Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Los Paraisos Fingidos

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 14

PRUEBA DIGITAL

VALIDA COMO PRUEBA DE COLOR


LOMO: 12 mm EXCEPTO TINTAS DIRECTAS, STAMPINGS, ETC.

DISEÑO 22/07/2021 Jorge Cano

DANIEL BARBADIllO DUBON Animalismo Poético nació en 2017 como un grito


desesperado para expresar lo que Daniel Barbadillo EDICIÓN
Los paraísos fingidos es una historia de amor. Dubon llevaba en su interior y no conseguía sacar.
Desde entonces nos regala a diario en su cuenta
de Instagram @animalismopoetico su poesía
De amor de verdad, del que empieza y se acaba sin víctimas canalla que a nadie le deja impasible.
ni dramas interminables que solo consiguen alargar la agonía. SELLO ESPASA POESÍA
Ha publicado tres libros: Almas perpendiculares, COLECCIÓN

LOS PARAÍSOS FINGIDOS


Almas paralelas y Almas penetrantes, una trilogía FORMATO 125 X 190 mm
De amor propio, de la superación y el autoconocimiento que poética en la que expresa sentimientos que van RUSTICA SOLAPAS
nos permite sortear los obstáculos que nos plantea la vida. desde el dolor por la ruptura hasta el que se siente
como si fuera el primer amor; sin olvidar el deseo SERVICIO
mezclado con todo lo que pasa por su genial mente
También es una historia repleta de tropiezos y sentimientos y que, con tanto arte, transforma en palabras.
contradictorios, de llantos, ruegos y gritos a escondidas. CARACTERÍSTICAS

Todo depende de cómo quieras leerlo. IMPRESIÓN 4/0 tintas


CMYK

Si deseas adentrarte en el paraíso y salir de él sin un rasguño,


lee únicamente las páginas blancas, porque ellas

@ANIMALISMOPOETICO
PAPEL -
te resguardarán del aguacero.
PLASTIFÍCADO MATE
Si por lo contrario te atreves a adentrarte en las luces y sombras
que forman nuestra agridulce realidad, léelo entero. LOMO (mm) 12 mm

Sea como sea, UVI SÍ

te espero.
RELIEVE -

BAJORRELIEVE -

STAMPING -

FORRO TAPA -
PVP 12,90  10282467

Diseño de cubierta: Planeta Arte & Diseño


Ilustración de la cubierta: © Sara Ayuso GUARDAS -

C_LosParaisosFingidos.indd Todas las páginas 22/7/21 19:56


ESPASA poesía RUSTICA CON SOLAPAS 12,5X19CM PEFC
LOS PARAÍSOS
FINGIDOS

Daniel Barbadillo Dubon


@animalismopoetico

Los paraisos fingidos.indd 5 22/7/21 13:50


ESPASAesPOESÍA

© Daniel Barbadillo Dubon, 2021


© Editorial Planeta, S. A., 2021
Espasa, sello editorial
de Editorial Planeta, S.A.

© Ilustraciones del interior y de la cubierta: Sarah Ayuso


Diseño de la cubierta: © Planeta Arte & Diseño

Preimpresión: MT Color & Diseño, S. L.

Depósito legal: B. 18.498-2020


ISBN: 978-84-670-6049-2

Espasa, en su deseo de mejorar sus publicaciones, agradecerá


cualquier sugerencia que los lectores hagan al departamento
editorial por correo electrónico: sugerencias@espasa.es

www.espasa.com
www.planetadelibros.com

Impreso en España/Printed in Spain


Impresión: Liberduplex

Editorial Planeta, S. A.
Avda. Diagonal, 662-664
08034 Barcelona

No se permite la reproducción total o parcial de este libro, ni su incorporación a un sistema


informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio, sea éste electrónico,
mecánico, por fotocopia, por grabación u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito del
editor. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la
propiedad intelectual (Art. 270 y siguientes del Código Penal).
Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos) si necesita fotocopiar o escanear
algún fragmento de esta obra. Puede contactar con CEDRO a través de la web www.conlicen-
cia.com o por teléfono en el 91 702 19 70 / 93 272 04 47.

El papel utilizado para la impresión de este libro está califi-


cado como papel ecológico y procede de bosques gestiona-
dos de manera sostenible.

Los paraisos fingidos.indd 6 22/7/21 13:50


PRIMER ACTO

AMANECER

HAMBRE

Los paraisos fingidos.indd 13 22/7/21 13:50


COLISIÓN

12:15

Abro la puerta de tu despacho


con la inquebrantable certeza
de que la persona
que saldrá de aquí
en unos pocos minutos
no tendrá nada que ver
con el cadáver ambulante
de este ser diminuto
que interpreto a duras penas
entre las mañanas
teñidas de luto
y las noches
ficticias de verbena.

Te saludo,
pero tú no dices nada.
Te limitas a levantar la mirada
con la precisión de la leona
que avista su ansiada presa,

15

Los paraisos fingidos.indd 15 22/7/21 13:50


mientras yo
no soy capaz
de hacer nada más
que preguntarme con sorpresa,
en qué afortunado momento
decidió el destino
dibujar una diana en mi pecho,
para que a ti
te fuera tan sencillo atravesarlo.

No sé bien cómo explicarlo,


pero de algún modo siento
que todo lo que me ha tocado
vivir antes
de este monótono jueves de oficina,
no ha sido más
que un absurdo entrenamiento,
una broma pesada en forma
de días fotocopiados
que solo me estaban preparando
para ser consciente
de que hoy tengo la suerte
de presenciar una estrella fugaz
que ha descendido del cielo
para cruzarse en la órbita
de este asteroide errante
harto de formar parte

16

Los paraisos fingidos.indd 16 22/7/21 13:50


de un desdibujado firmamento
que siempre le relegaba
al lamentable papel de figurante.

