Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Monografia Violencia Niñez

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 30

UNIDAD EDUCATIVA

“SAN PEDRO DON BOSCO”

TEMA:

VIOLENCIA HACIA LOS NIÑOS

TITULO:

LA VIOLENCIA HACIA LOS NIÑOS EN EL ALTO

Estudiante: Arnaldo Diego Guzman Zapana

Lugar y Fecha: El Alto, octubre de 2021.

Año Lectivo: 2021 - 2022

1
DEDICATORIA

Agradecimiento primero a Dios por darme la


oportunidad y posibilidad de existir y darme
la sabiduría. Y a mis compañeros por
apoyarme y guiarme por el camino correcto

2
AGRADECIMIENTO

La dedicación de la presente investigación es


para: La comunidad educativa, y para mis
compañeros que continuarán con la
colegiatura

3
INDICE

INTRODUCCION..................................................................................................... 1

CAPITULO I............................................................................................................. 2

1.1. TITULO:...................................................................................................... 2

1.2. TEMA:......................................................................................................... 2

1.3. OBJETIVOS................................................................................................2

1.3.1. OBJETIVO GENERAL..........................................................................2

1.3.2. OBJETIVO ESPECÍFICO.....................................................................2

1.4. DIAGNOSTICO...........................................................................................2

1.5. JUSTIFICACION.........................................................................................3

1.6. PLANTEAMIENTO Y FORMULACION DEL PROBLEMA..........................4

1.7. ENFOQUE METODOLOGICO....................................................................5

CAPITULO II............................................................................................................ 6

MARCO TEORICO...................................................................................................6

2.1. ¿QUÉ ES EL VIOLENCIA HACIA LOS NIÑOS?...........................................6

2.2. CLASIFICACIÓN DEL MALTRATO...............................................................6

2.2.1. MALTRATO FÍSICO................................................................................7

2.2.2. ABUSO FETAL........................................................................................7

2.2.3. MALTRATO EMOCIONAL O PSICOLÓGICO.........................................7

2.2.4. ABUSO SEXUAL.....................................................................................8

2.2.5. ABANDONO O NEGLIGENCIA...............................................................8

2.3. LUGAR Y MODO EN QUE SE PRESENTA EL MALTRATO AL NIÑO.........9

2.3. DETECCIÓN DEL MALTRATO...................................................................10

2.4. COMO IDENTIFICAR A LOS NIÑOS MALTRATOS...................................11

2.5. GRUPOS POR EDADES.............................................................................12

4
2.6. FACTORES ASOCIADOS CON EL MALTRATO Y LAS CAUSAS..............13

2.6.1. INDIVIDUALES: Ascendientes maltratadores......................................13

2.6.2. FAMILIARES: Hijos no deseados..........................................................13

2.6.3. SOCIALES: Concepto del castigo físico................................................13

2.7. CAUSAS...................................................................................................... 14

2.8. CARACTERÍSTICAS DEL NIÑO GOLPEADO Y EL AGENTE AGRESOR. 16

2.9. CONSECUENCIAS......................................................................................18

CAPITULO III......................................................................................................... 20

PROPUESTA INNOVADORA................................................................................20

3.1. TÍTULO DE LA PROPUESTA:.....................................................................20

3.2. OBJETIVOS.................................................................................................20

3.3. PARTICIPANTES.........................................................................................20

3.4. OBJETIVOS.................................................................................................21

3.5. METODOLOGIA.......................................................................................... 21

CAPITULO IV.........................................................................................................22

CONCLUSIONES...................................................................................................22

BIBLIOGRAFIA...................................................................................................... 24

ANEXOS................................................................................................................ 25

5
INTRODUCCION

Hablar de violencia infantil es referirse a un tema doloroso, es hablar de una lacra


de la humanidad que a pesar de innumerables esfuerzos, propósitos y programas
no pudo ser erradicada. Una lacra aun peor que las pestes y las epidemias que
luego de más de 5000 años de civilización y más de 2000 años de la era cristiana,
sigue aquí, en la tierra, aferrada y creciente. Una desgracia originada y mantenida
exclusivamente por los seres humanos, lo que nos hace dudar de la validez de la
palabra humanidad.

Lo cierto es que, desde que el mundo es mundo, a los niños como a las mujeres
les tocó la peor parte, ya que el concepto de niñez protegida es realmente muy
reciente.

La historia nos muestra que la niñez, desde siempre, fue avasallada y sus
derechos conculcados o ignorados, temas que a veces desde la actividad física el
deporte y la recreación, se ven como lejanos.

La lista de padecimientos que les fueron y aun les son infligidos a los niños es
interminable, además de ser cruel y escabrosa y cuantas veces pasa cerca de
nosotros la posibilidad de ayudar y no nos damos cuenta.

Desinterés y abandono, miseria e ignorancia colaboraron para sostener este


estado de cosas, además de pautas culturales permisivas o decididamente
crueles, por lo menos vistas desde nuestro punto de vista latinoamericano con
fuerte raíz europea.

Sin pretender presentar un catálogo de miserias y crueldades humanas, doloroso


y escatológico, creo que es necesario recordar, al menos, algunos de los hitos que
la humanidad le ha impuesto a la niñez.

La actitud de la humanidad respecto de la protección o desprotección de la niñez


ha sido absolutamente pendular, y ha ido y aun sigue yendo desde la protección
total que ofrecen los países escandinavos, hasta el abandono y la esclavización
que imponen algunos países africanos.

1
CAPITULO I

1.1. TITULO:

“La violencia hacia los niños en el Alto”

1.2. TEMA:

Violencia hacia los niños.

1.3. OBJETIVOS

1.3.1. OBJETIVO GENERAL

 Mencionar los diferentes tipos de maltrato infantil y sus consecuencias.

1.3.2. OBJETIVO ESPECÍFICO

 Informar el concepto de maltrato infantil


 Explicar los diferentes tipos de maltrato infantil que existen
 Mencionar los lugares en que se deben acudir cuando un niño está siendo
víctima de maltrato.
 Identificar los lugares donde se procede el mayor porcentaje de maltrato
infantil
 Identificar las causas psicológicas de un niño maltratado emocionalmente
 Nombrar los principales responsables del maltrato infantil.

