Tema I. Derecho Procesal
Tema I. Derecho Procesal
Tema I. Derecho Procesal
DERECHO PROCESAL
El derecho procesal es una rama del derecho público que contempla el conjunto
de normas, códigos y formas del proceso judicial, es decir, que ordena y regula los
requisitos, efectos y métodos en que el Estado imparte la justicia.
El derecho procesal contempla los mecanismos, modos y procedimientos que
estipula la ley para resolver correcta y formalmente los litigios planteados por las
partes en disputa, mediante un método y una decisión que se atengan a los
hechos afirmados y probados y a lo contemplado por el derecho aplicable.
En general, es una rama del Derecho Público que abarca todo un conjunto de
normas que van a regular la actividad jurisdiccional del Estado; con relación a sus
órganos y formas de aplicación de las leyes en concordancia con la naturaleza de
las causas.
El proceso judicial, es una serie de actos que se desenvuelven progresivamente,
con el objeto de resolver, mediante un juicio el conflicto sometido a su decisión.
Por tanto puede considerarse el debido proceso como un continente, que guarda
en su núcleo, un conjunto de derechos que implican de suyo, distintas
obligaciones de protección por parte del Estado.
En el mismo sentido Rafael Tineo[6] afirma que el debido proceso tiene relación
directa de complementariedad y dependencia mutua con la democracia.
Permitiendo sostener que no puede haber Estado de Derecho y, por consiguiente,
orden constitucional. Allí donde no exista la garantía al debido proceso.
“Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y
dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e
imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier
acusación penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y
obligaciones de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.”[7]
Así las cosas, debe concluirse que el derecho al debido proceso no solo tiene
protección constitucional, sino que forma parte de los compromisos asumidos por
la República Bolivariana de Venezuela ante instancias internacionales.
El derecho procesal es una rama del derecho que regula los métodos de
resolución de conflicto de relevancia jurídica que se llama Proceso, en donde un
tercero imparcial resuelve un conflicto entre dos, que están en un plano de
igualdad, previo el ejercicio de la acción.
Autotutela
Autocomposición
Heterocomposición
Esta idea de ampliar el sentido del derecho procesal fue planteada por un
procesalista español, ALCALÁ- ZAMORA, quien escribió un libro titulado
«proceso, autocomposición y autodefensa», en el cual expone que el derecho
Procesal es mucho más amplio y que es necesario hablar no solo del proceso,
también hay que incluir la autodefensa y la autocomposición.
CLASIFICACIÓN
Desde el momento en que el Derecho Procesal comprende el estudio del órgano
judicial de sus atribuciones y del procedimiento, fácil es advertir que permite ser
clasificado en dos grandes ramas:
– Derecho Procesal Orgánico
– Derecho Procesal Funcional
El Derecho Procesal Orgánico se preocupa de todo lo relacionado con la
organización y las atribuciones de los tribunales de justicia.
El Derecho Procesal Funcional reglamenta, en cambio, la forma o manera como
los tribunales desempeñan sus atribuciones. Es decir los procedimientos.
El Derecho Procesal Funcional, a su vez, permite ser subclasificado en:
– Derecho Procesal Civil
– Derecho Procesal Penal
Ello, según si en el proceso respectivo se pretende la actuación de una ley civil o
de una penal.
Además, podemos encontrar en otras ramas del derecho aspectos de orden
procesal y así se hablará de Derecho Procesal Laboral, Derecho Procesal
Tributario, etc.
1) Es de derecho público.
2) Gran parte de las normas procesales son de orden público.
3) Es instrumental ya que es el instrumento o medio que permite obtener la
observancia del derecho material.
4) Es un derecho formal pues regula las formas de las actividades que se
deben realizar para obtener del Estado la garantía del goce de los bienes
jurídicos.
5) Es un derecho autónomo porque tiene un régimen jurídico propio,
independiente del derecho material que pretende amparar. A esta
autonomía se llegó luego de una evolución de las antiguas concepciones
privatistas del derecho procesal.
Jurisdicción
Incluido aquél que carezca de las más elementales nociones de derecho procesal
se da cuenta por la sola observación empírica, de que los jueces, cuando son
llamados a juzgar una controversia, desarrollan una actividad típica, dotada de
caracteres propios y fines específicos, que se diferencia de otro tipo de actividades
ejercidas en la sociedad por el resto de profesionales o por otros funcionarios públicos.
Aún sin ser jurista, se notará a diferencia entre la actividad que ejerce un abogado, y
un juez, o un alcalde. Basta echar un vistazo a la cultura común audiovisual,
especialmente la del cine estadounidense para notar la diferencia en la labor.
Ésta actividad ejercidas por los jueces, en nombre del estado, es
la "Jurisdicción" para lo cual, si queremos entender el derecho procesal, deberemos
considerar los caracteres y fines de las actividades y actos jurisdiccionales hechos por
los jueces en ejercicio de la misma.
Acción
Proceso
Para Carnelutti "La jurisdicción y la acción se ponen en contacto, y se unen a través
del proceso" El cual conforma el tercer argumento a estudiar para la comprensión del
derecho procesal.
Previamente a que el juez, esté en condiciones de juzgar sobre el tema propuesto a
su investigación, es necesario, por parte suya, y de aquellos que solicitan su juicio, el
cumplimiento de una serie de actividades preparatorias que se sucedan
ordenadamente, para dar a conocer al juez en que consiste el problema que debe
examinar, y proporcionarle la información necesaria para resolverlo según justicia.
Ésta serie de actividades que se suceden en un orden preestablecido, procediendo,
como hacia su ultima meta, hacia el acto jurisdiccional , constituyen el proceso, el cual
aparece conceptualmente como una unidad, en vista de éste único fin que torna todo
su desarrollo, y que constituye su inclusión normal.