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Llegando A Mi Peso

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Llegando a mi peso

“Entre Amigos”

Azúcar y Aceite

Las comidas ricas en grasas, incluidos los aceites, provocan una reacción intensa en

tu cuerpo y cerebro, lo que puede contribuir a sus aparentes cualidades adictivas.

Puede que al principio sientas placer al consumir comidas con aceite, pero lo que

sigue no es nada bueno para tu cuerpo. Después de una comida alta en grasas:

● La función endotelial disminuye durante varias horas, lo que provoca una

disminución del flujo sanguíneo.

● La digestión se ralentiza debido a que las enzimas, el ácido del estómago, la

bilis y otros jugos trabajan para descomponer las grasas.

● El exceso de grasas se convierte en triglicéridos y colesterol en el hígado y se

almacena en el cuerpo como una futura fuente de combustible

El consumo de aceite también tiene un efecto negativo en las bacterias intestinales.

Las grasas saturadas parecen tener el mayor impacto en el número, la riqueza y la

diversidad de las bacterias del microbioma intestinal, lo que puede estar asociado

con la reducción de la producción de ácidos grasos de cadena corta beneficiosos y

puede conducir a un aumento de la inflamación y la producción de radicales libres.

Esto puede resultar en daños al ADN y agotar las reservas de antioxidantes de tu

cuerpo mientras tu sistema trata de combatir el ataque violento.

El consumo excesivo de azúcar se relaciona con varias afecciones médicas dañinas,


incluyendo:

● obesidad y síndrome metabólico


● enfermedad cardíaca
● diabetes tipo 2
● hipertensión arterial
● colesterol alto
● inflamación crónica
● enfermedad del hígado graso no alcohólico
● placa dental y caries

Reducir la cantidad de azúcar en la dieta puede ayudar a que una persona reduzca
su riesgo de estas afecciones.

Reemplazar los alimentos con alto contenido de azúcar por opciones saludables
puede ayudar a que una persona obtenga todas las vitaminas y minerales
esenciales sin las calorías agregadas. También puede ayudar a perder peso, si es
necesario.

Programa de 3 semanas (21 días)

Contenido: Contenido digital descargable (Guía alimentaria semanal/ día a día/

todas las ingestas/recetas variadas y formas de elaborar de cada plato) + sesiones

personales con tu bodyweight coach una vez por semana. Te acompaña en este

proceso de cambio de hábitos a través de este servicio especializado.

Modalidad: Individual

Pensado para: personas con mayor autonomía

Programa 3 semanas + holding (apoyo profesional)

Programa de 3 semanas (21 días)


Contenido: Contenido digital (Guía alimentaria semanal/ día a día/ todas las

ingestas/recetas variadas y formas de elaborar de cada plato) + sesiones personales

con tu bodyweight coach una vez por semana. Te acompaña en este proceso de

cambio de hábitos a través de este servicio especializado.

Apoyo emocional: Dos sesiones por semana con psicólogos que te facilitará llegar a

la meta.

Modalidad: Individual

Pensado para: personas con autonomía que deciden contar con apoyo extra

Programa 3 semanas + Proceso gamificado

Consta de: Programa de 3 semanas (21 días)

Contenido: Contenido digital (Guía alimentaria semanal/ día a día/ todas las

ingestas/recetas variadas y formas de elaborar de cada plato) + sesiones personales

con tu bodyweight coach una vez por semana. Este te acompaña en este proceso de

cambio de hábito alimentario a través de este servicio especializado.

Programa para perder peso en grupo y la gamificación con la hoja de cálculo es un

éxito. Todo el mundo pierde peso y, lo más importante, se hacen autónomos a la

hora de saber qué hay que hacer para perder peso y llevar una vida sana.

Modalidad: Individual /Grupal

Pensado para: personas con autonomía que deciden realizar una experiencia

colaborativa motivacional.

Adicional: Apoyo emocional: Dos sesiones por semana con psicólogos que te

facilitará llegar a la meta.


¿A quién va dirigido el bodyweight coaching?

Usualmente, las personas que recurren al bodyweight coaching lo hacen después

de haber probado varias dietas sin haber alcanzado los objetivos que se proponían.

Por tanto, este se convierte en su último recurso antes de tirar definitivamente la

toalla.

Sin embargo, el bodyweight coaching no se limita a las personas que quieran

perder peso sino que es una excelente opción para todas aquellas que quieren

realizar un cambio importante en su alimentación y estilo de vida pero necesitan

una ayuda extra.

¿Qué te ofrece nuestro programa de bodyweight coach?

Te ofrecemos un camino estructurado gracias al cual podrás alcanzar las metas que

te propongas.