1.4. DIAGNOSTICO

Se describe la relación entre la percepción de los factores familiares de riesgo de


maltrato infantil y las características sociodemográficas de una población de niños
y adolescentes en las ciudades de La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz. La
población está compuesta por niños y adolescentes en alto riesgo social. Se utiliza
para ello el EPMI (Escala de Percepción del Maltrato Infantil) que mide la
percepción de la población referente a los factores de comunicación familiar,
demostración de afecto, resolución de conflictos familiares, respeto de derechos,
signos de maltrato infantil y creencias que perpetúan el maltrato. Se puede
concluir que existe una relación entre la percepción de factores familiares de

2
riesgo de maltrato infantil y las variables sociodemográficas de los participantes.
Ello demuestra que el fenómeno del maltrato infantil está íntimamente vinculado
con la cultura y la sociedad de un determinado grupo.

Con un nivel de ingreso promedio anual por habitante de 925 dólares americanos
(menos de 2.5 dólares americanos en promedio por habitante/ día), Bolivia es el
país más pobre de América del Sur. De acuerdo a la Estrategia Boliviana de
Reducción de Pobreza (EBRP), el ingreso monetario promedio de los pobres es
alrededor de 290 $ por persona al año, aproximadamente 300 $ menos que la
línea de pobreza (de 590 $). Por otra parte, alrededor de un tercio de la población
se encuentra en condiciones de pobreza crónica, mientras que el siguiente tercio
muestra síntomas de deterioro en sus niveles de ingreso o de empleo (Ramírez,
2005).

Además del bajo crecimiento económico y la baja inversión y productividad, la


historia de Bolivia está marcada por fuertes desigualdades económicas y sociales:
la riqueza del 10 por ciento más rico de la población es 140 veces superior a la del
10 por ciento más pobre y la brecha educacional entre los más ricos y los más
pobres es de aproximadamente 8,5 años de educación (frente a aproximadamente
5 años en Venezuela y en Colombia). En un contexto como éste, las diferencias
en ingresos, acceso a bienes y servicios públicos y poder político está marcadas
por diferencias étnicas, raciales, regionales y de género, o sea, por factores ajenos
a las capacidades individuales (Fretes, 2008).

1.5. JUSTIFICACION

Este tema es de muy importante estudiarlo, porque hay muchas personas, que
maltratan a los niños de muchas maneras, por lo cual muchas veces ellos mismos
no se dan cuenta del maltrato que están cometiendo con sus hijos, o diferentes
niños, con este tema podremos hacerles reconocer algunos de muchos maltratos
que hay. La importancia del tema es que podamos llegar a reconocer los
diferentes tipos de maltrato infantil y así poder terminar con el maltrato y darles a
los niños el mayor de los cuidados que ellos se merecen.

3
En la vida académica es muy importante porque mediante este tema podemos
demostrar a aquellos padres y o tutores como educar a los niños sin necesidad de
maltratarlos, y de esa manera los niños crecerán con una autoestima elevada.

1.6. PLANTEAMIENTO Y FORMULACION DEL PROBLEMA

Un tema que está inmerso en la realidad boliviana es referente al maltrato o


violencia hacia los niños, niñas y adolescentes, y que se hace presente en
diferentes formas, en el que intervienen aspectos psicológicos, culturales,
económicos y sociales, por lo tanto es un problema de interés comunitario, de
todos los sectores y en especial del ámbito educativo.

En este sentido la escuela o colegio, por el rol fundamental e indelegable que


desempeña en la vida infantil y adolescente, es el lugar privilegiado para promover
la defensa y la vigencia de los derechos fundamentales de los menores, así como
también para detectar su posible vulneración.

La Ley 2026 hace referencia precisamente a la obligación de los responsables de


educación a comunicar ante las instancias correspondientes los hechos de
maltrato o violencia que se produzca dentro o fuera del establecimiento y que
afecten a los alumnos. Es una obligación porque los niños y niñas no pueden
protegerse a sí mismos ante los hechos de violencia familiar de los que pueden
ser víctimas.

Por tal razón en la presente monografía la propuesta es incorporar en el


Reglamento a la ley 2026 los procedimientos, el plazo para presentar la
comunicación y las sanciones correspondientes en casos de omisión de
comunicación ante las instancias pertinentes y determinada por la misma ley,
siempre en el marco de la nueva Constitución Política del Estado que es la ley
suprema del ordenamiento jurídico nacional, y constituye la base del Estado
Plurinacional donde establece que la educación fomentará los valores
incorporando la equidad de género, la no diferencia de roles, la no violencia y la
vigencia plena de los derechos humanos. Todo con el objetivo de que los
responsables en educación, como ser directores, maestros y otros quienes estén a

4
su cargo estudiantes, cuando conozcan casos de violencia hacia los menores,
comuniquen y denuncien estos hechos para que no queden en la impunidad y de
esta manera las niñas, niños y adolescente se sientan protegidos y tengan un
mundo apropiado para su desarrollo y bienestar.

1.7. ENFOQUE METODOLOGICO

Al momento de realizar la investigación, es importante tener en cuenta el tipo de


investigación del estudio que se realizará. Según la naturaleza del problema
podemos decir que el trabajo será descriptivo - explicativo; descriptivo porque
describe algunas características fundamentales de conjunto homogéneos de
fenómenos, utilizando criterios temáticos para destacar los elementos esenciales
de su naturaleza. Con éstas se pueden tener características de la realidad
estudiada, y explicativa porque su objetivo primordial es conocer porque suceden
ciertos hechos, a través de la delimitación de las relaciones casuales existentes o,
al menos, de las condiciones en que ellos se producen.

