Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Desde $11.99 al mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

De la manipulación afectiva al chantaje emocional
De la manipulación afectiva al chantaje emocional
De la manipulación afectiva al chantaje emocional
Libro electrónico165 páginas3 horas

De la manipulación afectiva al chantaje emocional

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer vista previa

Información de este libro electrónico

De la manipulación afectiva al chantaje emocional es un libro inspirado en la huella de vida de la autora y en las incontables horas con pacientes que acuden a la consulta con uno o varios motivos por los que sufren. La mayoría de sus relatos refieren a demandas encubiertas, exigencias amenazadoras, mentiras y engaños, omisiones y tergiversaciones presentes en sus relaciones.
Estas y muchas otras formas de manipulación se encuentran en vínculos entre padres e hijos, parejas, hermanos y familiares, amigos, colegas y jefes. La manipulación afectiva es moneda corriente y son muchos los que aún sostienen que, para lograr sus objetivos, el fin justifica los medios. Y esto se ha vuelto una constante utilizada sin considerar el daño que ocasiona ni sus consecuencias a mediano y largo plazo. Cuando esta manipulación se convierte en chantaje emocional, estamos hablando de una situación aún más tóxica en la que hay un dúo involucrado y ambos son partícipes necesarios para que esa dinámica se lleve a cabo.
El chantaje emocional es una manipulación devastadora que tiñe de dolor, angustia, tensión permanente, sentimiento de culpa y obligación, involucra amenazas acompañadas de una lacerante violencia psicológica, emocional, muchas veces económica y hasta física. Sin embargo, no hay víctimas ni victimarios en estas situaciones siempre y cuando el vínculo se sostenga en el tiempo, ya que, para que eso suceda, se necesita de la participación de ambos.
El proceso terapéutico va haciendo foco en que el paciente recupere su autoestima y su poder personal para hacerse responsable de su participación en ese circuito, desarme viejas creencias funcionales a ese tipo de vínculos, deje de sentirse una víctima de las circunstancias y se convierta en protagonista, creador y autor de su destino.
Este libro es una aproximación para comprender y poner luz sobre este tipo de vínculos en los que el amor se confunde con apego, dependencia y necesidad. Luego de años de terapia y horas de trabajo con sus pacientes, la autora comparte información esclarecedora para aquellos que se encuentran atrapados en circuitos disfuncionales como estos. Los relatos que sus pacientes han compartirdo (de quienes se han cambiado los nombres para preservar su identidad) suman testimonios muy valiosos para comprender el origen, el desarrollo y la resolución de este tipo de circuitos patológicos.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento31 ago 2021
ISBN9789874789150
De la manipulación afectiva al chantaje emocional

Relacionado con De la manipulación afectiva al chantaje emocional

Libros electrónicos relacionados

Psicología para usted

Ver más

Artículos relacionados

Comentarios para De la manipulación afectiva al chantaje emocional

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    De la manipulación afectiva al chantaje emocional - Silvia Chediek

    Imagen de portada

    De la manipulación afectiva al chantaje emocional

    De la manipulación afectiva al chantaje emocional

    Silvia Chediek

    Psicóloga, Life Coach, Neuropsicoeducadora y Diplomada en Psicopatía

    Índice de contenido

    Portadilla

    Legales

    Prólogo

    Parte I- De la manipulación afectiva al chantaje emocional

    Parte II- Testimonio

    1. Isabella

    2. Alfredo

    3. Vicky

    4. Martina

    5. Ema

    6. Confesiones de un depredador a su presa

    Epílogo

    © Silvia Chediek

    © de esta edición Grupo Abierto Libros

    E-mail: libros@grupoabierto.com

    Facebook/grupoabiertolibros

    Instagram/grupoabierto.libros

    Diseño: José Y. Saine para WG - Creative Studio

    Imagen de tapa: José Y. Saine - Facebook/weedgraphic

    Silvia, Chediek

    www.silviachediek.com

    E-mail: info@silviachediek.com

    Chediek, Silvia

    De la manipulación afectiva al chantaje emocional / Silvia Chediek. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Grupo Abierto Libros, 2021.

