lixiviación (Alibhai et al., 1993; McDonald y
Whittington, 2008). Se ha determinado que en general la limonita exige condiciones más
agresivas en cuanto a temperatura y presión para su solubilización, que el saprolito rico en
silicatos de magnesio y níquel. Esto se debe a que en la limonita, el níquel se encuentra
contenido en óxidos de hierro como goethita, constituyendo su principal fase mineral (Valix
y Tang, 2001). Sin embargo, el saprolito requiere concentraciones de ácido mucho más altas
que la limonita, debido a su alto contenido de iones básicos como el magnesio (Rubisov et
al., 2000; Whittington et al., 2003b), lo cual se asocia con la muestra utilizada.
2006; Hellman et al., 2012; Lin y Clemency, 1981; Luo et al., 2009; Rice, 2016; Schott et
al., 2012; Whittington et al., 2003a; Whittington y Johnson, 2005; Zhao et al., 2015). Los
cambios mineralógicos observados en la lixiviación de la muestra, soportan la ocurrencia de
este fenómeno. Esta capa reduce las tasas de lixiviación y elementos como el níquel, entre
otros, se han encontrado en diferentes concentraciones asociados a ésta (Hellman et al.,
2012; Whittington et al., 2003a; Whittington y Johnson, 2005; Zhao et al., 2015). Debido a
que el sílice de esta capa tiene una carga superficial muy negativa, se considera que los
cationes Ni2+ pueden ser adsorbidos por éste, produciendo re-precipitación de níquel (Luo
et al., 2009; Whittington et al., 2003a; Whittington y Johnson, 2005). Para evitar esto, se ha
determinado que debe existir suficiente ácido libre, aunque tratamientos como la agitación
(400 rpm) y el ultrasonido han mostrado ser útiles reduciendo esta capa e incrementando la
lixiviación de elementos (Zhao et al., 2015).
Al comparar la solubilización entre el hierro y el níquel, se observa que para el día seis los
porcentajes de ambos iones son muy similares, a excepción de los ensayos con 2% de pulpa
(Figura 3-6 E y G). Durante los últimos seis días, en general se alcanzan mayores porcentajes
de lixiviación de hierro respecto al níquel, lo cual puede tener relación con el bajo contenido
de hierro en la muestra, así como con el aumento en la concentración de ácido en el medio.
No obstante, las concentraciones de níquel en solución son mayores que las del hierro, lo
cual es más notorio al finalizar los experimentos. Excepto por el ensayo con 16% de pulpa,
donde los valores de ambos metales en el día 12 son muy cercanos entre sí. La disolución
preferencial de níquel sobre el hierro, puede ser interpretada con base en la energía de
disociación requerida para la ruptura entre el níquel y el oxígeno, la cual es menor que la del
hierro con el oxígeno (Dean, 1992). Este comportamiento fue referido en el estudio de Feng
et al. (2013), entre el magnesio y el hierro en una muestra de serpentina.
Se debe tener presente que las reacciones cinéticas y electroquímicas en la disolución de los
silicatos son complejas y se han desarrollado diferentes teorías y modelos bajo diversas
condiciones, sin embargo aún no existe un consenso (Crundwell, 2014; Feng-Chih y
Clemency, 1981; Hellman et al., 2012; Rubisov et al., 2000; Zakaznova-Herzog et al., 2008).
1442
741
454
419
676
984
1647
593
628
614
1020
3250
3380
1094
Tabla 3-6: Frecuencias de las bandas del espectro infrarrojo del precipitado y posibles
asignaciones.
C
Elemento Peso (%)
OK 44.59
Na K 36.01
Mg K 0.86
SK 11.45
Fe K 2.65
Ni K 3.37
Cu K 1.07
Total 100
Alibhai et al. (1993), realizaron una lixiviación con ácido sulfúrico de un saprolito con
5.42% de NiO, empleando 10% (p/v) de pulpa. La concentración de ácido usada de 1.5 M
61 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
(manteniendo un pH entre 0 y 1 durante todo el proceso), les permitió recuperar cerca del
70% de níquel en 20 días. Por otra parte, cerca del 40% de níquel fue disuelto en menos de
5 días, indicando que las fases minerales que contenían el níquel eran mucho más accesibles
al inicio del proceso. A diferencia en este estudio, el pH solo alcanzó valores inferiores a 1
en la adaptación a 2, 4 y 8% de pulpa, durante los últimos días. Esto se debe a que el mineral
usado genera un alto consumo de ácido e implica que las fases que contienen el níquel son
menos accesibles o poco solubles a pH mayores a 1.
Múltiples factores inducen resultados muy diferentes entre estudios, lo que dificulta
establecer comparaciones. Se debe tener en cuenta en primer lugar la alta heterogeneidad en
la composición de las lateritas, otros aspectos como las diferencias entre especies y cepas
usadas, el control y concentración de ácido que se maneja en los medios, pretratamientos
realizados al mineral con altas temperaturas o con ácido, entre otros.
Durante las diferentes etapas de adaptación con concentraciones progresivas del mineral, se
determinaron mediante FTIR varios cambios en diferentes bandas presentes en éste (Figuras
3-9 y 3-10). Los controles, al igual que los ensayos, presentan cambios en la intensidad de
algunas bandas, aunque en menor grado.
Figura 3-9: Espectros FTIR de los ensayos con 2% de pulpa (D0: día 0, D6: día 6, D12: día
12, las flechas indican cambio en las bandas).
Figura 3-10: Espectros FTIR de los ensayos con 16% de pulpa (D0: día 0, D6: día 6, D12:
día 12, las flechas indican cambio en las bandas).
63 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
En la zona de tensión Si-O, la banda en 1078 cm-1 presentó una mayor definición con un
aumento relativo de su intensidad, en la medida en que la absorción en 1022 cm-1 se reducía
durante la lixiviación, siendo más evidente este cambio en los ensayos con menores
porcentajes de pulpa. Esto por una parte indica extracción de silicio de la capa tetraédrica
(Sufriadin et al., 2011) y de acuerdo a Luo et al. (2009), puede indicar descomposición
parcial de la estructura del filosilicato a sílice amorfo. Al igual que la absorción en 1078 cm-
1
, la banda en 777 cm-1 (vibración puente Si-O-Si) también incrementa su intensidad, lo cual
corrobora la re-precipitación de sílice amorfo (Luo et al., 2009; Whittington y Johnson,
2005).
