El Imperio Inca
El Imperio Inca
El Imperio Inca
dio inicio al desarrollo de diversos factores de vida, como por ejemplo la agricultura,
tecnología, la estructura política, la arquitectura y sistemas de comunicación.
La tecnología agraria genero un gran desarrollo gracias sus técnicas complejas que eran
particularmente el resultado de sus experiencias, conocimientos y tradición de los
habitantes.
Las tecnologías agrícolas que ellos usaron fueron diversas, entre ellas se encuentran los
principales sistemas y procedimientos en el manejo de los recursos productivos como el
suelo, agua y plantas. Entre los principales técnicos tenemos:
LOS ANDENES
Los andenes o terrazas, son notables construcciones, cuyo objetivo es disponer de un
mayor número de tierras cultivables, ya que como es conocido, en muchos valles de la
sierra las áreas de cultivo son muy escasas, debido a la geografía existente.
FERTILIZANTES O ABONOS
Los abonos empleados fueron usados sobre todo para la producción de maíz. Un
primer abono radicaba en enterrar junto con los granos, pequeños peces como sardinas
o anchovetas. Este sistema estaba representado en los muros de los santuarios, donde
figuraba una planta de maíz germinando de unos pececitos .El segundo abono usado
era el estiércol de las aves marinas que anidaban en las islas del litoral también llamado
guano.
LOS CAMELLONES
Eran montículos de tierra que permitían almacenar y aprovechar mejor el agua en
lugares de frecuentes inundaciones a causa de las lluvias. Usaron el trazado de surcos
artificiales para dar protección a las plantas, facilitando el drenaje durante las lluvias,
inundaciones, riego, como fuentes de abono y, especialmente, para disminuir el frío
nocturno en las alturas, evitando de este modo las heladas que afectaban sus cultivos.
LAS COCHAS
Fue una técnica muy particular usada por los incas, estaban compuestos por varios
surcos que no eran más que hendiduras en la superficie de la tierra, el agua no podían
empozarse más de un día ya que los cultivos podía pudrirse.
HOYAS DE CULTIVO
Fue una técnica muy particular usada por los incas, estaban compuestos por varios
surcos que no eran más que hendiduras en la superficie de la tierra, el agua no podía
empozarse más de un día ya que los cultivos podía pudrirse.
CANALES DE RIEGO
La construcción de canales de riego captaba y trasladaban el agua de los ríos para regar
grandes extensiones de terreno que carecían de agua, dichas técnicas lograban un
exitoso desarrollo agrícola convirtiendo de terrenos totalmente improductivos en
terrenos fértiles y reproductivos.
A causa de la zona geografía que el agua sea un recurso natural escaso y de difícil
manejo. En épocas incaicas, estos problemas fueron enfrentados exitosamente,
creando una tecnología propia y original ligada a una fuerte organización que giraba en
torno al riego, logrando así un gran desarrollo agrícola. Entre las técnicas más usadas
por ellos se encuentran los canales de regadío, las canaletas, las acequias y los canales
de derivación. Los conocimientos hidráulicos -canales y bocatomas-, permitieron la
irrigación y el cultivo, especialmente del maíz.
También existen los Canales de riego subterráneos entre las características propias de
estos canales, están; que empiezan y terminan sobre la superficie, pero la mayor parte
de su recorrido conducen el agua por galerías o túneles subterráneos.
La arquitectura inca incluye algunas de las estructuras de piedra trabajadas con más fineza de
cualquier civilización antigua. Las construcciones incas casi siempre eran prácticas y agradables a la
vista. También eran notablemente uniformes en su diseño, ya que incluso las grandes estructuras
imperiales tenían un aspecto similar al de las construcciones más humildes, que solo se
diferenciaban de manera significativa por su escala mucho mayor y la calidad del acabado.
