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Fractura

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FRACTURA DE FÉMUR

¿Qué es la fractura epifisiaria expuesta de fémur?


¿Qué es una fractura?
Una fractura es la ruptura de un hueso. Las fracturas se clasifican según su gravedad, su
forma o la localización de su trazo, o incluso en atención al médico que las describió por
primera vez.
¿Causas de las fracturas?

● Caída desde una altura

● Accidentes automovilísticos

● Golpe directo

● Fuerzas repetitivas, como las que se presentan cuando una persona corre, pueden
ocasionar fracturas por estrés en los pies, los tobillos, la tibia o la cadera.

La fractura del extremo distal del fémur es una lesión traumática importante que deja con
frecuencia como secuela deformación, inestabilidad, limitación del movimiento y alteración
degenerativa. Se localiza en los 9 cm distales del fémur (o en un cuadrado cuyo lado tiene
el mismo largo que la parte más ancha de la epífisis.
Esta fractura se presenta en niños, adul-tos jóvenes o ancianos y se produce por un
traumatismo en hueso normal o patológico. Debe ser diferenciada puesto que tiene un
mecanismo de producción, una fisiopatología, calidad ósea, lesiones asociadas, tratamiento
y pronóstico diferente.
Otros tipos de fracturas
Una fractura es la ruptura de un hueso. Existen varios tipos de fractura, que se pueden
clasificar atendiendo a los siguientes factores: estado de la piel, localización de la fractura
en el propio hueso, trazo de fractura, tipo de desviación de los fragmentos y mecanismos de
acción del agente traumático.

● Fractura por estrés: consiste en una serie de fracturas microscópicas que se


presentan sin signos de ninguna otra lesión tisular. En los adultos sanos, las
fracturas por estrés se producen a raíz de actividades repetitivas y extenuantes tales
como correr, saltar o bailar. Estas fracturas son muy dolorosas y también se
producen como consecuencia de procesos patológicos que interfieren en la
calcificación ósea normal como, por ejemplo, la osteoporosis. Alrededor de 25% de
las fracturas por estrés comprometen la tibia. Aunque mediante radiografías
comunes muchas veces no puede apreciarse la presencia de una fractura por estrés,
éstas se advierten claramente mediante el centello grama ósea.

● Según el estado de la piel:


- Fracturas cerradas: que también se conoce como fractura compuesta) Son
aquellas en las que la fractura no comunica con el exterior, ya que la piel no ha
sido dañada.
- Fracturas abiertas: (que también se conoce como fractura simple) Son aquellas
en las que se puede observar el hueso fracturado a simple vista, es decir, existe
una herida que deja los fragmentos óseos al descubierto. Unas veces, el propio
traumatismo lesiona la piel y los tejidos subyacentes antes de llegar al hueso;
otras, el hueso fracturado actúa desde dentro, desgarrando los tejidos y la piel de
modo que la fractura queda en contacto con el exterior.

● Según su localización:
Los huesos largos se pueden dividir anatómicamente en tres partes principales: la
diáfisis, las epífisis y las metáfisis. La diáfisis es la parte más extensa del hueso, que
corresponde a su zona media.
Las epífisis son los dos extremos, más gruesos, en los que se encuentran las superficies
articulares del hueso. En ellas se insertan gran cantidad de ligamentos y tendones, que
refuerzan la articulación. Las metáfisis son unas pequeñas zonas rectangulares
comprendidas entre las epífisis y la diáfisis. Sobre ellas se encuentra el cartílago de
crecimiento de los niños.
Así, las fracturas pueden ser, según su localización:
1. Epifisarias (localizadas en las epífisis). Si afectan a la superficie articular, se
denominan fracturas articulares y, si aquélla no se ve afectada por el trazo de fractura,
se denominan extraarticulares.
2. Cuando la fractura epifisaria se produce en un niño e involucra al cartílago de
crecimiento, recibe el nombre de epifisiólisis.
3. Diafisarias (localizadas en la diáfisis, son extremos gruesos, en los que se encuentran
las articulaciones). Pueden afectar a los tercios superior, medio o inferior.
4. Metafisarias (localizadas en la metáfisis). Pueden afectar a las metáfisis superior o
inferior del hueso.
● Según el trazo de la fractura:

Nombre Imagen
Transversal: la línea de fractura es perpendicular al eje
longitudinal del hueso.

Oblicuas: la línea de fractura forma un ángulo mayor o


menor de 90 grados con el eje longitudinal del hueso.

Longitudinales: la línea de fractura sigue el eje


longitudinal del hueso.
En <<ala de mariposa>> o anguladas: existen dos líneas
de fractura oblicuas, que forman ángulo entre si y delimitan
un fragmento de forma triangular.

Conminutas o triturado: hay múltiples líneas de fractura,


con formación de numerosos fragmentos óseos.

En los niños, debido a la gran elasticidad de sus huesos, se producen dos tipos especiales
de fractura:

Incurvación diafisaria: no se evidencia ninguna fractura


lineal, ya que lo que se ha producido es un aplastamiento
de las pequeñas trabéculas óseas que conforman el hueso,
dado resultado una incurvación de la diálisis de este.
En <<tallo verde>>: Es una fractura incompleta, en la que
uno de los lados del hueso está roto mientras que el otro
está doblado, de un modo parecido a aquel en que una rama
inmadura (verde) se quiebra de un lado mientras que del
otro está indemne, pero doblado; sólo se presenta en los
niños.
En estos se observa una línea de fractura que no llega a
afectar todo el espesor del hueso.

Desplazamiento lateral: las dos superficies


correspondientes a la línea de fractura no quedan
confrontadas entre sí, por haberse desplazado lateralmente
uno o los dos fragmentos.

Acabaladas: uno de los fragmentos queda situado sobre el


otro, con lo cual se produce un acortamiento del hueso
afectado.
Engranadas: uno de los fragmentos queda empotrado en
el otro.

Síntomas
● Dolor: Es el síntoma capital. Suele localizarse sobre el punto de fractura. Aumenta
de forma notable al menor intento de movilizar el miembro afectado y al ejercer
presión, aunque sea muy leve, sobre la zona.
● Impotencia funcional: Es la incapacidad de llevar a cabo las actividades en las que
normalmente interviene el hueso, a consecuencia tanto de la propia fractura como
del dolor que ésta origina.
● Deformidad: La deformación del miembro afectado depende del tipo de fractura.
Algunas fracturas producen deformidades características cuya observación basta a
los expertos para saber qué hueso está fracturado y por dónde.
● Hematoma: Se produce por la lesión de los vasos que irrigan el hueso y de los
tejidos adyacentes.
● Fiebre: En muchas ocasiones, sobre todo en fracturas importantes y en personas
jóvenes, aparece fiebre después de una fractura sin que exista infección alguna.
También puede aparecer fiebre pasados unos días, pero ésta es debida, si no hay
infección, a la reabsorción normal del hematoma.
● Entumecimiento y cosquilleo

● Ruptura de la piel con el hueso que protruye

Diagnostico (Dx)

● Radiografías.

● Imágenes por Resonancia Magnética nuclear.

Complicaciones inmediatas

● Shock traumático.

● Lesiones neurológicas.

● Lesiones vasculares.

● Fractura expuesta.

Complicaciones tardías

● Enfermedad tromboembólica.

● Retracción isquémica de Volkman.

● Atrofia ósea aguda de Südeck.

● Necrosis ósea avascular.

● Alteraciones de la consolidación

Pasos de la consolidación de la fractura de Fémur

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