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ArtyHum, 26, 2016, pp. 21-35.
ARQUEOLOGÍA
ARQUEOLOGÍA Y PALEOPATOLOGÍA.
RECONSTRUIR LA VIDA A TRAVÉS
DE LA ENFERMEDAD Y LA MUERTE.
Por Ana Barrera Gordillo.
Universidad Nacional de Educación a Distancia.
Fecha de recepción: 24/06/2016
Fecha de aceptación: 25/06/2016
ArtyHum Revista de Artes y Humanidades, ISSN 2341-4898, nº 26, Vigo, 2016.
21
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Resumen.
Abstract.
La paleopatología
de
22
estudiar
encarga
studying diseases that affected living
afectaron a los seres vivos en el pasado.
creatures in the past. These diseases
Estas enfermedades dejaron su huella
left their lasting trace on the skeletal
indeleble en los restos óseos de las
remains of those creatures. In this
criaturas
article
que
artículo
las
enfermedades
Paleopathology is responsible for
que
este
las
se
padecieron.
vamos
a
En
analizar,
I
will
paleopathology
in
mainly
the
analyse
context
of
fundamentalmente, la paleopatología en
human osteoarchaeology: definition,
el contexto de la osteoarqueología
methodology –both in field and lab-,
humana: su definición, su metodología
indicators,
–tanto en campo como en laboratorio–,
human bones reveal and, finally, the
sus
principales
relationship between this subject and
patologías que los huesos humanos nos
archaeology and how relevant it is for
revelan y, finalmente, qué relación tiene
the discovery of our past.
indicadores,
las
main
pathologies
that
esta disciplina con la arqueología y cuán
relevante es para el descubrimiento de
nuestro pasado.
Palabras clave: antropología física,
Keywords: physical anthropology,
arqueología, osteoarqueología humana,
archaeology, human osteoarchaeology,
paleopatología.
paleopathology.
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La paleopatología en el marco de la
Etimología
osteoarqueología humana.
paleopatología.
La osteoarqueología humana se
define
fundamentalmente
definición
Etimológicamente,
el
de
término
el
paleopatología procede de las palabras
estudio científico de los restos humanos
griegas paleo (antiguo o viejo), pathos
hallados en yacimientos arqueológicos.
(sufrimiento o enfermedad) y logos
Podríamos enmarcar esta disciplina de
(estudio). En cuanto a la definición de la
modo
sub
paleopatología, la primera como tal la
especialidad dentro de la antropología
realizó en 1882 Robert Wilson Shufeldt
física.
(1850-1934),
general
como
y
23
como
una
La terminología para designar
osteólogo
y
miólogo
–entre otras muchas especialidades
esta clase de estudios es, actualmente y
que poblaron su
brillante carrera,
como suele suceder con las disciplinas
únicamente empañada por su enconada
pequeño
defensa de la “supremacía blanca”
mosaico que cambia su denominación
racial– estadounidense. Esta definición
relativamente
nuevas,
un
dependiendo del país. Sin embargo,
apareció publicada en el Standard
considero personalmente que, para
Dictionary (1885) como “la ciencia de
conservar la pulcritud etimológica y
las condiciones patológicas presentes
definir el campo de estudio de la
en los órganos de los animales extintos
disciplina
de
forma
exacta,
es
osteoarqueología humana como debe
o petrificados”.
Actualmente, la definición más
denominarse. Dentro, pues, de la
comúnmente
osteoarqueología humana, vamos a
Sir Marc Armand Ruffer (1859-1917),
fijar
patólogo y bacteriólogo angloalemán,
nuestra
atención
en
la
aceptada
es
la
de
paleopatología, que no es más que el
considerado
estudio científico de las enfermedades
paleopatología moderna. La definición
padecidas por las personas en el
quedaría, pues, como “la ciencia que ha
pasado, vistas a través de las huellas
podido demostrar la presencia de
que esas patologías dejaron en sus
enfermedades en los restos humanos y
restos esqueléticos.
de animales de los tiempos antiguos”.
el
padre
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de
la
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24
su andadura tras el nacimiento de la
Un poco de historia.
En cierto modo, la paleopatología
es una forma de Historia de la
arqueología
y
del
estudio
de
la
prehistoria a mediados del siglo XIX.