La dualidad, característica presente en muchas otras áreas, era particular en la arquitectura inca,
que normalmente incorporaba el paisaje natural y al mismo tiempo lograba dominarlo para crear
una mezcla de formas geométricas y naturales que solía ser espectacular.
Materiales
La piedra era el material predilecto y se trabajaba con precisión para producir una disposición
exacta de bloques entrelazados en los edificios más finos. La piedra era de tres tipos: caliza de
Yucay, pórfido verde de diorita de Sacsayhuamán y andesita negra. Cada bloque de piedra podía
pesar muchas toneladas y se extraían y moldeaban utilizando únicamente piedras más duras y
herramientas de bronce. Las marcas en los bloques de piedra indican que, para darles forma, se
solían golpear en vez de cortar. Los bloques se movían con cuerdas, troncos, palancas y rampas (en
algunos bloques todavía se pueden ver marcas que lo constatan) y algunas piedras todavía tienen
nodos que sobresalen de ellas o hendiduras que se utilizaban para ayudar a los trabajadores a
agarrar la piedra. El corte fino y la colocación de los bloques en la obra eran tan precisos que no se
necesitaba argamasa. Por último, se daba un acabado a la superficie con piedras de amolar y
arena.
El hecho de que las rocas fueran talladas en las canteras y luego trabajadas de nuevo en su destino
final está claramente indicado por los ejemplos inacabados que quedaban en las canteras y en
varias rutas hacia las obras. El meticuloso proceso de colocar, quitar, volver a cortar y volver a
colocar los bloques para que encajen con exactitud era lento, pero los experimentos han
demostrado que era mucho más rápido de lo que los estudiosos pensaban. Aun así, se habrían
necesitado muchos meses para producir un solo muro. Los bloques entrelazados y los muros
inclinados hacen que los edificios incas sean extremadamente resistentes, aunque no inmunes, a
los daños causados por los terremotos. Los 500 años de terremotos han hecho un daño
increíblemente leve a las estructuras incas que quedaron en su estado original.
En las estructuras más humildes se utilizaban piedras de campo no trabajadas y fijadas con
argamasa de barro, o utilizaban ladrillos de barro seco (adobe) en zonas con un clima más seco.
Ambos tipos de estructuras solían cubrirse con una capa de barro o yeso de arcilla y luego se
pintaban con colores brillantes. Las paredes de Tambo Colorado, por ejemplo, aún conservan
restos de pintura roja, negra, amarilla y blanca.
Los techos solían estar hechos de paja de hierbas o cañas colocadas sobre postes de madera o
caña. Los postes se ataban con cuerdas y se fijaban a los muros de piedra mediante clavijas de
piedra que sobresalían de ellos. Estas clavijas podían estar encajadas en la pared o estar talladas en
uno de los bloques, podían ser circulares o cuadradas, y a veces aparecen en las paredes interiores
para funcionar como ganchos, quizás para los revestimientos textiles de las paredes. A veces, la
parte superior del hastial tenía un anillo de piedra, para fijar el tejado. La inclinación de los tejados
era mayor en las zonas más lluviosas del imperio, a menudo de 60 grados.
Características
La gran mayoría de las construcciones incaicas eran rectangulares, tenían una sola entrada y
estaban compuestas por una sola habitación, ya que las paredes divisorias no eran comunes en el
diseño inca. Hay algunos ejemplos raros de estructuras rectangulares largas de varias puertas e
incluso construcciones que tenían forma circular o de U, pero la norma era que las estructuras
fueran de paredes rectas. La mayoría de las construcciones tenían una sola planta, pero hay
algunas estructuras con dos, especialmente las de las laderas de las montañas y las estructuras
imperiales más impresionantes de la capital, Cuzco, donde hay algunas construcciones de tres
plantas.
