Yolanda es una joven de 13 años y cursa 1º de la EGB en un centro educativo de la provincia de Imbabura que es reconocido por su énfasis en valores y porque contribuye al desarrollo intelectual de sus alumnos. Sus padres, Carles de 40...
moreYolanda es una joven de 13 años y cursa 1º de la EGB en un centro educativo de la provincia de Imbabura que es reconocido por su énfasis en valores y porque contribuye al desarrollo intelectual de sus alumnos. Sus padres, Carles de 40 años y Francesca de 38 años. Ambos tienen formación superior en áreas de las finanzas y ejercen sus profesiones en la empresa familiar que Francesca heredó de sus padres. En los últimos seis años, debido a la crisis económica del país, la dedicación de ellos ha tenido que ser permanente y gracias a ello, y a que son muy hábiles para tomar decisiones, su empresa no se ha visto afectada negativamente, sino todo lo contrario: es una de las empresas con mayor reconocimiento en el ámbito financiero. Yolanda tiene dos hermanos menores, Joan y Karla, de 8 años. Ellos también estudian en su mismo centro educativo. En palabras de sus padres, los tres son valorados positivamente por profesores y compañeros. En casa están acompañados por Raquel, quien trabaja con esta familia desde que Yolanda tenía 2 años. La relación con Raquel es descrita por la joven como cercana y que más que una empleada ha pasado a ser «casi de la familia». Hace seis meses, a Yolanda le diagnosticaron leucemia y para su tratamiento fue trasladada a la capital de su provincia en donde fue hospitalizada en un centro hospitalario especializado. Esta situación ha sido asumida por toda la familia con valentía, todos casi al unísono expresan que quieren que Yolanda esté bien y que logre superar esta difícil prueba. Sus padres y Raquel se turnan para acompañarla en su proceso de tratamiento y son una fuente importante de apoyo emocional. A pesar de lo mal que la está pasando, ella manifiesta a sus padres el interés por continuar con sus estudios, y aunque reconoce que no puede asistir a su instituto, pide que de alguna manera ella pueda seguir recibiendo instrucción. Los padres aceptan esta solicitud y hablan con los médicos, quienes les comentan sobre un programa que el hospital ha venido implementando para acercar las aulas a los internos. El siguiente paso de los padres es hablar con la persona responsable del programa, quien los informa debidamente sobre los propósitos de las aulas hospitalarias y les explica que, aunque no es una institución educativa, sí trabajan de la mano, en lo posible, con los centros educativos de los y las menores. Para ello solicitan información del instituto para ajustar los contenidos y contribuir a la continuidad de los procesos que la menor venía llevando a cabo. En el instituto donde estudia Yolanda reciben con gran disposición esta solicitud, e inmediatamente se ponen en contacto con la persona encargada del programa de aulas hospitalarias con quien acuerdan una reunión. Además, programan una reunión con el jefe de estudios para hablar de caso. Asisten también otros profesores y dos representantes de los compañeros de Yolanda, quienes al enterarse de su interés por retomar sus estudios, piden al director poder participar. En esta reunión se logra establecer un estado actual del proceso académico de la menor y se definen algunas acciones de apoyo por parte de todos los implicados. Estas acciones incluyen guías de trabajo, evaluaciones y hasta, si se veía posible en el hospital, una actividad grupal (propuesta por los mismos compañeros). A la reunión con la persona encargada del programa de aulas hospitalarias, acuden la madre de Yolanda y el jefe de estudios. Su conversación gira en torno a la manera de la que Yolanda va a entrar a ser parte del programa. Para ello se buscará tener en cuenta la participación de sus compañeros de instituto. Se llega al acuerdo de continuar con la programación académica que Yolanda viene desarrollando en su colegio. Para ello, el jefe de estudios hará llegar unas guías de trabajo con actividades que posteriormente serán evaluadas en la institución. En un segundo encuentro, eligen una serie de actividades lúdico-recreativas que contribuirán a que la joven lleve de mejor manera su estancia en el hospital. Para esta elección consultaron una página que ofrece una serie de recursos que pueden ser desarrollados en el hospital. Asignatura.