El hombro observado en 713 cm-1 se acentúa y define más hacia el final de los experimentos
con los menores porcentajes de pulpa. Esta banda, a la cual se le ha asignado una flexión
Ni-OH (Frost et al., 2008), se ha observado en talco sintético sustituido con níquel mas no
en el de magnesio (Russell et al., 1970). En el estudio realizado por Gerard y Herbillon
(1983), el tratamiento termal a una muestra de garnierita genera la aparición de esta banda
en 710 cm-1, a medida que una banda en 670 cm-1 asociada al magnesio se reduce. Por lo
tanto, esto puede relacionarse con un fenómeno de superposición de bandas y debido a la
solubilización preferencial de magnesio en el proceso, la vibración Ni-OH se vuelve más
notable.
Otro de los cambios observados corresponde a la banda en 677 cm-1, cuya intensidad
disminuye con el tiempo del proceso, mientras que la banda en 690 cm-1 no presentó cambios
notables. La primera banda está asociada a cationes octaédricos, lo cual implica
desintegración de estas capas. La segunda banda que se relaciona con la flexión Si-O,
implica componentes estructurales poco solubles. En algunos ensayos se encontró que con
la disminución de la intensidad en 677 cm-1, surgió una nueva banda en 663 cm-1 (Figura 3-
9). Esta frecuencia ha sido observada en la nepouita, en la cual hay sustitución total del
magnesio por níquel (Golightly y Arancibia, 1979). Por esta razón, esta banda sugiere
permanencia de Ni2+ en la estructura del mineral.
La reducción en la intensidad de la banda en 461 cm-1; que corresponde a una flexión Si-O,
implica solubilización de sílice de la capa tetraédrica, aunque este cambio ya no es notable
Capítulo 3 64
a partir de los ensayos con 8% de pulpa. A medida que esta absorción disminuye, el hombro
en 430 cm-1 se define más, lo cual puede indicar retención del níquel en el mineral debido a
la relación que tiene con la vibración Ni-OH (Serna et al., 1979).
Los resultados sugieren que ocurrió precipitación de níquel y hierro (en baja proporción),
mediante la re-precipitación de sílice amorfo y en forma de sulfato. Adicionalmente, otros
factores pueden haber afectado la solubilización de níquel como el alto consumo de ácido
del mineral. La solubilización de elementos como la sílice, aumentan la concentración de
iones y viscosidad del medio, reduciendo las tasas de transferencia de oxígeno. Igualmente,
la solubilización y concentración de diversos iones metálicos y los efectos tóxicos que tienen
sobre las células, lo cual puede afectar la producción bacteriana de ácido.
En términos generales y a través de comparaciones con otros estudios se considera que las
fases que contienen el níquel son más refractarias, ya que la cinética y tasas de lixiviación
de éste fueron más lentas y menores a la disolución que se reporta en el saprolito. No
obstante, este comportamiento pudo haber sido causado por la re-precipitación de sílice
amorfo que forma una capa sobre el mineral que puede reducir la transferencia de iones,
ralentizando el proceso.
Finalmente es necesario poner a prueba otros procesos a diferentes pasos y variables como
el pH, el porcentaje de azufre elemental agregado al medio, tiempo de residencia del mineral,
el número de cepas evaluadas, etc. Esto permitiría establecer las mejores condiciones para
consecuentes estudios a escala piloto.
4. Efecto de diferentes variables sobre la
biolixiviación de níquel y su cinética
Resumen
En este estudio se evaluaron distintas variables que repercuten sobre la biolixiviación de
níquel de una laterita de alto grado de la mina Cerro Matoso en Colombia. Se realizó una
caracterización mineralógica y química de una segunda muestra, usando DRX, FTIR y AA.
Se probaron diferentes pH iniciales en el medio, el tiempo de residencia del mineral y
diferentes concentraciones de azufre elemental en ensayos con dos cepas de
Acidithiobacillus thiooxidans. Adicionalmente, se realizó una lixiviación química con el fin
de establecer diferencias respecto a la biolixiviación y el comportamiento en la
solubilización de Ni2+ con un pH de 0.5. Los espectros DRX y FTIR de la segunda muestra
de mineral, no presentaron diferencias respecto a la primera usada en el capítulo 3, sin
embargo el contenido de óxido de níquel fue un 6% mayor. No se encontraron diferencias
significativas en el níquel extraído con pH de inicio 2, 1.7 y 1.4, pero sí entre éstos y el pH
inicial 2.8 usado en la fase de adaptación. Aparentemente, el tiempo de residencia del
mineral (duración de los ensayos) permitió a las bacterias reducir el pH a valores que
aceleran la solubilización de níquel. El aumento en los porcentajes de azufre elemental
incrementó la cinética y producción de ácido sulfúrico, con lo cual se extrajo el 60% de
níquel de esta segunda muestra usada, que equivale al 88% del níquel presente en la primera
muestra de mineral. Las cepas adaptadas de A. thiooxidans mostraron una alta resistencia al
níquel, que alcanzó concentraciones de 14.2 g/L en solución. Los cambios mineralógicos
observados durante el proceso, correspondieron a la reducción en la intensidad de bandas
asociadas a componentes octaédricos y tetraédricos con re-precipitación de sílice amorfo.
4.1 Introducción
Actualmente los recursos lateríticos que pueden ser procesados por hidrometalurgia, superan
en casi el doble las lateritas aptas para procesos pirometalúrgicos (Dalvi et al., 2004). Los
procesos hidrometalúrgicos involucran altas concentraciones de ácido sulfúrico y varios de
estos procesos delimitan los contenidos del mineral a tratar para maximizar la eficacia. Es
así como la biolixiviación constituye una vía de procesamiento alternativa, en la cual la
acción de bacterias oxidantes de compuestos de azufre, genera una fuente constante de
producción de ácido sulfúrico mediante el suministro de azufre elemental como fuente
energética.
et al., 2008; Simate y Ndlovu, 2008; Simate et al., 2010). Otros mecanismos de lixiviación
con ácidos inorgánicos y orgánicos producidos por hongos, han demostrado que el ácido
sulfúrico tiene mayor impacto en la solubilización de níquel (Alibhai et al., 1993; Coto et
al., 2008; Sahu et al., 2011).
Para este estudio se usaron dos muestras de saprolito, la primera corresponde a la descrita
en el Capítulo 3 y debido a que ésta fue insuficiente, se solicitó una segunda muestra. De
igual manera, esta segunda muestra provino de la mina Cerro Matoso, operada por la
multinacional BHP Billiton en Montelíbano, Córdoba, Colombia. La muestra fue molida
hasta un tamaño pasante malla 200 Tyler (< 74 µm). Adicionalmente, se realizó un análisis
químico por Fluorescencia de rayos X (FRX) con el fin de conocer su composición general
y contenido de níquel. Las características mineralógicas se determinaron usando
Espectroscopía Infrarroja con Transformada de Fourier (FTIR) y Difracción de rayos X
(DRX).
