Alfabetización tecnológica

¿Alfabetización tecnológica? Es importante especificar que el uso de las TIC´s y la denominada “Alfabetización digital” nos han dado la oportunidad de poner sobre la mesa y resignificar el concepto de “alfabetización”. La evolución que requiere mantener el término al pasar de las décadas, es debido a la progresiva complejidad cultural y tecnológica que ha desarrollado la humanidad. En la década de los sesenta, la UNESCO estableció que una persona alfabetizada era aquella que podía leer y escribir comprendiendo una oración simple relacionada con la vida cotidiana. Para el año 2000 se amplió la definición de la siguiente forma: Alfabetización es la habilidad para leer con comprensión una oración simple relacionada con la vida cotidiana, involucra un continuo de destrezas de lectura, escritura y con frecuencia también incluye destrezas aritméticas elementales. Debido a que concepto involucra un conjunto de habilidades, conocimientos y competencias la ampliación no ha sido suficiente, por lo que existe un extenso abanico de definiciones que se encuentran divididas en dos extremos; el primero simplificándola a una visión estrictamente lingüística que la reduce a la adquisición de códigos del sistema de la lengua escrita y por otro lado, la segunda que la percibe como un continuo aprendizaje de correspondencias en las que el aprendiz que ya ha adquirido los códigos lingüísticos es capaz de mostrar a través de diversas destrezas tanto el conocimiento como sus correspondencias con el pensamiento. Esta segunda visión, como lo explica Monereo (2008), abona a la idea de ver a la alfabetización como un conjunto de prácticas, un continuum con un componente procesual de carácter gradual y perenne que debido a la evolución social y tecnológica genera permanentemente nuevas prácticas letradas que detonan a su vez nuevas necesidades de alfabetización. Así también, se puede utilizar el concepto de alfabetización para designar el proceso que sigue cualquier persona al iniciar sus conocimientos y competencias sobre diversos ámbitos, por ejemplo “alfabetización económica”, “alfabetización científica”, “alfabetización ambiental”, “alfabetización emocional”, “alfabetización cívica” etcétera, desligándolo a la sola aplicación a la cultura letrada. La literacidad y/o alfabetización implica resolver retos críticos, a los que de acuerdo con el Informe Horizon (2010:5 y 6), se enfrentan las instituciones educativas, particularmente aquellas que determinan las transformaciones de amplio espectro en la educación, son los siguientes: 1. La formación de los aprendices docentes para el uso de medios digitales en los procesos de enseñanza, ya que conocer y comprender el potencial educativo de estas tecnologías fomentará su utilización en el aula. 2. La gestión del cambio integral en educación superior debe entenderse desde un enfoque sistémico y transformador, que contribuya al crecimiento económico, al desarrollo humano y a la cohesión social. […] Ello incluye un cambio de rol en las instituciones educativas forzando reflexiones, que permitan impulsar cambios tangibles y sostenidos. 3. La alfabetización digital debe convertirse en una aptitud esencial de todas las profesiones. 4. La formación de los aprendices en el uso de los nuevos medios y lenguajes de comunicación audiovisual es un factor crítico. […] deben integrarse en los planes de estudio las nuevas alfabetizaciones, así como su evaluación, algo que obliga a entender, en toda su extensión, el significado y alcance de estas nuevas habilidades. 5. Es necesaria una adaptación de las prácticas docentes a los requerimientos de la sociedad digital y del conocimiento. Los docentes deben ser los líderes en el diseño y la implementación del uso de las tecnologías para propósitos educativos. Estas consideraciones tanto del texto como del contexto han llevado a sustituir progresivamente el singular por el plural, de alfabetización a las que son denominadas como “alfabetizaciones” o “alfabetizaciones múltiples” o “nuevas alfabetizaciones”. Así por ejemplo, países como Estados Unidos han cambiado su definición sobre las alfabetizaciones, para el siglo XXI describe que “Cuando la sociedad y la tecnología cambian, la alfabetización cambia también” (NCTE, 2008). Uno de los escritos que más se acerca a describir el fenómeno que está ocurriendo es el texto de Leu y Cols. (2007) que presenta a las nuevas alfabetizaciones como: Un espacio [conceptual] altamente contestado (….); este constructo significa muchas cosas diferentes para distintas personas. Para algunos, las nuevas alfabetizaciones son nuevas prácticas sociales (…) que emergen con las nuevas tecnologías. Otros ven las nuevas alfabetizaciones como importantes estrategias y disposiciones nuevas requeridas por internet, que son esenciales para la lectura comprensiva en línea, el aprendizaje y la comunicación (…). Otros aún consideran que las nuevas alfabetizaciones son discursos (…) o nuevos contextos semióticos (…) que las nuevas tecnologías permiten crear. Y otros todavía piensan que la alfabetización está diferenciándose en multi-alfabetizaciones o contextos multimodales (…), o contemplan las nuevas alfabetizaciones como un constructo que yuxtapone varias de estas orientaciones (…). La multialfabetización no sólo incluye la comprensión y utilización de los multilenguajes representacionales como los hipertextos, multimedios e interactividad integrados dentro de la alfabetización digital, es más compleja debido a que abarca la búsqueda, el análisis, la selección y comunicación de la información de manera inteligente y que el aprendiz logre transformar esta información en conocimiento. Por lo tanto, es necesario desarrollar tres competencias en simultáneo: 1. Alfabetización para el desarrollo de la competencia tecnológica o digital. 2. Alfabetización para el desarrollo de la competencia informacional, y 3. Alfabetización para el desarrollo de la competencia de uso crítico de la información, cuando el aprendiz toma conciencia de la necesidad de auto alfabetizarse por diversos medios ya sea dentro o fuera de la escuela, se puede argumentar que realmente está aprendiendo a aprender.