    Libro digital, EPUB

    Archivo Digital: descarga y online

    ISBN 978-987-47891-5-0

    1. Psicopatología. 2. Relaciones Interpersonales. 3. Clínica Psicoanalítica. I. Título.

    CDD 158.2

    Tomemos una decisión. Si es la correcta celebremos y continuemos. Si no lo es, aprendamos y corrijamos. En ambos casos ganaremos en sabiduría.

    Silvia Chediek

    Cabe aclarar que el chantajista emocional puede ser tanto hombre como mujer, lo mismo sucede con su contrapartida en el binomio. Estas características no son privativas de un género en particular sino de un tipo de personalidad y de una forma de ser específica.

    A lo largo de estas líneas, me referiré a el chantajista emocional o el manipulador en masculino y a la partícipe necesaria, la presa, la dependiente o la complementaria en femenino para que quede más clara la dinámica del vínculo.

    Prólogo

    El hecho de haber experimentado en primera persona los estragos de la manipulación afectiva hizo que me entregara de lleno a estudiarla desde hace muchos años.

    La manipulación y el chantaje emocional fueron moneda corriente en el contexto emocional en el que nací. Ese aprendizaje inevitable dejó huellas profundas y me permitió ayudar a otros a partir de mis propias heridas y cicatrices.

    A lo largo de los años que llevo trabajando con cientos de pacientes, nunca ha dejado de asombrarme el alto porcentaje que llega a la consulta con la pesada carga de estar padeciendo alguna situación que gira alrededor del chantaje emocional y de la manipulación afectiva.

    Si bien es un tema cuya teoría estudié de la mano de grandes maestros, no puedo dejar de poner el acento en que el intercambio con otros, además de mi experiencia personal, nutrieron mi conocimiento y fortalecieron mi práctica profesional. Sé que la suma de todo esto me ha permitido ganar claridad y profundidad.

    Es mi deseo que lo que estoy compartiendo con ustedes en este libro sume luz a sus vidas y les permita crear vínculos saludables, basados en el amor, el respeto, el compromiso y la confianza.

    Por eso hoy les digo que:

    • Si sus vínculos carecen de estas cualidades y no están presentes en sus vidas ni en sus relaciones, y la mayor parte del tiempo sienten que hay situaciones en las que perciben que están atrapados o atrapadas y no pueden salir…

    • Si hace mucho tiempo que se encuentran intentando de manera fallida cambiar la forma en que se relacionan con los demás y no lo logran…

    •Si sienten que están buscando una salida y no logran encontrarla…

    Tal vez aquí encuentren algunas respuestas que les permitan comenzar un nuevo viaje que los ayude a descubrir que es posible transitar el camino hacia la libertad y el bienestar.

    Todos lo merecemos. No nos privemos de darnos esta oportunidad.

    PARTE I

    DE LA MANIPULACIÓN AFECTIVA AL CHANTAJE EMOCIONAL

    ¿Qué es el Chantaje Emocional?

    El término chantaje emocional fue popularizado por Susan Forward, una conocida psicoterapeuta estadounidense. Esta expresión busca definir el tipo de vínculo basado en una forma de control y de manipulación estratégica que el chantajista ejerce sobre la víctima de turno. Dado que su objetivo es ganar poder y tener el control sobre ella, el método que usa para lograrlo es el de activar sus sentimientos de culpa, vergüenza y miedo para que se acate su voluntad.

    El chantajista emocional usa la mentira, el engaño, la seducción, la persuasión, la victimización, la agresión y las amenazas permanentes para manipular a sus presas. Además, dada su baja o nula empatía, no tiene en cuenta el daño que causa y tampoco le importa.

