LECTURA 3

INTECAP CSL 2024.CSL.0803.00/CSL.E.
10063
MEJORAMIENTO DE LA COMPRENSION DE LECTURA
LECTURA 3
Nombre: Edgar Saúl Espinoza Rosales
Fecha: 15-8-2024
Instrucciones: debe leer el documento adjunto y colocar al final de cada lectura
el tiempo en minutos y segundos que se tomó para leer, al final hay temas de
lectura y también debe aplicar el tiempo realizado y responder las preguntas,
cuando finalice guarde el archivo y envíelo a la carpeta compartida en drive del
link que se adjunta.
https://drive.google.com/drive/folders/
1mCfsfBHr9bjrdP_1jZJX4OMYPAvMMjAO?usp=sharing
Los duendes zapateros

Se dice que los duendes aparecen cuando más se les necesita. Se sabe que
son pequeñitos, huidizos, pero que se divierten haciendo el bien a los demás,
aunque de tanto en tanto esconden objetos solo por travesura.
Un día de tantos, los duendecitos escucharon a un viejo zapatero lamentarse

ante su esposa de los malos tiempos por los que pasaban, de lo caro que
estaba el cuero y del poco dinero que recibían por sus zapatos. Se
encontraban afligidísimos porque ya solo contaban con una tira de cuero para
hacer un último par de zapatos.
Los duendes se compadecieron y quisieron ayudarlos. Esperaron a que los

viejos estuvieran dormidos para comenzar a trabajar. Cortaban, cosían y
cantaban, hasta que terminaron el par de zapatos.
Por la mañana, la sorpresa del zapatero y su esposa era tal, que no daban
crédito a lo que veían sus ojos: ahí estaban los más hermosos zapatos que
persona alguna se hubiera imaginado. Puestos en el aparador, pronto
llamaron la atención de los paseantes. Un rico caballero ofreció una buena
paga por ellos, y con el dinero no solo pudieron comprar comida sino una
pieza de cuero con la cual podrían hacer hasta dos pares de zapatos.
La pareja quiso descubrir quién los había ayudado, así que a la noche
siguiente se escondieron para averiguar el misterio de los zapatos. Después
de una paciente y silenciosa espera, los vieron llegar: eran unos simpáticos
duendecillos desnudos que alegres confeccionaban los nuevos pares de
zapatos.
En agradecimiento a los duendes, a la siguiente noche, los zapateros les
hicieron ropita a su medida. Los duendes recibieron gustosos el regalo y se
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marcharon para seguir haciendo sus buenas acciones. Con el dinero que
recibieron, los viejos pudieron hacer muchos zapatos más y ya no volvieron a
pasar hambre nunca jamás.
Ahora responde:
1. ¿Cómo son los duendes de este cuento?
Pequeños y huidizos
2. ¿Cómo era la situación de los zapateros?
Pobres
3. ¿Quién y cómo ayuda a los zapateros?
Los duendes confeccionaron un par de zapatos en la noche
4. ¿Por qué la esposa del zapatero les hizo ropa a los duendes?
Porque estaban desnudos
5. ¿De qué manera beneficiaron los duendes a los zapateros?
Confeccionado zapatos
6. Imagínate que cuando más lo necesitas, unos misteriosos duendes
aparecen y…. (continúa tú la historia)
Se aparecen y te ayudan en lo que necesiyas
pastor embustero
Todos los días, un joven pastor llevaba a pastar sus ovejas al monte. Una
tarde, se le ocurrió gastar una broma a sus habitantes. Al volver al pueblo con
sus animales, empezó a gritar “¡El lobo, el lobo!”, y los buenos pueblerinos
salieron a ayudarlo. Pero no había lobo, sino tan solo un chico que no paraba
de reír.
Le pareció tan simpática la broma que pensó en repetirla al día siguiente.