Los muros exteriores de los incas suelen inclinarse hacia el interior a medida que se elevan
(normalmente unos 5 grados), lo que da al edificio una forma trapezoidal distintiva. La forma
trapezoidal es más común en el norte y el centro del imperio, y uno de sus efectos ópticos es hacer
que los muros parezcan más altos y gruesos de lo que realmente son. El diseño trapezoidal se
repite en portales, ventanas y hornacinas interiores. Los portales y las ventanas suelen tener
también jambas dobles, y los primeros suelen estar rematados por un gran dintel de piedra simple.
La arquitectura de la capital y de las construcciones imperiales repartidas por todo el imperio era
notablemente similar en su diseño a otras estructuras más mundanas. Por supuesto, a menudo
eran mucho más grandes y la calidad de su cantería era mucho mayor. También podían ser más
ambiciosas en su diseño, con paredes curvas, y podían estar decoradas de forma más lujosa, por
ejemplo, con láminas de oro, como en el recinto sagrado de Coricancha en Cuzco, cuya sección de
pared curva sobrevive parcialmente hoy en día. Esta dualidad de edificios de clase baja y alta,
iguales y a la vez diferentes, era un rasgo muy característico de la cultura inca en general.
Las construcciones incas pueden haber sido uniformes en sus principios básicos de diseño y puede
parecer que carezcan de individualidad, pero los nombres de varios arquitectos han perdurado en
el registro histórico (como Huallpa Rimachi Inca, Inca Maricanhi, Acahuana, Sinchi Roca y Calla
Cunchuy), lo que sugiere que había cierta individualidad permitida en el diseño arquitectónico.
Estructuras
Los edificios rectangulares podían agruparse de a tres (o más) y disponerse en torno a un patio
abierto pero amurallado, que es quizás la disposición más común de las construcciones incaicas.
Este minicomplejo se conoce como kancha, donde había centros administrativos, talleres, templos,
alojamientos o una combinación de ellos. Las construcciones muy grandes se conocen como
kallanka, suelen tener varias puertas y estar orientadas hacia un gran espacio abierto, a menudo
(de nuevo) de forma trapezoidal. Probablemente se utilizaban para reuniones públicas y como
alojamiento para los representantes de la administración inca, y eran claros símbolos públicos del
control imperial. Los palacios tenían un diseño similar al de las construcciones más pequeñas, pero
a mayor escala, con una cantería más fina y a menudo amuralladas para restringir el acceso y la
visión de los personajes reales.
Cada asentamiento inca importante tenía un ushnu que simbolizaba el control imperial inca en
todo el imperio. El ushnu, situado en un lado de la plaza principal, era un tipo de plataforma de
observación para las procesiones, las ceremonias importantes patrocinadas por el estado y los
procedimientos judiciales. Otra característica de las ciudades eran las puertas, que a menudo
constituían entradas monumentales a las ciudades. Una de las más impresionantes debe ser la
puerta principal de Quispiguanca, con su torre de dos pisos y su triple jamba.
Los colca (o Qolqa) eran almacenes que a menudo se construían en grupos o bloques. Podían ser
redondos o rectangulares, pero con una sola habitación. Suelen estar situados en las laderas de las
montañas, lo que les proporcionaba una buena ventilación y sombra, por lo que conservaban
mejor su contenido perecedero. El subsuelo de grava y los canales de drenaje eran ayudas
adicionales para mantener la atmósfera interior seca y permitían el almacenamiento de
mercancías como el grano y las patatas durante dos años o más.
Los asentamientos incas rara vez estaban fortificados, ya que la guerra se llevaba a cabo
generalmente a través de batallas campales y la conformidad de los pueblos conquistados se
aseguraba a través de medios políticos, económicos y culturales más que militares, y la imposición
de la arquitectura imperial era una parte importante del proceso colonial. Sin embargo, hay
excepciones. Algunos han considerado Machu Picchu como un sitio fortificado, mientras que los
últimos asentamientos contra los españoles, como Ollantaytambo, estaban fortificados con
grandes muros de terrazas de bloques.