Por lo mismo, la investigación pretende sacar las características, él ¿por qué? Se


producen y lo más importante cuales serán las consecuencias que traen el
problema, es decir, todo lo referente al maltrato infantil y a las consecuencias que
producen este hecho. Para seleccionar la muestra se utilizará la técnica del
muestreo intencional, porque aquí el investigador selecciona los elementos que a
su juicio no son representativos de la población, lo cual exige un conocimiento
previo de la misma; y la técnica del muestreo aleatorio simple (o al azar) porque
con esta, la muestra representativa se obtiene a través de azar, es decir, cada uno
de los individuos de una población tiene la misma probabilidad de ser elegido.

Con las técnicas de muestreo anteriormente expresadas se procederá a resolver y


sacar una conclusión acerca de nuestro problema, para esto utilizará la muestra
con la mayor cantidad de aquellas características peculiares que corresponde a
toda la población.

La información verbal se revisará sistemáticamente, juzgando su calidad y el


grado de confianza que merece cada una y seleccionando aquellas que pueden

5
incluirse en el informe de investigación, aquellas que deberán corregirse o
modificarse en algo y las que tengan graves deficiencias serán excluidas.

CAPITULO II

MARCO TEORICO

2.1. ¿QUÉ ES EL VIOLENCIA HACIA LOS NIÑOS?

Un niño, según la Ley considerado como tal en este sentido a todo menor de 18
años, es maltratado o abusado cuando su salud física o mental o su seguridad
están en peligro, ya sea por acciones u omisiones llevadas a cabo por la madre o
el padre u otras personas responsables de sus cuidados, produciéndose el
maltrato por acción, omisión o negligencia. El maltrato a los niños es un grave
problema social, con raíces culturales y psicológicas, que pueden producirse en
familias de cualquier nivel económico y educativo.

El maltrato viola derechos fundamentales de los niños o niñas y por lo tanto, debe
ser detenido, cuanto antes mejor. El origen de la crueldad hacia los niños es en su
sentido más amplio puede ser dividido en cuatro categorías:

1. Crueldad inspirada en conceptos exagerados de disciplina y en base a sus


funciones que se resultan ser sujetos profundamente inadecuados e
irresponsables: alcohólicos, drogadictos, criminales o delincuentes, débiles
mentales etc..
2. Actos de violencia o negligencia cometidos por padres o adultos ejerciendo
rígidas interpretaciones de la autoridad y de normas y reglas de conducta.
3. Crueldad patológica cuyos oscuros orígenes mentales o psicólogos son
muy difíciles de identificar y todavía mas de tratar.
4. La crueldad más intangible de todas, la crueldad oficial o la organizada,
aquella que se comete por ignorancia, por insensibilidad o por omisión en la
forma de falta de legislación o de cumplimiento de la misma que proteja
adecuadamente al menor.

6
2.2. CLASIFICACIÓN DEL MALTRATO

El abuso infantil es un patrón de maltrato o comportamiento abusivo que se dirige


hacia el niño y que afecta los aspectos físico, emocional y/o sexual, así como una
actitud negligente hacia el menor, a partir de la cual se ocasiona amenaza o daño
real que afecta su bienestar y salud. El maltrato infantil se puede clasificar en
maltrato por acción y maltrato por omisión.

A la vez que el maltrato por acción se divide en:

 Maltrato físico, abuso fetal, maltrato psicológico o emocional, abuso sexual.


 El maltrato por omisión es el abandono o negligencia, el cual se subdivide:
 Abandono físico y negligencia o abandono educacional.

2.2.1. MALTRATO FÍSICO

Se define como maltrato físico a cualquier lesión física infringida al niño o niña
(hematomas, quemaduras, fracturas, lesiones oculares, lesiones cutáneas)
mediante pinchazos, mordeduras, golpes, estirones de pelo, torceduras, puntapiés
u otros medios con los que se lastime al niño.

Aunque el padre o adulto a cargo puede no tener la intención de lastimar al niño,


también se interpreta como maltrato a la aparición de cualquier lesión física arriba
señalada que se produzca por el empleo de algún tipo de castigo inapropiado para
la edad del niño.

A diferencia del maltrato físico el castigo físico se define como el empleo de la


fuerza física con intención de causar dolor, sin lesionar, con el propósito de
corregir o controlar una conducta. No siempre es sencillo saber cuando termina el
"disciplinamiento" y comienza el abuso. En contraposición del maltrato físico, el
castigo corporal es una práctica muy difundida y socialmente aceptada.

2.2.2. ABUSO FETAL

Ocurre cuando la futura madre ingiere, deliberadamente, alcohol u otras drogas,


estando el feto en su vientre. Producto de esto, el niño (a) nace con problemas,
malformaciones, retraso severo.

7
2.2.3. MALTRATO EMOCIONAL O PSICOLÓGICO

Es una de las formas más sutiles pero también más existentes de maltrato infantil.
Son niños o niñas habitualmente ridiculizados, insultados regañadas o
menospreciadas. Se les somete a presenciar actos de violencia física o verbal
hacia otros miembros de la familia. Se les permite o tolera uso de drogas o el
abuso de alcohol. Si bien la ley no define el maltrato psíquico, se entiende como
tal acción que produce un daño mental o emocional en el niño, causándole
perturbaciones suficiente para afectar la dignidad, alterar su bienestar e incluso
perjudicar su salud

Actos de privación de la libertad como encerrar a su hijo o atarlo a una cama, no


solo pueden generar daño físico, sino seguro afecciones psicológicas severas. Lo
mismo ocurre cuando se amenaza o intimida permanente al niño, alterando su
salud psíquica.

2.2.4. ABUSO SEXUAL

Puede definirse como tal a los contactos o acciones recíprocas entre un niño o
una niña y un adulto, en los que el niño o niña está siendo usado para la
gratificación sexual del adulto y frente a las cuales no puede dar un
consentimiento informado. Puede incluir desde la exposición de los genitales por
parte del adulto hasta la violación del niño o niña.

Las formas comunes del abuso sexual son el incesto, violación, el estupro, el
rapto, rufianismo, actos libidinosos, etcétera.

Una forma común de abuso sexual es el incesto, definido este como el acto sexual
entre familiares de sangre, padre-hija, madre-hijo, entre hermanos.

