Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                
NEUMONIAS La neumonía puede definirse como una lesión inflamatoria pulmonar en respuesta a la llegada de microorganismos a la vía aérea distal y parénquima. La neumonía puede afectar a un lóbulo pulmonar completo (neumonía lobular), a un segmento de lóbulo, a los alvéolos próximos a los bronquios (bronconeumonía) o al tejido intersticial (neumonía intersticial). La neumonía vuelve al tejido que forma los pulmones, que se ve enrojecido, hinchado y se torna doloroso. Muchos pacientes con neumonía son tratados por los médicos de cabecera y no se ingresan en los hospitales; esto es lo que se denomina Neumonía adquirida en la comunidad (NAC) o Extrahospitalaria. La Neumonía nosocomial (NN) es la que se adquiere durante la estancia hospitalaria después de las 48 horas del ingreso del paciente por otra causa. La neumonía puede ser una enfermedad grave si no se detecta a tiempo y puede llegar a ser mortal, especialmente entre personas de edad avanzada y entre los inmunodeprimidos. En particular los pacientes de SIDA contraen frecuentemente la neumonía por Pneumocystis. Las personas con fibrosis quística tienen también un alto riesgo de padecer neumonía debido a que continuamente se acumula fluido en sus pulmones. La neumonía es la infección del espacio aéreo distal. Es una entidad muy frecuente en la práctica clínica con implicaciones sanitarias muy importantes por su frecuencia, su coste económico y social y por la morbilidad y mortalidad asociadas, por la neumonía y por otras causas. En la valoración y tratamiento de la neumonía, dado que generalmente no se va a disponer del agente etiológico, es imprescindible una correcta clasificación pues de ella dependerá la etiología probable, el pronóstico y la actuación diagnóstica y terapéutica. PERIODO PREPATOGENICO AGENTE: La neumonía puede ser causada por varios agentes etiológicos: Múltiples bacterias, como Neumococo (Streptococcus pneumoniae), Mycoplasmas y Chlamydias, distintos virus (parainfluenza tipo 1,3,4; adenovirus, rinovirus e influenza), hongos, como Pneumocystis jiroveci. En recién nacidos las neumonías suelen ser causadas por: Streptococcus pneumoniae, Staphylococcus aureus y ocasionalmente bacilos gram negativos. En lactantes (niños de 1 mes a 2 años) y preescolares (niños de 2 a 5 años): el principal patógeno bacteriano es el Streptococcus pneumoniae, además ocasionalmente es causada por la Chlamydia trachomatis y por el Mycoplasma pneumoniae. En niños mayores de 5 años: Streptococcus pneumoniae y el Mycoplasma pneumoniae. En inmunocomprometidos: bacterias gram negativas, Pneumocystis jiroveci, citomegalovirus (CMV), hongos y Micobacterium tuberculosis. En ocasiones se puede presentar neumonías por bacterias aerobicas, en el caso de personas que tienen factores de riesgo para aspirar contenido gástrico a los pulmones, en este caso hay un riesgo significativo de aparición de abscesos pulmonares. En las neumonías nosocomiales: Pseudomonas aeruginosa, hongos y Staphylococcus aureus. En personas adultas: Streptococcus pneumoniae y virus influenza, en los casos de neumonía atípica: virus, Mycoplasma pneumoniae y Chlamydia pneumoniae. HUESPED: humano Recién nacido de bajo peso y lactante menor Ancianos Niños con desnutrición primaria y secundaria Pacientes inmunocomprometidos Alteraciones broncopulmonares Tabaquismo Enfermedades crónicas: diabetes mellitus, hepatopatías, cardiopatías,enfermedad renal, cáncer, enfermedad pulmonar crónica, SIDA. Exceso de peso. Demencia. Edad (los niños y los ancianos son los más susceptibles de contraer neumonía). Esplenectomía (pacientes a los que se les ha extirpado el bazo) y, en general, pacientes con bajo nivel de inmunidad. Alcoholismo Tratamientos inmunosupresores o con corticoides de manera crónica. Residentes en centros de enfermos crónicos o de tercera edad. Exposición a drogas por vía parenteral. AMBIENTE: Invierno Ambiente cerrado Cambios bruscos de temperatura Conglomeración de personas Pobreza Medio ambiente insalubre y nivel cultural bajo PERIODO PATOGENICO Cambios tisulares y fisiopatológicos Con frecuencia existen neumococos en las vías respiratorias altas como parte de la flora microbiana normal, los microorganismos penetran en las vías aéreas inferiores, a través de la corriente sanguínea y a apartir de un foco infecciosos a distancia; por inhalación o aspiración, inicialmente se produce un edema reactivo que favorece la proliferación de microorganismos y ayuda a su diseminación por las