69 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Un difractómetro marca Rigaku Miniflex II se usó para realizar los análisis de Difracción
de Rayos X, usando un barrido en 2 entre 3° y 70°, modo paso a paso, con un tamaño de
paso de 0.02, tiempo por paso de 2 s y con la muestra rotando sobre su eje. El análisis de los
difractogramas se realizó con el software X`pert HighScore Plus (versión 2.2.1, Panalytical).
Se estudió el efecto de tres pH diferentes (2, 1.7 y 1.4) sobre la biolixiviación de níquel, los
cuales se fijaron en el medio con ácido sulfúrico (98%) al inicio de los experimentos. Debido
a que durante el proceso de adaptación se observó un incremento importante del pH
provocado por el mineral, se decidió probar valores de pH inferiores a 2.8, que permitieran
incrementar la biolixiviación de níquel. Cada tratamiento de pH consistió en un control
(medio + mineral + azufre sin inóculo), un ensayo y una réplica para cada cepa. Se usó 1%
(p/v) de azufre elemental y 16% de pulpa mineral. La duración de estos ensayos fue de 12
días, conforme a lo planteado en la fase de adaptación.
Se evaluaron las diferencias producidas por la lixiviación química de níquel con aquellas
obtenidas con microorganismos en ensayos previos. Para esto se realizaron dos tratamientos
con las mismas condiciones empleadas en los ensayos bióticos anteriores: erlenmeyer de
500 ml, volumen efectivo de 200 ml con medio 9K, 16% de pulpa mineral, 1% (p/v) de
azufre elemental, agitación orbital a 180 rpm y temperatura de 30 °C. Se fijaron dos pH con
ácido sulfúrico (98%): 0.5 y 1.4, los cuales se mantuvieron en el tiempo agregando ácido
diariamente.
El pH de 1.4 se usó para realizar un comparativo con el ensayo biológico realizado a este
mismo pH. Adicionalmente, se propuso estudiar el efecto de un pH muy bajo (0.5), debido
al comportamiento del níquel a pH mayores o cercanos 1, observado en el estudio de
adaptación bacteriana. Este experimento tuvo una duración de 12 días, con un ensayo y una
réplica para cada pH. Se realizaron análisis de contenido de níquel por Absorción Atómica
(AA), para las muestras recolectadas los días 0, 6 y 12.
71 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Se tomaron muestras en tubos falcon cada tres días, en una cabina de seguridad biológica de
flujo laminar. El volumen de medio perdido por evaporación fue sustituido periódicamente
con agua destilada. Se realizaron mediciones de pH, potencial redox (Eh), sulfatos en
solución, biomasa y concentración de hierro en solución. Se usó el medidor HQ 40d multi
HACH Company® con electrodos de Ag/AgCl para pH y Eh (PHC30101-MTC30101). La
biomasa se calculó por conteo celular en cámara de Neubauer de acuerdo con Zapata (2004).
El contenido de sulfatos se determinó por el método turbidimétrico 4500 SO4 E (APHA,
1999) y el hierro mediante el método colorimétrico de la orto-fenantrolina 3500-Fe B
(APHA, 1999). Para estos análisis se usó el espectrofotómetro Genesys 10 UV de Thermo
Scientific®.
Capítulo 4 72
Las muestras para determinar las concentraciones de níquel en solución se tomaron cada 6
días. Estos análisis fueron realizados por el Instituto de minerales CIMEX, mediante
espectrometría de absorción atómica. Los cambios en el mineral se monitorearon durante el
proceso usando FTIR, comparando las muestras obtenidas en diferentes momentos del
proceso.
Compuesto (%p)
SiO2 60.283
NiO 20.835
MgO 8.782
Fe2O3 3.264
TiO2 0.007
Al2O3 0.211
Mn3O4 0.035
CaO 0.136
Na2O 0.051
73 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
K2O 0.004
P2O5 0.009
SO3 0.318
V2O5 0.007
Cr2O3 0.099
SrO 0.019
BaO 0.013
El difractograma de rayos X realizado para la segunda muestra mineral, presentó los mismos
picos de minerales encontrados en la primera muestra (Figura 4-1). No obstante, el mayor
contenido de níquel en esta muestra se vio reflejado en una mayor intensidad de los picos
de difracción. Al igual que la primera muestra, la principal fase mineral encontrada fue
cuarzo seguida por el silicato de níquel nepouita. Otros silicatos de níquel y magnesio
(garnierita) y antofilita también estaban presentes.
Counts
Qz
An: antofilita
Ga: garnierita
Np: nepouita
6000 Qz: cuarzo
4000
Qz
2000
Np
Np Qz Qz
Ga Qz Qz Qz
Np An Np Np Qz
Qz Qz Qz Np Qz
An Qz
0
10 20 30 40 50 60 70
%T
100
1874
80
1627
3681
3647
713
613
3435
60
796
778
694
670
40
1163
423
20
1079
459
1022
4000 3600 3200 2800 2400 2000 1800 1600 1400 1200 1000 800 600 400
1/cm
Figura 4-2: Espectro infrarrojo de la segunda muestra de saprolito.
Varias de estas bandas han sido reportadas para diferentes filosilicatos como la garnierita,
nepouita, pecoraíta, antigorita, lizardita y clinocrisotilo (Baron y Petit, 2016; Frost et al.,
2008; Gerard y Herbillon, 1983; Heller-Kallai et al., 1975; Luo et al., 2009; Post y Borer,
2000; Sufriadin et al., 2012; Yariv y Heller-Kallai, 1975). La tabla 4-2 muestra los minerales
asociados a cada banda y sus asignaciones, de acuerdo con varios estudios realizados para
este grupo de minerales.
75 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
El término garnierita ha sido incorporado para referirse a toda esta mezcla de filosilicatos
hidratados de níquel y magnesio, que se encuentran en la naturaleza formando una estructura
de capas trioctaédrica con disposición 1:1 y 2:1 (Gerard y Herbillon, 1983). El estudio de
Post y Borer (2000), señala la dificultad en la identificación del tipo de serpentina, cuando
el espectro consiste en una mezcla de este grupo.
Tabla 4-2: Bandas obtenidas mediante FTIR para la segunda muestra de saprolito. Minerales
a las que se asocian y asignaciones.