2.2.5. ABANDONO O NEGLIGENCIA

Significa una falla intencional de los padres o tutores en satisfacer las necesidades
básicas del niño en cuanto alimento, abrigo o en actuar debidamente para
salvaguardar la salud, seguridad, educación y bienestar del niño. Es decir, Dejar
de proporcionar los cuidados o atención al menor que requiere para su adecuado

8
crecimiento y desarrollo físico y espiritual. Esto puede incluir, por ejemplo, omitir
brindarle al menor alimentos, medicamentos y afecto.

Pueden definirse dos tipos de abandono o negligencia:

Abandono físico: Este incluye el rehuir o dilatar la atención de problemas de salud,


echar de casa a un menor de edad; no realizar la denuncia o no procurar el
regreso al hogar del niño o niña que huyo; dejar al niño solo en casa a cargo de
otros menores.

Negligencia o abandono Educacional: No inscribir a su hijo en los niveles de


educación obligatorios para cada provincia; no hacer lo necesario para proveer la
atención a las necesidades de educación especial.

En diversas oportunidades realizar el diagnostico de negligencia o descuido puede


presentar problemas de subjetividad. El descuido puede ser intencional como
cuando se deja solo a un niño durante horas porque ambos padres trabajan fuera
del hogar. Este último ejemplo como tantos otros que generan la pobreza, el
abandono o descuido es mas resultado de naturaleza social que de maltrato
dentro de la familia.

2.3. LUGAR Y MODO EN QUE SE PRESENTA EL MALTRATO AL NIÑO

En el hogar. La mayoría de los casos de maltrato infantil ocurre dentro de la


familia. Cuando la familia tiene vínculos estrechos con otros pariente, tales como
los abuelos, la condición de un niño puede salir a la luz por la intervención de
estos.

La posibilidad de encontrarse con una relación de maltrato.

El abuso sexual y el maltrato físico se revelan al medico general o al pediatra. El


maltrato emocional rara vez se presenta de este modo, en gran medida porque
surge la duda acerca de la persona apropiada en quien puede confiar un pariente.

Aquellos profesionales que visitan familias, tales como trabajadores de salud y


trabajadores sociales, pueden llegar a sospechar el maltrato infantil, pero rara vez
son elegidos para confiarles tal revelación. Esto se debe con frecuencia, a que

9
visitan hogares a partir de que surgen preocupaciones iniciales sobre las aptitudes
del padre dentro de la familia. Tales padres muchas veces provienen de hogares
en los que se abuso de ellos; ven a los especialistas como adversarios mas que
como apoyo, ya que a sus colegas los recuerdan en asociación con las tensiones
de su propia infancia. En la clínica o guardería. Los niños de menos de cuatro o
cinco años de edad con frecuencia a revisiones físicas y de crecimiento. Cuando
se les cría en un entorno de creencias, es posible que desde época temprana se
les coloque en una guardería. La cuidadosa observación de estos niños puede
llevar a la detección d maltrato infantil, pero nunca resulta fácil decidir cuándo el
desarrollo de un niño se ve comprometido como consecuencia dl maltrato. Cuando
las lesiones no accidentales están presentes, resulta menos difícil, pero dichos
casos constituyen una minoría.

En la escuela. El abuso contra escolar origina considerables problemas para el


reconocimiento del maltrato. Los niños con mayores riesgos vienen de familias en
las aquellas que sustenta la autoridad son considerados sospechosos. Los
maestros dedican mucho de su tiempo y sus habilidades en ganar la confianza del
alumno y esto requiere hacer amistad con ellos. Mientras mayores son los niños,
estos se tornan mas reservados acerca de sus cuerpos, de ahí que la enfermedad
escolar y el oficial médico de la escuela que tengan una importante
responsabilidad en el reconocimiento de la evidencia física del maltrato. Aunque
los maestros son los primeros en sospechar del abuso, nunca resulta fácil
observar lesiones físicas cuando los niños se mudan de ropa. El comportamiento
de los menores sin embargo, sigue patrones relacionados con la edad y con los
que el maestro esta familiarizado. El comportamiento anormal o divergente puede
ser síntoma más importante del maltrato infantil y el maestro es el profesional
mejor ubicado para sospechar de este.

2.3. DETECCIÓN DEL MALTRATO

La idea popular de un niño "golpeado" evoca la imagen de un infante patético,


sucio y cubierto de moretones, que mira fijamente al fotógrafo de modo
aprehensivo. La verdadera imagen revela que los niños sufren de una variedad

10
infinita de abusos, por lo general a manos de los propios padres y a menudo sin
lesión evidente ni queja.

El maltrato infantil incluye una serie de ofensas que van de los extremos de la
violación y el asesinato, hasta la más sutil e insidiosa negación de amor. Un niño
que crece sin esperar nada sino un entorno hostil aprenderá a vivir dentro de estos
limites y adaptara su comportamiento de tal forma que no traiga la mínima
agresividad. Tales niños aprenden desde época temprana a procurar la
complacencia de cualquier adulto con el que puedan entrar en contacto como
forma de protegerse a sí mismos.

La habilidad para detectar que un niño ha sido maltratado depende, por lo tanto,
del conocimiento por parte de cada observador no sólo del estado físico de un
niño, sino del comportamiento normal infantil. No basta con notar cualquier cambio
en las interaccione3s sociales de un niño en particular, pues el niño agredido
constantemente puede haber sufrido desde la primera infancia. Por consiguiente,
cuando un niño parece comportarse de un modo anormal, deberá considerarse la
posibilidad de que la causa sea el maltrato.

La detección de esta variedad de maltrato infantil depende de dos factores: la


capacitación en los patrones típicos que aquél presenta y la experiencia. Para
llegar a desarrollar un

"olfato" y descubrir al niño maltratado, cada individuo necesita haber acumulado


un acervo considerable de casos. El entrenamiento debe, por supuesto, ocupar el
primer lugar. No es sino hasta que tenemos un grupo de observadores
estratégicamente ubicados en la comunidad, que podemos esperar alcanzar la
detección temprana.

