Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Ensayo Literario 1

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 10

v Para establecer los orígenes del ensayo hay que comenzar

con el francés Michel de Montaigne (siglo XVI), el no solo


inventó la palabra, sino que fue consciente de lo peculiar de
su obra Ensayos. El ensayo moderno data de 1580, fecha en
que apareció la primera edición de Essais.
v Dentro del mismo siglo en 1597 comenzarían a publicarse
los primeros ensayos de Francis Bacon.
v Los antecedentes del ensayo en la Edad Clásica pueden
encontrarse entre los griegos con los Diálogos, de Platón y
con el latino Séneca en sus Epístolas a Lucilio, o en las
Meditaciones a Marco Aurelio.
v En la actualidad el ensayo moderno adopta formas muy
variadas. Se recurre a él para tratar diversos asuntos tanto
de expresión artística como de ámbito académico.
v El ensayo literario se ha cultivado en una infinidad de
lenguas y, específicamente, en español tiene una
tradición que cuenta entre sus principales
representantes con Benito Jerónimo Feijo, Gaspar
Melchor de Jovellanos, Benito Pérez Galdós, Emilia
Pardo Bazán, Miguel de Unamuno, José Martí, José
Asunción Silva, Rubén Darío, Macedonio Fernández y
José Lezama Lima.
El ensayo es un género literario bastante heterogéneo, es
decir, se manifiesta de maneras muy variables de un
ensayista a otro. Sin embargo, presenta las siguientes
características:
v Subjetividad: Se manifiesta en cuanto a las ideas de un
autor respecto de un tema determinado. Un ensayista
se funda más en la intuición que en la elaboración
científica, la subjetividad constituye el corazón mismo
del ensayo. Pero el hecho de ser subjetivo no quiere
decir que no se pueda expresar sin ningún
fundamento, el ensayista debe valerse de la
argumentación para demostrar la validez de sus
razonamientos.
v Carácter dialogal: La modalidad del diálogo se adopta
en el ensayo literario puede consistir en cierta forma de
interacción con el lector que se marca explícitamente
en el texto, pero también en el diálogo que se establece
entre obras, géneros, formas discursivas y pensadores o
autores que están presentes en el texto.
v Digresiones: En el ensayo son frecuentes las
digresiones, es decir, los distanciamientos
momentáneos respecto del tema central que aborda el
texto, pues en este género el escritor ejerce una
libertad de tono y estilo, los cuales pueden ser lírico o
poético, emocional, reflexivo, entre otros.
v Temática libre: La variedad y la amplitud de los temas que
se abordan en el ensayo literario son infinitas, por lo cual
podemos hablar de la libertad temática plena que tiene y
que se toma el escritor al producir sus textos.
v Estructura no rígida: El ensayo no se sujeta a límites
formales estrictos: su estructura es, por ello abierta, aunque
siempre es posible identificar una composición en la que
reconocemos una entrada, trata de una frase que busca
provocar más que invitar a la lectura; de esta forma se
deriva la introducción; luego viene el desarrollo o cuerpo
que siempre ocupa el mayor espacio del texto e incluye
referencias a otros autores, por ejemplo argumentos y
contraargumentos, así como puntos de vista del escritor y al
final hay un cierre o conclusión que deja al lector el sabor
de la reflexión o perspectiva del autor en la mente.
v Los ensayos son relativamente breves.
Ø Monterrey, México 1889-1959 representa una sólida y erudita
producción. En 1941, publicó los Capítulos de la literatura
española, primera serie que consiste en un conjunto de ensayos
sobre temas clásicos de literatura, resultado de las
investigaciones realizadas en el Centro histórico de Madrid. Le
siguió Pasado inmediato y otros ensayos en 1942 con temas de
poesía hispanoamericana, memorias literarias e historia de la