La verdad
es que mientras intercambiamos
las palabras átonas
dictadas por nuestros jefes
desde sus guiones grises,
no puedo parar de pensar
en que deberíamos saltárnoslos
para abordar cuanto antes
los términos de nuestro
tratado de paz privado.

Porque yo,
aunque aún no pueda decírtelo,
me he rendido,
así que en secreto
me declaro, desde ya,
absoluto perdedor de una batalla
que ni siquiera sé
si llegará a librarse,
aunque espero que sí,
porque sería una pena
darle la espalda a este pálpito
y seguir cumpliendo la condena
de respirar el aire asmático

17

Los paraisos fingidos.indd 17 22/7/21 13:50


de los cobardes impasibles
que no conciben
que la única manera
de vivir de verdad
es alimentándose del aliento puro
de los precipicios impredecibles.

Lo más impactante de todo este asunto,


en el que de improviso
nos hemos visto envueltos
es que este alud de pensamientos
se ha apoderado de mí
en los pocos minutos
que hemos tenido que compartir
con una charla aburrida de trabajo.

Ojalá de repente me miraras


y me lanzaras una pregunta,
cualquiera,
porque, por muy alocada que fuera,
yo podría contestarte un «contigo»
que te demostraría,
sin lugar a dudas,
que tú eres la respuesta
a todas las súplicas
que un ateo como yo,
solo se atreve a pronunciar a oscuras.

18

Los paraisos fingidos.indd 18 22/7/21 13:50


Pero sé que hoy no podemos tener
nada más que una conversación intrascendente,
así que simplemente
me dedico a disfrutar
de este momento
que juntos
le hemos robado al sufrimiento.
Y me despido de ti
deseando que nuestros caminos
famosos ya por ser adictos
a las direcciones equivocadas,
esta vez escuchen mis plegarias
y pronto decidan volvernos a cruzar.

19

Los paraisos fingidos.indd 19 22/7/21 13:50


COLISIÓN
RECAÍDA

00:15

Abro la puerta de mi casa,


cansado y arrepentido
de haber cogido de nuevo
el transbordo
que siempre desemboca
en la barra de un bar.

La saludo,
pero no está.

Da igual.
Le dedico mi mejor sonrisa
a esa foto antigua de nosotros
que aún no he tenido,
el valor de tirar.

No sé bien cómo explicarlo,


pero siento que ya ni siquiera

20

Los paraisos fingidos.indd 20 22/7/21 13:50


soy capaz de respirar.
Sufro un alud de pensamientos
que ametrallan mi cabeza sin parar
hasta convertirla
en una orquesta sinfónica
que solo sabe interpretar
el triste adagio del fin del mundo.

Y así es como me siento


cada puto segundo,
como un usurpador,
como un polizonte
que espera resignado a que Caronte
lo abandone en una orilla desolada
donde por fin morir de pena.

Por más que lo intento,


no logro exiliar a mi corazón
de la eterna condena
en la que vivo
desde que la mujer que me acompañaba
decidió expulsarme
de todas las futuras verbenas
que llevaban nuestro nombre.

Ya ni siquiera bebido
consigo recordar que antes,

21

Los paraisos fingidos.indd 21 22/7/21 13:50


en algún momento previo
a la incineración de este calendario
plagado de celebraciones nonatas,
yo me sentía un hombre.

Ahora soy poco más


que la sangre en el alambre
cayendo impávida en una tierra árida,
que antes prometía flores
a los amantes primerizos.

La verdad
es que ya no recuerdo el hechizo
que debía llevarme de vuelta a casa,
y lo que es peor,
siento que, si consiguiera volver,
no habría nadie esperándome.

Supongo que, por no enfrentarme de nuevo


a la soledad de un brindis hueco
y por otras muchas excusas baratas
que le dedico al espejo,
hoy he vuelto a rebajarme
proponiendo tomar un mísero café
a la persona, que hasta hace unos días,
debía compartir mi vida o, al menos,
ayudarme a darle algo de sentido.

22

Los paraisos fingidos.indd 22 22/7/21 13:50


Pero como era de esperar,
su respuesta ha sido la de siempre
un «ya nos veremos,
si lo quiere así el destino»
que no ha hecho más que ahondar
en una herida tan profunda
que se ha convertido
en mi rasgo más característico.

Qué jodido es
que lo que mejor te defina como persona
sea el dolor que otra te provoca.
Y más cuando tantas veces
la disfrazaste de oasis
y jugaste a inventar
un millón de antídotos
con el néctar de su boca.

Pero hoy, esa loca


me ha obligado con su apatía
a enterrar para siempre toda la poesía
predestinada a ser nuestra,
cuando ha vuelto a tratarme
como si no mereciera otra cosa
que vivir recluido en una sala de espera,
desesperado porque llegue mi turno

23

Los paraisos fingidos.indd 23 22/7/21 13:50


para resguardarme
de la intemperie entre sus piernas.

Por eso hoy la maldigo


y cierro para siempre su libro.
No habrá más oportunidades.
No volveré a ser el suicida
que se tira solo a la piscina
consciente de que no tiene agua.

Sé que lo he dicho muchas veces,


pero esta es la definitiva.

Lo más sensato sería dejarme llevar


por el bello espejismo
del que he sido víctima por la mañana.

Mi compañera de trabajo me llama,


como tantas otras chicas interesantes
lo han hecho antes.
La diferencia es que esta vez
voy a responder.
Con esta carta sin remite,
este soldado se despide
del despiadado anochecer.

24

Los paraisos fingidos.indd 24 22/7/21 13:50

También podría gustarte