En las terrazas de las laderas, al igual que en los edificios, se utilizaban rocas sueltas fijadas con
mortero de barro o grandes bloques finamente cortados. Podían ampliar la tierra disponible para
el cultivo y proporcionar mejor agua y drenaje para las cosechas, pero a veces también eran
meramente decorativas y se plantaban con flores. Las terrazas de Pisac y Ollantaytambo están
entre las más impresionantes y su diseño tiene un efecto estético definido y planificado. Incluso los
afloramientos rocosos fueron tallados en formas funcionales por los incas. Por ejemplo, en
Sacsayhuamán, se talló una estructura con forma de trono con escalones en una colina de piedra.
Las secciones de afloramientos rocosos más pequeños se podían cortar en formas geométricas,
diseños como zigzags o rectángulos, cuyo propósito exacto era desconocido. Estas obras también
aprovechaban el juego de luces y sombras para dar una dimensión geométrica adicional al paisaje
natural. Por ejemplo, los muros en zigzag de Sacsayhuamán crean sombras triangulares que
parecen reflejar las sombras creadas por los picos de las montañas del fondo. También se
construyeron habitaciones en hendiduras naturales de la roca, una de las más famosas es el
templo-santuario del dios del sol Inti, situado bajo la torre del Torreón en Machu Picchu.
Entorno
El urbanismo era un punto importante para los arquitectos incas. Los caminos principales a
menudo atravesaban las ciudades en ángulo, Huánuco Pampa es un buen ejemplo. Zonas enteras
de una ciudad se construían alineadas con la plaza central y su ushnu, y las residencias reales
solían estar orientadas hacia la salida del sol. En general, los lados largos de los edificios incas
solían ser paralelos a las plazas. Los bloques de edificios nunca eran del todo cuadrados y se
cruzaban con calles estrechas y rectas construidas solo para los peatones. A veces, incluso la
ciudad entera tenía una forma planificada, el ejemplo más famoso fue la intención de que el
trazado de Cuzco creara la figura de un puma visto desde arriba.
Otra consideración importante para los arquitectos incas era la colocación de las construcciones,
las puertas y las ventanas de manera que las vistas se vieran de la mejor manera posible y que los
cuerpos y los eventos astronómicos (ciertos astros o el sol durante los solsticios, por ejemplo)
fueran visibles a través de estos portales. Es raro que los portales de una construcción inca no
tengan en cuenta el entorno en el que fueron construidos.
Por otra parte, los arquitectos incas también intentaban a menudo que sus estructuras se
integraran armoniosamente en el paisaje circundante. Tal vez el ejemplo más famoso de esto sea
Machu Picchu, que sigue los contornos de la ladera e incluso incorpora características naturales,
como grandes rocas, en las propias construcciones. A veces, el contorno de una piedra sagrada o
de una construcción se diseñaba incluso para imitar los contornos de un elemento natural, como
una montaña lejana. Otros ejemplos célebres de muros que incorporan perfectamente las rocas
subyacentes son el pabellón de caza de Tambomachay y la fortaleza sagrada de Sacsayhuamán en
Cuzco. El resultado de esta integración es una mezcla en cierto modo armoniosa de lo orgánico y lo
geométrico, y se transmitió un claro mensaje de que, al igual que los gobernantes pueden dominar
a un pueblo sometido, también la humanidad puede respetar, pero en última instancia dominar, la
naturaleza.
Preguntas y respuestas
La arquitectura de los incas creaba edificios prácticos, de buen aspecto y de diseño uniforme.
Construyeron desde casas residenciales hasta grandes templos.
Una característica única de la arquitectura incaica es que, por lo general, incorporaba el paisaje
natural y, al mismo tiempo, lograba dominarlo para crear una mezcla a menudo espectacular de
formas geométricas y naturales.
Entre los ejemplos de arquitectura inca que se conservan se encuentran el templo de Coricancha y
la fortaleza de Sacsayhuaman en Cusco, los edificios residenciales de Machu Picchu y el extenso
sistema vial inca.