cultura patria. Otros ensayos de Reyes se hayan en Los siete
sobre Deva (1942), ensayos de temática clásica formados de los
diálogos entre tres personajes. Ultima Tule (1942) es un
conjunto de ensayos en torno a la utopía o sueño americano de
la época. La experiencia literaria (1942) es una expresión
ensayística donde la escritura es la actividad humana por
excelencia, y La antigua retórica (1942) explica en que consiste
la retórica clásica desde los principales autores de la antigüedad
griega y latina. Mientras tanto El deslinde (1944) comprende
textos ensayísticos de literatura crítica literaria.
Ø El libreo/ensayo más emblemático de Reyes es Visión de
Anáhuac (1917), donde se aborda una reconstrucción entre
historia e imaginaria sobre Anáhuac o el valle de México.
Ø Poeta y ensayista (Ciudad de México, 1914 – 1998)
obtuvo en 1981 el Premio Cervantes, y en 1990 el
Premio Nobel de Literatura (único escritor mexicano
galardonado con esta distinción).
Ø Dentro de su vasta obra ensayística puede citarse su
libro más leído, El laberinto de la soledad (1950) donde
analiza y define lo que podríamos llamar el “ser” del
mexicano en todas las dimensiones de su vida
esencialmente “solitaria”, temas continuados 20 años
después en Posdata (1970) y Vuelta a El Laberinto de la
soledad.
Ø Otros ensayos de Paz son El arco y la lira (1956), La
palabra edificante (1964), Los signos en rotación y
otros ensayos (1965), Remedios Varo (1966), Claude
Lévi-Strauss o el nuevo festín de Esopo (1967), Xavier
Villaurrutia en persona y en obra (1978), El ogro
filantrópico: historia y política (textos producidos
entre 1971 y 1978) publicado en 1979, Sor Juana Inés de
la Cruz o las trampas de la fe (1982) y La llama doble:
amor y erotismo (1993), entre cerca de 50 libros
ensayísticos que escribió.
Ø Poeta, narrador y ensayista (Buenos Aires,
1899 – Ginebra 1986) cultivo de forma
prolífica el ensayo. También escribió cuentos
magistrales. Algunos de sus ensayos son:
Nueve ensayos dantescos (1982), Historia de la
eternidad (1936), El tamaño de mi esperanza
(1926), Siete noches (1980) y La rosa profunda
(1975).
Ø Su estilo como ensayista puede quedar
condensado en dos efectos básicos: la
seducción y la persuasión. Su escritura
siempre nos invitó a recorrer la sutileza de la
inteligencia, la percepción y los recovecos del
pensamiento agudo y polémico,
características de una argumentación tanto
fina e irrevocable como controversial, donde
la burla y la ironía muestran su presencia en
los lugares más clásicos que parecían
intocables por la crítica.
Ø (Ciudad de México 1938 – 2010) Su obra se reparte casi
por igual y haciendo muy finas las fronteras entre la
crónica y el ensayo. Su producción se halla diseminada
en diferentes medios en los que escribió, por ejemplo, la
columna “¡Por mi madre, bohemios!” que en sus últimos
años publicó en la revista Proceso.
Ø Monsiváis sostiene casi ininterrumpidamente la
publicación de sus libros durante décadas. Algunos de
sus ensayos se recogen en Escenas de pudor y liviandad
(1981). Parte de Guerra. Tlatelolco 1968 (1999) es un
libro ensayístico sobre la masacre de Tlatelolco en 1968
con la visión profunda e intensa del autor.
Ø Los rituales del caos (1995) y Las tradiciones de la
imagen (2003) constituyen otros volúmenes relevantes
no solo de su obra, sino para la cultura y la historia
nacionales. En el año 2000 obtuvo el Premio de Ensayo
Anagrama por Cultura y sociedad en América Latina.
Otros ensayos se hallan en No sin nosotros (2006), Los
mil y un velorios (2009) y Apocalipstick (2009), del cual
hemos leído “Homenaje casual al desmadre” y “Los
murales libidinosos del siglo XX”. Su último libro fue
Historia mínima de la cultura mexicana en el siglo XX
(2010).

También podría gustarte