Los ensayos realizados para evaluar tres pH de inicio, no produjeron diferencias relevantes,
respecto a las mediciones de pH durante los 12 días de duración (Figura 4-3 A). Para el sexto
día los valores registrados entre los diferentes ensayos, eran similares entre sí y no se
presentó una reducción notable en éstos durante los últimos seis días. No obstante, los
controles sí mostraron marcadas diferencias durante el tiempo de los experimentos. Por una
parte, los controles de pH inicial 2 y 1.7 aumentaron para el tercer día alrededor de cuatro
unidades alcanzando valores de 6.42 y 5.35, respectivamente. El incremento en el pH del
control 1.4 fue cercano a dos unidades para el tercer día y continuó aumentando los
siguientes días de manera más notable que los otros controles, indicando que la liberación
de iones básicos persiste por el ataque de protones. Este comportamiento evidencia el alto
consumo de ácido producido por esta clase de minerales, lo que repercute en los ensayos
con bacterias, produciendo el escaso descenso del pH.
A B
7 550
Potencial redox (mV)
6 500
5 450
4 400
pH
3 350
2 300
1 250
0 200
0 3 6 9 12 0 3 6 9 12
Días Días
77 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
1600 C 30000 D
8.4 12
8.3
Ni extraído (%)
8.2 10
8.1 8
8
7.9 6
7.8 4
7.7
2
7.6
7.5 0
0 3 6 9 12 0 3 6 9 12
Días Días
Diversos trabajos han demostrado la dificultad para predecir el consumo de ácido en los
minerales del grupo de la serpentina, debido a su inherente variabilidad y grado de
sustitución en las capas que los componen (Dopson et al., 2007; Feng et al., 2013; Salo-
Zieman et al., 2006). De acuerdo a Feng et al. (2013), los hidroxilo se disuelven con mayor
facilidad que los cationes en la superficie de la serpentina, generando el aumento en el pH.
No obstante, bajo condiciones ácidas se presenta un rápido intercambio de protones y
cationes básicos como el Mg2+ y Ca2+ en las superficies de los silicatos, los cuales son
Capítulo 4 78
liberados preferencialmente respecto a cationes como el Si4+ o Al3+ (Dopson et al., 2007;
Strömberg y Banwart, 1999). Esta etapa inicial se caracteriza por una disolución
incongruente que explica el rápido incremento observado en el pH de los controles y la
tendencia a su aumento hasta el tercer día en los ensayos bióticos.
Del día seis al doce, la reducción en el pH es pequeña y constante, lo que sugiere una
continua liberación de iones básicos del mineral. En esta medida, el comportamiento de los
ensayos bióticos muestra la relevancia de la oxidación biológica de azufre, ya que a pesar
del fuerte aumento en el pH de los controles, la producción de ácido sulfúrico debe ser
considerable para contrarrestar la alta carga de iones básicos e incluso alcanzar valores
menores en el caso de los ensayos con pH inicial 2 y 1.7.
Tabla 4-3: Porcentaje de hierro solubilizado (media ± DE) en ensayos con diferentes pH de
inicio (pHi).
Para la cepa 19377 estos valores fueron 25.4% para pH inicial 2, 30% para pH inicial 1.7 y
33.3 para pH inicial 1.4. Este resultado no muestra diferencias importantes en los porcentajes
de azufre elemental oxidado, sugiriendo que el pH inicial no influye en la utilización del
substrato. No obstante, al promediar las concentraciones de los sulfatos totales producidos
en cada pH de inicio (para ambas cepas), se observa una tendencia creciente. En esta medida,
es posible considerar que un menor pH inicial estimularía la producción de sulfatos
bacteriana. Es decir, los experimentos que iniciaron con mayores concentraciones de ácido
(pH inicial 1.7 y 1.4), generan una mayor liberación de iones básicos del mineral (que
consumen ácido), lo cual podría estimular la producción bacteriana de ácido sulfúrico.
Las mediciones de biomasa muestran para algunos ensayos un comportamiento que exhibe
las diferentes fases del crecimiento bacteriano (Figura 4-3 E). Aunque la alta concentración
de mineral dificulta el conteo bacteriano. La mayor concentración celular alcanzada por la
cepa 19377 pH inicial 1.4, explica su desempeño en los demás parámetros medidos.
Tabla 4-4: Porcentaje de níquel solubilizado (media ± DE) en ensayos con diferentes pH de
inicio (pHi).
Particularmente los porcentajes de níquel solubilizados con pH inicial 1.4, son comparables
a los obtenidos en la adaptación a 10% de pulpa. Los resultados indican que los pH menores
a 2 favorecen la disolución de níquel del mineral y de acuerdo al estudio de Simate et al.
(2009), un pH inicial de 2 es el óptimo para el tratamiento de lateritas con bacterias
quimiolitótrofas.
En la Figura 4-9 se puede apreciar la tendencia en la lixiviación de níquel a través del tiempo,
cuyo comportamiento es exponencial conforme al aumento en la concentración de ácido
sulfúrico en el medio. Por otra parte, se puede observar que el pH de inicio 1.4, solubilizó
cerca del triple de níquel en el día cero, respecto al pH de inicio 2. A partir del día seis,
cuando se alcanzan pH inferiores a 2, la lixiviación de níquel se acelera liberándose dos
veces más las cantidades solubilizadas los primeros tres días. Para el último día, los
porcentajes de níquel no difieren mucho entre los ensayos con distintos pH de inicio, a
excepción de la cepa 19377 pH inicial 1.4, cuyo comportamiento sobresale al igual que en
los demás parámetros fisicoquímicos medidos.
En el caso de los controles una cantidad inapreciable de níquel parece liberarse en los pH
de inicio 1.7 y 1.4, sin embargo después del día 6 se observa una caída que probablemente
se asocia a la precipitación de éste, debido al incremento en el pH del medio.
Durante un periodo extendido a 30 días, el pH se reduce hasta el día 18, alcanzando valores
alrededor de 1 (Figura 4-10 A). Entre los días 6 y 12, es probable que la producción de ácido
haya sido contrarrestada por la liberación de elementos básicos del mineral, por lo que no
ocurre un decremento notable en el pH. No obstante, éste comportamiento puede estar
asociado también con un período de menor actividad bacteriana en respuesta a las
condiciones del medio, como lo sugiere la producción de sulfatos (Figura 4-10 C). Después
del día 18, el pH permanece casi constante con tendencia al aumento, indicando la fase
estacionaria celular.