    Cuando se establecen vínculos de manipulación y de chantaje emocional entre dos personas, el chantajista emocional busca como presa posible a una cuyas características de personalidad se ajusten a las que necesita para operar como partícipe en la dinámica de este tipo de dúo. Lamentablemente, las encuentra más veces de lo que nos gustaría.

    Como verán y leerán más adelante, no voy a utilizar el término de víctima con frecuencia. La Real Academia Española (RAE) la define como:

    • Persona que padece daño por culpa ajena o por causa fortuita.

    • Persona que muere por culpa ajena o por accidente fortuito.

    • En Derecho. Persona que padece las consecuencias dañosas de un delito.

    La palabra víctima aquí expuesta aplica a la persona que ha quedado atrapada en un acto delictivo, plausible de pena para los delincuentes, por lo cual se encuentra, de manera sorpresiva y sin previo aviso, en una situación de indefensión que no eligió conscientemente y de la que, sin lugar a dudas, quiere escapar y no siempre puede.

    En el caso de las personas que integran la dinámica de los dúos de chantajista y chantajeado, podríamos considerar a este último como la víctima elegida del chantajista que opera sobre ella, la encandila y obnubila con todas las estrategias de seducción que él sabe que la otra parte necesita escuchar.

    En esta etapa, en la que apenas está comenzando la relación, ella no es consciente de lo que ocurre, pero desde sus carencias y necesidades, una vez que acepta la invitación, no puede resistirse a la miel de las palabras que escucha, y, embelesada, elige avanzar.

    El chantajista sabe muy bien qué tiene que decir y hacer para que caiga en su trampa. Es muy hábil para seducir y persuadir y, si la presa es la adecuada, logrará que ella, sin darse cuenta, quede atrapada en su red sin intenciones de escapar.

    Si fuera una víctima, ella buscaría escapar haciendo uso de todos los medios disponibles. Lejos de eso, se siente cada vez más a gusto y se sumerge en ese océano de dulzura y atención. Lamentablemente, aún desconoce el costo que deberá pagar más adelante.

    Lo que al principio resulta ser un jardín de pétalos de rosas, pronto se transformará en uno árido y espinoso. A pesar de esto, seguirá quedándose e irá en busca, por todos los medios, de recuperar a ese que conoció al principio y al que aún no puede ver como el gran mentiroso profesional que es. La chantajeada insistirá en seguir y luchará para recuperarlo. Esa será la batalla que nunca ganará.

    ¿Es posible distinguir manipulación afectiva de chantaje emocional?

    ¿Existe alguna distinción entre la manipulación de un chantajista emocional y la manipulación como un acto realizado por un individuo para lograr lo que quiere? Sí. De hecho, es muy común, por ejemplo, observar los berrinches manipuladores que hacen los niños para lograr la atención de sus padres o cuidadores y conseguir lo que quieren.

    Por otro lado, y más veces de lo que nos gustaría observar, esta conducta se repite muy a menudo en los adultos: a veces inconscientemente, como una conducta aprendida en la infancia que oculta la intención de obtener, a como dé lugar, lo que se desea.

    Sin embargo, cuando hablamos de un chantajista emocional nos referimos a un perfil de personalidad y de una forma de ser en el mundo que caracteriza a ciertos hombres y mujeres adultos. Ellos, sin importar el daño que causan, utilizan la manipulación, el control y los juegos de poder como una constante en su forma de relacionarse con otros. Son conscientes de eso, pero, como carecen de empatía, no se detienen a evaluar o a evitar las consecuencias de sus actos. Simplemente, desde su sed de control y ansias de poder sobre otro, actúan velando por sus propios intereses y desestiman cualquier cosa que se interponga entre ellos y sus deseos.

    Esta forma de vincularse es tóxica e inmadura y puede arrojar diferentes consecuencias, desde leves hasta muy graves, en particular en aquellas personas que, por ser lábiles y vulnerables a sus estrategias de seducción y de persuasión, caen fácilmente en la trampa.

