Misterios Dolorosos
Misterios Dolorosos
Misterios Dolorosos
• Credo
• Intenciones
Primer misterio
La oración de Jesucristo en el huerto
«Entonces Jesús fue con ellos a un huerto,
llamado Getsemaní, y dijo a sus discípulos:
“Sentaos aquí mientras voy a orar”. Y tomando
consigo a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo,
comenzó a sentir tristeza y angustia. Entonces
les dijo: “Mi alma está triste hasta el punto de
morir; quedaos aquí y velad conmigo”. Y
adelantándose un poco, cayó rostro en tierra, y
suplicaba así: “Padre mío, si es posible, que
pase de mí esta copa, pero no sea como yo
quiero, sino como quieras tú”» (Mt 26, 36-39).
Padre Nuestro
Ave María x 10
Gloria
Oh
Segundo misterio doloroso
La flagelación
«Pilatos entonces tomó a Jesús y mandó
azotarle. Los soldados trenzaron una corona
de espinas, se la pusieron en la cabeza y le
vistieron un manto de púrpura; y, acercándose
a él, le decían: “Salve, Rey de los judíos”. Y
le daban bofetadas» (Jn 19,1-3).
Padre Nuestro
Ave María x 10
Gloria
Tercer misterio doloroso
La coronación de espinas
«Entonces los soldados del procurador se
llevaron a Jesús , lo desnudaron y le echaron
encima un manto púrpura y, trenzando una
corona de espinas, se la pusieron sobre la
cabeza, y en su mano derecha una caña, y
doblando la rodilla delante de él, le hacían
burla diciendo: “Salve, Rey de los judíos”».
(Mt 27, 27-29)
Padre Nuestro
Ave María x 10
Gloria
Oh
Cuarto misterio doloroso
Jesús con la cruz a cuestas
«Y obligaron a uno que pasaba, a Simón de
Cirene, que volvía del campo, el padre de
Alejandro y de Rufo, a que llevara su cruz.
Lo condujeron al lugar del Gólgota, que
quiere decir de la “Calavera”» (Mc 15, 21-
22).
Padre Nuestro
Ave María x 10
Gloria
Quinto misterio doloroso
La crucifixión y muerte de Jesucristo.
«Llegados al lugar llamado “La Calavera”, le
crucificaron allí a él y a los dos malhechores,
uno a la derecha y otro a la izquierda. Jesús
decía: “Padre, perdónales, porque no saben lo
que hacen”… Era ya eso de mediodía cuando,
al eclipsarse el sol, hubo oscuridad sobre toda
la tierra hasta la media tarde. El velo del
Santuario se rasgó por medio y Jesús, dando un
fuerte grito dijo: “Padre, en tus manos pongo
mi espíritu” y, dicho esto, expiró» (Lc 23, 33-
46).
Padre Nuestro
Ave María x 10
Gloria
Esta parte del Santo Rosario lo ofrecemos por: