Tarea 500 2024
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En latín conocimiento se
dice scientia y ciencia llegó a ser el nombre de la clase de conocimiento más respetable. ¿Qué distingue al
conocimiento de la superstición, la ideología o la pseudociencia? La Iglesia Católica excomulgó a los copernicanos,
el Partido Comunista persiguió a los mendelianos por entender que sus doctrinas eran pseudocientíficas. La
demarcación entre ciencia y pseudociencia no es un mero problema de filosofía de salón; tiene una importancia social y
política vital.
Muchos filósofos han intentado solucionar el problema de la demarcación en los términos siguientes: un enunciado
constituye conocimiento si cree en él, con suficiente convicción, un número suficientemente elevado de personas.
Pero la historia del pensamiento muestra que muchas personas han sido convencidos creyentes de nociones absurdas. Si
el vigor de la creencia fuera un distintivo del conocimiento tendríamos que considerar como parte de ese conocimiento a
muchas historias sobre demonios, ángeles, diablos, cielos e infiernos. Por otra parte, los científicos son muy escépticos
incluso con respecto a sus mejores teorías. La de Newton es la teoría más poderosa que la ciencia ha producido nunca,
pero el mismo Newton nunca creyó que los cuerpos se atrajeran entre sí a distancia. Por tanto, ningún grado de
convencimiento con relación a ciertas creencias
las convierte en conocimiento. Realmente lo que caracteriza a la conducta científica es un cierto escepticismo incluso con
relación a nuestras teorías más estimadas. La profesión de fe ciega en una teoría no es una virtud intelectual sino un
crimen intelectual. De este modo un enunciado puede ser pseudocientífico aunque sea eminentemente plausible y
aunque todo el mundo lo crea, o puede ser científicamente valioso aunque sea increíble y nadie crea en él. Una teoría
puede tener un valor científico incluso eminente, aunque nadie la comprenda y, aún menos, crea en ella.
El valor cognoscitivo de una teoría nada tiene que ver con su influencia psicológica sobre las mentes humanas. Creencias,
convicciones, comprensiones... son estados de la mente humana. Pero el valor científico y objetivo de una teoría es
independiente de la mente humana que la crea o la comprende. Su valor científico depende solamente del apoyo
objetivo que prestan los hechos a esa conjetura.
11. Es incompatible con lo sostenido por el autor del texto aseverar que la aceptación mayoritaria de un
tipo particular de conocimiento
A) Es posible que evidencie un influjo de tipo psicológico.
B) Abre la posibilidad de que este sea pseudocientífico.
C) Se relaciona muchas veces con creencias absurdas.
D) Determina de forma irrecusable su estatus científico.
E) Es definible como parte de un conjunto de creencias.
14. Si la creencia en los ángeles fuera aceptada por un conjunto minúsculo de personas,
A) Tendría que ser considerada como un conocimiento cimentado de forma sólida.
B) Permitiría la inclusión de esta como un ejemplo claro de escepticismo científico.
C) Al carecer de un apoyo objetivo en los hechos, seguiría siendo pseudocientífica.
D) Sería menester considerarla científica pues dejaría de ser una creencia absurda.
E) El autor del texto la soslayaría como ejemplo de consideraciones inverosímiles.
El cielo aparece a la vista como una cúpula más o menos plana, en la cual están clavados los astros. Esa cúpula, empero,
da vuelta, en el curso de un día, alrededor de un eje, cuya posición en el cielo está determinada por la estrella polar.
Mientras esta apariencia pasó por realidad, era superflua la traslación de la geometría de la Tierra al espacio cósmico, y de
hecho no se verificó; pues no existen longitudes, distancias que pudieran medirse como unidades terrestres, y para
designar las posiciones de los astros bastaba con indicar el ángulo aparente que la mirada del observador, dirigida
hacia el astro, hace con el horizonte y otro plano elegido convenientemente. En este estadio del conocimiento, la
superficie de la Tierra es la base inmóvil y eterna del todo; las palabras «arriba» y «abajo» tienen un sentido absoluto, y
cuando la fantasía poética o la especulación filosófica emprenden la tarea de estimar la altura del cielo o la profundidad
del Tártaro, no necesita explicarse la significación de estos conceptos, pues la inmediata vivencia de la intuición nos lo
entrega, sin especulación. Aquí, la conceptuación naturalista se nutre de la riqueza que presentan las intuiciones
subjetivas.
El sistema cosmológico que lleva el nombre de Ptolomeo —150 después de J. C.— es la fórmula científica de este estadio
espiritual; conoce ya una multitud de hechos finamente observados sobre el movimiento del Sol, de la Luna, de los
planetas, y sabe dominarlos teóricamente con notable éxito; pero se atiene a la absoluta inmovilidad de la Tierra,
alrededor de la cual giran los astros a distancias inmensurables. Sus trayectorias son determinadas como círculos y
epiciclos, según las leyes de la geometría terrestre, sin que pueda decirse por ello que el espacio cósmico se halle
propiamente sometido a la geometría; pues las trayectorias residen, cual rieles que, afianzados en las bóvedas
cristalinas, representan el cielo en capas sucesivas.
19. Resulta incompatible con el desarrollo textual afirmar que la trayectoria de los astros
A) Fue determinada por Ptolomeo a través de epiciclos.
B) Se concebía antiguamente de forma subjetiva e intuitiva.
C) Tenía como base, para Ptolomeo, a la Tierra estática.
D) Se ignoró completamente en la propuesta de Ptolomeo.
E) Fue definida imprecisamente por el sistema ptolemaico.
20. Si Ptolomeo hubiera sido capaz de plantear unidades de medición para los astros, distintas a las de
las unidades terrestres, probablemente
A) La determinación de la trayectoria de estos habría sido más precisa.
B) El estatus terrestre inmutable habría ostentado bases teóricas sólidas.
C) El Sol y la Luna habrían desplazado en relevancia a los demás astros.
D) Las intuiciones como base para teorizar habrían alcanzado relevancia.
E) La teoría geocéntrica habría permitido un riguroso análisis del cosmos.
Dos exposiciones paralelas rescatan los extraordinarios dibujos procedentes de los cuadernos de bocetos de Leonardo da
Vinci (1452-1519), el genio universal del Renacimiento italiano, quien en raras ocasiones se presentaba en las cortes
como un pintor, sino más bien como un ingeniero, arquitecto, músico, diseñador de armas u organizador de fiestas. La
muestra Leonardo da Vinci: la mecánica del hombre se puede visitar hasta el 10 de noviembre de 2013 en The Queen's
Gallery, en el Palacio de Holyroodhouse, en Edimburgo; y Leonardo da Vinci. El hombre universal hasta el 1 de
diciembre en las Galerías de la Academia, en Venecia. Ambas retrospectivas representan una ocasión única para admirar
los dibujos del célebre artista florentino, que son extremadamente frágiles, y en el caso de la muestra veneciana sólo se
pueden exponer públicamente una vez durante una generación, ya que deben ser custodiados en la oscuridad más
absoluta y bajo unas exigentes condiciones ambientales.
Leonardo da Vinci: la mecánica del hombre examina los innovadores dibujos que realizó el artista sobre el cuerpo
humano y demuestra que es uno de los más destacados anatomistas de la historia. La muestra reúne 30 obras que
incluyen 18 hojas, entre las más preciosas de Leonardo, que forman el Manuscrito anatómico a más de 240 dibujos y 13
000 palabras rellenan estas páginas, que fueron realizadas durante el invierno de 1510 y 1511. Leonardo ilustró
prácticamente cada hueso del cuerpo humano y los principales grupos musculares. Estos estudios anatómicos no fueron
publicados a lo largo de su vida y permanecieron inéditos durante varios siglos. En sus anotaciones, presentes en la
exposición, describe un examen post mortem de un hombre de 100 años de edad en el que ofrece la primera descripción
exacta de una cirrosis hepática y del estrechamiento de las arterias. Los cuadernos de Leonardo se exhiben junto a
imágenes médicas del siglo XXI que revelan el carácter precursor del genio florentino en técnicas como el escáner
IRM o la modelización informática en 3D.
Leonardo da Vinci. El hombre universal muestra los excepcionales folios del maestro florentino conservados desde el año
1822 en la colección gráfica del Gabinete de los Dibujos de las Galerías de la Academia, en Venecia. Un total de 25
obras gráficas que nunca han sido mostradas al público. La exposición cuenta también con otras 27 hojas procedentes de
préstamos de museos italianos y extranjeros como la Biblioteca Real de Turín, la Galería Uffizi de Florencia, la Galería
Nacional de Parma, la Royal Collection del Castillo de Windsor, el Museo Británico de Londres y el Museo Ashmolean de
Oxford. La colección dedicada al estudio de las proporciones del cuerpo humano incluye el célebre Hombre de Vitruvio,
una representación armónica que es un símbolo de la perfección clásica del cuerpo y la mente. También se pueden
admirar sus dibujos de botánica, proyectos geométricos, retratos de hombres, figuras femeninas, batallas y proyectos de
armas e ingenios militares.
23. Se puede colegir del texto que la notable fama de Da Vinci como creador pictórico
A) Empieza cuando todos sus dibujos se exhibieron en Italia.
B) Es equiparable a su habilidad como organizador de fiestas.
C) Jamás fue promovida por este prodigioso artista italiano.
D) Se inicia con la exposición de sus dibujos en Edimburgo.
E) Solo fue eclipsada por su fama como diseñador de armas.
25. Resulta incompatible con el desarrollo textual afirmar que la muestra que se realiza en Venecia
A) Se llevará a cabo de forma sostenida y perpetua.
B) Se realizará solamente hasta el 1 de diciembre.
C) Presenta esbozos de armas e ingenios militares.
D) Permite admirar dibujos de botánica y retratos.
E) Incluye dibujos prestados de museos italianos.
26. Si Leonardo da Vinci hubiese carecido de interés respecto de la anatomía humana, posiblemente
A) El valor ecuménico de su legado artístico como pintor renacentista y genio creativo se vería notoriamente mellado en la
actualidad.
B) Sus dibujos inéditos relacionados con sus proyectos geométricos, batallas y material de guerra permanecerían ocultos
por mucho tiempo.
C) Jamás se hubiera presentado ante las cortes como arquitecto y diseñador de artefactos de guerra, entre otros
productos creativos.
D) La caracterización fidedigna de la cirrosis hepática y el estrechamiento arterial padecidos por un anciano jamás se
habría realizado.
E) Los museos italianos carecerían de muestras abundantes para exponer en exhibiciones públicas que atraigan el
interés turístico.