6 600
A B
5 550
Potencial redox (mV)
500
4
450
3 400
pH
2 350
300
1
250
0 200
0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30 0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30
Días Días
60 9
C D
8.8
Sulfatos en solución (g/L)
50
8.6
Biomasa (Log10 cel/ml)
40 8.4
8.2
30 8
7.8
20 7.6
10 7.4
7.2
0 7
0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30 0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30
Días Días
83 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
100 55 F
E
90 50
80 45
40
Fe extraído (%)
70
Ni extraído (%)
35
60
30
50
25
40 20
30 15
20 10
10 5
0 0
0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30 0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30
Días Días
Figura 4-4: Evolución de los parámetros fisicoquímicos y biológicos (Media ± DE) en los
experimentos con pH inicial 1.4, durante el período extendido a 30 días (C: control, At15:
A.thiooxidans ATCC 15494, At19: A.thiooxidans ATCC 19377).
El potencial de óxido-reducción asciende hasta el día 21, alcanzando valores cercanos a 600
mV y comienza a reducirse conforme la producción de sulfatos es más lenta (Figura 4-10
B). Estos potenciales que representan condiciones de alta oxidación, ya han sido descritos
por Salo-Zieman et al. (2006) en la biolixiviación de un concentrado de níquel con bacterias
oxidantes de azufre y se encuentran dentro del rango descrito en los diagramas Eh-pH
cuando la especie dominante es HSO4- (Middelburg, 2000).
Las mediciones de sulfatos muestran actividad bacteriana durante los 30 días de duración de
los ensayos, aunque ésta decrece a partir del día 18, debido al agotamiento del azufre
elemental (Figura 4-10 C). Este comportamiento en la producción de sulfatos, que tiene una
tendencia lineal, fue referido por Konishi et al. (1995) para A.thiooxidans, bajo las mismas
condiciones usadas en este estudio: concentración celular de 108 y 1% de azufre elemental,
en un período de 7 días.
La oxidación de azufre elemental al finalizar los experimentos fue de 74.6% ±4.7% y 76%
±1.4% para la cepa 15494 y 19377, respectivamente. Aunque la diferencia es pequeña, se
Capítulo 4 84
Para el día 30, se solubilizó en promedio el 89% del hierro, cuya cinética es bastante rápida
los primeros 15 días, después de los cuales hay una reducción radical en esta velocidad
(Figura 4-10 E). Este comportamiento, se relaciona por una parte con el período de mayor
actividad bacteriana, así como con la cinética de lixiviación de los silicatos, que establece
que la solubilización incongruente de iones genera una carga en la superficie del mineral, la
cual es balanceada por una capa difusa de carga opuesta que se extiende a través de la fase
acuosa (Chou y Wollast, 1985; Feng et al., 2013; Fuerstenau y Pradip, 2005; Tartaj et al.,
2000).
Una vez formada la doble capa eléctrica en la interfase mineral-medio, los iones que
determinan su potencial pueden pasar libremente a través de ambas fases del sistema
(Fuerstenau y Pradip, 2005). El equilibrio se alcanza cuando el potencial electroquímico de
los iones de intercambio se vuelve constante a través del sistema (Fuerstenau y Pradip, 2005;
Strömberg y Banwart, 1999), lo que produce una reducción de las tasas de solubilización
del mineral.
Durante los últimos 10 días la solubilización de níquel se acelera, lo cual se produce cuando
el pH alcanza valores muy cercanos a 1, alrededor del día 18. Esto confirma lo propuesto
85 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
durante la etapa de adaptación, respecto a la solubilidad de las fases minerales que contienen
el níquel, las cuales son menos accesibles a pH mayores a 1. En el estudio de Rubisov et al.
(2000), se encontró que 0.1 mol/L [H+], equivalente a un pH de 1, es la mínima acidez
requerida para lograr la máxima solubilización de níquel en la lixiviación ácida a presión de
limonita o mezclas limonita/saprolito. Adicionalmente, se demuestra cómo las
concentraciones de magnesio reducen la extracción de níquel y aumentan el tiempo de
lixiviación. El alto contenido de magnesio en este estudio, puede disminuir de manera
importante la cinética de lixiviación del níquel, lo que implica mayores requerimientos de
ácido en la solución.
Tabla 4-5: Porcentaje de níquel solubilizado (media ± DE) en los ensayos con tiempo de
residencia de 30 días.
Ni (%)
C 2.62
At 15499 41.09 ± 1.60
At 19377 47.08 ± 0.91
Es importante resaltar también que estos experimentos permitieron crear alta tolerancia al
níquel en las cepas usadas, las cuales pudieron crecer y mantener su actividad metabólica
bajo 7.4 g/L de Ni2+, sin considerar la totalidad del níquel presente en el mineral, así como
las concentraciones de los demás iones en el medio. Xu et al. (2013), usaron sulfato de níquel
para estudiar la resistencia en una cepa aislada de A.thiooxidans, reportando una tolerancia
de hasta 300 mM (17.6 g/L) de Ni2+. Sin embargo, con 200 mM (11.7 g/L) de Ni2+, la cepa
ya presentaba una fase lag de cerca de 7 días y mostraba alto deterioro en su metabolismo,
reduciendo solamente 0.3 unidades en el pH durante 10 días. Los diferentes parámetros
medidos muestran la alta funcionalidad conservada en las cepas de este estudio, las cuales
podrían ser usadas en diferentes procesos asociados a altas concentraciones de níquel y
sulfatos.
50 Ni pH 1.4 Ni pH 0.5 90
45 Fe pH 1.4 Fe pH 0.5
80
40 70
Fe extraído (%)
Ni extraído (%)
35 60
30
50
25
40
20
15 30
10 20
5 10
0 0
0 3 6 9 12
Días
Figura 4-5: Porcentaje de níquel y hierro disueltos (Media ± DE) en los ensayos usando
H2SO4 sin microorganismos con pH 1.4 y 0.5.
Lo anterior permitió establecer una relación entre los costos generados en un proceso de
biolixiviación respecto a una lixiviación química, ya que el ácido producido es equivalente
al ácido gastado. En el proceso usando A.thiooxidans se usaron 2 g de azufre elemental, que
cuestan alrededor de 0.46 pesos (78 dólares/Ton, U.S. Geological Survey, 2017), mientras
el proceso químico genera un gasto de 19.9 g/L de ácido sulfúrico con un costo cercano a
7.05 pesos (118.1 dol/Ton, U.S. Bureau of labor statistics, 2017). En esta medida, el gasto
generado en ácido por el proceso químico es 15 veces superior al costo del proceso
biológico, lo cual demuestra una de las ventajas de la lixiviación bacteriana.
Capítulo 4 88
20
15
10
5
0
0 3 6 9 12
Días
Figura 4-6: Comparativo de los sulfatos (Media ± DE) producidos en los ensayos biológicos
con pH inicial 1.4 y agregados como H2SO4 en el ensayo sin microorganismos.