2.4. COMO IDENTIFICAR A LOS NIÑOS MALTRATOS

Los indicadores de conducta

El comportamiento de los niños maltratados ofrece muchos indicios que delatan su


situación. La mayoría de esos indicios son no específicos, porque la conducta
puede atribuirse a diversos factores.
11
Sin embargo, siempre que aparezcan los comportamientos que señalamos a
continuación, es conveniente agudizar la observación y considerar el maltrato y
abuso entre sus posibles causas:

 Las ausencias reiteradas a clase


 El bajo rendimiento escolar y las dificultades de concentración
 La depresión constante y/o la presencia de conductas autoagresivas o
ideas suicidas.
 La docilidad excesiva y la actitud evasiva y/o
 Defensiva frente a los adultos.
 La búsqueda intensa de expresiones afectuosas por parte de los adultos,
especialmente cuando se trata de niños pequeños.
 Las actitudes o juegos sexualizados persistentes e inadecuados para la
edad.

Los indicadores físicos:

 La alteración de los patrones normales de crecimiento y desarrollo.


 La persistentes falta de higiene y cuidado corporal
 Las marcas de castigo corporales.
 Los "accidentes" frecuentes.
 El embarazo precoz.

2.5. GRUPOS POR EDADES

Menos de nueve meses. Los niños no aprenden a girar sobre su cuerpo sino hasta
que cumplen unos tres meses o más. Dependen de los demás para moverse de
un lado a otro. Por lo tanto, es poco probable que se lesionen en manos de
alguien que no sea aquel que los cuida, aunque no hay que descartar la
posibilidad de un accidente. Por consiguiente, los moretones en los bebes
pequeños considerarse como no accidentales, cuando se llega a una posible
comprobación del daño.

Ciertas lesiones que pueden presentar algunos de estos infantes son horrendas, y
la cuestión de si un bebé tiene unos padecimientos de "huesos quebradizos" o una

12
tendencia hereditaria a las hemorragias es algo que se emplea a menudo. Estas
condiciones son en extremo poco comunes, pero es parte del cuidado médico
rutinario él examinarlas.

Los bebés tienen una capacidad extraordinaria para recuperarse de las


enfermedades graves o de las lesiones severas, pero también es cierto que son
frágiles que los niños de mayor edad. Sus vidas pueden extinguirse como
resultado de un episodio breve pero violento, ya que no pueden huir o esconderse
de su atacante. Debido a esto, no pienso que puede criticarse una tendencia al
error en torno de la precaución cuando un bebe puede estar bajo riesgo.

Los niños que gatean o empiezan a andar: Una vez que los niños pueden
moverse, se lastiman con mayor facilidad. Por lo general, estas heridas se hacen
visibles en la frente o en aquellas partes del cuerpo que tienen más probabilidad
de recibir un golpe con el mobiliario o el suelo: codos, rodillas, pies, etcétera.

Cuando estos niños son golpeados, a menudo sólo es posible afirmar que los
daños son compatibles con las lesiones no accidentales.

2.6. FACTORES ASOCIADOS CON EL MALTRATO Y LAS CAUSAS

2.6.1. INDIVIDUALES: Ascendientes maltratadores

 Concepto equivocado de la disciplina


 Falsas expectativas
 Inmadurez
 Retraso Mental
 Psicopatías
 Adicciones
 Trato brusco

2.6.2. FAMILIARES: Hijos no deseados

 Desorganización hogareña
 Penurias económicas
 Desempleo o subempleo

13
 Desavenencia conyugal
 Falta de autodominio
 Educación severa

2.6.3. SOCIALES: Concepto del castigo físico

 Actitud social negativa hacia los niños


 Indiferencia de la sociedad

2.7. CAUSAS

Supone que los "factores de estrés situaciones" derivan de los siguientes cuatro
componentes:

a) Relaciones entre padres: Segundas nupcias, disputa maritales, padrastros


cohabitantes, o padres separados solteros.
b) Relación con el niño: Espaciamiento entre nacimientos, tamaño de la
familia, apego de los padres al niño y expectativas de los padres ante el
niño.
c) Estrés estructural: Malas condiciones de vivienda, desempleo aislamiento
social, amenazas a la autoridad, valores y autoestima de los padres.
d) Estrés producido por el niño: Niño no deseado, niño problema, un niño que
no controla su orina o su defecación, difícil de disciplinar, a menudo
enfermo, físicamente deforme o retrasado.

Las posibilidades de que estos "factores de estrés" situacionales desemboquen en


el maltrato infantil o el abandono, determinan la relación padres-hijo y dependen
de ella. Una relación segura entre éstos amortiguará a cualquier efecto del estrés
y proporcionará estrategias para superarla, a favor de la familia. En cambio, una
relación insegura o ansiosa no protegerá a la familia que esté bajo tensión; la
"sobrecarga de acontecimientos", como las discusiones o el mal comportamiento
del niño, puede generar diversos ataques físicos o comportamiento del niño,
puede generar diversos ataques físicos o emocionales. En suma, lo anterior tendrá
un efecto negativo en la relación existente entre los padres y el hijo, y reducirá los
efectos amortiguadores aun más. Así, se establece un circulo vicioso que, a la

14
larga, lleva a una "sobrecarga sistemática", y en que el estrés constantes ocasiona
agresiones físicas reiteradas. La situación empeora en forma progresiva, sin la
intervención pertinente, y podría calificarse como una "espiral de violencia".

De aquí se sigue que la relación padres-hijo debería ser el punto de concentración


para el trabajo en torno de la prevención, tratamiento y manejo del maltrato y
abandono infantiles. Es en este nivel que los psicólogos como nosotros podemos
aportar una contribución significativa.

Como sugiere el modelo, el grado de involucramiento de los padres en la relación


con el niño dependerá de la personalidad o el carácter y su patología, como seria
el mal control del temperamento y los desordenes psiquiátricos. Estos factores de
personalidad pueden ser resultado de las experiencias sociales tempranas del
padre o la madre; de hecho, muchos padres que maltratan informan que ellos
mismos fueron víctimas del maltrato cuando eran niños.