Medicina, una actividad que se remonta
Finalmente,
podríamos
señalar
a los albores de la civilización, puesto
cuatro etapas fundamentales52 en el
que las primeras pruebas escritas de su
recorrido de la paleopatología desde su
existencia –sin duda, más antigua– las
inicio hasta nuestros días:
tenemos en escritura cuneiforme sobre
tablillas
asirias.
Así
mismo,
el
antiguo Egipto contó con reputados
profesionales de la medicina y también
los
relatos
bíblicos
del
Antiguo
Testamento
atestiguan
su
práctica.
Finalmente,
en
la
Grecia
clásica
surgirán los primeros tratados médicos
de carácter protocientífico sobre las
diversas enfermedades.
La
paleopatología
1) Fase
previa
desde
el
Renacimiento hasta el surgimiento de la
arqueología y la prehistoria como
ciencias a mediados del siglo XIX.
Hallamos aquí algunas comunicaciones
plagadas de falsos diagnósticos, salvo
algunas excepciones y trabajos de
comienzos del siglo XIX que ya
abundan en lo que será la disciplina
científica. Resuenan nombres como el
es,
sin
embargo, mucho más que todo esto,
cirujano John Collins Warren o el
anatomista Richard Owen.
puesto que su finalidad es buscar un
diagnóstico actual sobre los vestigios
físicos de enfermedades pasadas para,
así, reconstruir la vida, la enfermedad o
el accidente y la muerte del individuo
en cuestión. La historia –aunque sus
respectivas metodologías difieren– y,
sobre todo, la arqueología, son, pues,
ciencias hermanas de la paleopatología,
2) Génesis de la disciplina desde
mediados del siglo XIX hasta el inicio
de la Primera Guerra Mundial en 1914.
Ubicamos aquí el inicio oficial de la
paleopatología con la figura de Pierre
Paul Broca (1824-1880), cirujano y
anatomista francés que descubrió el
área cerebral del lenguaje articulado
y halló
la
primera trepanación53
sin las cuales ésta no se sustenta.
Por tanto, podemos considerar que la
paleopatología como ciencia comienza
52
ISIDRO, A.; MALGOSA, A.: Paleopatología.
La enfermedad no escrita. Barcelona, Ed.
Masson, 2003.
53 Perforación quirúrgica del cráneo.
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protohistórica, dando un extraordinario
Perú (1959) de Juan B. Lastres y
impulso a la ciencia antropológica. Entre
Bones, bodis and disease (1963) de
los muchos nombres que surgen en esta
Calvin Wells, así como la obra
época
fundamental Diseases in Antiquity
el
pionera, brilla con luz propia
del
anteriormente
mencionado
(1967) de D. Brothwell y A. T.
Sir Marc Armand Ruffer, padre de la
Sandinson. A partir de la década de
paleopatología
los 70, las publicaciones y avances
moderna.
Resultaron
fundamentales sus análisis histológicos
en
en momias y su descubrimiento en
enumerarlos escaparía a este pequeño
estos mismos cuerpos de los huevos
repaso por la historia pretérita de la
calcificados de un trematodo parasitario.
disciplina.
la
disciplina
son
tantos
que
Se instituyen, además, en esta fase, varias
instituciones
científicas
fundamentales
para el desarrollo posterior de la disciplina.
3) Fase de consolidación entre el
Metodología
en 1939. Hallamos aquí, entre los
trabajos de varios eruditos, el nombre
del antropólogo Roy Lee Moodie y
su
obra,
fundamental,
de
1923
Paleopathology, an introduction to the
study of ancient evidences of disease.
4) Período contemporáneo, iniciado
relación
con
la
recuperación de restos humanos en
arqueología.
final de la Gran Guerra en 1918 y el
inicio de la Segunda Guerra Mundial
en
Como
es
comprensible,
la
fuente principal de información en
paleopatología son los restos humanos
esqueléticos. Por
este
motivo,
es
fundamental que el trabajo de campo se
lleve a cabo bajo parámetros óptimos
de
recuperación
y
conservación,
máxime tratándose normalmente de
vestigios
de
gran
fragilidad.