Nuevamente, al grito del muchacho, los vecinos fueron a auxiliarlo, pero una
vez más encontraron al jovencito desternillándose por la broma.
Una tarde, los aldeanos volvieron a escuchar los gritos del niño.
Acostumbrados a la broma, decidieron ignorarlo. ¿Cómo iban a saber que en
esa ocasión sí era verdad la presencia del lobo?
El pobre y mentiroso pastor se quedó sin sus ovejas, pues nadie acudió a
ayudarlo. Pero eso sí, al lobo le dio tiempo de saborearlas a sus anchas.
Ahora responde:
1. ¿Cuál es la diversión del pastor?
Mentir
2. Además de llamarle “pastor”, ¿con qué otros nombre reconoces cuando
se habla de él?
Mentiroso
3. ¿Cómo responden los habitantes del pueblo al oír sus gritos?
Primera vess auxiliaron era falso
Segunda ves no fueron porque asumieron que era mentira
4. ¿Por qué hacía esta broma el joven pastor?
Le causabba gracia ver como la gente llegaba asustada
5. ¿Por qué un día los habitantes del pueblo ya no le hicieron caso?
Porque lo auxiliaron y era falso
6. ¿Qué ocurrió con las ovejas?
Fueron deboradas por el lobo
7. En tu opinión, ¿cómo podría el pastor volver a ganarse la confianza del
pueblo?
Dejando de mentir
8. ¿Tú le creerías a alguien muy mentiroso?
Si se que es mentiroso indagaria usando el sentido comun
Minutos
Segundos
Los duendes zapateros

Se dice que los duendes aparecen cuando más se les necesita. Se sabe que
son pequeñitos, huidizos, pero que se divierten haciendo el bien a los demás,
aunque de tanto en tanto esconden objetos solo por travesura.
Un día de tantos, los duendecitos escucharon a un viejo zapatero lamentarse

ante su esposa de los malos tiempos por los que pasaban, de lo caro que
estaba el cuero y del poco dinero que recibían por sus zapatos. Se
encontraban afligidísimos porque ya solo contaban con una tira de cuero para
hacer un último par de zapatos.
Los duendes se compadecieron y quisieron ayudarlos. Esperaron a que los

viejos estuvieran dormidos para comenzar a trabajar. Cortaban, cosían y
cantaban, hasta que terminaron el par de zapatos.
Por la mañana, la sorpresa del zapatero y su esposa era tal, que no daban
crédito a lo que veían sus ojos: ahí estaban los más hermosos zapatos que
persona alguna se hubiera imaginado. Puestos en el aparador, pronto
llamaron la atención de los paseantes. Un rico caballero ofreció una buena
paga por ellos, y con el dinero no solo pudieron comprar comida sino una
pieza de cuero con la cual podrían hacer hasta dos pares de zapatos.
La pareja quiso descubrir quién los había ayudado, así que a la noche
siguiente se escondieron para averiguar el misterio de los zapatos. Después
de una paciente y silenciosa espera, los vieron llegar: eran unos simpáticos
duendecillos desnudos que alegres confeccionaban los nuevos pares de
zapatos.
En agradecimiento a los duendes, a la siguiente noche, los zapateros les
hicieron ropita a su medida. Los duendes recibieron gustosos el regalo y se
marcharon para seguir haciendo sus buenas acciones. Con el dinero que
recibieron, los viejos pudieron hacer muchos zapatos más y ya no volvieron a
pasar hambre nunca jamás.
Ahora responde:
1. ¿Cómo son los duendes de este cuento?
2. ¿Cómo era la situación de los zapateros?
3. ¿Quién y cómo ayuda a los zapateros?
4. ¿Por qué la esposa del zapatero les hizo ropa a los duendes?
5. ¿De qué manera beneficiaron los duendes a los zapateros?
6. Imagínate que cuando más lo necesitas, unos misteriosos duendes
aparecen y…. (continúa tú la historia)
Minutos 6
Segundos 56

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Los duendes zapateros

Un día de tantos, los duendecitos escucharon a un viejo zapatero lamentarse

Los duendes se compadecieron y quisieron ayudarlos. Esperaron a que los

Le pareció tan simpática la broma que pensó en repetirla al día siguiente.

Los duendes zapateros

Un día de tantos, los duendecitos escucharon a un viejo zapatero lamentarse

Los duendes se compadecieron y quisieron ayudarlos. Esperaron a que los

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