Finalmente, como se indica al comienzo del presente capítulo, los valores


culturales y comunitarios pueden afectar las normas y estilos del comportamiento
los padres. Éstos recibirán la influencia de su posición social, en lo que se refiere a
edad, sexo, educación, condición, socioeconómica, grupo étnico y antecedentes
de clase social.

Un grupo importante de padres que maltrata o abusa de sus hijos han padecido en
su infancia falta de afecto y maltrato. Esto suele asociarse a una insuficiente
maduración psicológica para asumir el rol de crianza, inseguridades, y
perspectivas o expectativas que no se ajustan a lo que es de esperar en cada
etapa evolutiva de sus hijos. Como señala Kempe, estas características
psicológicas en sus padres, son un importante potencial del maltrato. De tal forma
que:

"Cualquier pequeño hecho de la vida cotidiana, todo comportamiento del niño que
se considere irritante, si encuentra a su progenitor en situación de crisis, con
escasas defensas anímicas y con dificultades para requerir apoyo externo, puede
desatar la violencia".

15
Resumiendo, los factores que estos autores relacionan con el maltrato son:

1. La repetición de una generación a otra de una pauta de hechos violentos,


negligencia o privación física o emocional por parte de sus padres.
2. El niño es considerado indigno de ser amado o es desagradable, en tanto
las percepciones que los padres tienen de sus hijos no se adecuan a la
realidad que los niños son, además, consideran que el castigo físico es un
método apropiado para "corregirlo" y llevarlos a un punto más cercano a
sus expectativas.
3. Es más probable que los malos tratos tengan lugar en momentos de crisis.
Esto se asocia con el hecho de que muchos padres maltratantes tienen
escasa capacidad de adaptarse a la vida adulta.
4. En el momento conflictivo no hay líneas de comunicación con las fuentes
externas de las que podrían recibir apoyo. En general estos padres tienen
dificultades para pedir ayuda a otras personas. Tienden a aislarse y
carecen de amigos o personas de confianza.

2.8. CARACTERÍSTICAS DEL NIÑO GOLPEADO Y EL AGENTE AGRESOR

El niño no solamente es maltratado a través de la agresión física, sino también por


la privación del alimento, cuidados físicos y estimulación sensorial tan necesaria
para su desarrollo. Así, la desnutrición, las malas condiciones higiénicas del niño,
el retraso en las esferas del lenguaje y personal social, clásicamente consideradas
como medidas de la estimulación que el niño recibe de su ambiente, son la regla,
en nuestra muestra y en la de otros autores. A lo anterior se suma el deterioro de
las funciones intelectuales como secuela de lesiones al sistema nervioso central.
De acuerdo con algunos autores, este tipo de secuelas llega al 40%.

En nuestra serie basta enfatizar la presencia en el 17% de los casos de secuelas


neurólogas severas y retraso importante en el desarrollo en el 50% de los niños
afectados. En algunos casos cabe la posibilidad de que el retraso y apariencia
poco agraciada del menor disparasen la ira del agresor. Pero en otros muchos
puede plantearse la posibilidad inversa: que el retraso fuese secuela de asaltos
previos y retroalimente la ira de desencadenarse de agresiones posteriores. En no

16
pocas veces, inclusive, sirve para justificar al agresor en sus nuevos ataques al
niño.

El panorama se vuelve más sombrío si recordamos, como lo han demostrado


varios trabajos, que la desnutrición por sí misma es capaz de afectar en sentido
negativo y en forma irreversible el crecimiento y el desarrollo. Para algunos
autores, la "falla para crecer" en un niño, puede ser el primer dato que oriente
hacia el diagnóstico.

Estos niños muestran un patrón de comportamiento muy característico cuando


están internados en el hospital. Aun en ausencia de lesiones que comprometan el
estado general, el niño aparece triste, apático y en ocasiones estuporoso; rehuye
el acercamiento del adulto y frecuentemente se oculta bajo las sábanas. En
general, es un niño que llora y no se muestra ansioso, cuando se trata un lactante
mayor o un preescolar, por la ausencia de la madre y aun puede mostrar franco
rechazo hacia ésta cuando ha sido la agresora. La conducta del niño cambia
relativamente poco tiempo a una de aferramiento excesivo hacia el personal del
hospital, con gran necesidad de contacto físico, al mismo tiempo que hay periodos
patentes de agresividad cuando se les frustra; estos niños pegan y aun llegan a
morder a las enfermeras, a pesar de que éstas muestra especial afecto y cuidado
al menor cuando se enteran del problema.

Se han señalado también patrones de comportamiento característicos del agente


agresor en el hospital; poco interés del familiar involucrado acerca de la seriedad
de las lesiones y evolución del padecimiento, con abandono del niño en el hospital
o, al menos, visitas cortas muy esporádicas y el comentario frecuentes de las
enfermeras de la sala "de no conocer al padre o madre del niño", a pesar de
estancias prolongadas. Sin embargo, esto no es necesariamente un
comportamiento característico del familiar agresor; en ocasiones, el padre o
familiar involucrado parece mostrar una gran preocupación por la enfermedad del
pequeño paciente, con actitudes francas de sobreprotección hacia éste, lo cual
hace más difícil para el médico, la enfermera y aun la trabajadora social con

17
experiencia en el manejo de este problema, aceptar la posible culpabilidad en una
persona tan aparentemente interesada en el bienestar del menor.

En nuestra serie, al igual de lo que sucede al comparar los reportes de diversos


autores, existe cierta discrepancia en lo que se refiere al familiar involucrado como
agresor. Si tomamos en cuenta sólo los casos en los cuales la identificación del
agresor fue calificada como "comprobada" o "muy posible", el padre aparece como
agresor en el 26% de los casos y la madre en el 58%; en el 16% restantes,
estuvieron involucrados padrastros, madrastras y un hermano mayor.