Así
tras el final de la Segunda Guerra
mismo, la documentación in situ de
Mundial en 1945, hasta el presente. Es
los restos recuperados es fundamental
realmente a partir de la década de los 60
para
cuando empiezan a proliferar tanto
laboratorio, puesto que muchos datos
monografías como obras de carácter
fundamentales
general sobre paleoantropología, como
remedio en el proceso natural de una
La trepanación del cráneo en el Antiguo
excavación arqueológica.
el
posterior
se
trabajo
destruyen
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de
sin
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Normalmente,
los
restos
tomar
muestras
lo
26
suficientemente
esqueléticos no se presentan en un
representativas
estado
enterrada, con el objeto de evitar sesgos
tanto
de
conservación
por
motivos
perfecto,
rituales
como
tafonómicos54, por lo que, en la recogida
en
susceptibles, en mayor medida, de
la
resultados
población
del
estudio
paleopatológico.
de muestras, se suelen priorizar bien
aquellas partes del esqueleto que son
los
de
Respecto a la conservación de
los
restos
esqueléticos,
mencionar
que
el
debemos
hueso
es
proporcionar valores diagnósticos, bien
higroscópico,
los vestigios que muestran directamente
humedad muy fácilmente y es, en
evidencias de lesiones patológicas.
general,
altamente
cambios
en
la
además
es
anisotrópico,
Las directrices básicas a la hora
de recuperar restos esqueléticos en
contexto arqueológico son: exponer la
totalidad
de
los
restos
óseos
y
documentarlos adecuadamente en la
ficha
de
campo
antropológica
y
mediante la fotografía y/o el dibujo;
protegerlos en todo momento de los
posibles
riesgos
derivados
de
la
excavación que continua a su alrededor;
realizar un cribado cuidadoso de la
tierra circundante de modo que ningún
resto sea obviado; retirar los huesos,
organizándolos in situ por tamaño y
es
decir,
absorbe
sensible
humedad
a
los
relativa;
lo
cual
significa que se expande y contrae en
las tres direcciones de forma diferente,
afectando ambas condiciones a su
óptima conservación. Por ello, en
cuando el material óseo entra en
contacto con la tierra comienza a sufrir
transformaciones
estado,
si
que
bien
en
degradan
su
determinadas
condiciones –según el medio ambiente
o el tipo de suelo– el hueso consigue
preservarse en mayor o menor medida.
Además,
los
restos
óseos
etiquetándolos
enterrados son susceptibles de sufrir
escrupulosamente. En el caso de que los
deformaciones o fracturas a causa de
restos humanos formen parte de una
movimientos de tierra y de la misma
necrópolis, además de las condiciones
presión que esta ejerce, así como por
anteriormente descritas, es necesario
culpa de plantas y raíces.
grupo
54
anatómico
y
Proceso natural de fosilización.
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La
humedad
puede,
también,
Antes
de
27
embolsarlos
y
perjudicar a su conservación, debido
etiquetarlos, se puede realizar una
al desarrollo de microorganismos que
primera limpieza de los restos, si bien es
dañan el tejido óseo o por mera
importante no cometer errores como
hidrólisis
vaciar cráneos colmatados de tierra.
del
hueso.
En
suelos
extremadamente secos, el hueso se
fisura, por lo cual el ambiente ideal es
una humedad media.
Así mismo, si el frágil estado del
material óseo lo requiere, se debe
proceder a una breve consolidación in
Finalmente, es fundamental la
situ para asegurar la estabilidad del
alcalinidad –capacidad para neutralizar
hueso, pudiendo entonces embolsarse y
ácidos– de los suelos, preservándose el
etiquetarse los huesos, cuidando de que
hueso mejor cuanto más alcalinos y
su embalaje final sea el adecuado.
menos salinos sean aquellos. Cuando se
Ya en el laboratorio finalizan los
extrae un hueso de este medio, en el que
procedimientos de consolidación y se
ha estado preservado durante tanto
procede a la limpieza final, mucho más
tiempo, se produce una brusca ruptura
minuciosa y del todo imprescindible
de
para
su
microclima
y
comienza
a
establecer
el
diagnóstico
degradarse rápidamente, puesto que
paleopatológico. Además, para facilitar
tanto los cambios de temperatura como
su estudio, se suele proceder al pegado
de luz provocan variaciones en el
y reconstrucción de los restos óseos.
material óseo.
Por
los
estos
anteriormente
motivos
y
por
descritos,
es
fundamental que en la excavación haya
un
experto
en
restauración
Metodología
antropológica
en
osteoarqueología humana.
