Topinambur Estudio
Topinambur Estudio
Topinambur Estudio
Introducción
Para la producción agrícola orgánica, una condición ideal es que el cultivo a desarrollar sea
rústico, poco exigente en nutrientes y agua, es decir, tolerante a suelos con baja fertilidad
y al déficit hídrico. Además, es deseable que sea poco susceptible a plagas y enfermedades.
El topinambur, además de cumplir con lo anterior al ser una planta eficiente en la captación
de nutrientes y en el uso del agua, compite muy bien con diversas malezas ya que crece
rápidamente, logrando impedir su emergencia y proliferación. Por otra parte, se adapta a
diversos climas, siendo moderadamente resistente a las heladas.
El topinambur (Helianthus tuberosus L.) es una planta herbácea perenne, pero que se puede
cultivar como anual. Pertenece a la familia Asteraceae y está emparentada con el girasol.
Puede alcanzar hasta 4 metros de altura. Posee tallos ramificados en la parte aérea, un
sistema de raíces muy fibroso, flores amarillas y produce tallos subterráneos (rizomas y
tubérculos) muy ricos en carbohidratos.
Como cultivo anual, generalmente se siembra en primavera temprana, época en que brota
y emerge, desarrollando luego una gran estructura aérea con varios tallos y ramificaciones.
Finalmente, tuberiza y la parte aérea muere. Se recomienda realizar la cosecha de
tubérculos después de la primera helada, durante la senescencia de la planta. El
rendimiento de tubérculos es alto, de 30 a 100 toneladas por hectárea, llegando incluso a
130 en condiciones óptimas de manejo.
Los principales usos del topinambur son: forrajero, hortícola e industrial para extracción de
inulina y producción de etanol. Podría considerarse un alimento funcional debido a su alto
contenido de inulina (16 a 20 % del peso fresco del tubérculo).
Los beneficios que se pueden obtener del cultivo del topinambur son múltiples:
El cultivo se ha realizado a baja escala, como uno más en la planificación de una parcela
diversificada bajo manejo agroecológico.
Conclusiones
Principio al que
Práctica de Manejo contribuyen
1 2 3 4 5 6
Compostaje X X
Cultivos de cobertura/abonos verdes X X X X X X
Mulch X X X
Rotación de cultivos X X X X
Pesticidas microbianos/botánicos X
Flores insectarias X X X
Cercos vivos X X
Policultivos X X X X
Sistemas agroforestales X X X X X X
Integración de cultivos y animales X X X X X X
Integración de cultivos y ganado X X X X X
*Los números corresponden a los principios enumerados en la tabla.
Recomendaciones para el diseño del cultivo orgánico de topinambur
a. Densidad de plantación
Por lo anterior, se recomiendan densidades de entre 20.000 y 50.000 plantas por hectárea.
Considerando las condiciones de suelo, agua y clima de la Región de la Araucanía, una
densidad apropiada es 20.000 plantas por hectárea, con un marco de plantación de 1 x 0,5
m.
b. Incremento de la biodiversidad
• Zonas con plantas trampa y/o repelentes. En sectores aledaños o colindantes al cultivo
de topinambur, se recomienda plantar ruda, artemisa y/o ajenjo como repelentes de
insectos dañinos y atractores de enemigos naturales de posibles insectos plaga.
Además, en la cabecera de cada hilera del cultivo se pueden establecer cebollas y/o
ajos, especies que también sirven como repelentes.
En cultivos orgánicos, el control biológico constituye uno de los métodos más importantes,
tanto para el manejo de plagas como de enfermedades. En el control de malezas, también
se han utilizado insectos como medios de control, además de animales domésticos. Sin
embargo, la utilización de insectos se restringe a pocos ejemplos a nivel internacional.
Con relación a las malezas, es importante considerar que su presencia en el predio puede
generar interesantes beneficios para el suelo, la biodiversidad y los cultivos:
Entre las plagas potenciales del topinambur se consideraron cinco insectos que ya son
plagas del girasol (Helianthus annuus), planta que está emparentada con el topinambur. Los
insectos son:
Entre las principales enfermedades potenciales del topinambur se consideraron: Virus del
Mosaico del Tabaco (TMV) y los hongos oídio, mildiú y roya negra.
• Desmalezado sobre las hileras del cultivo: Utilizar un “raspador” manual, ya que es
mejor que el azadón (arranca las malezas de raíz y no las corta).
• Desmalezado entre las hileras del cultivo: Pasar una máquina con escardillo. Si no se
dispone de la máquina, aporcar la entre hilera (pasillos) con bueyes (similar al aporcado
de la papa) para remover o enterrar las malezas pequeñas restantes.
Jornada 4
Manejo orgánico del suelo, agua y fertilización en el cultivo de topinambur
El suelo es un recurso natural renovable a muy largo plazo y uno de los pilares que sustentan
la viabilidad de la producción agropecuaria, los rendimientos y finalmente los ingresos de
los agricultores(as).
En la siguiente figura, se representan los principales factores que determinan la calidad del
suelo y su productividad.
La calidad del suelo depende de factores biológicos, físicos y químicos. Con relación a los
factores biológicos, el suelo está constituido por macro/meso fauna y microorganismos
(bacterias, hongos, etc.), responsables de la descomposición y transformación de los restos
vegetales y animales en minerales que sirven de alimento para las plantas. Por otra parte,
propiedades físicas del suelo como la profundidad, la estructura, el tamaño de las partículas
(textura), la porosidad (aire) y la capacidad de retención de agua son fundamentales para
el desarrollo de los cultivos.