La rápida cinética de solubilización del níquel observada con el pH 0.5, alcanzó porcentajes
en el día 0 cercanos a los obtenidos durante 12 días con un pH inicial de 2. Esta cinética en
la lixiviación de níquel es opuesta a la observada con pH mayores a 1, la cual es
considerablemente más lenta. Lo anterior se relaciona con el potencial zeta o la carga
superficial producida en los minerales presentes en la laterita en medio acuoso.
El alto contenido de silicatos en la laterita usada, sugiere entonces que ésta posee un pHIEP
muy bajo, que puede ser menor o igual a 1. Esto se plantea también con base en la cinética
de solubilización del níquel observada durante los ensayos, así como al pHIEP reportado para
el cuarzo y diferentes silicatos, el cual se encuentra alrededor de 2 (Alves y Baptista, 2014;
Crundwell, 2016; Fuerstenau y Pradip, 2005). De acuerdo con esto, las concentraciones de
ácido que se deben manejar en la solución deben ser mayores, con el fin de acelerar la
cinética del níquel y mejorar su solubilización.
4.5 600
550
400
2.5
350
2
300
1.5 250
1 200
0 3 6 9 12 0 3 6 9 12
Días Días
60 12
11
50 10
Fe textraído (%)
Ni extraído (%)
40 8
7
30 6
5
20 4
3
10 2
1
0 0
0 3 6 9 12 0 3 6 9 12
Días Días
30 8.8
Sulfatos en solución (g/L)
8.6
Biomasa (Log10 cel/ml)
25
8.4
20
8.2
15
8.0
10 7.8
5 7.6
0 7.4
0 3 6 9 12 0 3 6 9 12
Días Días
El ensayo con los porcentajes de azufre de 1.5, 2 y 2.5% presentó diferencias significativas
en las concentraciones de sulfatos producidas por las bacterias (F=24.746, gl=2, P˂0.05),
aunque no en los porcentajes de níquel y hierro solubilizados. En el primer caso, los sulfatos
91 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
producidos por las bacterias difieren entre los 3 porcentajes de azufre usados, conforme al
test de comparaciones múltiples de Tukey (α = 0.05). Esto implica que un aumento de 0.5%
(p/v) de azufre en el medio, impacta positivamente la actividad metabólica bacteriana. Los
porcentajes de azufre elemental oxidado mostraron una leve tendencia a la reducción con el
aumento de este.
4.5 A 600 B
4 550
3.5
Potencial redox (mV)
500
3
450
2.5
pH
2 400
1.5 350
1 300
0.5 250
0 200
0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30 0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30
Días Días
Capítulo 4 92
90
140 C D
80
Sulfatos en solución (g/L) 120 70
Fe extraído (%)
100 60
80 50
40
60
30
40
20
20 10
0 0
0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30 0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30
Días Días
70
E
60
50
Ni extraído (%)
40
30
20
10
0
0 3 6 9 12 15 18 21 24 27 30
Días
En los ensayos con 6% S0, el pH permanece estable con la cepa 15494, mientras que con la
cepa 19377 existe una leve tendencia al aumento a partir del día 24. Este comportamiento
sugiere que el crecimiento bacteriano se acerca a la fase estacionaria alrededor del día 18 y
24. En los ensayos con 6% de S0, es posible que el pH alcance un nivel crítico (pH=0.5) para
la supervivencia de los microorganismos, impidiendo continuar su reducción.
excepción de 2%) entre los días 15 y 18 (Figura 4-8 B). Esto tiene relación con el tiempo en
que la actividad metabólica bacteriana comienza a reducirse alrededor del día 18 (Figura 4-
8 A y C). Cuando la producción de sulfatos decrece, el Eh presenta un comportamiento
descendente, conforme a lo observado en previos ensayos. En esta medida, el
comportamiento del potencial redox puede ser indicador del consumo de oxígeno
microbiano, reduciendo la concentración de oxígeno cuando la densidad microbiana es
mayor, factor que es promovido por mayores concentraciones de azufre elemental en el
medio (Liu et al., 2004).
La gráfica de sulfatos (Figura 4-8 C) mostró una relación intrínseca entre las concentraciones
de ácido sulfúrico producido por las bacterias y la concentración de azufre elemental
disponible. De acuerdo a estos resultados, el aumento en la cantidad de substrato acelera la
cinética de la formación de ácido sulfúrico, generando mayores concentraciones y por ende
pH más bajos. El análisis de varianza mostró que existen diferencias significativas entre las
concentraciones de sulfatos finales de los ensayos con diferentes porcentajes de azufre
(F=101.450, gl=3, P˂0.05). No obstante, según el test HSD de Tukey, no existen diferencias
entre las concentraciones de sulfatos obtenidas con 3% y 4% de azufre elemental, pero sí
entre los demás tratamientos (Figura 4-9). No se encontraron diferencias en la producción
de ácido sulfúrico entre cepas.
b
b
Figura 4-9: Medias por mínimos cuadrados para las concentraciones de sulfatos producidas
con diferentes porcentajes de S0. Las letras compartidas entre puntos indican que no hay
diferencias significativas de acuerdo al test HSD de Tukey (α = 0.05).
Capítulo 4 94
Estos resultados también muestran que la fase exponencial del crecimiento bacteriano sólo
ocurre durante los primeros 6 días. Después de esta fase la producción de ácido sulfúrico
presenta una tendencia lineal, sugiriendo un crecimiento constante. Las diferencias en la
producción de ácido se relacionan con el estudio de Konishi et al. (1995), de la cinética de
crecimiento de A.thiooxidans en azufre elemental. En éste determinan que las células libres
presentes en la fase líquida, son rápidamente adsorbidas en la superficie del azufre
elemental, el cual posee una capacidad máxima de adsorción. El número de células que son
adsorbidas es dependiente de la concentración celular inicial y al aumentar esta
concentración aumentan también las cantidades de azufre elemental oxidado. De acuerdo a
lo anterior, se deduce que mayores concentraciones de azufre generan mayores capacidades
de adsorción y por lo tanto la cantidad de células en contacto con el S0 se incrementa,
produciendo mayores concentraciones de ácido.
Liu et al. (2004), determinaron las condiciones óptimas para maximizar la formación de
ácido sulfúrico en una cepa nativa de A.thiooxidans. Ellos encontraron que dentro de las
variables del medio de cultivo, sólo el azufre elemental tenía una influencia significativa en
la producción de ácido sulfúrico por la bacteria. El porcentaje óptimo de azufre elemental
en sus resultados fue de 2.4% p/v, estableciendo que valores superiores generan una
reducción súbita en la producción de ácido sulfúrico. Por el contrario, en este estudio se
encontró que el azufre elemental, incluso en altas concentraciones (6% p/v), favorece una
mayor producción de ácido sulfúrico.