    Definamos la Manipulación

    Si buscamos la definición de manipulación podemos remitirnos a lo que Psicoactiva cita como todo un arte que conlleva no solo ocultar malas intenciones o comportamientos agresivos, sino también la habilidad de identificar las vulnerabilidades emocionales del otro, para luego poner en marcha las mejores estrategias con el propósito de manejarlo.

    Es decir, hay una toma de control del comportamiento ajeno mediante técnicas persuasivas o de presión psicológica que termina eliminando la capacidad reflexiva del otro.

    Un artículo de comunamujer.com sostiene que, a través de diversos mecanismos, el manipulador logra influir en las acciones, el pensamiento y las emociones del sujeto. La manipulación puede desarrollarse en cualquier ámbito y tipo de relación.

    Existen relaciones de manipulación en el seno de las familias (padre-hijo, madre-hijo, marido-mujer, etc.), pero también se presenta en contextos más amplios (como la manipulación que puede ejercer un líder político sobre sus seguidores, un jefe sobre su empleado, un maestro sobre su alumno, etc.).

    El chantajista emocional, que es un manipulador profesional, por lo general ejerce un fuerte impacto en los vínculos que integra. Es coercitivo, extorsionador e impone de manera arbitraria su poder sobre la otra parte del vínculo que funciona como complemento perfecto de su rol. Sin embargo, tiene la habilidad del camaleón para camuflarse según la ocasión. Esto implica que puede ser Dr. Jekyll en relación con una persona y convertirse muy fácilmente en Mr. Hyde para el resto. Su capacidad de transformación y de ponerse la máscara apropiada en el momento indicado es realmente digna de un actor profesional. Por eso, de no percatarse a tiempo, la partícipe necesaria vivirá atrapada en un sainete del que le será muy difícil escapar.

    Cuando nos encontramos frente a un chantajista emocional, podremos observar que su complemento perfecto, la partícipe necesaria que integra este vínculo disfuncional, es, en general, una persona que tiene un alto grado de inmadurez emocional y que siente una fuerte carencia afectiva y muy baja autoestima. Su personalidad en el ámbito afectivo puede ser lábil o débil, culposa y con alta necesidad de sentirse amada, protegida, aceptada y aprobada. Podría ser una empresaria o una profesional exitosa, eso no impide que, distraída y carente de atención, una vez detectada, quede encandilada por el hábil chantajista y caiga rendida a sus pies.

    Este es el terreno fértil en el que el chantajista emocional se encuentra listo para desplegar sus habilidades actorales y atrapar a la presa. Si no está atenta y despabilada, seguramente caerá en su trampa, como la mosca en la red de la araña de la cual no intentará escapar en tanto le queden fuerzas para seguir luchando por recuperar el ideal que la contraparte le vendió.

    Es mucho más frecuente de lo que imaginamos. Todos nos hemos visto involucrados alguna vez en una situación parecida, ya sea como víctimas o victimarios. Más de una vez hemos buscado los medios para conseguir nuestros objetivos manipulando el deseo del otro sin que nos importen las consecuencias con tal de lograr lo que deseábamos. Es un accionar mucho más común de lo que nos gustaría observar, aunque la mayoría de las veces lo hagamos de manera inconsciente.

    Sin embargo, a medida que crecemos y maduramos, comprendemos que la vida no se trata de controlar ni de vampirizar energéticamente a otros, sino de encontrar nuestro propio norte. Así, aprendemos a agradecer el aporte de los que jugaron el papel de enemigos o aliados en el guión de nuestra vida y que fueron parte de nuestro viaje de crecimiento y evolución.

    En este transcurrir, llegamos a darnos cuenta de que convencer, persuadir, insistir, presionar y manipular a otros para que cumplan con nuestros deseos y expectativas, sin tener en cuenta las consecuencias que esto implica para ellos, es un camino sin salida, de corto alcance y de gran inmadurez, que trae aparejado un altísimo costo emocional.

    Cuando una persona, presa de un manipulador, obedece y se somete a su voluntad sin medir

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1