Hay acuerdo general en que se trata de personas jóvenes y aun cuando existe la
creencia de que el maltrato físico extremo está confinado a la clase
socioeconómicamente baja y/o personas de inteligencia baja, la mayor parte de
los reportes, así como nuestra experiencia, están de acuerdo en que los padres
golpeados provienen de todas las clases sociales y están dentro de todos los
niveles de inteligencia. En un trabajo se señala que "es probable que algunos
padres estén psicológicamente propensos a este desastre particular, pero esto no
tiene nada que ver con la clase social o inteligencia"

Se han descrito muchos rasgos característicos del agente del agresor. Entre ellos
estaría la inmadurez emocional, la cual es la consecuencia de insatisfacción de la
misma durante la niñez. Fuera de lo antes señalado, los agresores presentan
escasa o nula psicopatología, cuando menos aparente. Muy frecuentemente, el
agresor, en quien la sola presencia del niño provoca un estado afectivo
incontrolable, trata de manejar sus emociones apartándose del menor a través de
relegar los cuidados al otro padre u otra persona; es cuando se rompe este arreglo
que ocurre la agresión. Esto último explicaría la mayor frecuencia del llamado
"Síndrome del Niño Golpeado" durante los primeros dieciocho meses de vida, lo
cual, inclusive, ha hecho que también se conozca este problema como "Síndrome
del Bebé Golpeado". Cuando el niño empieza a caminar y más aún cuando es
capaz de aprender a rehuir al agresor, las agresiones son más frecuentes.

18
2.9. CONSECUENCIAS

Los niños criados en hogares donde se les maltrata suelen mostrara desórdenes
postraumáticos y emocionales. Muchos experimentan sentimientos de escasa
autoestima y sufren de depresión y ansiedad por lo que suelen utilizar el alcohol u
otras drogas para mitigar su distress psicológico siendo la adicción al llegar la
adultez, más frecuente que en la población general.

Los efectos que produce el maltrato infantil, no cesan la niñez, mostrando muchos
de ellos dificultades para establecer una sana interrelación al llegar a la adultez.

Algunos niños sienten temor de hablar de lo que les pasa por que piensan que
nadie les creerá. Otras veces no se dan cuenta que el maltrato a que son objeto
es un comportamiento anormal así aprenden a repetir este "modelo"
inconscientemente. La falta de un modelo familiar positivo y la dificultad en crecer
y desarrollarse copiándolo, aumenta las dificultades de establecer relaciones.

Puede que no vean la verdadera raíz de sus problemas emocionales, hasta que al
llegar a adultos busquen ayuda para solucionarlos.

"Para muchos niños / as que sufren de maltrato, la violencia del abusador se


transforma en una forma de vida. Crecen pensando y creyendo que la gente que
lastima es parte de la vida cotidiana, por lo tanto este comportamiento se toma
"aceptable" y el ciclo del abuso continua cuando ellos se transforman en padres
que abusan de su hijos y estos de los suyos, continuando así el ciclo vicioso por
generaciones".

Muchas personas no pueden cortar el ciclo del abuso, pero hay niños al que la
bibliografía mundial denomina "resilentes" que poseen características que les
permite superar este obstáculo. Estos niños tiene la habilidad de llamar
positivamente la atención de otras personas, se comunican bien, poseen una
inteligencia promedio, se nota en ellos un deseo por superarse y creen en sí
mismos. Muchas veces es la aparición de un adulto preocupado por ellos lo que
les permite desarrollar esta habilidad y romper con el ciclo del abuso.

Como todos sabemos, los niños aprenden de lo que viven.


19
El niño aprende lo que vive

o Si vive con tolerancia aprende a ser paciente


o Si vive criticado aprende a condenar
o Si vive con aprobación aprende a confiar en sí mismo
o Si vive engañado aprende a mentir
o Si vive en equidad aprende a ser justo
o Si vive con vergüenza aprende a sentirse culpable
o Si vive con seguridad aprende a tener fe en sí mismo
o Si vive hostilizado aprende a pelear
o Si vive en la aceptación y la amistad aprende a encontrar el amor en
el mundo.

CAPITULO III

PROPUESTA INNOVADORA

3.1. TÍTULO DE LA PROPUESTA:

Prevención del maltrato infantil en las viviendas sociales del Actur.

3.2. OBJETIVOS

Este proyecto encuentra su sentido en la combinación entre la base teórica


expuesta y el diagnóstico tanto del contexto como de las situaciones familiares
que se dan en torno al maltrato infantil.

El momento actual de crisis económica y el hecho de que estas familias sean


especialmente vulnerables a sus efectos suponen un elemento más que justifica la
implantación de estrategias preventivas.

Toda acción educativa, social o familiar debe tener como base un modelo
para percibir la realidad de una forma organizada y construir así un significado
(Amorós y Ayerbe, 2000). En la intervención familiar es importante actuar desde y
a partir de un modelo flexible y dinámico que respete las características y la
idiosincrasia del sistema familiar y que permita integrar las distintas realidades.

20
3.3. PARTICIPANTES

Se prevé que la mayor parte de los participantes van a ser madres, estudiantes y
habitantes de la comunidad educativa tanto porque asumen que los hijos son
responsabilidad suya como por su mayor disponibilidad horaria.

Se va a tratar de formar un grupo heterogéneo y representativo. En base al


análisis realizado el perfil va a ser: madres y/o padres pertenecientes a los
diferentes grupos de población representados en la zona (españoles payos,
gitanos e inmigrantes). La mayor parte van a tener 3 o más hijos.

El proyecto va dirigido a familias en las que los menores estén en riesgo pero cuya
situación no sea de gravedad, con ciertas garantías de mejora. También se tendrá
en cuenta que sean familias con liderazgo dentro de su grupo de población, de
forma que se conviertan en transmisores de la información y en motivadores para
la participación de otras madres y padres en las siguientes ediciones del proyecto.

3.4. OBJETIVOS

Los objetivos que se plantean alcanzar con la aplicación de esta propuesta son los
siguientes:

 Prevenir situaciones de maltrato infantil en todas sus formas en las familias


participantes y en su entorno inmediato.
 Dotar a los padres y madres de habilidades personales y parentales que
repercutan en la mejor crianza y educación de sus hijos, y en unas
relaciones familiares más saludables.
 Minimizar el impacto que el entorno tiene en los menores residentes,
favoreciendo la igualdad de oportunidades con respecto al resto de niños
de la ciudad.