porciones adyacentes del pulmón. El mecanismo de defensa pulmonar en el caso de los pulmones entra en acción. Un reflejo de la tos de transporte, mucociliar y los macrófagos pulmonares tratan de proteger al cuerpo contra la infección. Sin embargo, en algunas personas su mecanismo de defensa es suprimido o abrumados por el agente invasor y conduce al desarrollo de la infección. El organismo invasor comienza a multiplicarse y liberar toxinas perjudiciales que causan la inflamación y el edema del parénquima pulmonar. Esta acción lleva a la acumulación de residuos celulares y exuda dentro de los pulmones. Pronto el estado sin aire de los pulmones se cambia a un estado consolidado debido al fluido exudado y llenando. Las células epiteliales ciliadas se dañen en caso de neumonía viral. El virus llega a los pulmones a través de las gotitas transportadas por el aire inhalado por la boca y la nariz. El virus después de ganar la entrada a los pulmones, comienza una invasión del revestimiento de células de las vías respiratorias y los alvéolos. Esto conduce a la muerte celular por acción directa del virus o a través de una célula controlada autodestrucción llamado apoptosis. Con la respuesta del organismo a la invasión, existe un mayor daño a los pulmones como el fluido es filtrado en los alvéolos. La infección viral en los pulmones daña los pulmones y los hace más susceptibles a las infecciones bacterianas. Esto complicó aún más importante el de la neumonía viral. La fisiopatología de la neumonía fúngica es muy similar a la neumonía bacteriana. Los agentes de hongos más comunes que causan neumonía son Histoplasma capsulatum, Cryptococcus neoformans, Pneumocystis jiroveci, blastomices y Coccidioides immitis. Signos y síntomas Fiebre duración de más de 3 días Escalofríos Tos Congestión nasal Respiración atípicamente rápida (en algunos casos, este es el único síntoma) Respiración con resoplidos o sibilancia Respiración trabajosa que provoca que los músculos de las costillas se retraigan (cuando los músculos debajo de la caja torácica o entre las costillas se atraen con cada respiración) y produce aleteo nasal Vómitos Dolor de pecho Dolor abdominal Disminución de la actividad Falta de apetito (en niños mayores) o alimentación deficiente (en lactantes) que puede producir deshidratación En casos extremos, coloración azulada o grisácea en los labios y las uñas. Las personas afectadas a menudo tienen tos que puede producir una expectoración de tipo muco-purulento (amarillenta), fiebre alta que puede estar acompañada de escalofríos. Limitación respiratoria también frecuente así como dolor torácico de características pleuríticas (aumenta con la respiración profunda y con la tos). También pueden tener hemoptisis (expectoración de sangre por la boca durante episodios de tos) y disnea. COMPLICACIONES Empiema: Es la secreción purulenta dentro de la cavidad pleural, se presenta con frecuencia en las neumonías bacterianas. Neumotórax: Abertura pleural por donde penetra el aire, es ocasionada por la ruptura de los alveolos, ya sea por aumento de presión o por necrosis, hay grave afectación de la función pulmonar. Abscesos pulmonares: Lesiones constituidas por destrucción del parénquima pulmonar con acumulación de pus y rodeados de una pared de fenómenos inflamatorios. Bronquiectasias: dilatación de los bronquiolos con colapso lobulillar, se acompaña de expectoración profusa fétida y purulenta, puede causar infecciones intermitentes. Derrame pleural Acidosis respiratoria Septicemia Tromboembolia pulmonar MUERTE: La neumonía es la causa principal de muerte de niños en todo el mundo, se debe a las complicaciones asociadas a la neumonía. Prevención primaria Nutrición adecuada Ejercicio Fomentar buenas medidas higiénicas Visitas regulares para control medico Esquema de vacunación Control adecuado de otras enfermedades Realizar lavado frecuente de manos Fomentar la lactancia materna Evitar el tabaquismo Prevención secundaria Diagnóstico: Los síntomas que sugieren neumonía incluyen fiebre acompañado de tos, producción de desgarro, pleuresía y disnea. Síntomas similares pueden ser acusados por bronquitis, sinusitis y una variedad de patologías no infecciosas. Los pacientes adultos mayores a menudo tienen pocos síntomas y menos fiebre que los jóvenes. Muchos de los pacientes son tratados en forma ambulatoria y no requieren mayores estudios que una radiografía de tórax para establecer el diagnóstico, algunos exámenes de laboratorio para determinar la extensión y la patología asociada y estudio