Una vez cumplidos todos los
y
requisitos mencionados en el apartado
conservación antes de proceder a la
anterior, la metodología pasa a la fase
extracción de los restos óseos, que se
antropológica: determinar el índice de
realizará lo más rápidamente posible
preservación de los restos, así como el
con instrumentos romos de madera y
sexo y la edad del individuo, el estudio
suaves pinceles.
métrico, la determinación de la talla y,
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finalmente, de las características físicas
Los criterios para determinarla
más particulares del esqueleto como los
varían según rangos de edad, pero el
caracteres epigenéticos –biomarcadores
rasgo común a todos ellos es el recurso
que
variación
a los cambios producidos en los huesos
acontecida en el material genético– y
a lo largo de la vida del individuo, como
las patologías óseas y bucales.
la unión de las epífisis o las erupciones
muestran
cualquier
de
dentales. La determinación de edad más
preservación de los individuos, es un
precisa es la de los individuos infantiles,
parámetro
puesto que están sujetos a rápidos
En
cuanto
al
fundamental
grado
que
debe
establecerse siempre, puesto que el tipo
cambios en su esqueleto.
y la cantidad de información que se
Por
otra
parte,
es
de
gran
puede obtener de un esqueleto depende
importancia identificar los marcadores
directamente de este factor. El índice de
de actividad en los restos óseos. Estos
preservación suele estar basado en el
marcadores son cambios es la estructura
número de huesos recuperados más que
del hueso que se
en el estado en que estos se presentan.
condiciones
de
producen bajo
estrés
continuado
Respecto al diagnóstico del sexo
derivado de las actividades de la vida
del esqueleto, es crucial observar el
cotidiana del individuo55. De estas
conjunto poblacional al cual pertenece el
evidencias podemos inferir una gran
individuo, puesto que tanto el dimorfismo
cantidad
como la métrica varía entre los grupos
determinados aspectos de la vida del
humanos. Para realizar este diagnóstico
sujeto, de extrema utilidad a la hora de
se
diagnosticar paleopatologías.
pueden
características
analizar
determinadas
morfológicas
óseas
de
información
Los
marcadores
siete
categorías
se
sobre
clasifican
–pelvis, cráneo y mandíbula– o bien
en
se pueden usar métodos métricos.
desgaste dental, cambios articulares
La determinación de la edad del
individuo
en
el
momento
de
su
fundamentales:
degenerativos, cambios morfológicos
funcionales, fracturas por sobrecarga,
muerte también es fundamental para
55
la diagnosis.
GALTÉS, I.; JORDANA, X.; GARCÍA, C.;
MALGOSA, A.: “Marcadores de actividad en
restos óseos”, Cuadernos de Medicina Forense,
nº 48-49, abril/julio de 2007.
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cambios en la arquitectura del hueso,
osificaciones
y
calcificaciones
y
29
2) Malformaciones
sistematizadas:
como
acondroplasia
–trastorno en el crecimiento de los
cambios a nivel de las entesis56.
cartílagos que provoca enanismo, sobre
todo en las extremidades–, cuyo mejor
Paleopatologías más comunes.
La lista de paleopatologías que
pueden diagnosticarse en un resto
esquelético es increíblemente amplia:
desde malformaciones y enfermedades
congénitas
o
hereditarias
ejemplo, en este caso representado en el
arte, lo tenemos en el conjunto escultórico
egipcio de Seneb y su familia (IV
Dinastía).
hasta
3) Malformaciones de la columna
enfermedades infecciosas, pasando por
vertebral y el tórax: fundamentalmente
patologías traumáticas, osteoarticulares,
la espina bífida –provocada por un cierre
tumores o lesiones pseudotumorales,
incompleto del tubo neuronal durante el
patologías dentales, etc. Hagamos un
primer mes del embrión y el cierre
repaso por las más relevantes. En cuanto
incompleto de las últimas vertebras–.
a las malformaciones y afecciones
congénitas, se suelen dividir entre:
1) Malformaciones
como
de
las
extremidades: luxaciones de diverso
craneales:
–desarrollo
microcefalia
4) Malformaciones
tipo y aplasias –falta de desarrollo, en
este caso del tejido óseo–.
insuficiente del cráneo–, macrocefalia
–desarrollo
excesivo
hidrocefalia
–aumento
del
cráneo–,
anormal
del
líquido cefalorraquídeo en el cerebro– o
la craneoestenosis –o cierre prematuro
de las suturas que separan los huesos
del cráneo en un recién nacido–.
56
Zona de inserción en el hueso de un músculo,
tendón o ligamento.
Seneb y su familia en una reproducción de 1934.
