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San José

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ORACION A SAN JOSÉ

¡San José, ayúdame a encontrarme con tu hijo Jesús en las


circunstancias cotidianas de la vida, en el silencio de la vida, en la
oración de cada día, en mi labor como estudiante, como hijo, como
miembro de la sociedad, permíteme edificar la misión que el Padre
destino a ser mía!
¡Haz que mi corazón se parezca al tuyo, tierno, limpio, puro,
generoso, entregado, fiel para recibir con alegría a Jesús! Toma
bajo tu cuidado mi protección, se el maestro de mi vida interior.
Glorioso patriarca San José, cuya intersección sabe hacer posible
las cosas imposibles, ven en mi ayuda en estos momentos, toma
bajo tu protección las situaciones que te encomiendo a fin de que
tengan una feliz solución; mi bien amado Padre, toda mi confianza
esta puesta en ti, y dado que lo puedes todo ante Jesús y María,
muéstrame que tu bondad es tan grande, como tu poder Amén.
SAN JOSÉ
Este hombre de quien nada se sabe, excepto que era carpintero en
un país donde las casas no tenían armazón y que era uno de los
muchos descendientes del rey David, era un hombre de carácter
humilde, bastante común y corriente. Está allí viendo al Niño Dios
envuelto en pañales, pero Jesús nos dice mucho de San José a
través de sus gestos, de sus palabras, de su oración y de su vida. Y
eso te lleva a pensar que el padre de Jesús, fue un hombre que
siempre se dejó guiar por el Espíritu Santo. Y tienes la certeza de
que el Espíritu de Dios moraba en él, envolvía cada uno de los
gestos de su vida y, desde esa presencia, San José estaba
profundamente capacitado para vivir en relación al otro y salir al
encuentro del cercano.
Aquella casa humilde de Nazaret, donde tal vez estuviera el taller
de carpintería integrado, significó para Jesús el lugar adecuado
para forjar un espacio para el encuentro y la relación. En el entorno
de la Sagrada Familia había espacio para la alegría de la vida
familiar, comandada por San José, el hombre justo. ¡Una gran
enseñanza para los que somos padres de familia pues eso te
enseña que debes desbordar amor, comprensión, generosidad,
escucha, perdón, entrega, dar libertad y llenarlo todo de oración
para que el Espíritu guíe y oriente!

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