SINDROME DE BURNOUT

Alumno: Alejandro Guadalupe Romero Silva

Lic. En psicología clínica: Angélica Vianey
Hernández Ornelas
Ingeniería industrial y de sistemas
Séptimo tetramestre
Psicología Industrial
 INTRODUCCIÓN

El término "burnout" fue acuñado en la década de 1970

por el psicólogo Herbert Freudenberger, quien estudió a
trabajadores en profesiones de ayuda, como enfermeras
y trabajadores sociales. Freudenberger observó que
muchos de estos individuos experimentaban una
profunda fatiga emocional, despersonalización y una
disminución de la realización personal.

Desde entonces, el burnout ha sido reconocido como un

síndrome asociado al estrés crónico en el lugar de
trabajo. En 1982, Christina Maslach y Susan Jackson
desarrollaron la Escala de Burnout de Maslach, que
ayudó a medir sus tres dimensiones: agotamiento
emocional, despersonalización y falta de realización
personal.

En los últimos años, la Organización Mundial de la Salud

(OMS) lo ha clasificado como un fenómeno ocupacional,
destacando su impacto en la salud mental y el bienestar
de los trabajadores. Hoy en día, el burnout es un tema de
creciente preocupación en el ámbito laboral,
especialmente con el aumento del trabajo remoto y la
presión laboral en diversas industrias.
 ¿Qué es el síndrome de Burnout?

Es un fenómeno que ha sido objeto de interés en

diversos ámbitos profesionales debido a sus
consecuencias negativas en la salud mental de los
individuos. Históricamente, el Burnout ha sido estudiado
y conceptualizado principalmente en el contexto laboral,
donde se ha observado un aumento en su incidencia a lo
largo de las décadas debido a cambios en el entorno
laboral y las demandas laborales. El Burnout se refiere a
un estado de agotamiento físico, mental y emocional que
resulta de la exposición prolongada al estrés laboral
crónico. Se manifiesta en síntomas como fatiga
constante, desmotivación, irritabilidad y falta de logro o
satisfacción en el trabajo.

El síndrome de burnout, según la conceptualización de

Christina Maslach, es un fenómeno complejo que se
manifiesta como un estado de agotamiento emocional,
despersonalización y baja realización personal en
individuos que trabajan en áreas de servicios humanos.
Este síndrome surge como respuesta al estrés crónico en
el entorno laboral, especialmente cuando se enfrentan
problemas interpersonales o conflictos de valores.
Maslach identifica varias fuentes de estrés laboral
asociadas con el burnout, entre las que se incluyen la
sobrecarga de trabajo, la falta de control sobre las tareas
asignadas, la ausencia de reconocimiento por el esfuerzo
realizado, los conflictos interpersonales en el trabajo, la
discrepancia entre los valores personales y los valores
organizacionales, y la falta de apoyo social dentro del
entorno laboral.

Síntomas

Los síntomas físicos, emocionales y cognitivos del

burnout, como señaló Herbert Freudenberger en sus
investigaciones, son manifestaciones complejas que
pueden impactar profundamente en el comportamiento y
el estado mental de un individuo. En primer lugar, a nivel
físico, los síntomas pueden incluir una fatiga crónica y
abrumadora que no se alivia con el descanso adecuado,
dolores de cabeza persistentes, problemas
gastrointestinales como malestar estomacal o síndrome
del intestino irritable, así como trastornos del sueño,
como insomnio o dificultades para conciliar el sueño.
Estos síntomas físicos pueden manifestarse como una
sensación general de debilitamiento y pueden tener un
impacto significativo en la capacidad de funcionamiento
diario.
Desde una perspectiva emocional, el burnout puede
provocar una amplia gama de síntomas. Los individuos
pueden experimentar sentimientos de desesperanza y
desesperación con respecto a su situación laboral y su
capacidad para manejar las demandas del trabajo. La
irritabilidad constante y los cambios de humor frecuentes
pueden dificultar las interacciones sociales y laborales,
mientras que la apatía hacia el trabajo y la vida en
general puede llevar a una pérdida de interés en
actividades que anteriormente se disfrutaban. La
ansiedad y la preocupación excesiva sobre el trabajo y el
futuro profesional pueden ser abrumadoras, y los
sentimientos de depresión y tristeza profunda pueden
hacer que sea difícil encontrar motivación o alegría en
cualquier aspecto de la vida.
En términos cognitivos, el burnout puede afectar la
capacidad de concentración y el funcionamiento mental
en general. Los individuos pueden experimentar
dificultades para concentrarse en las tareas laborales, lo
que puede afectar su rendimiento y su capacidad para
completar sus responsabilidades de manera efectiva.
Además, pueden experimentar una falta de claridad
mental, lo que dificulta la toma de decisiones y la
resolución de problemas. La falta de creatividad e
innovación en el trabajo puede resultar en un
estancamiento profesional, y la tendencia a olvidar
compromisos y responsabilidades puede aumentar aún
más el estrés y la ansiedad asociados con el burnout. Los
pensamientos negativos persistentes sobre el trabajo y el
futuro profesional pueden contribuir a un ciclo de
autoevaluación negativa y baja autoestima laboral.