La biomasa asociada al azufre elemental a medida que éste aumenta, produce desde el inicio
mayores cantidades de ácido que a su vez liberan más iones básicos del mineral. Esto genera
95 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
Bajo condiciones óptimas del medio, la mayor concentración de ácido obtenida por Liu et
al. (2004) fue de 38.7 g/L en un período de 12.5 días. En los ensayos con 2% de S0, las cepas
produjeron en promedio 33.7 g/L de ácido en 12 días, el cual es un resultado muy similar al
del estudio mencionado, pese a la gran diferencia en las condiciones del medio en que
crecieron las cepas. Adicionalmente, es notable que con 3% de S0, las concentraciones de
ácido igualan las producidas en la fase inicial de adaptación con 2% (p/v) de pulpa mineral
(46.6 y 46.7 g/L, respectivamente). Esto implica que el aumento del substrato en el medio,
podría contrarrestar los efectos nocivos de la alta concentración de mineral. Debido al
aumento de la biomasa, el azufre puede ser oxidado a las mismas tasas iniciales e incluso
incrementarlas al aumentar el azufre elemental disponible.
Lee et al. (2006), estudiaron 3 cepas de A.thiooxidans aisladas de un suelo contaminado con
H2S y de un lodo activado. El crecimiento de estas cepas con 5% de azufre elemental en
medio de cultivo produjo en 13 días 74, 56 y 47 g/L de sulfatos para cada cepa. La mayor
producción de ácido correspondió a la cepa AZ11, determinando que era el primer reporte
de una bacteria perteneciente a este grupo que presentaba una alta tolerancia a sulfatos y
continua oxidación del azufre a pH menores que 1 alcanzando un pH de 0.15. Esta
concentración de sulfatos de 74 g/L, se asemeja a los sulfatos registrados para el día 12 en
Capítulo 4 96
el ensayo con 6% de azufre elemental, el cual fue en promedio 77.4 ± 1.8 g/L (72 producidos
bióticamente), incluyendo ambas cepas.
Smeulders et al. (2013), aislaron 16 cepas de A.thiooxidans con capacidad de usar el sulfuro
de carbono (compuesto tóxico usado industrialmente) como fuente energética. Dentro de
estas cepas extremadamente acidófilas, algunas toleraron hasta 105.6 g/L de ácido sulfúrico
creciendo con CS2. En el ensayo con 6% de S0, la concentración de sulfatos el día 30 era de
127.3 ± 4.4 g/L, que de acuerdo con los estudios revisados es el mayor valor reportado
respecto a las concentraciones de sulfatos toleradas por A.thiooxidans.
En el análisis de varianza se incluyeron los resultados obtenidos con 1% de S0, el cual arrojó
diferencias significativas entre las concentraciones de hierro solubilizado con diferentes
porcentajes de S0 (F=44.239, gl=4, P˂0.05). Con la prueba HSD de Tukey, se encontró que
estas diferencias ocurren entre 1 y 2% de S0 respecto a los demás porcentajes de azufre
97 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
elemental usado (Figura 4-10). Este resultado es consistente con las diferencias observadas
en el pH y sulfatos finales. Adicionalmente, sugiere que la concentración óptima de azufre
elemental es de 3% (p/v), al no existir diferencias significativas con el hierro final extraído
usando 4 y 6% de S0.
Figura 4-10: Medias por mínimos cuadrados para las concentraciones de hierro solubilizado
usando diferentes porcentajes de S0. Las letras compartidas entre puntos indican que no hay
diferencias significativas de acuerdo al test HSD de Tukey (α = 0.05).
análisis de varianza (F=174.211, gl=4, P˂0.05). De forma análoga al hierro, el test HSD de
Tukey no encontró diferencias entre los tratamientos con 3, 4 y 6% S0 (Figura 4-11).
Figura 4-11: Medias por mínimos cuadrados para las concentraciones de Ni2+ solubilizado
con diferentes porcentajes de azufre S0. Las letras compartidas entre puntos indican que no
hay diferencias significativas de acuerdo al test HSD de Tukey (α = 0.05).
diferencias significativas de acuerdo a la prueba HSD de Tukey, α=0.05). El día 18, para el
cual no se tenían resultados con 1% de S0, mostró diferencias significativas entre los ensayos
(F=66.881, gl=3, P˂0.05): S2%a- S3%b- S4%b- S6%c. De este modo, se observa que las
diferencias en las tasas de lixiviación de níquel en la fase intermedia del proceso, se
producen al aumentar el azufre elemental en un 2%. Por esta razón, se considera que 6% de
azufre elemental, sería la concentración óptima para A.thiooxidans ya que incrementa la
velocidad de solubilización del níquel.
La cinética de lixiviación del níquel presentó diferencias notables respecto al hierro, lo cual
es evidente en todos los ensayos realizados previamente. El níquel, a diferencia del hierro,
mostró un incremento exponencial en el tiempo. El comportamiento del hierro es muy
similar a las curvas de lixiviación obtenidas para lateritas ferruginosas, sometidas
previamente a altas temperaturas (Landers y Gilkes, 2007; Liu et al., 2009). Este proceso
genera un desorden estructural interno, que incrementa su susceptibilidad al ataque ácido
(Landers y Gilkes, 2007). Por esta razón, un porcentaje considerable del hierro presente en
la muestra debe encontrarse en coordinación octaédrica o débilmente adsorbido en la
superficie de los filosilicatos y anfíboles que la componen.
Debido a que los porcentajes de níquel y hierro extraídos no tienen una correlación lineal,
sus tasas de solubilización no son iguales, lo cual implica que se encuentran asociados a
diferentes fases minerales (Landers y Gilkes, 2007; MacCarthy et al., 2015; Quaicoe et al.,
2014). Como se ha mencionado anteriormente, el magnesio ejerce una fuerte influencia
sobre la cinética de lixiviación del níquel ya que su solubilización preferencial neutraliza el
ácido disponible y retrasa la liberación de níquel (Hunter et al., 2013). Adicionalmente, la
extracción de éste y otros iones altera la interface eléctrica entre la solución y el mineral, lo
cual también afecta la cinética de solubilización (Tartaj et al., 2000). En general la diversidad
en la composición de las lateritas y su particular mineralogía, genera diferencias en la
reactividad de sus minerales y consecuentemente en sus tasas de lixiviación (Hunter et al.,
2013; Liu et al., 2009).