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Respecto
a
las
30
enfermedades
El caso más antiguo atestiguado es
infecciosas y parasitarias, podríamos
del Neolítico, en un esqueleto cuyas
distinguir:
vértebras dorsales aparecen alteradas
1) Procesos
purulentos:
muy
frecuentes antes de la aparición de los
con sinostosis –tejidos de conexión
osificados–.
antibióticos y causados normalmente
4) Lepra: originada por el bacilo
por el estafilococo que, generalmente,
de Hansen, su diagnosis resulta más
afecta al material óseo. Su peculiar
sencilla debido a la llamada facies
morfología hace relativamente sencilla
leprosa, que se caracteriza por una serie
su diagnosis. Se han hallado indicios de
de lesiones en el cráneo, tales como
estos
un ensanchamiento del orificio nasal,
procesos incluso en ejemplares
de Australopithecus y Homo Erectus,
pérdida de las piezas dentarias, etc.
aunque es a partir del Neolítico cuando
aumentan las evidencias.
En el capítulo de los tumores,
podemos así mismo diferenciar los
2) Treponematosis:
hace
siguientes:
referencia a todas las enfermedades
causadas por la bacteria treponema. Sin
duda, la más famosa de estas patologías
es la sífilis venérea, aunque también
existen la pinta, la frambesia y la sífilis
endémica. Las lesiones óseas que
producen
caracterizan
estas
enfermedades
por
una
se
reconocible
destrucción del tejido óseo en el cráneo,
entre otros aspectos menos llamativos.
1) Tumores benignos: entre esta
clase de tumores, el más habitual en
paleopatología es el osteoma, que
se
desarrolla
en
el
tejido
óseo,
principalmente del cráneo y de los
huesos
faciales.
También
se
han
documentado osteocondromas, que son
tumores constituidos por excrecencias
óseas recubiertas por cartílago que se
forman en las zonas medias de algunos
3) Tuberculosis: producida por el
huesos. También son habituales los
bacilo de Koch, esta enfermedad no
meningiomas
deja lesiones óseas
y,
angiomas, ya que con frecuencia
de
afectan al hueso y es posible su
por
tanto,
resulta
particulares
complicada
diagnosticar en paleopatología.
endocraneales
diagnosis.
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y
los
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2) Tumores
en
más abundantemente diagnosticada en
material óseo es prácticamente imposible
paleopatología. Esto está motivado,
diferenciar
primitivos
probablemente, porque a partir de los
realmente,
cuarenta años de edad –sobre todo en el
de
los
malignos:
31
los
tumores
metastásicos
y,
no se han descrito demasiados tumores
pasado–
de este tipo en paleopatología.
individuos la presentan en mayor o
prácticamente
todos
los
la
menor medida. Aparece incluso entre
neoplasias lacunares –tumores malignos
esqueletos de Homo Neanderthalensis
que afectan al cráneo– y los carcinomas
y se
nasofaríngeos. Es necesario insistir en
columna vertebral.
Aun
así,
son
frecuentes
que el rastro que dejan en el hueso estas
localiza preferentemente en la
2) Artropatías
de
causa
patologías es escaso, así como menor su
conocida:
incidencia entre las poblaciones pasadas
artropatías metabólicas, las infecciosas
comparadas con las presentes.
y las postraumáticas.
se
recogerían
aquí
las
En cuanto a la paleotraumatología,
es tan compleja y extensa que excede el
propósito de este breve artículo que,
además, se centra exclusivamente en
patologías, por lo que las lesiones
traumáticas quedarán aquí simplemente
mencionadas.
En el campo de las paleopatologías
osteoarticulares, las podríamos dividir de
la siguiente manera:
1) Artropatías
desconocida:
de
encontramos
causa
aquí
la
artritis, una patología muy sencilla de
diagnosticar por los vestigios que deja
en el hueso. Y, por supuesto, la artrosis
que es, con total seguridad, la afección
Vértebras mostrando espondilitis deformante
(III Dinastía).
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32
A continuación encontramos las
5) Osteoporosis: esta patología
osteopatías metabólicas, que vamos a
se manifiesta en el esqueleto con
clasificar en:
atrofias óseas secundarias y menor
1) Osteopatías anémicas: como
densidad en el hueso, especialmente en
la cribra orbitalia –crecimiento excesivo
la columna vertebral, cuyas vértebras
del hueso en las órbitas oculares–, la
adoptan
talasemia –anemia hereditaria– y el
cóncava.
paludismo –una enfermedad parasitaria–.
una
curiosa
6) Gota:
es
morfología
relativamente
2) Escorbuto: una avitaminosis
frecuente encontrar, relacionada con
que puede ser detectada en el esqueleto
esta patología, la afectación típica en el
por las hemorragias subperiósticas que,
dedo gordo del pie de acumulación de
una
cristales
vez
curadas,
sufren
una
de
ácido
úrico.