Causas y consecuencias

Las causas del burnout son multifacéticas y pueden

variar según el individuo y el entorno laboral. Una
perspectiva relevante sobre las causas del burnout
proviene del trabajo de Gary W. Evans. Evans, un
psicólogo ambiental, ha investigado extensamente cómo
los entornos laborales estresantes pueden contribuir al
desarrollo del burnout. Según Evans, algunas de las
causas del burnout pueden incluir:
Altas demandas laborales: Los trabajadores pueden
experimentar burnout cuando enfrentan una carga de
trabajo excesiva o demandas irrazonables en términos
de cantidad y complejidad de tareas.
Falta de control: La falta de control sobre el trabajo y la
incapacidad para tomar decisiones importantes pueden
aumentar el estrés y la sensación de
desempoderamiento, contribuyendo al desarrollo del
burnout.
Ambiente de trabajo tóxico: Un ambiente laboral
negativo, caracterizado por conflictos interpersonales,
falta de apoyo de los compañeros y superiores, y falta de
reconocimiento por el trabajo realizado, puede ser un
factor significativo en el desarrollo del burnout.
Desbalance entre esfuerzo y recompensa: Cuando los
trabajadores perciben que están invirtiendo más esfuerzo
en su trabajo de lo que reciben a cambio en términos de
reconocimiento, salario o satisfacción personal, pueden
experimentar agotamiento y desmotivación.
Expectativas poco realistas: Las expectativas poco
realistas por parte de los empleadores o la cultura laboral
pueden generar presión adicional sobre los trabajadores
y contribuir al desarrollo del burnout.
Falta de apoyo organizacional: La falta de políticas de
bienestar laboral, programas de apoyo emocional y
recursos para manejar el estrés puede dejar a los
trabajadores desprotegidos ante las demandas laborales
y aumentar su vulnerabilidad al burnout.
Estas son solo algunas de las causas del burnout
identificadas por Gary W. Evans y otros investigadores
en el campo del estrés laboral. Reconocer y abordar
estas causas es fundamental para prevenir y mitigar el
impacto del burnout en los trabajadores y las
organizaciones.
 Población afectada

El síndrome de burnout puede afectar a cualquier

persona que esté sometida a estrés crónico y sobrecarga
laboral, sin importar su edad, género, ocupación o nivel
socioeconómico. Sin embargo, hay ciertos grupos de
población que son más propensos a desarrollar este
síndrome:

Profesionales:
Médicos y personal de salud
Educadores y profesores
Trabajadores sociales
Ejecutivos y gerentes
Abogados
Ingenieros
Profesionales de la tecnología

Trabajadores de servicios:
Enfermeras y auxiliares de enfermería
Trabajadores de atención al cliente
Empleados de call center
Trabajadores de la seguridad
Conductores y transportistas

Trabajadores con responsabilidades familiares:

Madres y padres solteros
Cuidadores de familiares mayores o discapacitados
Personas con responsabilidades familiares y laborales

Jóvenes y estudiantes:
Estudiantes universitarios
Jóvenes profesionales
Estudiantes de posgrado

Personas con condiciones especiales:

Personas con discapacidad
Personas con enfermedades crónicas
Personas con problemas de salud mental
 Prevención

Carga de trabajo adecuada: La primera área de trabajo

se centra en asegurar que la carga laboral sea razonable
y manejable. Esto implica evaluar y ajustar las tareas y
responsabilidades para evitar el agotamiento físico y
emocional. Es importante establecer límites claros en
cuanto a las horas de trabajo y aprender a delegar tareas
cuando sea necesario para mantener un equilibrio
saludable entre la vida laboral y personal.
Control: El segundo aspecto clave es proporcionar a los
individuos cierto grado de control sobre su trabajo y
entorno laboral. Esto implica fomentar la autonomía y la
toma de decisiones, permitiendo a los empleados influir
en la forma en que realizan sus tareas y abordan los
desafíos. El aumento del control puede ayudar a reducir
los sentimientos de impotencia y aumentar la sensación
de competencia y eficacia personal.
Recompensa: Reconocer y recompensar el esfuerzo y
el desempeño de los empleados es fundamental para
mantener su motivación y compromiso. Esto incluye no
solo incentivos económicos, sino también elogios,
reconocimientos y oportunidades de desarrollo
profesional. Es importante que las recompensas sean
percibidas como justas y equitativas para evitar la
aparición de sentimientos de injusticia y resentimiento.
Comunidad: Fomentar un sentido de comunidad y
apoyo en el lugar de trabajo es crucial para 26
contrarrestar el aislamiento y la soledad que pueden
contribuir al burnout. Esto implica crear un ambiente
donde los empleados se sientan valorados, escuchados
y respaldados por sus colegas y superiores. Promover la
colaboración, el compañerismo y la empatía puede
fortalecer los vínculos sociales y mejorar el bienestar
emocional de los trabajadores.
Equidad: Garantizar la equidad y la justicia en todas las
políticas y prácticas organizacionales es esencial para
mantener la moral y la satisfacción de los empleados.
Esto implica tratar a todos los miembros del equipo de
manera justa y transparente, evitando la discriminación y
el favoritismo. La percepción de equidad promueve la
confianza y el compromiso, lo que contribuye a la
prevención del burnout.
Valores: Alinear los valores y la misión de la
organización con las metas y aspiraciones personales de
los empleados puede aumentar su sentido de propósito
y significado en el trabajo. Es importante que los
trabajadores se sientan identificados con la cultura
organizacional y encuentren sentido en su labor diaria.
Esto puede lograrse comunicando claramente los valores
de la empresa y brindando oportunidades para que los
empleados contribuyan al logro de su misión.
 Conclusión
A través de la investigación sobre el síndrome de
burnout, he aprendido que este fenómeno afecta
significativamente a los profesionales en el ámbito
laboral, manifestándose a través de agotamiento
emocional, despersonalización y una disminución en la
realización personal. Este conocimiento me ha permitido
entender mejor las complejidades y el impacto del
burnout en la salud mental y física de los trabajadores.