1. Dieta sana, natural, desintoxicante: Con objetivos claros que podés alcanzar

También trabajamos la resistencia al cambio, favorecemos la toma de

conciencia de los hábitos poco saludables y acompañamos cada una de las

acciones necesarias para lograr tu meta.

2. Identificación de las causas del problema: analizamos cuáles son las causas

de la obesidad o el sobrepeso, así como los factores que te impiden

adelgazar o mantener tu peso ideal. En esta fase profundizamos en los

aspectos emocionales y/o cognitivos que te impiden avanzar.

3. Solución del problema: elegimos las herramientas más adecuadas para tu

caso, como pueden ser las técnicas de modificación de conducta para

promover hábitos más saludables, el mindfulness o EFT. También te

ofrecemos orientaciones y ejercicios prácticos para que puedas redescubrir el

placer de comer, pero de una manera sana.


Acompañamiento Psicológico
No solo se trata de comer menos y hacer más ejercicio, sino que es necesaria una

comprensión más profunda de los pensamientos y las conductas que nos acaban

llevando a la ganancia de peso, de manera que podamos controlarlos.

Tus hábitos de alimentación, tu actitud hacía la comida, tu imagen corporal y lo que

supone para vos la pérdida de peso de manera que puedas saber si hay algo que te

esté complicando la pérdida de peso.

Deshacernos de creencias erróneas

Muchos de nosotros hemos crecido con creencias erróneas, anticuadas o basadas en

mitos, sobre la alimentación. El problema es que estas creencias están tan

instaladas en nuestras vidas - y a veces en la sabiduría popular - que resulta difícil

reconocer si son falsas o no y retirarlas de nuestras vidas.

Un psicólogo te ayudará a reconocer cuáles son esas creencias en tu caso particular

e intentar deshacerte de ellas, de manera que no boicoteen tu pérdida de peso.

Reconocer el uso la comida de manera poco adaptativa

En algunos casos, el uso de la comida puede tapar otro tipo de problemas. O

simplemente es que hemos aprendido a utilizarla de una manera poco saludable y

adaptativa - por ejemplo, para lidiar con el estrés o cuando estamos tristes-. Por

ello, un psicólogo te ayudará a reconocer cuáles son las creencias y

comportamientos poco adaptativos que tienes en cuanto a la comida.

Además, te guiará para reconocer si existe algún mecanismo en vos que provoque

tus elecciones de comida poco saludable y te ayudará a trabajarlos e intentar

superarlos.

Aprender técnicas útiles para reconocer si vamos por buen camino

En este espacio podrás aprender técnicas de automonitoreo, nuevas estrategias

para lidiar con el estrés o con las situaciones que en otro momento podrían provocar

que acudas a la comida poco saludable.


Además de esto, nos ayudarán a no ponernos demasiadas metas al mismo tiempo,

sino a ir cambiando poco a poco diferentes situaciones de una en una, de manera

que no cree frustración al intentar abarcar demasiado y no conseguirlo.

Los objetivos de los profesionales en el proceso psi son:

Registrar nuestras conductas: mantener un registro de las comidas y de los

pensamientos y sentimientos que esta nos provoca, antes, durante y después de las

comidas nos puede ayudar a entender y observar nuestro comportamiento.

Además, nos podrá dar una visión de qué relación tenemos con la alimentación.

Monitorear nuestro nivel de actividad: no solo el ejercicio físico que hacemos, sino el

tiempo que estamos activos o el grado de actividad que tenemos. Por ello, por

ejemplo, podemos utilizar un podómetro para medir cuántos pasos damos al día en

realidad.

Identificar factores que asociemos con la comida: en ocasiones asociamos algunas

conductas o situaciones con la comida. Esto, por ejemplo, le pasa a los fumadores

que asocian tomar café con fumar. Podemos haber asociado sin querer alguna

situación con tener que comer y cada vez que nos encontremos en esa situación

querremos comer. Identificar estas situaciones (por ejemplo, reuniones con amigos)

nos ayudarán a intentar romper la asociación.

Reconocer nuestros sentimientos: debemos intentar aprender a reconocer si

estamos comiendo porque tenemos hambre de verdad o porque estamos aburridos,

tristes o ansiosos. De esta manera estaremos dando el primer paso para conseguir

no comer si no estamos hambrientos y de encontrar otras técnicas más adaptativas

para lidiar con el aburrimiento o el estrés.

Gamificación:
“Vamos a hacer un juego que durará 12 semanas. Cada sábado al levantarte

tendrás que pesarte, siempre en las mismas condiciones y con la misma balanza.

Luego tendrás que mandar la foto del peso al grupo. En función del porcentaje de

peso que pierdas esa semana, ganarás puntos semanales que se acumularán y se

convertirán en premios y recompensas así hasta llegar a la semana 12 donde se

revelará quiénes son los ganadores.”

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