microbiológico. La radiografía de tórax anteroposterior y lateral mostrando infiltrados es fundamental para establecer el diagnóstico de neumonía, rara vez específico para el organismo etiológico, establece la presencia de derrame pleural, delimita la extensión de la neumonía, la severidad. La tomografía computarizada es considerada más sensible para la detección de infiltrados y puede ser especialmente útil para detectar enfermedad intersticial, empiema, cavilación, enfermedad multifocal y adenopatías. La confirmación que la neumonía es causada por un determinado patógeno requiere la recuperación del agente desde una muestra no contaminada (sangre, líquido pleural, aspirado transtraqueal, aspirado transtorácico) test serológico positivo o detección de patógenos que no colonizan la vía aérea en secreciones respiratorias (Pneumocistis Carinii, Toxoplasma Gondii, Legionella, Mycoplasma Pneumoniae, Mycobacterio Tuberculoso, Virus Influenza, Virus Sincitial Respiratorio). Los hemocultivos son altamente específicos pero menos de un 30% son positivos, la infección bacterémica conlleva a un peor pronóstico, por lo cual debe practicarse hemocultivos a todo paciente hospitalizado por neumonía en forma rutinaria. Los métodos serológicos no pueden ayudar en la valoración inicial, pero son imprescindibles para estudios epidemiológicos. La detección de antígeno neumococo en espectoración mucopurulenta tiene una sensitividad de 63-94% y una especificidad de 82-96%, esta técnica permite identificar la neumonía neumococica en pacientes tratados con antibióticos previo al ingreso hospitalario. Los métodos denominados invasivos, aspiración transtraqueal, broncoscopía con catéter protegido, lavado bronquio alveolar, aspiración directa, no tienen justificación rutinaria y deben ser reservados para los casos graves o con mala respuesta al tratamiento empírico. Tratamiento: Los antibióticos se utilizan para tratar la neumonía bacteriana. En contraste, los antibióticos no son útiles para la neumonía viral, aunque a veces se utilizan para tratar o prevenir las infecciones bacterianas que pueden ocurrir en los pulmones dañados por una neumonía viral. La elección del antibiótico depende de la naturaleza de la neumonía, los microorganismos más comunes que causan neumonía en la zona geográfica, y el estado inmunológico y la salud subyacente de la persona. Tratamiento de la neumonía ideal debe basarse en el microorganismo causal y su sensibilidad a los antibióticos conocidos. Sin embargo, una causa específica para la neumonía se identifica sólo en el 50% de las personas, incluso después de una evaluación exhaustiva. Dado que el tratamiento no debe demorarse en general cualquier persona con una neumonía grave, el tratamiento empírico se suele iniciar antes de los informes de laboratorio. Amoxicilina y claritromicina o eritromicina son los antibióticos seleccionados para la mayoría de los pacientes con neumonía adquirida en la comunidad, los pacientes alérgicos a las penicilinas se dan la eritromicina en vez de amoxicilina. En la neumonía "atípica" formas de neumonía de la comunidad son cada vez más comunes, los macrólidos (como la azitromicina y claritromicina), las fluoroquinolonas, doxiciclina y amoxicilina han desplazado como el tratamiento ambulatorio de primera línea para la neumonía adquirida en la comunidad. La duración del tratamiento ha sido tradicionalmente siete a diez días, pero no hay evidencia creciente de que los cursos más cortos (tan corto como tres días) son suficientes. Antibióticos para la neumonía nosocomial incluyen cefalosporinas de tercera y cuarta generación, carbapenemes, fluoroquinolonas, aminoglucósidos y vancomicina. Estos generalmente se administran antibióticos por vía intravenosa. La neumonía viral causada por la influenza A pueden ser tratados con amantadina o rimantadina, mientras que la neumonía viral causada por la influenza A o B pueden ser tratados con oseltamivir o zanamivir Prevención terciaria: Dieta Ejercicio Oxigenoterapia Vigilancia de la evolución de la enfermedad Ejercicios ventilatorios BIBLIOGRAFIA http://tesis.uson.mx/digital/tesis/docs/5774/Capitulo1.pdf http://www.news-medical.net/health/Pneumonia-Treatment-(Spanish).aspx http://www.neumomadrid.org/descargas/Neumonias%20(184%20p).pdf http://es.scribd.com/doc/58517686/Historia-Natural-de-La-Neumonia UNIVERSIDAD AUTONOMA DEL ESTADO DE MÉXICO PRACTICA COMUNITARIA ALUMNO: GEOVANI ESQUIVEL SALGADO No. de Cuenta: 0923782 COMUNIDAD: SAN LUIS MEXTEPEC TRABAJO: NEUMONIAS 27 de ABRIL de 2013