A través de la intervención se pretenden modificar y mejorar cuatro áreas:


adquisición y desarrollo de habilidades, cambio de creencias y actitudes
educativas, fomento del intercambio de información y aprendizaje de estrategias
de resolución de problemas.

21
3.5. METODOLOGIA

Las actividades de este proyecto se desarrollan a través de sesiones grupales. El


grupo que se constituye es fundamentalmente un grupo socioeducativo o de
aprendizaje. Se dirige a desarrollar y adquirir habilidades y representa un progreso
personal para los participantes. También tiene algunas características de los
grupos socioterapeúticos y de los grupos de ayuda mutua.

CAPITULO IV

CONCLUSIONES

Este trabajo nace del encuentro entre mi inquietud profesional y la oportunidad


que se me brinda desde el ámbito académico para transformar esa inquietud en
ideas y en un proyecto.

Supone una oportunidad de visibilizar un problema oculto como es el maltrato


infantil, en el que muchas de sus señales de alarma son minimizadas al amparo
de la falsa creencia de que los hijos son propiedad de los padres y las relaciones
familiares forman parte del ámbito privado.

Así mismo da la oportunidad de introducir nuevas formas de trabajar, de no limitar


la acción profesional a la atención de casos individuales y dar un paso adelante
hacia la creación de intervenciones novedosas. Hay que tener presente que uno
de los aspectos que definen la disciplina del Trabajo Social es su riqueza, la
cantidad de planteamientos y estrategias que se pueden realizar siendo
coherentes con los principios de la profesión.

La puesta en práctica de este proyecto supone además de sus efectos en los


participantes una nueva forma de relación entre profesionales y usuarios del

22
servicio. Hasta ahora entienden que el papel de la trabajadora social es atender
sus demandas concretas y controlar el cumplimiento de los requisitos básicos
relacionados con la vivienda. Esta es una buena oportunidad para que la relación
avance y perciban nuestra figura como un agente de intervención en la mejora en
sus relaciones familiares.

Adquirir conocimientos teóricos, tener los datos del contexto y analizar con detalle
las percepciones que capto en el día a día son una base necesaria para elaborar
una proyecto con sentido y que pueda resultar positivo. Sin grandes pretensiones,
esta propuesta sólo es una idea más para mejorar la calidad de vida de las
personas para las que trabajo. Los cambios se producen dentro de procesos
largos y con el esfuerzo profesional de los técnicos y la voluntad de los
afectados. Pero estas pequeñas acciones son las que configuran esos
procesos y las que dan sentido a la presencia de un equipo de intervención social
en la zona.

A través de este trabajo se advierte que la problemática que supone el maltrato


infantil es muy amplia, no se limita a los casos de extrema gravedad con los que
todos estamos sensibilizados sino que la dejación de funciones y ciertas formas de
relación constituyen un maltrato hacia los menores que si bien no es tan visible si
que tiene unas secuelas en los afectados si la situación persiste durante mucho
tiempo.

Como en otras formas de maltrato se trata de unas dinámicas en las que todos
sufren, las víctimas, los padres y las personas del entorno que muchas veces
detectan que algo pasa pero no saben cómo abordarlo.

Aunque el discurso suele ser determinista, considerando que inevitablemente los


grupos de población con peores condiciones de partida van a repetir patrones de
conducta generación tras generación, creo que si se puede romper este círculo.
Para ello es necesario un análisis no sólo de los problemas si no de las causas
que los provocan y de las estrategias más útiles dirigidas a un cambio en positivo

23
Es tanto el volumen de trabajo diario que supone cumplir con las tareas que nos
encomienda la institución y atender las demandas (siempre urgentes o muy
urgentes) de los usuarios que no resulta fácil pensar en ampliar funciones. A
pesar de esta circunstancia considero imprescindible que superemos esta
limitación y nos planteemos un tiempo para la reflexión y otro

para dar un paso más allá y realizar intervenciones preventivas, innovadoras y que
trasciendan de lo individual a lo grupal y lo comunitario.

El maltrato infantil es una problemática que está presente, que tenemos que
abordar y en la que voy a seguir profundizando con miras a implementar esta y
otras futuras acciones.

Estas experiencias tienen beneficios a varios niveles, para la población a la que


nos dirigimos, para el crecimiento profesional de las personas que las realizamos y
para una mejor valoración de una profesión tan versátil como es el Trabajo Social.

BIBLIOGRAFIA

Aldayturriaga, J.L. (1994). Maltrato y abandono infantil. La tutoría familiar: una


alternativa eficaz. Zerbitzuan Revista de Servicios Sociales, 24, 21- 30.

Amorós, P. y Ayerbe, P. (Eds.) (2000). Intervención educativa en inadaptación


social. Madrid: Síntesis.

Balsells, M.A., Del Arco, I. y Miñambres, M.A. (2007). Familias, educación y


prevención del maltrato infantil. Bordón. Revista de Pedagogía, 59, 31-46.

Barbero, J.M. y Cortés F. (2005). Trabajo comunitario, organización y


desarrollo social. Madrid: Alianza Editorial. 2010.

Cataldo, C.Z. (1991). Aprendiendo a ser padres: conceptos y contenidos para el


diseño de programas de formación de padres. Madrid: Visor.

Corkille, D. (1970). El niño feliz. Su clave psicológica. Barcelona: Gedisab


Editorial. 2001.

24
Cortés, F. y Llobet, A. (2006). La acción comunitaria desde el trabajo social. En X.
Úcar, y A. Llena. Miradas y diálogos en torno a la acción comunitaria (pp. 131-
156). Barcelona: Graó.

Cyrulnik, B. (2001). Los patitos feos. La resiliencia: una infancia infeliz no


determina la vida. Barcelona: Gedisa Editorial. 2008.

De Paul, J. (1987). Los malos tratos y el abandono en la infancia:


Consideraciones generales. Zerbitzuan. Revista de Servicios Sociales, 3, 69-75.

Escorihuela, J.L. (2006). Taller de habilidades del facilitador. Acciones e


Investigaciones Sociales, 22, 157-226.

ANEXOS

25

También podría gustarte