Una forma de influir en todos los factores de calidad o fertilidad del suelo es incorporar
materia orgánica, una de sus propiedades químicas más importantes. La materia orgánica
cumple diversas funciones dentro del suelo:
Para fertilizar de forma apropiada, es importante parcializar las dosis de aplicación en los
momentos de mayor demanda del cultivo, y considerar siempre los aportes de nutrientes
que pueda entregar el suelo, a fin de evitar una “sobrefertilización”.
La calidad del riego se basa en tres aspectos: la uniformidad de distribución del agua en el
terreno, la eficiencia del riego y la eficiencia de uso del agua. Para optimizar estos aspectos,
es necesario considerar la demanda hídrica de cada cultivo, la pluviometría de la zona
(cuánto llueve), las características del suelo y el sistema de riego a utilizar.
Entre los biofertilizantes más utilizados destacan los tés de compost, humus y bokashi, que
además de poder ser aplicados al suelo a través del sistema de riego, poseen las siguientes
ventajas:
b. Infusiones. Se sumergen en agua hirviendo las partes tiernas de las plantas para extraer
sus sustancias activas.
c. Decocciones. Se hierven por no más de 30 minutos las partes duras de las plantas (hojas,
corteza de árboles, raíces, semillas, cáscaras, etc.) para extraer sus sustancias activas.
Jornada 6
Requisitos organizacionales para la certificación orgánica participativa
En Chile, para que un grupo de agricultores/as como la Cooperativa Gran Lonko pueda
certificar sus productos como orgánicos (topinambur y otros productos derivados), es
necesario que conformen una “Organización de Agricultores Ecológicos”.
• Se controlan de manera interna y son inspeccionadas al menos una vez al año por el
SAG, tanto las sedes como sus integrantes
• Las OAE registradas en el SAG se regulan mediante un sistema de control interno que
da garantías del cumplimiento de la Normativa Técnica chilena.
Para inscribirse en el Registro del SAG, una organización debe cumplir los siguientes
requisitos:
Una vez aceptada en el Registro Nacional de OAE, la organización deberá cumplir con:
Todos los alimentos orgánicos para ser comercializados como tales deben pasar por un
proceso de certificación que les otorgue esa condición, a través de un Sello de garantía a
cargo del Servicio Agrícola Ganadero (SAG).
Mediante el uso de códigos de barra, se puede realizar un seguimiento desde el origen hasta
los pasos finales de un producto determinado, a lo largo de toda la cadena de elaboración
y de comercialización.
La trazabilidad permite:
• Es una norma de adscripción voluntaria, pero obligatoria para los participantes del
Sistema
• Regula el uso de un Sello Oficial para los productos certificados
• Define al SAG como autoridad competente de control
• Identifica a las Organizaciones de Agricultores Ecológicos
• Las entidades de certificación (organismos de certificación y OAE) deben estar inscritas
en un Registro del SAG
• Define sanciones a los operadores del Sistema si no cumplen con la normativa
La Ley N°20.089 contiene la Norma Técnica DS N°2/2016 que define los ámbitos de su
alcance:
Por otra parte, para la producción agrícola orgánica, la normativa contempla los siguientes
aspectos:
• Zona de amortiguamiento
• Plan de Manejo Orgánico predial (PMO)
• Maquinaria y almacenamiento de insumos
• Productos Orgánicos en Transición
• Origen de semillas y material de propagación
• Riego
• Manejo de la fertilidad del suelo
• Manejo de plagas y enfermedades
Los circuitos cortos son una forma de comercio basada en la venta directa de productos
frescos o de temporada sin intermediarios (o reduciéndolos al mínimo) entre productores
y consumidores.
Algunos aspectos que deben considerar las Organizaciones de Agricultores Ecológicos (OAE)
para comercializar productos orgánicos son:
• El costo de la certificación entregada directamente por el SAG es mucho más bajo que
el de la certificación por terceros
• Vender a través de circuitos cortos implica una relación directa con el consumidor final,
al mismo tiempo que facilita la gestión financiera y operativa
En general, los productores orgánicos podrían enfrentar las siguientes limitantes para la
comercialización de este tipo de alimentos:
• Las principales ferias orgánicas se ubican en Santiago de manera periódica, con una alta
afluencia de público
• A nivel local, la instalación de ferias especializadas es muy esporádica, lo que los obliga
a viajar a Santiago asumiendo los costos que ello significa o a vender de manera local
• La labor como agricultores les impide ocupar días enteros en comercializar sus
productos, especialmente si están lejos de los lugares
• Las tiendas que se han mantenido son subsidiadas por los propios agricultores (el local
pertenece a alguien del grupo, la gestión y atención a público es generalmente trabajo
voluntario, etc.)
• Los productos que se venden al retail deben venir envasados (para evitar contaminación
cruzada), lo que implica contar con un packing certificado
• Requieren iniciación de actividades. Con frecuencia los agricultores de las OAE no tienen
iniciación de actividades, por lo que no pueden formalizar sus ventas al retail
• Deben dar cumplimiento a una serie de normativas sanitarias y tener los medios que lo
verifiquen, de acuerdo con el producto a comercializar
• El pago de los supermercados es a 30 días, lo que dificulta el manejo de caja del negocio
Por otra parte, los consumidores orgánicos deben superar las siguientes barreras para
acceder a una mayor diversidad de productos orgánicos:
• El proceso de compra orgánica puede ser más complejo y lento (dispersión de los
productos en distintos puntos de venta), generando el hábito de comprar orgánicos y
no orgánicos en las rutinas diarias
Topinambur en fresco X X X X X X X
Harina de topinambur X X X X X X
Chips horneados X X X X X
Topinambur en conserva X X X X X
Harina de inulina X X