Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Desde $11.99 al mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Piel: Parte Siete
Piel: Parte Siete
Piel: Parte Siete
Libro electrónico45 páginas27 minutos

Piel: Parte Siete

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer vista previa

Información de este libro electrónico

Él es como el fruto prohibido en el Jardín del Edén. Comí de ese fruto, y me envenenó.

Amy está deseando descubrir los trapos sucios de Lucian, pero no es fácil sacar información cuando hay alcohol de por medio. Después de una noche bastante decepcionante en el festival de PIEL, Amy decide compensar el mal rato que ha pasado disfrutando de su fin de semana en casa, intentando olvidar a Lucian. Por suerte, no tiene que pasarlo a solas, ya que Derrick se deja caer por allí para celebrar la firma del contrato de diseño de interiores con Lucian, pero de pronto las cosas se les van de las manos.

Este el la séptima entrega de la serie.

IdiomaEspañol
EditorialBadPress
Fecha de lanzamiento21 jul 2017
ISBN9781547509423
Piel: Parte Siete

Relacionado con Piel

Libros electrónicos relacionados

Romance para usted

Ver más

Artículos relacionados

Comentarios para Piel

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Piel - Sky Corgan

    CAPÍTULO UNO

    ––––––––

    Buenos días, preciosa Me quedo mirando a Janice cuando la veo aparecer. No he dormido apenas, y he pasado buena parte de la mañana esperando que se despertara. Ni siquiera he podido concentrarme en la televisión. Mi mente ha estado demasiado centrada en lo que ella dijo anoche acerca del atribulado pasado de Lucian, y sigo preguntándome qué habrá querido decir.

    Ella se presiona los laterales de la cabeza, con el cabello hecho un desastre. Haz que la habitación deje de dar vueltas.

    Eso es lo que pasa cuando bebes demasiado. No me da pena. Ya tiene edad suficiente para saber que no se bebe tanto cuando tienes que trabajar al día siguiente.

    Me lo estaba pasando bien, resopla ella antes de tirarse en el sofá a mi lado. Tráeme un poco de agua.

    Sí, su majestad. Me pongo de pie y hago una reverencia exagerada antes de dirigirme a la cocina para cogerle un vaso de agua. Cuando vuelvo a dárselo, ella sigue con la mano en la cabeza al tiempo que coge el vaso y se lo traga de golpe.

    Creo que voy a vomitar, avisa.

    Yo me suelto la coleta que llevo en el pelo y le doy la goma a ella. No me apetece verla vomitar otra vez.

    Ella se estremece por un escalofrío, pero coge la goma del pelo y se recoge rápidamente el cabello en una coleta, haciendo gestos de dolor con cada movimiento. No puedo ni imaginarme el dolor de cabeza que debe de tener.

    Esto seguro que esto hará que me duela la cabeza todavía más dice lloriqueando.

    Bueno, espero que al menos haya merecido la pena.

    Pues sí. Una gran sonrisa cruza su cara, aunque se transforma rápidamente en una mueca cuando el dolor la golpea de nuevo.

    Pues mira, hablando de anoche, me siento y subo las rodillas hasta mi pecho, rodeándolas con mis brazos. Dijiste que tu Maestro sabía cosas de Lucian.

    ¿Dije eso? Dice ella, enarcando una ceja al mirarme.

    Lo hiciste.

    No me digas que no se acuerda. Quizás anoche debía haberla sacudido más fuerte. Aunque me lo hubiera contado arrastrando las palabras, al menos me habría dado la información.

    Janice se lleva la mano a la sien, cerrando los ojos. Si te soy honesta, no me acuerdo mucho de nada de lo que pasó a partir de la escena con mi maestro. Cuando terminamos lo de la mazmorra me llevó arriba con sus colegas. La gente me invitaba a copas por todos lados. Hacía mucho tiempo que no tenía tanto acceso a alcohol gratis, así que me aproveché de ello.

    Yo suspiro, Supongo que no puedo culparte. Probablemente yo tampoco habría sido capaz de controlarme. Mi mente vuelve a estar en la limusina de Lucian, deseando que me ofreciera una copa. Me sorprende que lo único que bebí en toda la noche fuera el vino que Janice y yo compartimos antes de ir a la fiesta de PIEL.

    "A partir

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1