Breve Reseña de La Ciudad de San Luis
Breve Reseña de La Ciudad de San Luis
Breve Reseña de La Ciudad de San Luis
La Ciudad de San Luis se fundó el 25 de agosto de 1594 por Luis Jufré de Loaysa y Meneses, Corregidor de Cuyo. El
nombre completo de la ciudad fue “San Luis de Loyola Nueva Medina de Rioseco”. San Luis, por ser el santo y el
nombre del fundador (Luis Jufré); de Loyola, en homenaje al Capitán General y Gobernador de Chile, Martín Oñez de
Loyola, durante cuyo gobierno Jufré fundó la ciudad y Nueva Medina de Rioseco, en recordación de la ciudad
española de Medina de Rioseco, lugar de nacimiento de su padre, Juan Jufré, quien exploró el territorio del actual
San Luis por primera vez en 1562.
Además de este nombre, la ciudad fue conocida habitualmente como “San Luis de la Punta de los Venados” porque
estaba ubicada estratégicamente en el extremo sur de las Sierras de San Luis, sitio conocido popularmente como
“punta” y porque los españoles habían observado que hasta ese lugar podían encontrarse venados de las pampas.
Este nombre se impuso por costumbre, recibiendo los habitantes de la zona el nombre de “puntanos”; gentilicio que
se usa hasta la actualidad y cuyos elementos más representativos, la sierra y los venados, están presentes en el
escudo provincial.
Desde el siglo XVI la ciudad de San Luis perteneció al Corregimiento de Cuyo, una de las divisiones administrativas de
la Capitanía General de Chile y tuvo una frágil existencia material hasta que el Gobernador de Chile Tomás Marín de
Poveda y el Cabildo de San Luis la asentaron en su actual sitio en 1691. En 1776, cuando se creó el Virreinato del Río
de la Plata en 1776, San Luis y todo Cuyo fue separada de Chile y pasó a formar parte del nuevo virreinato.
Cuando se inició la Revolución de Mayo en 1810, el Cabildo de San Luis adhirió a la Primera Junta de Gobierno
formada en Buenos Aires, siendo la primera de las actuales capitales provinciales en aceptar el nuevo gobierno
porteño. Tres años más tarde, en noviembre de 1813, el gobierno revolucionario de las Provincias Unidas del Río de
la Plata creó con las ciudades de Mendoza, San Juan y San Luis y sus respectivas jurisdicciones, la Gobernación
Intendencia de Cuyo. En 1814 se hizo cargo de esta Gobernación el General José de San Martín. Bajo su férreo
mando, San Luis contribuyó con hombres, ganado, bienes materiales y dinero a la gran gesta sanmartiniana, en un
esfuerzo de guerra de enormes proporciones. Durante su gobernación, la ciudad y su jurisdicción juraron la
Independencia de España en 1816.
El 1 de marzo de 1820, la ciudad de San Luis y su jurisdicción se proclamaron independientes de las autoridades
centrales. En 1820, San Luis nació como Estado provincial independiente y soberano y la ciudad pasó a ser capital de
la nueva provincia. Tras vivir los difíciles años de las guerras civiles, San Luis fue una de las provincias fundadoras de
la Nación Argentina, pues en 1853 juró la Constitución Nacional, pasando a ser un Estado autónomo dentro de la
República.
El poblamiento de la actual provincia de San Luis comenzó mucho antes que arribaran los conquistadores españoles;
incluso anterior a que las poblaciones aborígenes de michilingües, calchaquíes y ranqueles la convirtieran en
territorio propio. Petroglifos y pictografías halladas en la gruta de Intihuasi hablan de una presencia humana anterior
a los 6.000 años a.C.
Desde el descubrimiento mismo de América, los indígenas fueron dominados por los recién llegados, debiéndoles
servir y brindar riquezas. Virreyes, capitanes generales, gobernadores y audiencias no sólo cumplían funciones de
gobierno sino que fueron instrumentos de sometimiento y enajenación de riquezas del suelo.
En la época de la conquista española habían grandes grupos de aborígenes en la región de la hoy provincia de San
Luis: Huarpes, Comechingones (moradores de las cavernas), Olongastas y Pampas, Michilingües (pobladores de los
valles), Calchaquíes y Ranqueles.
Los primeros españoles llegaron a este territorio atraídos por los bosques de caldén, quebracho y algarrobo y la
fauna rica en guanacos, venados y avestruces. Además había allí un gran potencial de mano de obra indígena, como
en muchas otras regiones de América, para iniciar la colonización y explotación de las tierras.
Los Huarpes ocuparon territorios de las tres provincias cuyanas y son descendientes raciales de los Huárpidos, a
cuyas características físicas respondían y cuyo tipo de cultura heredaron. Sin embargo, estuvieron más tarde
sometidos a las influencias de los pueblos andinos, bajo las cuales se fue modificando y enriqueciéndose su cultura.
Los Huarpes desaparecieron definitivamente a mediados del Siglo XVIII, y su desaparición se debió, entre otras
causas, a la falta de defensa contra las enfermedades traídas por los europeos; el sistema de encomiendas impuesto
por los españoles y por el cual enviaban a los indígenas cuyanos a trabajar a Chile; los malos tratos, que los
encomenderos daban a los indios; el mestizaje, etc.
Los sanavirones llamaron comechingones a sus vecinos del sur, es decir, a los indígenas que entre otras zonas,
habitaban en el área de Conlara, en la provincia de San Luis.
Estos aborígenes cultivaban el suelo, eran cazadores y recolectores; criaban llamas. En sus siembras figuraban maíz,
porotos, zapallos, quinoa; cazaban guanacos, liebres, ciervos; recolectaban frutos de algarrobo y del chañar.
La familia constituía la base del ordenamiento, por encima de la familia estaba la parcialidad, que ocupaba un área
delimitada; las parcialidades tenían un cacique y cuando crecían mucho se desintegraban en unidades menores con
un cacique propio, sin romper los vínculos de la parcialidad matriz.
Muy poco quedó en San Luis de las antiguas culturas. De los Michilingües nos quedó una leyenda: La historia de
Juana Koslay, hija de un cacique de caciques que se casó con un oficial español y se dedicó a la enseñanza de los
niños de su época.
Aunque se ha perdido su acta fundacional, se cree que su capital fue fundada el 25 de agosto de 1594 por Luis Jufré
de Loaysa y Meneses, teniente corregidor de Cuyo y dos años después de haber sido abandonada, Martín García
Oñez de Loyola, capitán general de Chile, la fundó nuevamente. Entonces la ciudad recibió el nombre de San Luis de
Loyola.
Ubicada al pie de las Sierras Grandes, junto al río Chorrillos, en el extremo denominado Punta de los Venados, de lo
cual deriva el nombre de puntanos dado a sus habitantes.
El nombre completo de la capital fue "San Luis de Loyola Nueva Medina de Río Seco".
San Luis, porque Luis era el nombre del fundador (Luis Jufré); de Loyola en homenaje al capitán general de Chile, que
encargó a Jufré fundar la ciudad; y Nueva Medina de Río Seco, porque el padre del fundador había nacido en Medina
de Río Seco, España.
La ciudad de San Luis es la capital de la provincia de San Luis en Argentina. Está ubicada al centro-norte de la
provincia, y es cabecera del departamento Juan Martín de Pueyrredón.
Tiene 13 120 km² y una población de 169 947 habitantes (INDEC, 2010). Es uno de los principales centros industriales
de Argentina. En sus cercanías, se encuentran pintorescos paisajes como el Embalse Potrero de los Funes, Salinas del
Bebedero, o la Villa Turística de Merlo y Villa Mercedes.