Resulta
relevante su alta incidencia en Gran
calcificación reconocible.
Bretaña a partir de época romana.
3) Raquitismo:
enfermedad
Respecto
producida por deficiencia de vitamina D
a
las
y que se caracteriza por deformaciones
otorrinolaringológicas,
esqueléticas.
además
de
enfermedades
encontramos,
patología
tumoral,
malformaciones y diversos traumatismos,
4) Obesidad:
a
causa
del
aumento de peso corporal, esta patología
da lugar a una gran sobrecarga ósea y
origina alteraciones en el esqueleto,
así como patologías infecciosas tanto en
la región petromastoidea –del hueso
temporal–
como
en
la
nasosinusal
–fundamentalmente sinusitis–.
fundamentalmente en las articulaciones.
La paleoestomatología se ocupa
Los huesos infantiles son los que
se deforman, en este caso, con mayor
facilidad. Se ha estipulado que las
famosas venus paleolíticas muestren
esta afección, aunque su especial
morfología podría más bien ser fruto
de
una
cultural.
determinada
simbología
de las enfermedades que afectan a la
boca y sus estructuras, por lo que aquí
se encuadrarían las patologías dentales,
como
abrasiones
dentarias
no
fisiológicas –por ingesta de alimentos
crudos, sobre todo en la Prehistoria o
presencia de tierra en la comida–, caries
–sobre todo a partir del Neolítico–,
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enfermedad periodontal –un proceso
Conclusiones:
inflamatorio de las encías–, sarro,
arqueología
abscesos,
ciencias
pérdida
de
piezas
y
malformaciones dentarias.
y
33
paleopatología,
multidisciplinares
que
se
complementan.
Como hemos visto a lo largo de
este artículo, la paleopatología resulta
fundamental a la hora de establecer
diagnósticos sobre restos humanos del
pasado.
En un contexto arqueológico,
contar con información precisa sobre las
enfermedades padecidas por
una
población o un individuo –además de
valiosa información sobre edad, sexo,
métrica, etc. que ya aporta de por sí la
osteoarqueología humana en general–
es
de
crucial
importancia
para
explicar, reconstruir y contextualizar
un
yacimiento con precisión.
Las
patologías padecidas nos ayudan a
Paleopatologías dentales en individuos
del Antiguo Egipto.
establecer la dieta de una población, su
hábitat, sus modos de trabajo, sus
causas principales de padecimiento y
Finalmente, podríamos mencionar
defunción y, en fin, el día a día de unas
también aquí las patologías de las partes
gentes cuyas vidas recuperamos ahora a
blandas y las asociadas a la gestación,
través de su enfermedad y su muerte.
pero por su alejamiento del aparato
Para culminar toda esta tarea con
musculoesquelético y su complejidad,
éxito, remitimos al encabezado de este
nos detendremos en esta enumeración
epígrafe y a la necesidad del trabajo
más resumida.
en equipo entre todas las ciencias que
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colaboran en el estudio del pasado,
como son, en este caso, la arqueología y
la paleopatología. El esfuerzo colectivo
en la indagación de nuestro pasado es
decisivo, así como la combinación
adecuada de las diferentes metodologías
y puntos de vista, mejor cuanto más
críticos.
Este artículo, pues, no ha querido
únicamente hacer un recorrido breve
e
introductorio
paleopatológica,
por
sino
la
ciencia
resaltar
la
importancia crucial que ésta tiene en los
análisis poblacionales en arqueología.
Ambas son ciencias multidisciplinares
que
requieren
de
la
colaboración
solidaria de sus profesionales y de los
de otras muchas disciplinas afines que,
entre
todos,
reconstruyen
para
su
conocimiento y difusión las vidas y
muertes de las gentes que forjaron
nuestro pasado.
ArtyHum Revista de Artes y Humanidades, ISSN 2341-4898, nº 26, Vigo, 2016.
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ArtyHum 26
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[Fecha de consulta: 23/06/2016].
*Portada: Arqueólogos trabajando en un
enterramiento doble del s. XVIII en Jamestown.
ArtyHum Revista de Artes y Humanidades, ISSN 2341-4898, nº 26, Vigo, 2016.