Lo anterior se relaciona con lo propuesto por Dopson et al. (2014), quienes plantean que la
extrema tolerancia a metales en las acidófilas puede deberse en parte a la formación de
complejos entre los sulfatos (comúnmente abundantes en sus ambientes) con los iones
metálicos libres, impidiendo su entrada a la célula. Los otros mecanismos conocidos que le
confieren tolerancia son los potenciales electrostáticos de sus membranas citoplasmáticas,
que regulan su pH interno. Se han identificado diversos grupos de genes en A.thiooxidans,
relacionados con su resistencia a metales pesados como el arsénico, mercurio, cadmio y
101 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
cobre, sugiriendo el empleo de varios sistemas para lidiar con altas concentraciones de estos
iones (Zhang et al., 2016).
Los ensayos con pH 2, 1.7 y 1.4 presentaron cambios en la intensidad de algunas bandas,
los cuales también se registraron en los controles en menor medida. La pequeña banda en
forma de hombro en 3674 cm-1, desaparece con el tiempo de lixiviación. A esta banda se le
atribuye la vibración de tensión de los OH internos, coordinados con 3 cationes de Mg2+ en
las capas octaédricas (Scholtzová et al., 2003; Wilkins e Ito, 1967). Por esta razón, la
desaparición de la banda implica solubilización de magnesio del mineral, con
descomposición de la capa octaédrica. De manera similar a lo observado durante la
adaptación, la banda en 3647 cm-1 tiende a reducirse (Figura 4-12) debido a la extracción de
cationes como el níquel, magnesio, hierro, así como de grupos hidroxilo. Esta se considera
producto de las vibraciones de tensión de los OH internos, en coordinación con cationes
octaédricos, donde al menos 2 Mg2+ han sido reemplazados por Fe2+ o Ni2+ (Wilkins e Ito,
1967).
Ni-OH, se define más con el tiempo del proceso, lo cual puede tener relación con la
solubilización preferencial de magnesio y la permanencia de níquel en la estructura mineral
(Figura 4-12).
3674
713
3647
3627
3433
677
D0
430
461
1022
D6
D12
D21
D30
3900 3600 3300 3000 2700 2400 2100 1800 1650 1500 1350 1200 1050 900 750 600 450
1/cm
Figura 4-12: Cambios en el espectro FTIR de los ensayos con pH inicial 1.4 y 1% S0 (las
flechas indican cambio en las bandas).
La banda en 677 cm-1 tiende a reducirse, mientras que la banda en 690 cm-1 no presentó
cambios notables. Debido a que la primera es influenciada por la composición de las capas
octaédricas (Serna et al., 1979), indica solubilización de cationes presentes en ésta. La
frecuencia en 690 cm-1 tiende a permanecer ya que es una vibración asociada a las capas
103 Biolixiviación de níquel a partir de un saprolito garnierítico
usando dos cepas de Acidithiobacillus thiooxidans
713
796
777
677
D0
677
665
D6
D12
D21
D30
Figura 4-13: Cambios en el espectro FTIR del control de los ensayos con pH inicial 1.4 y
1% S0 (las flechas indican cambio en las bandas).
S0 2%
713
3681
778
3647
3627
670
3435 D0
3647
423
1079
1022
D15
D30
3900 3600 3300 3000 2700 2400 2100 1800 1650 1500 1350 1200 1050 900 750 600 450
1/cm
Figura 4-14: Cambios en el espectro FTIR de los ensayos con 2% S0 (las flechas indican
cambio en las bandas).
S0 3%
713
3681
778
3647
3627
670
3435
D0
423
1079
D15
1022
D30
3900 3600 3300 3000 2700 2400 2100 1800 1650 1500 1350 1200 1050 900 750 600 450
1/cm
S0 4%
713
D0
778
3681
670
3627
3647
3435
423
1079
1022
D15
D30
3900 3600 3300 3000 2700 2400 2100 1800 1650 1500 1350 1200 1050 900 750 600 450
1/cm
S0 6%
713
3681
778
D0
3647
3627
670
3435
423
1079
D15
1022
D30
3900 3600 3300 3000 2700 2400 2100 1800 1650 1500 1350 1200 1050 900 750 600 450
1/cm
Figura 4-17: Cambios en el espectro FTIR de los ensayos con 6% S0 (las flechas indican
cambio en las bandas).
Capítulo 4 106
La banda en 1079 cm-1 se define a medida que la frecuencia en 1022 cm-1 se reduce como
consecuencia de la descomposición de capas tetraédricas (Luo et al., 2009; Sufriadin et al.,
2011). Por otro lado, existe tendencia a la reducción en la banda en 778 cm-1, mientras la
banda en 796 cm-1 aumenta su intensidad. Debido a que esta última corresponde a una
absorción del sílice, esto implica re-precipitación de sílice amorfo por lixiviación de capas
tetraédricas (Liu et al., 2010).
solubilización de este metal, se relacionó más con la reportada en lateritas tipo limonita,
sugiriendo una asociación con fases minerales más refractarias. Sin embargo, este
comportamiento también se atribuye a las propiedades electrocinéticas de estos minerales,
los cuales requieren pH muy bajos para liberar el níquel.
Las concentraciones de ácido producidas por las cepas de A.thiooxidans en estos ensayos,
son las más altas con relación a los estudios revisados. Este comportamiento obedece a la
alta disponibilidad de azufre elemental y a la respuesta de la bacteria debido la descarga de
iones alcalinos en el medio.
Los resultados mostraron que la cinética de solubilización del hierro y el níquel también
aumenta con el incremento del porcentaje de azufre elemental. Con 6% S0 se extrajo hasta
un 91% del níquel, en comparación al 54% extraído con 1% de S0. Sin embargo, las
concentraciones de hierro y níquel lixiviadas después de 30 días, no presentaron diferencias
significativas entre los porcentajes de S0 de 3, 4 y 6%. Estos ensayos permitieron generar
una alta resistencia al níquel en las dos cepas utilizadas de A.thiooxidans, las cuales
mostraron una continua oxidación del azufre, así como la capacidad de crecer bajo
concentraciones de hasta 14.2 g/L de este metal, sin considerar las concentraciones de los
otros iones presentes en el medio.
un escalado. Por una parte, es necesario probar su utilidad con colas de laterita, que
corresponden a grandes volúmenes de residuos de minería que todavía contienen níquel
extraíble. Se pueden diseñar experimentos en dos pasos con el fin de maximizar las
concentraciones de ácido y reducir el tiempo del proceso.
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